La relación existente entre ambas es que la administración pública es el objeto de estudio del
derecho administrativo. El concepto de administrar proviene de la expresión latina “administratio” que
significa administrar, disponer, dirigir u organizar. El diccionario de la RAE define administración como la
acción y efecto de administrar. Otra definición nos dice que administrar es gobernar. Debemos distinguir
una noción funcional del derecho administrativo y otra orgánica. La concepción funcional podemos
conceptualizarla como “la organización orientada a la gestión de los servicios o ejecución de las leyes,
con independencia del poder legislativo y judicial”. Este concepto funcional lo encontramos en el Art. 1°
Inc. 2° de la C.P.R. Por su parte la noción orgánica la concibe como un conjunto de organismos
encargados de cumplir la función antedicha. Esta noción se encuentra plasmada en el Art. 24 de la
C.P.R.
Se define al derecho administrativo como aquella parte del ordenamiento jurídico que regula la
administración pública, su organización y sus servicios, así como su relación con los individuos. Antes no
existía el derecho administrativo, rigiéndose en parte por la legislación civil y en parte por la legislación
penal. Don Gastón Gesse define al derecho administrativo como un conjunto de reglas elativas a los
servicios públicos. Don Rafael Bielsa por su parte propone que es un conjunto de normas positivas y de
principios de derecho público de aplicación concreta en las instituciones y el funcionamiento de los
servicios públicos y al consiguiente contralor jurisdiccional de la administración pública.
Entre nosotros, don Enrique Silva Cimma lo define como aquel que tiene por objeto la creación,
organización, funcionamiento superior de los servicios públicos y de la regulación de la actividad jurídica y
la determinación de las atribuciones y deberes de éste, para con sus habitantes.
Nosotros podemos decir que el derecho administrativo es un conjunto de normas que tienen por
objeto regular las siguientes materias: 1.- El funcionamiento de los órganos de la administración del
estado. Como por ejemplo la ley orgánica de los gobiernos regionales, o la ley orgánica de obras
públicas. 2.- Sistema de control de los órganos del Estado, aquí tiene gran relevancia la función de la
Contraloría General de la república y las Contralorías Regionales, como también la creación de
departamentos de auditoria interna. 3.- La responsabilidad de los órganos del Estado. 4.- La relación del
Estado con los particulares, como por ejemplo en ciertos casos de contratación administrativa o bien en
los procedimientos de expropiación.
Respecto del origen del derecho administrativo podemos decir que su justificación es el objetivo
que es conseguir el bien común de los ciudadanos, pero este bien común sólo tiene relevancia con
posterioridad a la revolución francesa, pues antes sólo se buscaba el fin del soberano. Debe existir un
cuerpo normativo especial que regule estos tópicos, pero la especialidad es relativa, toda vez que
igualmente se utilizan otras normas, como por ejemplo en la interpretación de los contratos, se utilizan los
Art. 1560 a 1566 C.C. En contrario de esta última tesis se encuentra el profesor Vergara, quien postula
que nunca son aplicables las normas del derecho civil, principalmente por que no comulgan con el
espíritu del derecho administrativo cual es la consecución del bien común.
Desde el punto de vista histórico, no podemos hablar de derecho administrativo antes de 1789,
pues con la revolución francesa, se logra concretar el pensamiento de Jacques Rosseau, es decir, la
división de poderes o separación de funciones. Con este fenómeno se termina con el Estado de policía
arraigándose el naciente Estado de derecho. Dentro de las principales características del Estado de
derecho podemos nombrar: 1.- Consagración de garantías para los individuos, lo que se logró con la
declaración de los derechos del hombre y del ciudadano de 1791, plasmándose en nuestros tiempos en
el Art. 19 C.P.R. de 1980. 2.- Separación de los poderes del estado, radicados hasta entonces en la
figura del monarca, en legislativo, ejecutivo y judicial. Algunos hablan de un cuarto poder denominado de
control que lo ejercería la Contraloría General de la República, pero no ha prosperado esta tesis debido a
que la Contraloría general de la República no es el único órgano que cumple estas funciones de control y
además su independencia es relativa. 3.- Principio de legalidad consagrado en el Art. 6° y 7° C.P.R.
estableciéndose tres requisitos para su cumplimiento: a.- Que se actúe previa investidura. b.- Dentro se
sus competencia. c.- Con respeto a la Constitución y a las leyes. 4.- Control jurídico de los actos de la
administración del Estado. 5.- Sistema de responsabilidades.
Por su parte el Estado de policía presenta las siguientes características: 1.- Existencia de un
poder jurisdiccional derivado del monarca. 2.- La administración estatal carece de un marco normativo
que regule su actividad. 3.- Las normas no eran obligatorias para el monarca. Se plantaba allí la teoría del
fisco, que nació del descontento de la gente ante estas dos últimas características y en especial con el
cobro abusivo de impuestos. Ello derivó en la separación del poder monárquico en el monarca y el fisco.
Este último se encargaba de las funciones tributarias, entre otras, sometiéndose a una estricta regulación,
la que no alcanzaba al monarca.
De todo lo expuesto podemos concluir que el derecho administrativo nace con el principio de
división de poderes o separación de funciones. Este principio se reduce a la asignación o delimitación de
competencia de los distintos órganos del Estado, para la consecución del bien común.
Por fuentes del derecho entendemos a los hechos, entidades y organismos administrativos de los
cuales emanan las normas jurídicas constitutivas de éste. Podemos clasificar las fuentes del derecho
administrativo, en positivas y racionales. Las fuentes positivas o derecho escrito, están compuestas
principalmente por la Constitución, la ley y el reglamento. Dentro de las fuentes racionales o derecho no
escrito, tenemos a la costumbre y la jurisprudencia. Una opinión minoritaria postula que no existen varias
fuentes del derecho administrativo, sino sólo una que es la voluntad del Estado, que se manifiesta en
leyes, reglamentos, decretos leyes, leyes orgánicas Constitucionales, decretos con fuerza de ley, etc.
Las fuentes positivas son el conjunto de normas que se generan mediante la actividad de los
órganos que componen la administración del Estado. Otros las definen diciendo que son aquellas que
tienen fuerza obligatoria por sí mismas, y corresponden en general al derecho escrito.
1.- Las relaciones de los particulares con el Estado. Aquí tenemos el Art. 19 C.P.R. que
consagra entre nosotros las garantías individuales. Se vinculan con el derecho administrativo los
siguientes preceptos:
a.- El Art. 19 Nº 2 C.P.R. dispone la Constitución garantiza a todas las personas: “La igualdad ante la ley.
En Chile no hay persona ni grupo privilegiados. En Chile no hay esclavos y el que pise su territorio queda
libre. Hombres y mujeres son iguales ante la ley”.
b.- El Art. 19 Nº 12 C.P.R. dispone la Constitución garantiza a todas las personas: “La libertad de emitir
opinión y la de informar, sin censura previa, en cualquier forma y por cualquier medio, sin perjuicio de
responder de los delitos y abusos que se cometan en el ejercicio de estas libertades, en conformidad a la
ley, la que deberá ser de quórum calificado”. Esta materia se encuentra actualmente regulada por la Ley
Nº 19.733 (conocida como ley de prensa) sobre las libertades de opinión e información y ejercicio del
periodismo, que derogó la Ley 16.643 sobre abusos de publicidad a excepción de su Art. 49.
c.- El Art. 19 Nº 13 C.P.R. la Constitución garantiza a todas las personas prescribe: “El derecho a reunirse
pacíficamente sin permiso previo y sin armas.
Las reuniones en las plazas, calles y demás lugares de uso público, se regirán por las
disposiciones generales de policía”.
d.- El Art. 19 Nº 15 C.P.R. dispone la Constitución garantiza a todas las personas: “El derecho de
asociarse sin permiso previo”. Este derecho se encuentra restringido para los funcionarios públicos, pues
el Art. 78 letra i) de la Ley Nº 18.834 (Estatuto administrativo de funcionarios públicos), dispone “ El
funcionario estará afecto a las siguientes prohibiciones: i) Organizar o pertenecer a sindicatos en el
ámbito de la Administración del Estado; dirigir, promover o participar en huelgas, interrupción o
paralización de actividades, totales o parciales, en la retención indebida de personas o bienes, y en otros
actos que perturben el normal funcionamiento de los órganos de la Administración del Estado”. De allí
que no exista un sindicato de trabajadores públicos, participar en huelgas, etc.
e.- El Art. 19 Nº 16 Inc. 5° C.P.R. dice la Constitución garantiza a todas las personas: “La negociación
colectiva con la empresa en que laboren es un derecho de los trabajadores, salvo los casos en que la ley
expresamente no permita negociar”. Esta norma se encuentra en plena armonía con la anterior, la razón
por la cual los trabajadores públicos no tienen derecho a huelga es porque no tienen derecho a la
negociación colectiva.
f.- El Art. 19 Nº 10 C.P.R. señala la Constitución garantiza a todas las personas: “El derecho a la
educación”. Esta es sin duda una garantía de los individuos, exigibles al Estado, por mandato
Constitucional. Esta norma debe entenderse relacionada con la Ley orgánica Constitucional de
Enseñanza Nº 18.962 (LOCE) sobre libertad de enseñanza, creación y mantenimiento de
establecimientos educacionales.
g.- El Art. 19 Nº 17 C.P.R. prescribe que la Constitución garantiza a todas las personas “La admisión a
todas las funciones y empleos públicos, sin otros requisitos que los que impongan la Constitución y las
leyes”. Esta garantía se materializa con la existencia de estatutos, como por ejemplo, el estatuto
administrativo de funcionarios públicos (Ley Nº 18.834) y el estatuto administrativo de funcionarios
municipales (Ley Nº 18.883). Estas leyes establecen concursos públicos para ingresar a los respectivos
servicios, transparentando el proceso.
h.- El Art. 19 Nº 20 C.P.R. dispone la Constitución garantiza a todas las personas: “La igual repartición de
los tributos en proporción a las rentas o en la progresión o forma que fije la ley, y la igual repartición de
las demás cargas públicas”.
i.- El Art. 19 Nº 24 C.P.R. dispone la Constitución garantiza a todas las personas: “El derecho de
propiedad en sus diversas especies sobre toda clase de bienes corporales o incorporales”. Esta garantía
se materializa en los procedimientos de expropiación por causa de utilidad pública Arts. 924 y ss C.P.C.
El profesor don Enrique Silva Cimma señala que “todas las normas antes descritas son fuentes del
derecho administrativo, porque dentro del dominio de éste, quedan comprendidas todas aquellas
disposiciones tanto legales como reglamentarias que se encargan de materializar aquellos principios”.
a.- El Art. 24 C.P.R. dispone “El gobierno y la administración del Estado corresponden al Presidente de la
República, quien es el Jefe del Estado”. Precisamente el derecho administrativo se encarga de regular
como el Presidente de la República administrará el Estado. Lo anterior se relaciona con la Ley Nº 18.575
sobre bases generales de la administración del Estado, pues en ella se organiza la administración pública
en base a una estructura jerarquizada.
b.- El Art. 38 C.P.R. prescribe “Una ley orgánica constitucional determinará la organización básica de la
Administración Pública, garantizará la carrera funcionaria y los principios de carácter técnico y profesional
en que deba fundarse, y asegurará tanto la igualdad de oportunidades de ingreso a ella como la
capacitación y el perfeccionamiento de sus integrantes”. La Ley orgánica referida es la de bases
generales de la administración del Estado y consagra la organización de la administración, la carrera
funcionaria, entre otras.
c.- El Art. 33 C.P.R. relativo a los ministros establece: “Los Ministros de Estado son los colaboradores
directos e inmediatos del Presidente de la República en el gobierno y administración del Estado”. Según
este precepto, los ministros forman parte de la estructura de la administración. El Art. 22 de la Ley Nº
18.575 dispone que “Los Ministerios son los órganos superiores de colaboración del Presidente de la
República en las funciones de gobierno y administración de sus respectivos sectores, los cuales
corresponden a los campos específicos de actividades en que deben ejercer dichas funciones”.
d.- El Art. 111 C.P.R. dispone “El gobierno de cada región reside en un intendente que será de exclusiva
confianza del presidente de la república”. El Art. 118 C.P.R. por su parte prescribe “La administración
local de cada comuna o agrupación de comunas que determine la ley reside en una municipalidad, la que
estará constituida por el alcalde, que es su máxima autoridad y el concejo”. No existe en Chile una
municipalidad de agrupación de comunas, así que dicha expresión no es más que letra muerta.
a.- El Art. 32 Nº 3 y 6 C.P.R. Dispone el primero de estos numerales: Son facultades exclusivas del
Presidente de la República Nº 3 “Dictar, previa delegación de facultades del Congreso, decretos con
fuerza de ley sobre las materias que señala la Constitución”. Esta facultad se materializa a través de la
ley delegatoria, la cual tiene las limitaciones establecidas en la Constitución, relativas a las materias de su
dominio y el plazo de la delegación, Art. 64 Inc. 1° C.P.R. El Nº 6 establece, por su parte, que el
Presidente de la República tiene la facultad de “ejercer la potestad reglamentaria en todas aquellas
materias que no sean propias del dominio legal, sin perjuicio de la facultad de dictar los demás
reglamentos, decretos e instrucciones que crea convenientes para la ejecución de las leyes”. Esta es la
denominada potestad reglamentaria del Presidente de la República, la cual puede ser de ejecución o
autónoma. Es de ejecución aquella que tiene por objeto hacer operativas las leyes, en cambio, es
autónoma aquella que regula materias que no son propias de dominio legal, es decir, no señaladas en el
Art. 63 C.P.R.
Generalmente en la misma ley se faculta al Presidente para dictar el reglamento respectivo, tal es el caso
de la Ley Nº 18.886.
b.- El Art. 65 Nº 2 C.P.R. expresa que corresponderá al Presidente de la República la iniciativa exclusiva
en: “Crear nuevos servicios públicos o empleos rentados, sean fiscales, semifiscales, autónomos o de las
empresas del Estado; suprimirlos y determinar sus funciones o atribuciones”. Por su parte el Nº 4 “Fijar,
modificar, conceder o aumentar remuneraciones, jubilaciones, pensiones, montepíos, rentas y cualquiera
otra clase de emolumentos, préstamos o beneficios al personal en servicio o en retiro y a los beneficiarios
de montepío, en su caso, de la administración pública y demás organismos y entidades anteriormente
señalados, como asimismo fijar las remuneraciones mínimas de los trabajadores del sector privado,
aumentar obligatoriamente sus remuneraciones y demás beneficios económicos o alterar las bases que
sirvan para determinarlos; todo ello sin perjuicio de los dispuesto en los números siguientes”.
4.- Vinculación de los agentes con el Estado. Esta materia contempla el nombramiento,
remoción y beneficios de los funcionarios públicos.
a.- El Art. 32 Nº 7 C.P.R. dispone que es una facultad exclusiva del Presidente de la República: “Nombrar
y remover a su voluntad a los ministros de Estado, subsecretarios, intendentes y gobernadores”.
b.- El Art. 32 Nº 10 C.P.R. señala que es una facultad exclusiva del Presidente de la República: “Nombrar
y remover a los funcionarios que la ley denomina como de exclusiva confianza y proveer los demás
empleos civiles en conformidad a la ley”.
c.- El Art. 32 Nº 11 C.P.R. prescribe que es una facultad exclusiva del Presidente de la República:
“Conceder jubilaciones, retiros, montepíos y pensiones de gracia, con arreglo a las leyes”.
d.- El Art. 32 Nº 12 C.P.R. establece que es una facultad exclusiva del Presidente de la República:
“Nombrar a los magistrados y fiscales judiciales de las Cortes de Apelaciones y a los jueces letrados, a
proposición de la Corte Suprema y de las Cortes de Apelaciones respectiva; a los miembros del Tribunal
Constitucional que le corresponde designar; y a los magistrados y fiscales judiciales de la Corte Suprema
y al fiscal nacional, a proposición de dicha Corte y con acuerdo del Senado, todo ello conforme a lo
prescrito en esta Constitución”.
e.- El Art. 32 Nº 16 C.P.R. dice que es una facultad exclusiva del Presidente de la República: “Designar y
remover a los Comandantes en Jefe del Ejército, de la Armada, de la Fuerza Aérea y al Director General
de Carabineros en conformidad al artículo 104, y dispones los nombramientos, ascensos y retiros de los
oficiales de las Fuerzas Armadas y de Carabineros la forma que señala el artículo 105”. Según el Art. 104
C.P.R. el Presidente de la República proveerá los cargos antedichos, de entre los cinco oficiales
generales de mayor antigüedad.
a.- El Art. 93 C.P.R. que señala las atribuciones del Tribunal Constitucional, entre ellas figura como las
más importantes: N°6 “Resolver, por la mayoría de sus miembros en ejercicio, la inaplicabilidad de un
precepto legal cuya aplicación en cualquier gestión que se siga ante un tribunal ordinario o especial,
resulte contraria a la Constitución”. Este mecanismo de control de la Constitucionalidad, represivo
concreto, corresponde a la acción de inaplicabilidad. Antes de la reforma Constitucional instaurada por la
Ley N° 20.050 existía un denominado “Recurso de inaplicabilidad por inconstitucionalidad”, regulado por
el Art. 80 C.P.R. (1980), el cual sólo surtía efectos respecto del caso concreto en el cual se pronunciaba.
