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“ ca a I | = he a a a: COCO emai CRC Man Sas ey Dene near ne Td poem S Ua TD ae cee eC uetarnE Cora e een eg Peay Tr ee tS expone fundamentalmente la ontologia, Ia antropologia, y la étic Pe On econ msi Ca Tu ay interpretacion del mundo (en un sentido heideggeriano) de las culturas Toes eRe MeO Me Roe a oe Conrad Peau Re eC sR eee et compleja de la cultura latincamericana: europeo-semita, por parte de los conquistadores, yextremo-oriental y del Océano Pacifico, por parte delas CU a Rocce Care Reece ee DST Ona eo nM eT an extensi6n diacronica (por milenios) y mundial (en el horizonte de todo el LeuaexeenPaec one} Biblioteca Testimonial del Bicentenario Obras Selectas 4 Enrique DUSSEL El Humanismo Helénico . El Humanismo Semita Esta Edicién ha wuspiciada y declarada de interés cultural por la SECRETARIA DE CULTURA DE LA NACION (R.S.C. N° 3151/11) Tlustracién de Tapa ‘Sobre un fondo de ruinas griegas un plato con Ia esfinge de Edipo y debajo El papiro det juicio de Osiris Enrique DUSSEL E] Humanismo Helénico El] Humanismo Semita Dussel, Enrique E] Humanismo Helénico - El Humanismo Semita- ‘Obras Sclectas Il- 1* ed. - Buenos Aires : Docencia, 2012. 348 p. ; 20x14 cm. ISBN 978-987-506-340-2 1, Filosofia. 2. Estudios Literarios. 1. Titulo. CDD 190 ‘Queda hecho el depdsito que marca la Ley 11.723 Reservados todos los derechos Copyright® 2012 By Editorial Docencia Agiiero 2260 (1425) Buenos Aires Tel.: 4805-8333 / 8434 Web: hntp:/www-hernandarias.edu.ar indice Ex HumanismMo HELENICO Hipotesis de investigacién. Introduccién. Primera Parte INCONSISTENCIA TEORICA DEL BiEN ComuN Capitulo I. El dualismo antropolégico y ético. . Capitulo II, El antihistoricismo del eterno retorn Capitulo III. El monismo trascendente. Conclusiones a la Primera Parte... Segunda Parte EVOLUCION DE LA NOCION EL Bien Comin itulo IV. El humanismo juvenil helénico. Capitulo V. La crisis del humanismo, Capitulo VI. El cosmopolitismo. 123 Conclusiones a la Segunda Parte. Epilogo, Apéndice. La Etica Definitiva de Aristétel Cronologia de la Cultura Helénica... Vit El Humanismo Helénico y El Humanismo Semita Et Humanismo Semita Hipétesis de investigacion. Introduccion. .. I UniDab ANTROPOLOGICA Y ETICA Secci6n I. Corporalidad unitari Seccién II. Libertad y responsabilidad. It INTERSUBJETIVIDAD 0 METAFISICA DE LA ALIANZA Seccién I. Intersubjetividad en Israel. . Seccién II. Intersubjetividad en el Islam. m TEMPORALIDAD DE LA EXISTENCIA Seccién |. Temporalidad de la realidad césmica. ... Seccién II, Historicidad de la existencia humana. ..... Seccién I. La légica del monoteismo.... Secci6n II, El humanismo semita de Israel. Conelusiones Generales. Epilogo. Apéndice. Universalismo y Siervo de Yahveh. Cronologia de los Pueblos Semitas. n de los Poemas del Enrique DUSSEL El] Humanismo Helénico Hip6tesis de investigacién filosofia contemporanea se encuentra en crisis. El pen- I rr filoséfico indaga sus propios fundamentos, estudia las etapas de su constitucién, Para ello, evidentemente, es necesario referirse a los momentos pre-filos6ficos, a la histo- ria de la existencia cotidiana. Fs de la filosofia surge dentro de: un horizonte no filos6fico; dicho horizonte pre-filosofico, pre-cien- tifico, no podra nunca ser ignorado. Estara siempre «ahi», condi- cionando el resto. No es un mundo pre-ontoldgico (vorontologische como dice Heidegger), sino pre-cientifico 0. pre-filoséfico (prescientifique como dice De Waelhens). No se trata de un mun- do sin estructuras, cadtico, desarticulado. Es un mundo todavia no tematizado filos6ficamente, pero que tiene sus estructur: \tropo- légicas, metafisicas, morales, perfectamente ejercidas ¢ inyestiga- bles. La filosofia contemporanea, gracias al concépto de «mundo de la vida cotidiana» (el Lebenswelt de Husserl), puedé-cuestio- nar no sdlo la historia de la filosofia constituida, sino las etapas historicas previas y paralelas a su constitucién. Es decir, en el tiem- po en que todavia los helenos no habjan inventado la filosofia, ya existian en otros pueblos, y en el mismo pueblo griego, estructuras intencionales perfectamente estructuradas, sea en los ritos, en las. leyendas, en fin, en lo que llamaremos, siguiendo a Paul Ricoeur, el aniicleo ético-mitico», que no es sino el complejo organico de