Anda di halaman 1dari 335
L. Alonso Schékel LA PALABRA INSPIRADA La Biblia a la luz de la ciencia del lenguaje EDICIONES CRISTIANDAD Imprimi potest R. A. F. MacKenzie, SI, rector del Instituto Biblico Pontificio Roma 18 de octubre de 1964 © Copyright by EDICIONES CRISTIANDAD, S. L. Madrid 1986 Depésito legal: M. 29.649.—1986 ISBN: '84-7057-393-4 Printed in Spain Fotocomposicién en Grafilia, Pajaritos, 19 - Madrid Impresién: Artes Graficas Benzal, $.A. Virtudes, 7. Madrid CONTENIDO Prdlogo a la primera edicién 13 Prologo a la tercera edicién... 15 PRIMERA PARTE LA PALABRA DIVINO-HUMANA 1. El articulo de fe y su contexto 19 En el contexto del Espiritu 20 En el contexto del logos 23 Revelacién por la creacién . 28 Revelacién por la historia 35 Revelacion por la palabra 40 Palabras de hombres..... 46 2. La palabra divino-humana 49 La accién del Espiritu... 49 Inspiracion y encarnacién 49 Precisiones negativas 54 Cuatro analogias 56 Instrumento 58 Dictado .. 66 Mensajero.. 71 El autor y sus personajes 72 Dios, autor dels Escritura. 76 Conclusién... 82 Formulas proféticas 88 Sapienciales . 1 Los historidgrafo: 95. Conclusién: la inspiracién en el Nuevo Testamento 98 Apostoles y profetas 99 Unidad y distinciones . 101 aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Contenido 9 Un simple artesano 189 Un Arbol ........... 192 Un detalle de estilo y un salmo de imitacion . 195 Una narraci6n 200 Inspiracién sucesi' 201 La entonaci6n ... 202 Nuevo Testamento 203 Sintesis .. 206 8. Sociologia de la inspiracién 211 Critica 217 Lengu: 218 Literatura . 221 9. Hablar y escribir 225 El probletia 226 Soluciones... 228 Hablar y escribir 231 Técnicas de composicién 233 Composicién literaria en la Biblia 234 La palabra 237 CUARTA PARTE LA OBRA INSPIRADA 10. La obra inspirada.. 243 Los libros sagrados 243 ¢Obra literaria? . 245 Estructura miltiple 250 Pluralidad estructurada. 255 Consistencia 258 Repetibilidad 260 Fidelidad oe 261 En la Iglesia 263 11. La obra y su traduccion . 267 Principios teolégicos 267 aso _histdrico.. 269 a traduccion griega de los 271 La Vulgata 274 Traducciones modernas 277 12. Recepcién de la obra 281 La obra mediadora.... 284 aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 14 Prologo a la primera edicion He preferido el tono expositivo del ensayo, por ser mas libre y accesible, y he recluido en notas la informacién més técnica. El ensayo me permite una reflexién en términos imaginativos y simbédlicos, sin llegar muchas veces a la formula conceptual dife- renciada. Al componer este libro, he tenido mentalmente presente un publico cristiano culto, que ya se ha incorporado al movimiento biblico. Por eso el libro desearia encontrar otra vez a ese ptblico que ya ha estado presente y activo en la elaboracién. Jerusalén, Pascua de 1964. Roma, fiesta de Todos los Santos de 1964. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 1 EL ARTICULO DE FE Y SU CONTEXTO ARTICULO DE FE En la misa dominical el pueblo, dirigido por el sacerdote, se pone en pie para profesar su fe. Es un acto litargico solemne: la comunidad alzada, no en pie de guerra, sino en pie de profesion; en posicién firme, porque esta expresando una firmeza del espi- ritu; en posicién uniforme, porque expresan animos undnimes. Pero al mismo tiempo humildes, porque el acto de fe es un acto de humildad, y es un don de la gracia. En este momento littir- gico una avenida de gracia nivela, levantandolos, a todos los pre- sentes; y los nivela al nivel del sacerdote, al nivel de la vida so- brenatural. Un crecimiento sobrehumano pone en pie a la comu- nidad, porque fluye una profunda crecida de gracias. ¢Entienden todos lo que profesan? Si, al menos de modo ele- mental: porque creer es ya comprender, es abrirse y entregarse en una comprensién. ;Entienden todos lo mismo, es decir, con la misma claridad, profundidad, precisién, riqueza? No, porque estas perfecciones variables pueden acrecentarse