BASES PARA FORMAR UNA EMPRESA DE SEMILLAS DE

PAPA1

Por Luis Felipe Alvarado2

INTRODUCCION

Diferentes estimativos y estudios sobre el uso de semilla en

Colombia indican que el consumo de semilla certificada puede
estar en promedio en un 2% y un 3%. Tomando como base un
área sembrada de 160.000 hectáreas con un promedio de 1500
Kg. de semilla por hectárea se tendría una demanda potencial
de 232.000 toneladas. Un estudio realizado por el ICA en 1992
en Nariño (Arcila y Arévalo) Indicaba que la demanda de semilla
Certificada para el departamento de Nariño podría estar en unas
30.000 toneladas al año.

PLANEACION

La producción de semilla es una actividad a largo plazo. El ciclo

completo a partir de material in vitro comprende cinco
generaciones, lo cual tiene un tiempo aproximado de cuatro
años. Se requiere de una planeación estratégica con el objeto
de disponer oportunamente de los recursos técnicos y
económicos necesarios para continuidad del proceso. Aún si el
semillerista no hace el ciclo completo, debe asegurar con
anticipación la consecución de un material Básico que debe
multiplicar dos generaciones antes de entregar el producto final
al cultivador.

Dado que la demanda de semilla de papa obedece a períodos

cíclicos, no se debe sobrestimar el volumen a producir ni crear
falsas expectativas que no se pueden cumplir. Debe tenerse en
cuenta tanto a los semilleristas de la región, como
también la semilla de producción informal que tradicionalmente
utiliza el agricultor y aún, los excedentes de papa que algunos

1 Articulo publicado por la Revista Papa, No.21, septiembre del 2000. La Revista
Papa es el organo informativo de la Federación Colombiana Productores de Papa,
FEDEPAPA.
2 Ingeniero Agrónomo, M.Sc, Semillas Nariño.
agricultores "dejan para semilla" cuando hay sobreproducción.

La planeación obliga al empresario a llevar un registro de los

costos de producción y del tiempo que la semilla permanece en
bodega hasta la venta, con el objeto de no vender a pérdida. Se
debe tener en cuenta adicionalmente, que la producción de
semilla como negocio constituye una inversión a largo plazo, es
decir, la recuperación del capital inicial y las utilidades serán
progresivas a lo largo del tiempo.

2. RECURSOS ECONÓMICOS

Partimos del hecho de que el costo real para producir una

hectárea de semilla es mayor a medida que la categoría es más
alta. A la fecha, una plántula in vitro puede tener un precio de
US$ 0,65, un kilo de semilla categoría Elite US$ 1,00 y producir
una hectárea de semilla Certificada puede variar
aproximadamente entre US$ 4.000 y US$ 4.500. El costo de la
infraestructura mínima necesaria para desarrollar un proyecto
completo de semilla consistente en un invernadero de unos 120
m2, una bodega de 100 m2, puede costar entre US$ 20.000 y
US$ 25.000, dependiendo del área y de la ubicación.

En cuanto al costo de una planta de personal mínima es muy

relativa, pero podría estar constituida por un Ingeniero
agrónomo, un auxiliar de campo y un auxiliar de oficina.

3. RECURSOS HUMANOS

Los recursos humanos constituyen el pilar fundamental para

formar una empresa de semillas. Una empresa de semillas en la
cual se realice todo el proceso, requiere de un Ingeniero
Agrónomo que entienda los problemas sanitarios y fisiol6gicos
que se presentan en las plántulas durante el crecimiento en el
invernadero y en las diferentes etapas de desarrollo en el
campo.

Es una actividad continua ya largo plazo que requiere de una

asistencia profesional. Para resolver algunos de los problemas
que se presentan es necesario hacer algún tipo de investigaci6n.
Si la explotaci6n es a partir de semilla Básica o Registrada, la
dedicaci6n del profesional no será de tiempo completo.

Sin importar el tamaño de la empresa, la credibilidad y demanda

de semilla dependen, en gran parte, de la ética con que se
maneje el aspecto de calidad.

