Anda di halaman 1dari 2

ARGUMENTO

mueven las hojas, los dedos, canturrean, y alguien aire que no se ve, baila un baile antiguo.

Elega a un joven compaero Has muerto, camarada, en el ardiente amanecer del mundo Has muerto cuando apenas tu mundo, nuestro mundo amaneca Camino bajo luces enlazadas y ramas que se abrazan, calzada submarina de luz verde, impalpable y de carne al mismo tiempo.

El desconocido

Esta calzada desemboca en el paraso de los verdes, al reino que prometen los invernaderos: eterna la hoja verde, el agua siempre nia, la tierra madre siempre virgen, la luz esbelta, siempre entre los troncos sempiternos, el viento siempre libre, siempre labios, siempre viento

La sombra nace en espejos de luto. Sombras ramas hmedas cien su pecho y su cintura, su cuerpo azul, infinito y tangible. No la puebla el silencio; rumores silenciosos, peces fantasmas, se deslizan, fosforecen, huyen.

La noche es verde, vasta y silenciosa. La noche es morada y azul. Es de fuego y es de agua. En sus hombros nace un rio que se curva, una silenciosa cascada de plumas negras.

Quisiera detenerlos, detener una joven, cogerla por la oreja y plantarla entre un castao y otro; regarla con una lluvia de verano; verla ahondar sus races como manos que enlazan en la noche a otras manos,

En la calzada El sol reposa sobre la copa de los castaos, sopla apenas el viento

crecer y echar hojas y alzar entre sus ramas una copa que canta

Anda mungkin juga menyukai