En la tierra de Mara, Sevilla te coron como Reina de los cielos, de la tierra y del amor.
Mi Virgencita del Cobre,
Que fuiste siempre mi amiga; Cuando rica, cuando pobre; Que velaste mis amores Y aliviaste mis dolores A t mi alma estremecida, En el curso de la vida Por siempre fiel te adoraba, Y hoy te imploro conmovida Que no te apartes de m Cuando ya mi frente helada Reclame el beso postrero, Y estn siempre junto a t Los hijos que tanto quiero Y tambin te aman a t.
Madre de los sevillanos,
Esperanza y corazn, Virgen de ternura llena, de dulzura y de dolor. Virgen hermosa, flor del Carmelo, Madre a quien amo con frenes, Mi nica dicha sobre este suelo Llvame, Madre, llvame al cielo! Que estar no puedo lejos de ti. No tengas pena, Seora, que tus hijos que te adoran, quieren ver sobre tu cara esa sonrisa dorada y alegrarte el corazn, dicindote Macarena, Madre, Esperanza y Amor, Virgen de los sevillanos, Rosa, Clavel y Azucena, Lirio, Nardo y Resplandor, Virgen de la Macarena, Madre Divina de Dios. Mi Virgencita adorada Que te llevo sobre el pecho Desde que al mundo llegu,
Virgen hermosa, flor del
Carmelo, Madre a quien amo con frenes, Mi nica dicha sobre este suelo Llvame, Madre, llvame al cielo! Que estar no puedo lejos de ti. Aunque traidores mil lazos me armen Y arrebatarme quieren mi fe, Y con sus gritos fieros me alarmen, Bajo tu manto, Virgen de la Macarena, Bajo tu manto no temer.