4. RECURSOS TECNICOS

Se refiere a la infraestructura física, a la tecnología utilizada y

material a producir. Para un proyecto de producci6n de semilla
no se requiere poseer grandes extensiones de tierra. Es muy
importante conocer la sanidad de cada lote donde se va a
sembrar; con el objeto de no perder un material valioso por
contaminación de patógenos del suelo, como Spongospora
subterranea (Roña de la papa) y Ralstonia solanacearum
(Dormidera), entre otros.

Si el proyecto contempla el ciclo completo de producción, se

requiere de invernadero, campos bien aislados para la siembra
de mini tubérculos sanos y bodega para mantener la semilla de
las diferentes categorías en condiciones
óptimas. Para la obtención de semilla Certificada a partir de
Registrada, solo se requiere de bodegas adecuadas para el
tratamiento y posterior almacenamiento de la semilla.

El tamaño de una explotación de semillas, como negocio, puede

ser de diferente área dependiendo si se dedica a desarrollar
todo el proceso de producción partiendo desde el material in
vitro hasta llegar a la semilla Certificada o solamente a producir
Certificada partiendo de Categoría Básica.

CONTROL DEL PROCESO DE PRODUCCION

Constituye la parte neurálgica para poder mantener la sanidad

del material inicial recibido y entregar un producto final de la
mejor calidad. El control de la producción tiene que estar
apoyado por el conocimiento de los problemas del cultivo
acompañado de una ética a toda prueba.

Es necesario establecer un cronograma de control en todas las

actividades y evaluaciones a realizar en cada una de las etapas
de crecimiento y en postcosecha. Un producto aplicado
inoportunamente, o mal dosificado o una práctica cultural
ejecutada a destiempo puede repercutir en el agravamiento de
un problema y llevar a la eliminación de un lote para semilla.

5.1. Material in vitro

La micropropagación del material in vitro constituye el punto de

partida hacia la producción de una semilla de buena calidad,
pero ésta labor es generalmente ejecutada por laboratorios
especializados. Con el arreglo del invernadero para la recepción
del material in vitro empieza la labor del Ingeniero Agrónomo.

5.2. Propagación en invernadero

La propagación en invernadero se hace a partir de plántulas in

vitro, esquejes o mini tubérculos. Al recibir las plántulas hay que
trasplantarlas a camas o a maceteras e iniciar su proceso de
adaptación (endurecimiento), proporcionándoles una cámara
húmeda a cada una.

El suministro de riego debe hacerse preferible- mente con riego

por goteo o micro aspersión. El manejo de plaguicidas y
fertilizantes debe realizarse con mucho cuidado ya que las
raíces de las plántulas son muy sensibles al daño por químicos.
Cuando las plántulas están en pleno desarrollo, se hace la
prueba serológica de ELISA para detectar la presencia de
virus.

5.3. Campos aislados de multiplicación

El aislamiento de lotes es un principio que se debe tomar en

cuenta en todo proyecto de semillas. La mejor estrategia es
ubicar lotes donde no se haya sembrado papa por varios años,
conocer su historia y asegurarse que están libres
de problemas fitosanitarios graves que puedan contaminar el
material limpio. Las zonas paperas del páramo presentan el
mejor hábitat para el cultivo de un buena semilla. Esta es una
práctica ancestral de los agricultores. En varios trabajos
realizados en el Norte de Europa en la década del 90 se
comprobó la hipótesis de que cultivos de semilla desarrollados
en climas con bajas temperaturas van a tener un mayor
rendimiento en la próxima cosecha, conociéndose el fenómeno
como "Vigor Nórdico". A pesar de que éstas zonas están siendo
vetadas por las autoridades ambienta- les para el cultivo de
papa, sigue siendo la mejor alternativa para conservar la calidad
y potenciar la productividad de la semilla.

El conocimiento de los problemas fitosanitarios de la región y su

manejo para planear los campos de multiplicación por parte del
semillerista, complementado con el seguimiento de la sanidad
que realiza el ICA, constituyen una carta de
garantía para entregar un material de buena calidad al
cultivador.

