Anda di halaman 1dari 3

encuentros

Nacho Vegas TRAS SONADAS COLABORACIONES CON ENRIQUE


BUNBURY Y CHRISTINA ROSENVINGE, ENTREGA SU OBRA MÁS COHESIONADA
Y ACCESIBLE. EL MANIFIESTO DESASTRE, ASÍ LE LLAMABA SU MADRE DE NIÑO.

FUMANDO SOBRE PLATA


EL TERROR QUE DA VIVIR
S iempre hubo en los discos de Igna-
cio González Vegas (Gijón, 1974) in-
dicios de un estremecimiento en
ciernes. Lo provoca plenamente El Manifies-
to Desastre, donde se han forjado a fuego
más lejos y yo poniendo más énfasis en la
parte autoral de la canción de rock, así que
es natural que en esencia no se note la hue-
lla de mi paso por Manta Ray. Sin embargo,
en algunos directos sí que se puede apreciar
+ INFO
Interesante prosista,
ha publicado Política
de Hechos Consuma-
bre son colaboraciones, y que estaría bien
que eso ocurriera en España con el rock.
Pero tanto el público como la crítica y el
propio mercado miran siempre con recelo
estas uniones, como si siempre tuvieran que
dos (Limbo Starr),
lento sus nuevas canciones, en un trayecto lo que aprendí tocando con ellos, a la hora ser interesadas, como si no se creyeran que
libro que conecta
que ya no muestra las grietas de antaño: de tratar de crear un sonido orgánico y el único interés es el artístico.
con las elaboradas ¿Cuál es la característica que desconocemos de
aquellos requiebros rozando la melancolía enérgico en algunos temas.
más líquida, ese tremendismo a pie de letra Pese a tu aliento europeo mantienes nexos notas interiores del Bunbury?
que levantaba sospechas. Vegas sigue atra- con músicos tejanos como Townes Van Zandt o reciente recopilatorio No sabría decirte, Enrique es un artista
pado en sórdidas habitaciones en un perpe- Guy Clark. ¿A qué crees que se debe? Canciones Inexpli- muy apasionado y a la vez muy complejo. A
tuo, narcotizado amanecer; estancias de No sé, escuchando músicos de rock fui cables. Se reconoce mí me sorprendió la inseguridad que mos-
paredes desvencijadas exudando olor a en- tirando del hilo hacia atrás y me acabó fas- adicto a Brett Easton traba cuando tenía que mostrarse más frá-
fermedad y derrota, cuyo desconchado es- cinando el country y el folk. Pero, curiosa- Ellis, Raymond Carver gil... Yo propuse que el disco que hicimos se
pejo devuelve la renuncia ante una vida a mente, gran parte del folk americano pro- o Barry Gifford: ‘’La llamara El Tiempo de las Cerezas, como su
remolque de la conformidad. Le he visto viene del irlandés, y las raíces del country se literatura norteame- canción, porque creo que nunca antes se le
apurando whiskys a media tarde, durante la pueden buscar en el folk centroeuropeo. Es había escuchado en disco de una forma tan
ricana comparte unos
prueba de sonido, para matar gusanillo y una de las cosas que me interesaba cuando desnuda, prácticamente con su voz y una
rasgos esenciales, una
calentar entrañas. No extraña que emerjan Xel Pereda y yo íbamos adaptando las can- guitarra acústica. Es un tema precioso, y fue
manera de cuestio- el que más le costó grabar, tuvo una crisis
leyendas urbanas a su costa, como la que le ciones asturianas para Lucas 15; toda la
tenía de vacaciones tóxicas junto a Fernan- música popular occidental comparte en narlo todo mostrando tremenda que nos dejó a todos paralizados
do Alfaro en una barriada sureña de yon- esencia una serie de patrones rítmicos y ar- el otro lado del sueño en el estudio. Creo que es eso: Enrique cono-
quis chandaleros. O esos indignos rumores mónicos, y de ahí las conexiones. Y el rock americano que une ce bien su fuerza y la domina perfectamen-
sobre sus apetencias sexuales —‘’Nos que- no es más que música popular bastarda que a Carson MacCullers te, pero le tiene miedo a su fragilidad, y eso
dará, menos mal, dry martini, sexo anal’’, admite influencias de cualquier folclore. con Richard Ford, que allí puede encontrar algunos de sus
canta en mi canción española del año pasa- Desde esa adaptación del acervo tradicional reconocible en dife- momentos más intensos y emocionantes.
do—, que supongo serán las de todos quie- asturiano, ¿cómo ves los nacionalismos? rentes generaciones. Bajo la piel de Christina Rosenvinge hay una
nes andamos a dos patas. El problema aquí es que se quieran en- La literatura europea, mujer de una lucidez parecida a la tuya propia.
Luego está el otro Nacho Vegas. Cercano tender los nacionalismos como una lucha de sin embargo, es más
¿Qué os une?
e irónico, alto y elegante a su manera en el oposición privativa, donde el españolismo Cuando empezamos a trabajar juntos
