0 penilaian0% menganggap dokumen ini bermanfaat (0 suara)
48 tayangan2 halaman
El hombre era muy apreciado en su pueblo porque contaba historias todas las noches sobre lo que había visto ese día. Una mañana, al llegar al bosque vio un fauno tocando la flauta y silvanos bailando, y en la orilla del mar vio tres sirenas peinando sus cabellos verdes con un peine de oro. Sin embargo, esa noche les dijo que no había visto nada.
Deskripsi Asli:
El Hombre Que Con Tab a HistoriAs
El Hombre Que Con Tab a HistoriAs
El hombre era muy apreciado en su pueblo porque contaba historias todas las noches sobre lo que había visto ese día. Una mañana, al llegar al bosque vio un fauno tocando la flauta y silvanos bailando, y en la orilla del mar vio tres sirenas peinando sus cabellos verdes con un peine de oro. Sin embargo, esa noche les dijo que no había visto nada.
El hombre era muy apreciado en su pueblo porque contaba historias todas las noches sobre lo que había visto ese día. Una mañana, al llegar al bosque vio un fauno tocando la flauta y silvanos bailando, y en la orilla del mar vio tres sirenas peinando sus cabellos verdes con un peine de oro. Sin embargo, esa noche les dijo que no había visto nada.
Haba una vez un hombre muy querido de su pueblo porque
contaba historias. Todas las maanas sala del pueblo y, cuando volva por las noches, todos los trabajadores del pueblo, tras haber bregado todo el da, se reunan a su alrededor y le decan: -Vamos, cuenta, qu has visto hoy? l explicaba: -He visto en el bosque a un fauno que tena una flauta y que obligaba a danzar a un corro de silvanos. -Sigue contando, qu ms has visto? -decan los hombres. -Al llegar a la orilla del mar he visto, al filo de las olas, a tres sirenas que peinaban sus verdes cabellos con un peine de oro. Y los hombres lo apreciaban porque les contaba historias.
Una maana dej su pueblo, como todas las maanas... Mas al
llegar a la orilla del mar, he aqu que vio a tres sirenas, tres sirenas que, al filo de las olas, peinaban sus cabellos verdes con un peine de oro. Y, como continuara su paseo, en llegando cerca del bosque, vio a un fauno que taa su flauta y a un corro de silvanos... Aquella noche, cuando regres a su pueblo y, como los otros das, le preguntaron: -Vamos, cuenta: qu has visto? l respondi: -No he visto nada.