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Filsofo Callejero Lo primero que omos en casa es que todo cuesta y se consigue con el sudor de la frente, pero ese sonido muy pocas veces concuerda con lo que vemos que se hace. Es decir, hay un contraste entre lo que nos dicen y lo que hacen los que se supone nos quieren y protegen. Cul es el secreto? Los hombres y las mujeres caemos en tentaciones que nos llevan a que la vida parezca ms fcil, aunque luego sufrimos demasiado para reparar los daos, primero en uno mismo y luego en todos los que nos rodean. Lo anterior, cuando las cosas tienen remedio porque luego se dan situaciones en donde se pierde todo, incluso la vida o vidas de gente que amamos. Las mujeres por la va de una relacin pueden caer en una de estas tentaciones, donde la vida se les facilita y logran cosas que de otro modo llegaran mucho ms tarde. Los hombres tendemos ms haca otras cosas que se les denomina fciles pero que en realidad son mucho ms difciles que el trabajo. El caso de los que eligen el camino equivocado, entrando al crimen organizado o las drogas es ejemplo de vidas cegadas que pudieron ser exitosas. Todos somos propensos a errar en el camino, pero independientemente de cules equivocaciones cometamos, lo que realmente importa es qu tanto somos capaces de aprender de esos equvocos. Es decir, los humanos tenemos que entender con claridad que la condena de cometer errores es permanente, nos guste a no, pero lo ms importante es que incorporemos a nuestra conciencia que con esos inevitables errores viene la experiencia y con ella la sabidura. El camino que esta en el diseo divino es rgido, pero algunos decidimos seguirlo y, aunque cuesta demasiado sacar la cabeza, la educacin, el trabajo, la dedicacin y la constancia tambin rinden sus frutos. El secreto est en que seamos capaces de entender que la vida est a nuestro alcance y dispuesta a negociar con todos y con cada uno. Todos tenemos lo que hemos sido capaces de conquistar por un camino o por otro, pero, lo ms importante es alcanzar la plena paz y armona interior en cada uno de nuestros corazones. Nada debe darnos pena, la moral es para los dems, la tica es nuestra. Hay quienes viven para la moral y para lo que dicen, pero hay otros que vivimos para la tica personal y nos importa la paz interior y, sobre todo, lo espiritual. Cualquier comentario a filosofocronico@gmail.com

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