INSTITUCION NOMBRE
Ministerio de la Protección Social Sandra Tovar Valencia
Ministerio de la Protección Social Flor Elsa Villafradez
Secretaría Distrital de Salud Jaime Hernán Ternera
Seguro Social Sonia Constanza Mejía
Seguro Social Patricia Paredes Paredes
Grupo Saludcoop Naysid García Cifuentes
Grupo Saludcoop Yamile Gómez
Cafam Yanira Díaz
Cafam Aminta Durán
Cafam Soraya Isaza
Susalud Victoria Eugenia Otera
Colmédica EPS María del Pilar Núñez
Susalud Cundinamarca Guadalupe Mejía Duque
Salud Total EPS Fernando Arias Martínez
Federación Odontológica Colombiana Eleonora Guerrero
Asociación Colombiana de Facultades
de Odontología Gabriel Jaime Otálvaro
Sánitas EPS Diego Quintero
Universidad Nacional de Colombia María Claudia Naranjo
Universidad Nacional de Colombia Carol Cristina Guarnizo
Universidad Nacional de Colombia Juan Carlos Bustos
Universidad Nacional de Colombia Mauricio Rodríguez
Universidad del Bosque Alejandro Perdomo
Universidad del Bosque Stefanía Martignon
Universidad del Bosque Jaime Alberto Ruiz
Contenido
Pagina
1. Introducción ............................................................................................ 385
2. Metodología ............................................................................................ 385
3. Justificación............................................................................................... 387
4. Epidemiología .......................................................................................... 388
5. Objetivos .................................................................................................... 390
5.1 Objetivo general ................................................................................. 390
5.2 Objetivos específicos ......................................................................... 390
6. Definición y aspectos conceptuales de las estrategias preventivas . 391
6.1 Evaluación del riesgo ......................................................................... 391
6.1.1 Definición ........................................................................................ 391
6.1.2 Población objeto ............................................................................. 395
6.1.3 Descripción de la actividad .......................................................... 395
6.2 Implementación de estrategias informativas sobre prevención
de caries y enfermedad gingival. ..................................................... 396
6.2.1 Definición ........................................................................................ 396
6.2.2 Población objeto ............................................................................. 396
6.2.3 Descripción de la actividad .......................................................... 396
6.3. Control y remoción de placa bacteriana ....................................... 397
6.3.1 Definición ........................................................................................ 397
6.3.2 Población objeto ............................................................................. 397
6.3.3 Descripción de la actividad .......................................................... 397
Paginas
6.4 Aplicación de flúor ............................................................................ 401
6.4.1 Definición ........................................................................................ 401
6.4.2 Población objeto ............................................................................. 402
6.4.3 Descripción de la actividad .......................................................... 402
6.5 Aplicación de sellantes ...................................................................... 404
6.5.1 Definición ........................................................................................ 404
6.5.2 Población objeto ............................................................................. 404
6.5.3 Descripción de la actividad .......................................................... 404
6.6 Detartraje ............................................................................................. 406
6.6.1 Definición ........................................................................................ 406
6.6.2 Población objeto ............................................................................. 407
6.6.3 Descripción de la actividad .......................................................... 407
7. Cuadro nivel de evidencia .................................................................... 408
8. Flujogramas ................................................................................................... 409
Bibliografía............................................................................................................. 413
Tablas
Tabla 1. Grados de recomendación y niveles de evidencia .................... 387
Tabla 2. Valoración índices COP-D ............................................................... 393
1. Introducción
L a caries y la enfermedad periodontal son las patologías orales de ma-
yor prevalencia en los diversos grupos de edad. Sin embargo, estas dos
patologías, mediante adecuados mecanismos de prevención y protección
específica y de forma temprana, pueden ser controlados o al menos li-
mitados sus efectos y complicaciones, favoreciendo el mejoramiento de
las condiciones de salud de la población.
En Colombia, si bien el ENSAB III presentó algunas mejoras en sus
prevalencias, estas patologías continúan estando presentes en gran pro-
porción dentro de la población siendo aún las primeras causa de morbi-
lidad por consulta externa en los niños escolarizados y no escolarizados,
así como en el grupo de población productiva del país, lo cual afecta de
forma importante las condiciones de vida e impacta en el desarrollo de
las actividades de aprendizaje y laborales de la población.
Ante esta realidad, la presente Guía indica acciones de protección espe-
cíficas con las cuales, a través de adecuados procesos de realización y de
seguimiento, la evidencia mundial demuestra que en cualquier zona geográ-
fica y en condiciones básicas de atención es posible el mejoramiento de
condiciones de salud, teniendo en todo caso presente un componente im-
portante como es la valoración del riesgo individual y poblacional.
2. Metodología
Este documento hace parte del proceso de reformulación y actualiza-
ción de la Guía de prevención en salud bucal contenida en la resolución 412 de
2000.
La primera etapa de este ejercicio fue llevada a cabo por el evaluador,
examinando el documento de Guía disponible en el diario oficial.
La segunda etapa consistió en una búsqueda sistemática y en un análisis
crítico de la literatura disponible a partir de las siguientes preguntas centra-
das en la caries y la enfermedad gingival:
• ¿Cuáles son la prevalencia y los factores de riesgo asociados con la pre-
sencia de caries dental y gingivitis relacionada con la placa dental, en
individuos de diferentes edades en Colombia?
• ¿En otros países, cuáles son la prevalencia y los factores de riesgo asocia-
dos con la presencia de caries dental y gingivitis, en individuos de dife-
rentes edades?
• ¿En individuos con caries dental y gingivitis, cuáles son los mejores mé-
todos para diagnosticar esta condición?
• ¿En individuos de diferentes edades, se previene más la caries con estra-
tegias preventivas como: flúor tópico o sistémico, control de placa, se-
llantes de fosetas y fisuras, control de dieta, control de factores socio
económicos y ambientales, que con una sola de estas intervenciones?
Los términos de búsqueda, los límites utilizados, las bases de datos y las
publicaciones a las que se accedió manualmente fueron:
Caries dental, prevalencia, riesgo; diagnóstico clínico, sensibilidad, espe-
cificidad; prevención, odontología, sellantes, flúor, placa bacteriana. Gingi-
vitis, prevalencia, riesgo; diagnóstico clínico, sensibilidad, especificidad;
prevención, educación, higiene oral.
Se limitó la búsqueda a los años 1998 al 2005, resultados en humanos y
en revistas de odontología; para las intervenciones preventivas se restringió a
revisiones sistemáticas y ensayos clínicos controlados aleatorizados o no.
MEDLINE, TRIPDATABASE, Biblioteca COCHRANE, LILACS, SCIELO, búsquedas ma-
nuales de los años ya mencionados en las revistas: Caries research, Commu-
nity Dent Oral Epidemiol y publicaciones nacionales y libros de texto
referentes a los temas objeto de las preguntas.
Las referencias revisadas hacen parte de la bibliografía citada al final de
la norma técnica con su correspondiente nivel de evidencia en el cuerpo del
texto de la Guía, con base en la siguiente clasificación (1):
Tabla 1
Grados de recomendación y niveles de evidencia
3. Justificación
El Ministerio de Protección Social debe actualizar y reformular la Guía
a la luz del conocimiento vigente para el desarrollo de actividades preventi-
vas que limiten la aparición de la enfermedad, mejoren las condiciones de
salud buco-dental, se articulen con el Plan nacional de salud bucal teniendo
en consideración las estrategias integrativas de intervención en la salud ge-
neral.
La caries dental y la enfermedad gingival asociadas con la placa dental,
son patologías bucales identificadas como prevenibles y controlables.
Como parte de la consulta de diagnóstico, la evaluación del riesgo indi-
vidual es una actividad de suma importancia para tomar decisiones frente a
las intervenciones de protección específica, la orientación de las acciones
terapéuticas y la frecuencia de los controles.
Teniendo en cuenta los indicadores de morbilidad en caries y enferme-
dad gingival para todos los grupos de edad y la pertinencia de utilizar las
actividades de protección específica en cualquier etapa de la vida, de acuerdo
con la valoración individual, la presente Guía pretende que toda la pobla-
ción colombiana tenga acceso a las actividades de protección específica, por
tal razón, se hacen las referencias respectivas en las guías para la atención
integral del niño sano menor de diez años y para la detección temprana y
atención integral de alteraciones en el desarrollo de adolescentes y jóvenes
(10 a 26 años), y en la guía para la prevención de enfermedad y manteni-
miento de la salud en el individuo sano mayor de 45 años.
4. Epidemiología
Sin ser comparables, los resultados del III Estudio nacional de salud bucal
(ENSAB III), muestran, una mejoría con los datos reportados en el Estudio de
morbilidad oral de 1977-1980 (2) (Grado de recomendación B, nivel de evi-
dencia 2A). Comparativamente en el grupo etáreo de cinco años se observan
mejoras en las condiciones de caries dental, con seguridad debido a los progra-
mas de promoción y prevención de la salud bucal que se han venido realizando.
Sin embargo, para los grupos etáreos mayores de quince años la condición ha
desmejorado, probablemente debido a que las medidas y actividades de promo-
ción y prevención están dirigidas con mayor énfasis a los grupos etáreos menores.
De acuerdo con el ENSAB III, y en relación con la caries dental, en la dentición
temporal el ceo-d a los cinco años fue de 3.0 y en la dentición el COP-d a los doce
años fue de 2.3, con un gran promedio de dientes temporales (16,3) y perma-
nentes (0,4) sanos en boca que requieren medidas preventivas y 10% en prome-
dio con necesidad de operatoria dental. Sin embargo, debe tenerse presente que
la población menor de cinco años no fue considerada para el ENSAB III, aunque
algunos estudios realizados en ciudades como Bogotá en niños menores de cua-
tro años la prevalencía de caries fue del 70% usando el criterio de ceo-d y de
97% con los criterios propuestos por Nyvad (B, 2a) (3).
