Correo Electrónico:
agenl@mail.nl.gob.mx
017
M385p
Martínez Cárdenas, Leticia (comp.)
Para Efectos de la Guerra. Correspondencia Santiago
Vidaurri – Pedro Hinojosa 1855 – 1864 / Leticia Martínez
Cárdenas. Compilación. —Monterrey, N.L.: A.G.E.N.L. 2000.
255p. (Serie: Archivo Santiago Vidaurri 3)
ÍNDICE GENERAL
Prólogo………………………...…………. I
Contenido………………………………… 1
Bibliografía………………………………... 253
Originario de Matamoros, Tamaulipas, Pedro Hinojosa
nació en 1820 e ingresó al ejército en 1840. Durante los
primeros dos años se fogueó en la persecución de filibus-
teros texanos que asolaban la región y en la invasión
americana, tomó parte en las acciones de San Antoñito y
en la defensa del puerto de Matamoros.
I
A partir de este momento la relación de estos dos persona-
jes se acrecentó hasta convertirse en una franca y leal
amistad que perduró hasta la muerte de Santiago Vidaurri.
II
pertenecientes al terrateniente Leonardo Zuloaga, que a su
favor alegó poseer los títulos de propiedad.
III
apoya a los bandidos, no lo haría sin la protección de
Patoni, ni éste fallándole la autorización del gobierno.
IV
algunos amigos fieles. Cuatro centinelas guardaban la puerta. Se
levantó al vernos, para saludarnos con su habitual sonrisa agradable,
y sin estar desconcertado en lo más mínimo, nos abrazó; notando que
de los ojos de Hinojosa caían lágrimas, le puso la mano en su hom-
bro, diciéndole: mi querido Pedro, hace mucho que
conocí que tenía usted un corazón noble.
Le manifestamos nuestra entrevista con Díaz, y la ninguna espe-
ranza que existió. Nos contestó que había sidole entregado una de
la orden para su ejecución para las cuatro de la tarde; dijo que
Wright le había vendido, que le había pedido 5000 cinco
mil pesos, que le había dado algo, que la tarde anterior
sintió que estaba vendido y hubiera salido de la casa, sino temía que
los policías estaban cuidándola, que frecuentemente suplicó a Wright,
para avisarme que deseaba hablarme, que se negó a hacerlo, pretex-
tando que no convenía que yo me presentara en su casa.
Me preguntó si sabía en donde estaba usted, y le dije que en
Brownsville. Le pregunté si deseaba ver a Indalecio, que había ha-
blado con Díaz sobre ésta, quien me dijo que si Indalecio no tenía
empleo efectivo, que no había riesgo para él; después de reflexionar,
me dijo que prefería no ver a Indalecio, y encargó que no supiera
nada, hasta después de su muerte.
Entonces me dijo en donde encontraría el poco dinero que tenía, y me
ordenó darle a Indalecio. Dijo algo sobre que había dado a su esposa,
alguna cosa de igual valor; dijo que su consuelo más grande era su
convicción de que usted cuidará a su querida hija, y me mandó decirle
que sus últimos pensamientos serían para ella. Que pronto estaría
ante el Juez Supremo, que confiaba en su decisión, pero que protes-
taba contra la orden de ser fusilado, sin ser oído que era una
barbaridad que mancharía a su patria.
Estaba completamente tranquilo, sin temer la muerte en lo más
mínimo, nos pidió que asistiéramos a su muerte. Quince minutos
antes de las cuatro, se presentó el padre y nos despedimos de nuestro
buen amigo por la última vez, y se despidió de mí con su sonrisa
acostumbrada Adiós general, hasta luego.
V
Fuera de la Diputación, había mucha gente y un escuadrón de
caballería, nos quedamos afuera, a las cuatro salió con un oficial y
un Padre, tenía un pañuelo blanco amarrado sueltamente sobre los
ojos, entró al coche y se puso en marcha. Cumpliendo con su deseo de
seguir hasta el fin, seguí el coche, le vi bajar, oí la descarga, su alma
voló al cielo.
En una esquina del cementerio de San Pablo, descansan los restos
de su noble padre y amigo, una losa dice Aquí descansan los
restos de don Santiago Vidaurri, antiguo gobernador de
Nuevo León y Coahuila, murió el 8 de julio de 1867,
edad 58.
