Se dio cuenta que Guerrero y sus hombres conocían como nadie las montañas del Sur, y que en ese
terreno sería casi imposible derrotarlos.
Comprendió entonces que la Independencia "sólo se lograría si los militares insurgentes se aliaran con
las fuerzas que militamos bajo las órdenes del Rey", como había dicho a un subordinado tras sufrir su
única derrota, en el fuerte del Cóporo
Iturbide empleó pues, una nueva estratagema: escribió a Guerrero el 10 de enero,[6] pidiéndole que se
retirara de la lucha, que el gobierno respetaría su cargo militar y le concedería el indulto. Guerrero se
negó terminantemente. Entonces Apodaca envió al padre de Guerrero al campo de batalla para
suplicarle que aceptara el indulto. Ante esta situación, Guerrero pronunció su frase más conocida:"La
Patria es primero"´.
Los hombres al mando del coronel Berdejo fueron derrotados nuevamente el 27 de enero de 1821, por
las fuerzas insurgentes. Iturbide había enviado una carta fechada el 25 de enero en Teloloapan,[7] en la
que le solicitaba una entrevista y le exponía los puntos de su programa político, posteriormente
recogido en el Plan de Iguala.
Lucas Alamán desmiente esta versión. Según él, Iturbide no logró inspirar suficiente confianza en
Guerrero, y éste envió en su lugar al teniente José Figueroa, quien estaba facultado por Guerrero para
arreglar todas las las condiciones