Otras investigaciones presentaron en población de 6 a 14 años prevalen-
cias mayores a 97% de experiencia de caries de una o más lesiones activas,
siendo levemente mayores en las zonas rurales que en las urbanas (90%
frente a 85%) con una experiencia promedio de caries por superficie de 9.7
para dentición temporal y de 10.3 para permanentes (B, 3a) (4).
Un estudio del sector público de Santiago de Cali, en 2005, aún sin
publicar, arrojó que el porcentaje de niños con historia de caries fue de
77%, la prevalencia total de caries fue de 67,73%, el coe-d a los 5 años fue
de 0.64 y el índice COP-D a los doce años fue de 3.5. La prevalencia de
enfermedad periodontal en este grupo fue de 53,95%. Se encontró también
una prevalencia de caries dental del 100% para el grupo de menores de
cinco años y de 92% para el grupo de discapacitados.
En países donde la disminución de caries en la dentición permanente es un
hecho comprobado, se encuentran estadísticas alarmantes en la dentición
decidua. Antes de los 3 años de edad, entre 20 y 30% de los niños suecos
se encuentran afectados por la caries de la niñez temprana (B, 3a) (5).
En otros países como Suecia las tasas de incidencia de nuevas lesiones en
esmalte en los adultos jóvenes y adolescentes disminuyó de 4.3 a 2.7 lesio-
nes/100 superficies al año (B, 3a ) (6).
Las prevalencias y experiencia de caries en grupos de niños de cuatro
años en este mismo país bajó de 87% en 1967 a 42% en 1987, pero en el
2002 46% tenían caries con un promedio de ceo-s de 2.0 ±3.6, (C4) (7)
mientras la prevalencia a la edad de 5 años fue de 54,8% en el estudio
nacional de 1999. En Jamaica, el promedio de ceo-d/COP-D se redujo a 3.2,
2.2 y 3.8 para las edades de 6, 12 y 15 años respectivamente; esta reducción
apareció después de la flúorización de la sal pero esta asociación no se ha
podido demostrar (B, 3a) (8).
Por otro lado, se observó que 81,6% de la población colombiana pre-
sentó placa blanda al momento de realizar el examen odontológico, siendo
mayor su presencia en menores de 20 años, asumiendo que la gingivitis
asociada con ella estaba presente en la misma proporción (B, 3a) (9).
En relación con la enfermedad periodontal en el ENSAB III, se observó
para la población general que el índice de éxtensión y severidad (IES) general
fue de (16,1.2), lo que significa que 16% de las superficies están afectadas
con un promedio de pérdida de inserción de 1.2 mm, en tanto que el índice
de extensión y severidad específico fue de (32,1.4). De igual modo, la po-
blación afectada con al menos un marcador periodontal (sangrado, cálculos
o bolsas) fue de 92,4% (8.8% sangrado, 53,3% sangrado y cálculos, 26,5%
bolsas poco profundas y 3,8% bolsas profundas), y llama la atención que a
los 12 años 60,9% de los niños presentan sangrado y cálculos.
En una población de 420 niños escolares entre los 5 y 9 años (126), y
10 y 14 años (294) se encontró una prevalencia de cálculos supra de 64% y
subgingivales de 77% (C4) (10).
5. Objetivos
5.1 Objetivo general
Determinar y describir las intervenciones de protección específica para
prevenir la caries y la enfermedad gingival, a través de la identificación de los
principales marcadores que permitan evaluar el riesgo de enfermar, con el
fin de disminuir las prevalencias e incidencias de estas patologías que afec-
tan a la población colombiana.
En donde:
• C corresponde a un diente temporal cariado y C a uno permanente con
caries: es decir, con presencia de lesiones en fosas, fisuras o en superficies
lisas, en donde el esmalte presenta desde mancha blanca hasta la pérdida
de su continuidad con signos visibles de cavitación o piso reblandecido.
También se incluye en este criterio todo diente que presente una restau-
ración con material definitivo, pero con una o más lesiones activas en
alguna de sus superficies y los dientes con obturaciones temporales
• E corresponde a los dientes temporales y P a los dientes permanentes
que no se encuentran presentes en boca al momento del examen y que
fueron extraídos a causa de caries (en dentición mixta debe tenerse pre-
sente la pérdida de dientes por efecto de recambio dental)
• O corresponde a un diente temporal y O a un diente permanente, con
obturación en material definitivo debido a antecedentes de caries y que
no presenta ninguna superficie con caries. No se incluyen en este regis-
tro los dientes en los cuales se han aplicado solamente sellantes
• Sano-t corresponde al total de dientes temporales y Sano-P total de
dientes permanentes presentes en boca (es decir con cualquier propor-
ción de superficie visible), que no clasifican en ninguno de los anteriores
criterios, porque no muestra ninguna evidencia de caries tratada o no
tratada.
A través de este indicador es posible obtener indicadores individuales y
poblacionales de seguimiento para el riesgo como:
1. Individuales
• Índice COP (sumatoria de los componentes C, O, e o P)
• Mantenimiento de la condición de sano (en caso que el COPS sea de
cero) o de sano rehabilitado (cuando el COP sea mayor de 0) se mo-
nitorea mediante el mantenimiento del índice COPD, después de la
conclusión del tratamiento
• Seguimiento a cada uno de los componentes del índice, en donde en
pacientes con historia de caries, idealmente el componente C debe
pasar luego de finalizado el tratamiento a ser cero, en tanto los com-
ponentes O y P, indican las acciones realizadas que luego de finaliza-
da la atención deben mantenerse.
2. Poblacionales
• Porcentaje de población con historia de caries dental (personas con
copd o ceod mayor a 1, del total de personas atendidas)
• Porcentaje de población sin tratamiento de caries dental (a través de
identificar el porcentaje de personas del total de atendidas, en cuyo
índice el componente C es mayor a 1)
• Promedio de dientes cariados (obtenido mediante el cálculo de todos
los componentes c dividido por el número de personas atendidas)
• Promedio de dientes perdidos (de forma similar al anterior pero con
el componente e o P)
• Relación de dientes con historia de caries (componentes C, O y e o P
frente al total de dientes sanos presentes - Sanos-t y Sanos-P)
• Número promedio de dientes presentes (obtenido mediante la suma
de todos los componentes C, O, e o P, Sano-t y Sano-P, dividido por
el número total de personas atendidas).
Presencia de índice de placa superior a 15%: presencia de placa dental
en más de 15% de las superficies dentales, acorde con la metodología de
medición que se señala en la presente Guía.
El problema del riesgo es un asunto fundamental de la promoción de la
salud y la prevención de la enfermedad, ya que toda actividad preventiva
debe ir orientada, principalmente, a detectar y controlar los marcadores de
riesgo asociados con la aparición o por lo menos a la identificación clínica,
de la condición objeto de la intervención preventiva. La determinación de
las posibilidades de predecir un evento, en salud o en enfermedad, le da a la
atención primaria en salud bucal, en particular, una herramienta para tomar
decisiones eficaces y prioritarias, teniendo presente que la determinación del
riesgo es difícil e inexacta, debido a la complejidad de las múltiples interac-
ciones entre factores que además cambian con el tiempo y de individuo a
individuo. (B, 2a) (C4) (15 al 21).
Dos revisiones sistemáticas que evaluaron la combinación de métodos
para la prevención de caries dental en grupos de alto riesgo coinciden en que
la fuerza de la evidencia de los estudios primarios para juzgarla es insuficien-
te y en algunos casos los resultados no fueron conclusivos; sin embargo,
estos resultados no indican que los métodos preventivos combinados no
6.6 Detartraje
(Raspaje) supragingival y detartraje subgingival
6.6.1 Definición
Procedimiento clínico realizado en la corona y superficies radiculares de
los dientes para remover placa, cálculos y pigmentaciones (C4) (33), para
evitar los daños en los tejidos de soporte y así lograr salud periodontal.
Remover en forma mecánica los depósitos bacterianos y los depósi-
tos calcificados de la superficie dentaria para evitar daños en los tejidos
de soporte.
8. Flujogramas
Guías de promoción de la salud y prevención de enfermedades en la salud pública
410
Programa de Apoyo a la Reforma de Salud/PARS • Ministerio de la Protección Social
411
Guías de promoción de la salud y prevención de enfermedades en la salud pública
412
Programa de Apoyo a la Reforma de Salud/PARS • Ministerio de la Protección Social
413
Bibliografía
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Granada, Spain. May 2004.
13. Ministerio de la Protección Social, Estudio nacional de salud bucal (ENSAB
III) Colombia 1999.