Eramos cuatro los que le acompañábamos en su último viaje so-
bre esta tierra, con el Padre y asistentes.
Su deseo era, que se lleven sus restos a Monterrey y que él y su
amada esposa, sean removidos a la Mesa, y depositado allí, en una
capilla modesta y sencilla, que se fabricara, en caso que vuelva a
poder de la familia dicha Mesa, y sino, que sea en Monterrey con su
esposa, comprando su terreno con este fin.
He cortado algo de su pelo, con el fin de mandarlo a usted para
su esposa, tan luego como este arreglado el relicario que mande hacer.
Ahora es el deber de usted comunicar esta triste noticia a ella, a
quien fue dados sus últimos pensamientos en este mundo. Que Dios
tenga su alma en su santo guardia.
Su amigo.
James E. Slaughter
P.D. Debo decirle que yo tenía arreglado todo para la salida del
señor Vidaurri, más se resolvió no salir, hasta después que entrara
Juárez.
También que el general Díaz, dice positivamente que no fue de-
nunciado por Wright, ni por ningún americano.
Indalecio está bueno, está en la Enseñanza y espero que estará li-
bre en pocos días, se presentó al saber la muerte de su padre.
VI
Nada sé de Quiroga. Las acusaciones relativas a Taylor son, en
mi concepto falsas.
VI
I
Para Efectos de la Guerra
1
Leticia Martínez Cárdenas
2
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
3
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
4
Para Efectos de la Guerra
5
Leticia Martínez Cárdenas
6
Para Efectos de la Guerra
Hinojosa.
7
Leticia Martínez Cárdenas
8
Para Efectos de la Guerra
9
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
10
Para Efectos de la Guerra
11
Leticia Martínez Cárdenas
12
Para Efectos de la Guerra
13
Leticia Martínez Cárdenas
14
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
15
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
16
Para Efectos de la Guerra
17
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
18
Para Efectos de la Guerra
19
Leticia Martínez Cárdenas
20
Para Efectos de la Guerra
21
Leticia Martínez Cárdenas
que nos diera el ser, sino para probarles a nuestros hermanos, que
nuestra vida les pertenece, sin otro interés que contribuir de
algún modo al establecimiento de la libertad y de la paz, y a
promover el engrandecimiento de nuestros pueblos.
No sé hasta ahora si los servicios de Sayas, que deben consi-
derarse importantes, habrán sido admitidos; cónstame sólo su
buena intención, su ardiente deseo de sacrificarse por vengar
las ilustres víctimas de Tampico, castigando ejemplarmente a
los bandidos fueristas.
Al emprender su marcha Sayas, he quedado encargado del
mando de su brigada y he reducido los dos batallones, la
Unión y Tansanhuites, compuestos de hijos todos del estado
de San Luis, a uno solo que se llama Olivares, según el acuerdo
que tuve con el señor Zuazua.
El coronel Olivares, que ha dado su nombre al batallón, es
uno de los jefes más valientes, de los que componen el Ejército
del Norte y aunque no ha tenido relaciones de ninguna especie
con usted, puedo asegurarle que es del número de sus mejores
amigos y como tal, tengo el gusto de presentárselo.
En cuanto a lo que actualmente pasa en estos puntos, dis-
fruto la satisfacción de ratificarle lo que le comunico en mi
anterior que conduce Durán. El enemigo se estaciona en San
Luis: tiene, según mi modo de ver las cosas, mucho miedo,
presiente su derrota, y no se atreve a emprender ningún movi-
miento, porque sabe que así apresura su ruina.
Este juicio me lo hace formar, la observación con que he se-
guido sus actos desde su salida de México. Empezó por reunir
los restos de su valiente ejército en Querétaro, y por encargarles
a los periodistas que hablaran con misterio de sabias combina-
ciones militares, de acertados y violentos movimientos
estratégicos, de batallas casi de éxito infalible, y ha concluido
pidiéndole auxilio a Miramón, para poder entrar a San Luis,
porque según él, venía sólo con dos mil hombres.