heterogénea y yo creo
vestir, cargando en el día a día con una sen- más rancio oprime al resto de nacionalismos nos dimos cuenta de que teníamos una
que difícil de definir
sibilidad indecisa entre el alivio y el dolor, del estado y pretende arrasar con la diversi- manera similar de enfrentarnos a las cancio-
ocultando sus ojos tras unas clásicas Ray- dad pluricultural que es lo que precisamente incluso por países’’. nes, de tratarlas para conseguir expresar
Ban que fijan su angosto rostro en una hoy define a este país. Desde luego yo estoy Sin embargo, destaca cosas en ellas que no sabríamos expresar de
imagen distante, tal vez chulesca. El joven a favor de que cualquier pueblo tenga pleno a la novelista Agota otra manera, y eso hizo que que el trabajo
guitarra solista en segundo plano de los derecho a la autodeterminación. Kristof, ‘’cuyas nove- fuera fluido aunque tengamos formas dife-
esenciales Manta Ray, pronto empujado por Sabemos de tus querencias por Leonard Cohen las desprenden una rentes de escribir e interpretar. Pero hablan-
díscolas musas a tomar el camino de la o Will Oldham, sin embargo tu dicción remite crueldad tan brutal do de esa imagen que alguna gente quiere
canción con sustrato literario, esa que da a ciertos cantautores de aquí. que me extrañaría tener de Christina, lo triste es que a estas
igual valor a la palabra que a la música: Bueno, el español posee su propio ritmo mucho ver en un au- alturas sigue teniendo que aguantar un
«Añada de Ana la Friolera», «En la Sed interno y esquema silábico que difiere de tor norteamericano.
montón de cosas sólo por ser mujer, como
Mortal», «Mi Marilyn Particular», «Días los del inglés y que hacen que el fraseo y la que en más de un artículo se refirieran a mí
O el cinismo de Houe-
Extraños»… Las últimas —memorables, dicción también hayan de ser diferentes, como el ‘’músico’’ que componía y a ella
llebecq, del que diría
aciagas, resonantes, doloridas— están en El por lo que es lógico que yo remita a otros como la ‘’cantante’’ que ponía la bonita voz,
Manifiesto Desastre, donde quizá han sido cantantes que usan el español. Reconozco lo mismo’’. En poesía, o que le hayan sugerido en varias ocasiones
tratadas con un aliento más orgánico y rock, en mí alguna vez la influencia de Calamaro, prefiere la europea que ahora canta en español por influencia
no sólo por el guiño puntual a Marc Bolan. Albert Plà o Christina, como te decía antes. y latinoamericana: mía. Una de esas veces ella respondió:
Que hayan cuajado coherentes y trascen- Últimamente me fascina el fraseo de un ‘’Ana Blandiana y ‘’¡Pero si yo hacía discos en español cuando
dentes, estas canciones con una razón de cantante argentino, Edmundo Rivero. Sus Antonio Cisneros son Nacho todavía era virgen!’’.
ser… en la época del todo vale, anuncia una milongas son tremendas. los últimos. Ah, en ¿Hasta qué punto estos tres años de promiscui-
etapa de plenitud que, aun largamente Siempre aclaras que tus trabajos compartidos este disco he utilizado dad han dejado sedimentar las canciones de El
anunciada, conmociona. tienen tanta importancia como los propios. a Pessoa, creo que Manifiesto Desastre hasta alcanzar su pleni-
¿Está volviendo la colaboración al rock? podría haber sido un
tud?
No queda en tus canciones casi nada a la vista Ojalá fuera así, pero no lo creo. La mayo- Cada una de esas colaboraciones ha sido
gran letrista de pop. Y
de tu experiencia en Manta Ray. ría de las colaboraciones son cosas puntua- muy intensa y ha dejado una huella que se
quiero hacer un disco
Abandonar Manta Ray resultó necesario les, un músico que interviene como invita- puede rastrear en este último disco. De En-
porque yo quería tomar un camino diferen- do en una canción de otro, pero no abundan con poemas de Gloria rique me fascinó su forma de trabajar en el
te del que seguía el grupo. A partir de enton- las colaboraciones estrechas, mano a mano. Fuertes, que son lo estudio y con la banda, la manera de mol-
ces evolucionamos cada uno pero en senti- Cuando hice el disco con Enrique Bunbury más parecido a las le- dear las canciones hasta llevarlas allí donde
dos opuestos, ellos fabricando un sonido hablábamos de que, en estilos como la bos- tras de Vainica Doble tenían que llegar, dirigiendo pero dejándose
propio que en directo era donde llegaba sanova o el jazz, algunas de las obras cum- que conozco’’. influir por la manera de interpretar de cada

