Industria
El desarrollo industrial es lento debido a:
• La mala articulación del mercado (por las malas comunicaciones).
• La escasa relación entre la producción industrial y los consumidores
• La incapacidad exportadora, con una industria amparada por fuertes leyes
proteccionistas
• La irregular financiación.
Sólo dos regiones experimentaron una acumulación de capital que se invirtió en banca y
en la industria: País Vasco y Cataluña.
• La industria textil algodonera: Se desarrolla esencialmente en Cataluña. Esta región
contaba con la demanda interna y de las colonias, cuando España pierde las colonias se
centran en el mercado interior y Cuba, amparados por medidas proteccionistas. Es el sector
industrial más dinámico e importante de siglo XIX.
• La Industria siderúrgica: La siderurgia moderna española se inicia en forma de
tanteos en el periodo de 1830-70, pudiendo distinguirse tres etapas:
• Hegemonía andaluza: (1830-61) utilizando carbón vegetal.
• Hegemonía asturiana: (1861-79) cuyos altos hornos utilizaban el carbón mineral de la
región, más barato, lo que le permitió restar importancia al foco andaluz.
• Hegemonía vasca: (1880-90). A finales del s. XIX se consolida la industria bilbaína
gracias a la abundancia de mineral de hierro de buena calidad y la acumulación de capital
de empresas bilbaínas, que aprovechaban los fletes para exportar hierro a Inglaterra e
importar fácilmente carbón inglés. Este intercambio favoreció la industrialización del País
Vasco.
• La minería: Es uno de los sectores más dinámicos de la economía del XIX. Se crean
empresas, se abren yacimientos, se utiliza tecnología moderna y hay un aumento de la
producción que facilita la inversión de capital extranjero. La producción (plomo, mercurio,
hierro y cobre) se destinaba a la exportación.
• Los Transportes, el ferrocarril: Aunque se produce un avance en las comunicaciones
con la construcción de las primeras carreteras nacionales, es el ferrocarril el que marca la
pauta del progreso económico. Las primeras líneas construidas fueron la de Barcelona-
Mataró (1848) y Madrid-Aranjuez
(1851), pero la gran expansión del
ferrocarril se produjo tras la
aprobación de la Ley General de
Ferrocarriles (1855). Se diseñó un
plan radial con centro en Madrid, el
gobierno favoreció las inversiones
extranjeras, por ello la construcción
se llevó a cabo a través de
compañías extranjeras, sobre todo
belgas, inglesas y francesas. La
construcción del ferrocarril logró la
articulación del país, la creación de
un mercado nacional y la multiplicación de los puestos de trabajo; pero no contribuyó al
fomento de la siderurgia española, pues se importó el material ferroviario necesario.
Historia de España 2º de Bachillerato. Profesor Antonio Luis Díaz García
IES Luis de Morales. Arroyo de la Luz (Cáceres)
Lisboa a través de Navalmoral, Trujillo, Mérida y Badajoz, aunque su estado era deplorable
en las zonas montañosas como el puerto de Miravete.
La aprobación y construcción de la línea férrea Madrid-Lisboa que pasaba por Ciudad
Real y Badajoz pero no por Cáceres enfrentó a ambas provincias extremeñas, con gran
disgusto y humillación para los cacereños. Sería ya más cerca de finales de siglo (1881),
durante el reinado de Alfonso XII, cuando tras descubrirse los yacimientos de fosfatos en
Cáceres se construyó una línea férrea que unía Cáceres (Aldea Moret) con Madrid y Portugal
a través de Valencia de Alcántara. A finales de siglo se enlaza Cáceres con Salamanca.