El N° 7 del Art. 93 C.P.R. en cambio consagra entre nosotros el control de Constitucionalidad, represivo
abstracto, toda una innovación, pues con ella se busca expulsar del ordenamiento jurídico un precepto
declarado inaplicable por inconstitucional. El numeral en comento dispone que es atribución del Tribunal
Constitucional: “Resolver por la mayoría de los cuatro quintos de sus integrantes en ejercicio, la
inconstitucionalidad de un precepto legal declarado inaplicable en conformidad a lo dispuesto en el
numeral anterior”. Esta facultad que requiere de un quórum alto, ha sido utilizada una vez, en un caso
tributario, pues la justicia Tributaria radicada en los directores regionales del Servicio de Impuestos
Internos (S.I.I.) era habitualmente delegada en los directores de tesorería, por disposición del Código
Tributario. Se aceptó la declaración de inconstitucionalidad, toda vez, dicho acto importaba una
delegación de jurisdicción y como ésta es indelegable, el precepto era inconstitucional.
b.- El Art. 98 C.P.R. relativo a la Contraloría General de la República dispone “Un organismo autónomo
con el nombre de Contraloría General de la República ejercerá el control de la legalidad de los actos de la
Administración, fiscalizará el ingreso y la inversión de los fondos del Fisco, de las municipalidades y de
los demás organismos y servicios que determinen las leyes; examinará y juzgará las cuentas de las
personas que tengan a su cargo bienes de esas entidades; llevará la contabilidad general de la Nación, y
desempeñará las demás funciones que le encomiende la ley orgánica constitucional respectiva”.
Las dos normas antes estudiadas tienen por objeto la función de control. Como vimos hay quienes
postulan la existencia de un cuarto poder “de control”, pero debemos entender que estos no son los
únicos órganos encargados de dicha función, pues el Congreso tiene gran importancia con su función
fiscalizadora de los actos del ejecutivo.
6.- Normas sobre responsabilidad de los funcionarios. Debemos tener claro que existen
varios tipos de responsabilidad, entre ellas, civil, penal y administrativa. Entre estos preceptos
encontramos los siguientes:
a.- El Art. 6° C.P.R. establece “Los órganos del Estado deben someter su acción a la Constitución y a las
normas dictadas conforme a ella, y garantizar el orden institucional de la República.
Los preceptos de esta Constitución obligan tanto a los titulares o integrantes de dichos órganos
como a toda persona, institución o grupo.
La infracción de esta norma generará las responsabilidades y sanciones que determine la ley”.
b.- El Art. 7° C.P.R. dispone “Los órganos del Estado actúan válidamente previa investidura regular de
sus integrantes, dentro de su competencia y en la forma que prescriba la ley.
Ninguna magistratura, ninguna persona ni grupo de personas pueden atribuirse, ni aun a pretexto
de circunstancias extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que expresamente se les hayan
conferido en virtud de la Constitución o las leyes.
Todo acto en contravención a este artículo es nulo y originará las responsabilidades y sanciones
que la ley señale”.
Esta nulidad es de derecho público. La doctrina sostiene, tomando de base el Art. 7° C.P.R., que existen
tres causas por las cuales solicitar la nulidad: 1.- Falta de nombramiento. 2.- Falta de competencia. 3.-
Falta de forma.
c.- El Art. 8° C.P.R. dice “El ejercicio de las funciones públicas obliga a sus titulares a dar estricto
cumplimiento al principio de probidad en todas sus actuaciones”. Este precepto obliga a los titulares de
las funciones públicas a dar cumplimiento al principio de probidad, pues de lo contrario serán
responsables en conformidad a la ley.
d.- El Art. 38 Inc. 2° C.P.R. prescribe “Cualquier persona que sea lesionada en sus derechos por la
Administración del Estado, de sus organismos o de las municipalidades, podrá reclamar ante los
tribunales que determine la ley, sin perjuicio de la responsabilidad que pudiere afectar al funcionario que
hubiere causado el daño”. Este precepto consagra la denominada responsabilidad del estado por falta de
f.- El Art. 53 N° 1 C.P.R. establece como atribución exclusiva de la cámara de diputados, determinar si
han lugar o no a las acusaciones constitucionales en contra de las personas allí mencionadas, entre ellas:
El presidente de la República, Los ministros de Estado, Los magistrados de los Tribunales superiores de
1
Ver Huepe Artigas, Fabián. “Responsabilidad del Estado, falta de servicio y responsabilidad objetiva en su actividad
administrativa”. Editorial Lexis Nexis, Serie de monografías.
justicia y Del Contralor General de la República, De los generales o almirantes de las instituciones
pertenecientes a las Fuerzas de la Defensa nacional y de los intendentes y gobernadores.
f.- El Art. 53 N° 1 C.P.R. señala como atribución exclusiva del Senado, conocer de las acusaciones
constitucionales que la cámara de diputados entable con arreglo al artículo anterior. El Senado conoce
como jurado y se limita a declarar si el acusado es o no culpable del delito, infracción o abuso de poder
que se le imputa. El caso más reciente es la acusación constitucional entablada en contra de la ministra
de educación Yasna Provoste, pero se encuentra en la primera etapa, es decir, se encuentra en la
cámara de diputados para determinar si ha lugar o no a la acusación.
“La ley”.
Su importancia radica en las materias que trata, entre otras: 1.- La constitución y organización de
los servicios públicos, como por ejemplo la Ley orgánica constitucional N° 19.175 de 1993, sobre
gobierno y administración regional. 2.- Garantías de los ciudadanos respecto de la autoridad, como por
ejemplo La Ley N° 19.880 sobre bases del procedimiento administrativo. 3.- Derechos y obligaciones de
los funcionarios, entre ellas tenemos, al Estatuto administrativo para funcionarios públicos, Ley N° 18.834
y al estatuto administrativo para funcionarios municipales, Ley N° 18.883.
El Art. 1° C.C. define ley de la manera siguiente “la ley es una declaración de la voluntad
soberana, que manifestada en la forma prescrita por la Constitución, manda, prohíbe o permite”.
La doctrina en general distingue entre leyes sustanciales y leyes formales, radicando la distinción
en la permanencia o transitoriedad de sus efectos. Dentro de las últimas encontramos el Art. 63 N° 7
C.P.R. y la Ley de presupuestos de la nación.
1.- Según Fisch Pach, ley es la creación de normas jurídicas por el Estado.
2.- Para Marcel Planiol, ley es una regla social obligatoria, establecida de manera permanente por la
autoridad pública y sancionada por la fuerza.
3.- También se ha dicho que es la creación de normas jurídicas que nacen o se generan en su carácter
de ejecutores de la Constitución.
Por su parte don Enrique Silva Cimma dice que ley es toda regla obligatoria establecida por la autoridad
con arreglo a la Constitución con carácter de oportunidad y permanencia y sancionada por la fuerza.
La mayoría de la doctrina estima que leyes propiamente tales, son las prescripciones legislativas que
crean un nuevo derecho, es decir, modifican el estado jurídico existente.
Requisitos de la ley.
b.- Requisitos de fondo. No contradecir los derechos consagrados en la Constitución. Es decir, estar en
conformidad al catálogo de derechos consagrados por la carta fundamental.
Características de la ley.
1.- Generalidad. Es impersonal y abstracta. Entre nosotros, el Art. 3° Inc. 1° C.C. dispone que “sólo toca
al legislador determinar e interpretar la ley de un modo generalmente obligatorio”. Para Enrique Silva
Cimma esta no es una característica de la ley, pues al existir variadas excepciones, estas constituyen la
regla.
5.- Permanente. No se agota o se extingue con su cumplimiento, salvo el caso de la ley de presupuestos
de la nación cuya vigencia termina el 31 de diciembre del año en curso.
6.- Dominio de la ley. Esto es las materias que se pueden tratar o regular con ella.
Según don Enrique Silva Cimma, el dominio de la ley en Chile es blindado, porque es sólo el que
establece la Constitución. El Art. 44 C.P.R. (1925) establecía un dominio legal mínimo. En cambio, el Art.
63 C.P.R. (1980) establece un dominio legal máximo, sin perjuicio de lo que se puede concluir del número
20 del precepto en comento. Por ejemplo, son materias de ley las siguientes: 1.- La creación de servicios
públicos. 2.- Creación de cargos públicos. 3.- Remuneraciones de los funcionarios. 4.- Relación de los
funcionarios con el Estado.
Rige aquí como regla general el Art. 9° C.C. que dispone “La ley puede sólo disponer para lo
futuro, y no tendrá jamás efecto retroactivo”. La doctrina en general postula que la ley no puede tener
efecto retroactivo por su ejecutoriedad, pues opera “in actum”. Cabe tener presentes, sin perjuicio de que
son teorías del derecho privado, la teoría clásica de la retroactividad y la teoría de Paul Robier.
No obstante lo anterior se hace preciso distinguir de que tipos de ley se trata para determinar si
tiene o no efectos retroactivos:
1.- Leyes que crean, organizan o modifican servicios públicos. Estas leyes sólo pueden disponer para lo
futuro, según lo preceptúa el Art. 9° C.C.
2.- Leyes que otorgan derechos a los funcionarios del Estado. Aquí por regla general rige el Art. 9° C.C.,
pero actualmente tiene tantas excepciones que debe aceptarse con reparos. En efecto, es habitual que
se dicte leyes que reajustan las remuneraciones de los funcionarios y estas entran en vigencia
generalmente en el mes de enero, sin perjuicio de que se dicten con posterioridad, ello en virtud del
efecto retroactivo de la ley.
3.- Leyes que limitan los derechos. No existe claridad en este punto. La doctrina mayoritaria opina que
pueden tener efecto retroactivo, toda vez de que en el derecho administrativo no existen derechos
adquiridos que se puedan vulnerar con el efecto retroactivo de una determinada ley.
En este punto rigen los Arts. 19 al 24 C.C. Sin embargo existen ciertas restricciones fundadas en
que el derecho administrativo es una rama del derecho público y que aquí “se puede hacer sólo lo que
está expresamente permitido”.
1.- Restrictiva. De ello se deriva que no se admite la interpretación por analogía o a pari.
2.- Debe prevalecer la intención del legislador por sobre sus palabras. Este es el principio inverso al
recogido en el Art. 19 Inc. 1° C.C. Para cumplir con este fin, se debe recurrir a la historia fidedigna del
establecimiento de la ley, es decir, valerse de las actas, sesiones legislativas, etc.
Respecto de la derogación podemos decir que esta puede ser expresa o tácita. Es expresa, cuando la
nueva ley dice expresamente que deroga la antigua. Es tácita, cuando la nueva ley contiene
disposiciones que no pueden conciliarse con las de la ley anterior.
Es preciso decir que la derogación tácita deja vigente en las leyes anteriores, aunque versen
sobre la misma materia, todo aquello que no pugna con las disposiciones de la nueva ley.
La doctrina entiende que existe una tercera clase de derogación, cual es, orgánica. Este tipo de
derogación se produce cuando una nueva ley regula un conjunto de materias tratadas en una ley o leyes
anteriores. Un caso de esta derogación se encuentra en la Ley 19.696, que estableció en Chile el Código
Procesal Penal, pues modificó normas contenidas en otras leyes como por ejemplo, el estatuto
administrativo de funcionarios público en lo relativo a la obligación de denunciar un hecho ilícito cuando
tienen noticia de él.
Existe en nuestro ordenamiento jurídico leyes que fijan el texto refundido, coordinado y
sistematizado de otras leyes. Esto se materializa a través de decretos con fuerza de ley (D.F.L.)
promulgados por el Presidente de la República previa delegación de facultades del congreso. Se plantea
el problema de determinar si el Presidente de la República puede realizar esta labor en virtud de un
decreto supremo emanado de su potestad reglamentaria. Se ha concluido que sólo pueden ser
establecidos por decreto con fuerza de ley, teniendo las siguientes restricciones: 1.- No pueden llevar
número. 2.- Se pueden dictar sólo previa delegación del congreso. 3.- No puede ser considerada fuente
del derecho administrativo, pues precisamente no crean derecho. Las leyes que modificaron a otra, no
deben entenderse derogadas al establecer el texto refundido, coordinado y sistematizado, pues ello
podría provocar diversos problemas.
“El reglamento”.
Por reglamento entendemos a aquellos actos administrativos que emanan del poder ejecutivo y tienen su
fundamento en la facultad de administración del Estado radicada en el presidente de la República y en la
necesidad de ejecutar las leyes. Estos actos administrativos son dictados en el ejercicio de la potestad
reglamentaria del Presidente de la República, ya sea de ejecución o autónoma.
Existen dos doctrinas que pretenden determinar la naturaleza jurídica del reglamento. La primera es la
doctrina alemana que distingue entre reglamentos de derecho y reglamentos de administración. Los
reglamentos de derecho son aquellos actos de carácter general que emanan del ejecutivo y tienen por
objeto regular las relaciones de éste con la población. Los reglamentos de administración son aquellos de
aplicación general, pero que están destinados a aplicarse a la administración pública y por los
funcionarios públicos. La doctrina francesa en cambio postula que la potestad reglamentaria es una sola y
el reglamento igual. Por reglamento entienden la facultad del ejecutivo de dictar normas de general y
permanente aplicación. Esta es la posición aceptada en nuestro país.
Se trata de un acto administrativo que debe ser siempre general. No sólo se reduce a ejecutar la ley. El
reglamento actúa en silencio de la ley, pero jamás e contra de la ley. Es obligatorio, permanente y pueden
ser dictados por el poder ejecutivo y excepcionalmente por los alcaldes.
Los reglamentos están sujetos al control preventivo de legalidad mediante la toma de razón por parte de
la Contraloría General de la República.
Tipos de reglamentos.
1.- Reglamentos propiamente administrativos. Estos regulan la actividad de los funcionarios públicos o
determinan la organización y funcionamiento de un servicio.
2.- Reglamentos que afectan a particulares. Estos reglamentos que afectan a los particulares actuando
en el campo de la facultad discrecional.
3.- Reglamentos que fijan normas complementarias. Entre ellos tenemos al Art. 695 C.C. que establece
expresamente la existencia de un reglamento del Conservador de Bienes Raíces. Se dicta por delegación
expresa, tiene fuerza de ley y no puede ser derogado. Existe otra forma de delegación la cual se hará
habitualmente en la misma ley y dirá “facúltese al Presidente de la República para dictar los reglamentos
necesarios para la ejecución de la presente ley”. No tiene fuerza de ley y puede ser fácilmente modificado
por el propio Presidente.
Hay que distinguir la clase de reglamento de la que se trate. En el primer caso, no pueden ser
modificados en uso de la potestad reglamentaria. En el segundo caso en cambio, al provenir de las
facultades privativas del Presidente de la República, pueden ser modificados y sólo disponen para lo
futuro.
Esta se da por ejemplo en la ordenanza local de construcciones. Este tipo de reglamento no está sujeto a
control preventivo de legalidad, solo un control de registro a posteriori. Existe un trámite de toma de
conocimiento en virtud del cual se pueden impugnar u objetar.
Esta potestad no tiene origen Constitucional pues el Art. 118 inc. 5° C.P.R. sólo se refiere a la existencia
de una ley orgánica constitucional que determinará las funciones y atribuciones de las municipalidades. El
Art. 5° letra d) de la Ley N° 18.695 (ley orgánica Constitucional de municipalidades), dispone que “Para el
cumplimiento de sus funciones las municipalidades tendrán las siguientes atribuciones esenciales: d)
Dictar resoluciones obligatorias con carácter general o particular”. El artículo 12 de la ley en comento
establece “Las resoluciones que adopten las municipalidades se denominarán ordenanzas, reglamentos
municipales, decretos alcaldicios o instrucciones.
Las ordenanzas serán normas generales y obligatorias aplicables a la comunidad. En ellas podrán
establecerse multas para los infractores, cuyo monto no excederá de cinco unidades tributarias
mensuales, las que serán aplicadas por los juzgados de policía local correspondientes.
Los reglamentos municipales serán normas generales obligatorias y permanentes, relativas a materias de
orden interno de la municipalidad.
Los decretos alcaldicios serán resoluciones que versen sobre casos particulares.
Las instrucciones serán directivas impartidas a los subalternos”.
Precisamente es la ley N° 18.695 es la Ley Orgánica Constitucional que determina las funciones y
atribuciones de las municipalidades.
Respecto de esta potestad reglamentaria existen dos teorías. La primera que cree que es una facultad
que le otorga la ley y nace en ella. Y otra que cree que la potestad reglamentaria es una facultad derivada
del poder ejecutivo. La mayoría de la doctrina se inclina por esta segunda solución, fundados en lo
siguiente: 1.- Que la administración del Estado corresponde al Presidente de la República. 2.- Así fluye de
los Arts. 1°, 29 y 30 de la Ley N° 18.575. En efecto, el Art. 1° de la Ley N° 18.575 dispone “El Presidente
de la República ejerce el gobierno y la administración del Estado con la colaboración de los órganos que
establezcan la Constitución y las leyes.
La Administración del Estado estará constituida por los Ministerios, las Intendencias, las
Gobernaciones y los órganos y servicios públicos creados para el cumplimiento de la función
administrativa, incluidos la Contraloría General de la República, el Banco Central, las Fuerzas Armadas y
las Fuerzas de Orden y Seguridad Pública, los Gobiernos Regionales, las Municipalidades y las
empresas públicas creadas por ley”. De este precepto fluye que se incluye a las municipalidades en la
facultad de administración del Estado.
El Art. 29 de la misma ley dispone “Los servicios públicos serán centralizados o descentralizados.