12 | 02-09 | RUTA 66

12-14 e.nachovegas.indd 12 15/1/09 19:31:54


NACHO VEGAS | RUTA 66

A G U I L E R A
A L I C I A
F O T O S :
J U L I À
I G N A C I O
T E X T O :
]

El moderno bardo
se encara a la
contradicción de vivir
desde canciones
asumidas en primera,
o tercera, persona

RUTA 66 | 02-09 | 13

12-14 e.nachovegas.indd 13 15/1/09 19:31:58


encuentros
músico, en fin, haciendo que la canción
mandara por encima de cualquier sujeto.
Eso es algo que yo persigo y creo haber
aprendido algo de Enrique. Con Christina la
experiencia tremenda fue cantar con y jun-
to a ella en un disco y toda una gira. Siem-
pre admiré mucho su voz tierna y perturba-
dora a un tiempo, y esos matices que ella
usa los he empleado en algunos temas del
nuevo disco. Con Xel llevaba ya casi tres
años preparando Lucas 15, y han sido su
sabiduría y su genialidad como músico las
que me han permitido bucear un poco en el
mundo del cancionero asturiano. Cuando te
enfrentas a canciones que han pervivido a
lo largo de generaciones, básicamente por
transmisión oral, encuentras algo puro y
natural en ellas que quieres que también
tengan tus canciones.
El disco parece sustentarse en tres sobrecoge-
doras escenas a modo de planteamiento,
nudo y desenlace. ¿Cómo evitas que caigan en
la autocompasión y el melodrama pese a bor-
dear ambas cosas?
Sí, precisamente después de secuenciar
el disco, tras darle muchas vueltas, me di
cuenta de que puede entenderse como una
historia invertida en el tiempo: el punto de En el temario del uno toma conciencia de sí mismo las cosas tro de sí mismo y encuentre aquello que
partida sería el último tema, «Morir o Ma- asturiano quedan no hacen más que complicarse y es de he- hace de cualquiera un asesino potencial. Yo
tar», y el final sería la canción que abre el vestigios de Leonard cho todo ese caos lo que a mí me impulsa a creo que en el interior de cada uno de noso-
disco, «Dry Martini, S.A.». Lo que ocurre en Cohen y Nick Drake, tros se encuentra un mosaico complejo de
escribir canciones, por ejemplo. Pero es que,
medio es lo que ocurre en el camino, y «El de canción francesa y rasgos emocionales confusos y extremos
además de la angustia de vivir, está el miedo
Tercer Día» está articulando las dos mitades country tejano a morir, que también rige nuestras vidas y que nos pueden llevar a ser unos santos o
del recorrido. Y bueno, es cierto que a veces que es la razón misma de que existan las unos miserables, y todo lo que hay en me-
me acerco peligrosamente a terrenos resba- religiones. Todo es una cruel paradoja; lu- dio. Sólo unos pocos de esos rasgos afloran
ladizos, pero se debe buscar la distancia ne- char por seguir en pie un día más, desafian-en vida y nos hacen ser como somos, pero
cesaria entre la canción y uno mismo para en realidad en el fondo se encuentran todos
do a la vida, y a la vez tratar de mantener el
evitar caer en la autocompasión o el melo- final bien lejos, desafiando a la muerte. Enellos. Y la labor del intérprete, escénico o
drama. Para mí ese es uno de los procesos cualquier caso, una batalla perdida. Y sin musical, es rebuscar ahí para luego expre-
que implican escribir una canción: encon- embargo, el ser humano lo intenta con todas sarse a través de personajes. A mí me intere-
trar esa distancia adecuada, que siempre ha sus fuerzas, es cabezón como él solo. Eso essa un tipo de personaje que se puede califi-
de existir por mínima que sea. A veces se algo que me fascina de la condición huma- car de nihilista, o incluso de cínico, pero no
consigue usando la tercera o segunda perso- na. Y además significa que se le pueden ex- quiere decir que yo lo sea; lo que hago es

