0 penilaian0% menganggap dokumen ini bermanfaat (0 suara)
592 tayangan15 halaman
“El vínculo de la familia es el más estrecho, el más tierno y sagrado de la tierra. Estaba destinado a ser una bendición para la humanidad. Y lo es siempre que el pacto matrimonial sea sellado con inteligencia, en el temor de Dios, y con la debida consideración de sus responsabilidades” (El Ministerio de Curación, pág. 275).
“El vínculo de la familia es el más estrecho, el más tierno y sagrado de la tierra. Estaba destinado a ser una bendición para la humanidad. Y lo es siempre que el pacto matrimonial sea sellado con inteligencia, en el temor de Dios, y con la debida consideración de sus responsabilidades” (El Ministerio de Curación, pág. 275).
“El vínculo de la familia es el más estrecho, el más tierno y sagrado de la tierra. Estaba destinado a ser una bendición para la humanidad. Y lo es siempre que el pacto matrimonial sea sellado con inteligencia, en el temor de Dios, y con la debida consideración de sus responsabilidades” (El Ministerio de Curación, pág. 275).
hambre en la tierra. Y un varn de Beln de Jud fue a morar en los campos de Moab, l y su mujer, y dos hijos suyos. Su nombre era Elimelec, el de su mujer, Noem; y de sus hijos eran Mahln y Quelin. Llegaron, a los campos de Moab, y se quedaron all Entonces se levant con sus nueras, y regres de los campos de Moab; porque oy en el campo de Moab que Jehov haba visitado a su pueblo para darles pan. El pueblo de Dios no quedar libre de padecimientos y aunque sufra privaciones y falta de alimento, no ser abandonado para perecer. El Dios que cuid de Elas no abandonar a ninguno de sus abnegados hijos., El cuidar de ellos y los atender en tiempos de hambruna. Mientras los malvados estn murindose de hambre y pestilencia, los ngeles protegern a los justos y suplirn sus necesidades. Escrito est del que camina en justicia que se le dar su pan, y sus aguas sern seguras.
Rut 1:1, 2, 6; Reflejemos a Jess, pg. 364
Noem dijo a sus dos nueras: Andad, volveos
cada una a la casa de su madre; Jehov haga con vosotras misericordia, como la habis hecho con los muertos y conmigo. Os conceda Jehov que hallis descanso, cada una en casa de su marido. Luego las bes, y ellas alzaron su voz y lloraron. Vi que en la providencia de Dios las viudas y los hurfanos, los ciegos, los sordos, los cojos y los afligidos en una diversidad de formas, han sido colocados en estrecha relacin cristiana con su iglesia, para probar a su pueblo y desarrollar su verdadero carcter. Los ngeles de Dios estn observando para ver cmo tratamos a estas personas que necesitan nuestro apoyo, amor y benevolencia desinteresada. As es como Dios prueba nuestro carcter. Si profesamos la verdadera religin de la Biblia, sentiremos que tenemos con Cristo una deuda de amor, bondad e inters en favor de sus hermanos; y no podemos menos que evidenciar nuestra gratitud, teniendo un profundo inters y un amor desinteresado por aquellos que son nuestros hermanos.
Rut 1:8, 9; Testimonios para la Iglesia, tomo 3, pg. 561
Le dijeron: Nosotras iremos contigo a tu
pueblo. Noem respondi: Volveos, hijas mas; para qu habis de ir conmigo? Tengo yo ms hijos en el vientre, que puedan ser vuestros maridos? Volveos, e idos; porque yo ya soy vieja para tener marido. Y aunque hubiese esperanza, y esta noche estuviese con marido, y diese a luz hijos, habais vosotras de esperarlos hasta que fuesen grandes? Habais de quedaros sin casar por amor a ellos? No, hijas mas; mayor amargura tengo yo que vosotras, pues la mano de Jehov ha salido contra m. Ellas alzaron otra vez su voz y lloraron; y Orfa bes a su suegra. Cada miembro de la familia debe comprender que sobre l individualmente recae la responsabilidad de hacer su parte y contribuir a la comodidad, el orden y regularidad de la familia. No debe actuar un miembro contra otro. Todos deben participar unidos en la buena obra de alentarse unos a otros; deben manifestar amabilidad, tolerancia y paciencia; hablar en tono bajo y sereno; rehuir de la confusin y hacer cada uno todo lo que pueda para aliviar las cargas de la madre.