Los servicios centralizados actuarán bajo la personalidad jurídica y con los bienes y recursos del Fisco y
estarán sometidos a la dependencia del Presidente de la República, a través del Ministerio
correspondiente. Los servicios descentralizados actuarán con la personalidad jurídica y el patrimonio
propios que la ley les asigne y estarán sometidos a la supervigilancia del Presidente de la República a
través del Ministerio respectivo. La descentralización podrá ser funcional o territorial”. En inciso 3° de esta
norma somete a los servicios descentralizados a la supervigilancia del presidente de la República, con lo
cual se refuerza más la idea anterior.
El Inciso 1° del Art. 30 de la Ley sobre bases generales de la administración del Estado establece
“Los servicios públicos centralizados o descentralizados que se creen para desarrollar su actividad en
todo o parte de una región, estarán sometidos, en su caso, a la dependencia o supervigilancia del
respectivo Intendente”. Con ello somete a las municipalidades a la supervigilancia del intendente, y como
éste último depende del Presidente de la República, se puede concluir que las municipalidades y por
ende su potestad reglamentaria emana del mismo Presidente.
Por jurisprudencia don Enrique Silva Cimma entiende a la forma o modo de interpretación del derecho.
Según Marcel Planiol es el modo como las leyes son interpretadas por los tribunales. Para Luís Claro
Solar es el hábito de juzgar una cuestión de una misma manera y el resultado de éste hábito. Enrique
Silva Cimma dice que es la función que tiene por objeto principal la interpretación de la regla jurídica
administrativa en su adaptación a los casos concretos sea hecho por los tribunales o por las autoridades
que le corresponde conocer de un asunto administrativo. Es importante precisar que las contralorías
regionales no crean jurisprudencia, sólo la aplican.
La importancia de la jurisprudencia radica en: 1.- Ayuda a aclarar normas oscuras o dudosas. 2.- Ayuda a
la adaptación del derecho a las prácticas administrativas. 3.- Contribuye a la sistematización del derecho,
es decir, a la organización u ordenación lógica y razonada de las normas que conforman el ordenamiento
jurídico.
Esta depende del órgano del cual emana, y puede ser jurisprudencia administrativa contenciosa y
jurisprudencia administrativa no contenciosa.
Las normas aplicables se encuentran dispersas en distintos cuerpos normativos y dentro de un cuerpo
normativo también, es así como la Constitución Política de la República de Chile trata de esta materia.
Dentro de las normas Constitucionales aplicables encontramos:
a.- El Art. 3° Inc. 2° C.P.R. dispone “La administración del Estado será funcional y territorialmente
descentralizada, o desconcentrada en su caso, de conformidad a la ley”. De ello se deriva que la
administración del Estado se determina por función y por territorio.
b.- El Art. 24 Inc. 1° C.P.R. establece que “El gobierno y la administración del Estado corresponden al
Presidente de la República, quien es el Jefe del Estado”.
c.- El Art. 33 Inc. 1° C.P.R. prescribe que “Los Ministros de Estado son los colaboradores directos e
inmediatos del Presidente de la República en el gobierno y administración del Estado”.
d.- El Art. 38 Inc. 1° C.P.R. por su parte delega en la ley las bases de la administración del Estado. El
precepto en comento dispone “Una ley orgánica constitucional determinará la organización básica de la
Administración Pública, garantizará la carrera funcionaria y los principios de carácter técnico y profesional
en que deba fundarse, y asegurará tanto la igualdad de oportunidades de ingreso a ella como la
capacitación y el perfeccionamiento de sus integrantes”. La ley referida es la N° 18.575, sobre bases
generales de la administración del Estado.
e.- Los Arts. 110 a 126 C.P.R. establecen normas sobre gobierno y administración interior de Estado. La
administración regional se encuentra regulada por el Art. 111 C.P.R. se encuentra radicada en el
gobierno regional, presidido por el Intendente y apoyado por el Consejo Regional. Según el Art. 116
C.P.R. la administración provincial se encuentra radicada en el gobernador. Por último, de acuerdo al Art.
118 C.P.R. dispone que la administración comunal reside en la municipalidad, la cual se encuentra
formada por el alcalde y el concejo municipal.
f.- El Art. 58 Inc. 1° C.P.R. señala que “Los cargos de diputados y senadores son incompatibles entre sí y
con todo empleo o comisión retribuidos con fondos del Fisco, de las municipalidades, de las entidades
fiscales autónomas, semifiscales o de las empresas del Estado o en las que el Fisco tenga intervención
por aportes de capital, y con toda otra función o comisión de la misma naturaleza. Se exceptúan los
empleos docentes y las funciones o comisiones de igual carácter de la enseñanza superior, media y
especial”.
g.- El Art. 19 N° 24 Inc. 10 C.P.R. dispone “La exploración, la explotación o el beneficio de los
yacimientos que contengan sustancias no susceptibles de concesión, podrán ejecutarse directamente por
el Estado o por sus empresas, o por medio de concesiones administrativas o de contratos especiales
de operación, con los requisitos y bajo las condiciones que el Presidente de la República fije, para cada
caso, por decreto supremo. Esta norma se aplicará también a los yacimientos de cualquier especie
existentes en las aguas marítimas sometidas a la jurisdicción nacional y a los situados, en todo o en
parte, en zonas que, conforme a la ley, se determinen como de importancia para la seguridad nacional. El
Presidente de la República podrá poner término, en cualquier tiempo, sin expresión de causa y con la
indemnización que corresponda, a las concesiones administrativas o a los contratos de operación
relativos a explotaciones ubicadas en zonas declaradas de importancia para la seguridad nacional”.
h.- El Art. 19 N° 21 Inc. 2° C.P.R. establece “El Estado y sus organismos podrán desarrollar
actividades empresariales o participar en ellas sólo si una ley de quórum calificado los autoriza. En tal
caso, esas actividades estarán sometidas a la legislación común aplicable a los particulares, sin perjuicio
de las excepciones que por motivos justificados establezca la ley, la que deberá ser, asimismo, de
quórum calificado”. Este es el fundamento de la existencia de las empresas estatales, además de regular
el principio de subsidiariedad del Estado, en virtud del cual el Estado sólo puede entrometerse en las
actividades económicas en aquellos casos en que los particulares no quieran realizar dicha actividad.
a.- El Art. 1° de la Ley N° 18.575, sobre bases generales de la administración del Estado dispone “El
Presidente de la República ejerce el gobierno y la administración del Estado con la colaboración de los
órganos que establezcan la Constitución y las leyes”.
El inciso segundo del mismo precepto, agrega “La Administración del Estado estará constituida
por los Ministerios, las Intendencias, las Gobernaciones y los órganos y servicios públicos creados para el
cumplimiento de la función administrativa, incluidos la Contraloría General de la República, el Banco
Central, las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Orden y Seguridad Pública, los Gobiernos Regionales, las
Municipalidades y las empresas públicas creadas por ley”.
b.- El Art. 6° de la Ley N° 18.575 prescribe “El Estado podrá participar y tener representación en Art. 6º
entidades que no formen parte de su Administración sólo en virtud de una ley que lo autorice, la que
deberá ser un quórum calificado si esas entidades desarrollan actividades empresariales”. Esta norma
debe ser relacionada con lo dispuesto en el Art. 19 N° 21 Inc. 2° C.P.R. que establece como dijimos antes
el principio de subsidiariedad del Estado.
c.- Los Arts. 26 y 27 de la Ley N° 18.575. El primero de estos preceptos dispone “Los Ministerios, con las
excepciones que contemple la ley, se desconcentrarán territorialmente mediante Secretarías Regionales
Ministeriales, las que de Interior estarán a cargo de un Secretario Regional Ministerial”. El Art. 27 de la ley
referida establece que “En la organización de los Ministerios, además de las Subsecretarías y de las
Secretarías Regionales Ministeriales, podrán existir sólo los niveles jerárquicos de División,
Departamento, Sección y Oficina, considerando la importancia relativa y el volumen de trabajo que
signifique la respectiva función”.
El inciso segundo dispone por su parte “No obstante lo dispuesto en el inciso anterior, en
circunstancias excepcionales la ley podrá establecer niveles jerárquicos distintos o adicionales, así como
denominaciones diferentes”.
d.- El Art. 16 de la Ley N° 10.336, orgánica de la Contraloría General de la República dispone “Los
Servicios, Instituciones Fiscales, Semifiscales, Organismos Autónomos, Empresas del Estado y en
general todos los Servicios Públicos creados por ley, quedarán sometidos a la fiscalización de la
Contraloría General de la República, sin perjuicio del control que ejerce la Superintendencia de Bancos
sobre el Banco Central y el Banco del Estado de Chile, del que cumple la Superintendencia de
Compañías de Seguros, Sociedades Anónimas y Bolsas de Comercio sobre el Instituto de Seguros del
Estado y la Caja Reaseguradora de Chile y del que desarrolla la Superintendencia de Seguridad Social
sobre las instituciones y entidades sometidas actualmente a su fiscalización”.
Existen 3 corrientes que pretenden determinar que caracteriza un servicio público. Para los
primeros lo definen atendiendo a su función y finalidad, cual es la satisfacción del interés general. Para
otros en cambio, se debe atender a la rama del derecho que lo regula, siendo esta el derecho público.
Por último, para la concepción clásica u orgánica, los servicios públicos se caracterizan por ser órganos
de la administración del Estado que se crean para cumplir determinados fines. Don Enrique Silva Cimma,
adhiere a esta última corriente, fundado en lo dispuesto en el Art. 1° de la Ley N° 18.575.
Para don Enrique Silva Cimma, existen principalmente 2 nociones de servicios públicos, una orgánica y
otra funcional. Para la concepción orgánica, los servicios públicos son órganos que integran la
administración de un Estado, sin ser relevante la actividad que realizan. Duguit define servicios públicos
desde esta noción, diciendo que es toda actividad cuyo cumplimiento debe estar asegurado, reglado y
controlado por los gobernantes. Se crítica este concepto, pues resulta demasiado extensivo,
incluyéndose dentro de la noción de servicio público incluso los servicios concesionados, que son de
carácter privado.
Por otro lado tenemos la noción funcional, que apunta a la función del ente u organismo, por tanto, será
servicio público si tiene por objeto la satisfacción del interés general. Según Marcel Waline servicio
público es una actividad que persigue un fin de interés general, sea ella realizada por una entidad, cuerpo
estatal o por personas privadas, sean naturales o jurídica.
Se admite también por algunos un sentido orgánico o material. En lo orgánico, no dista mayormente de lo
explicado anteriormente. Según el sentido material, en el servicio público tiene que haber una prestación
del servicio al público, es decir, debe existir usuarios. Esta noción es criticable, pues se deja fuera de la
denominación de servicio público, a los gobiernos regionales por no atender directamente al público,
siendo que ellos son servicios públicos integrantes de la administración del Estado.
En nuestro ordenamiento jurídico se adopta el sentido orgánico, lo cual fluye de las siguientes
disposiciones de la Constitución Política de la República de Chile:
a.- El Art. 98 C.P.R. dispone que “Un organismo autónomo con el nombre de Contraloría General de la
República ejercerá el control de la legalidad de los actos de la Administración, fiscalizará el ingreso y la
inversión de los fondos del Fisco, de las municipalidades y de los demás organismos y servicios que
determinen las leyes; examinará y juzgará las cuentas de las personas que tengan a su cargo bienes de
esas entidades; llevará la contabilidad general de la Nación, y desempeñará las demás funciones que le
encomiende la ley orgánica constitucional respectiva”. De lo anterior se deduce que este organismo forma
parte de la administración del Estado, sin perjuicio de que ejerza una función de control.
b.- El Art. 65 Inc. 5° N° 2 C.P.R. establece que “Corresponderá, asimismo, al Presidente de la República
la iniciativa exclusiva para: Crear nuevos servicios públicos o empleos rentados, sean fiscales,
semifiscales, autónomos o de las empresas del Estado; suprimirlos y determinar sus funciones o
atribuciones”.
c.- El Art. 112 C.P.R. prescribe que “El intendente presidirá el consejo regional y le corresponderá la
coordinación, supervigilancia o fiscalización de los servicios públicos creados por ley para el cumplimiento
de las funciones administrativas que operen en la región”.
2.- Regularidad: Un servicio público actuará regularmente cuando la función se apega a los preceptos
legales y reglamentarios que las rigen.
3.- Uniformidad: Las prestaciones de los servicios públicos deben ser iguales para todos aquellos
habitantes que requieran o reclamen tal prestación.
4.- Obligatorio: Las prestaciones que deba entregar el servicio público, deben necesariamente
cumplirse, sin que pueda beneficiarse a unos en desmedro de otros.
5.- Permanente: Deberá existir siempre y cuando se requiera satisfacer una necesidad pública.
1.- Función considerada como obligatoria: Buscan satisfacer necesidades públicas. Según Enrique Silva
Cimma, la existencia de una necesidad elevada al carácter de pública y atendida como función obligatoria
por el Estado, constituye el elemento fundamental del servicio público. Por ejemplo el Art. 13 de la Ley N°
19.175 sobre gobierno y administración regional, dispone que “La administración superior de cada región
del país estará radicada en un gobierno regional, que tendrá por objeto el desarrollo social, cultural y
económico de ella”.
El inciso segundo agrega que “Para el ejercicio de sus funciones los gobiernos regionales gozarán de
personalidad jurídica de derecho público, tendrán patrimonio propio y estarán investidos de las
atribuciones que esta ley les confiere”. Por su parte el Art. 16 de la misma ley regula las funciones
generales del gobierno regional. En efecto el precepto citado dispone “Serán funciones generales del
gobierno regional:
a. Elaborar y aprobar las políticas, planes y programas de desarrollo de la región, así como su proyecto
de presupuesto, los que deberá ajustar a la política nacional de desarrollo y al presupuesto de la Nación.
Para efectos de asegurar la congruencia entre las políticas y planes nacionales y regionales, el Ministerio
de Planificación y Cooperación asistirá técnicamente a cada gobierno regional en la elaboración de los
correspondientes instrumentos, emitiendo, a solicitud del gobierno regional, los informes pertinentes.
b. Resolver la inversión de los recursos que a la región correspondan en la distribución del Fondo
Nacional de Desarrollo Regional y de aquéllos que procedan de acuerdo al artículo 73 de esta ley, en
conformidad con la normativa aplicable.
c. Decidir la destinación a proyectos específicos de los recursos de los programas de inversión sectorial
de asignación regional, que contemple anualmente la Ley de Presupuestos de la Nación.
d. Dictar normas de carácter general para regular las materias de su competencia, con sujeción a las
disposiciones legales y a los decretos supremos reglamentarios, las que estarán sujetas al trámite de
toma de razón por parte de la Contraloría General de la República y se publicarán en el Diario Oficial.
f. Adoptar las medidas necesarias para enfrentar situaciones de emergencia o catástrofe, en conformidad
a la ley, y desarrollar programas de prevención y protección ante situaciones de desastre, sin perjuicio de
las atribuciones de las autoridades nacionales competentes.
g. Participar en acciones de cooperación internacional en la región, dentro de los marcos establecidos por
los tratados y convenios que el Gobierno de Chile celebre al efecto y en conformidad a los
procedimientos regulados en la legislación respectiva.
h. Ejercer las competencias que le sean transferidas de conformidad con lo dispuesto en el artículo 67 de
esta ley.
i. Mantener relación permanente con el gobierno nacional y sus distintos organismos, a fin de armonizar
el ejercicio de sus respectivas funciones”.
2.- Debe tener agentes jerarquizados: Son los encargados previo nombramiento, del funcionamiento
del respectivo servicio público. Dentro de los agentes podemos encontrar, aquellos que forman parte de
la organización de la administración del Estado, que son llamados agentes públicos y por otro lado,
aquellos agentes que colaboran, pero son particulares. Dentro de los agentes públicos podemos
distinguir: a.- Gobernantes. Son quienes ejercen el poder público, son generalmente elegidos por la
ciudadanía. Dentro de esta clase tenemos, por ejemplo al Presidente de la República, diputados y
senadores, entre otros. b.- Autoridades. No ejercen el poder público, pero en mayor o menor medida
participan de él. Tienen potestad de mando y facultades resolutivas. Dentro de esta categoría tenemos a
los ministros, intendentes y gobernadores. c.- Funcionarios. Son quienes en definitiva ejercen la función
de administrar.
Si bien el Art. 19 N° 17 C.P.R. distingue entre funciones y empleos públicos y por ende, entre
funcionarios y empleados públicos, la doctrina hace sinónimas ambas expresiones. En efecto, la doctrina
define funcionarios públicos como aquellos que tienen competencia específica y potestad de mando. Por
el contrario, los empleados públicos son meros colaboradores de la administración del Estado y actúan,
por tanto, en un plano secundario
Siguiendo con el ejemplo del numeral anterior, el Art. 68 de la Ley. N° 19.175 de 1993 prescribe
que “El intendente, para el cumplimiento de las funciones que la presente ley le asigna como ejecutivo del
gobierno regional, contará con la siguiente estructura administrativa, que le estará directamente adscrita:
a. Una división de administración y finanzas, encargada de la gestión administrativa y financiera, de la
formulación y ejecución del presupuesto y de la provisión de los servicios generales del gobierno regional,
y
b. Una división de análisis y control de gestión, que colaborará en la elaboración del proyecto de
presupuesto en lo relativo a la inversión del gobierno regional y en su seguimiento y control”.