Esta conducta del defensor de la causa de Dios, como le di-
ce Barajas, no tiene disculpa ante los valientes de todos los
partidos. ¡Qué vergüenza para el vencedor de Salamanca!
22
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
23
Leticia Martínez Cárdenas
24
Para Efectos de la Guerra
25
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
Pedro Hinojosa.
26
Para Efectos de la Guerra
27
Leticia Martínez Cárdenas
28
Para Efectos de la Guerra
29
Leticia Martínez Cárdenas
30
Para Efectos de la Guerra
31
Leticia Martínez Cárdenas
32
Para Efectos de la Guerra
Querido amigo:
Pedro Hinojosa.
33
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
34
Para Efectos de la Guerra
35
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
36
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
37
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
Pedro Hinojosa.
38
Para Efectos de la Guerra
39
Leticia Martínez Cárdenas
40
Para Efectos de la Guerra
41
Leticia Martínez Cárdenas
42
Para Efectos de la Guerra
Castro.
43
Leticia Martínez Cárdenas
Narciso Hernández.
44
Para Efectos de la Guerra
45
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
46
Para Efectos de la Guerra
47
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
48
Para Efectos de la Guerra
Jesús G. Ortega.
49
Leticia Martínez Cárdenas
50
Para Efectos de la Guerra
51
Leticia Martínez Cárdenas
52
Para Efectos de la Guerra
53
Leticia Martínez Cárdenas
54
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
55
Leticia Martínez Cárdenas
56
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
57
Leticia Martínez Cárdenas
58
Para Efectos de la Guerra
59
Leticia Martínez Cárdenas
60
Para Efectos de la Guerra
Máximo Campos.
S. Bravo, Secretario.
61
Leticia Martínez Cárdenas
62
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
63
Leticia Martínez Cárdenas
64
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
65
Leticia Martínez Cárdenas
66
Para Efectos de la Guerra
67
Leticia Martínez Cárdenas
68
Para Efectos de la Guerra
69
Leticia Martínez Cárdenas
70
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
71
Leticia Martínez Cárdenas
72
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
73
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
74
Para Efectos de la Guerra
75
Leticia Martínez Cárdenas
Mi querido amigo:
76
Para Efectos de la Guerra
77
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
78
Para Efectos de la Guerra
80
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
81
Leticia Martínez Cárdenas
82
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
83
Leticia Martínez Cárdenas
84
Para Efectos de la Guerra
85
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
86
Para Efectos de la Guerra
87
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
88
Para Efectos de la Guerra
89
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
90
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
91
Leticia Martínez Cárdenas
92
Para Efectos de la Guerra
93
Leticia Martínez Cárdenas
94
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
95
Leticia Martínez Cárdenas
96
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
97
Leticia Martínez Cárdenas
98
Para Efectos de la Guerra
99
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
100
Para Efectos de la Guerra
que en vista del informe, que del estado que guardan las cosas
en el interior, se resolverán.
La elección del gobernador recalcó en don Luis Terrazas,
que es un buen amigo de usted.
Yo sigo malo, y cada médico que me cura, me hace sufrir
porque establece distinto método, no obstante mi poca salud,
seguiré mi marcha a la capital donde esperaré sus órdenes.
[5296]
Pedro Hinojosa.
102
Para Efectos de la Guerra
103
Leticia Martínez Cárdenas
104
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
105
Leticia Martínez Cárdenas
106
Para Efectos de la Guerra
107
Leticia Martínez Cárdenas
108
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
109
Leticia Martínez Cárdenas
110
Para Efectos de la Guerra
José Rivera.
111
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
112
Para Efectos de la Guerra
113
Leticia Martínez Cárdenas
114
Para Efectos de la Guerra
115
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
116
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
117
Leticia Martínez Cárdenas
118
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
119
Leticia Martínez Cárdenas
120
Para Efectos de la Guerra
121
Leticia Martínez Cárdenas
122
Para Efectos de la Guerra
123
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
124
Para Efectos de la Guerra
125
Leticia Martínez Cárdenas
126
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
Pedro Hinojosa
México
Monterrey, Nuevo León mayo ocho de 1862
Muy querido amigo:
Correspondo a su apreciable fecha 21 del último abril, dándole
las mas cumplidas gracias por las ordenes libradas para la apre-
hensión de Eugenio García, aunque como usted, temo que se le
siga protegiendo, no obstante las quejas que el personaje a que
usted se refiere, tiene contra él.
