El ámbito educativo está en continua transformación, prueba de ello es que la manera en como
nuestros padres aprendieron, es diferente a la nuestra. Actualmente se ha buscado que la
educación se centre en el aprendizaje, y que éste a su vez favorezca la formación integral en los
alumnos, en pro de la construcción de una mejor sociedad.
Lo que se pretende es que lo que los discentes aprenden tenga trascendencia, es decir sea
tan importante que impacte en acciones que favorezcan a su entorno. Para ello es necesario
propiciar el aprendizaje situacional, el cual es resultado de la realización de diversas actividades
verdaderas, bajo la guía de un experto y que está influenciado por el contexto en que se
desenvuelve (MARTÍNEZ STACK, 2000). De ahí que el aprendizaje se caracteriza por la manera en
qué ha sido obtenido y el entorno que le ha influenciado, por lo que los aprendizajes pueden ser
muy diversos.
Para que se pueda dar este aprendizaje el docente debe reconocer que lo más importante
es no sólo trabajar con lo que sabe un alumno, sino aprovechar lo que el alumno sabe hacer con lo
que sabe (LÓPEZ CARRASCO, 2008).En esta línea lo importante no es acumular conocimientos si
no ponerlos en práctica y con ello coadyuvar a su desenvolvimiento futuro en la sociedad.
Para lograrlo es necesario que los pupilos puedan adaptarse a diversos entornos, a actuar
en ellos, resolviendo problemas que favorezcan en su desempeño, es decir, poner en juego sus
competencias. En donde lo importante es aplicar lo que se conoce para enfrentar alguna realidad
a la que el alumno estará expuesto en cualquier momento de su vida, es de ahí que las
competencias son la capacidad de actuar de manera eficaz en un tipo definido de situación,
capacidad que se apoya en conocimientos, pero que no se reduce a ellos (PERRENOUD, 2002).
Por tanto que, para poder desarrollar las competencias es necesario que los ambiente
donde se aprende se enfoquen en un aprendizaje situado, ya que sin las primeras difícilmente el
discente podrá adaptar lo que conoce a las problemáticas, o diversas situaciones que enfrente día
a día.
Así que además de centrarse en el contexto de los discentes, las nuevas tecnologías
pueden reforzar la contribución de los trabajos pedagógicos y didácticos contemporáneos, puesto
que permiten crear situaciones de aprendizaje… con la ayuda de una división del trabajo
(PHILIPPE, 2004).
UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA DE PUEBLA
Como conclusión el aprendizaje concebido desde todas estas posturas debe ser para la
acción concreta y transformadora, tiene una repercusión social y ayuda a la creación de un
pensamiento complejo en donde lo fundamental es el crecimiento personal.
Trabajos citados
HERNÁNDEZ ALEJANDRO, L. R. (s.f.). DIALNET. UNIVERSIDAD DE LA RIOJA. Recuperado el 17 de
ENERO de 2010, de UNIVERSIDAD DE LA RIOJA:
http://dialnet.unirioja.es/servlet/extart?codigo=2232506