Todos necesitamos el respeto y la estima de los dems para poder construir nuestra
autoestima. En aquella poca, yo me quejaba por no recibir una sincera aceptacin por parte
de mis padres, por no ser el compaero elegido de mis amigos, por no poder lograr el
reconocimiento en mi trabajo.
Hay una vieja historia dijo el gordo mientras me pasaba el mate para que yo lo
preparara de un joven que acudi a un sabio en busca de ayuda. Tu problema me recuerda al
suyo.
Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo ganas de hacer nada.
Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. Cmo puedo
mejorar? Qu puedo hacer para que me valoren ms?
El joven tom el anillo y parti. Apenas lleg al mercado, empez a ofrecer el anillo a
los mercaderes, que lo miraban con algo de inters hasta que el joven deca lo que peda por
l.
Cuando el muchacho mencionaba la moneda de oro, algunos rean, otros le giraban la
cara y tan slo un anciano fue lo bastante amable como para tomarse la molestia de explicarle
que una moneda de oro era demasiado valiosa como para entregarla a cambio de un anillo.
Con afn de ayudar, alguien le ofreci una moneda de plata y un recipiente de cobre, pero el
joven tena instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro y rechaz la oferta.
Despus de ofrecer la joya a todas las personas que se cruzaron con l en el mercado,
que fueron ms de cien, y abatido por su fracaso, mont en su caballo y regres.
Cunto hubiera deseado el joven tener una moneda de oro para entregrsela al
maestro y liberarlo de su preocupacin, para poder recibir al fin su consejo y ayuda.
Entr en la habitacin.
Eso que has dicho es muy importante, joven amigo contest sonriente el
maestro. Debemos conocer primero el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar tu caballo
y ve a ver al joyero. Quin mejor que l puede saberlo? Dile que desearas vender el anillo y
pregntale cunto te da por l. Pero no importa lo que te ofrezca: no se lo vendas. Vuelve aqu
con mi anillo.
El joyero examin el anillo a la luz del candil, lo mir con su lupa, lo pes y luego le dijo
al chico:
Sintate dijo el maestro despus de escucharlo. T eres como ese anillo: una
joya, valiosa y nica. Y como tal, slo puede evaluarte un verdadero experto. Por qu te vas
por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?
Jorge Bucay
Djame que te cuente
Barcelona, RBA Libros, 2006