La segunda remesa de cápsulas llegó sin novedad, aunque
faltando algunos, lo que atribuyo a descuido. Le recomiendo el
pronto envío de otra cantidad, advirtiéndole que me es imposi-
ble hacer arreglo alguno en esta para su conducción, por falta
de arrieros.
Muy importante será el servicio que se preste a la frontera,
con la zona libre hasta esta ciudad, y jamás se borrará de sus
hijos la memoria de los hombres que comprendiendo los inter-
eses de estos pueblos y de la nación, supieron darles impulso.
Se ha insistido en la remisión de fuerzas, y ayer, luego que
recibí el extraordinario que trajo la noticia de lo ocurrido en
Acultzingo, libré ordenes apremiantes para que en el acto se
pongan en marcha un regimiento de Tamaulipas al mando de
Capistran, que está en Matamoros y otro de Nuevo León y
Coahuila, que se encuentra en Tula, a las órdenes de Campos.
127
Leticia Martínez Cárdenas
128
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
Pedro Hinojosa.
129
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
130
Para Efectos de la Guerra
131
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
132
Para Efectos de la Guerra
133
Leticia Martínez Cárdenas
134
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
135
Leticia Martínez Cárdenas
136
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
Pedro Hinojosa.
137
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
Hinojosa.
138
Para Efectos de la Guerra
139
Leticia Martínez Cárdenas
140
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
141
Leticia Martínez Cárdenas
142
Para Efectos de la Guerra
143
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
144
Para Efectos de la Guerra
145
Leticia Martínez Cárdenas
146
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
147
Leticia Martínez Cárdenas
148
Para Efectos de la Guerra
149
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
150
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
151
Leticia Martínez Cárdenas
152
Para Efectos de la Guerra
153
Leticia Martínez Cárdenas
154
Para Efectos de la Guerra
155
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
156
Para Efectos de la Guerra
157
Leticia Martínez Cárdenas
158
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
159
Leticia Martínez Cárdenas
Brigada Hinojosa
General en Jefe
Correspondencia particular del gobernador del estado de Du-
rango.
Señor general don Pedro Hinojosa
Viezca, Coahuila
Durango, Durango noviembre 16 de 1863
Mi querido amigo y compañero:
160
Para Efectos de la Guerra
Hinojosa.
161
Leticia Martínez Cárdenas
Brigada Hinojosa
General en Jefe
Gobierno Constitucional. Estado de Durango.
El ciudadano gobernador de ese Estado, ha participado a este
gobierno, que al mando de una fuerza viene usted a reducir al
orden a los rebeldes de Matamoros, con instrucciones para
pasar la línea divisoria de ambos estados, si fuere necesario,
para perseguir a dichos rebeldes, poniéndose de acuerdo con
este gobierno.
No creo que sea necesario llegar al extremo de pasar al terri-
torio de este Estado, porque la fuerza situada en la frontera,
está destinada precisamente a impedir el paso de los rebeldes, y
ya con anterioridad, se han dado las órdenes necesarias para
que una vez aprehendidos por las autoridades respectivas, sean
puestos a disposición de usted.
Disfruto la honra de ponerlo en conocimiento de usted,
protestándole las seguridades de mi aprecio.
Libertad y Reforma. Durango, noviembre 16 de 1863. José
María Patoni. Cayetano Mascareñas. Ciudadano General
Pedro Hinojosa. Villa de Viezca.
Es copia. Viezca, Coahuila noviembre 21 de 1863. [5351]
Hinojosa.
162
Para Efectos de la Guerra
Felipe Nájera.
Hinojosa.
163
Leticia Martínez Cárdenas
164
Para Efectos de la Guerra
165
Leticia Martínez Cárdenas
L. Ortigosa.
Hinojosa.