INSTITUCION NOMBMRE
Ministerio de la Protección Social Lorenza Ospina Rodríguez
Pagina
1. Introducción ............................................................................................ 423
2. Metodología ............................................................................................ 423
3. Justificación ............................................................................................. 424
4. Epidemiología ......................................................................................... 425
5. Objetivos .................................................................................................. 428
5.1 Objetivo general .............................................................................. 428
5.2 Objetivos específicos ..................................................................... 428
6. Definición ...................................................................................................... 428
7. Factores de riesgo en el momento del parto .................................. 428
7.1 Biológicos ........................................................................................ 428
7.2 Sicosociales ...................................................................................... 430
7.3 Del medio ........................................................................................ 430
7.4 Comportamentales ......................................................................... 430
8. Factores protectores en el momento del parto ............................. 431
9. Población objeto ..................................................................................... 431
10. Características de la atención ............................................................. 431
10.1Admisión de la gestante en trabajo de parto ........................... 431
10.1.1 Elaboración de la historia clínica completa ......................... 432
10.1.2 Examen físico ............................................................................. 432
licitud de exámenes paraclínicos......................................................... 432
Pagina
10.1.4 Identificación de factores de riesgo y condiciones
patológicas .................................................................................. 433
10.2 Atención del primer periodo del parto ..................................... 437
10.3 Atención del segundo periodo del parto .................................. 442
10.3.1 Pinzamiento del cordón umbilical .......................................... 443
10.4 Atención del alumbramiento ....................................................... 444
10.5 Atención del puerperio inmediato ............................................. 446
10.6 Atención durante el puerperio mediato .................................... 447
10.7 Atención para la salida de la madre y su neonato ................... 447
11. Procedimientos de salud pública ....................................................... 448
12. Garantía de la calidad ........................................................................... 449
13. Cuadro nivel de evidencia .................................................................... 449
14. Flujograma ..................................................................................................... 452
Anexos ...................................................................................................................... 453
Bibliografía ...................................................................................................... 459
Tablas y Gráficos
Tabla 1. Grados de recomendación y niveles de evidencia .................... 424
Tabla 2. Razón ajustada de mortalidad materna .................................... 426
Tabla 3. Razones de mortalidad materna (por 100.000 nacidos vivos) . 426
Tabla 4. Distribución de muertes maternas, según principales causas 427
Tabla 5. Factores de riesgo para mortalidad materna ........................... 428
Tabla 6. Pinzamiento del cordón umbilical ............................................. 443
1. Introducción
L a actualización de la Guía para la atención del parto contribuirá a la dis-
minución de la mortalidad materna y perinatal. Este documento se convierte en
una herramienta importante para la atención de las maternas en el país.
Los revisores declaran no tener conflicto de intereses frente a las reco-
mendaciones generadas. Estas recomendaciones son acciones terapéuticas y
diagnósticas que se sabe y se cree ejercen una influencia favorable en la evo-
lución de los pacientes. Se sugiere revisar esta norma periódicamente como
quiera que los avances en terapéutica puedan modificar las recomendaciones
presentes y, entonces, tener una vigencia temporal de tres a cinco años
2. Metodología
Se investigó en las bases de datos de la librería COCHRANE, en el registro
de experimentos del grupo de embarazo y parto de COCHRANE, el registro
central de experimentos controlados de COCHRANE, en las bases de datos
MEDLINE (acceso a través de PubMed y Gateway), Biblioteca Virtual en Sa-
lud sexual y Reproductiva del Centro Latinoamericano de Perinatología y
Desarrollo Humano (CLAP) y Nacional Guideline Clearinghouse, y se hizo
búsqueda manual de referencias de artículos y textos.
Las preguntas de investigación fueron enviadas con anterioridad a la
coordinación del proyecto para su consideración y análisis. Estas preguntas
incluían dos cuestiones comprehensivas acerca de cuáles prácticas durante el
trabajo de parto y el parto eran benéficas y cuáles no lo eran o podrían ser
dañinas, de acuerdo con la evidencia científica actual. Cada una de las posibles
prácticas o políticas constituía una pregunta clínica para contestar.
No se hizo restricción de idioma, pero se dio prioridad a los artículos
publicados en inglés, francés, castellano y portugués. Tampoco se hizo res-
tricción de año de publicación; sin embargo, si se encontraba una revisión
sistemática o meta-análisis de buena calidad se revisaban las bases de datos
para los años posteriores al año de la revisión del meta-análisis.
Las palabras de búsqueda incluyeron: "delivery", "delivery and guideli-
nes", "delivery and partogram", "delivery, obstetrics (MESH)", combinacio-
nes de este término MESH con los anteriores y con otras prácticas durante el
trabajo de parto ("enema", "episiotomy", "aggressive or expectant manage-
ment", "analgesia", "caesarean section", "amniotomy", "support", "sha-
ving", "policies", "intervention", "operative delivery"), ejemplo: "delivery,
obstetrics (mesh) and practices", "childbirth or delivery and EBM", " Child-
birth or delivery, obstetrics and EBM", "childbirth or delivery, obstetrics and
evidence based medicine"; en la base del CLAP se utilizó además el texto
"formas de cuidado".
Tabla 1
Grados de recomendación y niveles de evidencia
3. Justificación
La atención institucional del parto es una medida de primer orden para
disminuir de manera significativa la morbimortalidad materna y perinatal.
4. Epidemiología
La OMS estima que en el mundo mueren aproximadamente 585.000
mujeres al año por complicaciones del embarazo, parto y puerperio. Cerca
del 99% de estas muertes ocurren en los países en vías de desarrollo. Las tasas
más altas de mortalidad se observan en África, Asia, América Latina y el Caribe.
La muerte de una madre tiene repercusiones emocionales y económicas
importantes en la familia y la comunidad, además las consecuencias sociales
y económicas son profundas, ya que la muerte de la madre reduce la super-
vivencia del recién nacido, disminuye el desempeño escolar de los niños
sobrevivientes y representa una pérdida de la productividad económica y de
los ingresos familiares (1).
En nuestro país, las tres primeras causas de muerte en mujeres en edad
fértil (MEF) son: muertes violentas (8.878 casos) para una tasa de 12,9 por
100.000 MEF; accidentes de tránsito (805 casos) con una tasa de 8 por
100.000 MEF; y complicaciones en el embarazo, parto y puerperio (722
casos) para una tasa de 7,1 por 100.000 MEF (2).
En Colombia, mueren cada año entre 700 y 1.000 mujeres por causa de
complicaciones durante el embarazo, parto y puerperio temprano. De acuerdo
con los datos de Martha I. Saboyá, ajustando por omisión de los datos, las
razones de mortalidad materna en Colombia presentan un patrón irregular
entre 1987 y 2001 (Tabla 2). Sin embargo, hay diferencias afectadas, entre
otros, por la modificación del certificado de defunción en 1997 en el cual se
incluyeron variables para registrar el antecedente materno en mujeres entre
los 10 y 49 años. Durante los años 1996 y 1997 se observó un aumento en
la razón de mortalidad materna que no se explica por el cambio en el certi-
ficado de defunción, ya que este cambio tuvo efecto hasta 1998.
La mortalidad materna en Colombia muestra diferencias según las regiones.
Sin embargo, en general, siguen las tendencias nacionales en el tiempo (Tabla 3).
Tabla 2
Razón ajustada de mortalidad materna
(por 100.000 nacidos vivos) en Colombia 1987-2001
Fuente: Saboyá MI. Mortalidad materna en Colombia una aproximación ecológica, 2005.
Tabla 3
Razones de mortalidad materna (por 100.000 nacidos vivos)
por regiones en Colombia 1987-2001
Fuente: Saboyá MI. Mortalidad materna en Colombia una aproximación ecológica, 2005.
Tabla 4
Distribución de muertes maternas, según principales causas
Colombia 1990-1997
Durante los cinco años anteriores, 87% de las gestantes tuvieron aten-
ción prenatal por médico, 7% por enfermera y 6% no tuvieron control
prenatal. El control prenatal es más frecuente en zonas urbanas en Bogotá,
Medellín y Cali. Cerca del 71% de las gestantes hicieron su primer control
prenatal cuando tenían menos de cuatro meses de embarazo. En los cinco
años que precedieron a la encuesta el porcentaje de madres que no recibie-
ron atención prenatal fue: 9,9% en la región Atlántica, 8,8% en la Pacífica,
6,5% en la región central, 5,9% en Orinoquia y Amazonia, 3,5% en la
región oriental y 2% en Bogotá (5).
En el estudio de casos y controles del grupo de investigación Gineco-CES
se estudiaron 33 casos y 128 controles. De los casos, 25 (75,7%) fueron
muertes obstétricas directas y 5 (24,3%) muertes obstétricas indirectas. Cerca
del 78.8% de las muertes ocurrieron en el [M6] período posparto, 9,1% de
las muertes ocurrieron durante el embarazo, 6,1% en el período intraparto
y 6,1% en el postaborto. Para las 33 muertes maternas se presentaron facto-
res políticos, como violencia social, que impidieron la adecuada atención
prenatal en 24,2%. Cerca del 42% no tuvo un adecuado cuidado del parto
ni existían recursos adecuados para resolver el problema en el nivel de refe-
rencia que fueron atendidos. De este estudio se obtuvieron los siguientes
factores de riesgo con significancia estadística para mortalidad materna (Ta-
bla 5).
Solo en 39,4% existían normas y protocolos disponibles y apropia-
dos en este nivel de referencia y 54,5% del personal estaba entrenado para
su tratamiento.
Tabla 5
Factores de riesgo para mortalidad materna
5. Objetivos
5.1 Objetivo general
Ofrecer el marco conceptual y técnico-científico para la atención racio-
nal del parto, de esta manera, disminuir los riesgos de enfermedad y muerte
de la mujer gestante y del producto del embarazo, optimizando el pronósti-
co de los mismos a través de la oportuna y adecuada atención intrahospita-
laria del parto.
6. Definición
Conjunto de actividades, procedimientos e intervenciones, para la
asistencia de las mujeres gestantes en los procesos fisiológicos y dinámi-
cos del trabajo de parto, expulsión del feto vivo o muerto, con 20 o más
semanas de gestación, alumbramiento y puerperio inmediato. La gesta-
ción comprendida entre la semana 20 y la semana 24 debe ser asistida
en forma individualizada por los distintos procesos inherentes al traba-
jo de parto, de acuerdo con los recursos institucionales requeridos y la
disponibilidad de un equipo multidisciplinario.
