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PAUL mesa es ARBOLES EN MINTATURA INDICE DE MATERIAS Prélogo {Qué es un Bonsai Introduccion e historia Diferentes formas de Bonsai Atboles individuales Atboles de varios troncos y grupos de rboles Formas que se pueden plantar solas 0 en grupos Bosques de Bonsai Formas sobre roca Modelado de formas sobre roca Saikei-Paisajes en miniatura Bonsai en miniatura Realizacién de una forma Moyogi Cultivo de Bonsai Bonsai de semillas Bonsai a partir de esquejes Bonsai por medio de acodo enterrado Bonsai por medio de recoleccién Injertos Injerto lateral o de costado Injerto de corteza 0 de cua Injerto de cufia Injerto de escudete Injerto de aproximacién Consejos generales ‘Acodo aéreo con musgo Educacién de Bonsai jévenes mM 2 12 16 16 18 24 34 46 50 52 58 58 62 62 65 66 66 67 68 69 70 Educacién de una forma Moyogi a partir de un plantel Educacién de una forma de escoba a partir de una planta joven Bonsai obtenido de viveros forestales Educacién de Bonsai Recipientes para plantas La poda Supresi6n de ramas Pinzado y poda de modela Corte de hojas Engrosamiento del tronco y de las ramas Envejecimiento artificial Mezelas de tierra Alambrado y otras técnicas de educacién Compra de Bonsai Rasgos que determinan la calidad de un buen Bonsai Cuidados de un Bonsai Poda de raices Plantado y trasplantado Musgo y otras plantas cubridoras Riego Abonado Situacién Invernada Herramientas para Bonsai Enfermedades y parisitos n n 14 104 106 127 127 127 132 134 136 141 144 146 150 SS Bonsai chino 158 Formas 179 Bonsai de interior 161 Tabla de las macetas y sus correspondientes ‘ formas del arbol 180 Especies de Bonsai para «interior» 176 Tabla de especies con su cultivo Plantas de invernadero frio 176 y educacion 182 Plantas tropicales 176 Formas y hojas de los arboles mas corrientes 190 ‘Términos japoneses més importantes 176 Calendario de trabajo 194 Indice de nombres de plantas Asociaciones internacionales de Bonsai 197 espanol-japonés 178 Indice de ilustraciones 199 4 zQUE ES UN BONSAI? Introduccién e historia Un Bonsai es un arbol o arbusto que se cultiva en un recipiente. Raras veces sobrepasa una altura de 70 cm; asi y todo nos da la impresién de que estamos viendo un rbol, tal y como se ven en la naturaleza. ‘Traducido literalmente Bonsai significa: Bon, bande- jjaocuenco, y Sai, arbol o planta, o sea «rbol planta- do en un cuenco». El Bonsai es un arbol en miniatu- a, que se cultiva en un cuenco y se asemeja al de tamaiio natural. En sus paises de origen, en el Extre- mo Oriente, se le considera una expresion de la armo- niaentre cieloy tierra, entre hombres y naturaleza. El trasfondo espiritual del Bonsai hay que buscarlo pues en a filosofia de la vida oriental. La mentalidad asia- tica aspira a esta armonia entre hombre y naturaleza, a través de una identificacién con el proceso comple- to del crecer y devenir. Los Bonea que vemcs en prime plana de este antguoroousvado ono os Toran Talamasa Fara 2 Para ello, ghay mejor ejemplo que el cultivo de Bonsai? El amante del Bonsai se toma tiempo para el cuida- do y la contemplacién de sus arbolitos. Con ellos experimenta el ritmo de las estaciones y desarrolla su creatividad para la formacién y modelado de dichos arbolitos. Relajacién, descanso y un equilibrio men- tal compensan por todo el acopio de tiempo y cuida- dos que requiere el Bonsai. {Quién no se entusiasma con estos valiosos arboli- tos que, cultivados en cuencos, se asemejan en todo, ‘menos en tamafo, a los arboles naturales? Por su- puesto, la realizacidn y los cuidados de un Bonsai requieren un poco de habilidad. Pero el que tenga buenas manos para las plantas podra disfrutar mucho de su Bonsai Los chinos fueron los primeros en plantar arbolitos en cuencos, El Bonsai ha perdurado hasta hoy en dia en la cultura china, y se puede encontrar en cualquier sociedad china, aunque sea fuera del propio pais, ‘como por ejemplo en Hong-Kong, Singapur, Taiwan 0 Tailandia. Los «maestros» chinos de Bonsai distinguen toda- via hoy entre «Pun-sai» y «Pun-ching». Muchos se refieren a las dos formas de Bonsai con el concepto de Pen-jing. «Pun-sai- tiene el mismo signode escri- tura que el japonés Bonsai, y significa: drbol sin paisaje en un cuenco. Por contra, «Pun-ching» signi- fica: arbol con paisaje en una maceta o una bandeja. Estos «pun-ching» se remontan a los principios de la dinastia Han, por los afios 215-206 antes de J.C., cuando paisajistas chinos empezaron a reproducir en miniatura los ya por entonces famosos jardines de rocalla, Segiin una leyenda, Jiang-feng posefa el po- der magico de miniaturizar en una bandeja paisajes con rocas, montaiias, irboles, rios, casas, hombres y animales. Aparte de los «pun-ching», esos paisajes en miniatura con rocas y arboles, que tanto se apre- cian atin hoy en China, encontramos por primera vez mencionados los «pun-sai» durante la dinastia Tsin (21-206 antes de J.C.). Fue un famoso poeta y alto funcionario, To-Guen-Ming (365-427 después de J.C.) que, hastiado de los asuntos de estado, se retiné al campo y se puso a cultivar crisantemos en macetas. Debe haber sido el principio del cultivo de plantas en maceta, pero condujo a los arboles en miniatura, pues 200 aftos mas tarde, en pinturas de la época Tang, ya encontramos pinos, cipreses, ciruelos, bambiies, etc., plantados en cuencos. ‘Atin antes del afio 1000, durante la dinastia Sung, no sélo se describen estos Pun-sai en poesias, sino que existe ya una extensa literatura especializada so- bre su creacién. Durante la pacifica época de la dinastia Ching (164-1911), los Pun-sai y los Pun-ching se convir- tieronen una ocupacién de tiempo libre, no slo de la aristocracia, sino de todos los estratos sociales de China. ‘Sin embargo, no fueron los chinos los que divulga- ron el arte del Bonsai en los paises occidentales, sino los japoneses, primero con ocasién de la Exposicién Mundial de Paris en 1878, y después en Londres, en 1909. ‘Seguramente fueron monjes budistas los que en los siglos X y XI llevaron el Bonsai al Jap6n. Para ellos se trataba de objetos religiosos, «escalas verdeantes hacia el cielo», 0 sea, un nexo entre Dios y el hom- bre. Durante la dinastia Yuan (1280-1368), ministros y mercaderes japoneses solian regresar de sus viajes por China con Bonsai como regalos de cortesia. Se sabe de un funcionario chino, Chu-shun-sui, que en 1644 huyé de la dominacién manchty lleg6 al Ja- én, llevando consigo todos sus libros especializados sobre Bonsai. Con sus conocimientos foments deci- sivamente el cultivo del Bonsai propiamente japo- nés, primero sélo reservado a la nobleza, los samu- rai, y que hasta fines del siglo pasado no lego a extenderse entre toda la poblacién. iy DIFERENTES FORMAS DE BONSAI ‘No hay dos Bonsai iguales. Pero en el cultivo japonés del Bonsai se han ido destacando algunas formas tipicas de crecimiento, que se encuentran todas en la naturaleza. Es conveniente conocer las formas prin- cipales mas importantes Arboles individuales Chokkan. Vertical formal En un tronco vertical y robusto, las Tamas crecen en forma piramidal, con regularidad hacia todas las direc- ciones, excepto hacia delante Moyogi. Vertical informal El tronco se retuerce en vueltas com- pletas, que disminuyen hacia ta ctis- pide Shakan. Tronco inelinado Parecida a una forma azotada por el viento, s6lo que las ramas de la forma Shakan crecen en todas las direccio- nes. Las raices son més visibles en el lado hacia el cual se inclinael tronco. Han-Kengai. Semicascada Una forma que, en vez de colgar de una roca como Ia cascada, emerge horizontal por encima de un risco. Kengai. Colgante 0 Cascada Las ramas y el tronco cuelgan por encima del borde, generalmente alto, de un cuenco. ‘Altura aprox: 60 cm, edad aprox 0 a0 7 Arboles de varios troncos y grupos de arboles Los japoneses sienten aversién por los niimeros pa- res, y solo es usual el niimero dos. Evitan especial- mente el cuatro yel seis. As{ pues, prescinden delibe- radamente de la simetria, tan importante para un eu- ropeo. Estos criterios inciden en gran manera en el modelado de Bonsai 18 Sokan. Tronco gemelo Dos troncos de diferente grosor cre- cen de la misma raiz. (padre e hijo). Sankan. Triple tronco Tres troncos de diferente grosor cre- ccen de la misma raiz.(padre, madre hijo) Kabudachi. Tronco miltiple Es la denominacién que se da a todos Jos Bonsai en los que varios troncos crecen de la misma raiz. Ikada. Forma de balsa Se entierra un tronco en la tierra en posicién horizontal. Las ra- ‘mas se educan de manera que pa- rezcan diferentes troncos. Netsuranari. Forma reptante De una raiz horizontal crecen va- rios troncos, dando la impresién de un grupo de arboles. Yose-we. Bosquecillo Se plantan varios arboles de distintas edades en un cuenco. Se consigue asi Formas que se pueden plantar solas 0 en grupos Hokidachi. Escoba En un tronco vertical las ramas for- =, | man un abanico (como una escoba de brezo). Fukinagashi. Azotado por el viento En un tronco educado de forma incli- nada, las ramas crecen todas en una sola direccién, como azotadas por el Viento. Bunjingi. La forma de los literatos El tronco, 0 troncos, crecen rectos 0 ligeramente inclinados, limpios de ramas salvo en la copa. Una forma muy elegante. 