Anda di halaman 1dari 4

UNIVERSIDAD NACIONAL DE

CHIMBORAZO

ESCUELA: CIENCIAS
EXSACTAS

TEMA: SERPIENTES

TRABAJO: INFORMATICA

NOMBRE: CARLOS ONCE

AÑO: 2009-2010

PARALELO: 1A
LAS SERPIENTES
Las serpientes (Serpentes) u ofidios (Ophidia) son un suborden
de saurópsidos (reptiles) diápsidos pertenecientes al orden
Squamata, superorden de los Lepidosaurios, caracterizado por la
ausencia de patas y el cuerpo muy alargado. Se originaron en el
período Cretácico.
Las serpientes se caracterizan por la ausencia de extremidades y
cuerpo alargado. Algunas poseen mordeduras vnenosas que utilizan
para matar a sus presas antes de ingerirlas. Otras serpientes matan a
sus presas por constricción, por ejemplo estrangulación.
Se reconocen 456 géneros y más de 2.900 especies.[1] [2]
Evidentemente, las serpientes derivan de algún tipo de lagarto, pero
los detalles concretos de su origen no están claros.[3]

Características

Anatomía de una serpiente.


1 esófago, 2 tráquea, 3 pulmones traqueales, 4 pulmón izquierdo
rudimentario, 5 pulmón derecho, 6 corazón, 7 hígado, 8 estómago, 9
saco de aire, 10 vesícula biliar, 11 páncreas, 12 bazo, 13 intestino,
14 testículos, 15 riñones.
Piel
La piel de la serpiente está recubierta por escamas. La mayoría de las
serpientes utilizan escamas especializadas de la parte ventral para
desplazarse, aferrándose con ellas a las superficies. Sus párpados se
encuentran permanentemente cerrados, pero son en realidad
escamas transparentes. Las serpientes cambian de piel
periódicamente. A diferencia de otros reptiles, el cambio de piel es
realizado en una pieza, como si tirara de una media. Esto se hace a
medida que el animal crece y además para reparar heridas y librarse
de parásitos externos. La renovación periódica ha convertido a la
serpiente en un símbolo de salud y medicina, como se muestra en la
vara de Asclepio (ver Asclepio).
Locomoción
La locomoción se realiza mediante ondulaciones laterales del cuerpo;
las escamas ventrales ensanchadas de muchas serpientes impiden el
deslizamiento. Algunas serpientes, como ciertas boas y las víboras
pueden desplazarse también mediante movimientos musculares de
las escamas ventrales con su cuerpo extendido casi en línea recta.
Esqueleto
El esqueleto tiene muchas vértebras, 200 en las víboras y 400 en las
pitones.
El cráneo está muy modificado respecto al modelo básico diópsido.
Los huesos de la mandíbula superior están débilmente unidos al resto
del cráneo y el cuadrado puede moverse libremente y posee potentes
músculos refractores, lo que permite una enorme abertura de las
mandíbulas y la deglución de grandes presas enteras. Los dientes son
agudos y curvados hacia atrás y se implantan tanto en el paladar
como en el maxilar y el dentario.
Las boas y las pitones poseen rudimentos de las extremidades
posteriores y de sus cinturas; en estas serpientes pueden verse unas
garras en la parte externa y a cada lado de la cloaca que desempeñan
un cierto papel en el coito.
Dentición
Existen varios tipos de dientes, según el hueso sobre el que se
implanten: maxilares, pterigoideos, palatinos, dentarios y
premaxilares. Los dientes maxilares son los más variados y los únicos
que pueden estar asociados a glándulas venenosas; se pueden
distinguir cuatro tipos principales:
• Aglifos.
Son dientes macizos, prensiles, curvados hacia atrás para sujetar la
presa y no están diseñados para inocular veneno. Es el caso de
muchos colúbridos, bóidos y pitónidos. En general son serpientes
inofensivas para el hombre, con excepción de las grandes
constrictoras (pitones, anacondas).
• Opistoglifos.
Son dientes acanalados situados en la parte posterior de la mandíbula
y conectados con glándulas de veneno, constituyendo un sistema de
inoculación primitivo. Dado que para inyectar el veneno debe morder
con la parte posterior de la boca, normalmente son poco peligrosas
para el hombre. Este es el caso de la culebra bastarda (Malpolon
monspessulanus). No obstante, las especies de gran tamaño pueden
producir graves mordeduras e incluso la muerte, como Dispholidus
typus, del África subsahariana.
• Proteroglifos.
Son dientes pequeños y fijos situados en la parte delantera de la
boca, con un canal más o menos cerrado. Las cobras y las mambas
poseen estos dientes. Algunas especies, como la cobra escupidora
(Naja nigricollis), los tienen modificados para escupir el veneno a más
de cuatro metros de distancia.[4]
• Solenoglifos.
Se trata de dos largos colmillos móviles en parte anterior de la
mandíbula; son huecos con un canal interior cerrado y conectado con
glándulas venenosas. Los colmillos se pliegan sobre el paladar
superior cuando el animal cierra la boca y se enderezan rápidamente
cuando la abre. Es el sistema de inoculación más eficaz. Este tipo de
dentición es característico de los vipéridos.

Anda mungkin juga menyukai