con la medita- cidn, el estudio. La actividad intelectual, operando sobre el ob- jeto de la fe, nos hace ganar conocimiento. Aqui tenemos des- crita sumariamente la teologia como actividad: una fe que busca comprender. Ya en la liturgia podia suceder un crecimiento de entender sobre la fe profesada: la composicién del oficio litargico de una fiesta intenta iluminar el misterio celebrado, presentando y revi- viendo una armoniosa e intuitiva composicién de elementos va- rios, como lecturas del Antiguo Testamento y del Nuevo, ora- ciones, himnos, gestos, etc. Ademas, durante la ceremonia litir- gica, puede un sacerdote explicar el sentido de la fiesta y del misterio, lo cual acrecienta el entendimiento del objeto de la fe. Este crecimiento del entender, por medio de la celebracién litar- gica, es mis vital y orginico, menos consciente y sistematico. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. En el contexto del logos 23 Esta organizacién de Benoit devuelve la inspiracién de la Sa- grada Escritura a un contexto amplio, vario, «analdgico», sefia- lando conexiones, y el comin parentesco en el Espiritu. Puede citar a su favor la etimologia de la palabra «in-spiraci6n», y el uso fluctuante de escritores antiguos, que también Haman «inspi- rados» a los concilios y a algunos escritores eclesiasticos. Con todo, no creo recomendable la terminologia de Benoit. Modernamente, el uso ha consagrado y especificado el término «inspiracion»: usarlo anulando la diferenciacién admitida, facil- mente nos hard deslizar de la analogia a la ambigiiedad. Mucho més tradicional y menos peligroso es recurrir al término «ca- risma», como contexto de unificacién y de conexiones, reser- vando la «inspiracién» como término técnico. Lo cual no nos impedira distinguir dentro del proceso total de la inspiracién di- versos estadios o aspectos. En esta linea, los estudios de Benoit son un progreso en la diferenciacién especulativa del misterio. Santo Tomas nos habia ensenado a colocar la «profecia» (no estrictamente la «inspiracién») en el contexto de los carismas o gratiae gratis datae (Summa Th. q. 171-178). Por su amor al sa- bio orden de las divisiones, repartié los carismas en tres grupos: gracias de conocer, la profecia y el rapto; gracias de hablar, la glosolalia y el discurso; gracias de obrar, los milagros. Asi cae la profecia en el primer grupo, un poco contra la abundante evi- dencia biblica. La prosecucién rigida de esta division ha traido problemas innecesarios al tratado neoscolistico De Inspiratione Sacrae Scripturae. Mas tarde tendremos ocasién de volver sobre este tema. Por ahora, baste afirmar, sin entrar en «cuestiones disputadas», que la inspiracién es un carisma de lenguaje: locutus est. EN EL CONTEXTO DEL LOGOS La teoria de la revelaci6n se encuentra de nuevo en movimiento y en un centro de interés. Como sintesis histérica y exposicién sistematica puede consultarse: R. Latourelle, Teologia de la revelacién (Salamanca 1966). En su parte historica ofrece resimenes claros de las teorias y controversias mas importantes. La parte sistematica comienza con tres capitulos titulados: «La revelacién como palabra, testimonio y encuen- tro», «Revelacién y creacién», «Historia y revelacién». Se trata de una descripcién breve, sin entrar en las relaciones mutuas. Véase la amplia aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Tres vias de revelacién 27 hemos entrado en la divinidad con audacia especulativa agusti- niana. Si usamos el término «revelacién» en sentido mas estre- cho, entonces la vida interna de Dios no nos basta; necesitamos un movimiento de apertura de Dios, que se exteriorice en ac- ciones 0 palabras. ¢Sera posible este tipo de revelacién por parte de Dios? Otra vez, siguiendo la especulacién de san Agustin, apoyado a su vez en datos biblicos, podemos decir: porque den- tro de Dios hay una palabra que es expresi6n total de la divini- dad, por eso