Además importa aquí tratar la jerarquía y disciplina. Por jerarquía administrativa se entiende al
conjunto de facultades que la ley otorga al superior respecto del subordinado. Por ejemplo, la facultad de
mando, en virtud de la cual el superior puede impartir instrucciones y órdenes. Se debe relacionar con la
facultad de representación que tiene el subordinado, que veremos más adelante. También tenemos las
facultades disciplinarias, en virtud de la cual puede aplicar sanciones; facultad de jurisdicción retenida, en
cuya virtud el superior jerárquico puede conocer materias de competencia del subordinado y finalmente,
facultad jurídica de conflictos, con la cual conoce y resuelve las contiendas de su competencia que se
promueven entre sus subordinados.
3.- Los recursos: Cabe distinguir entre bienes fiscales y recursos públicos. Los recursos del servicio son
distintos, según la naturaleza del servicio. Los servicios que integran la administración del Estado se
financian con recursos fiscales, establecidos generalmente en la Ley de presupuestos de la nación, como
por ejemplo los recursos de los ministerios. Los servicios autónomos se financian con recursos globales y
leyes especiales que le otorgan bienes o rentas, como por ejemplo el Art. 69 de la Ley N° 19.175 que
dispone “El patrimonio del gobierno regional estará compuesto por:
b. Los bienes muebles e inmuebles que adquiera legalmente a cualquier título y los frutos de tales bienes.
c. Las donaciones, herencias y legados que reciba, de fuentes internas o externas, de acuerdo a la
legislación vigente, las cuales estarán exentas del trámite de insinuación.
d. Los ingresos que obtenga por los servicios que preste y por los permisos y concesiones que otorgue
respecto de los bienes a que se refiere la letra e) del artículo 70.
f. Los ingresos que perciba en conformidad al inciso final del número 20° del artículo 19 de la
Constitución Política de la República.
g. Los recursos que le correspondan en la distribución del Fondo Nacional de Desarrollo Regional.
i. Los derechos y obligaciones que adquiera por su participación en las asociaciones a que se refiere el
inciso quinto del artículo 104 de la Constitución Política de la República.
Además el Art. 73 de la misma ley regula el Fondo Nacional de Desarrollo regional. En efecto, el
precepto en comento dispone “El Fondo Nacional de Desarrollo Regional es un programa de inversiones
públicas, con finalidades de compensación territorial, destinado al financiamiento de acciones en los
distintos ámbitos de infraestructura social económica de la región, con el objeto de obtener un desarrollo
territorial armónico y equitativo. Este Fondo se constituirá por una proporción del total de gastos de
inversión pública que establezca anualmente la Ley de Presupuestos. La distribución del mismo se
efectuará entre las regiones, asignándoles cuotas regionales”.
El inciso segundo contempla como se financia este fondo, disponiendo que “La Ley de
Presupuestos de cada año podrá precisar los rubros de gastos que, para estos efectos, no se entenderán
comprendidos en los ámbitos de infraestructura social y económica de la región”.
Los recursos son obtenidos, principalmente a través de procedimientos de derecho privado, ya sea a
título gratuito (como las donaciones) o bien a título oneroso como la compra de un edificio que servirá de
asiento al servicio público respectivo. Otras formas de recaudación son las contribuciones o pago del
impuesto territorial (Ley N° 17.235), lo impuestos en general (como el impuesto a la renta D.L. N° 824) o
multas. Estas últimas merecen un comentario, cual es que la Ley N° 20.000 sobre tráfico ilícito de
estupefacientes y sustancias psicotrópicas y la Ley N° 19.325 que establece normas sobre procedimiento
y sanciones relativos a los actos de violencia intrafamiliar, establecen que las multas a que dieren lugar
las infracciones de las leyes mencionadas serán a beneficio del Fondo Nacional de Desarrollo Regional
(FNDR). También el Estado se financia a través de las expropiaciones por causa de utilidad pública
(Procedimiento regulado por los Arts. 915 y ss C.P.C.). y por último los empréstitos obtenidos por el
Estado de Chile. Deben, los impuestos y los empréstitos ser obtenidos en conformidad a la ley, es decir,
por iniciativa exclusiva del Presidente de la República, Arts. 65 N° 1 y 3 C.P.R. en relación a los Arts. 19
N° 20 y 24 del mismo cuerpo normativo.
4.- Régimen jurídico especial: Se entiende por tal, al conjunto de normas disposiciones legales y
reglamentarias que dictan los poderes del Estado con el fin de que una determinada necesidad se
satisfaga mediante un servicio público. Los servicios públicos sólo pueden ser creados por ley, así lo
establece el Art. 65 N° 2 C.P.R. Jamás pueden ser creados por decreto emanado de la potestad
reglamentaria, lo que si puede haber es un reglamento que haga ejecutiva la ley que crea el servicio
público, en tal caso ambas normas, se funden en un solo régimen jurídico especial. Este régimen jurídico
especial regula las siguientes materias: a.- Atribuciones de los servicios públicos, como el Art. 20 de la ley
N ° 19.175. b.- Bienes disponibles para lograr sus funciones, como el revisado Art. 69 de la misma ley. c.-
Régimen jurídico del personal del servicio público, como el estatuto administrativo de los funcionarios
públicos (Ley N° 18.834) y el estatuto administrativo de los funcionarios municipales (Ley N° 18.883). d.-
Grado de autonomía que tienen respecto del poder central, como el Art. 13 de la citada ley orgánica
Constitucional sobre gobierno y administración regional. Por ejemplo, el gobierno regional, se encuentra
regulado por la Ley N° 19.175 de 1993 sobre gobierno y administración regional, cuya última modificación
se realizó por Ley N ° 20.035. Por su parte las municipalidades se encuentran reguladas por la Ley
Orgánica Constitucional de Municipalidades N° 18.695.
Las bases de la administración del Estado son el conjunto de normas y principios que sirven de
fundamento a la organización y funcionamiento de los servicios públicos.
2.- Unidad y competencia de los órganos de la administración. La unidad administrativa permite que
el campo de acción de los distintos servicios públicos se precise o delimite con el fin de evitar
interferencias entre ellos que puedan perjudicar el fin último que es la satisfacción de necesidades de
interés general. Así mismo se exige que exista claridad en las facultades de dirección de cada servicio,
con lo cual se pueden delimitar o establecer las responsabilidades administrativas y se facilitan los
controles de la administración. En conclusión, constituye una forma de delimitar claramente la
competencia de cada servicio, materializa la facultad de dirección y facilita la función de control de los
actos de la administración.
Por su parte la competencia es el ámbito de acción de los servicios públicos. Es así como el Art. 7°
C.P.R. establece que los órganos del Estado deben actuar previa investidura, sobre materias de su
competencia y con sujeción a la Constitución y las leyes. El precepto en comento consagra la
denominada acción de nulidad de derecho público, la cual se otorga en general al los particulares que
resulten afectados en sus derechos. Se ha discutido si esta acción puede ser ejercida por otros servicios
públicos. La doctrina mayoritaria estima que no. Por ejemplo una municipalidad ejerce la acción de
nulidad de derecho público fundado en una resolución dictada por el gobierno regional. Los elementos
que determinan la competencia son a.- Territorio. Espacio físico en que actúan los servicios públicos. b.-
Materia. Cada servicio público tiene distintas funciones y satisface distintas necesidades. Se distingue
dos tipos de competencia en relación a la materia, una interna, que tienen los funcionarios o unidades de
un mismo servicio público y otra externa, en que cada servicio conoce de materias distintas a las de otros
servicios. c.- Poder jurídico. Son las distintas potestades que la ley le otorga a los servicios. Estas
facultades o potestades pueden ser de legislación, de administración y jurisdiccionales. d.- Grado. Hay
servicios que conocen en primer o segundo grado (denominado recurso jerárquico), similar a la primera y
segunda instancia procesal. Por ejemplo al imponerse una medida disciplinaria en un sumario
administrativo, existe la posibilidad de recurrir ante el superior jerárquico. Relacionado con la
competencia se encuentra la improrrogabilidad de la misma, pues el Art. 7° C.P.R. establece un principio
distinto a lo establecido en los Arts. 181 a 187 C.O.T. Las únicas excepciones en que es admisible la
prórroga de la competencia son en la avocación y la delegación. La avocación es el acto por el cual un
órgano superior sin que exista recurso, somete a su conocimiento un asunto de competencia de un
inferior. Lo anterior no es más que una aplicación del principio de la superioridad jerárquica. Por su parte,
la delegación es el acto por el cual un órgano superior entrega parte de su competencia a uno inferior.
Esta situación se encuentra regulada en el Art. 41 de la Ley N° 18.575. Según esta última disposición,
existen ciertas limitaciones en la delegación, pues debe cumplir con los siguientes requisitos: 1.- Debe ser
parcial y específica, es decir, no puede ser total ni genérica. 2.- El delegado debe ser el subordinado. 3.-
El acto en virtud del cual se realiza la delegación debe ser notificado o publicado para que surta efectos.
4.- La responsabilidad recae en el delegado, sin perjuicio de la responsabilidad del superior por falta de
control. 5.- La delegación es por esencia revocable. Es decir, no cabe una revocación tácita. Esto es una
aplicación del principio de que en derecho las cosas se deshacen de la misma manera de la que se
hacen.
Se produce en aquellos casos en que dos o más órganos que se atribuyen competencia para conocer de
un asunto determinado. Esta clase de conflictos se denominan positivos, pues los órganos se atribuyen la
competencia del asunto. También existen conflictos negativos de competencia, en virtud de los cuales
dos o más órganos rechazan el conocimiento de un asunto por considerarse incompetentes. El Art. 39 de
la Ley N° 18.575 resuelve el problema recurriendo a la potestad jerárquica, dándole facultades al superior
respectivo para resolver el conflicto. En efecto, la disposición citada dispone “Las contiendas de
competencia que surjan entre diversas autoridades administrativas serán resueltas por el superior
jerárquico del cual dependan o con el cual se relacionen. Tratándose de autoridades dependientes o
vinculadas con distintos Ministerios, decidirán en conjunto los Ministros correspondientes, y si hubiere
desacuerdo, resolverá el Presidente de la República”.
Como lo dijimos anteriormente, consiste en la reunión de atribuciones en un poder central. Dentro de sus
características destacan: 1.- Los servicios públicos centralizados extienden su competencia a todo el
territorio de la república, sin perjuicio de que se puedan establecer oficinas regionales. 2.- EL órgano
central resuelve todos los asuntos administrativos que ocurran en el territorio. La excepción a la
característica anterior la constituye la delegación de competencia, ya estudiada.
Por ella se entrega la administración de los intereses zonales o locales, a órganos independientes del
poder central, los que para estos efectos cuentan con personalidad jurídica y recursos propios. Dentro de
sus características figuran: 1.- Actúan con independencia del poder central. 2.- Tienen personalidad
jurídica de derecho público. 3.- Son especiales, pues han sido creados para satisfacer necesidades
públicas específicas. 4.- No están subordinados al poder central, pues gozan de autonomía. 5.- Sus
autoridades se eligen por elección popular. La base de esta característica se encuentra en el Art. 119
C.P.R. que dispone “en cada municipalidad habrá un concejo integrado por concejales elegidos por
sufragio universal en conformidad a la ley orgánica constitucional de municipalidades”. Es así como los
Arts. 57 y 72 de la Ley N° 18.695 complementan la materia. El Art. 57 Inc. 1° prescribe “El alcalde será
elegido por sufragio universal, en votación conjunta y cédula separada de la de concejales, en
conformidad con lo establecido en esta ley. Su mandato durará cuatro años y podrá ser reelegido”. Por su
parte el Art. 72 Inc. 1° de la misma ley dispone “Los concejos estarán integrados por concejales elegidos
por votación directa mediante un sistema de representación proporcional, en conformidad con esta ley.
Durarán cuatro años en sus cargos y podrán ser reelegidos”. Una manifestación de la descentralización
administrativa, es la existencia de un Estatuto administrativo para funcionarios municipales, que regula a
todos los funcionarios de los municipios, incluidos el alcalde y los concejales. 6.- Tienen patrimonio
propio. Así lo consagra por ejemplo el Art. 1° Inc. 2° de la Ley N° 18.695 orgánica constitucional de
municipalidades, que señala que “Las municipalidades son corporaciones autónomas de derecho público,
con personalidad jurídica y patrimonio propio, cuya finalidad es satisfacer las necesidades de la
comunidad local y asegurar su participación en el progreso económico, social y cultural de las respectivas
comunas”. De lo anterior se deriva que tienen una independencia en el manejo e inversión de sus
recursos, pese a que según algunos, esta autonomía es más bien relativa. 7.- Están sujetos a la
fiscalización competente de la Contraloría General de la República.
De todo lo expuesto hasta aquí podemos concluir las siguientes ventajas y desventajas de los dos
sistemas analizados: 1.- El sistema de la centralización administrativa tiene como ventaja que permite la
existencia de un sistema administrativo uniforme. 2.- La correlativa desventaja de este sistema es que se
produce un olvido o despreocupación por los sistemas locales de administración. 3.- El sistema de
descentralización administrativa tiene como ventaja que los órganos que la componen tienen un mayor
conocimiento de la realidad local. 4.- Por último, y como desventaja, el sistema de la descentralización es
ficticio, relativo, pues en la realidad siempre existe una dependencia, principalmente por el escaso
patrimonio con el que cuentan.
regional, pues ella data de 1993 y actualmente se hizo necesaria una ampliación en la dotación del
servicio, por la escasez de funcionarios.
4.- Jerarquía administrativa. Permite la actuación armónica de los distintos órganos integrantes de la
administración pública. Esta jerarquía administrativa puede ser analizada desde dos puntos de vista, uno
orgánico y otro funcional. Desde un punto de vista orgánico, podemos decir que se manifiesta en una
estructura jerárquica de los servicios públicos entre si, como por ejemplo el presidente de la república y
los ministros, pues estos últimos dependen de la voluntad de aquel. Desde un punto de vista funcional,
que atiende a determinar como se estructuran los funcionarios de un servicio. Los Arts. 7°, 27 y 28 de la
Ley N° 18.575 son ejemplos de la jerarquía administrativa orgánica. Por su parte, los Arts. 41 Inc. 1° y 61
Letra f) de la Ley N° 18.834 son ejemplos de la jerarquía administrativa funcional.
Dentro de esta base cabe distinguir: a.- Autoridad jerárquica. Se materializa a través de los siguientes
principios: - Poder de mando; que se traduce en la facultad del superior para impartir instrucciones al
subordinado. – Potestad disciplinaria; pues tiene la facultad de aplicar sanciones por faltas en su
desempeño funcional. – Jurisdicción retenida; que consiste en la facultad para conocer de las materias
entregadas a sus subordinados. – Jurisdicción de conflictos; que corresponde a la facultad o poder para
resolver los conflictos de competencia que se produzcan entre sus subordinados. b.- Subordinación
administrativa. Consiste en la obligación del subordinado de obedecer las órdenes del superior jerárquico.
Es así como el Art. 61 Letra f) de la Ley N ° 18.834, conocida como Estatuto administrativo de
funcionarios públicos dispone que “serán obligaciones de todo funcionario f) Obedecer las órdenes
impartidas por el superior jerárquico”. El Art. 62 de la misma ley, que consagra la denominada
representación, dispone “si el funcionario estimare ilegal una orden deberá representarla por escrito, si el
superior la reitera en igual forma, aquél deberá cumplirla, quedando exento de toda responsabilidad, la
cual recaerá por entero en el superior que hubiere insistido en la orden. Tanto el funcionario que
representare la orden, como el superior que l reiterare, enviarán copia de las comunicaciones
mencionadas a la jefatura superior correspondiente, dentro de los cinco días siguientes contados desde
la fecha de la última de estas comunicaciones. En virtud de la representación el subordinado, cuando el
superior jerárquico le imparta una orden que considere ilegal o impertinente, puede representarla, en
cuyo caso, el superior deberá perseverar por escrito en su orden en un memorando, eximiéndose de
responsabilidad en tal caso el subordinado. Los requisitos que debe cumplir la representación son: 1.-
Que conste por escrito. 2.- Remitir copia al superior jerárquico común. Todo lo anterior es manifestación
del principio de subordinación reflexiva (opuesta a la absoluta), en cuya virtud el subordinado puede
analizar la legalidad o conveniencia de una orden. Se ha admitido en ciertos casos que la representación
se haga por un medio no escrito, como por ejemplo si un gendarme encargado de la custodia de los reos
es requerido en otra parte del centro de cumplimiento penitenciario por su superior, y no hay más
funcionarios en dicha custodia, podrá hacerlo vía telefónica (El gendarme incumple la orden porque
podría vulnerar el reglamento interno, que establece que no pueden existir menos de dos funcionario
encargados de la custodia de los calabozos).
Dentro de las funciones administrativas encontramos las siguientes, que pasamos a enumerar:
a.- Administrativa. Esta corresponde a los distintos servicios públicos en su calidad de órganos
colaboradores de la administración del Estado. Dentro de estas: a.1.- Ejecutiva. En virtud de ella se
hacen efectivas las resoluciones adoptadas por los órganos del Estado. a.2.- Deliberante. Consiste en la
resolución, conforme a derecho, de problemas concretos. a.3.- Consultiva. Generalmente consiste en
asesorías de carácter técnico. Sus opiniones no son vinculantes, como si un departamento jurídico de un
determinado servicio público, propone expropiar un terreno por causas de utilidad pública, la autoridad
podrá tomar en cuento o no dicho asesoramiento. b.- Fiscalizadora. Encargada a un organismo autónomo
denominado Contraloría General de la República, que tiene por objeto controlar la legalidad de los actos
de administración. c.- Contenciosa. Consiste en la resolución de los reclamos de la administración o en
contra de ella en sede jurisdiccional.
