Habiendo hablado as, puso en sus manos la hija amada, que aqul recibi
con alegra. Acto continuo, ordenaron la sagrada hecatombe en torno del
bien construido altar, lavronse las manos y tomaron la mola. Y Crises or
en alta voz y con las manos levantadas:
Padre Zeus! Si alguna vez te fui til entre los inmortales con palabras a
obras, cmpleme este voto: Honra a mi hijo, el hroe de ms breve vida,
pues el rey de hombres, Agamenn, lo ha ultrajado, arrebatndole la
recompensa que todava retiene. Vngalo t, prvido Zeus Olmpico,
concediendo la victoria a los troyanos hasta que los aqueos den satisfaccin
a mi hijo y lo colmen de honores.
As dijo. Zeus, que amontona las nubes, nada contest guardando silencio
un buen rato. Pero Tetis, que segua como cuando abraz sus rodillas, le
suplic de nuevo: