CORO
CORO
CORO
Tu y yo somos su pueblo,
Tu y yo preparados
para tomar la tierra que él nos entrego.
Tu y yo somos tu pueblo,
Tu y yo preparados para mostrar las grandezas del señor.
SERA LLENA LA TIERRA
esfuérzate y sé valiente
levántate y predica
a todas las naciones
que cristo es la vida.
CORO
CORO
Y comprobé que tú eres fiel que en ti mi vida segura esta.
CORO
En la cruz en la cruz
yo primero vi la luz,
Y las mancho de mi alma yo lave.
fue allí por fe yo vi a Jesús,
y siempre feliz con él seré.
Señor mi Dios
al contemplar los cielos
el firmamento y las estrellas mil.
Al oír tu voz en los potentes truenos
y ver brillar el sol en su cenit.
CORO
II
Al recorrer los montes y los valles
y ver las bellas flores al pasar.
Al escuchar el canto de las aves
y él Murmurar del claro manantial
III
IV
MOTIVO DE MI CANCIÓN
CORO
I
Muchas razones para vivir,
muchas razones para dar morir,
muchas razones para dar amor,
no siempre se saben los porques
la vida pasa con rapidez
cada momento yo aprovechare
Para darle mis canciones
ofrecer mis oraciones,
Entregar mi vida entera
al que todo me da.
II
En una búsqueda sin cesar
yo no me canso de preguntar
Sobre él porque de mis canciones para
Dios, pues él conoce mi corazón
y existe solo una razón
Agradecerle toda su bondad,
Le daré mis canciones y también mis ilusiones,
Es la forma que puedo expresarle mi amor.
PERO QUEDA CRISTO
I
Por la mañana yo dirijo mi alabanza
a Dios que ha sido y es mi única esperanza.
Por la mañana yo le invoco con el alma,
y le suplico que me de su dulce calma.
El nos escucha, pues nos ama tanto,
y nos alivia de cualquier quebranto;
Nos da su mano poderosa y fuerte
para librarnos de la misma muerte.
II
Cuando la noche se aproxima tenebrosa,
en elevarle mi oración mi alma se goza;
siento su paz inagotable, dulce y grata,
por que temores y ansiedad Cristo los mata.
También elevo mi cantar al cielo
cuando a la tierra baja negro velo;
el sol se oculta pero queda Cristo
quién mis ojos en el sueño han visto.
III
Brilla su lumbre bienhechora mientras duermo
pones su mano sobre mi si estoy enfermo;
me fortalece, me alienta con el sueño,
pues es mi Dios, mi redentor y El es mi dueño
y al despertar por la mañana siento
que Dios invade mi alma y pensamiento;
veo a Jesús mi redentor amado
por mi pecado en una cruz clavado.
IV
Veo la sangre de sus manos que ha brotado,
veo la sangre borbotando en un costado,
una corona con espinas en sus frente
la multitud escarneciéndole insolente,
Pero,¡que dicha cuando al cielo sube, lleno de gloria en majestuosa nube¡
Pero,¡que dicha cuando al cielo sube, lleno de gloria en majestuosa nube¡