7.- Probidad administrativa. Esta base se encuentra contenida en la Ley N° 19.653 de 14 de diciembre
de 1999, que se incorporó al Título Segundo de la Ley N° 18.575 sobre bases generales de la
administración del Estado, hacia 2001 en virtud del D.F.L. N° 1/19.653, cuyo epígrafe “De la probidad
administrativa”, comprende los Arts. 52 a 68, ambos inclusive.
Probidad proviene del latín “probitas” y el diccionario de la R.A.E. entiende por tal, a la honradez, rectitud
de ánimo; integridad en el obrar. La doctrina define la probidad como “la rectitud y moralidad con que
debe ejecutarse la función pública, es decir, comprende un parámetro legal y uno moral”. Algunos se
preguntan si trasciende el ámbito público, pues que ocurre si un funcionario fuera del horario y lugar físico
del trabajo, incumple gravemente el deber de probidad. En tal caso algunos han dicho que cabría aplicar
la sanción que corresponde, la que puede llegar a la destitución.
El Art. 52 Inc. 2° de la Ley N° 18.575 dispone que “El principio de la probidad administrativa consiste en
observar una conducta funcionaria intachable y un desempeño honesto y leal de la función o cargo, con
preeminencia del interés general sobre el particular”. Por su parte el Art. 62 enumera las conductas que
1. Usar en beneficio propio o de terceros la información reservada o privilegiada a que se tuviere acceso
en razón de la función pública que se desempeña.
2. Hacer valer indebidamente la posición funcionaria para influir sobre una persona con el objeto de
conseguir un beneficio directo o indirecto para sí o para un tercero.
3. Emplear, bajo cualquier forma, dinero o bienes de la institución, en provecho propio o de terceros.
4. Ejecutar actividades, ocupar tiempo de la jornada de trabajo o utilizar personal o recursos del
organismo en beneficio propio o para fines ajenos a los institucionales.
5. Solicitar, hacerse prometer o aceptar, en razón del cargo o función, para sí o para terceros, donativos,
ventajas o privilegios de cualquier naturaleza.
Exceptúense de esta prohibición los donativos oficiales y protocolares, y aquellos que autoriza la
costumbre como manifestaciones de cortesía y buena educación.
El millaje u otro beneficio similar que otorguen las líneas aéreas por vuelos nacionales o internacionales a
los que viajen como autoridades o funcionarios, y que sean financiados con recursos públicos, no podrán
ser utilizados en actividades o viajes particulares.
6. Intervenir, en razón de las funciones, en asuntos en que se tenga interés personal o en que lo tengan
el cónyuge, hijos, adoptados o parientes hasta el tercer grado de consanguinidad y segundo de afinidad
inclusive.
Asimismo, participar en decisiones en que exista cualquier circunstancia que le reste imparcialidad.
Las autoridades y funcionarios deberán abstenerse de participar en estos asuntos, debiendo poner en
conocimiento de su superior jerárquico la implicancia que les afecta.
8. Contravenir los deberes de eficiencia, eficacia y legalidad que rigen el desempeño de los cargos
públicos, con grave entorpecimiento del servicio o del ejercicio de los derechos ciudadanos ante la
Administración”.
Por su parte el Art. 125 de la Ley N° 18.834 dispone que “La destitución es la decisión de la
autoridad facultada para hacer el nombramiento de poner término a los servicios de un funcionario”. Lo
anterior quiere decir que en caso de incumplimiento se puede incluso obtener la destitución de un
funcionario. El Art. 62 de la misma Ley, establece por su parte que serán obligaciones de todo funcionario
Letra g) “Observar estrictamente el principio de la probidad administrativa regulado por la ley Nº 18.575 y
demás disposiciones especiales”. En la doctrina doña Nancy Barra define probidad como aquella
integridad moral empleada en la función administrativa. Otros autores optan por definir la corrupción, es
así como se ha dicho que se entiende por tal, cuando un agente público en ejercicio de sus funciones
consigue un interés en beneficio privado. En general pueden dar lugar a delitos funcionarios, es decir,
aquellas acciones u omisiones, típicas, antijurídicas y culpables ejecutadas por los funcionarios públicos
en ele ejercicio de sus funciones (Delitos ministeriales o funcionarios). Entre ellos destacan el cohecho y
el soborno.
Control de la administración.
a.- Control jurídico y control financiero o contable. El control jurídico es aquel que regula la legalidad
de los actos de la administración. Por su parte, el control financiero o contable consiste en cautelar la
correcta inversión de los fondos públicos. En nuestro país, ambos controles, los ejerce la Contraloría
General de la República y en forma indirecta los departamentos jurídicos de los respectivos servicios.
Por su parte el control represivo, también lo puede efectuar la Contraloría, a través del trámite de registro
o de las fiscalizaciones. Este es el denominado control externo, según veremos más adelante. También
pueden los departamentos de auditoria realizar el control represivo. El control represivo en general tiene
por objeto perseguir las responsabilidades de un acto ejecutado con trasgresión a la ley.
c.- Control interno y control externo. Esta clasificación atiende al órgano encargado de realizar el
control, pues si se trata de un órgano autónomo el control es externo y se encuentra en manos de la
Existen varias teorías que pretenden explicar la naturaleza jurídica de las personas jurídicas,
como por ejemplo la teoría de la ficción, la teoría del órgano, teoría de la existencia real, etc. Aquí no
interesan solamente dos de ellas. La teoría de la ficción, recogida por el Art. 545 C.C. que define persona
jurídica como “una persona ficticia capaz de ejercer derechos y contraer obligaciones civiles, y de ser
representada judicial y extrajudicialmente”. Por su parte según Enrique Silva Cimma la teoría de la
existencia real presupone una realidad social análoga a la de las personas físicas y ambas forman un
sola realidad jurídica.
Características.
a.- Origen. Tiene su origen en la voluntad del Estado que se materializa a través de una ley, es decir, es
un acto de autoridad.
b.- Fin. La personalidad jurídica pública tiene como fin la satisfacción de una necesidad pública.
c.- Control administrativo. Están bajo la supervigilancia de la administración pública o del Estado,
principalmente del Presidente de la República. Se crítica la característica anterior, puesto que el control
administrativo no existe e razón de tener personalidad jurídica de derecho público, sino en atención que
administra bienes fiscales.
d.- Potestad Pública. Tienen atribuciones para dictar resoluciones con carácter obligatorio.
e.- Organización de estas personas jurídicas. Debe ser pública, es decir, emanar del poder público.
Debe estar contenida principalmente en reglamentos y leyes. En las personas jurídicas de derecho
privado, la organización de las mismas se encuentra en los estatutos, que son establecidos por los
particulares que la constituyen.
El profesor Rafael Bielsa distingue entre autarquía territorial y autarquía institucional. En virtud de
la primera, se adquiere competencia en razón de territorio y actúan en una determinada región del país,
como por ejemplo los municipios. La autarquía institucional, en cambio, se personifican o descentralizan
para realizar una actividad específica del Estado.
Ferrara habla de personas públicas necesarias y personas facultativas. Las personas públicas
necesarias son aquellas que nacen por un mandato Constitucional, mientras que las personas
facultativas son aquellas que nacen por la facultad discrecional del legislador.
Del Art. 547 Inc. 2° C.C. fluye la siguiente clasificación de las personas jurídicas de derecho
público: 1.- Estado o Fisco. 2.- Órganos descentralizados territorialmente, como los municipios y el
Gobierno regional. 3.- Instituciones y empresas fiscales. 4.- Instituciones semifiscales.
El fisco es el Estado considerado como sujeto de derechos patrimoniales. Debemos recordar que el fisco
es una ficción creada por el monarca para defenderse de las reclamaciones de índole económica de la
gente. Enrique Silva Cimma, define al fisco como “un ente investido de personalidad jurídica para que
represente al Estado en el ejercicio de los derechos patrimoniales”. Según el Art. 547 C.C. se trata de una
persona jurídica de derecho público. El Código Civil hace referencia al Fisco en diversas disposiciones,
como por ejemplo, el Art. 995 relativo a la sucesión intestada; el Art. 1579 C.C. en relación a quien se
debe hacer el pago y el Art. 2472 N° 6, que establece una preferencia a favor de los créditos del fisco. A
lo anterior cabe agregar el Art. 590 C.C. que dispone que todos los bienes inmuebles que se ubiquen
dentro del territorio de la república y que carezcan de dueño, se entenderán pertenecer al Estado.
El Art. 589 Inc. 2° C.C. distingue entre los bienes nacionales de uso público, bienes nacionales y bienes
fiscales. Los primeros son aquellos cuyo dominio y uso pertenecen a la nación toda, los segundos son
aquellos cuyo dominio pertenece a la nación toda y por último los bienes fiscales son aquellos bienes
nacionales cuyo uso no pertenece generalmente a los habitantes. En definitiva pertenecen al fisco todos
los bienes muebles e inmuebles, y los derechos reales y personales de que sea titular. En consecuencia
el fisco como persona jurídica puede ser propietario, acreedor o deudor.
1.- Fisco o Estado propietario. El Estado adquiere bienes a través de los siguientes medios o
instrumentos:
a.- Por ley. Como por ejemplo la expropiación por cusa de utilidad pública, último orden de sucesión
intestada.
b.- A título gratuito. Tal ocurre con las herencias, donaciones y legados. Son frecuentes las
donaciones que realizan las empresas a los municipios, ya que éstas traen consigo una rebaja en la
carga tributaria para la empresa.
c.- A título oneroso. (Bienes muebles, inmuebles, etc.). Ello ocurre en los contratos de suministro
(papel, fotocopiadoras, etc.). En los bienes para la ejecución de proyectos, existe un dominio transitorio,
ya que, posteriormente se transfieren al beneficiario, al finalizar la obra o proyecto. Cobros por derecho
de concesiones, patentes, etc.
*Razonamiento TC: Para calificar un tributo de “manifiestamente injusto”, hay que considerar, la
capacidad de pago, la calificación del bien como de consumo habitual o suntuario o prescindible y si se
impide el desarrollo de una actividad económica (carácter expropiatorio).
d) Imposición de multas.
Ejemplo: Infracciones VIF, las multas van a beneficio del Gobierno Regional. Es una forma
excepcional, que se establece en leyes particulares. En este caso, el GORE es el beneficiario, ya que, el
acreedor es el respectivo tribunal que aplicó la multa.
Ejemplo: Ley Nº 20.000, de control del tráfico de estupefacientes, establece (de forma excepcional), que
los comisos que se realicen van en beneficio del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR).
Corresponde, por regla general, al Presidente del Consejo de Defensa del Estado (CDE) y, por
consiguiente, a los abogados, procuradores y fiscales del CDE.
Dentro de los órganos de la administración del Estado cabe distinguir entre los centralizados, de
los cuales veremos a los ministerios y los descentralizados, de los cuales veremos a las municipalidades
y el Gobierno Regional.
Órganos centralizados.
Los ministerios.
El Art. 22 de la Ley N° 18.575 define a los ministerios como “Los Ministerios son los órganos
superiores de colaboración del Presidente de la República en las funciones de gobierno y administración
de sus respectivos sectores, los cuales corresponden a los campos específicos de actividades en que
deben ejercer dichas funciones”. En general es el D.F.L. N° 7.912 de 1927 el que regula los ministerios.
Además existen leyes que han creado diversos ministerios. Los ministerios son:
Los últimos 4 si bien no son ministerios, el jefe del servicio tiene actualmente la denominación de
ministro.
El Art. 33 Inc. 2° de la C.P.R. establece que la organización de los ministerios se regirá por la ley
orgánica correspondiente. Por tanto su regulación es legal y no Constitucional. En general la propia ley
que los crea regula su organización y funcionamiento. El jefe superior del servicio es el ministro según el
Art. 33 de la C.P.R.
Se subrogan de acuerdo a los Arts. 24 y 25 de la Ley N° 18575. En efecto, el Art. 24 de dicha ley
dispone “En cada Ministerio habrá una o más Subsecretarías, cuyos jefes superiores serán los
Subsecretarios, quienes tendrán el carácter de colaboradores inmediatos de los Ministros. Les
corresponderá coordinar la acción de los órganos y servicios públicos del sector, actuar como ministros
de fe, ejercer la administración interna del Ministerio y cumplir las demás funciones que les señale la ley”.
Por su parte el Art. 25 de la Ley N° 18575 expresa “El Ministro será subrogado por el respectivo
Subsecretario y, en caso de existir más de uno, por el de más antigua designación; salvo que el
Presidente de la República nombre a otro Secretario de Estado o que la ley establezca para Ministerios
determinados otra forma de subrogación”.
Son funciones de los subsecretarios: 1.- Coordinar el funcionamiento de los servicios públicos del
sector, como por ejemplo el ministerio de relaciones exteriores debe coordinar el funcionamiento de los
consulados y embajadas. 2.- Actuar como ministros de fe, certificando la documentación interna del
ministerio. 3.- Ejercer la administración interna del ministerio. 4.- Ejercer las demás funciones delegadas
por el ministerio.
La delegación se regirá por el Art. 41 de la Ley N° 18575 que dice “El ejercicio de las atribuciones y
facultades propias podrá ser delegado, sobre las bases siguientes:
Los ministerios como órganos centralizados de la administración del Estado, funcionan a nivel del
poder central. Sin perjuicio de lo anterior se encuentran territorialmente desconcentrados en las regiones.
Siendo su manifestación las Secretarías Regionales Ministeriales (SEREMIAS), reguladas por el Art. 33
de la Ley N° 18575 que dispone “Sin perjuicio de su dependencia jerárquica general, la ley podrá
desconcentrar, territorial y funcionalmente, a determinados órganos.
1.- Todo lo relacionado con el gobierno político y local del Estado y tiene a su cargo el mantenimiento de
la seguridad, tranquilidad y orden público. En las regiones este ministerio no tiene SEREMI, pero son los
intendentes y gobernadores quienes los representan.
2.- Preocuparse de las relaciones con el Congreso Nacional, siempre que no sean específicas y algunas
funciones menores, como preocuparse de los límites de las regiones o provincias, ejecutar leyes
electorales y preocuparse del normal funcionamiento del diario oficial.
Los servicios dependientes de este ministerio son: a.- Subsecretaría del desarrollo regional que
tiene entre otras funciones contribuir al desarrollo de los territorios, fortaleciendo su capacidad de buen
gobierno, en coherencia con s proceso de descentralización (comunas y territorio regional). b.- Servicio
de gobierno interior (Intendencias).
1.- Todo lo concerniente a las relaciones exteriores de la República que deberá llevar siempre de acuerdo
a los que le diga el Presidente de la República, pues éste último según el Art. 32 N° 15 C.P.R.
2.- Nombramiento de los diplomáticos y consulares, ello entendido según el Art. 32 N° 7 de la C.P.R.
Agrega el Art. 4° del D.F.L. N° 7.912: a.- La admisión de Cónsules y otros funcionarios
comerciales de los países extranjeros. b.- El estudio de los tratados y convenciones internacionales, de
acuerdo con los Ministros que corresponda. c.- La preparación de la concurrencia a los Congresos y
Conferencias Internacionales, exposiciones artísticas e industriales fuera de Chile, de acuerdo con los
Ministerios respectivos. d.- El otorgamiento de los pasaportes diplomáticos y la legalización de los
documentos que deben producir efecto fuera del país y de los que, otorgados en el extranjero, deban
producirlo en Chile. e.- El estudio y fomento del comercio exterior por intermedio de sus propios
funcionarios y de acuerdo con el Ministerio respectivo. f.- Todo lo relativo al ceremonial en las reuniones
oficiales a que concurra el Presidente de la República o el Cuerpo Diplomático. g.- El régimen
administrativo de la provincia de Tacna, por ahora.
Ministerio de hacienda.
1.- Hacer un manejo responsable de la política fiscal, de acuerdo con el contexto socioeconómico, con el
fin de lograr un crecimiento estable para el país.
2.- Continuar con la profundización y apertura del mercado de capitales, incentivando la función financiera
del país con el mercado internacional.
3.- Participar en los procesos de negociaciones y acuerdos de libre comercio, para favorecer un aumento
del crecimiento económico.
4.- Coordinar los servicios y organismos dependientes del sector hacienda, para obtener un rendimiento
óptimo de l uso de los recursos.
5.- Recaudar las rentas públicas y administrarlas a través de la Tesorería General de la República.
El Art. 6° del D.F.L. N° 7.912 describe en extenso estas y otras funciones de la siguiente manera:
Corresponde al Ministerio de Hacienda:
a.- La dirección de la política financiera del Estado.
b.- La recaudación de las rentas públicas y su administración.
c.- La contabilidad general de la República.
d.- Todo lo relativo a los bienes nacionales y baldíos que no corresponda expresamente a otro Ministerio.
e.- La custodia, registro e inventario de los bienes fiscales.
f.- Lo concerniente a las leyes monetarias, de bancos e instituciones de crédito y la acuñación de
monedas y emisión de especies valoradas.
g.- Lo relativo a la inspección de las sociedades anónimas, bolsas comerciales y comercio de seguros.
h.- Los servicios de crédito popular, casas de martillo y martilleros públicos;
i.- Las tesorerías fiscales y demás oficinas recaudadoras y pagadoras de fondos del Estado;
j.- Todo lo relativo con la minería, salitre, yodo, petróleo, carbón y demás industrias de esta índole;
k.- El Consejo de Defensa Fiscal;
l.- El control superior del pago de las jubilaciones, montepíos y demás pensiones decretadas por los
Ministerios con cargo al Estado. Llevará al día un escalafón de todo el personal jubilado en que se
exprese el monto de las pensiones pagadas parcial o totalmente con fondos fiscales.
m.- El estudio de la política aduanera e intervención en los tratados comerciales.
n.- La alta fiscalización financiera de las Cajas de Previsión, de acuerdo con los Ministerios respectivos.
