EXPECTATIVAS EN EL SUR, por Camilo Herrera Durante el fin de semana pasado tuve la oportunidad de trabajar con alumnos y profesores

de mi colegio, Colegio de La Salle en Temuco, asistiendo a comunas de nivel socioeconmico bajo que an sufren daos estructurales por el terremoto. A m me toc la comuna de Padre las Casas, ubicada a pocos kilmetros del centro de Temuco. All, junto a otros ex-alumnos y jvenes de la comuna de no menos de 15 aos, participamos tambin de juegos y actividades deportivas. Esa fue la ocasin que aprovech para preguntar, de manera casi casual, por la expectativas de ingreso que tenan ellos si entraban a la universidad1. Para sorpresa ma, los jvenes respondan, aunque medio en serio, medio en broma, con cifras muy, muy altas2. Lo que me hace pensar que fenmenos sociales, cmo los movimientos estudiantiles y las marchas por la educacin, fenmenos que estos jvenes estn plenamente al tanto y participaban, pueden tener un efecto de sobrevaloracin en los jvenes de menor nivel socioeconmico ante las expectativas de dinero al salir de la universidad. Ver las convocaciones espectaculares de gente en Plaza Italia en la tele puede dar la sensacin de guau, estamos luchando por algo gigante que dar gigantes frutos en el futuro. Esto me hace pensar en la posibilidad de 2 escenarios: uno, adultos jvenes desilusionados ante sueldos que no alcanzaron sus expectativas previas o dos, jvenes estudiantes que se niegan a la posibilidad de estudiar por miedo a alcanzar aquellas expectativas sobredimensionadas.

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Claro que us un lenguaje mucho ms coloquial que lo anteriormente escrito.

Alguno habr dicho algo as como mil chorrocientos dlares, lo que a todos, incluso al nio al que le pregunt, nos dio risa.