es posible una accién externa que sea reflejo parcial y multiplicado de la divinidad. Por eso dicen san Juan y san Pa- blo que todo ha sido hecho por él y en él, porque toda manifes- tacién externa de Dios radica en la interna manifestacién que es el Hijo, la Imagen, el Logos. Toda revelacién de Dios hacia fuera es reflejo de la misteriosa manifestaci6n interna de Dios. Si sabemos algo y podemos decir algo de la vida interna de Dios, es porque se ha realizado una revelacién externa de Dios, que nos permite de algiin modo entrar hasta su propia vida. TRES VIAS DE REVELACION La carta a los Hebreos se abre con un comienzo solemne y ma- cizo: «En miltiples ocasiones y de muchas maneras hablé Dios antiguamente a nuestros padres por los profetas. Ahora, en esta etapa final, nos ha hablado por un Hijo, al que nombré here- dero de todo, lo mismo que por él habia creado los mundos y las edades. El es reflejo de su gloria, impronta de su ser; él sos- tiene el universo con la palabra potente de Dios; y después de realizar la purificacién de los pecados, se senté a la derecha de su majestad en las alturas, haciéndose tanto mas poderoso vale- dor que los angeles, cuanto mas extraordinario es el titulo que ha heredado». En esta sintesis teologica sdlo nos falta una enunciaciGn ex- plicita de la revelacién por la historia —que encontramos en el capitulo 11 y que esta implicita en las formas verbales del pro- logo—. Encontramos una referencia a Cristo como resplandor de su gloria e impronta de su ser. Estas palabras se refieren es- trictamente a Cristo encarnado, pero en la encarnaci6n entra esa Participacién de la divinidad como imagen sustancial, que es propia de la vida trinitaria. Escuchamos ademas que por él fue aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Revelacion por la creacién 31 éste es el camino religioso, sinceramente religioso, de muchos pueblos. El que sea un camino emotivo, cargado de intensa emoci6n, no excluye su naturaleza intelectual, puesto que toda percepcién simbélica es intelectual, aunque pueda radicar en es- quemas subconscientes del alma. Esta percepcién simb6lica se traducird después en mitos y ea grandes imagenes poéticas, con valor cognoscitivo y expresivo ” Si entre los salmos encontramos uno tomado y adaptado del culto cananeo, quiere decir que el autor sagrado encontré en él una auténtica experiencia religiosa, formulada con suficiente co- rreccién para ser transportada al contexto yahvista. Se trata del salmo 29, que canta a Dios presente en la tormenta. Es poesia auténtica, sin rastro de raciocinio: un hecho de la naturaleza, di- namico ¢ impresionante, esta contemplado y hecho pasar por una reflexién simbélica —noormena—, en la cual el trueno se profundiza en voz de Dios. De modo semejante los poetas reli- giosos hebreos toman prestados grandes simbolos de la religion cananea, para formular alguna cualidad de Dios: por ejemplo, el tumulto oceanico, visto como una rebelién o desorden, sobre el que Dios impone victoriosamente el orden: Levantan los rios, Senor, Jevantan los rios su voz, levantan los rios su fragor; pero mas potente que la voz de aguas caudalosas, mas potente que el oleaje del mar, mas potente en el cielo es el Senor (Sal 93,3-4). No hay que pensar que las imagenes, simbolos, mitos de estas religiones orientales sean puro embuste y falsedad, y que al entrar en el uso israelitico se conviertan de repente en auténticos y santos: no es de este orden la trasmutaci6n biblica. Y mas ri- diculo seria pensar que los autores biblicos proceden por racio- cinios y silogismos, que después visten y disimulan con ima- genes, a causa de la ignorancia o incultura de los lectores. La poesia no es el arte de vestir silogismos. 7 R. Guardini, Religion y revelacién, capitulo primero, «El caricter simbélico de las cosas» y su precioso libro Los signos sagrados. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Revelacion por la historia 35 uso secular de los santos padres, nos garantizan la validez de nuestra explicacién. Si podemos partir de nuestra experiencia de lenguaje, para explicar analégicamente la actividad divina, es que realmente nuestro lenguaje imita la actividad divina. Mas ade- lante veremos cémo. En conclusién, tenemos la primera manifestacién de Dios, que genéricamente Ilamamos revelacién, por las obras de su creacién, por las criaturas. En éstas hemos encontrado ya una prefiguracién y una analogia del lenguaje formal, que sera la re- velacién en sentido estricto. REVELACION POR LA HISTORIA El tema de la revelacién por la historia es de actualidad, sobre todo en la teologia protestante. Entre las obras recientes pueden consultarse: W. Pannenberg (ed), Revelacién como historia (Salamanca 1977) y Teo- logia del Antiguo Testamento, de G. von Rad. A. Végtle, Revelacién e bistoria en el Nuevo Testamento: «Conciliums 21 (1967) 43-55. Existen en estos momentos dos obras teolégicas que, al intentar la renovaci6n de la teologia segun el espiritu del Vaticano II, parten de la base de la realidad histérica de la revelacién. Mysterinm Salutis, que es la primera de ellas, lleva por subtitulo: «Manual de Teologia como his- toria de la salvaci6n». Consta de cinco gruesos volimenes, cuyos titulos expresan bien su orientacin: I. Fundamentos de la Teologia como his- toria de la salvacion (1102 pags.). II. La historia de la salvacion antes de Cristo (933 pags.). III. El acontecimiento Cristo (1105 pags.). IV. La Iglesia (1700 pags. en 2 vols.). V. El cristiano en el tiempo y la consu- macién escatolégica (891 pigs.) Publicado por Ediciones Cristiandad, Madrid 1980-85, La segunda de las obras, Iniciacién a la practica de la Teologia, wa- ducida igualmente por Ediciones Cristiandad (1984-86), consta también de 5 vols. I. Introduccién. II. Dogmitica 1. III. Dogmitica 2. IV. Etica. V. La practica. Acciones pastorales. Preparada por los Dominicos de Paris, es la respuesta francesa a la vision alemana a la teologia. Con me- nor intenci6n critica y cientifica, resulta mas sencilla y asequible para quienes se inician en esta materia. En el comentario de la BAC a la constitucién Dei Verbum puede leerse el articulo Cardcter historico de la revelacién, cuyo indice es: La historia como escenario de la revelaci6n; como objeto; como prueba; la historia reveladora. El progreso de los esquemas. Los hechos revela- dores: la raz6n biblica. El hecho y la serie: teoria de Pannenberg. Pala- aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 40 El articulo de fe y su contexto tacién. En el cine los hechos, reales o ficticios, se transforman y subsisten en forma de imagenes organizadas, y en este estado ya reciben y transmiten su interpretacion; muy mediano es el direc- tor que tiene que ir explicando el sentido de sus imagenes, sea en voz narrativa, o haciendo discursear a sus personajes. Dios actua en la historia, crea y dirige dicha historia; y envia su pala- bra para explicar el sentido de su obra. Esta es la gran tarea del profeta, del inspirado, interpretar el sentido de la historia, con- tandola. No es que primero cuente los hechos —como una voz en off—, sino que, contando, interpreta. La seleccién y compo- sicién de los hechos es significativa, interpreta el verdadero sen- tido de los hechos, revela a Dios como protagonista. Ademas el autor sagrado se reserva el derecho de utilizar otros medios de lenguaje para interpretar hechos: discursos en boca de perso- najes, introducciones, reflexiones, etc. Por medio de la palabra de Moisés y de los profetas, va comprendiendo el pueblo de Dios la historia que esté viviendo, y esta inteligencia nos la lega en unos escritos que podriamos llamar «las memorias de Dios». Dice san Pablo (1 Cor 10,11): «A ellos les sucedian estas cosas para que aprendieran, y se escribieron para que escarmen- temos nosotros». Los hechos convertidos en palabra narrativa, recibiendo asi la interpretacién auténtica por la palabra, clevan- dose a revelacién formal. De nuevo concluimos sobre esta segunda forma de revela- cién, por la historia: ella nos ha mostrado su caracter especifico, y a la par su uni6n intima con la palabra activa e interpretativa. REVELACION POR LA PALABRA Daré una bibliografia escogida encabezando el capitulo 4. Por ahora puede tenerse en cuenta el articulo de J. R. Geiselmann Revelacton, en Conceptos fundamentales de la Teologia I (Ed. Cristiandad, Madrid 21979) 569-578, con amplia bibliografia. Para un horizonte biblico y patristico, puede verse R. Gégler, Zur Theologie des Biblischen Wortes bei Origenes (Dusseldorf 1963). J. Levie, La Biblia palabra humana y mensaje de Dios (Bilbao 1961). P. Grelot, La Biblia, palabra de Dios (Herder, Barcelona 1968). La palabra es la forma plenaria de comunicacién humana, y aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 44 El articulo de fe y su contexto Asi lo atestigua Ch. Pesch: «Toda revelacién sobrenatural, en cuanto se opone a la revelacién natural de Dios, es inmediata. En la revelacién natural, Dios crea y gobierna las criaturas, que el hombre puede usar como medios, para llegar al conocimiento analégico de Dios: es decir, Dios se manifiesta como objeto cog- noscible mediatamente. Por el contrario, en la revelacién sobre- natural, Dios manifiesta su mente, como una persona comunica sus pensamientos a otra persona: en lenguaje propiamente dicho. Esta manifestacién personal, como sujeto, es por naturaleza mas inmediata que la manifestacién como objeto, de la causa por el efecto. Y Dios nos habla inmediatamente en la Escritura, porque la Escritura es palabra de Dios formal en sentido estricto» '>. Tenemos delimitado el contexto de nuestra profesién de fe: el que Dios hable, pertenece al contexto del Logos, de la revela- cién; concretamente, formalmente, por el medio de la palabra. Dios se abre, se revela a nosotros como persona a persona, en un medio personal, o interpersonal. Es interesante notar que, en el comienzo de la carta a los Hebreos, el verbo «hablar» no lleva complemento directo, sélo enuncia las personas: «Dios hablé antiguamente a nuestros padres... ahora... nos ha hablado a nos- otros». En este contexto tenemos que seguir precisando, como lo hace muestro articulo de fe locutus est per prophetas. Dios nos habla en un lenguaje humano, por medio de hombres. Aqui el articulo de fe comienza a adensar su misterio. PALABRA HUMANA ¢Pero es que Dios puede hablarnos en palabras humanas? Si ha de hablarnos a los hombres, no puede hacerlo de otro modo. La palabra es medio de comunicaci6n interpersonal cuando la len- gua es comtinmente compartida por ambas personas: un medio comin hace a los dos vasos comunicantes. ~Puede Dios tener un lenguaje en comin con los hombres? Supongamos un misionero que intenta traducir nuestra elabo- rada teologia, o una parte de ella, a una lengua primitiva: entre la lengua culta occidental y la hipotética lengua primitiva hay un 'S De Inspiratione Sacrae Scripturae, (Friburgo 1905) n.° 411. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 48 El articulo de fe y su contexto Cerramos un circulo de inteleccién, y se nos abre otro mas alto, quiza mas dificil: geémo es esta accion del Espiritu? Que- remos penetrar de alguna manera en el modo de la inspiracién, para enriquecer nuestra inteligencia del misterio, aun sabiendo que nuestra pregunta nos enfrenta con problemas en definitiva insolubles. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 52 La palabra divino-humana «gQué significaba para Moisés y para los profetas componer la Sagrada Escritura —que es la Palabra de Dios—, sino, por medio del espiritu profético, concebir mentalmente y dar a luz oralmente a Cristo?» 