20 Ishitsuki. Enraizado en piedra Un arbolito que ha crecido sobre 0 dentro de una piedra y cuyas raices la rodean fuertemente hasta llegar a arraigar en la tierra. - sii ie LUT Sa Bosques de Bonsai En un bosque de Bonsai los érboles sueltos se corre lacionan de tal forma, que dan la impresién de ser un ‘grupo homogéneo, ‘Todos los tipos de bosques que se pueden encon- trar al natural, es factible reproducirlos como bos- ques de Bonsai. Encontramos asi espesos y oscuros bosques de abetos; claros y alegres bosques de hoja caduca; bosques azotados por el viento a la orilla del mar; pequenos bosquecillos de altiplano y muchos mis. ‘Se pueden crear diferentes perspectivas. Hay bos- {ques de Bonsai que parecen vistos de cerca, como al detalle; otros, que dan la impresién de profundidad, Los bosques costefios, por ejemplo, son estrechos y alargados, en forma de franja. También hay que con- siderar como caracteristicas especificas la edad, la forma y el estado de los arboles. Se dispone pues de muchas posibilidades para crear un bosque, ya que la naturaleza nos da muchos ‘modelos. Un bosque de Bonsai sélo quedara bien, si se consigue captar la atmésfera particular que carac~ teriza cada tipo de bosque. Para conseguir reproducir este cardcter hay que tener en cuenta unas cuantas reglas en la realizacidn del bosque. Los bosques de Bonsai resultan ideales para principiantes que ya han adquirido el sentido para las diferentes formas de Arboles y bosques en la naturaleza. Son muy agrade- cidos desde el comienzo, porque el bosquecillo pron- to esta plantado y «listo». No es necesario esperar aitos para acabarlo, y en todo momento es posible corregir y modelar su creacién, quitando o cambian- do arboies, o simplemente trasladandolos de sitio. Como se trabaja con drboles jovenes, de 2a afios de 24 edad, el precio de coste inicial es también muy venta- joso. EI mismo aficionado los puede recolectar en el bosque. Al igual que para un Bonsai individual, son preferibles las plantas de hojas pequefias, y especies que soporten una poda rigurosa en la raiz. Esta poda es a menudo necesaria, puesto que los grupos de Arboles se plantan en macetas de muy poca profundi- dad. A ser posible es conveniente que todas las plan- titas sean de la misma planta madre. Su herencia comiin hard que tengan el mismo tamafio y color de hoja, y el mismo crecimiento en altura. El grupo de Arboles sera mas homogéneo y ganar en armonia Mis facil es conseguir la materia prima en viveros forestales, pues alli se puede encontrar gran variedad de planteles. Los bosques mezclados resultan muy atractivos, pero con el tiempo su cuidado puede ocasionar pro- blemas. El crecimiento y las condiciones de vida de los diferentes rboles son muy distintos entre si, y los, Arboles pueden estorbarse mutuamente en su desa- rrollo. Por ello, es preferible escoger una especie determinada para el bosque de Bonsai. Son muy indi- cadas las diferentes especies de arce, bambiies, ha- ‘yas, abetos rojos, carpes, enebros espinosos, alerces, ‘criptomerias, stewartias, olmos y cipreses. La mejor época de plantacién es a principios de primavera, antes de que se abran las yemas, porque entonces la planta todavia soporta una fuerte poda de la raiz. También se puede plantar el bosquecillo a principios de otofio, cuando las raices hay que podar- las solo moderadamente. La mezcla apropiada de tierra para el bosque de Bonsai es la misma que para un Bonsai individual de Ja misma especie 4 < ‘Antes de empezar la plantacién, se hace un croquis y se determina la posicién de cada arbol. Para la formacién de un grupo de arboles que tenga un aspec- to natural, pueden ser de ayuda las siguientes reglas: escoger un nimero impar de drboles, si el grupo es reducido. Con ello es més ficil evitar la simetria que a menudo se produce en grupos de 4, 6 u 8 drboles, y que puede ocasionar un aspecto algo artificioso del bosquecillo, Para un bosque de Bonsai habria que colocar los, diferentes arbolitos como si se tratara de un retrato de familia de principios de siglo, con el drbol mas im- portante y dominando en altura y grosor del tronco, el padre, en primer plano, la madre a su lado, y los de ‘menor importancia a su alrededor, como si se tratara de los hijos. De este modo el grupo quedari dividido en subgrupos, que le dan mayor naturalidad y profun- didad al bosquecillo. Para conseguir todavia una ma- yor sensaci6n de profundidad, se plantan los arboli- ilos mayores mas hacia delante, y los pequefios de- tras. Al plantar los diferentes drboles, se giran de tal forma que las ramas largas queden en direccién hacia fuera. Ningiin arbol debe tapar a otro. ‘Al formar un grupo de arboles es tan importante el espacio libre como los arboles en si, porque ésto es lo que convierte el bosquecillo en un paisaje. Antes de plantar se preparan los cuencoso macetas para Bonsai en la forma habitual. Hay que colocar mallas de plistico sobre los agujeros de desagiie Luego se coloca una capa de grava para el drenaje, muy delgada, puesto que el cuenco tiene poca pro- fundidad, y encima una capa de tierra de Bonsai, asimismo muy fina, Primero se plantan los arboles principales, luego los otros. Puede haber dificultades al fijar los distintos drboles. Se pueden resolver por dos métodos diferentes: 26 a 1) Pasando un alambre por los agujeros de desagiie, se fijan los Arboles principales al suelo del cuen- co. Una vez estén asegurados, se pueden atar los {rboles secundarios a los principales, y asegurar- los también a su vez. No se debe olvidar el retirar los alambres al cabo de aproximadamente medio aio. 2) Con una mezela mojada de turba y arcilla, se puede formar una bola pesada con el cepellén de raices de cada planta, que les dara peso y estabili- dad. De este modo podrin sostenerse con facili- dad en sus respectivas posiciones. Después de haber rellenado todos los espacios li- bres con tierra de Bonsai, ésta se aprieta, especial- ‘mente en los bordes del cuenco. Encima se colocan porciones de musgo, y se riegan bien los arbolitos, colocandolos después en un lugar resguardado. Pasa- das de 4 a 6 semanas, el bosquecillo se puede empe- zara acostumbrar al sol y se abona ligeramente. {ipod ceca. enn cueneaapropado, conTaieray las herramanas ‘Sersscin protic pestle Obstreser pote, que fomanrepectwamerte cos angio ‘anor se viega el bosqecilo con abundant 38 colocsen un ugar sotegio 7 Formas sobre roca Hay dos formas fundamentales en la educacién de un Bonsai sobre roca: Bonsai que tienen sus raices en la misma roca y que no tienen ningin contacto con la tierra del tiesto, y Bonsai cuyas raices crecen rodean- do la roca, hasta legar a arraigar en la tierra Se consiguen buenas plantaciones sobre roca, si las plantas, las piedras y el cuenco forman una uni- dad. Tendrén naturalidad si, al igual que se hace con los bosques de Bonsai o con el Saikei, se realiza un ccroquis para poder decidir mejor cémo combinar las piedras y las plantas de la forma més id6nea. Natural- mente ello depende de qué parte de un paisaje rocoso se pretenda reproducir, y de la perspectiva que se escoja. Se puede elegir entre un paisaje visto de cerca © visto de lejos. Estas reflexiones determinan la co- rrelacién entre sus dos elementos basicos. Las pie- dras se convierten en verdaderas montafias rocosas si Jos arboles que se han plantado encima son de tamaiio ‘pequeiio, pero se vuelven pedruscos si los arboles las, dominan en su tamafio. En el primer caso se tratard de plantas arraigadas sobre la misma piedra; en el se- gundo caso, de plantas cuyas raices, rodeando la piedra, han arraigado en el suelo. Pero también hay muchas variantes de estas formas principales; por ejemplo, las raices de un Bonsai sobre roca pueden extraer las sustancias nutritivas en parte de la misma roca, y en parte de la tierra del cuenco. Las plantas pueden estar ya previamente modeladas y alambra- das, antes de ser colocadas en la roca, o pueden haber recibido sélo una educacién muy primaria. Larealizacién de Bonsai sobre piedras le permitira dejar correr la imaginacién ilimitadamente. Sin em- bargo, se deberia evitar que piedras y plantas relacio- 34 - 2 nadas entre si sean del mismo tamaiio, pues ésto restaria naturalidad y vida a la plantacién. Los recipientes utilizados para plantar Bonsai so- bre roca suelen ser bandejas poco profundas, en colo- res reposados y neutros. Modelado de formas sobre roca Para las formas en las que una o varias