¿Se puede acabar con el acné? ¡Vayamos al grano!
El trastorno más frecuente de la piel
El acné es una de las enfermedades más comunes de la piel. Se presenta básicamente durante la pubertad, cuando se produce el cambio de la infancia a la edad adulta. Se calcula que tres cuartas partes de los jóvenes lo sufren en mayor o menor medida.
No se trata en general de una enfermedad peligrosa, pero supone un gran problema para muchos jóvenes en un momento en que se suele plantear una crisis de identidad: con la cara y la piel en buen estado, parece que la inseguridad del adolescente sea menor y, a la sombra de esta insatisfacción personal, se venden múltiples productos que prometen una piel tersa y suave.
Aunque la solución al acné no es ni simple ni fácil y el problema suele acabar con el paso de los años, no estará de más tener en cuenta algunas medidas que ayuden a tener bajo control esta situación.
El acné es una enfermedad inflamatoria del folículo pilosebáceo, una estructura glandular destinada a segregar grasa que protege la piel y permite la formación del vello y cabello. Por eso el acné se localiza en aquellas zonas donde hay más glándulas sebáceas: la cara y la parte superior de la espalda y del tórax. Aparece con mucha mayor virulencia en individuos con exceso de secreción grasa, que depende de factores hormonales muy frecuentes en