7 «Toda la Escritura, ley y profetas, fue establecida, antes que Dios concentrase en el vientre de una virgen la totalidad de las Escrituras, su Palabra unica. Esta virgen concibié mentalmente antes de concebir carnalmente, dio a luz profetizando oralmente, antes de dar a luz del vientre. Por tanto es falso decir que Cristo no existié antes de Maria. Pues antes de parir a su carne, la bien- aventurada Sidn parié por boca de los profetas al mismo y tinico Cristo, al mismo y tnico Verbo» 77, Garnier, en el sermén sexto sobre la Navidad: «Antigua- mente Dios nos escribié un libro, encerrando en muchas pala- bras una sola; hoy nos abre el libro, donde en una palabra con- densa muchas... El es el libro que en vez de pergamino tiene carne, en vez de escritura tiene la Palabra del Padre... El libro maximo es el Hijo encarnado: porque, como por la escritura la palabra se une al pergamino, asi asumiendo la humanidad la Pa- labra del Padre se une a la carne» 78 Aplicando la comparacién tradicional a la inspiracién y her- menéutica, Pio XII dice en la enciclica Divino afflante Spiritu: «Como la Palabra subsistente de Dios se asemejé a los hombres Unum est Verbum Dei universitas Scripturarum... Cum igitur Scripturam Sanc- tam legimus, Verbum Dei tractamus, Filium Dei per speculum et in acnigmate prae oculis habemus» (PL 167, 1575-76). 26 «Quid fuit Moysi et prophetis sanctam Scripturam, quae Verbum Dei est, contexere, nisi Christum et corde per spiritum propheticum concipere et ore pa- rere» (PL. 167, 1157) 2” «Sic omnis Scriptura legalis et prophetica condita est antequam omnem Scripturae universitatem, omne Verbum suum Deus in utero virginis coadunaret, Ipsa virgo prius mente quam carne concepit, prius ore prophetando quam ventre parturiendo peperit. Igitur falsum est ante Mariam non extitisse Christum. Nam antequam carnem eius parturiret, peperit ore prophetarum beata Sion unum eumdemque Christum, unum idemque Verbum» (PL 167, 1362). 28 .Olim librum nobis scripsit Deus, in quo sub multis verbis unum com- prehendit; hodie librum nobis aperuit, in quo multa sub uno verbo conclusit... Ipse enim liber est, qui pro pelle carnem habuit et pro scriptura Verbum Patris... Liber maximus est Filius incarnatus, quia sicut per scripturam verbum unitur pelli, ita per assumptionem hominis Verbum Patris unitum est carni» (PL 205, 609-10). aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 56 La palabra divino-humana bajo la mocién del Espiritu, sus palabras son palabras de Dios, y toda palabra de Dios revela a Dios: 0 sea, el resultado es revela- cién para nosotros, subsiguiente. Toda la Biblia es revelacion para nosotros, porque es palabra de Dios; no toda la Biblia ha sido compuesta con previas revelaciones hechas a los autores. Esta distincién ya la elaboré agudamente santo Tomas, cuando distingue entre la recepcién o presentacién de los datos y el juicio sobre ellos (q. 173); y es actualmente doctrina comun en el tratado de la inspiracion. Me atrevo a decir que es una de las claves para entender el tratado, y por eso reaparecera en estas paginas. Aunque también encierra un peligro de simplificacién, de concebir la revelacién previa tnicamente como transmisién de enunciado ya concluido. Afiadamos otra précisién negativa a las dos del Vaticano: para que la palabra humana sea palabra divina no basta una mo- cién moral, un simple consejo 0 mandato de Dios. Esta mocién haria a Dios autor moral de la obra, y ésta quedaria en su cali- dad humana. La accién del Espiritu tiene que ser fisica, tiene que afectar al autor humano en su actividad de lenguaje. Esta moci6n fisica es carismatica, pertenece al orden sobrenatural, y es lo que Ilamamos «inspiracién» en sentido estricto. Otras precisiones negativas iran apareciendo en la seccion si- guiente que nos transportara al terreno de las analogias. CUATRO ANALOGIAS Sobre la funcién cognoscitiva del simbolo, ademas de la pagina citada de Séhngen, puede verse W. Stahlin, Symbolon. Vom gleichnishaften Denken (Stuttgart 1958). La funcién simbolica en la religion esta descrita por A. Brunner, Die