7.1 Biológicos
• Gestante adolescente (< 19 años)
• Gestante mayor (> 35 años)
• Gran multiparta (más de cuatro partos)
• Historia obstétrica adversa (aborto, muerte fetal, muerte perinatal, dia-
betes gestacional, preeclampsia-eclampsia, anomalías congénitas)
• Primípara inmunológica
• Antecedente de cirugía uterina (cesárea previa o miomectomía)
• Edad gestacional no confiable o no confirmada
• Edad gestacional pretérmino o prolongado
• Paraclínicos o ecografías con hallazgos anormales
• Anemia
• Fiebre
• Cefalea y epigastralgia
• Hipertensión arterial
• Edema o anasarca
• Disnea
• Altura uterina mayor de 35 cm o menor de 30 cm
• Embarazo múltiple
• Taquicardia o bradicardia fetal
• Distocia de presentación
• Prolapso de cordón
• Distocias de partes blandas y óseas
• Presencia de condilomas
• Sangrado genital
• Ruptura de membranas
• Líquido amniótico meconiado.
7.2 Sicosociales
• Inicio tardío del control prenatal
• Falta de apoyo social, familiar o del compañero
• Tensión emocional
• Alteraciones de la esfera mental
• Dificultades para el acceso a los servicios de salud
• Ausencia de control prenatal
• Vivir en el área rural
• No estar afilada al sistema general de seguridad social.
7.4 Comportamentales
• Alcoholismo
• Drogadicción
• Tabaquismo.
9. Población objeto
Las beneficiarias de esta Guía son todas las mujeres gestantes que se
encuentran en trabajo de parto afiliadas a los regímenes contributivo y sub-
sidiado. Los contenidos de la norma son válidos para todas las gestantes en
trabajo de parto.
10.1.1.2 Antecedentes
• Personales: patológicos, quirúrgicos, alérgicos, ginecológicos, obstétri-
cos y farmacológicos
• Familiares.
3. Gestaciones >
= 41 semanas
Toda mujer con gestación de 41 semanas o más, se debe remitir u hospitalizar para
inducción de rutina del trabajo de parto. Determinar siempre la edad gestacional por medio de
una FUR confiable o una ecografía de primer trimestre. Una revisión sistemática inves-
tigó si la ecografía rutinaria temprana reduce la cantidad de mujeres que
requieran la inducción del parto debida a embarazo prolongado; si el emba-
razo prolongado puede ser prevenido aconsejando a las mujeres a estimular
los pezones desde las 39 semanas hasta el parto y si la inducción rutinaria
del parto reduce la morbimortalidad perinatal. Se incluyeron 26 investiga-
ciones clínicas aleatorizadas. Cuatro estudios trataron acerca de la ecografía
rutinaria, dos de la estimulación de los pezones, diecinueve acerca de la
inducción rutinaria versus selectiva y uno acerca del monitoreo fetal. La
ecografía rutinaria temprana reduce la incidencia de embarazo postérmino;
la estimulación de los pezones no modifica la incidencia de embarazo de
postérmino. La inducción rutinaria del parto podría reducir la mortalidad
perinatal en 62% (RR: 0.38 IC95%: 0.14-1.08). Este beneficio se observa
cuando la inducción se realiza luego de las 41 semanas de gestación. La induc-
ción rutinaria del parto no tiene efecto en la incidencia de cesárea. (A1) (9).
4. Preeclampsia y eclampsia
Aunque se suministra una guía particular (Guía de atención de las com-
plicaciones hipertensivas asociadas con el embarazo), se incluyen aquí las
principales recomendaciones que se deben tener en cuenta en un servicio de
admisiones o de urgencias:
Se debe iniciar terapia con sulfato de magnesio a las gestantes con diagnóstico de pree-
clampsia. La terapia con sulfato de magnesio para mujeres con preeclampsia
reduce el riesgo de eclampsia y muerte materna. El estudio MAGPIE, que
incluyó a 10.141 mujeres con preeclampsia reclutadas en 175 hospitales de
33 países, demostró que las mujeres con preeclampsia que recibieron sulfato
de magnesio tuvieron un riesgo de eclampsia 58% menor que el de las mu-
jeres asignadas a placebo (IC 95%: 40-71); la mortalidad materna también
fue más baja entre las mujeres asignadas a sulfato de magnesio (RR: 0.55,
IC95%: 0.26-1.14). No hubo una clara diferencia en el riesgo de muerte
del niño (RR: 1.02, IC99% 0.92-1.14). No hubo efectos deletéreos sobre
la madre ni el recién nacido en el corto término (A1) (10).
Se debe iniciar terapia con sulfato de magnesio a las gestantes con eclamp-
sia. La terapia con sulfato de magnesio para mujeres con eclampsia es más
efectiva que otros agentes anticonvulsivantes para prevenir la recurrencia de
convulsiones. Una revisión sistemática incluyó tres experimentos clínicos
controlados (ECC) donde se comparó el sulfato de magnesio versus diaze-
pam para la atención de mujeres con eclampsia. Las variables de resultado
fueron muerte y morbilidad grave en la madre. Se concluyó que el sulfato de
magnesio se asocia con una reducción importante de la recurrencia de las
convulsiones, cuando se lo compara con el diazepam. Asimismo, también se
observó una tendencia a la reducción de la mortalidad (A1) (11)..
La dosis de sulfato de magnesio es un bolo de 4 g en 2 minutos y luego
una infusión de 1 g por hora. La dosis puede aumentarse hasta 2 g por hora
de acuerdo con la respuesta.
parto debe tener la capacidad de atención para el RN. Por lo tanto, el prestador que contrate la
atención de partos de igual manera contratará la atención del neonato; por su parte, las
administradoras deberán exigir la prestación integral de los dos componentes.
No se debe realizar de forma rutinaria presión fúndica para acelerar el expulsivo (Ma-
niobra de Kristeller).
La atención del recién nacido debe hacerse de acuerdo con la Guía para
la atención del recién nacido.
Se debe permitir inmediatamente el contacto piel a piel de la madre con
el recién nacido. Una revisión que incluyó 17 estudios encontró efectos po-
sitivos y estadísticamente significativos del contacto temprano piel a piel
sobre la lactancia materna uno y tres meses después del parto, y sobre la
duración de la lactancia. También se encontraron efectos positivos sobre
afecto, caricias y apego maternos (A1) (25).
En caso de mortinato, remitir con la placenta a patología para estudio
anatomopatológico. Dependiendo de la edad fetal se procederá a realizar
necropsia, tomar muestras y remitir. Se debe consultar con patología. Tam-
bién, se debe brindar apoyo psicológico permanente a la madre.
Nota: Los criterios para pinzamiento precoz prevalecen sobre los de pinzamiento diferido cuando
coexisten como indicaciones.
10.4 Atención del alumbramiento
En la actualidad, en medios hospitalarios se debe realizar manejo activo
del alumbramiento en vez del manejo expectante. El manejo expectante del
tercer período del trabajo de parto consiste en permitir que la placenta sea
expulsada espontáneamente o ayudada por la gravedad o la estimulación del
pezón. Los signos clínicos para valorar un desprendimiento espontáneo de
la placenta son: contracción del fondo uterino; formación del globo de se-
guridad; expulsión súbita de sangre; descenso de la pinza indicadora (des-
censo del cordón umbilical); reaparición de contracciones dolorosas;
palpación de la placenta en la vagina; signo del pescador (al ejercer tracción
del cordón se observa el descenso del fondo uterino si no ha ocurrido
el desprendimiento) y signo del pistón (tracción cefálica del segmento
para valorar el ascenso del cordón cuando no ha ocurrido el despren-
dimiento).
El manejo activo consiste en lo siguiente:
a. Dentro de un minuto del nacimiento se palpa el abdomen para descartar
la presencia de otro feto y se administra un medicamento uterotónico:
ocitocina o ergometrina si no hay contraindicaciones tales como hiper-
tensión, preeclampsia o eclampsia.
b. En la mayoría de los estudios se hace pinzamiento temprano del
cordón para realizar el resto del protocolo. El cordón se pinza cerca
del periné.
c. Esperar una contracción uterina fuerte (usualmente dos a tres minutos
después del parto).
d. Aplicar tracción controlada del cordón para obtener lentamente el
parto de la placenta, mientras que se estabiliza el útero aplicando con-
tratracción por encima del pubis para prevenir la inversión uterina.
e. Si la placenta no desciende, detener la tracción y esperar la siguiente
contracción.
f. Tan pronto como ocurra el parto de la placenta hacer masaje uterino
hasta que esté bien contraído.
Una revisión sistemática analizó los efectos del manejo activo versus el ma-
nejo expectante sobre la pérdida sanguínea, la hemorragia posparto y otras com-
plicaciones maternas y perinatales del tercer período del parto. Se incluyeron
cinco ECC que comparaban el manejo activo del tercer período del parto con el
manejo expectante. En instituciones hospitalarias de maternidad el manejo acti-
vo se asoció con reducción de los riesgos de pérdida sanguínea materna (diferen-
cia promedio ponderada -79.33 mL (IC95%: -94.29 a -64.37); hemorragia
posparto de más de 500 mL (RR: 0.38, IC95%: 0.32 a 0.46) y de tercer
período prolongado (diferencia promedio ponderada -9.77 minutes, IC 95%: -
10.00 a -9.53). El manejo activo se asoció con un aumento del riesgo de náuseas
maternas (RR 1.83, IC 95%: 1.51 a 2.23), vómito y presión arterial aumentada
(probablemente debido al uso de ergometrina). No hubo ventajas o desventajas
aparentes para el recién nacido. Se concluye que el manejo activo es superior al
manejo expectante en términos de pérdida sanguínea, hemorragia posparto y
otras complicaciones serias del tercer período del parto. Sin embargo, el manejo
activo se asoció con el aumento del riesgo de efectos colaterales como náuseas y
vómito e hipertensión, cuando se usó ergometrina. El manejo activo debe ser de
elección en un medio hospitalario. Las implicaciones son menos claras para
otros escenarios incluyendo la práctica domiciliaria (26).
