Anda di halaman 1dari 6

Augusto Monterroso (Y Cosas Varias)

«Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí ».


Augusto Monterroso escritor guatemalteco con alma de mexicano. Nació en
1921 y murió en 2003. Maestro del micro-cuento y del correveidile. Gran
exponente del cuento. Siempre en sus cuentos puede encontrarse la
simplicidad y la congruencia que hacen prescindible la extensión. El autor
basa la mayoría de sus fabulas, cuentos y ensayos en la representación y la
sátira de las cualidades y comportamientos humanos. Sin duda alguna con
su capacidad para escribir, Augusto Monterroso podría ser el rey de Twitter
(al menos en el español).
 Según la escritora Argentina Ana María Shua, los micro-cuentos: “Tienden
a desaparecer si se los mira de frente: son demasiado tímidos y traslúcidos.
Para escribirlos basta con tomar un poquito de caos y transformarlo en un
miniuniverso. Como las pirañas, son pequeños y feroces. Aconsejo
descartarlos si no muerden”. Precisa descripción del micro-cuento, esta a su
vez nos muestra una clara visión del objetivo de este: dar al lector la
sensación de estar en un, como lo llama la autora, miniuniverso en el cual
todos los pequeños elementos juegan un papel importante en conseguir la
funcionalidad total del ejercicio lector.
Así que, ¿Determina realmente la extensión de un escrito su calidad?
Augusto Monterroso nos demuestra como en un espacio corto y de una
manera tan simplista puede darse un mensaje tan claro y tan conciso. El
llamado micro-cuento, es considerado en muchas materias una vertiente
natural del cuento. En la mayoría de casos se presentan las mimas
condiciones del cuento normal, solo que a menor escala. Las características
principales del micro-cuento son en primera medida su extensión, y en
segunda medida la capacidad de alterar o de turbar al lector.
Tomando como referencia las dos características principales del micro-
cuento, puedo asegurar que Augusto Monterroso fue un maestro de este
género. Como expreso Jorge Luis Borges: <<Desvarío laborioso y
empobrecedor el de componer vastos libros; el de explayar en quinientas
páginas una idea cuya perfecta exposición oral cabe en pocos minutos. >>
Monterroso tenía un manejo preciso de la extensión, del tiempo y de la
narrativa, que llaman a sobremanera la atención del lector, al cual
prácticamente “obliga” a releer el texto. Además de esto, el mensaje que el
autor plantea en sus textos, de alguna manera siempre recala en la
humanidad del lector, presentándole una visión de sí mismo al descubierto,
para que este pueda analizarse.
El micro-cuento en el contexto hispanoamericano ha estado presente desde
el siglo XX. Aunque en algunos casos autores como Rubén Darío, Amado
Nervo o Julio Torri, son considerados como iniciadores de este género en
esta región. Es mejor empezar a elaborar su historia desde la Argentina de
los cincuentas. Con la aparición de Bioy Casares y Jorge Luis Borges
realizando la antología de narraciones breves y extraordinarias donde se
encuentran relatos de hasta dos líneas. En los sesentas Julio Cortázar con
su obra Historias de Cronopios y Famas se encargo de imponer el género
en Europa. También hay que ver el papel del micro-cuento en el contexto de
las dictaduras del cono sur latinoamericano, aquí hay un pequeño cuento de
la escritora chilena Pía Barros:
“Golpe 
Mamá, dijo el niño, ¿qué es un golpe? Algo que duele muchísimo y deja
amoratado el lugar donde te dio. El niño fue hasta la puerta de casa. Todo
el país que le cupo en la mirada tenía un tinte violáceo.”
En este micro-relato se encapsula la realidad del duro golpe militar chileno
auspiciado por Augusto Pinochet. Después de esta época, el micro-cuento
comienza su expansión a través de Hispanoamérica se presenta una de las
mas grandes figuras.
El micro-cuento en Colombia, aun no tiene una representación fuerte, solo
pequeños esbozos. Los literatos colombianos siempre se han inclinado por
otros géneros. Pero aún así, se pueden ver muestras de estos en este país
gracias al auge de la tecnología y el desarrollo de plataformas de encuentro.
Es el caso de César Salazar, Twittero colombiano, quien gano un concurso
de mini-cuentos organizado para conmemorar los diez años de los portales
literarios venezolanos Ficción Breve Venezolana y Panfletonegro con el
apoyo de la Editorial Planeta. El mini-cuento en cuestión es “Antes de
