LA EDUCACIÓN A DISTANCIA, ESTRATEGIA PARA LA EXPANSIÓN DE LA
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA CHAPINGO
La educación a distancia avanza a pasos acelerados en todo el mundo, acorde al rápido desarrollo de las tecnologías de información y comunicación. Numerosas e importantes universidades de Europa, Asia y América han incorporado en sus estructuras institucionales y ofertas docentes la educación a distancia; en el caso de México, por ejemplo, la Universidad de Guadalajara no sólo incursionó en la educación a distancia, sino que avanzó a tal grado que creó la Universidad de Guadalajara Virtual, que cuenta con rector y toda su organización académica. Por supuesto, ante este influjo también han proliferado instituciones que han visto en esta nueva modalidad educativa una oportunidad de lucro, sin importar el cabal cumplimiento de los propósitos formativos. En la Universidad Autónoma Chapingo institucionalmente son incipientes las acciones para incursionar en la educación a distancia, pues tan sólo recientemente se creó la Coordinación Universitaria de Virtualización Educativa (CUVE), no obstante que existe una planta docente con profesores de alto nivel, que se cubren amplias áreas de conocimiento relacionadas con el medio rural, que una parte de sus docentes ha participado en cursos a distancia o se ha formado para el diseño y la impartición de educación a distancia, y que la institución cuenta con reconocimiento nacional e internacional. Para que la Universidad Autónoma Chapingo ofrezca cursos a distancia requiere de docentes preparados en el diseño de cursos en esa modalidad, de la formación de un cuerpo académico que coordine, imparta y evalúe los cursos y del diseño o el acceso a una plataforma de trabajo funcional. Pero, ante todo, se requiere dar los primeros pasos, para que poco a poco se genere experiencia en esta nueva modalidad educativa que mucho puede aportar para que nuestra Universidad extienda su oferta docente y pueda cubrir la demanda formativa que el conocimiento y la transformación del medio rural requieren. Un buen inicio es la incorporación, en los cursos y programas docentes actuales, de estrategias didácticas que contemplen la correcta y racional aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación, con las que los estudiantes ya conviven cotidianamente. Como parte de la estrategia para el fortalecimiento de su posgrado, la Dirección de Centros Regionales Universitarios tiene contemplado iniciar este año la Maestría en gestión del desarrollo rural, cuyo primer semestre será un tronco común de varias opciones que tendrían su sede en los centros regionales que participan el diseño del programa. Una de las características importantes de esta propuesta de posgrado es que el tronco común se imparta a distancia y que en los otros semestres exista un fuerte componente virtual. No obstante, es importante tener muy claro que la educación a distancia no es una panacea. Además de sus limitaciones derivadas del necesario acceso y óptimo funcionamiento de tecnologías de información y comunicación, se desarrolla inmersa en la generalizada crisis educativa. Esto significa que muchos de los acuciantes problemas de la educación presencial también se manifiestan en la educación a distancia, pues en ambos existen los mismos actores y mecanismos de regulación: alumnos, docentes, planes y programas de estudio, sistemas de evaluación e instituciones educativas. El reto de la Universidad Autónoma Chapingo consiste en aprender de la práctica que otras universidades han desarrollado en educación a distancia y aprovechar la experiencia que algunos de sus docentes han tenido en esa modalidad formativa, para comenzar a formular y ejecutar cursos, diplomados, especializaciones y programas de licenciatura y posgrado a distancia. De esta manera se estará ante mejores posibilidades para formar los profesionistas que realmente contribuyan al desarrollo rural. Propuestas de resolutivos del Congreso 1. Que los actuales programas educativos de centros regionales incorporen crecientemente elementos de educación a distancia, con el propósito de aprovechar las tecnologías disponibles y de desarrollar capacidades en el diseño y evaluación de esta modalidad educativa. 2. Que los nuevos programas docentes de centros regionales se ofrezcan, según la naturaleza del objeto de estudio a abordar, en las modalidades de educación presencial o a distancia, entendiendo que una modalidad no excluye a la otra. 3. Que se impulse como prioridad universitaria el diseño y ejecución de sólidos programas educativos que se impartan predominantemente a distancia, y que contemplen el seguimiento presencial en las áreas de influencia de los centros regionales, estrategia con la que se puede ampliar considerablemente la oferta docente, la matrícula estudiantil y la presencia nacional e internacional de la Universidad