Al visualizar la placenta, se toma con las dos manos, se inicia un movi-
miento de rotación para enrollar las membranas y favorecer su expulsión
completa. Debe revisarse la placenta tanto por su cara materna (observar su
integridad) como por su cara fetal (presencia de infartos, quistes, etcétera.).
También debe verificarse la integridad de las membranas, el aspecto del cor-
dón umbilical, su inserción y el número de vasos (lo normal, dos arterias y
una vena). Ante la duda de que haya alumbramiento incompleto, debe pro-
cederse a la revisión uterina y extracción manual de los restos retenidos.
Después del alumbramiento se continúa con una infusión I.V. de 5 a10
unidades de oxitocina diluidas en 500 ó 1.000 cc de cristaloides para preve-
nir la hemorragia posparto por atonía uterina. Se considera normal una
pérdida de 500 cc de sangre luego del parto vaginal normal.
Si la madre lo ha elegido, se puede proceder a aplicar el DIU posparto. Éste
debe aplicarse antes de hacer las suturas perineales; si no es posible, se hará
dentro de las primeras 48 horas del posparto. La aplicación del DIU posparto
debe ser hecha por personal experto con entrenamiento específico.
Suturar los desgarros de cuello o perineales o la episiotomía en forma
anatómica por planos sin dejar espacios muertos o hemorragia activa. Se
recomienda el uso de suturas de sintéticas absorbibles en lugar de catgut
para reparar las lesiones perineales. Una revisión sistemática incluyó 7 ECC
que compararon la utilización de materiales sintéticos versus el catgut para
la reparación del periné. Se analizaron las siguientes variables de desenlace:
dolor, cantidad de analgesia utilizada, grado de dispareunia, remoción del
material de sutura, necesidad de resuturar la herida y dehiscencia. Los resul-
tados de esta revisión muestran que el uso de ácido poliglicólico para la
reparación del periné luego del nacimiento está asociado con menor dolor y
dispareunia. Asimismo, el uso de ácido poliglicólico está asociado con au-
mento en la necesidad de remoción del material. Los materiales sintéticos
absorbibles deben ser usados para reparar el periné aunque exista un aumen-
to de la necesidad de remoción de la sutura en el posparto (A1) (27).
No se recomienda la revisión uterina de rutina. Se recomienda la revisión
restrictiva de la revisión uterina (sospecha de retención de restos placentarios o
de membranas, hemorragia posparto, corioamnionitis, parto pretérmino).
Anexos
Anexo 1 (29-31)
Como información adicional, a continuación se transcribe, con peque-
ñas modificaciones, un listado de acciones y procedimientos que se conside-
ran beneficiosos durante el trabajo de parto y el parto, de acuerdo con
evidencia obtenida con estudios clínicos aleatorizados.
d. Parto
• Apoyo físico, emocional y psicológico durante el trabajo de parto y parto
• Apoyo continuo para la mujer durante el trabajo de parto y parto
• Agentes para reducir la acidez gástrica antes de la anestesia general
• Complementar el monitoreo de la frecuencia cardíaca fetal en el trabajo
de parto con la evaluación del estado ácido-base fetal
• Ocitócicos para el tratamiento de la hemorragia posparto
• Ocitócicos profilácticos en el alumbramiento
• Manejo activo versus expectante durante el alumbramiento.
Anexo 2 (29-31)
Como información adicional, a continuación se transcribe, con peque-
ñas modificaciones, un listado de acciones y procedimientos que se conside-
ran inefectivos o incluso perjudiciales durante el trabajo de parto y el parto,
de acuerdo con evidencia obtenida con estudios clínicos aleatorizados.
b. Parto
• Enema de rutina en el trabajo de parto
• Rasurado púbico de rutina en la preparación del parto
• Monitoreo electrónico fetal sin evaluación de pH fetal de cuero cabellu-
do durante el trabajo de parto
• Amnioinfusión profiláctica intraparto para el oligoamnios
Posición decúbito dorsal (supina) en el segundo período del parto
• Uso rutinario de la posición de litotomía en el segundo período del
parto
• Episiotomía rutinaria
• Ergometrina en lugar de ocitocina profiláctica en el tercer período
del parto.
Anexo 3 (8)
Otras recomendaciones durante el trabajo de parto
1. Aliente a la usuaria para que cuente con apoyo de una persona de su
elección durante el trabajo de parto. Proporcione al acompañante un
asiento al lado de la mujer.
2. Si la mujer ha asistido a cursos de parto sin dolor o psicoprofilaxis,
aliéntela a aplicar las técnicas aprendidas.
3. Explique a la usuaria todos los procedimientos, solicite la autorización
correspondiente y explique los hallazgos.
4. Cree una atmósfera de apoyo y aliento para el parto, con respecto a los
deseos de la mujer.
5. Aliente a la mujer para que se lave, se bañe o duche al inicio del trabajo
de parto. Lave las áreas vulvar y perineal antes de cada examen. Lávese las
manos con jabón antes y después de cada examen. Asegure la limpieza
de las áreas destinadas al trabajo de parto y el parto.
6. Aliente a la mujer para que se mueva libremente. Manifieste su apoyo
por la posición que la mujer elige para el trabajo de parto y el parto
(deambulación, sentada, cuclillas, etc.)
7. La mujer puede comer y beber durante el trabajo de parto.
8. Enséñele a la mujer técnicas respiratorias para el trabajo del parto y el
parto. Aliéntela a que exhale con mayor lentitud que la habitual y a que
se relaje con cada respiración.
9. Si la mujer está muy afectada por el dolor ofrezca soporte físico, sugiera
cambios de posición o movilización, fomente el uso de técnicas respira-
torias y, si fuere necesario, administre analgesia.
Anexo 4 (1)
Áreas prioritarias para crear o fortalecer marcos jurídicos e
institucionales para prestar servicios integrales de salud materna
Acciones nacionales y municipales que promuevan: a) políticas y leyes que
protejan los derechos humanos de la mujer, incluido el acceso a la salud, la
nutrición, la planificación familiar y la educación; b) el compromiso financiero
de asegurar los recursos humanos y materiales indispensables; c) la atención de
las necesidades de la población en los sistemas de salud; d) la integración de la
atención de salud reproductiva, e) el uso de indicadores de resultado (mortali-
dad) y de procesos para vigilar la adecuación de los servicios de salud materna.
Poner a disposición servicios de salud materna de calidad por medio de: a) la
atención integrada de la salud reproductiva que incluya la atención prenatal y post-
natal, la planificación familiar y el diagnóstico y el tratamiento de las infecciones de
transmisión sexual; b) la atención calificada del parto; c) redes de cuidados obsté-
tricos de emergencia, d) acceso geográfico y cultural a la atención obstétrica.
Aumento de la demanda del público de servicios de alta calidad, asequibles y
accesibles al facilitar: a) la promoción y educación en salud generalizadas; b) la
capacidad y la participación de la comunidad en materia de salud de las gestan-
tes, c) comités de mortalidad materna activos al nivel nacional, subnacional y
municipal.
Construcción de alianzas con el fin de fomentar la salud materna a escala
internacional, regional, nacional y local que: a) se dediquen a la coordinación,
colaboración y cooperación, b) vigoricen el fortalecimiento de la capacidad y c)
promuevan la sostenibilidad.
Asegurar el apoyo financiero y la sostenibilidad económica de la atención de
salud materna mediante: a) la elaboración de una metodología para evaluar el
impacto económico de la reducción de la mortalidad materna en América Latina
y el Caribe, b) la concepción de un modelo de cuentas nacionales de salud repro-
ductiva con el fin de cuantificar las necesidades financieras e identificar los fondos
disponibles para la salud reproductiva, c) el uso de estos datos para reanimar las
negociaciones con los gobiernos sobre el financiamiento de un conjunto sostenible
de servicios de salud reproductiva, d) la captación de recursos financieros públicos
para sufragar las necesidades de salud reproductiva de las poblaciones más pobres.