Religion. Eine philosophische Untersuchung auf geschichtlicher Grundlage (Friburgo 1956; trad. castellana: La Religion, Barcelona 1963). R. Guardini dedica el capitulo II de su libro Religion y revela- Gién a las imagenes de Dios, y sefiala c6mo algunas son anteriores y aun intraducibles a conceptos (Ed. Cristiandad, Madrid 1964) 183-274. Para explicar el misterio de una palabra que es a la vez divina y humana, los tedlogos de la Iglesia, desde los primeros tiempos, han echado mano a diversas analogias. Analogias como instru- mentos de conocer, como ilustraciones positivas y validas, aun- aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 60 La palabra divino-humana Gregorio Magno (discutiendo quién es el autor del libro de Job, declara superflua la cuestién): «, hace falta distinguir. Y la distincién es bien sencilla: Dios pone el contenido, el hombre pone la forma; Dios pone las ideas, el S* De regula fidei, dissertatio 1. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 72 La palabra divino-humana He aqui otra imagen, de gran raigambre biblica. Los profetas son enviados de Dios, mensajeros, heraldos del Senor; los apés- toles son enviados y heraldos de Cristo. En una cultura sin teléfono, telégrafo ni aviones, el mensa- jero desempefia un oficio importantisimo. Si su oficio consiste simplemente en transportar y entregar cartas escritas, le basta ser buen jinete. Muchas veces el mensajero tenia que dar el mensaje en voz alta, aprendido de memoria, porque el escrito era sdlo un control: para ello le bastaba la técnica de memorizar. Pero no faltaba el mensajero de categoria, que recibia el asunto para ex- ponerlo y desarrollarlo segtin las circunstancias, Este mensajero era una especie de embajador con amplios poderes. En nuestra cultura subsisten el enviado especial, el embajador, con instruc- ciones precisas y libertad de adaptacién al momento. Son media- dores que informan sobre la voluntad del que los envia, pero no decimos que las palabras del embajador sean palabras de su pre- sidente. Los profetas se presentan como enviados de Dios, y utilizan formulas tipicas del estilo postal: «Asi dice el Sefor a N...» Ellos salvan la distancia entre Dios y el hombre con la palabra. Como se ve, esta tercera analogia anade muy poco a la pre- cedente. En el primer caso el mensajero ni siquiera necesita ha- blar. En el segundo su memoria recibe como al dictado. En el tercero ejercita una actividad inteligente y de lenguaje, y en cierto modo el que le envia habla por él. EL AUTOR Y SUS PERSONAJES En general, libros que traten del arte y ficcién narrativa, tocan de un modo u otro el tema. Una sintesis con multiples referencias en R. We- liek / A. Warren, Teoria Literaria (Madrid 1953; original americano, Nueva York 1949; pocket-book, Harcourt Brace, N.Y.). Testimonios selectos de autores en Writers on Writing, refundido y editado por Walter Allen, Nueva York 1948; capitulo 13, «Characters». Esta es una analogia que me brinda el mundo de la creacién literaria. Voy a introducirla con una cita de san Justino, fijan- dome s6lo en lo que tiene de notaci6n literaria: «Cuando escu- chais las palabras de los profetas dichas como por boca de al- aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 76 La palabra divino-humana netracién intuitiva, capaz de captar hechos minimos, de com- prender su sentido, de ensancharse por analogia. Sobre todo, in- cluyendo lo anterior, es la capacidad del artista para convivir con los personajes, para vivir en sus personajes, para encarnarse en ellos. . Ha sonado la palabra «encarnarse», y es como un salto meta- férico al revés, volviendo a un punto de partida o de referencia. Decimos que Dios se ha encarnado en un hombre, que su pala- bra se encarna en palabra humana, como el artista se encarna en sus personajes. Aqui desemboca nuestra analogia. Como las anteriores, tiene sus limites; el personaje literario no es una persona