plantas arrai- gan sobre la roca, sin estar en contacto con la tierra, se recomienda el siguiente método de plantacién. Se inicia la preparacién con la eleccién de las plan- tas y piedras. Es aconsejable usar arbolitos ya he- chos. Pueden tomarse Bonsai jévenes y viejos, 0 Bonsai en miniatura. En cualquier lugar es posible encontrar piedras decorativas, que den sensacién de vida por su forma interesante, y que tengan una fuer- te coloracién, que resulta mucho mas expresiva que las tonalidades de blanco o gris. (Selatan Paral svstiacon nes ran plas aloe, on fema Observe bien su hallazgo para determinar si podra convertir en un paisaje rocoso, o bien simboli- Zar una montafia, un islote en el mar, 0 acaso un escarpado acantilado. Estos son los modelos natura- les preferidos por los aficionados al Bonsai, y que también pueden verse representados como Saikei. La piedra deberia tener también la superficie rugosa, con hendiduras y pequefios huecos naturales, para introducir las plantitas en ellos. Una vez determinado el derecho y el revés de la piedra, y lo que va a ser arriba y abajo, se puede mejorar la superficie de apoyo con cemento rapido Racofix, o bien se procede a pulirlo cuidadosamente con una herramienta apropiada (o disco abrasivo) Después se ahondan las hendiduras con ayuda de un escoplo, si fuese necesario, para que los arbolitos tengan suficiente espacio para las raices y la tierra 36 A continuacién se preparan los ejemplares y las correspondientes. plantas cubridoras. Se necesita musgo fresco, una mezcla a partes iguales de turba y arcilla himedas, que resulta muy util por su buena adherencia ala piedra; también alambre de cobre o de aluminio; pegamento de dos componentes 0 en su lugar trocitos de plomo (bolitas o perdigones), con el correspondiente martillo y punzén; grapas en forma de horquilla, que se habrin confeccionado con el alambre, y acaso un taladro, con broca para piedra, de un diametro de 6 mm. Hay dos maneras de fijar los alambres, que poste- riormente servirin para sujetar las plantas sobre la piedra Con el taladro se pueden practicar agujeros a am- bos lados de la hendidura, e introducir los alambres doblados en forma de U, con el doblez hacia dentro. a Los alambres se aprisionan con ayuda de trocitos de plomo que, una vez. introducidos en el agujero, se aplastan con el punzén y el martillo. Resulta mas sencillo confeccionar unas bridas con el alambre y fijarlas sobre la roca con pegamento de dos compo- nentes, y pasar luego a través de ellas un alambre de sujecién ‘Antes de estos preparativos convendria volver a comprobar la situacién de las plantas en la piedra, sosteniéndolas a modo de prueba en sus sitios previ tos. Un consejo para las plantaciones con diferentes clases de arboles: también aqui hay que respetar las eyes naturales, plantando las coniferas en las regio- nes altas, los helechos y las gramineas, en cambio, abajo. A continuacién se humedece la piedra con agua, y se revisten todos los huecos con una capa de la mez~ cla de turba y arcilla, de un espesor de 1 a 2 cm. Hecho ésto, se pueden introducir las plantas. Previa mente las raices se habran limpiado de gran parte de la tierra, quiténdota con un palillo o lavandolas con agua, Se puede conservar en el cepellén de raices tanta tierra como quepa en el hueco. Se fijan las plantas con ayuda de los alambres, Las races que sobresalgan y no sea posible meter en el hueco, nunca hay que cortarlas, sino que se extien- den repartiéndolas sobre la roca. Se cubren todas las raices con una capa lo més gruesa posible de la mez~ cla de turba y arcilla. Luego se colocan las plantas cubridoras, se sujetan con alambre y se fijan con la mezela de tierra himeda, Finalmente se cubre todo con porciones de musgo htimedo, que se sujetan con las horquillas de alambre. Toda la roca plantada se coloca en una bandeja plana y ovalada, llena de agua ode arena blanca, y se sita en algin lugar resguardado del viento, a media sombra. Las plantaciones en roca se resecan con mu- cha facilidad, y para evitarlo hay que rociarlas con frecuencia, lo que se hard con suavidad para no arras- trarla tierra en las plantaciones recientes, a causa de tun riego a excesiva presin, Transcurridas unas 8 ‘semanas se puede proceder a la primera aplicacién de abono (con abono liquido). En este tipo de Bonsai sobre roca no se hace ningiin trasplante, ni se le podan las raices. Solamente hay que ir reponiendo la tierra que el riego haya arrastrado. Estas plantaciones con plantas sobre la roca, han de ser preservadas de las heladas, ya que de lo contrario las raices se po- drian desprender de la piedra. Para dejar crecer un Bonsai por encima de la roca, se necesita una planta con raices muy largas. Se pue~ de escoger un plantel de vivero, bien enraizado, que esté dentro de un recipiente alto y que en consecuen- cia haya desarrollado raices largas, Esta planta se podrd modelar como Bonsai antes o después de su trasplante sobre la piedra- También se pueden utilizar arbolitos recolectados en el monte, que con frecuen- cia también desarrollan raices largas. Si se desea transformar un Bonsai en uno sobre roca, se puede estimular el crecimiento en longitud de sus raices mediante el siguiente procedimiento. Trasplantese, por ejemplo, un ejemplar selecto de Acer palmatum desde su cuenco de Bonsai a una maceta 0 cubo de plistico alto y estrecho, que tenga aproximadamente la altura de la piedra escogida. El cubo se Ilenard con tierra mds ligera que la tierra de Bonsai, por ejemplo una mezcla de turba y arena. No hay que olvidarse de practicar en el cubo unos aguje- ros de desagiie para el drenaje. Las raices del arbol trasplantado podran crecer ahora en sentido longitu- a7 > inal, sin ningiin impediment. Cada 3 6 4 meses se puede cortar una tira de unos 5 em de la parte superior del cubo, quitando la tierra correspondiente, de ma- nera que la parte alta de las raices quede al descubier- to. De este modo las raices que permanecen cubiertas de tierra crecerin aceleradamente, para compensar la masa de raices que se han dejado descubiertas. En el transcurso de I 6 2 afios se van cortando cada vez ms tras, hasta que s6lo queden unos 5 a8 cm de taiz bajo tierra. A partir de este momento el Bonsai esti ya preparado para su trasplante sobre la piedra. Este trasplante se puede realizar en primavera o en otof0, pero.en esta iltima estacién s6lo cuando el Bonsai no tenga que soportar heladas durante el invierno si- guiente. Antes de colocar el arbolito sobre una piedra, se uita toda Ia tierra de sus raices. Esto se puede hacer rascéndolas cuidadosamente con un palillo, o sumer- gigndolas repetidamente en agua. De esta forma se podran distribuir con mayor facilidad las raices por encima de la piedra, Se pueden eliminar algunas rai- ‘ces sueltas, que tal vez resulten demasiado gruesas y sean un estorbo para la buena colocacién, si se com- prende que la planta puede prescindir de ellas. Las demas raices no se recortan. ‘A continuacién se meten todas las raices en un baiio de arcilla pastosa, pues porser muy propensas a resecarse, de este modo quedarin cubiertas con una delgada capa protectora de arcilla. Luego se coloca la planta sobre la piedra, pudiendo atarla con tiras de rafia en caso necesario. Las raices se reparten de forma decorativa, a ser posible las més bonitas hacia delante. Los extremos de las raices se introducen en la tierra Todas las raices que estan colocadas sobre la pie- dra se cubren con turba gruesa humedecida 0 con musgo Sphagnum, lo que les proporciona una protec- cion adicional contra el desecamiento. El musgo y la turba se sujetan sobre la piedra envolviéndolos con vendas de gasa. Después de todo este procedimiento, su Bonsai estara algo debilitado y, al igual que si se tratarade un ‘arbolito joven recién trasplantado, necesitard cuida- dos especiales, que ya se han descrito en relacién con Jas otras formas sobre roca. Hay que mantener el vendaje siempre con una humedad moderada, Después de 4 6 meses se podri retirar, junto con la turba y el musgo, pues entonces Ia planta ya habri echado nuevas raices en el cuenco. EI Bonsai y la piedra forman una unidad, y al cabo de dos o tres afios se trasplantan juntos. Injertos Injertar es, en jardineria, el arte de unir diferentes partes de plantas, de manera que la unidad resultante sea capaz de vivir. Consiste en unir una parte de una planta, una rama de 1 62 afios, denominada injerto, en otra planta apropiada, las mas veces de la misma especie, llamada patron, La funcidn de éste es la de desarrollar las raices y la parte baja del tronco; la del injerto es formar la copay la parte alta del tronco. Las dos partes unidas crean una nueva planta, pero a la vez, ambas mantienen su individualidad. Esto se aprecia en la diferencia de los brotes por encima y por debajo del punto en el que se ha practicado