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Guía 9
Guía para la atención
del recién nacido
Santiago Currea
Revisor
Juan Carlos Bustos
Revisor
Carlos Agudelo Calderón
Director del proyecto
Rodrigo Pardo
Coordinador
Hernando Gaitán
Coordinador
Pío Iván Gómez
Coordinador
Análida Elizabeth Pinilla
Coordinadora
Juan Carlos Bustos
Coordinador
Claudia Liliana Sánchez
Asistente de investigación
Francy Pineda
Asistente de investigación
Lista de participantes en la socialización
INSTITUCION NOMBMRE
Ministerio de la Protección Social Martha Velandia
Página
1. Introducción ............................................................................................ 469
2. Metodología ............................................................................................ 469
3. Justificación ............................................................................................. 470
4. Definición ................................................................................................ 471
5. Objetivo .................................................................................................... 471
6. Población objeto ..................................................................................... 471
7. Características del servicio .................................................................. 472
8. Adaptación neonatal inmediata en sala de partos ........................ 472
8.1 Limpieza de las vías aéreas .......................................................... 472
8.2 Secar al recién nacido ................................................................... 472
8.3 Estimular al recién nacido ........................................................... 472
8.4 Observar respiración o llanto, color y tono muscular .......... 473
8.5 Realizar el pinzamiento del cordón umbilical ........................ 473
8.6 Contacto piel a piel con la madre ............................................. 473
8.7 Recuperar secreciones de la boca............................................... 473
8.8 Valorar APGAR en primer minuto ............................................... 473
8.8.1 Valoración del APGAR ......................................................... 474
8.9 Presentar al recién nacido a la madre ....................................... 474
8.10 Colocar al recién nacido bajo fuente de calor ......................... 474
8.11 Evaluar sexo y realizar examen físico completo ...................... 474
8.12 Identificar al recién nacido .......................................................... 474
8.13 Realizar profilaxis ocular ............................................................. 474
8.14 Valorar APGAR a los cinco minutos ............................................ 474
8.15 Tomar medidas antropométricas ................................................ 474
8.16 Limpiar al recién nacido y vestirlo ............................................ 475
Página
9. Registrar los datos en la historia clínica ........................................ 475
10. Guía para la formulación del diagnóstico neonatal inmediato ........ 475
11. Guía para el pinzamiento del cordón umbilical ............................ 476
11.1 Pinzamiento habitual .................................................................. 477
11.2 Pinzamiento inmediato .............................................................. 477
11.3 Pinzamiento precoz ..................................................................... 477
11.4 Pinzamiento diferido .................................................................. 478
12. Tomar sangre del segmento placentario del cordón ..................... 478
13. Cuidados durante las primeras cuatro horas de vida ................... 479
13.1 Atención del recién nacido por el médico .............................. 479
13.2 Indicaciones para la atención del recién nacido
por enfermería .............................................................................. 480
13.3 Cuidados mediatos ...................................................................... 480
13.4 Consulta médica de control del recién nacido ...................... 481
14. Cuadro de nivel de evidencia .............................................................. 482
15. Flujograma............................................................................................... 483
Anexos ............................................................................................................... 486
Bibliografía ...................................................................................................... 496
Tablas y Gráficas
Tabla 1. Grados de recomendación y niveles de evidencia .................... 470
Tabla 2. Valoración del APGAR ...................................................................... 473
Tabla 3. Condiciones clínicas que indican el tipo de pinzamiento ..... 476
Tabla 4. Cuadro nivel de evidencia ............................................................. 482
1. Introducción
La atención del recién nacido está representada en el conjunto de activida-
des, cuidados, intervenciones y procedimientos dirigidos a los niños en el proce-
so del nacimiento e inmediatamente después de nacer, en procura del bienestar
general del recién nacido, reduciendo eventuales riesgos de desequilibrios, daños,
complicaciones, secuelas, tanto como el riesgo de morir.
Este conjunto de recomendaciones, basadas en la evidencia, permitirán a
los diferentes usuarios información acerca del manejo del recién nacido.
Cada paciente debe ser evaluado en particular y el clínico definirá si requiere
de evaluación y tratamiento por otros especialistas
Los revisores declaran no tener conflicto de intereses frente a las reco-
mendaciones generadas. Estas recomendaciones son acciones terapéuticas y
diagnósticas que se sabe y se cree ejercen una influencia favorable en la evo-
lución de los pacientes. Se sugiere revisar esta Guía en forma periódica como
quiera que los avances en terapéutica puedan modificar las recomendaciones
presentes y, entonces, tener una vigencia temporal de 3 a 5 años.
2. Metodología
Se elaboró una estrategia participativa que incluyó la realización de bús-
quedas sistemáticas, analizando su validación externa (generalización de re-
sultados) mediante el trabajo colaborativo de un grupo de expertos
provenientes de establecimientos de la red pública, sociedades científicas,
comisiones nacionales, del mundo académico y sector privado. Para la cons-
trucción de la guía se consultaron las siguientes fuentes electrónicas de in-
formación biomédica: MEDLINE® (desde su aparición hasta junio de 2005),
LILACS® (desde su aparición hasta - junio de 2005), El COCHRANE Contro-
lled Trials Register (CCTR, Número 1, 2000). Asimismo, la búsqueda se
complementó con una búsqueda manual en artículos de revisión recupera-
dos de revisiones sistemáticas, narrativas y los consensos de la OPS. Para
minimizar los sesgos de publicación, se adelantaron averiguaciones con au-
toridades académicas en busca de información no publicada. Se realizó un
análisis cualitativo de la información ponderado por la calidad metodológi-
ca tanto de las fuentes primarias como del soporte bibliográfico de revisio-
nes y consensos, para elaborar las conclusiones. Para esta actualización se
utilizó la metodología de clasificación de la evidencia en niveles de evidencia
y grados de recomendación utilizada (Tabla 1) (10).
Tabla 1
Grados de recomendación y niveles de evidencia
3. Justificación
La tasa de natalidad en Colombia se ha reducido del 28 por mil
nacidos vivos a 21.25 por mil nacidos vivos desde los años ochenta hasta
el presente quinquenio.
La mortalidad de menores de un año en Colombia (2002 - 2004) se ha
estimado en 26.4 por mil nacidos vivos. En este grupo de población la
mortalidad neonatal aporta cerca de 60% de los decesos.
La mortalidad en menores de 5 años para el mismo período se ha tasado
en 28 por mil nacidos vivos, de los cuales 94,2% ocurren en menores de un
año y de ellos cerca de 60% ocurren en el período neonatal.
4. Definición
La atención del recién nacido está representada en el conjunto de activi-
dades, cuidados, intervenciones y procedimientos dirigidos a las niñas y ni-
ños en el proceso del nacimiento e inmediatamente después de nacer, en
procura del bienestar general del recién nacido
La mayoría de las complicaciones del período neonatal son prevenibles,
controlables o tratables, y están asociadas con la salud de la mujer, la calidad
de la atención de la gestación, del parto y del período neonatal.
5. Objetivo
Brindar fundamento conceptual, normativo y de orientación para apo-
yar, conducir o inducir el proceso de adaptación a la vida extrauterina, me-
diante afirmación y consolidación de las condiciones favorables presentes, y
la prevención, detección y control de problemas en forma temprana, con el
fin de lograr un recién nacido sano, reducir así las múltiples secuelas disca-
pacitantes en la niñez y las altas tasas de morbilidad y mortalidad tanto
perinatal como neonatal e infantil.
6. Población objeto
La población objetivo de esta Guía son todos los recién nacidos afilia-
dos a los regímenes contributivo y subsidiado, recomendándose su aplica-
ción para todos los recién nacidos en el territorio colombiano.
táctil adicional puede proveer otra forma para estimular la respiración. Los
métodos seguros y apropiados para proporcionar estimulación táctil inclu-
yen palmadas o golpecitos en las plantas de los pies o frotar suavemente la
espalda, tronco o extremidades del recién nacido. Si el recién nacido perma-
nece en apnea a pesar de las maniobras de estimulación se debe iniciar inme-
diatamente ventilación con presión positiva.
8.4 Observar respiración o llanto, color y tono muscular
8.5 Realizar el pinzamiento del cordón umbilical según especifica-
ciones que se indicarán más adelante
8.6 Contacto piel a piel con la madre si las condiciones clínicas son
óptimas
8.7 Recuperar secreciones de la boca
8.8 Valorar el APGAR en el primer minuto, con énfasis en esfuerzo
respiratorio, frecuencia cardíaca y color (50, 51).
Estos puntajes no se deben emplear para dictaminar las acciones apro-
piadas de reanimación, como tampoco se deben retrasar las intervencio-
nes para recién nacidos deprimidos hasta la valoración de un minuto.
8.8.1 Valoración del APGAR (50, 51)
Tabla 2
Valoración del APGAR
6. DX de riesgo
Habitual________ Aumentado__________
Tabla 3
Condiciones clínicas que indican el tipo de pinzamiento
15. Flujogramas
Atención neonatal inmediata y mediata
Guías de promoción de la salud y prevención de enfermedades en la salud pública
484
Programa de Apoyo a la Reforma de Salud/PARS • Ministerio de la Protección Social
485
2.3 Manejo del recién nacido con retardo del crecimiento intrauterino
(pequeño para la edad gestacional)
Verificar en la historia materna las posibles causas del retardo del creci-
miento intrauterino, tales como toxemia, diabetes insulino dependiente con
o sin componente vascular, hipertensión, cardiopatía, neumopatía crónica,
desnutrición, infección, tabaquismo, alcoholismo, consumo de sustancias
psicoactivas y consumo de medicamentos.
Apoyar, conducir o inducir la adaptación neonatal inmediata, según sea
el caso, previniendo y tratando prontamente la asfixia neonatal; evitar la
hipotermia; evaluar la edad gestacional; practicar examen físico minucioso
en busca de signos que sugieran malformaciones congénitas o infección in-
trauterina
• Estabilización acidobásica
• Estabilización hemodinámica (balance de TA y PVC)
• Estabilización vigilada y asistencia metabólica por el riesgo severo de
hipoglicemia)
• Estabilización respiratoria, ofreciendo apoyo ventilatorio precoz con másca-
ra, presión positivo continua a las vías aéreas, o ventilación mecánica según
sea el caso, teniendo en cuenta el riesgo severo de membrana hialina
• Evaluar la edad gestacional y practicar examen físico minucioso en busca de
signos que sugieran malformaciones congénitas o infección intrauterina
En este tipo de pacientes hay contraindicación para el uso de betamimé-
ticos por el riesgo de obstrucción funcional al tracto de salida.
2.7 Manejo del recién nacido hijo de madre isoinmunizada grave (zonas
II-III de Liley) sin tratamiento antenatal
La atención del hijo de madre isoinmunizada grave incluye las siguientes
actividades:
• Pinzamiento inmediato del cordón por el riesgo de paso masivo de anti-
cuerpos
• Secado exhaustivo
2.8 Manejo del recién nacido hijo de madre con placenta sangrante
(abruptio placenta previa)
La atención del recién nacido hijo de madre
Toda intervención a un
con placenta sangrante incluye las siguientes
recién nacido tiene riesgo,
actividades:
pondere su verdadero
• Pinzamiento inmediato del cordón ante el beneficio antes de
riesgo de sangrado fetal-neonatal. Es preci- proceder y pondere su
so la recolección de alicuota para autotrans- riesgo inherente una vez
fusión (30cc en jeringa heparinizada) del que ha procedido.
muñón placentario del cordón.