pos- turas, coneretas de un grupo ante la existencia. No es sélo una vi- sién te6rica del mundo (Weltanschauung), sino también una postura existencial concreta, un modo de comportarse (éthos). Todo esto, evidentemente, abre a la filosofia horizontes insos- pechados de investigaci6n. Toda estructura intencional, sea la mas primitiva o la mas evolucionada, sea europea, latinoamericana, africana 0 asiatica, puede ser tematizada filos6ficamente. No de- cimos, y este error de lectura es grave, que exista una «filosofia explicita» antes del momento de su constitucién griega, sino que 4 16 El humanismo helénico existen estructuras intencionales que permiten al fil6sofo desen- trafiar su orden, su significacién, su jerarquia. Pero es todavia mas. Aun en el tiempo de la filosofia ya consti- tuida, ésta, la filosofia, dependera siempre de la experiencia pre- cientifica y cotidiana del mismo filésofo, de la filosofia. La expe- riencia prefiloséfica juega entonces, siempre, el papel de condicionante y después de condicionado por el mismo pensa- miento filos6fico explicito. Asi Platén estaba condicionado por el mundo griego» pre-filoséfico, pero, al mismo tiempo, su vision explicita del mundo pre-determinard, de algtin modo, a todo el futuro de la cultura helenista. Aunque lo dicho es bien conocido en Ia filosofia contempord- nea, son todavia pocos. los trabajos realizados en este sentido. El mundo pre-filoséfico no es objeto de trabajos historicos sistema- ticos. Y, de un modo especial, podria esto decirse de nuestro gru- po cultural latinoamericano. Lo que nos proponemos es, entonces, comenzar la fundamenta- cién desde sus Ultimas raices intencionales del «mundo latino- americano pre-filos6fico». Ese mundo del cual la reflexién del filésofo parte; ese mundo que el fildsofo tematiza; ese mundo en el cual vuelca al fin su labor clarificadora. Nuestro estudio no puede partir sino de ese «mundo», pero en tanto «hablado», en tanto expresado por el lenguaje. Es bien sabi- do que la exégesis (por cjemplo, con Rudolf Bultmann) o la her- menéutica (piénsese en la posicién de Karl Jaspers, Paul Ricoeur, Enrico Castelli) es hoy objeto de las mayores disputas. No puede ser de otro modo, ya que contemplamos ci renacimiento de la «cien- cia de la interpretacién», llave de todo trabajo histérico posible. {Como puede concebirse un estudio de historia de la filosofia 0 de historia del «mundo» pre-filoséfico sin textos que nos lo pre- senten? ;Cémo puede comprenderse adecuadamente un texto sin las reglas de interpretacidn? [os filésofos no han caido muchas veces en graves errores de interpretacién por una falta absoluta de hermenéutica? Vemos, entonces, que se trata del supuesto de toda reflexién hist6rico-filoséfica posible. Hipétesis de investigacién 17 Existen, al menos, tres niveles de expresion que deben discernirse claramente. Estos niveles se expresan por el lenguaje, pero por lenguajes diversos. El saber situarse adecuadamente en cada nivel es esencial para llegar a alguna conclusién. En primer lugar, descubrimos el lenguaje de la vida cotidiana, el mis rico de todos, pletirico de doble sentido, de multiples significaciones, donde el gesto y el tono indican lo inexpresable por el verbo: los simbolos, los mitos, los comportamientos. La filosofia del lenguaje, la historia y fenomenologia de la religién, la exégesis en general, cl psicoandlisis nos ayudan a descubrir el «sentido» de este nivel cotidiano del lenguaje, El segundo nivel expresa los contenidos iltimos del mundo de la vida cotidiana, que Ilamaremos cosmovisiones (las Weltan- schauungen que tanto estudié Dilthey), pero que sonen verdad el horizonte ontolégico de comprensién. Es un lenguaje implicito a veces expresado por la sabidurfa popular o por una ¢ierta.re: flexién a nivel vulgar, no por ello menos sabiduria. EI nivel tercero es estudiado por la histotia de la filosofia. Se trata de la expresién justificada y filoséfica de la existencia coti- diana; la Weltanschauung explicita. El lenguaje filoséfico, aun- que mas claro y racional que el de la vida cotidiana, se encuentra a tal punto ligado a éste que es mas incomprensible a la simple mirada que lo que muchas creen. El fil6sofo «expresa» wimundo pre-filoséfico que se supone conocido y condicionante del sent do de su propia expresién, Quien