AL MUNDO PAZ NACIO JESS

Entonces el ngel le dijo: Mara no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. Y ahora concebirs en tu vientre, y dars a luz un hijo, y llamaras su nombre JESUS

Csar Augusto gobernaba el Imperio Romano.

Y orden que todos sus habitantes fueran a empadronarse en la ciudad de donde provenan sus familias. Mara y Jos descendan del Rey David y les corresponda empadronarse en Beln, la ciudad de su estirpe.

Llegados a Beln se encontraron con que no haba lugar para ellos en el mesn.

Como tenan all parentela, salieron a buscar alojamiento en lo de tos, primos y sobrinos.

Pero nadie los recibi, algunos porque no tenan sitio, otros por no ponerse en molestias. La noche se echaba encima y, Mara se dio cuenta de que su hijo estaba por nacer.

Pronto llegaron a un establo lleno de animales Jos limpi todo a fondo, barriendo el piso con una rama. Y coloc paja fresca en un pesebre, cosa que pudiera servir de cuna llegado el caso.

Hacia la medianoche naci el Nio.

La expectativa se transform en alegra inmensa. Dios hecho hombre haba bajado a la tierra. El Salvador prometido iniciaba su obra redentora. Aunque eran muy pocos los que se enteraron de esto,

Mara tom al Nio, lo envolvi en paales y lo puso sobre el pesebre.

Sobre la paja fresca preparada por Jos.

Y ambos lo adoraron llenos de emocin.

Un grupo de pastores Cuidaban su rebao En eso estaran cuando la noche se ilumin de golpe y se les present un ngel dicindoles:

-Les vengo a dar a dar una gran noticia: Ha nacido el Salvador en Beln y lo encontrarn envuelto en paales en un pesebre. Enseguida un ejrcito de ngeles llen el cielo y con voces que daba gusto or cantaban:

-Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad!

Los pastores marcharon a Beln, hallaron El pesebre.

Y en ella, a Jess chiquito, a Mara, su madre y a Jos.

Sabias que la paz de Dios es la seguridad de que el nunca te dejara. El seor Jesus nos lleno de su paz, pero no como comnmente la conocems. La paz de Dios es la seguridad de que su gran poder nos respalda, si hacemos su bendita voluntad

Texto ureo: Y AHORA CONCEBIRAS EN TU VIENTRE, Y DARAS A LUZ UN HIJO Y LLAMARAS SU NOMBRE JESUS Lc. 1:31