Si el sangrado placentario ha sido muy abundante, deberá privilegiarse la
recolección de la alicuota para autotransfusión sobre la recolección de
las muestras de laboratorio
• Estabilización acidobásica
• Secado exhaustivo
• Toma de alicuota sanguínea de muñón umbilical proximal a la placenta,
si el remanente hemático placentario lo permite, para proceso de labora-
torio completo. Se solicitarán: cuadro hemático (debe incluir plaquetas,
hemoclasificación y sedimentación), proteinemia, relación antígeno/an-
ticuerpo, glicemia, Na, K, Ca, P, CPK MB, tiempo y concentración de
protrombina, tiempo parcial de tromboplastina, fibrinógeno y gases ar-
teriales. Deben tenerse preparados frascos secos, con heparina y con ci-
trato (pruebas de coagulación)
• Estabilización hemodinámica. Si se estima estado de choque, se debe
utilizar la alicuota obtenida para autotransfusión. Complementar la in-
fusión con cristaloides según seguimiento de TA y de PVC
• Estabilización respiratoria. Es necesario hacer una cuidadosa evaluación
de necesidad de asistencia o control respiratorios, según la edad gesta-
cional y condiciones clínicas.
2.9 Manejo del recién nacido hijo de madre con ruptura prematura
de membranas con más de 24 horas de sucedida
La atención del recién nacido hijo de madre con ruptura prematura de
membranas incluye las siguientes actividades:
• Pinzamiento diferido del cordón hasta obtener ausencia de palpitación
arterial, reducción de ingurgitación venosa y reperfusión de piel
• Simultáneo secado exhaustivo
• En el neonato con ruptura de membranas con más de 24 horas de suce-
dida hay restricción para la cateterización umbilical, la cual se practicará
sólo si se considera indispensable, previa asepsia y antisepsia del muñón
umbilical y de la piel periumbilical
• Estabilización acidobásica
15. Arango F And Mejía J.C.. When to clamp the umbilical cord?, Rev Colomb
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INSTITUCION NOMBMRE
Ministerio de la Protección Social Lorenza Ospino
Página
1. Introducción ............................................................................................ 517
2. Metodología ............................................................................................ 517
3. Justificación ............................................................................................. 519
4. Epidemiología ......................................................................................... 520
5. Objetivo .................................................................................................... 520
6. Definición ................................................................................................ 520
7. Población objeto ..................................................................................... 521
8. Características de la atención ............................................................. 521
8.1. Consulta de planificación familiar .............................................. 521
8.1.1 Criterios médicos de elegibilidad para el inicio del
uso de métodos anticonceptivos .................................................. 524
8.1.1.1 Uso de las tablas de categorías de elegibilidad ........... 525
8.1.1.2 Tablas resumen de categoría de elegibilidad, métodos
temporales......................................................................................... 526
8.1.1.3 Procedimientos seleccionados por la OMS para
proveer métodos de planificación familiar................................. 534
8.1.2 Anticoncepción de emergencia .......................................... 534
8.1.2.1 Régimen combinado ........................................................ 534
8.1.2.2 Régimen de solo progestinas .......................................... 535
8.1.2.3 Dispositivos intrauterino (DIU) ...................................... 536
8.1.2.4 Consejería y seguimiento ................................................ 537
8.1.2.5 Eficacia de la AE ................................................................. 538
8.1.2.6 Categorías OMS para anticoncepción de emergencia
(AE) hormonal .................................................................................. 539
8.1.2.7 Categorías OMS para anticoncepción de emergencia
con DIU ........................................................................................ 539
8.2 Consulta de control en planificación familiar ........................... 539
Página
8.3. Aplicación de DIU ......................................................................... 540
8.3.1. DIU de intervalo ...................................................................... 540
8.3.2. DIU posevento obstétrico (posparto y posaborto) .......... 540
8.4. Esterilización quirúrgica ......................................................... 541
8.4.1. Esterilización quirúrgica masculina ...................................... 541
8.4.2. Esterilización quirúrgica femenina ....................................... 542
8.4.3. Formato de consentimiento informado para esterilización
masculina o femenina .............................................................. 542
8.4.4. Capacidad del menor adulto para otorgar consentimiento
para el acceso a métodos temporales de planificación familiar543
9. Aspectos a tener en cuenta en la consejería
en planificación familiar ...................................................................... 545
9.1. Definición de consejería ................................................................ 545
9.2. Derechos ........................................................................................... 546
9.3. Elección Informada ........................................................................ 547
9.4. Consentimiento informado .......................................................... 547
Bibliografía ...................................................................................................... 550
Tablas resumen de categorías de elegibilidad de métodos temporales .. 551
Tablas y Gráficos
Tabla 1. Categorías para métodos temporales ......................................... 525
Tabla 2. Categorías para anticoncepción quirúrgica masculina
y femenina (OMS) ........................................................................... 526
Tabla 3. Tabla resumen ................................................................................. 526
Tabla 4. ........................................................................................................... 534
Tabla 5. Resúmen procedimientos ............................................................. 535
Tabla 6. ........................................................................................................... 538
Tabla 7. ........................................................................................................... 539
Tabla 8. .................................................................................................................... 540
Tablas 9. .................................................................................................................. 540
Flujograma 1. Anticoncepción temporal y definitiva ............................ 548
Flujograma 2. Anticoncepción de emergencia ........................................ 548
1. Introducción
La Organización Mundial de la Salud ( OMS),
en el proceso de mejorar el
acceso al cuidado de la calidad en la planificación familiar, ha venido desde
1996 revisando los criterios de elegibilidad para el uso de anticonceptivos.
Para la norma de planificación familiar publicada en la resolución 412 de
2000 se tuvo en cuenta la segunda edición de los Criterios médicos de ele-
gibilidad, y en esta actualización acogeremos la tercera revisión del docu-
mento que se basa en las recomendaciones de la reunión de un grupo de
trabajo celebrada en la OMS del 21 al 24 de octubre de 2003, que contó con
36 participantes de 18 países, incluidos los representantes de distintas agen-
cias y organizaciones. El grupo de trabajo estuvo formado por expertos
internacionales en planificación familiar, entre los que se contaban médicos,
epidemiólogos, responsables de formulación de políticas y directores en pro-
gramas. Además, el grupo de trabajo incluyó a expertos en identificación y
síntesis de evidencia y a usuarios de las guías. Para esta edición se estableció
un grupo directivo de las guías para la planificación familiar. Se pidió a
todos los miembros del grupo de trabajo que declararan conflictos de inte-
reses si los había, pero no fue el caso.
2. Metodología
Mediante un sistema para identificar la evidencia nueva en forma continua
(el sistema de identificación continua de la evidencia de la investigación o CIRE
(www.infoforhealth.org/cire/cire_pub.pl), la OMS identificó 151 recomenda-
ciones actuales para las que se contaba con evidencia nueva desde la segunda
edición. Se realizaron revisiones sistemáticas para evaluar la totalidad de la evi-
dencia para estas 151 recomendaciones, y para las nuevas condiciones y méto-
dos. Una búsqueda sistemática y exhaustiva en las bases de datos bibliográficos,
como MEDLINE, obtuvo todos los estudios principales que describían el uso de
los métodos anticonceptivos entre las mujeres con ciertas condiciones (por
ejemplo, el riesgo de accidente cerebrovascular en mujeres con migraña usuarias
de anovulatorios orales combinados). La finalidad de estas revisiones siste-
máticas fue identificar la evidencia directa para la conveniencia del uso del
método anticonceptivo en mujeres con condiciones especiales. Se obtuvo
información sobre evidencia indirecta o consideraciones teóricas para estas
recomendaciones cuando en la búsqueda no se encontró evidencia directa.
La solidez y calidad de la evidencia fueron calificadas usando el sistema de
grados de valoración, creación y evaluación de la recomendación (GRADE)
(www.gradeworkinggroup.org). El grupo de trabajo proporcionó la clasifi-
cación de la evidencia a medida que se consideró cada recomendación rele-
vante. Los aspectos de costos fueron considerados fundamentalmente en
términos de la disponibilidad y acceso a los servicios de anticoncepción, así
como de las posibles limitaciones de recursos. El grupo de trabajo también
consideró las implicaciones programáticas de las recomendaciones. Estas
reflejan fundamentalmente cuestiones de seguridad y estas cuestiones se con-
sideraron en vista de su aplicabilidad en una variedad de entornos.
Para la mayoría de las recomendaciones (combinaciones de método y
condiciones), existe una cantidad limitada de estudios que tratan el uso de
un método específico en mujeres con una condición específica. De este modo,
la mayoría de las decisiones relacionadas con los criterios de elegibilidad que
usan la evidencia se basaron necesariamente en extrapolaciones de estudios
que incluyeron fundamentalmente mujeres sanas, así como en consideracio-
nes teóricas y opiniones de expertos. La evidencia fue particularmente limi-
tada para los productos más nuevos y para aquellos de uso limitado. La
totalidad de la evidencia que consideró el grupo de trabajo incluyó:
• Evidencia basada en estudios directos u observaciones del método anti-
conceptivo utilizado por hombres o mujeres con la condición
• Evidencia derivada de los efectos del método anticonceptivo utilizado
por hombres o mujeres sin la condición
• Evidencia indirecta o inquietudes teóricas basadas en estudios en mode-
los animales adecuados, estudios de laboratorio en personas o situacio-
nes clínicas análogas.
