Damaris Mallma Escribe: CATERINA VELLA “Admiro a Miki ñaba con el charango.

Al terminar la
secundaria se dio como algo natural
Fotos: RENE FUNK González. Juntos
Florecita
que yo fuera música, era lógico, el
siguiente paso.
hemos hecho una – Te salvaste de la crisis vocacional.
zamacueca muy – Jamás la tuve. Desde el colegio
tomaba clases paralelas de instrumen-
rica en homenaje a tos y canto. Estaba apta para salir y

Rockera
A fines de febrero competirá con su canción Tusuy
Chabuca Granda”. empezar a hacer música.
– Si sabías que querías ser música,
por qué decides ingresar a estudiar tea-
tro al TUC. ¿Lo lógico no hubiera sido el
Kusun por la Lira de Oro en el 500 Aniversario del Conservatorio Nacional de Música?
–El Conservatorio no fue una pri-
Festival de Viña del Mar. mera opción, pues había estado estu-
diando con profesores particulares y

P
OSA con parsimonia: la sonrisa estudiada, ninguna tenía muy claro el tipo de música que
mueca, coqueta la mirada. Parece que estuviera quería hacer. Decidí estudiar teatro
pues me iba a dar posibilidades de
frente al espejo y no ante una cámara. A pedido hacer bien y con seguridad, lo que yo
del fotógrafo mamá Saywa entra al encuadre. Se miran sabía que quería hacer. Quería estar en
el escenario con los pies bien puestos.
cómplices, tranquilas, con esa calma de la sierra donde –En el 2002 compusiste tu primera
los tiempos son otros, ajenos al rush de la ciudad. canción: una balada romántica con la que
Damaris vivió toda su infancia en ¿De dónde viene el nombre Damaris? ganaste el Pepsi Chart.
Huancayo, antes de venir a Lima a Lo saqué de la Biblia, me pareció muy – Tenía 14 años y estaba en toda la
estudiar en el Teatro de la Universidad bonito, único. Es el nombre de la prime- época del amor, me encantaba Laura
Católica (TUC). Desde niña creció ra mujer que se une al cristianismo. Pausini.
rodeada de música, arrullada por los El fotógrafo debe cambiar las luces, – Ganar dos Gaviotas de
huaynos de su madre, una cantante aprovecho para empezar la entrevis- Plata en Viña del Mar ha sido
vernacular. ta a Damaris, quien se libera de sus muy importante. Debe ser una
Saywa en su repertorio tenía una altísimos tacos y se sienta relajada a presión bien fuerte representar
canción dedicada a una niña, así que conversar. a tu país, además comentaste
subía a la pequeña Damaris al escena- –Muchos piensan que tu éxito ha sido que tenías mucho frío antes
rio para cantársela. Cuando cumplió casual e instantáneo, pero en realidad de salir al escenario. ¿Cómo
seis años le hizo su primer regalo desde muy niña estás vinculada a la músi- enfrentaste al monstruo de la
importante: un charango profesional. ca por Saywa, tu madre. ¿Cuándo te diste Quinta Vergara?, como se cono-
“Llegué a la casa con el charango cuenta que lo tuyo era ser profesional de ce al temido público del
tocándole y cantándole un huaynito la música? festival chileno.
ayacuchano”, recuerda Saywa. Y a ella –Estuve dentro del ambiente musi- –Me había
le gustó el sonido. Como jugando empe- cal desde niña. Para mí era normal ver preparado para
zó a tocarlo”. Habla suavemente, con a mi mamá cantando en conciertos, el enfrentamien-
delicadeza, su voz parece un susurro. incluso desde los 10 años la acompa- to con el escenario,
pero ciertas cosas salie-
Izquierda: Hija de ron la misma noche que
padres me pusieron a prueba. Me puse
ayacuchanos vivió un vestido ligero pensando que
toda su infancia sería un cálido balneario, pero
en Huancayo. hacía un frío serrano, como las
Damaris, la niña noches de Huancayo. Tres minu-
del centro, y sus tos antes de salir no podía respirar
dos primos y sentía mis piernas frágiles. En
corretean lugar de intimidarme saqué toda
alrededor de mamá mi energía como una forma de
Sawya. Orgullosa protegerme de lo nerviosa que
de sus orígenes estaba. En ese momento pensé:
ganó la Gaviota de o te sientas y te vas abajo, o la
Plata cantando en haces bien. Y le di con todo.
quechua. –La letra de tus canciones
hace referencia a que la cultura
andina debe ser admirada. ¿Con
tus composiciones buscas reivin-