166
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
(Muy reservada)
Señor don Santiago Vidaurri
Monterrey, Nuevo León
Viezca, Coahuila noviembre 28 de 1863
Mi querido amigo:
He leído con toda atención su apreciable de 25 del actual y uní-
sonos en ideas, juzgo como usted, que la venida del Gobierno
General a este Estado es un mal grave es un mal grave que
debemos evitar a todo trance. Sí a todo trance; porque Juá-
rez con su carácter de terco, desorganizador e inmoral, nos
traería el desorden, la confusión, el descontento y la anarquía
que reinan en donde él está.
167
Leticia Martínez Cárdenas
168
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
169
Leticia Martínez Cárdenas
170
Para Efectos de la Guerra
Hinojosa.
171
Leticia Martínez Cárdenas
172
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
Hinojosa.
Hinojosa.
173
Leticia Martínez Cárdenas
174
Para Efectos de la Guerra
175
Leticia Martínez Cárdenas
Mi fino amigo:
Pedro Hinojosa.
176
Para Efectos de la Guerra
Mi querido amigo:
177
Leticia Martínez Cárdenas
Brigada Hinojosa
General en Jefe
Juzgado de Paz, suplente de Santa Rosa, Coahuila
Pasa el ciudadano Jacinto Herrera, con un pliego para poner en
manos del comandante en jefe de la fuerza de Nuevo León que
viene sobre el rancho de Matamoros, en el que se le manifiesta
no pase la línea del estado de Durango, por lo que se reco-
mienda a las fuerzas beligerantes, no se le ponga embarazo
alguno al citado Herrera, tanto en ida como en su vuelta.
Dios y Libertad, Santa Rosa, Coahuila noviembre 15 de
1863.
Antonio García.
178
Para Efectos de la Guerra
179
Leticia Martínez Cárdenas
180
Para Efectos de la Guerra
Hinojosa.
181
Leticia Martínez Cárdenas
Jesús G. Herrera.
182
Para Efectos de la Guerra
183
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
184
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa
185
Leticia Martínez Cárdenas
Brigada Hinojosa
General en Jefe
Pedro Hinojosa.
186
Para Efectos de la Guerra
187
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
Hinojosa.
188
Para Efectos de la Guerra
189
Leticia Martínez Cárdenas
190
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
Mi querido amigo:
Quedo impuesto de cuanto me dice en su apreciable fecha cin-
co del actual, y me alegro mucho de la buena inteligencia en
que están usted y el señor Patoni.
Oportunamente le mandaré las instrucciones que deban ser-
virle de base cuando se llegue la ocasión de que hable con él
sobre los puntos principales de arreglo que nos convenga. En-
tre tanto obre usted según las que tiene.
Los doscientos hombres de caballería es imposible que va-
yan a incorporársele porque la caballada se encuentra en un
estado tan fatal, que si se pusieran en marcha no llegaría una
cuarta parte.
La falta absoluta de armas hace también imposible el man-
darle infantería, así es que ya de acuerdo con el señor Patoni y
auxiliado por la fuerza que traiga; o bien usted solo, según pul-
sare a los revoltosos, procure darles un golpe decisivo para
acabar de una vez con ellos.
Se le remiten tres tercios de jorongos y cuatro mil pesos. Ha
habido en estos días mucha escasez de recursos y ha sido nece-
sario empeñar el crédito del gobierno para sacar del comercio
191
Leticia Martínez Cárdenas
unos dieciséis mil pesos, de los cuales se han tomado los cuatro
mil pesos para usted y el resto se ha invertido en las demás
atenciones de la administración.
Supongo a usted bien informado de lo que dicen desde Du-
rango al señor Zuloaga; más si no fuera así le acompaño un
ejemplar. Yo no creo lo que se asegura, pero es bueno estar
sobre vigilancia.
Le acompaño una carta que vino de San Luis Potosí.
Su afectísimo amigo seguro servidor quien su mano besa.
[5372]
192
Para Efectos de la Guerra
193
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
194
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
195
Leticia Martínez Cárdenas
196
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
197
Leticia Martínez Cárdenas
Mi querido amigo:
Contesto a sus dos apreciables de fecha 12 del actual.
Felicito a usted cordialmente por el feliz éxito del brusco
ataque que emprendieron los rebeldes contra la fuerza de su
mando. Ninguna otra cosa era de esperarse de los buenos co-
nocimientos y disposiciones acertadas de usted que se ha
probado en ocasiones más difíciles.