el injerto, y también en el diferente grosor de los troncos, € incluso en las diferentes cortezas del injerto y del patron, Para el aficionado al Bonsai, injertar es una técnica con muchas facetas para criar arbolitos, lle- varlos a la plenitud estética y conservarlos. Arboles ccon raices dafiadas se pueden salvar de la muerte con sistemas de injerto. Arboles florecientes pueden completarse con flores de diferentes matices. Con injertos también se pueden reproducir plan- tas, que con otros métodos son apenas 0 en absoluto cultivables. La experiencia ha demostrado que, por ejemplo, los Pinus parviflora, crecen mucho mas deprisa si han sido injertados, es decir, si crecen con otra raiz. Por esto, en el Japon, casi todos estos pinos estan injertados sobre pinos negros del Japén. Otra ventaja del injerto es la autenticidad de la especie. El aspecto exterior y el color de la planta corresponderdn siempre al injerto, mientras que al sembrar semillas de la misma planta, se tienen mu- chas posibilidades de obtener variaciones. Pero el injerto también tiene sus desventajas. El punto en el que se ha realizado el injerto puede «cica- 64 trizar» de forma muy poco estética. Pueden brotar retofios (salvajes) por debajo de este punto, y latécni- ca del injerto requiere bastante habilidad y experien- cia ‘Aqui se explicardn los sistemas de injerto més im- portantes para el aficionado al Bonsai. 1. Injerto lateral 0 de costado 2. Injerto de cuiia Injerto de corteza 4. Injerto de escudo 5. Injerto de aproximacién En general, los injertos se llevan a cabo a princi- pios de primavera, antes de que vuelva a empezar el crecimiento. Los Arboles de hoja perenne también se pueden injertar de mediados de agosto a mediados de septiembre Las siguientes especies se cultivan casi exclusiva- ‘mente por medio de injertos: albaricoqueros, asi co- mo todas las otras especies de arboles frutales, glici- nas, acebos, especies de arce rojo, falsos membrille- 105, piceas de Ajan, algunas especies de pino negro y Pinus parviflora Injerto lateral 0 de costado Se practica primordialmente en verano, en plantas frondosas de hoja perenne oen coniferas, para conse- guir plantas nuevas. El punto de injerto deberd estar lo mas abajo posi- ble del tronco, para que luego se pueda disimular ‘mejor o incluso tapar con tierra, Practiquese un corte oblicuo en el patron, de 3.a.5 cm de longitud. Luego se pone el injerto con la punta debidamente preparada Se planta de foemaiciad prague et jena puede acquire una poten vr Sue sna pau on rai 0m en forma de cuffa; ésta «ptia», de unos 3 a 5 cm de largo, se ata con rafia al patron, y se cubre el punto de insercién con cera para drbol, para evitar que la heri- da se deseque, y que penetren agua 0 pardsitos. ‘Cuando, al afio siguiente, empiece a brotar la pia, se habré unido ya al patron. Entonces, éste se puede cortar oblicuamente, por encima del punto de inj Si no se trataba de crear un arbolito nuevo, sino de afiadir una rama a un tronco demasiado largo, hay que tener en cuenta que al dar forma de cufia al injerto, ésta debe tener un lado mas corto. Al inser- tarla, esta superficie de corte mas pequeiia estar en el lado det tronco, y asi el injerto crecera con un Angulo més natural Inert dete la corera. Injerto de corteza e injerto de cua Los expertos slo practican el injerto de piia cuando se trata de ramas y troncos delgados. A partir de un grosor de més de 3 cm, se prefiere el injerto en la corteza. Con el método de la corteza, se pueden crear tron- cos miiltiples, y también remodelar arboles mayores, bien enraizados, pero con la copa defectuosa. Sim- plemente se quita la copa del patrin y se injertan nuevas ramas. Al injertar detris de la corteza, la ptia debe ser sensiblemente mas delgada que el patron. Primero se corta el patron con una sierra, y se alisa la superficie del corte con un cuchillo, para que pueda cicatrizar mejor. Luego se practica un corte vertical, de 2 a5 ‘om de longitud, a un lado de la superficie cortada, Se 6 ow golpea con suavidad la corteza a ambos lados del corte y, separindola con cuidado, se coloca el injer- to, debidamente preparado y cortado. De esta forma se pueden colocar varios injertos a la vez, alrededor de un mismo tronco. EL injerto se venda con rafia para sujetar las pias. Luego se tapa con cera, asi como toda la superficie de corte del patron, Injerto de cua Se practica un corte en el patrén, de forma que el tronco se abra longitudinalmente. El corte debe te- ner unos 3m de profundidad. Ahora se puede inser- tar lateralmente una piia de 5a 7 cm de largo, con la punta en forma de cufia. También se pueden insertar dos, una a cada lado del corte Se venda con rafia y se tapa el corte como siempre con cera para injertos. Con este procedimiento se pueden injertar nuevas ramas. | Enelinjerto dec os amitad, con un corte de2aSemde ee Seneca ace eee oon ae 66 Injerto de escudete Al practicar el injerto de escudete, slo se corta un trocito de corteza del injerto, con una yema bien desarrollada, y se coloca sobre el patrén. Las yemas son los botones durmientes que estan en el tronco, en las axilas de las hojas, Esta técnica esta muy indicada para conseguir ramas en sitios que falten. La mejor época para practicar este tipo de injerto esen julio y agosto, porque es cuando mejor se puede separar la corteza del tronco con la yema. Las yemas deben obtenerse siempre de partes de la planta que hayan brotado en el mismo afio. Lo mejor es esperar un dia fresco y Iluvioso, para evitar que el material para el injerto se deseque. Se necesita una navaja afilada para practicar un corte en forma de T en el patrén. Primero se hace un corte longitudinal de unos 2 cm, cuya profundidad solo Megue a la madera Luego se hace el corte horizontal. Separese la yema del injerto, conservando un trozo de corteza a su alrededor de 1 cm de didmetro. Si la yema tiene una hoja, ésta se quita y se conserva sélo el tallo. A continuacién, con el cuchillo se Tevantan con cuidado las solapas de corteza de la T, se separan un poco y se inserta el escudete por arriba. Se puede hacer toméndolo por el tallo, Se tapa todo.el corte con venda de rafia o con una goma, dejando la yema ala vista, Se habré unido al patrén cuando caiga el tallo y en la proxima primavera desarrolle una nueva rama. Para el injerto de escudete se prestan especialmen- te todos los arbolitos frutales, como albaricoqueros, cerezos, melocotoneros y rosales. Este método es en especial recomendable para el aficionado que quiere convertir una planta de un solo sexo en una planta hermafrodita que se autofecunde, como puede ser el af. espa de arava uncon en forms de. s separan ls dos tozos dt caso de Crataegus o de algunos acebos (Ilex serrata). Estas plantas s6lo dan fruto si poseen ambos sexos, el masculino y el femenino. Si injertamos una yema de una planta masculina que no da frutos, sobre un pa- tron femenino, conseguiremos que el arbolito se autofecunde y en adelante produzca frutos. Injerto de aproximacién Al practicarel método de aproximacién, el injerto no se separa de su planta madre hasta que se haya unido al patron. Este método es bueno para casi todas las especies de Bonsai, y a veces se practica con la pro- pia planta, es decir, con un vastago 0 tallo de la misma planta. En las ilustraciones se muestran dos ejemplos de cémo prover un tronco de una rama nueva, y de cémo complementar un tronco grueso con otra rama mas delgada, Primero se quitan de ambas partes dos tiras de corteza, de unos 3 em. Las dos superficies de corte deberan corresponderse luego. Se juntan y se unen con rafiao con una goma. Se tapa todo con cera, Si esta operacién se ha realizado en primavera, la unién quedaré consumada a finales del otofio si- guiente, Entonceses el momento de separar el injerto a ema que tase pues rar po anroxmacion, El sage puede sar Seca, ara, Enocslon natn nr ne is 67 En lijrt eras seiner aterinenia parte ntrior Sauna plantaenen| fslunapiuntarns ina. Con ete motos opurden epee faces ue > fais que ayan ceca slo una eacron de su planta madre, procurando cortar lo més cerca posible del punto de unidn. Asi el callo resultante serd minimo. También este corte cicatrizaré mas de- prisa si se tapa con cera para injertos. Se puede ir preparando un arbolito para este método, si se deja erecer una rama cerca de un punto en el que poste- riormente se quiera practicar el injerto. Simplemente se tratari de doblarla, unirla al tronco, y practicar la aproximacion. Consejos generales Si se trata de coniferas y de plantas de hoja perenne, se corta el injerto inmediatamente antes de practicar- lo, Si se trata de frondosas, hay que esperar el des- canso en el ciclo vegetativo, 0 sea, hasta otofo & invierno, y cortar entonces el injerto, en un tiempo en que no hayan heladas. Los injertos se entierran en 68 ‘Aquivems os ejmalos de cmos