En los casos en los que el grupo de trabajo contó con una revisión siste-
mática de la evidencia para considerar con el fin de emitir una recomenda-
3. Justificación
Colombia ha sido considerado uno de los países latinoamericanos más
exitosos en lograr un descenso rápido de su fecundidad. A este hecho han
contribuido entre otros: la rápida urbanización, el aumento de la escolari-
dad y la gran aceptación de la planificación familiar por parte de la comuni-
dad. Sin embargo, a pesar de la alta prevalencia en el uso de métodos mostrada
en la Encuesta de demografía y salud (2000) (1), existe una gran demanda
insatisfecha, especialmente en las poblaciones rurales y en las urbanas menos
favorecidas. En el año 2003 se lanzó la Política nacional de salud sexual y
reproductiva en la cual se hacen explicitas las estrategias y acciones en cuan-
to a planificación familiar, las cuales tienen como propósito proporcionar el
acceso de toda la población a métodos diversos, seguros, asequibles, acepta-
bles y confiables para la planificación familiar mediante la consejería de
calidad, el suministro oportuno del método elegido y la garantía de segui-
miento a la utilización del mismo mediante los controles necesarios para la
óptima utilización y adaptación a cada usuario. De igual forma, menciona
que se deben desarrollar competencias para decidir el número de hijos que
se quieran tener y el espaciamiento entre ellos, como decisión que compete
a ambos miembros de la pareja. Igualmente, debe enfatizarse que la utiliza-
ción o no de métodos de planificación familiar es una decisión que se mueve
en el ámbito de la autonomía y la responsabilidad personal y social, en el
contexto del proyecto de vida que cada cual escoge para sí (2) .
4. Epidemiología
En Colombia, las mujeres con mayor fecundidad presentan tasas más
altas de mortalidad materna. Así, las mujeres con cuatro hijos o más presen-
tan tasas por encima de 120 x100.000 RN vivos y las que tienen 2,4 hijos o
menos presentan tasas por debajo de 64 x100.000 RN vivos. La mortalidad
materna se comporta de manera inversamente proporcional a la prevalencia
del uso anticonceptivo. Las zonas donde la prevalencia del uso de anticon-
ceptivos es superior a 74%, presentan mortalidad materna de 74 x100.000
RN vivos, mientras que donde la prevalencia anticonceptiva es de 62% o
menos la mortalidad materna asciende a 111 x100.000 RN vivos. Es, por lo
tanto, la planificación familiar una herramienta de gran importancia en la
reducción de la mortalidad materna en el país (3).
5. Objetivo
Ofrecer a hombres, mujeres y parejas en edad fértil la información, edu-
cación y opciones anticonceptivas apropiadas para una elección informada
del método que más se ajuste a sus necesidades y preferencias, contribuyen-
do a la disminución de gestaciones no deseadas y la mortalidad materna,
dando una respuesta apropiada a hombres y mujeres a sus derechos repro-
ductivos y, en consecuencia, brindándoles una mejor calidad de vida.
6. Definición
Conjunto de actividades, procedimientos e intervenciones dirigidas a
hombres y mujeres en edad fértil, dentro de los cuales se encuentra la infor-
mación, educación, consejería en anticoncepción, incluyendo la entrega de
suministros, para que las personas o parejas ejerzan el derecho a decidir libre
y responsablemente, si quieren o no tener hijos, así como su número y el
espaciamiento entre ellos. En aras de una atención integral estas actividades,
procedimientos e intervenciones deben realizarse en todos los niveles de
atención de acuerdo con el grado de complejidad. Los niveles mayores po-
drán brindarlas en su totalidad.
7. Población objeto
Los beneficiarios de esta norma son todos los hombres y mujeres en
edad fértil afiliados a los regímenes contributivo y subsidiado. Esta norma
podrá servir de marco de referencia y aplicación de métodos de planifica-
ción para aquellos proveedores que dispensen atención a la población pobre
y no asegurada.
8. Características de la atención
Las siguientes actividades, procedimientos e intervenciones, conforman
las guías básicas mínimas que deben ser realizadas por las instituciones res-
ponsables de la atención en planificación familiar a hombres y mujeres, las
cuales deben tener capacidad resolutiva y un equipo de salud capacitado
para brindar atención integral humanizada y de calidad, que garantice la
información, educación, consejería y oferta anticonceptiva a libre elección
informada al hombre, mujer o pareja, así como su seguimiento.
Además de la obligación administrativa y técnica, estas guías implican
por parte de sus ejecutores, un compromiso ético para garantizar los dere-
chos reproductivos y la protección anticonceptiva de hombres y mujeres en
edad reproductiva.
Tabla 1
Categorías para métodos temporales
Tabla 3
Tabla resumen
8.1.2Anticoncepción de emergencia
La anticoncepción de emergencia se refiere a los métodos de planificación
familiar que pueden usar las mujeres para impedir la gestación, después de una
relación sexual sin protección. Esta opción no se debe utilizar como método
regular de planificación y es indicación reforzar la información educación sobre
los métodos regulares de anticoncepción. Un grupo poblacional en el cual la
anticoncepción de emergencia es de gran demanda es el de los y las adolescentes
en los que se debe informar y educar sobre métodos regulares anticonceptivos,
sin olvidar la doble protección (Guía para la detección temprana de las alteraciones del joven
de 10 a 29 años). La circular 018 de 2004 obliga a las entidades territoriales a
proveer métodos anticonceptivos regulares y de emergencia a la población ado-
lescente vulnerable no asegurada en el sistema.
Los esquemas de anticoncepción de emergencia disponibles son (5):
8.1.2.1 Régimen combinado
También conocido como de "Yuzpe" consiste en la toma vía oral de dos
tabletas de anticoncepción de altas dosis (cada una conteniendo 250 μg de
levonorgestrel y 50 μg de etinilestradiol) dentro de las 72 horas (tres días)
Tabla 5
Resúmen procedimientos
NR: No relevante.
NA: No aplica.
1. Clase A para diafragmas.
2. Búsqueda de antecedentes de ITS. Por antecedentes es clase A
3. Pruebas para determinar hemoglobina, así como glucosuria, son clase B.
4. Clase A es para ajuste del diafragma.
5. Incluye instrucciones para píldoras olvidadas.
6. Puntos a incluir: método permanente, antes de la operación +y recuperación e instrucciones para después de la cirugía.
7. La consulta es una buena idea, pero no siempre puede ser posible con ventas libres de condones y espermicidas. Sin embargo,
clase A para diafragmas.
8. Puntos a incluir: comportamiento con alto riesgo; uso de condones para doble protección.
9. Para orales D e inyectables A.
Tabla 6
Parágrafo
Ninguna usuaria o usuario debe salir de la consulta sin haber recibido un
método de protección anticonceptiva.
1 Entre otras sentencias se pueden consultar: C-93 de 2001 M.P. Alejandro Martínez Caballero; C-184
de 2003 M.P. Manuel José Cepeda; Sentencia C-814/01 M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra.
9.2 Derechos
Los derechos sexuales y reproductivos están basados en los derechos
humanos que se describen a continuación.
Información: todas las personas tienen derecho a solicitar, recibir e impar-
tir información. En el caso de planificación familiar, el usuario tiene dere-
cho a recibir información completa sobre todos los métodos de planificación
familiar.
Libertad: es la capacidad de hacer elecciones básicas sobre la vida y la
atención en salud en general, la que incluye la salud sexual y reproductiva.
Privacidad: en la vida personal y familiar. Las decisiones sobre la salud
sexual y reproductiva incluida el tamaño de la familia son de carácter priva-
do, pues éstas se toman teniendo en cuenta los valores, las necesidades, la
familia, el bienestar social, la religión y las circunstancias personales relacio-
nadas con la salud.
Vida libre de daño: vivir exento de daño proviene del derecho a la seguridad
que tiene el usuaro en todos los procedimientos que se le realicen, como el
caso de los métodos de planificación familiar definitivos, sin excluir los de-
más métodos.
Igualdad: sin discriminación de raza, color, sexo, idioma, religión, política,
opiniones, origen nacional, origen geográfico, nivel socioeconómico u otra
condición, es decir, se le brinda un trato digno. Los métodos de planifica-
ción familiar deben ser dados a conocer en todos los ámbitos para que de
esta manera sean accesibles a todas las personas que los soliciten.
Justicia sanitaria: se garantiza el derecho al nivel más alto de salud física y
mental que se pueda obtener. El usuario ejerce este derecho cuando puede
Flujograma 2
Anticoncepción de emergencia
Bibliografía
1. Encuesta nacional de demografía y salud. Profamilia. Ed: Printex Impresores. Bogotá,
Colombia. 2000: 53-70.
2. Política nacional de salud sexual y reproductiva. Minprotección Social. Colombia,
2003.
3. Plan de choque mortalidad materna. Miniprotección Social. Colombia, 2004.
4. World Health Organization. Medical elegibility Criteria for contraceptive use. 3d Edi-
tion. Geneva, 2004.
6. Gómez P.I Capítulo 165: Anticoncepción de emergencia. En texto de obstetricia y
ginecología. Sociedad Colombiana de Obstetricia y Ginecología. Primera
Edición. Ed. Distribuna. 2004: 844-847.
7. World Health Organization. Randomized controlled trail of levonorgestrel versus yuzpe
regimen of combined oral contraceptive for emergency contraception. Lancet 1998. 352:
428-33.
8. Hiller JE, Griffith E, Jenner F, Education for contraceptive use by women after childbirth
(Cochrane Review). The Cochrane Library, Issue 3, 2005. Chichester, UK:
John Wiley & Sons, Ltd.
9. Profamilia, Oficina asesora derechos sexuales y reproductivos. Octubre 26 de 2005.
10. EngenderHealth. Currículo de consejería. New York, 2004.
11. EngenderHealth. Elección informada. New York, 2002.