Estoy muy contento de usted y de todos los jefes, oficiales y
soldados que han sabido sostener el buen nombre del Estado,
batiéndose con decisión en un reñido combate; causándome
grande pena el que tengamos que lamentar la muerte de Rodrí-
guez y el soldado; y la desgracia de los demás que salieron
heridos.
Le acompaño el despacho de subteniente de artillería para
Agustín Martínez; y respecto de Julio Goribar, ya se dio orden
para que marche a incorporársele.
Ya he dispuesto que se socorra en el Saltillo a la señora doña
María Sánchez y que de pronto se le den los cien pesos de que
me habla.
Creo que en lo de adelante ya no se atreverán los rebeldes a
atacarlo otra vez formalmente, porque la lección que han reci-
bido es bien dura.
Es bueno que mande copias certificadas de los documentos
que se encontraron en poder del enemigo, mientras se pueden
remitir con toda seguridad los originales, que importa mucho
no se extravíen.
Sin más por ahora, me repito de usted afectísimo seguro
servidor quien su mano besa. [5377]
198
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
199
Leticia Martínez Cárdenas
200
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
201
Leticia Martínez Cárdenas
202
Para Efectos de la Guerra
203
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
Hinojosa.
204
Para Efectos de la Guerra
205
Leticia Martínez Cárdenas
Urbano Sánchez.
Mi querido amigo:
Han llegado a esta capital, Menchaca y algunos otros diputados
al Congreso de la Unión, procedentes de San Luis Potosí y
todos ellos dicen que aquello es una Babilonia.
Importa mucho que recoja usted los documentos de que le
hablé en mi anterior, para averiguar la culpabilidad de Patoni,
en los excesos de los rancheros de Matamoros, a fin de poner
término cuanto antes a ese negocio.
Menchaca está en el convencimiento de que usted es el
hombre que conviene se ponga al frente de los negocios de
Tamaulipas, en las actuales circunstancias, pero cree que es
indispensable descartarse de algunos malos ciudadanos como
Cortinas; así pues, es necesario acabar lo más pronto posible la
campaña del rancho de Matamoros. Para ello me prometo
mandarle muy pronto un considerable refuerzo de gente, y esto
será al hacerme del armamento que le he dicho ya tengo muy
fundadas esperanzas de conseguir con el señor Serna.
206
Para Efectos de la Guerra
207
Leticia Martínez Cárdenas
208
Para Efectos de la Guerra
209
Leticia Martínez Cárdenas
210
Para Efectos de la Guerra
Felipe Nájera.
Respuesta
Señor teniente coronel don Felipe Nájera
Los Hornos, diciembre 23 de 1863
Avilés.
El 27 en la noche estaré en el punto que usted me indica. Todo
quedará concluido muy pronto y libraremos a éste y ese Estado
de los desastres que se les esperan si no perdemos el tiempo.
Respecto del peligro que corre usted con su fuerza, no deja de
ser grave si hay descuido; pero no habién dolo, si se atreven a
atacarlo como lo han dicho, el campo quedará por usted, pues
no son muy aguantadores en la pelea.
Yo creo como usted que será de utilidad nuestra entrevista y
ojalá y esto hubiera sucedido más antes, ya todo habría con-
cluido.
Su amigo y compañero.
Pedro Hinojosa.
Hinojosa.
211
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
212
Para Efectos de la Guerra
Mi querido amigo:
213
Leticia Martínez Cárdenas
214
Para Efectos de la Guerra
215
Leticia Martínez Cárdenas
216
Para Efectos de la Guerra
217
Leticia Martínez Cárdenas
218
Para Efectos de la Guerra
219
Leticia Martínez Cárdenas
Señor, suplico a usted que cuanto pueda influir por tanto in-
feliz de Matamoros, después de una guerra sangrienta de tanto
tiempo, el gobernador de Coahuila, vendió esos terrenos a di-
cho vecindario; ha luchado con los gobiernos hacer miles de
sacrificios con posesión de personas para que anden nuestros
negocios y jamás hemos podido encontrar justicia.
Usted tomará las medidas para un negocio tan interesante,
señor, en fin, si no tenemos justicia díganos, para ver en donde
nos hacen favor de darnos licencia de alojarnos.