Rut 1:10-14, primera parte; El Hogar Cristiano, pg. 158
Rut se qued con ella. Y Noem dijo: He aqu tu
cuada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses; vulvete t tras ella. respondi Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque a dondequiera que t fueres, ir yo, y dondequiera que vivieres, vivir. En la antigedad, Abrahn, Isaac, Jacob y Moiss, con su humildad y sabidura, y Josu con sus diversos dones, fueron todos empleados en el servicio de Dios. La msica de Mara, el valor y la piedad de Dbora, el afecto filial de Rut, la obediencia y fidelidad de Samuel, la firme fidelidad de Elas, la suavizadora y subyugadora influencia de Eliseo, todas estas cualidades se necesitaron. As tambin ahora, todos aquellos a quienes Dios ha prodigado sus bendiciones, han de responder con un servicio verdadero; ha de emplearse cada don para el adelanto de su reino y la gloria de su nombre.
Rut 1:14, ltima parte-16, primera parte; Palabras de Vida del Gran Maestro, pg. 242
Respondi Rut: No me ruegues que te deje, y
me aparte de ti; porque a dondequiera que t fueres, ir yo, y dondequiera que vivieres, vivir. Tu pueblo ser mi pueblo, y tu Dios mi Dios. Donde t murieres, morir yo, y all ser sepultada; as me haga Jehov, y aun me aada, que slo la muerte har separacin entre nosotras dos. Y viendo Noem que estaba tan resuelta a ir con ella, no dijo ms As volvi Noem, y Rut la moabita su nuera con ella; volvi de los campos de Moab, y llegaron a Beln al comienzo de la siega de la cebada. Todos los que, como Rahab la cananea, y Rut la moabita, se volvieran de la idolatra al culto del verdadero Dios, haban de unirse con el pueblo escogido. Yo era pecador dir uno; sin Dios y sin esperanza en el mundo; t te acercaste a m y me diste a conocer el precioso Salvador como mi nica esperanza. Otros dirn: Yo era un pagano que viva en un pas pagano tambin. Y t dejaste a tus amigos y tu cmodo hogar para ir a ensearme cmo descubrir a Jess y creer en l como el nico Dios verdadero. Rut 1:16-18, 22; Palabras de Vida del Gran Maestro, pg. 232, Maranata: El Seor Viene, pg. 312
Rut dijo a Noem: Te ruego que me dejes ir al
campo, y recoger espigas en pos de aquel a cuyos ojos hallare gracia. Y ella le respondi: Ve, hija ma. Fue, y llegando, espig en el campo en pos de los segadores; aquella parte del campo era de Booz, el cual era de la familia de Elimelec Booz, le dijo: He sabido todo lo que has hecho con tu suegra despus de la muerte de tu marido, y que dejando a tu padre y a tu madre y la tierra donde naciste, has venido a un pueblo que no conociste antes. Jehov recompense tu obra, y tu remuneracin sea cumplida de parte de Jehov Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte. Un buen carcter es un capital de ms valor que el oro o la plata. No lo afectan los pnicos ni los fracasos, y en aquel da en que sern barridas las posesiones terrenales, os producir ricos dividendos. La integridad, la firmeza y la perseverancia, son cualidades que todos deben procurar cultivar con fervor; porque invisten a su poseedor con un poder irresistible, un poder que le har fuerte para hacer el bien, para resistir el mal y para soportar la adversidad.
Rut 2:2, 3, 11, 12; Conduccin del Nio, pg. 147, Testimonios para la Iglesia, tomo 5, pg. 572
Y ella dijo: Seor mo, halle yo gracia delante de
tus ojos; porque me has consolado, y porque has hablado al corazn de tu sierva, aunque no soy ni como una de tus criadas Espig, pues, en el campo hasta la noche, y desgran lo que haba recogido, y fue como un efa de cebada. Salmn engendr de Rahab a Booz, Booz engendr de Rut a Obed, y Obed a Isa. Isa engendr al rey David. Debemos apropiarnos de las promesas de Dios por medio de la fe, y aprovechar las abundantes bendiciones que Cristo Jess ha obtenido para nosotros. Delante de nosotros ha sido colocada una esperanza, la esperanza de la vida eterna. Nuestro Redentor no quedar satisfecho con darnos nada menos que esta bendicin; pero es deber nuestro asirnos de esta esperanza por medio de la fe en Cristo. nicamente los que participen con l de sus sufrimientos, tambin participarn con l de su gloria. l ha comprado el perdn y la inmortalidad para las almas pecadoras de los hombres que perecen; pero a nosotros nos corresponde recibir estos dones por medio de la fe.
Rut 4:11-13, 17, Mateo 1:5, 6 primera parte; Exaltad a Jess, pg. 325