usarla, quiso caminar sobre la soga”, el cual demuestra que en este país
existe el talento y la creatividad necesaria para darle el impulso necesario
para dar a conocer este género.
La gran aceptación de los cuentos de Monterroso, la interpreto yo, se debe
al manejo de los tiempos que se le da a la vida cotidiana. Vivimos en un
mundo en constante ajetreo, en la que el tiempo que se aprovecha, es
dinero; ya no es rentable sentarse a leer una novela larga, aquí es donde
Monterroso con sus historias breves toma un papel importante, dándole al
lector moderno una salida rápida en su busca de bienestar con la literatura.
Además de la rapidez con que la que puede ser leída, como ya he dicho
anteriormente, la claridad de su mensaje, la hace una excelente elección a
la hora de buscar una obra que sea llamativa, corta y completamente
descifrable.
Aun contra lo anteriormente dicho, el micro-cuento es aun un género
subvalorado. Monterroso es conocido a nivel mundial solo por su cuento El
Dinosaurio, las demás obras de este autor son poco conocidas. Tomando
como punto de partida las clases de literatura o de español como se le
conoce comúnmente, el micro-cuento no tienen un espacio, solo se estudian
las llamadas grandes obras de la literatura universal. Gran error, ya que el
micro-cuento presenta una nueva, si se me permite llamarla nueva, visión
de la literatura, sugiriendo nuevos retos a los estudiantes. Me parece
interesante plantear el ejercicio de la escritura breve aplicado a estudiantes
de colegio.
Y ya que mencione El Dinosaurio de Monterroso, me parece interesante
hacer un pequeño análisis de este. Cuando despertó, el dinosaurio todavía
estaba allí, Lo primero que se observa aquí es, claro, su brevedad, siete
palabras fueron necesarias para crear esta joya de la literatura
hispanoamericana. Hay que tener en cuenta que la brevedad de el micro-
cuento es diferente de la que se maneja en otros micro-textos, como es el
caso del chiste o la anécdota, mientras que en estos dos la historia o lo que
se cuenta esta concluida, en el micro-cuento siempre se deja abierto al
lector la interpretación del texto.. Además de esto se resalta la precisión de
los términos utilizados y del manejo de tiempos que aquí se ven. También
se ve el manejo de la economía de recursos, importantísima en los micro-
cuentos. La ambigüedad semántica se encuentra de una manera sublime,
¿Quién despertó? ¿Por qué esta allí? ¿Quién es el dinosaurio? ¿Por qué el
dinosaurio se encuentra allí?; la ambigüedad del texto a dado vía libre a que
muchos autores escriban continuaciones o secuelas de El Dinosaurio, como
es el caso del escritor argentino-canadiense Pablo Urbanyi quien escribió
una versión alterna del mismo << Cuando despertó, suspiró aliviado: el
dinosaurio ya no estaba allí. >>. O como el autor ecuatoriano Marcelo Báez
<< Y cuando el dinosaurio despertó, el hombre ya no seguía allí>>. Lo
interesante de los micro-cuentos anteriores es que carecen de total sentido
si primero no se lee o estudia el cuento original de Monterroso.
El Dinosaurio es llamado frecuentemente “el cuento más corto del mundo”.
Nada tan falso como eso, hay una gran cantidad de cuentos de menor
extensión, El Inmigrante: << ¿Olvida usted algo? -¡Ojalá!>> del mexicano
Luis Felipe Lomelí. Este cuento con una extensión de tan solo cuatro
palabras, cuenta con las mismas características categorizadoras que las del
texto de Monterroso. Y me parece muy interesante el significado que ha
título propio le doy a este micro-cuento, él como un inmigrante emprende un
viaje pretendiendo olvidar.
La Oveja Negra y demás fabulas. Me parece también importante hacerle a
esta obra de Monterroso un apartado especial, de la misma manera que ya
se la di a El Dinosaurio. Monterroso, maestro de la sátira y la Alegoría, nos
muestra en este texto una clara forma en la cual cada uno de nosotros
puede verse representado. Fabulas, palabra clave para empezar un estudio
preciso de este texto ¿son en realidad Fabulas lo que nos plantea
Monterroso en sus textos? Bien, una rápida mirada de su escrito podría
hacernos caer en un rápido y rotundo ¡SI!, ya que presenta la recreación
humana mediante el uso de animales, plantas u objetos, además nos
presenta una enseñanza o moraleja. Grave error. Quiero primero compartir
la visión que el propio Monterroso nos da en su texto La Palabra Mágica
acerca de la moraleja en sus obras:

“… si alguien quiere extraer de ellas alguna moraleja, está en su derecho y


puede hacerlo. Corregir las malas costumbres de la gente es una tarea
demasiado fácil que hay que dejar a las autoridades. El escritor debe
ocuparse de lo verdaderamente arduo: el buen uso del gerundio, por
ejemplo, o de la preposición a, que se acostumbra a emplear mal. Yo me
gano la vida corrigiendo esa costumbre.”
Con lo anterior Monterroso nos da un claro mensaje que sus textos, no
pueden ser tomados como unas simples fabulas. Una parodia o una anti-
fábula, así es como me parece prudente llamar a esta obra. Una fabula por
regla general se encuentra dirigida a un publico infantil, debido a esto se
utiliza un juego de palabras que sean rápidamente interpretado por los
infantes. Monterroso también lo hace, claramente, pero este exige mucha
más de su lector debido a su uso premeditado y exquisito de la ironía.
Esta obra es interesantemente particular debido a su excelente manejo de
personajes históricos como Aquiles el cual maldice a Zenón de Elea al
perder la carrera con la tortuga, para dar un poco de contexto a esto hay
que recordarla teoría de Zenón de Elea sobre la imposibilidad del
movimiento y su ejemplo de “Aquiles y la tortuga” además tener presente
que Aquiles era llamado el “de los pies ligeros”. O como en su texto La
Buen Conciencia nos muestra a un Céfiro (dios griego del viento) como un
murmurador. Pero Monterroso no se limita a solo personajes históricos,
refranes o proverbios también son objeto de inspiración: La Fe y Las
Montañas, clara referencia a ese conocido dicho de “la fe mueve montañas”.
Monterroso inclusive se da el lujo de hacer fabulas sobre otras fabulas como
es el case de su escrito Gallus Aureorum Ovorum referencia magistral a La
Gallina de los Huevos de Oro. Como dato gracioso, en el texto El Mono que
Quería ser Escritor Satírico, es una autocritica que se hace el mismo autor,
Monterroso en entrevista con Claudia Posada, nos dice lo siguiente sobre la
autocritica:
“Con el tiempo el verdadero escritor satírico se da
cuenta de que no puede tratar a los demás sin pasar antes
por él. De otra forma, no se vale cualesquiera que
sean las observaciones o críticas que pueda hacer sobre
los demás uno sabe que a quien está retratando es a sí
mismo. Él debe conocer las debilidades y los defectos
humanos a través de los suyos propios...”
Con todo esto se puede evidenciar la grandeza de la obra de Monterroso y todo lo
que ha contribuido a la cultura hispanoamericana. ¿Por qué no es entonces
considerado como uno de los “grandes” de la literatura castellana? No es posible
que un escritor de su talla siga siendo menospreciado y se le excluya de participar
del reconocimiento que la literatura les da a otros autores, tal vez, con menores
argumentos. Solo queda esperar a que las directivas que trazan los planes
escolares o a que los lectores ávidos de buenas lecturas, encuentren en
Monterroso una excelente salida a sus necesidades.

Anda mungkin juga menyukai