pueden poner en usares proteoiesiss Pantas roin njtasa, esta que seconsuma anion cee coe pares arena hiimeda y se guardan en un lugar fresco, pero resguardado de las heladas. Se suelen escoger injertos y patrones de la misma especie de planta, para asegurar una buena unién Los aficionados al Bonsai pueden realizar todas las operaciones descritas con ayuda de un cuchillo afila- do, sin necesidad de otras herramientas. Es impor- tante llevar a cabo todas las operaciones del injerto ccon la mayor limpieza y rapidez posibles, para evitar que se depositen bacterias en las heridas de las plan- tas. Por esta misma razén no es conveniente tocar las heridas abiertas con los dedos. Después del injerto hay que poner las plantas en un lugar resguardado del viento, con temperatura cons- tante. Se pueden colocar en un invernadero 0 debajo de una cubierta de plistico; ver ilustraciones. Una vez soldado el injerto, cosa que seguramente ocurrird antes de que brote, se empieza a acostum- brar las plantas a las condiciones ambientales norma- les. Pasado otro aiio, se puede quitar la rafia See En primavera (abril), se prepara la rama destinada al acodo. Se practica un corte de abajo arriba, deja do una especie de lengiieta de 3.a 5 cm de largo. Hay que untar 0 espolvorear esta incisién con hormonas de crecimiento de raices, que aumentara la tendencia de la plantaa desarrollar raices. Se encaja una piedre- cita 0 un poco de musgo debajo de la lengiieta, para evitar que ésta se vuelva a unir al tronco. Se rodea todo con musgo de esfagno hiimedo, o con turba. A continuaciGn se envuelve este musgo con una hojade plastico, cuyas aberturas de cierran herméticamente con cinta aislante. En muchos casos ya empiezan a crecer raices al cabo de seis semanas, como en los sauces o las alhe- fias, Para los rododendros y las hayas el tiempo nece- sario es mas 0 menos el doble. Sise trata de coniferas hay que tener la paciencia de esperar de 12.24 meses hasta que aparezcan las primeras raices. Cuando se hayan formado suficientes raices, se puede cortar ya la nueva planta y, una vez quitado el plastico, plantarla en una maceta, Su tratamiento subsiguiente serd el de un Bonsai recién replantado, ractearan acoeo con musgeeniaplnia mre Acodo aéreo con musgo Por medio de acodo con musgo, se puede conseguir ‘que las ramas especialmente bonitas de un arbol 0 arbusto, desarrollen raices. Este sistema de repro- duccién tiene la ventaja de que ya se puede empezar a educar en la misma planta madre. Las ramas mas gruesas no debieran tener mis de 3.a5cmde grueso, | porque las ramas mayores no tienen tantas perspect vas de desarrollar raices. 4 Plantas aptas para el sistema de acodo con musgo —cscarescen unto de scr _y se enwenee7 Unevers son: arces, azaleas, hayas, forsitias, Pyracantha, ails... Gamecube cen unebolsade format ic granados, glicinas, camelias, membrilleros, rodo- 2 bs ensve Samacela dendros, olmos, enebros, sauces y celcobas. Sosa 2 pine pak 0 Educacién de Bonsai jovenes Cuanto antes se empiece a modelar una planta joven, menos manipulaciones dristicas serin necesarias luego. Como material de partida para Bonsai se usan plantas jévenes de dos a tres afios de edad, obtenidas a partir de semillas, esquejes, u otros métodos de reproduccién. También se pueden utilizar plantas re- colectadas en el bosque. Deben tener una altura de unos 15 a 20cm, el tronco del grosor aproximado de un lépiz, y las raices suficientemente desarrolladas. ‘Quitese primero la tierra de las raices y pédense lue- hasta dejarlas reducidas a un tercio de su longitud ial. Es muy importante que al plantar en una ma- ceta suficientemente grande, las raices queden bien repartidas en el fondo del tiesto. Tal y como se expli- caen lapagina 106 un buen Bonsai da la impresién de tenerse s6lidamente en la tierra. S6lo podra dar esta impresién si sus raices visibles crecen en todas las direcciones. Pueden tener diferentes grosores, y es- tar también més 0 menos distanciadas entre si, pero rnunca se deben cruzar. Hay que tener paciencia y tino al educar la base del tronco, porque se trata de una parte muy importante para el futuro aspecto general del drbol, y mas adelante apenas se podré corregir en nada. Enebros, pinos y otras especies, desarrollan una raiz gruesa principal, que suele molestar en la distribucién de las raices. Si hay suficientes raices secundarias, esta raiz. gruesa se corta. Si hay pocas raicillas, s6lo la podremos reducir a un tercio de su longitud original La mezcla de tierra idénea para el arbolito, consis- te en una parte de arena gruesa y una parte de turba Después de unas semanas en un sitio sombreado, se puede ir acostumbrando el arbol al sol, y después de seis semanas, se puede abonar ya por primera vez. 70 Un areeapenésdespuss de 46,8 1Satos La mejor época para cambiarlo de maceta es en primavera. Las plantas jévenes deben replantarse c: da dos afios, y se van acostumbrando a la tierra de Bonsai. La forma de Bonsai se conseguir podando y alambrando la planta. Antes de empezar con la edu- cacién, hay que saber cémo debers ser el arbolito. La €poca buena para podar es en primavera, pero apartir del segundo afio. Se suprimen todos los brotes y yemas que crezcan en una direccidn no deseada. Las yemas se pueden arrancar, los brotes se cortan con unas tijeras afiladas, practicando el corte siempre justo de forma que no sobresalga ninguna uia del tronco o rama donde se corté, Si se corta la gufa, es decir, la punta de la planta, ésta desarrollaré mas brotes laterales. La planta ain adquirird una forma de crecimiento mas compacta, si se podan regularmente todos los brotes y no sélo la guia. La mayor parte de las frondosas se pueden educar sin necesidad de alambrarlas, pues se puede incidir en Ia direccién de crecimiento de un brote, con un simple corte bien hecho. Cada yema apunta hacia la direccién en la que creceria una nueva ramita, oculta en la miniscula yema «durmiente., si se cortara la rama por encima de esta yema. Educacién de una forma Moyogi a partir de un plantel re line I aegis! della de pno, ates de partaio en na ‘acea, Cvanda naj aarecid os prveos bots aera, puede ‘ima lagu {atria au lr. scar ata poscn nan Paulatinamente, el drbol iri adquiriendo un aspec~ to caracteristico, y se puede empezar apensar en cual seré la forma més apropiada para é1. Algunos conse- jos los hallard en la pagina 18. Para la educaci6n de tuna forma Moyogi, véanse las ilustraciones adyacen- tes y en las paginas 52 y 75. Si se quiere educar una forma de escoba, no hay que suprimir el brote principal hasta que el tronco no haya alcanzado la altura deseada, porque con esta oda, se limita definitivamente su altura del tronco. A partir de este momento se podran desarrollar con (Cuando e atoto tanga 3 5 afos, se post dar su fama dni Sambrancoto Hay que tre’ en cueia que a amr. ramas samore Ati ona an arse or weary orc uniformidad los brotes laterales. Esto significa que el tronco se robustecera. La copa del Arbol se formara podando continuamente los nuevos brotes; ver ilus- traciones de la pagina 72. Después de tres 0 cuatro aiios se pueden alambrar el tronco y las ramas principales. Tratandose de coni- feras esto suele ser imprescindible. Después de cinco o seis afios, la planta joven ya se hahecho un arbolito, y yase puede trasplantar aun cuenco de Bonsai. 1 Educacién de una forma de escoba a partir de una planta joven Enfermedades y parasitos La mejor prevencién contra enfermedades son unos buenos cuidados y una periddica revisin de las plan- tas, Sien un momento dado hay que luchar contra una enfermedad, pardsitos, hongos 0 algo parecido, serd lo mismo que también ataca las plantas de jardin Si los sintomas de la enfermedad no indican que sea por culpa de un mal cuidado de ta planta, ni a causa de un problemen las hojas, entonces hay que sacarla cuidadosamente de su cuenco. Si las puntas de las raices son fuertes y blancas, es de suponer que la causa de la enfermedad no esti en la zona de las raices, pues estin sanas. Se pueden utilizar los pesticidas comerciales usua- les, segtin las dosis indicadas en las instruceiones. En ningiin caso se pondr més de la cuenta, en todo caso, siempre un poco menos. Es recomendable tratar en primavera todos los Bonsai con algiin producto poli valente contra enfermedades e insectos parasitarios, y con algiin fungicida, contra los hongos ‘A continuacién se describen las enfermedades y los pardsitos mas importantes que pueden afectaraun Bonsai y se indican algunos productos eficaces. Siempre que se tengan problemas con el arbolito, hay que pedirle consejo a alguien entendido en la materia, No dude acudir al especialista; es preferible ir una vez de mas, que ir demasiado tarde. 