Sin otro asunto, queda de usted su afectísimo y seguro ser-
vidor quien besa su mano. [5392]
Jesús G. Herrera.
220
Para Efectos de la Guerra
221
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
222
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
223
Leticia Martínez Cárdenas
224
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
225
Leticia Martínez Cárdenas
Pedro Hinojosa.
J. Suárez Navarro.
C. General de Brigada Pedro Hinojosa.
Buenavista o donde se halle camino de Parras.
Es copia: Buenavista, febrero cuatro de 1864. [5397]
226
Para Efectos de la Guerra
227
Leticia Martínez Cárdenas
228
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
229
Leticia Martínez Cárdenas
230
Para Efectos de la Guerra
231
Leticia Martínez Cárdenas
232
Para Efectos de la Guerra
Pedro Hinojosa.
233
Leticia Martínez Cárdenas
234
Para Efectos de la Guerra
235
Leticia Martínez Cárdenas
236
Para Efectos de la Guerra
237
Para Efectos de la Guerra
En configurar página:
Márgenes: Superior 2, inferior 1.7, interior 2, exte-
rior 1.5, encuadernado 0, encabezado 1, pié de página 1
Tamaño de papel: personal ancho 13.94, alto
21.59 Vertical
Diseño de página: pares e impares diferentes
Arroba: Alt+64 @
239
Índice Onomástico
239
Índice Onomástico
Casanova 5235
Castaño, Francisco 5247, 5395
Castillo, Onofre 5364
Castro, José María 5260, 5261
Cepeda, Luis 5396
Cerda, Julián 5405
Cisneros, Juan Ignacio 5381
Cobos, José María 5342
Comonfort, Ignacio 5239, 5299, 5316, 5317, 5319, 5323,
5327, 5328, 5334, 5348
Contreras Medellín 5248
Coronado, Esteban 5287
Cortina, Juan Nepomuceno 5342, 5375, 5383, 5395, 5405
Cruz Borrego, Juan de la 5365
Cruz, Valentín 5236
Cuevas, Rafael 5361
Chaires, Hermenegildo 5365
Charles, Crisóstomo 5336
D. y Cosío, José María 5235
Dávila, Desiderio 5336
Degollado, Santos 5245, 5252, 5356, 5265, 5269, 5271,
5274, 5278, 5283, 14094
Díaz de la Vega, Rómulo 5272
Doblado, Manuel 5256, 5302, 5308, 5315, 5318, 5320,
5328, 5331, 5333, 5371, 5396, 5398,
5400, 5401, 5402, 5403
Durán 5245, 5246, 5247
Echegaray, Santos 5244, 5252
Espino Barros, Joaquín 5384
Espinosa, Albino 5349
Espinosa, Eduardo 5365
Farías y Hermanos 5336, 5405
Faulac 5347, 5348
Felipe 5343
Fernández García –jefe del 5332, 5348
Distrito del Norte-
Fierro, Juan 5267, 5346, 5348, 5365, 5400
Flores, Juan Francisco 5357, 5390
Flores, Juan N. 5343, 5344, 5358
240
Índice Onomástico
241
Índice Onomástico
242
Índice Onomástico
244
Índice Onomástico
245
BIBLIOGRAFÍA
253
Martínez Cárdenas, Leticia. Entre la laguna y Monterrey. Corres-pondencia
de Santiago Vidaurri con Leonardo Zuloaga. Monterrey. AGENL. 1999.
138p.
254
Vidaurri, Santiago. Manifiesto que Nuevo León y Coahuila dirigen a sus
comitentes. Ed. Gobierno de Nuevo León, Monterrey, 1860, 22 pp.
255
Para Efectos de la Guerra. Correspondencia
Santiago Vidaurri – Pedro Hinojosa 1855–1864,
se terminó de imprimir en los talleres de Grafo
Print Editores con tiraje de 500 ejemplares.
Formatación / Perla Verónica Aguilar Aguilar.
Cuidado de la edición / César Estrada Arroyo.
GOBIERNO DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN
SECRETARÍA GENERAL DE GOBIERNO
SUBSECRETARÍA DE ATENCIÓN AL CIUDADANO
ARCHIVO GENERAL DEL ESTADO