6. MANEJO EN POSTCOSECHA

6.1. Cosecha y selección

Del manejo que se dé a la semilla desde el momento de la

cosecha hasta su almacenamiento definitivo, depende en gran
parte la conservación de la calidad que se ha conservado
durante el proceso de producción

La semilla debe cosecharse cuando el cultivo haya alcanzado su

madurez fisiológica, Aquí es muy importante el concepto y
experiencia del ingeniero Agrónomo. En el momento de la
cosecha siempre se presentan tubérculos con ataques de
plagas, enfermedades o defectos fisiológicos que es necesario
eliminar.

Es importante contar con personal capacitado, herramientas

apropiadas así como condiciones climáticas apropiadas, para la
cosecha.

6.2.Tratamiento de la semilla

Es poco lo que se puede hacer para mejorar la calidad de la

semilla con un tratamiento con base en productos químicos
después de la cosecha. El tratamiento con fungicidas está
dirigido al control de hongos que atacan superficialmente la piel
como es el caso de Rhizoctonia. No es aconsejable hacer
tratamientos por inmersión en soluciones fungicidas dado el
peligro de infecciones por bacterias.

6.3. Almacenamiento

El almacenamiento en forma adecuada es un proceso muy

importante para mantener la calidad de la semilla. Se debe partir
de hecho que el tubérculo-semilla es un tallo modificado que
durante su almacenamiento requiere de oxígeno, luz difusa, baja
temperatura y adecuada ventilación entre pilas o bultos para
preparase a dar origen a nuevas plantas.

Previo al almacenamiento la bodega debe limpiarse y

desinfectar. se con productos químicos para eliminar cualquier
fuente de plagas y enfermedades. Cada bulto se debe proteger
con un polvo insecticida para evitar los áfidos y polillas que
puedan Ilegar, y depositen huevos.

7. COMERCIALIZACION

Tradicionalmente en Colombia, el precio que el productor de

papa cree que debe pagar por una semilla, está relacionado
directamente con los precios fluctuantes de la papa fresca en el
mercado. y es que el mayor volumen de la "semilla" que se
comercializa se reduce a una papa de consumo de bajo precio
en el mercado fresco, que se ha dejado brotar; en cambio la
oferta de Semilla Certificada es muy baja. Este concepto tiene
que desvirtuarse demostrando las bondades de una semilla
Certificada por parte de agricultores que están convencidos de
su potencial de rendimiento depende en gran parte de la imagen
que tengan del semillerista. Y esa imagen se logra demostrando
resultados. Los siguientes factores podrían motivar al productor
a decidirse a adquirir una semilla Certificada:

1. Conocimiento sobre los rendimientos obtenidos por otros

productores

2. Días de campo con visita a los campos de multiplicación y/o

instalaciones para conocer la sanidad de la semilla y manejo del
proceso de obtención

3. Una oferta oportuna, antes de iniciarse la época de siembras

4. Mantener en lo posible un precio estable y asequible

5. Entregar a cada cliente unas recomendaciones básicas para

el manejo de cada variedad en el campo,

De todas formas el precio de la semilla no estaría por debajo de

los costos de producción. Hay estrategias para no vender a
pérdida, entre otras, a manera de ejemplo, solicitar
recertificación o multiplicarla como papa para consumo.

8. CREDIBILIDAD

Este es un punto vital en el desarrollo y supervivencia de una

empresa de semillas. Las compañías multinacionales de semilla
cuidan mucho su credibilidad. La credibilidad implica honestidad
y claridad en la calidad del insumo que se ofrece al cliente.

La credibilidad es una calificación que se logra ofreciendo una

calidad total. El semillerista no puede garantizar producto del
cual desconozca o tenga duda de su calidad. Tampoco puede
olvidarse de su cliente, no puede convertirse en
un vendedor más; es conveniente que haga seguimiento de la
calidad de la semilla para enterarse del comportamiento y
productividad de la misma en manos del agricultor y asó poder
ofrecer siempre una buena calidad.