150 Parasitos Los pulgones, que suelen estar en la parte inferior de las hojas y en los capullos, se pueden eliminar casi s6lo con un chorro de agua a presién, o sino, pulveri: zando las partes afectadas con una solucién de 0,29 de Aphisan, 0 una de 0,5% de PD 5. Las orugas se manifiestan por las hojas comidas, Si no pueden ser descubiertas y recogidas a mano, se rocia la planta con Metasystox o con una solucién del 0,1% de Ultracid 40, La arafiuela roja (écaro tejedor) suele aparecer en enebros, abetos rojos y también en celcobas, en afios de sequia (aire muy seco). Hace que las hojas 0 agujas se vuelvan amarillentas 0 palidas. Normal- mente slo afecta una parte de la planta. Son visibles sie sacude una rama sobre una hoja de papel blanca. Los dicaros parecen granitos de pimentén y son bien visibles con lupa. La arafiuela roja se combate con sustancias especiales, al empezar el periodo vegetati- vo, con Plictran 25 W al 0.1%, con Pentae 0 con PD 5, dos 0 tres veces cada 15 dias. 151 Las hormigas se consideran pardsitos porque transmiten el pulg6n. Por ello, hay que mantener alejadas las hormigas de la zona donde esté el Bon- sai. Buenos productos para combatir estos insectos son el hormiguicida Bayer o el Compo. Esearabajo del chopo (Saperda populnea): No muy frecuente, pero es muy dificil de combatir; por ello haremos una descripcién mas extensa. El esca- rabajo del chopo tiene unos 3 cm, es de color negro con puntos blancos, y tiene unas antenas largas, blan- cas y negras a rayas. Sale a finales de mayo y empie- za.a comerse la corteza formando aros. Puede llegar a pelar la corteza de toda una rama, y asi, matarla Pone los huevos en el ramaje, y las larvas penetran hasta el interior de la rama, donde forman su capu- lo, Esto se puede detectar por los bultos parecidos a agallas en el tronco, aparte de los agujeros redon- dos en el tronco y en las ramas. Después de un pe- iodo de reposo, las larvas se han convertido ya en escarabajos, y vuelve a empezar el ciclo. Eliminense las ramas afectadas y rociese el rbol con Gardena SK 0 con Dinterex (Bayer) al 1% cada tres semanas. Las lombrices no son parisitos, pero con sus ttineles pueden alterar el desagiie, y por ello hay que erradicarlas. Los caracoles dejan rastros de baba y mordedu- ras en las hojas. Se pueden eliminar a mano, a prime- rahora de la mafiana, o también se puede usar veneno para caracoles, del que se esparce un poco en el suelo. Gusanos blancos. Se trata de unos gusanitos de 0,5 cm que son como hilitos, y que suelen apare- cer al utilizar abonos organicos. Son inofensivos y se pueden eliminar con una solucién débil de Metasys- tox, 0 con spray insecticida Compo. 152 Cehiiss Cochinillas. Suelen afectar tanto a las coniferas como las frondosas, y se instalan en la parte inferior de las hojas (bultitos pardos, granulosos). Muchas veces se pueden eliminar a mano. Si esta muy exten- dido, se puede utilizar una solucién al 0,2% de Aphi- san, o una emulsion de 0,15% de Malathion. Puig anger El pulg6n lanigero se instala en el tronco, en bi- furcaciones de ramas, 0 en los angulos entre ramas y hojas. Parecen mintisculos trocitos de algodén, y se pueden combatir igual que el pulgén, 0 con una solu- cidn del 0,15% de Unden, después de haber deshe- cho sus tejidos con un palito. El pulg6n de las raices produce una debi de las hojas durante el crecimiento, Estos insec- tos blancos estén en las raices, Si se trata de pinos, hay que tener cuidado de no confundirlos con unas formaciones blancas, de superficie rugosa y con olor ahongo. Este hongo (Mykorrhiza) vive en simbiosis con los pinos, y es sefial de buena salud. El pulgén de las raices se combate con una solucién de Alphos, aplicado directamente sobre las raices. También se puede usar una solucién de Metasystox. Enfermedades Clorosis. Las hojas y las agujas se vuelven amari- las, mientras que la nervadura queda de color verde. La causa principal de esta enfermedad es la falta de hierro. Riéguese la planta con Fetrilon-Combi F. Sila tierra es demasiado densa y esti muy mojada, también puede provocar los mismos sintomas; yaque laplanta no obtiene suficiente oxigeno. En este caso, se aligera la tierra, se replanta y se riega menos. Mildiu auténtico. Aparece en forma de unas man- chas blancas en la parte superior de las hojas. Pue- de estar causado por temperaturas demasiado al- tas y, ala vez, por falta de aireacién 0 por una hume- dad ambiente excesiva, Es una enfermedad de hon- 208, porello se combate con un fungicida. Se pueden usar: Benomyl (Dupont), una solucién del 0,25% de F 238 (Bayer), 0 con azufre electrolitico al 0,4%. Otros cuidados que ayudardn a sanar el arbol son: limpiar la copa, eliminar las hojas afectadas y mucho aire fresco, Falso mildiu. Este hongo suele estar en la parte inferior de la hoja, y a partir de ahi penetra en la planta. En la parte inferior aparecerd un moho gris, y en la parte superior de la hoja apareceran manchas amarillas. Hay que airear més la planta y tratarla con Euparen 0 con Polyram Combi. ae, Enfermedad del «I6bulo» en azaleas. Las ho- jas se deforman y forman una especie de «ldbulo», ‘que primero es de color verde claro y luego adquiere unas manchas blancuzcas. Hay que eliminar las hojas afectadas y tratar la planta con Zineb o con prepara- dos de Combi Roya del arce. Esta enfermedad, causada por un hongo, produce unas piistulas rojas de tamatio variable, sobre la corteza. Primero se muere la corte za y luego toda la rama. Aqui solo sirve ir cortando hasta llegar a la madera sana. Hongo de los pins. Afecta a los pinos jévenes; durante el otofio y el inviemo salen unas manchas marrones en sus agujas, que luego en primavera se convierten en rayas negras y acaban produciendo la muerte de todas las agujas. Si en la proximidad de donde se tienen los pinos se han producido casos de esta enfermedad, hay que tratarlos preventivamente con polvo BASF-Maneb al 0,2% o con Dithane-Ultra al 0,2%, cada 15 dias, de julio a mediados de agosto. Por el contrario, si las hojas se vuelven pardas y se caen en otofio, no se trata de la afeccién provocada por el hongo, sino de la renovacién normal de las agujas. 155 iow nego astrtaco Mildiu negro estrellado. Se trata de unas man- cchas negras que se producen sobre las hojas, como si se tratara de hollin. Pueden verse afectadas las espe- cies de olmos (celcobas) y se suele producir en un lado de la planta, Se puede combatir con Ortho- Phaltan 50, 156 f- La putrefaccién de las raices es muy frecuen- te y puede tener varias causas. Se puede produ- cir por unos cuidados equivocados, como por ejem- plo un riego excesivo, demasiado abono o, simple- ‘mente, por una mezcla de tierra equivocada. Si han estado muy secas, las raices capilares se mueren y, al regar de nuevo, las restantes empiezan a pudrirse. Primero hay que eliminar todas las partes de las raices afectadas, y sumergir el resto por un momento en una solucién de Benomyl (Dupont) 0 de Orthocid antes de volver a plantar cl arbolito en tierra nueva. Primero hay que regarlo muy poco, porque las raices ccapilares tienen que irse desarrollando de nuevo, y él Arbol estard muy debilitado y no podré absorber tanta agua como una planta sana. Hay que rociar el Bonsai amenudo y colocarlo mas a la sombra, resguardado del viento. ‘Naturalmente, no se debe abonar una planta dafia- da en su sistema de raices, hasta que no hayadesarro- lado nuevas raices sanas. ‘Muerte de las ramas. Se suele producir en espe- cies de arce, causada por un hongo. Las yemas no brotan y si lo hacen, los nuevos brotes se mueren, Aqui no hay ningiin sistema eficaz, yy sélo se puede ir podando hasta dejar inicamente las partes sanas del Arbol a BONSAI CHINO A lo largo de los siglos, los chinos han ido desarro- Mando los principios de la educacién de Bonsai, lo mismo que hicieron después los japoneses. Primero, aprenden de la naturaleza, ya que consideran que el Bonsai es el arte de modelar y formar la naturaleza, de crear armonia y de aguzar el sentido para lo esen- cial. Pero asi y todo, hay algunas diferencias entre los maestros chinos y los maestros japoneses, como pue~ den ser las proporciones de cuenco y arbol, raices y tronco, tronco y ramas. Por esta razén, al europeo que haya conocido pri- mero el Bonsai japonés, el Bonsai chino le puede parecer extrafio. Comparando el Bonsai de los dos paises, resalta el hecho de que los chinos suelen escoger cuencos muy grandes, que a veces son muy bonitos, antiguos y Yaliosos. En general, sus arbolitos son mayores que los japoneses, y no es raro que alcancen alturas de 1- 1,50 m y més. Para nuestro gusto, japonés, la base del tronco es a veces muy delgada en relacién al resto del Arbol. Estos arbolitos parecen salir sin més de la tierra, con el tronco sin nacimiento y de abajo arriba casi del mismo grueso, sin hacerse apenas mis delga- do hacia la cispide. La relacién entre tronco y ramas tampoco parece tan equilibrada como en el Bonsai japonés. Se pueden ver ramitas muy delgadas