ñ.- Todo lo relacionado con el crédito público, la presentación al Congreso de los proyectos de
contribuciones y el financiamiento de aquellos que signifiquen gasto para el Estado.
o.- La formación y estudio técnico del Presupuesto de la Nación y de la Cuenta de Inversión, de acuerdo
con el artículo 77 de la Constitución Política del Estado.
Los organismos relacionados son: a.- Dirección de presupuesto. Este organismo técnico es el
encargado de proponer la asignación de los recursos financieros del Estado, orientar y regular el proceso
formulación presupuestaria y regular y supervisar la ejecución del gasto público. b.- Tesorería General de
la República. Institución responsable de los procesos de obtención y manejo de los recursos financieros
públicos y de su posterior distribución y control, de acuerdo con las necesidades de cumplimiento de las
obligaciones públicas. C.- Casa de moneda. Responsable de la fabricación del dinero que circula en
nuestro país.
El marco normativo de estos órganos está dado por los Arts. 110 a 126 de la C.P.R., siendo el
Gobierno Regional y la Municipalidad.
- Los Arts. 111 y siguientes C.P.R. regulan Constitucionalmente, el gobierno y la administración regional.
- Los Arts. 116 y 117 C.P.R. regulan Constitucionalmente el gobierno y la administración provincial.
Gobiernos regionales.
El objetivo que persiguen los Gobiernos Regionales según el Art. 111 Inc. 2° C.P.R. en relación
con el Art. 13 Inc. 1° de la Ley N° 19.175 es el desarrollo social, cultural y económico de la región.
Los órganos que componen el gobierno regional están en el Art. 111 C.P.R. y Art. 22 de la Ley N°
19175, son el intendente y el Consejo Regional. Según el Art. 68 de la misma ley, existe un tercer órgano
que tiene una función administrativa, este es el Servicio Gobierno Regional.
a.- Intendente. El Art. 112 C.P.R. dispone que el intendente presidirá el Consejo Regional y le
corresponderá la coordinación, supervigilancia o fiscalización de los servicios públicos creados por ley
para el cumplimiento de las funciones administrativas que operen en la región. En definitiva el Intendente
b.- Consejo Regional. El Art. 113 C.P.R. en relación con el Art. 28 y 29 de la Ley N° 19175 lo regulan.
Su principal función es aprobar el financiamiento para la ejecución de proyectos. Es presidido por el
Intendente.
1.- Administración de la función pública regionalizada, en franca alusión al Fondo Nacional de Desarrollo
Regional (FNDR).
2.- Reglamentación regional, Letra d) del Art. 16 de la Ley N° 19.175 que prescribe que es una función
general del Gobierno Regional: “Decidir la destinación a proyectos específicos de los recursos de los
programas de inversión sectorial de asignación regional, que contemple anualmente la Ley de
Presupuestos de la Nación”.
4.- Asesoría municipal, en cuanto a los planes y programas de desarrollo. Se encuentran contenidos en la
Letra e) del Art. 16 de la Ley N° 19175.
5.- Emergencia y catástrofe, Letra f) del Art. 16 de la Ley N° 19175. En efecto la disposición en comento
dice que el Gobierno Regional puede “Adoptar las medidas necesarias para enfrentar situaciones de
emergencia o catástrofe, en conformidad a la ley, y desarrollar programas de prevención y protección
ante situaciones de desastre, sin perjuicio de las atribuciones de las autoridades nacionales
competentes”.
2
Recordar la concepción que postula que el Gobierno Regional no es un servicio público, debido a que generalmente no atiende
público.
EL Art. 32 de la Ley N° 19.175 establece las inhabilidades para ser consejero. A mayor
abundamiento el precepto en comento dispone: “No podrán ser consejeros regionales:
a.- Los senadores y diputados.
b.- Los ministros de Estado, los subsecretarios, los intendentes, los gobernadores, los concejales y los
funcionarios públicos de la exclusiva confianza del Presidente de la República o del Intendente
respectivo.
c.- Los funcionarios de la Contraloría General de la República y los miembros del Consejo del Banco
Central.
d.- Los miembros del Poder Judicial, los fiscales del Ministerio Público y los miembros del Tribunal
Constitucional, del Tribunal Calificador de Elecciones y de los Tribunales Electorales Regionales, y los
miembros de las Fuerzas Armadas, Carabineros e Investigaciones.
e.- Las personas que tengan vigente o suscriban, por sí o por terceros, contratos o cauciones
ascendentes a doscientas unidades tributarias mensuales o más, con el respectivo Gobierno Regional.
Tampoco podrán serlo quienes tengan litigios pendientes con el Gobierno Regional, a menos que se
refieran al ejercicio de derechos propios, de su cónyuge, hijos, adoptados o parientes hasta el tercer
grado de consanguinidad y segundo de afinidad inclusive.
Tampoco podrán ser consejeros regionales las personas que se hallen condenadas por crimen o
simple delito”. Estas inhabilidades rigen para ser nombrado Consejero.
El Art. 33 de la misma ley consagra incompatibilidades del cargo de consejero, en efecto el cargo
de consejero regional será incompatible con el de concejal y con el de miembro de los consejos
económicos y sociales provinciales y comunales. Será incompatible, también, con el desempeño de las
funciones públicas señaladas en las letras a), b), c) y d) del artículo anterior, con los de los secretarios
ministeriales y los de directores de servicios regionales, y con todo otro empleo, función o comisión en el
mismo gobierno regional o con cargos en las plantas directivas de las municipalidades. Esta
incompatibilidad rige durante el ejercicio.
Por último existen ciertas inhabilidades sobrevivientes, estas son según el Art. 34 de la ley: a.-
Los consejeros respecto de los cuales se configure una de las situaciones descritas en la letra e) del
artículo 32. b.- Los consejeros que actúen como abogados o mandatarios en cualquier clase de juicio
contra el respectivo gobierno regional.
Los consejeros no son funcionarios públicos, por tanto no se rigen por el estatuto administrativo
(Ley N° 18834). Excepciones a esta regla, son las normas de probidad administrativa y aquellas
atingentes a la responsabilidad civil y penal. Con lo anterior se trata de cautelar la función del consejero
cuando manejan fondos públicos.
Dentro de las funciones del Consejo Regional encontramos: a) Aprobar el reglamento que regule su
funcionamiento, en el que se podrá contemplar la existencia de diversas comisiones de trabajo.
b.- Aprobar los reglamentos regionales.
c.- Aprobar los planes regionales de desarrollo urbano, los planes reguladores metropolitanos y los
planes reguladores intercomunales propuestos por la secretaría regional Ministerial de Vivienda y
Urbanismo.
Aprobar los planes reguladores comunales y los planes seccionales de comunas que no formen parte de
un territorio normado por un plan regulador metropolitano o intercomunal, previamente acordados por las
municipalidades, en conformidad con la ley General de Urbanismo y Construcciones, sobre la base del
informe técnico que deberá emitir la secretaría regional ministerial de Vivienda y Urbanismo respectiva.
No obstante lo anterior, le corresponderá pronunciarse sobre los planes reguladores comunales y los
planes seccionales de comunas que, formando parte de un territorio normado por un plan regulador
metropolitano o intercomunal, hayan sido objeto de un informe técnico desfavorable de la secretaría
regional ministerial de Vivienda y Urbanismo, sólo respecto de aquellos aspectos que hayan sido
objetados en dicho informe.
El consejo regional deberá pronunciarse dentro del plazo de noventa días, contado desde su recepción,
cuando se trate de planes regionales de desarrollo urbano, planes reguladores metropolitanos o
intercomunales. Tratándose de planes reguladores comunales y seccionales, el pronunciamiento deberá
emitirse dentro del plazo de sesenta días. Transcurridos que sean dichos plazos, se entenderá aprobado
el respectivo instrumento de planificación.
d.- Aprobar, modificar o sustituir el plan de desarrollo de la región y el proyecto de presupuesto regional,
así como sus respectivas modificaciones, sobre la base de la proposición del intendente.
e.- Resolver, sobre la base de la proposición del intendente, la distribución de los recursos del Fondo
Nacional de Desarrollo Regional que correspondan a la región, de los recursos de los programas de
inversión sectorial de asignación regional y de los recursos propios que el Gobierno Regional obtenga en
la aplicación de lo dispuesto en el N° 20° del artículo 19 de la Constitución Política de la República.
f.- Aprobar, sobre la base de la proposición del intendente, los convenios de programación que el
gobierno regional celebre.
g.- Fiscalizar el desempeño del intendente regional en su calidad de presidente del consejo y de órgano
ejecutivo del mismo, como también el de las unidades que de él dependan, pudiendo requerir del
intendente la información necesaria al efecto.
h.-Dar su acuerdo al intendente para enajenar o gravar bienes raíces que formen parte del patrimonio del
gobierno regional y respecto de los demás actos de administración en que lo exijan las disposiciones
legales, incluido el otorgamiento de concesiones.
i.- Emitir opinión respecto de las proposiciones de modificación a la división política y administrativa de la
región que formule el gobierno nacional, y otras que le sean solicitadas por los Poderes del Estado.
j.- Ejercer las demás atribuciones necesarias para el ejercicio de las funciones que la ley le encomiende.
El Art. 16 de la misma ley regula las funciones generales del gobierno regional. En efecto el
precepto citado dispone “Serán funciones generales del gobierno regional:
a. Elaborar y aprobar las políticas, planes y programas de desarrollo de la región, así como su proyecto
de presupuesto, los que deberá ajustar a la política nacional de desarrollo y al presupuesto de la Nación.
Para efectos de asegurar la congruencia entre las políticas y planes nacionales y regionales, el Ministerio
de Planificación y Cooperación asistirá técnicamente a cada gobierno regional en la elaboración de los
correspondientes instrumentos, emitiendo, a solicitud del gobierno regional, los informes pertinentes.
b. Resolver la inversión de los recursos que a la región correspondan en la distribución del Fondo
Nacional de Desarrollo Regional y de aquéllos que procedan de acuerdo al artículo 73 de esta ley, en
conformidad con la normativa aplicable.
c. Decidir la destinación a proyectos específicos de los recursos de los programas de inversión sectorial
de asignación regional, que contemple anualmente la Ley de Presupuestos de la Nación.
d. Dictar normas de carácter general para regular las materias de su competencia, con sujeción a las
disposiciones legales y a los decretos supremos reglamentarios, las que estarán sujetas al trámite de
toma de razón por parte de la Contraloría General de la República y se publicarán en el Diario Oficial.
f. Adoptar las medidas necesarias para enfrentar situaciones de emergencia o catástrofe, en conformidad
a la ley, y desarrollar programas de prevención y protección ante situaciones de desastre, sin perjuicio de
las atribuciones de las autoridades nacionales competentes.
g. Participar en acciones de cooperación internacional en la región, dentro de los marcos establecidos por
los tratados y convenios que el Gobierno de Chile celebre al efecto y en conformidad a los
procedimientos regulados en la legislación respectiva.
h. Ejercer las competencias que le sean transferidas de conformidad con lo dispuesto en el artículo 67 de
esta ley.
i. Mantener relación permanente con el gobierno nacional y sus distintos organismos, a fin de armonizar
el ejercicio de sus respectivas funciones”.
j.- Incorporado por la ley N° 20035, estableciendo que la obligación del Gobierno Regional se limita a
financiar.
Otras funciones territoriales consagradas en el Art. 17 de la ley, son Fomentar y velar por la
protección, conservación y mejoramiento del medio ambiente, entre otras.
b.- Participar, en coordinación con las autoridades competentes, en acciones destinadas a facilitar el
acceso de la población de escasos recursos o que viva en lugares aislados, a beneficios y programas en
el ámbito de la salud, educación y cultura, vivienda, seguridad social, deportes y recreación y asistencia
judicial.
c.- Determinar la pertinencia de los proyectos de inversión que sean sometidos a la consideración del
consejo regional, teniendo en cuenta las evaluaciones de impacto ambiental y social que se efectúen en
conformidad a la normativa aplicable.
d.- Distribuir entre las municipalidades de la región los recursos para el financiamiento de beneficios y
programas sociales administrados por éstas, en virtud de las atribuciones que les otorgue la ley.
e.- Realizar estudios relacionados con las condiciones, nivel y calidad de vida de los habitantes de la
región.
f.- Fomentar las expresiones culturales, cautelar el patrimonio histórico, artístico y cultural de la región,
incluidos los monumentos nacionales, y velar por la protección y el desarrollo de las etnias originarias.
El patrimonio del Gobierno regional, este se compone según el Art. 69 de la Ley, de la manera
siguiente:
b.- Los bienes muebles e inmuebles que adquiera legalmente a cualquier título y los frutos de tales
bienes.
c.- Las donaciones, herencias y legados que reciba, de fuentes internas o externas, de acuerdo a la
legislación vigente, las cuales estarán exentas del trámite de insinuación.
d.- Los ingresos que obtenga por los servicios que preste y por los permisos y concesiones que otorgue
respecto de los bienes a que se refiere la letra e) del artículo 70.
f.- Los ingresos que perciba en conformidad al inciso final del número 20° del artículo 19 de la
Constitución Política de la República. En este número se debe agregar otros como multas provenientes
de la Ley N° 19325 (VIF) y la ley N° 20000 (de drogas).
g.- Los recursos que le correspondan en la distribución del Fondo Nacional de Desarrollo Regional.
h.- Las obligaciones que contraiga en el desarrollo de sus actividades, en conformidad a la ley.
i.- Los derechos y obligaciones que adquiera por su participación en las asociaciones a que se refiere el
inciso quinto del artículo 104 de la Constitución Política de la República.
Régimen de bienes. El Art. 70 de la Ley N° 19175 dispone que el régimen de bienes de los
gobiernos regionales estará sujeto a las siguientes disposiciones:
a.- Los bienes destinados a su funcionamiento y los dineros depositados a plazo o en cuenta corriente a
su nombre, serán inembargables.
b.- La adquisición del dominio de los bienes raíces estará sujeta a las normas generales que sobre la
materia rijan para el sector público.
c.- Los bienes inmuebles sólo podrán ser enajenados, gravados, entregados en comodato o arrendados,
en caso de necesidad o utilidad manifiesta. El procedimiento que se seguirá para la enajenación será el
remate o la licitación pública, cuyo valor mínimo no será inferior al avalúo fiscal y sólo podrá ser rebajado
con acuerdo del consejo regional; todo ello en conformidad a lo dispuesto en la letra h) del artículo 36.
d.- La disposición de los bienes muebles dados de baja se efectuará mediante remate público. No
obstante, en casos calificados, el intendente podrá, con acuerdo de los dos tercios del consejo regional,
donar tales bienes o darlos en comodato a instituciones públicas o privadas sin fines de lucro que operen
en la región.
e.- Sus bienes podrán ser objeto de permisos y concesiones de administración, en conformidad a lo
dispuesto en el decreto ley N° 1939, de 1977. Los permisos serán esencialmente precarios y podrán ser
modificados o dejados sin efecto, sin indemnización. Las concesiones darán derecho al uso preferente
del bien concedido, en las condiciones que fije el gobierno regional. Sin embargo, éste podrá darles
término en cualquier momento, cuando sobrevenga un menoscabo o detrimento grave al uso común o
cuando concurran otras razones de interés público. El concesionario tendrá derecho a indemnización en
caso de término anticipado de la concesión, salvo que éste se haya producido por incumplimiento de sus
obligaciones.
Las concesiones se otorgarán previa licitación pública, salvo que las prestaciones o derechos que deba
pagar el concesionario sean de un valor inferior a cien unidades tributarias mensuales, en cuyo caso se
podrá llamar a propuesta privada. En este último evento si no se presentan interesados se podrá
proceder por contratación directa.
f.- El dominio de los bienes inventariables, muebles o inmuebles, que se adquieran o construyan con
recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, se entenderá transferido a las entidades
encargadas de su administración o de la prestación del servicio correspondiente, en los términos del
convenio respectivo, sean públicas o privadas sin fines de lucro, que atiendan servicios de utilidad
pública, desde el momento en que estos bienes sean asignados por el intendente a dichas entidades.
Esta transferencia deberá formalizarse mediante resolución del intendente, que se expedirá en un plazo
no superior a noventa días, contado a partir de la fecha de recepción material de los bienes adquiridos o
del acta de recepción definitiva emitida por la unidad técnica correspondiente, la que deberá reducirse a
escritura pública. Las inscripciones y anotaciones que procedan se efectuarán con el solo mérito de copia
autorizada de dicha escritura.
Tratándose de inmuebles cuya transferencia se disponga a instituciones privadas sin fines de lucro, ella
estará sujeta a la condición de destinar el bien a la atención del respectivo servicio de utilidad pública.
En caso de no cumplirse con dicha condición o disolverse la entidad, previo acuerdo del consejo y
mediante resolución fundada del intendente, tales bienes revertirán al dominio del gobierno regional,
quien deberá transferirlos a otra institución pública o privada. La institución privada beneficiada estará
afecta a la prohibición de gravar y enajenar dicho bien, el que, además, será inembargable.