{ }
na en lugar de la primera, usando el humor, tratar de sacar
adoptando una perspectiva temporal que te En el interior de cada uno de nosotros se encuentra un a la luz esa
aleje de aquello que quieres relatar... En de- parte de mí
finitiva se trata de transformar la realidad mosaico complejo de rasgos emocionales confusos y extremos que está en
cuando la usas en una canción. que nos pueden llevar a ser unos santos o unos miserables algún lugar
Una constante es la cotidiana necesidad de escondida y
paliativos en forma de drogas. ¿Hasta qué primir unas gotas a la vida que hagan que ponerla al servicio de la canción. Así que,
punto las letras exageran o subliman tus adic- merezca la pena, ¿no? Eso espero, vaya. bueno, yo no llamaría a eso impostura artís-
ciones? ‘’Y os miro a los labios y a todos os oigo pedir tica, pero entiendo lo que dices.
Es cierto que en su momento me fascinó perdón por existir’’. ¿También tú…? ¿No hay fugaces momentos de plenitud, en los
de una manera extraña el tremendo poder Sí, claro, pero es que todo eso de la culpa que el tiempo se detiene sin necesidad de
analgésico de algunas drogas fuertes, cuan- y la redención es algo que llega a cansar narcóticos, dignos de hacerse canción?
do ya no las usas para obtener placer sino enseguida, es la mosca cojonera de los las- Por supuesto que existen, son esa espe-
para obtener alivio y combatir la tristeza o tres educacionales, por eso yo decidí hacer cie de éxtasis del que te hablaba antes que
incluso la angustia. Eran como una síntesis una canción en la que pidiera perdón por te pueden proporcionar una canción, o un
perfecta de lo que consigues con las cosas todo a la vez y así no tener que volver a ha- libro, o el amor, o el sexo o cualquier cosa
importantes de verdad, esos momentos casi cerlo más. Aunque no sé si lo he consegui- que te emocione de tal manera que tengas
místicos que se consiguen con el amor, o do… la sensación de que el tiempo se ha deteni-
con la música, por ejemplo. Hablo de cosas Te caracteriza un cierto nihilismo, que contrasta do. Pero esos momentos son un todo, prin-
puras, que forman un todo cuando las expe- con tu persona, introvertida pero afable. ¿Has- cipio y fin en sí mismos, cosas necesarias y
rimentas, y precisamente las drogas carecen ta que punto se trata de una impostación artís- suficientes, por lo que no es fácil ponerlos
de esa pureza, sin chistes, y además el abuso tica, un escenario donde situar tus historias? en una canción.
de ellas es muy jodido. Yo he consumido Una de las cosas que provoca en mí la Afirmas que, más que hacer buenas canciones,
mucho tiempo y he dejado de escribir mu- necesidad de hacer canciones son los senti- lo que en realidad persigues en la vida es ‘’ser
chas canciones por hacer mal uso de ellas, mientos encontrados, y muchas veces las buena persona’’. ¿Es posible serlo o la simple
así que ahora estoy intentando cambiar el contradicciones. Hay canciones que tratan relación con nuestro entorno lo impide?
rumbo. un mismo tema desde perspectivas práctica- Supongo que es otra de esas batallas
Otro tema, o el mismo si se quiere: el miedo a mente opuestas. En ocasiones he compara- perdidas de las que te hablaba antes que
vivir como única certeza y excusa de tantos do el oficio del actor con el del intérprete de dan fe de lo incansable que es el ser huma-
comportamientos. ¿Realmente es lo único que canciones. Un actor, y me refiero a uno de no. Es como lo de Sísifo, ¿no? Puede que
tenemos, el pánico de la supervivencia? método, puede hacer una interpretación haya algo que te impida llegar a tu destino,
Sí, como decía Panero, en la infancia uno magistral de Otelo y para ello no hace falta pero da igual porque lo importante es el
vive y después sólo sobrevive. Desde que que sea un asesino, pero sí que busque den- camino y no la meta. ¶

14 | 02-09 | RUTA 66

12-14 e.nachovegas.indd 14 15/1/09 19:32:02

Anda mungkin juga menyukai