que crecen directamente en un troncb grueso, pero el ramaje mas fino sélo se ha desarrollado en la copa y a veces los ngulos entre el tronco y una rama nos parecen un poco atrevidos Al contemplar Bonsai chinos se hace patente que cen gran medida hemos asimilado el gusto estético de 158 Jos maestros japoneses. Nos hemos acostumbrado a sus formas serenas y equilibradas, pero atin no hemos desarrollado unas formas de educacién propias Entre los Bonsai japoneses hay ejemplares que son tan artisticos, que han perdido su vida y su naturali- dad; habra Bonsai chinos, por contra, que estarén educados de forma més tosca, pero que por ello ten- drin mas vida y poseerdn una naturalidad propia. Es seguro que ambos estilos tendrin muchos se- guidores. En las prdximas paginas hay varias repro- ducciones de Bonsai chinos, En China se prefieren las siguientes especies para la educacién de Bonsai Buxus microphylla — Boj de hoja pequefia Bougainvillea glabra — Buganvilea Carmona microphylla — «Pukien Tea» Celtis chinensis — Almez de China Elaeagnus angustifolia — Cinamomo Ficus benjamina, F. retusa — Especies de ficus Gardenia jasminoides — Gardenia Gilyptostrobus pensilis — Ciprés de China Jasminum nudiflorum — Jazmin de invierno Juniperus chinensis — Enebro de China Murraya paniculata — Jazmin naranja Nandina domestica — Nai Pinus parviflora — Pino de cinco agujas Pinus thunbergii _ — Especies de pino negro Podocarpus ‘macrophyllus — Tejo austral Pseudolaryx amabilis. — Alerce dorado de China Punica granatum — — Granado Sageretia theezans. — Sageretia Serissa foetida — Serisa Ulmus parviflora — Olmo de China Bonsai de interior Hace poco, en Alemania, se han empezado a hacer las primeras tentativas con Bonsai para la casa. En ‘América ya hace mis tiempo que los aficionados al Bonsai han ido tanteando cules son las especies mas idéneas para un Bonsai de interior. Todas las plantas de interior que tengan las hojas equefias y cuyas ramas se hagan lefiosas con facili- dad, también son apropiadas para la educacién de Bonsai. Suelen ser plantas tropicales y subtropicales. La temperatura de una habitacién corresponde a las tem- peraturas en los habitats de plantas tropicales, y por ello son especialmente indicadas para nuestras casas. Pueden ser por ejemplo, especies de ficus, garde- nias, Schefflera, Brassaia, etc. Al contrario que las especies subtropicales, las plantas de invernadero frio que no pueden soportar temperaturas interiores demasiado altas, las especies tropicales no deben es- tar nunca a menos de 15° C. Hay que encontrarles formas de crecimiento distintas, mas acordes con las formas de su entomo tropical. A parte de los ficus, no tienen nada que ver con las formas tradicionales de Bonsai, y no llegaran nuncaa tener la fascinacién y el encanto de un pino, por ejemplo Las especies que se pueden educar de forma mas parecida a las de Bonsai son las plantas subtropica- les, las plantas de invemadero frio. A ellas pertene- cen las «buganvilias», las citricas, camelias, mirtos, olivos, setisas y otras. Para ellas, la temperatura diurna dptima estd entre 8 y 12°C, y las temperaturas nocturnas deberian ser un poco inferiores (5-6°C), ya que en su entomo natural estin acostumbradas aestos cambios de temperatura del dia a la noche. Ademis, A. este enfriamiento nocturno adquiere especial impor- tancia para aquellas plantas que de dia estén a tempe- raturas més altas de lo que debieran, quizé a unos 12- 16° C. Este descanso de temperatura se puede conse- guir si de noche se ponen en otra habitacién. De por si, la temperatura nocturna sera més baja directamen- te al lado de una ventana que en el resto de la habita- cién, Se puede enftiar atin mas si se corre una cortina que separe esta zona del resto de la habitacién. Asi se habra creado una «zona climética~ més fria, entre la ventana y el resto de la habitacién, Naturalmente, hay que tener cuidado de no escoger una ventana donde haya una calefaccién debajo. En un sitio asi s6lo se podrian poner especies tropicales. En verano, los Bonsai quieren estar al aire libre, siempre que estén resguardados del viento y en un lugar sombrea- do. Cuando en otofio las temperaturas noctumas ba- jen de 5° C, hay que volverlas a colocar dentro de la casa, Pero incluso durante el verano se las puede dejar en el interior si estan en un sitio fresco y claro, Es muy importante, también para los Bonsai de interior, crear las condiciones mas parecidas a las naturales. La iluminacién, la temperatura y la hume- dad ambiente deben ser las correctas, para posibilitar un buen desarrollo de las plantas. EI mejor sitio para todos los arbolitos es en una ventana clara y orientada hacia el sur. (Aqui, como yase ha dicho, las plantas subtropicales son la excep- cién: una ventana orientada hacia el sur les seri demasiado calurosa en verano). Si no hay posibilidad de poner las plantas en un sitio asi, y si las condiciones de luz son insuficientes, se pueden compensar con luz artificial, por ejemplo con una lémpara Phillips E 86 (160 W), que en vera- no se tendré conectada 16 horas al dia, y en inviemo 161 unas 10. Para conseguir una humedad ambiente sufi- cientemente alta, hay que rociar las plantas, aparte de regarlas. Otra posibilidad de incrementar el grado de humedad cs poner las plantas con sus respectivos tiestos sobre bandejas de cerdmica, lenas con una capa de grava o bolas de arcilla cocida. El agua so- brante del riego, o de cuando se han rociado las plan- tas, es absorbida por la grava y se evapora lentamen- te, aumentando la circulacién de aire e incrementan- do a la ver el grado de humedad ambiente. Para el Bonsai de interior es recomendable usar abono liqui- do, ya que el abono organico, y en especial el abono en bolas, despiden un fuerte olor. Una buena mezcla de tierra para Bonsai de interior es tierra de jardin rica en humus, mezclada con are- na. Si las plantas son mayores, se le afiade una parte de arcilla. El replantado se lleva a cabo cada dos aios. Se pueden cultivar los Bonsai de interior a partir de semillas o esquejes, pero también a partir de la educacién de plantas de interior. Hay una lista de Jas plantas mas apropiadas para Bonsai de interior, en la pagina 176, y en las paginas posteriores hay una descripcién exacta de las especies més apreciadas de Bonsai de interior. Plantas subtropicales para su educacién como Bonsai ‘Azaleas, Rhododendron «simpsii>, Rhod. obtusum. Origen: Asia oriental Arbusto de hoja perenne, pequefa, brillante, primero de color verde claro, luego mas oscuro. Florece en todos los colores; su época principal de floracién: mayo-junio 162 w- Las especies de flor pequefia son en especial apro- piadas para la formacién de Bonsai Después de la floracién, se eliminan los restos de las flores y los drganos de las semillas. Al cabo de unas 4 6 6 semanas los brotes nuevos serdn ya sufi- cientemente largos para podarlos, dejando séio uno o dos pares de hojas en cada brote. Los brotes que crezcan directamente en el tronco 0 en la base, seran eliminados enseguida. Para las azaleas se prestan todas las formas de Arbol. Las ramas son muy quebradizas, por ello hay que alambrar con mucho cuidado, y nunca en los meses de inviemo. Situacién: En verano, de mayoa septiembre, cen una habitacién en una ventana fresca y con suficiente claridad, 0 al aire libre en un lugar a media sombra. Necesitan mucha agua durante la Epoca en que estan floreciendo, si no, necesitan bastante poca, pero sin dejarlas secar nunca. De junio a agosto, con abono de turba vegetal. No utilizar abono {que contenga componentes de cal- cio. Cada dos aiios, antes de que sal- gan los nuevos brotes, Turba/arena (70:30), 0 turba pura con un 10% de arcilla. Reproduccién: Con esquejes, injertos. Riego: Abonado: Replantado: Tierra: Camelia, Camellia japonica. Origen: Japén, China Es un arbusto de hoja perenne, de tronco lefioso y ligeramente plateado, de hojas verde oscuras, bri- antes y coridceas, y de hermosas flores blancas, rosas y rojas, de diciembre a marzo. Crecen de forma compacta y vertical, y son apropiadas para cualquier forma de Bonsai. Después de florecer se eliminan los restos de las flores, y se podan los brotes antiguos, dejando sélo 2 6 3 hojas. La planta desarrollara nuevos brotes y capullos, que se pueden alambrar de finales de vera- no a otoiio. Situacién: En verano, de mediados de mayo a mediados de setiembre, en un lugar sombreado al aire libre, oen una ventana fresca y clara, orien- tada hacia el este. Airearla mu- cho. Durante el inviemo, en una Szeleen‘bipaveica lens! ventana, a 10-12°C. Riego: Mantener constantemente hiime- da, con agua atemperada. Abonado: Después de florecer y hasta julio, con abono de turba vegetal. Replantado: — Cada dos afios, antes de florecer, sin podar demasiado las raices. Tierra: Suelo dcido con humus, pH 4,5- 5,5. Turba, arena y un poco de tierra arcillosa (3:2:1). Reproduccién: A partir de esquejes; muy dificil. 