Las inscripciones y anotaciones que procedan se efectuarán con el solo mérito de copia autorizada de la
escritura pública a que se reduzca la respectiva resolución y los trámites a que ello dé lugar estarán
exentos de todo derecho o arancel.
g.- El gobierno regional podrá transferir el dominio de bienes inmuebles construidos o adquiridos con
recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional a empresas privadas que atiendan servicios de
electrificación rural, telefonía rural y obras sanitarias, mediante convenios directos que contemplen
mecanismos de aporte reembolsable u otro sistema que implique la recuperación total o parcial de la
inversión efectuada.
h.- Sin perjuicio de lo dispuesto en las letras f) y g), mediante decreto fundado, expedido a través del
Ministerio del Interior, determinados bienes se podrán mantener en el patrimonio del gobierno regional, a
petición de éste, la que deberá formularse dentro del término de noventa días a que se refiere la letra f)
de este artículo.
La suscripción de los convenios a que se refiere la letra g) del presente artículo deberá ser aprobada por
la mayoría absoluta de los miembros en ejercicio del consejo regional.
En lo no previsto en este artículo, serán aplicables las normas vigentes sobre adquisición, administración
y disposición de bienes del Estado.
En resumen, los bienes del gobierno regional son inembargables. La adquisición de bienes se
realiza de _____ de todos los servicios públicos y las normas comunes del Código Civil. En caso que el
gobierno regional quiera enajenar bienes inmuebles deberá hacerlo en pública subasta, pero
provisionalmente deberá ser dado de baja y los inmuebles en remate o subasta pública.
Los funcionarios de planta fueron establecidos por la ley N° 19.379 del 3 de abril de 1995 y sus
funcionarios se rigen en el ejercicio de sus funciones por la Ley N° 18834.
Los departamentos de auditoria interna de los gobiernos regionales que se limita a fiscalizar los
actos administrativos y contables de dichos organismos.
Por su parte el Art. 108 de la misma ley, establece una facultad de los particulares para reclamar
de las resoluciones o acuerdos ilegales de los gobiernos regionales.
En la acción de reclamación de los particulares reclaman ante el intendente dentro del plazo de
30 días hábiles contados desde que se dictó el acuerdo o se publicó la resolución. Existe una acción
pública pues puede reclamar cualquier persona agraviada o que se sienta agraviada. En lo demás se rige
por el Art. 108 que expresa “Las resoluciones o acuerdos ilegales de los gobiernos regionales serán
reclamables en conformidad a las reglas siguientes:
a) Cualquier particular podrá reclamar ante el intendente contra las resoluciones o acuerdos que estime
ilegales, cuando éstos afecten el interés general de la región o de sus habitantes. Este reclamo deberá
entablarse dentro del plazo de treinta días hábiles, contado desde la fecha de publicación de la resolución
o desde que se adoptó el acuerdo.
b) El mismo reclamo podrán entablar ante el intendente los particulares agraviados, en los casos y dentro
del plazo señalado en la letra a) precedente, evento en el cual el plazo se computará desde que el
afectado fue notificado de la resolución o del acuerdo.
c) Se considerará rechazado el reclamo si el intendente no se pronunciare dentro del término de quince
días hábiles, contado desde la fecha de su recepción en la intendencia regional respectiva.
d) Rechazado el reclamo, expresa o tácitamente, el afectado podrá reclamar, dentro del plazo de quince
días hábiles, ante la Corte de Apelaciones respectiva. En este caso el plazo se contará, según
corresponda, desde el vencimiento del término indicado en la letra c) precedente, hecho que deberá
certificar el secretario de la intendencia regional respectiva, o desde la notificación, personalmente o por
cédula dejada en el domicilio del reclamante, de la resolución del intendente que rechace el reclamo.
El reclamante señalará en su escrito el acto impugnado, la norma legal que estima infringida, la forma
cómo se ha producido la infracción y, cuando procediere, las razones por las cuales el acto le irroga un
perjuicio.
e) La Corte podrá decretar orden de no innovar cuando la ejecución del acto impugnado pueda producir
un daño irreparable.
f) La Corte dará traslado al intendente por el término de diez días. Evacuado el traslado o teniéndosele
por evacuado en rebeldía, la Corte podrá abrir un término especial de prueba, si así lo estima necesario,
el que se regirá por las reglas establecidas para los incidentes en el Código de Procedimiento Civil.
g) Evacuado el traslado o vencido el término de prueba, en su caso, se remitirán los autos al fiscal judicial
para su informe y a continuación se ordenará conocer de éstos en cuenta.
h) Si la Corte da lugar al reclamo, en su sentencia decidirá u ordenará, según sea procedente, la
anulación total o parcial del acto impugnado; dictará la resolución que corresponda para reemplazar la
resolución o acuerdo anulado; declarará si ha o no lugar a la indemnización de perjuicios, cuando se
hubiere solicitado, y dispondrá el envío de los antecedentes al Ministerio Público, cuando estimare que la
infracción pudiere ser constitutiva de delito.
i) Cuando se hubiere dado lugar al reclamo, el interesado podrá presentarse a los tribunales ordinarios de
justicia para demandar, conforme a las reglas del juicio sumario, la indemnización de los perjuicios si
procediere. Asimismo, podrá recurrir ante el Ministerio Público para solicitar la investigación criminal que
correspondiere en conformidad a las normas procesales respectivas. En ambos casos no podrá discutirse
la ilegalidad ya declarada.
En contra de la sentencia definitiva dictada por la Corte de Apelaciones no procederá el recurso de
casación”.
Municipalidades.
El Art. 118 Inc. 4° C.P.R. y el Art. 1° Inc. 2° de la Ley N° 18695 las regulan. El último de estos
preceptos las define como “corporaciones autónomas de derecho público, con personalidad jurídica y
patrimonio propio, cuya finalidad es satisfacer las necesidades de la comunidad local y asegurar su
participación en el progreso económico, social y cultural de las respectivas comunas”. Según el inciso
primero del Art. 1° de la Ley N° 18695, puede haber una municipalidad de comuna o agrupación de
comunas. Esto último es letra muerta ya que no ha habido jamás una municipalidad de agrupación de
comunas.
Según don Rolando Patoja Bauzá las municipalidades son órganos acentralizados o autónomos
constitucionalmente. Funda su opinión en no dependen del Presidente de la República y además tienen
un origen Constitucional lo cual le da cierta autonomía. También se avala en un fallo de 22 de septiembre
de 1988, autos Rol N° 80 del Tribunal Constitucional. Por su parte el dictamen N° 18.646 de 1992 dice
que las municipalidades están sometidas a la dependencia jerárquica del Presidente de la República.
El Art. 118 Inc. 1° C.P.R. y el Art. 2° de la Ley N° 18695, dice que se compone por el Alcalde y
por el Consejo. Además según el Art. 94 de la Ley N° 18695, se agrega el Consejo económico, social
comunal. El Art. 15 Inc. 2° de la Ley Orgánica N° 18695 establece un sistema de departamentos de
organización interna de la municipalidad. En efecto el precepto citado dispone Para los efectos anteriores,
las municipalidades dispondrán de una Secretaría Municipal, de una Secretaría Comunal de Planificación
y de otras unidades encargadas del cumplimiento de funciones de prestación de servicios y de
administración interna, relacionadas con el desarrollo comunitario, obras municipales, aseo y ornato,
tránsito y transporte públicos, administración y finanzas, asesoría jurídica y control. Dichas unidades sólo
podrán recibir la denominación de Dirección, Departamento, Sección u Oficina.
n.- Convocar y presidir, con derecho a voto, el concejo; como asimismo, convocar y presidir el consejo
económico y social comunal.
ñ.- Someter a plebiscito las materias de administración local, de acuerdo a lo establecido en los artículos
99 y siguientes.
o.- Autorizar la circulación de los vehículos municipales fuera de los días y horas de trabajo, para el
cumplimiento de las funciones inherentes a la municipalidad.
p.- Remitir oportunamente a la Contraloría General de la República un ejemplar de la declaración de
intereses, exigida por el artículo 61 de la ley N° 18.575.
El alcalde será elegido por sufragio universal, en votación conjunta y cédula separada de la de
concejales, en conformidad con lo establecido en esta ley. Su mandato durará cuatro años y podrá ser
reelegido. Para ser candidato a alcalde se deberá acreditar haber cursado la enseñanza media o su
equivalente y cumplir con los demás requisitos señalados en el artículo 73 de la presente ley. La Ley
19958 de 17 de julio de 2004 introdujo el requisito educacional, pues antes el alcalde podía ser
analfabeto. El Art. 73 agrega los siguientes requisitos:
a.- Ser ciudadano con derecho a sufragio.
b.- Saber leer y escribir.
c.- Tener residencia en la región a que pertenezca la respectiva comuna o agrupación de comunas,
según corresponda, a lo menos durante los últimos dos años anteriores a la elección.
d.- Tener su situación militar al día.
e.- No estar afecto a alguna de las inhabilidades que establece esta ley.
La más importante es ser jefe superior del servicio público denominado municipalidad.
Concejo Municipal.
Este organismo tiene facultades normativas, fiscalizadoras y resolutivas y son los encargados de
hacer efectiva la participación de la comunidad Art. 71 de la ley. Además ejercen las atribuciones
otorgadas por la ley.
Según el Art. 72 de la Ley N° 18695 los concejos estarán integrados por concejales elegidos por
votación directa mediante un sistema de representación proporcional, en conformidad con esta ley.
Durarán cuatro años en sus cargos y podrán ser reelegidos.
Los órganos principales del municipio son dos: 1.- El alcalde. 2.- El concejo comunal. Dos
órganos relacionados, el primero es el concejo económico y social comunal compuesto por
representantes de la comunidad organizada. Su función es asesorar a la municipalidad y tienen por
Son las actividades que los municipios están llamados a desarrollar por mandato de la
Constitución o de la ley. Estas funciones pueden ser de tres tipos:
1.- Privativas. Que sólo el municipio puede realizar. Según el dictamen N° 18.127 de 1988 son funciones
privativas aquellas que las municipalidades ejercen con plena autonomía dentro del ámbito jurisdiccional
y que por lo tanto sólo compete a ellos desarrollar. Las funciones privativas se encuentran establecidas
en el Art. 3° de la Ley N° 18695 y se pueden resumir en las siguientes: a.- Elaborar, aprobar y modificar
el plan comunal de desarrollo cuya aplicación deberá armonizar con los planes regionales y nacionales.
b.- La planificación y regulación de la comuna y la confección del plan regulador comunal, de acuerdo con
las normas legales vigentes. c.- La promoción del desarrollo comunitario. d.- Aplicar las disposiciones
sobre transporte y tránsito públicos, dentro de la comuna, en la forma que determinen las leyes y las
normas técnicas de carácter general que dicte el ministerio respectivo. e.- Aplicar las disposiciones sobre
construcción y urbanización, en la forma que determinen las leyes, sujetándose a las normas técnicas de
carácter general que dicte el ministerio respectivo. f.- El aseo y ornato de la comuna.
2.- Asumidas. No están asumidas expresamente en la ley. 3.- Compartidas. Son aquellas que los
municipios comparten con otros servicios. Tanto las funciones asumidas y las compartidas se encuentran
reguladas en el Art. 4° de la ley N° 18.695. Al establecer estar funciones con un carácter genérico, las
hace extensiva tanto a las municipalidades como a otros órganos de la administración del Estado.
“Para el cumplimiento de sus funciones las municipalidades tendrán las siguientes atribuciones
esenciales:
a.- Ejecutar el plan comunal de desarrollo y los programas necesarios para su cumplimiento.
b.- Elaborar, aprobar, modificar y ejecutar el presupuesto municipal.
c.- Administrar los bienes municipales y nacionales de uso público, incluido su subsuelo, existentes en la
comuna, salvo que, en atención a su naturaleza o fines y de conformidad a la ley, la administración de
estos últimos corresponda a otros órganos de la Administración del Estado. En ejercicio de esta
atribución, les corresponderá, previo informe del consejo económico y social de la comuna, asignar y
cambiar la denominación de tales bienes. Asimismo, con el acuerdo de los dos tercios de los concejales
en ejercicio, podrá hacer uso de esta atribución respecto de poblaciones, barrios y conjuntos
habitacionales, en el territorio bajo su administración.
d.- Dictar resoluciones obligatorias con carácter general o particular.
e.- Establecer derechos por los servicios que presten y por los permisos y concesiones que otorguen.
f.- Adquirir y enajenar, bienes muebles e inmuebles.
g.- Otorgar subvenciones y aportes para fines específicos a personas jurídicas de carácter público o
privado, sin fines de lucro, que colaboren directamente en el cumplimiento de sus funciones. Estas
subvenciones y aportes no podrán exceder, en conjunto, al siete por ciento del presupuesto municipal.
Este límite no incluye a las subvenciones y aportes que las municipalidades destinen a las actividades de
educación, de salud o de atención de menores que les hayan sido traspasadas en virtud de lo establecido
en el decreto con fuerza de ley Nº 1 (3.063), de Interior, de 1980, cualesquiera sea su forma de
administración, ni las destinadas a los Cuerpos de Bomberos. Asimismo, este límite no incluye a las
subvenciones o aportes que las Municipalidades de Santiago, Providencia y Las Condes efectúen a la
Las resoluciones municipales son actos además por regla general, medios a través de los cuales
el municipio expresa su voluntad y su decisión, con fuerza ejecutoria propia. Estas resoluciones pueden
ser de 4 clases según lo preceptúa el Art. 12 de la Ley N° 18.695. Estas son: a.- Ordenanzas. Las
ordenanzas serán normas generales y obligatorias aplicables a la comunidad. En ellas podrán
establecerse multas para los infractores, cuyo monto no excederá de cinco unidades tributarias
mensuales, las que serán aplicadas por los juzgados de policía local correspondientes. b.- Reglamentos.
Los reglamentos municipales serán normas generales obligatorias y permanentes, relativas a materias de
orden interno de la municipalidad. c.- Decretos alcaldicios. Los decretos alcaldicios serán resoluciones
que versen sobre casos particulares. d.- Circulares o instrucciones. Las instrucciones serán directivas
impartidas a los subalternos. Tienen obligatoriedad respecto de ellos.
Los 4 tipos de resoluciones se generan en el jefe del servicio, o sea el alcalde, sin perjuicio de las
disposiciones que realizar el administrador municipal, es decir, el asesor jurídico.
La gestión municipal contará, a lo menos, con los siguientes instrumentos: a.- El plan comunal de
desarrollo y sus programas. b.- El plan regulador comunal, y c.- El presupuesto municipal anual. Lo
anterior de acuerdo al Art. 6° de la ley N° 18.695.
El municipio puede administrar los bienes nacionales de uso público en virtud del Art. 5° Letra c)
de la Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades. El municipio administra dos tipos de bienes: a.-
Bienes propios, respecto de los cuales tiene plena administración para usar. Gozar y disponer. b.- Bienes
nacionales de uso público, incluido el subsuelo, el municipio no puede disponer libremente, o sea tiene
una limitación de enajenar.
¿Quién fiscaliza los actos del municipio? Los fiscaliza en su totalidad la Contraloría General de la
República, en virtud de lo dispuesto en los Arts. 98 y 99 de la C.P.R. en relación con el Art. 1° de la Ley
Orgánica Constitucional sobre Bases Generales de la Administración del Estado N° 18575.
El control de legalidad efectuado por la Contraloría tiene su particularidad otorgada por el Art. 53
de la Ley N° 18695. En efecto no existe control a priori, sino únicamente a posteriori respecto de
resoluciones municipales que afecten a funcionarios municipales debiendo someterse al trámite de
registro. La disposición en comento expresa “Las resoluciones que dicten las municipalidades estarán
exentas del trámite de toma de razón, pero deberán registrarse en la Contraloría General de la República
cuando afecten a funcionarios municipales.
Para tal objeto, la Contraloría deberá llevar un registro del personal municipal en la forma y
condiciones en que lo hace para el resto del sector público, debiendo las municipalidades remitir los
antecedentes que aquélla solicite”. En la práctica el control a posteriori, se realiza en el trámite de registro
sobre estas resoluciones. Respecto de los demás actos quedan sometidos a la fiscalización que decida la
Contraloría.
Con el objeto de fiscalizar actos de los municipios no afectos a trámite de registro, la Contraloría
pidió a os municipios que publicaran las resoluciones a forma de conocimiento. Así el dictamen N° 46.563
del 2004 y el oficio N° 725 de 14 de febrero de 2008, actualmente no existe una forma de conocimiento.
Previamente debemos conceptualizar que se debe entender por función pública. Doña Silvia
Chamorro en su memoria de grado denominada “Probidad administrativa” de 1999 dice que la función
pública es la actividad que desarrollan los órganos del Estado en la consecución de sus fines, vale decir,
ella representa la actividad que debe desarrollar el agente público. Esta definición incorpora la noción de
agente público, que es más amplio, pues se trata de las personas que se desempeñan en un cargo
público a contrata o de planta. La doctrina y la jurisprudencia agregan a aquellas personas que trabajan a
honorarios.