viva y real, con cuerpo y alma, derechos y deberes. Aun las mas ricas y complejas personalidades literarias, esas que llama E. M. Forster «caracteres redondos» (round Cha- racter) *°, son una estilizacion, una simplificacion. Segin W. So- merset Maugham, «el escritor no copia sus modelos, sino que toma de ellos lo que quiere: un par de rasgos que han atraido su atencién, una manera de pensar que ha encendido su imagina- cién, y con ellos construye su personaje». La existencia, la liber- tad, la responsabilidad de los personajes literarios son traslati- cias. Mientras el hombre vivo, la persona humana, existe y obra antes y fuera de su actividad de hablar, el personaje dramatico slo existe en su hablar o en su presencia escénica, el personaje novelesco existe cuando habla o cuando se habla de él. Es muy distinto mover dentro de la fantasia personajes, que son de len- guaje, que mover a un hombre responsable en su actividad de escritor. Este es el limite de la ultima analogia. A pesar de ello, me atrevo a cerrarla con una cita por semejanza de san Agustin: «Si dos en una sola carne, gpor qué no dos en una sola voz? Hable la ca- beza, hablen los miembros, es el tinico Cristo quien habla» %. DIOS, AUTOR DE LA ESCRITURA Los dos articulos fundamentales: A. Bea, Deus auctor Scripturae: Her- kunft und Bedeutung der Formel: «Angelicum» 20 (1943) 16-31; N. I. ** E. M. Forster, Aspects of the Novel, especialmente 67-78. «Si duo in una came, cur non duo in una voce? Sive caput loquitur sive membra, unus Christus loquiturs (CCL 40, 2027). 6 aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. 80 La palabra divino-humana Rahner utiliza el término Verfasser, en un sentido particular: Dios es autor de los libros sagrados porque predefine que la Iglesia, en el acto de constituirse, se exprese a si misma; autor li- terario de dicha expresién es también el hombre. Dios y el hom- bre son causa de un mismo efecto, la Sagrada Escritura, segtin una diversa formalidad: la formalidad de Dios es que la Iglesia se exprese a si misma, la del hombre es la formalidad literaria. Segiin Rahner es inexacto decir que Dios escribe una carta a Fi- lem6n; y pienso que no aceptara a la letra la frase de san Juan Criséstomo: «... cuando escribe Pablo, mejor dicho, no Pablo, sino la gracia del Espiritu, dicta una carta a toda una ciudad, a un gran pueblo, y por ellos a todo el orbe...» *. * En la linea opuesta esta sobre todo el cardenal Bea, que, re- conociendo tratarse de una cuestién disputada, toma la palabra en su sentido comun, como lo hicieron los antiguos. La f6rmula aparece por primera vez en los llamados Anti- guos Estatutos de la Iglesia, Statuta Ecclesiae Antiqua, que inti- man al obispo en su consagraci6n la siguiente pregunta: «Si cree que Dios es el autor tinico de! Antiguo y Nuevo Testamento, es decir, de la ley, los profetas y los apostoles» 75; el texto es ya conocido a principios del siglo VI, y se opone a la doctrina ma- niquea. San Agustin, en controversia con los Mmaniqueos, cita unas palabras del hereje Fausto: a la iglesia maniquea «le repug- nan los dones de] Antiguo Testamento y de su autor; celosa de su propia fama, solo recibe cartas de su esposo Cristo» 7°. Estos textos no son univocos: el primero no habla expresamente de es- critos, el segundo tiene un marcado caracter metaférico. En otros escritos antimaniqueos la referencia a la Escritura —no bent originem». Diferente es la sentencia de Desroches en Jugement pratique et jugement spéculatif chez fécrivain insprré (Ottawa 1958) 107. La formula a que Mega Desroches esta en la definicién del Vaticano. 7* Tlathou 82 yoapovtos NaAAOV dé Ob Mawhov, ddAa Tig rod Mvetparos xagutos vyvimotohiv inayogevotons dhoxdEop TosotTp, zai dU Exeivwv TH olxounévy xéon (In R 16, 3: PG 51, 187). «Si novi et veteris Testamenti, id est, legis et prophetarum et apostolorum unum eundemque credat auctorem». 7

Anda mungkin juga menyukai