¿Qué falta entonces si los docentes continúan en formación? ¿Por qué no hay
prácticas que impacten directamente en la educación de los alumnos? Estudios
recientes nos demuestran que existen docentes cada vez más preparados,
aproximadamente el 80% de los profesores de la región son pasantes o
titulados de UPN, sin embargo esto no impacta directamente a la calidad
educativa. Diariamente nos enfrentamos a problemas de planeación y
conceptualización de contenidos por parte de los profesores, los patrones
tradicionales para responder a las necesidades educativas de los alumnos son
obsoletos.
Este conjunto de hechos apunta a que existe una incompatibilidad entre las
necesidades de la población atendida y los programas y estrategias didácticas
construidos y desarrollados por el docente; de ahí que se haga necesario
impulsar las competencias creativas de los profesores, a efecto de que éste
pueda estar en capacidad de responder a los siguientes retos cruciales para
implementar una educación de calidad: a) identificar con claridad el contexto
de la escuela, b) elaborar planeaciones didácticas novedosas y significativas, c)
manejar sus programas y contenidos, d) incluir asertivamente a las TIC’s
dentro de su práctica docente, e) elaborar el material didáctico acorde a sus
situaciones didácticas, y en conclusión ser un agente de cambio e innovación
en su comunidad escolar.