En sentido restringido don Enrique Silva Cimma en su libro “Derecho Administrativo Chileno y
Comparado” de 1993 dice que es la actividad que desarrolla la dotación o elemento humano de la
administración del Estado para poner en funcionamiento el servicio público.
a.- Ámbito de la función pública. Debe desarrollarse conforme al principio de legalidad y competencia, se
desprenden del Art. 6° y 7° de la C.P.R. Surge de la infracción a las normas recién citadas la denominada
nulidad de derecho público. Se ha discutido respecto de la naturaleza de esta acción de nulidad. Algunos
estiman que las causales de esta acción son de derecho estricto, por tanto sólo puede demandarse por
no cumplir con lo dispuesto en el Art. 7° de la C.P.R. La minoría de los autores estiman que se puede
pedir la nulidad de un acto público por cualquier infracción de la ley.
b.- Desde el punto de vista del ejercicio. Se caracteriza porque impone a quien ejercita la función pública
el deber de dedicación exclusiva al cargo. Así el Art. 61 Letra a) del Estatuto Administrativo que dispone
serán obligaciones de cada funcionario: Desempeñar personalmente las funciones del cargo en forma
regular y continua, sin perjuicio de las normas sobre delegación. En este sentido se encuentra el
dictamen N° 75.893 de 1967 que establece que las funciones de un empleado son indelegables lo que
implica la obligación de desempeñarlo personalmente, sin que es esté permitido delegar la función
propiamente tal o concurrir representado por otra persona para el ejercicio de determinados actos que
dicha función supone. Lo anterior tiene su excepción en la autorización expresa que puede dar la ley. El
dictamen 38.595 de 1969 dijo que una persona ajena al servicio público no puede ejercitar ningún acto
propio de las funciones de su dotación.
Naturaleza jurídica del vínculo que une al Estado con el funcionario público.
Se puede decir que es un vínculo estatutario, lo que significa que es un vínculo legal y de
derecho público. Es legal porque tiene su origen en la ley y en un convenio o contrato celebrado entre el
Estado y el funcionario. El dictamen N° 15.412 de 1984 dice que es un vínculo jurídico que une al
funcionario con el Estado y que nace con el nombramiento, sin ser de naturaleza contractual, sino legal y
reglamentaria, por lo que no cabe aplicar las disposiciones que se refieren a los contratos, sean civiles,
laborales. Excepcionalmente existen ciertas normas sobre fuero maternal y permiso paternal. Es de
derecho público porque en su regulación predomina el interés general orientado al bien común por sobre
el interés particular.
Las consecuencias de que el vínculo que une al Estado con el funcionario sea estatutario, es que
las normas que regulan la actividad de los funcionarios públicos tienen características especiales que los
distinguen de normas generales como por ejemplo las normas del Código del trabajo. Las principales
características de las normas estatutarias son: a.- Son generales e impersonales. Que sean generales
significa que el legislador las ha dispuesto a priori, y que sean impersonales significa que el legislador
elabora estas normas estatutarias de manera indiscriminada. b.- Son obligatorias. Todos los funcionarios
que ingresan a la administración sólo les queda acatar sin poder exigir que se modifiquen. c.- La
autoridad puede modificar estas normas estatutarias en forma unilateral, cuando razones de interés
público así lo requieran. Las limitaciones establecidas para lo anterior son: 1.- Que esas modificaciones
se impongan siempre por ley. 2.- Que esas modificaciones no afecten derechos irrenunciables del
funcionario, como por ejemplo el derecho de propiedad sobre su remuneración, según algunos.
Según Enrique Silva Cimma los principios son un conjunto de ideas matrices que contiene el
estatuto administrativo que regula la actividad de los agentes del Estado.
Estas ideas no significan que estén señaladas en algún artículo determinado del Estatuto
Administrativo. Generalmente se encuentran en la Constitución Política de la República de Chile o en la
Ley Orgánica Constitucional sobre Bases Generales de la Administración del Estado N° 18.575. Estos
principios son: 1.- Principio de la jerarquía. 2.- Principio de la participación. 3.- Principio de la carrera
funcionaria. 4.- Principio de la probidad administrativa. 5.- Principio retributivo. 6.- Principio de la
responsabilidad funcionaria.
1.- Principio de la jerarquía. La jerarquía es la relación de superior a inferior que existe entre dos
órganos o personas. Se pueden distinguir dos aspectos, uno orgánico y otro funcionario. La jerarquía
orgánica consiste en la relación existente entre el superior e inferior que se originan entre órganos de la
administración del Estado. Esta noción se encuentra recogida por el Art. 24 C.P.R. según el cual el
gobierno y la administración se encuentran entregados al Presidente de la República.
En el mismo sentido se encuentran los Arts. 1°, 22, 28 y 29 Incs. 2° y 3° de la Ley N° 18.575
sobre Bases Generales de la Administración del Estado. Se distingue entre órganos centralizados y
órganos descentralizados, los primeros están bajo la dependencia del Presidente de la República,
mientras los descentralizados se encuentran sólo sometidos a la supervigilancia del Presidente de la
República a través del ministerio respectivo.
La jerarquía funcionaria se entiende como la relación entre superior e inferior que existe entre las
autoridades y funcionarios públicos. Los Arts. 7° y 31 de la LOCBGAE y los Arts. 61 Letra f) y 62 de la
Ley N° 18.834 (EA). Se entregan las siguientes facultades al superior: a.- Potestad de mando. b.-
Potestad disciplinaria. c.- Jurisdicción retenida. d.- Jurisdicción de conflictos. Todo lo anterior parte de un
supuesto fundamental, cual es, la organización o estructura piramidal de la administración del Estado. Se
comprenden tanto a las autoridades y empleados Art. 32 Inc. 2° LOCBGAE. Según el Art. 5° de la Ley
18834, se comprenden en tal denominación a los funcionarios de planta y a contrata.
a.- Art. 64 Ley N° 18834, que establece las obligaciones especiales de las autoridades y jefaturas: a)
Ejercer un control jerárquico permanente del funcionamiento de los órganos y de la actuación del
personal de su dependencia, extendiéndose dicho control tanto a la eficiencia y eficacia en el
cumplimiento de los fines establecidos, como a la legalidad y oportunidad de las actuaciones.
b.- Art. 129 Inc. 1° Ley N° 18834, dispone que “El sumario administrativo se ordenará por el jefe superior
de la institución, el Secretario Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según corresponda, mediante resolución, en el cual designará al fiscal que estará a
cargo del mismo. El fiscal deberá tener igual o mayor grado o jerarquía que el funcionario que aparezca
involucrado en los hechos”.
c.- Art. 35 Ley N° 18834, dispone que “La Junta Calificadora será presidida por el funcionario de más alto
nivel jerárquico que la integre. En caso de impedimento de algún miembro de la Junta, ésta será
integrada por el funcionario que siga el orden a que se refiere el artículo anterior”. En consecuencia,
tienen los superiores jerárquicos derecho a integrar las juntas calificadoras.
2.- Principio de la participación. Se pretende que los funcionarios colaboren con la gestión
administrativa de los servicios del cual forman parte. Así se desprende del Art. 1° Inc. Final C.P.R. Es
deber del Estado resguardar la seguridad nacional, dar protección a la población y a la familia, propender
al fortalecimiento de ésta, promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación y
asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional. El
Art. 35 Inc. 4° de la Ley N° 18.834, es un reflejo de este principio, pues deberá haber un representante de
los funcionarios en la junta calificadora.
3.- Principio de la carrera funcionaria. Fluye del Art. 3° de la Ley N° 18834, según el cual “Es un
sistema integral de regulación del empleo público, aplicable al personal titular de planta, fundado en
principios jerárquicos, profesionales y técnicos, que garantiza la igualdad de oportunidades para el
ingreso, la dignidad de la función pública, la capacitación y el ascenso, la estabilidad en el empleo, y la
objetividad en las calificaciones en función del mérito y de la antigüedad”.
a.- Es un sistema integral de regulación del empleo, es decir, debe constituir un conjunto armónico de
disposiciones que se vinculan entre sí. Además debe comprender las principales etapas del empleo,
ingresos, derechos, deberes, responsabilidad y término de funciones.
b.- Sólo rige para el personal de planta. Lo anterior en virtud del Art. 6° del Estatuto Administrativo,
excluyendo a los funcionarios de exclusiva confianza que no obstante ser de planta se mantienen en su
cargo hasta que se mantiene su confianza. También se excluyen los contratados a honorarios y a
contrata.
d.- Sus objetivos son la igualdad de oportunidades para el ingreso, dignidad de la función pública,
capacitación, ascenso, estabilidad en el empleo y objetividad en las calificaciones.
4.- Principio de la probidad administrativa. Consagrada en el Título III de la Ley N° 18575 denominado
“De la probidad administrativa”. El principio de la probidad administrativa consiste en observar una
conducta funcionaria intachable y un desempeño honesto y leal de la función o cargo, con preeminencia
del interés general sobre el particular. Es incorporado por la Ley N° 19653. Encontramos sus
fundamentos en los Arts. 3° Inc. 2°, 13 Inc. 1° y 52 Inc. 2° de la Ley N° 18575.
a.- Conducta funcionaria intachable y desempeño honesto y leal. Dictamen N° 1.473 de 1998 estableció
que significa el principio de probidad administrativa. El dictamen N° 46.238 de 1980, por su parte
estableció que se trata de un principio básico, que obliga no sólo a los empleados regidos por el Estatuto
Administrativo, sino que a otros (A contrata y a honorarios).
b.- Integridad moral en el obrar de una persona. Convicción moral en el desempeño de su actividad, se
mezclan el derecho y la moral.
c.- Sujetos obligados. Según el Art. 52 Inc. Inc. 2° obliga a todos quienes desempeñan una función o
cargo. De acuerdo al Art. 3° Letra a) del Estatuto Administrativo, afecta a funcionarios de planta o a
contrata.
Según la Comisión Nacional de Ética Pública comprende a quienes laboren para el Estado, en
cualquier ámbito de la administración.
Agentes públicos son todos aquellos que ejercen una función del Estado, se trate de un
funcionario público propiamente tal, autoridad o empleado. En consecuencia, el principio de probidad, no
sólo obliga a los funcionarios públicos, sino a otros que prestan servicios en la administración del Estado.
Lo anterior lo ratifica el dictamen N° 7.266 de 2005, que incluye a quienes se encuentran contratados a
honorarios.
d.- Preeminencia del interés general por sobre el particular. Se entiende por intereses particulares a los
vinculados con los fines individuales de cada sujeto y de contenido eminentemente patrimonial. Por su
parte el interés general apunta a la satisfacción de las aspiraciones de la comunidad toda.
Por regla general el funcionario tiene incompatibilidad con cualquier otra función, salvo labores
académicas y hasta por 12 horas a la semana, pudiendo ser autorizado por el director del servicio para
realizarlas dentro de la jornada ordinaria de trabajo.
5.- Principio retributivo. Consiste en que el ejercicio de la función pública debe ser remunerada, es
decir, debe existir una retribución pecuniaria. Lo anterior es un reflejo de la prohibición que pesa sobre el
Estado de enriquecerse sin causa. Así el Art. 93 EA dispone que “Los funcionarios tendrán derecho a
percibir por sus servicios las remuneraciones y demás asignaciones adicionales que establezca la ley, en
forma regular y completa”. El dictamen N° 17.846 de 1996 dijo que el principio del enriquecimiento sin
causa impide a la administración beneficiarse por la labor de un funcionario público sin pagarle
remuneración. El Art. 3° letra d) del EA dispone que sueldo es la retribución pecuniaria, de carácter fijo y
por períodos iguales, asignada a un empleo público de acuerdo con el nivel o grado en que se encuentra
clasificado. Por su parte el Art. 3° letra e) establece que remuneración es cualquier contraprestación en
dinero que el funcionario tenga derecho a percibir en razón de su empleo o función, como, por ejemplo,
sueldo, asignación de zona, asignación profesional y otras. Entre ambas existe una relación de género a
especie.
Características de la remuneración:
a.- Es un deber inexcusable del Estado. Así el dictamen 20.287 de 1996 estableció que no es admisible
invocar falta de recursos presupuestarios como excusa para dejar de pagar una remuneración.
b.- Sólo se pagan reajustadas cuando una ley así lo dispone. Lo anterior, se encuentra reafirmado por el
dictamen N° 9.603 de 1999 que en lo pertinente dice que tratándose de obligaciones de dinero cuyo título
directo es la ley su pago debe atenerse a lo que la ley disponga, de modo que si este no contempla
normas expresas sobre si actualización o pago de los intereses corresponde pagarlos en sus valores
originarios, ello como consecuencia del principio de legalidad.
c.- No pueden pagarse anticipadamente. El Art. 97 del EA, establece esta característica, salvo para el
pago del viático, que si puede ser pagado con anterioridad. Así el dictamen 6.053 de 1990 estableció que
los servicios del Estado no pueden conceder anticipos de remuneraciones, porque es requisito esencial
para que se devengue la remuneración que previamente el trabajador haya prestado los servicios
correspondientes.
d.- Son embargables, hasta el 50%. Según el Art. 95 del EA, estos pueden ser embargados hasta en un
50%, en el resto son inembargables.
e.- Son irrenunciables antes de que se devenguen. Lo anterior lo ratifica el dictamen N° 42.095 de 1996
que señala las asignaciones alternativas o sueldos, así como los demás derechos económicos del
personal de la administración son irrenunciables porque están establecidos en razón del interés público y
no mirar el interés individual del renunciante. No obstante si bien no procede la renuncia anticipada, nada
obsta a que se renuncien una vez devengados.
6.- Principio de la responsabilidad. Consiste en el deber que les asiste a los agentes del Estado de
responder cuando infrinjan obligaciones o prohibiciones que les impongan sus normas estatutarias. Lo
anterior se encuentra establecido en el Art. 18 de la LOCBGAE, que dispone “El personal de la
Administración del Estado estará sujeto a responsabilidad administrativa, sin perjuicio de la
responsabilidad civil y penal que pueda afectarle”. En el mismo sentido se encuentra el Art. 19 Inc. 2° de
la LOCBGAE.
Características de la responsabilidad:
a.- Pluralidad de responsabilidades que nacen de un mismo hecho. Así fluye del citado Art. 18 Inc. 1°
de la LOCBGAE. Lo anterior, quiere decir, que de un mismo hecho constitutivo de una falta
administrativa, puede estar tipificado como delito y además irrogar perjuicio a la persona o propiedad de
otro. En el mismo sentido se encuentra el Art. 120 del Estatuto Administrativo que dispone “La sanción
administrativa es independiente de la responsabilidad civil y penal y, en consecuencia, las actuaciones o
resoluciones referidas a ésta, tales como el archivo provisional, la aplicación del principio de oportunidad,
la suspensión condicional del procedimiento, los acuerdos reparatorios, la condena, el sobreseimiento o
la absolución judicial no excluyen la posibilidad de aplicar al funcionario una medida disciplinaria en razón
de los mismos hechos. Si se le sancionare con la medida de destitución como consecuencia exclusiva de
hechos que revisten caracteres de delito y en el proceso criminal hubiere sido absuelto o sobreseído
definitivamente por no constituir delito los hechos denunciados, el funcionario deberá ser reincorporado a
la institución en el cargo que desempeñaba a la fecha de la destitución o en otro de igual jerarquía. En
este caso conservará todos sus derechos y beneficios legales y previsionales, como si hubiere estado en
actividad”. Sin perjuicio de que este último precepto se refiere a la característica siguiente de la
independencia de la responsabilidad, alude a la pluralidad indirectamente.
b.- Independencia de la responsabilidad. Esto queda reflejado de lo dispuesto por el Art. 120 del
Estatuto Administrativo transcrito precedentemente. Podemos decir, que la condena o absolución en
materia civil o penal, por regla general, no impide aplicar por el mismo hecho una medida disciplinaria.
Hace excepción a lo anterior, lo prescrito en el Art. 120 Inc. 1° del Estatuto Administrativo, pues en
aquellos casos en que el funcionario es absuelto o sobreseído por no ser constitutivo de delito los hechos
investigados, y se le aplica la medida disciplinaria de destitución por ese sólo hecho, deberá ser
reincorporado.
La responsabilidad civil procede en aquellos casos en que el funcionario con su conducta causa
un daño al patrimonio del Estado o de un tercero. Del daño al fisco conoce la propia administración a
través de la Contraloría General de la República, en virtud del denominado juicio de cuentas. Del daño
provocado por un tercero conoce la justicia ordinaria generalmente a través del juicio ordinario de mayor
cuantía. La sanción es de carácter pecuniario o patrimonial.
c.- Derecho a un racional y justo procedimiento. Así lo establece el Art. 18 Inc. 2° de la LOCBGAE
que establece “En el ejercicio de la potestad disciplinaria se asegurará el derecho a un racional y justo
procedimiento”. Debe cumplir con dos aspectos básicos: 1.- Existir formulación de cargos, requisito
establecido en el Art. 140 Inc. 3° del Estatuto Administrativo. 2.- Derecho a defensa, establecido por el
Art. 138 Inc. 1° de la misma ley. Debe tenerse en cuenta además lo preceptuado en el Art. 19 N° 3 Inc. 5°
C.P.R.
e.- Prescripción de la responsabilidad administrativa. Establecida en el Art. 157 Letra d) y 158 del
Estatuto Administrativo. El primero de los preceptos dispone que “La responsabilidad administrativa del
funcionario se extingue: d) Por la prescripción de la acción disciplinaria”. El segundo en tanto establece
que “La acción disciplinaria de la Administración contra el funcionario, prescribirá en cuatro años
contados desde el día en que éste hubiere incurrido en la acción u omisión que le da origen. No obstante,
si hubieren hechos constitutivos de delito la acción disciplinaria prescribirá conjuntamente con la acción
penal”.