16 CARETAS / FEBRERO 5, 2009 CARETAS / FEBRERO 5, 2009 17

 Cantante ver-
nacular Saywa
e hija Damaris,
comparten
escenarios desde
hace quince años.
PRODUCCIÓN: JUNKO PRODUCCIONES./ MAQUILLAJE Y PEINADO: ALEJANDRO ÁLVAREZ PARA NATURA (427*6850) / VESTUARIO (STYLING): CHIARA MACCHIAVELLO (9 9199-3789)
dicar a la sierra y su gente?
–Sí, creo que, como huancaína,
inconscientemente tengo esas ganas
de que mi tierra, mis orígenes se vean
bien. En mis primeros años mi onda
era mucho más andina, tenía muchas
ganas de darle otra cara a lo que se
conoce como música andina, dar otra
opción. Es importante que haya per-
sonas que mantengan las tradiciones,
pero también debe haber gente que la
muestre de una forma que sea enten-
dible para todos, que la haga más
universal.
18 CARETAS / FEBRERO 5, 2009
– Comentaste que admiras a Miki
González, hasta les inventaron un ampay.
¿Estás trabajando ahora con él?
– Somos muy buenos amigos, real-
mente lo admiro. Hemos hecho juntos
una canción para un disco tributo a
Chabuca: él la produjo y yo la canto. Se
titula Coplas a Fray Martín y es una
zamacueca muy rica. Susana Baca,
Eva Ayllón y Jaime Cuadra también
participan del disco que será lanzado
en febrero o marzo.
Damaris vuelve a las fotos, ahora
con vestido plateado y guitarra acús-
tica. Su pelo lacio y con iluminaciones
se ve muy bien, así como su sonrisa
del Dr. Ochoa. La chica de Huancayo
se ha producido. Su look contemporá-
neo va con su música. Mamá Saywa
la observa, ella sí usa polleras en el
escenario. No como su hija que desde
el principio se sintió más cómoda en
jeans con aplicaciones andinas. “No
soy una tradicionalista conservadora,
siempre he creído que el huayno tiene
que evolucionar sin perder su esencia”,
dice Saywa. “Desde mis primeros dis-
cos incluí nuevos instrumentos como
quenas y zampoñas. Mantuve la tradi-
ción aunque siempre queriendo hacer
cosas novedosas, pero yendo despacio.
Damaris, en cambio, desde un inicio
marcó la diferencia”.
–Tu vestuario lo diseña Chiara
Machiavello, quien fusiona telas y estilos.
¿Consideras que las dos van por el mismo
camino, tú en la música y ella en la moda?
–Cuando conocí a Chiara me sentí
muy conectada, sentí que ella hacía
en la ropa lo que yo estaba intentando
hacer con la música. Lo que hago musi-
calmente, ella lo hace visualmente.
Estoy encantada de seguir trabajando
con Chiara.
–Tu propuesta musical es calificada
como música andina contemporánea.
¿Sientes que es la definición correcta?
–Siento que cada vez me alejo más
de esa definición. Lo que quiero hacer
no es solo andino, que es algo que ya
he desarrollado. Quiero explorar más
la costa, la selva, al Perú como gran
potencia, no solo por zonas. Quiero
integrarlo. Una vez me presentaron
como “Damaris: la cantante que hace
fusión” y eso fue lo que más me ha
llenado. Quiero hacer música perua-
na, pero también del mundo, de todo.
Quiero conocer el folclore de otros paí-
ses, creo que la esencia está allí.
–Como Manu Chao, que viaja por el
mundo.
–Me encanta Manu Chao, anda
recogiendo todo, la esencia de cada
país. Creo que el ser humano está en
constante cambio y a mí me gustan las
cosas nuevas. Quiero viajar a lugares
misteriosos en busca de música para
seguir creando, componiendo, fusio-
nando.
Al terminar la entrevista y sesión
de fotos mamá e hija músicas parten
juntas. La camioneta 4x4 brillante y
roja de Damaris las espera estaciona-
da en la puerta del estudio. Está lista
para iniciar la travesía. ■
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