163 Crassula arborescens. Africa del Sur Conocida también como «Arbol de Jade», de hoja perenne. La Crassula tiene hojas verdes, brillantes y carno- sas, y es muy indicada para su educacién en Bonsai, pues su forma de crecimiento corresponde a la de un atbolito, y es mejorable s6lo con la poda de los brotes y limpiando la parte baja del tronco. Las plantas rasuléceas no se deben alambrar, ya que el alambre podria dafar la corteza de las ramas carnosas Situaci6n: En verano, en el interior, en una ventana fresca y clara que no esté orientada a sur 0, de mayo a sep- tiembre, al aire libre, pero res- guardada del sol. A partir de sep. tiembre, en una ventana fresca, entre 8 y 12°C. Sihace demasiado calor, se le caen las hojas. Riego: Sélo escasamente. Abonad Muy poco abono liquido, y sélo cen verano, Replantado: Cada afio en primavera. Tierra: Una mezcla de turba y arena a par- tes iguales. Reproduccion: Muy facil mediante esquejes 164 ‘tira 8 Granado, Punica granatum nana Origen: regién mediterranea Arbol de hoja caduca, de pequeiias hojitas puntiagu- das, verdes y brillantes, y flores rosas y rojas, en verano y a principios de otofio. Frutos pequefios, parecidos a la manzana. Después de florecer, se recortan los brotes dejando slo uno o dos pares de hojas. Esto se lleva a cabo mas o menos entre septiembre y octubre, o en prima vera antes de que vuelva a brotar. Los nuevos brotes se tratan como si se tratara de un albaricoquero. Este arbolito es indicado para todas las formas de Bonsai verticales y se puede alambrar de junio a septiembre. Situacion: Todo el afio en el interior, en una ventana orientada al sur, bien aireado 0, de mayo a septiembre, en un lugar soleado al aire libre. Una vez se le hayan caido las ho- jas, hay que volver a ponerlo en el interior en una ventana fresca (6- 8°C). Riego: En verano, en abundancia; en in- vierno muy poco, pero sin dejarlo desecar nunca. Abonado: ‘Con abono liquido, desde que sa- Jen los nuevos brotes hasta la flo- racién. Replantado: — Cada dos afios, en primavera, an- tes de salir los nuevos brotes. Tierra: Mezcla de arcilla, arena y turba a partes iguales. Reproduccion: A partir de esquejes o de semillas. 165 Mirto, Myrtus communis Origen: region mediterranea EI mirto es un arbusto de hoja perenne, pequeiia, brillante y de color verde oscuro, con flores blancas, de mayo a junio. El mirto soporta una poda frecuente de brotes y se puede alambrar de mayo a septiembre, Es facil de educar y es apropiado para todas las for- mas de Bonsai. La forma de escoba resulta especial- mente bonita. Situacion: A partir de mayo al aire libre, en un lugar sombreado, 0 en el inte- rior, en una ventana fresca y bien aireada. En invierno, a 8-12° C (temperatura ideal); por la noche mis frio. Esto es muy importante si de dia el mirto ha estado a unos cuantos grados mas de lo debido, En verano mucho, en invierno ‘menos, pero no dejarlo desecar. Después de brotar y hasta que flo- rezea, con abono liquido cada 15dias. Después de florecer, cada mes hasta septiembre. Replantado: En primavera, antes de que salgan los brotes. Tierra: Mezcla de turba y arcilla, a la que se afiade una buena cantidad de arena Reproduccion: A partir de esquejes 166 Serissa foetida. Orige También conocido como «Arbol de las 1000 estre- las». Es de hoja perenne, pequeiia, con flores blan- cas, en junio. Es posible que tenga flores esporddicas durante todo el aiio, La serisa es de un crecimiento exuberante y es muy fécil de educar. Se poda después de la floracién y se puede alambrar. Cuando los bro- tes hayan desarrollado tres 0 cuatro pares de hojas, se reducen a uno o dos pares. Para mantener la forma compacta del Arbol, es necesario podar hasta la ma- dera mas lefiosa, cada dos afios. La serisa suele reac- cionar con la pérdida de las hojas si se la cambia de posicién, pero se recupera muy deprisa. Al podar las raices desprende un fuerte olor, y de ello le viene el nombre latino foetida o fétida. Es una planta adecua- da para todas las formas de Bonsai Situa En verano en una ventana con mu- cha luz o al aire libre, sin estar directamente expuesta al sol. En inviemo en una ventana clara, en- tre 12 y 16°C. Mucha agua en verano; mantener con humedad constante en invier- no. Desde que brote hasta septiembre, ‘con abono liquido. Hay que dejar de abonar temporalmente durante Ja época principal de floracién ‘Mas 0 menos cada dos afios, en primavera, antes de que brote. Mezela de arena, turba y arcilla a partes iguales. Reproduccién: Muy facil, a partir de esquejes. Riego: Abonado: Replantado: Tierr C7. Sageretia theezans. Origen: China Es un arbusto de hoja perenne, brillante, pequeiia y de color verde claro. Tiene una interesante corteza manchada, que se parece a la del plitano. Es muy apropiada para el Bonsai de interior, pues soporta temperaturas muy altas en inviemo (18 a 20° C), siempre que la humedad de ta habitacién sea lo sufi- cientemente alta. Los brotes se podan sin cesar, de- jando sélo dos o tres pares de hojas. Todas las ramas que por una u otra razén molesten, se pueden cortar durante cualquier época del aio, y se puede alambrar de junio a abril. En esta planta son posibles todas las formas de Bonsai. En la pagina 133 hay la fotografia de una Sageretia especialmente hermosa Situacion: En verano: en una ventana muy clara y soleada, o a partir de ma- yo, al aire libre; en pleno verano ponerla a media sombra. En in- vierno: lo mejor es entre 12 y 16° C. Entonces de noche Ia tem- peratura tendra que ser mas baja y habré que rociar la planta un par de veces al dia. En verano, en abundancia. En in- vierno, menos, pero mantener con humedad constante Abono liquido, después de brotar hasta septiembre, cada 15 dias. Mis 0 menos cada dos afios, antes de brotar, Mezela de arcilla, arena y turba (2:12). : Mediante esquejes. Riego: Abonado: Replantado: Tierra: Reproducciér 168 Plantas tropicales para el cultivo de Bonsai Shefflera (Brassaia) actinophylla Origen: Australia Es un arbusto de hoja perenne, de tallo largo, verde y brillante. El troncoes bastante delgado al principio, y tampoco desarrolla una copa como la de las especies tropicales de ficus, La Schefflera se suéle educar como Bonsai enrai- zado en piedra, ya que desarrolla raices parecidas a Jas del mangle. Cuando el tronco haya alcanzado una altura equilibrada a la de la roca, se «decapita», es decir, se corta por debajo de las hojas. Entonces desarrollard nuevos brotes. Decapitindola varias ve- ces, se puede conseguir que la Schefflera tenga més de un tronco, que quede bien compacta en su creci- miento y que desarrolle raices mas gruesas. Situacion: En una ventana durante todo el afio, con tanta luz. como sea posi- ble, porque cuanta més luz, tanto més pequefias seran las hojas y mis cortos sus peciolos. Las tem- peratura ideal esta entre 18 y 22° C, no debe estar nunca a menos de 15° C. Las Scheffleras también se pueden poner sobre una estufa 0 un radiador. Mantener siempre mojada la capa superior de bolas de arcilla Una vez al mes mezclar abono li- quido con el agua de regar. Tam- én se puede abonar con abono para hidrocultivo (Lewatit 0 La- water) Reproduccién: Mediante semillas 0 esquejes. Riego: Abonado: pasa Especies de ficus. Ficus benjamina, F. retusa, F. deltoidea y otros Origen: sur y sudeste de Asia Las especies de ficus de hoja perenne y pequefia son ‘muy apropiadas para la educacién de Bonsai, porque desarrollan troncos robustos, un ramaje muy fino y cespeso y hojas brillantes y coridceas. Son posibles todas las formas de Bonsai. Los nuevos brotes se podan constantemente, dejando sélo 2.6 3 pares de hojas. Hay que alambrarel tronco y las ramas lefiosas con cuidado, dejando el alambre muy sielto, porque sino, al cabo de tres meses se podriahaber incrustado en la madera, absorbido por el crecimiento. Para conseguir una copa homogénea, con un ramaje fina- mente extendido, se puede proceder como con las frondosas: cortando las hojas en junio. Ademés, las nuevas hojas serin mas pequeiias que las anteriores. Situacion: En una ventana clara, pero no ex- puesto directamente al sol. Cuanta mas luz reciban, mas compacta serd su forma de crecimiento. Evi- tense corrientes de aire y cambios cde temperatura. En verano, durante la época de crecimiento, con abundancia. Si ‘std en un sitio més fresco, un po- co menos. En invierno, durante el periodo de descanso vegetativo, ‘no mantener demasiado hiimedo. Con abono liquido, después de brotar y hasta agosto. Cada dos afios, en primavera. Riego: Abonado: Replantado: Tierra: ara los ficus se pueden usar las tierras de jardin corrientes, que son permeables y ricas en humus. Reproducci6n: A partir de semillas 0 esquejes. ‘tur 0 om doc anos 169

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