desconociera el «mundo de lat, vida cotidiana» griega dificilmente podria comprender auténtica~ mente el conjunto de lecciones rcunido en la llamada Metafisica de Aristételes 0 en su Etica a Nicémaco. El condicionamiento real de la filosofia con respecto a su mundo es correlativo al condicionamiento de la comprensién auténtica de una filosofia a partir de su mundo, ‘Todos estos niveles, evidentemente, se dan simulténeamente, stn transidos de temporalidad, y, por ello, estin inmersos en el inevitable «relativismo» histérico. Con la palabra «relativismo» queremos s6lo expresar la necesaria «relacién» del lenguaje a sw 18 El humanismo helénico tiempo, y la incomprensibilidad de todo lenguaje desde otro tiem- po. Por ello, para comprender la verdad absoluta e intemporal de un Ienguaje es necesario situarse en su tiempo, y es alli, sélo alli, en su tiempo, donde cl lenguaje temporal recobra su valor de ver- dad absoluta, para todos los tiempos. Saber situarse, sin embargo, en la perspectiva adecuada exige cumplir las reglas de la herme- néutica. La hermenéutica, entonces, diciendo lo mismo de otro modo, es la ciencia que permite situarse correctamente en un «pre- sente-pasadoy; es la ciencia de la reconstitucién de la «perspecti- va presente de un pasado», para discernir, desde esa perspectiva, un contenido que debera verterse diferentemente en el «presente- actual». El gran error de muchos tradicionalistas, integristas, 0 simplemente ignorantes de la temporalidad, es querer comprender y expresar un lenguaje pasado con un lenguaje actual, lo que signi- fica un mortal error de interpretacién y de expresi6n. La verdad, comprendida y expresada por los hombres del pasado, pasa to- talmente inadvertida al incorrecto intérprete. El nico modo de ser fiel a una verdad pasada, es descubrir y recobrar el contenido, cambiando el lenguaje pasado por el actual, lo cual significa una mayuscula tarea de inteligencia histérica y metafisica. Repitamos. La’ situacién historica de todo lenguaje no es ab- solutamente relativa; antes bien constituye una relacion absoluta en «su» mundo ante el ser, la realidad, para siempre. Lo verdade- ro en cualquier presente es siempre verdad si el espectador sabe situarse adecuadamente en su tiempo. Saber situarse adecuada- mente en la posicién histérica absoluta es justamente la tarea de la historia de la filosofia. La consideracién absoluta del ser es obje- to de la metafisica misma. Nuestro trabajo es sélo un prolegome- no, porque nos permite «saber situarnos», es decir, es historia de la filosofia, o aun historia de la pre-filosofia. E] trabajo que presentamos significa el comienzo de ese pro- legomeno. Sera necesario, después de haber expuesto las estruc- turas pre-filos6ficas del mundo griego y semita, encarar toda la evolucién de las mismas estructuras en el mundo de la cristiandad romano-europea, para desembocar después en la peninsula ibéri- Hipétesis de investigacion 19 ca. Con ello habremos sélo dado cuenta de la posicién histérica del conquistador. Nos faltara todavia estudiar el mundo amerindiano, el «choque» con el hispanico, la constitucién de América Latina, la evolucién de la cristiandad colonial, de las naciones neocoloniales para llegar, al fin, a tratar adecuadamente el mundo pre-filosofico actual en nuestra América, que es el obje- to tiltimo de nuestras investigaciones. Prof. Dr. Enrique Dussel Paris, 1963. Enrique DUSSEL El] Humanismo Semita Hipotesis de investigacién ‘ién del tema que estudia la antropologia filoséfica: el hombre y su mundo. La destruccién de la historia ade la antologia no debe olvidar este momento; dicho olvide seria tart- in un olvido del ser (Seinsvergessenheit). En nuestro trabajo anterior sobre El hamanismo helénico he- nos ya mostrado, practicamente, la utilizacién de un método permite analizar ciertos elementos de la estructura de la onciencia colectiva y personal, historica y circunstanciada, a avés de la cual cadla hombre, situado en el espacio y el tiempo, ° vive su existencia concreta, visualiza el universo y su Po sieion~ en el mundo. +s} En este corto trabajo proponemos una estructura antagénica la expuesta en la investigacién anterior. Alli veiamos el modo como el griego, uno de los pueblos indoeuropeos, concebia 0 vivia su existencia como hombre, como realidad moral, sacietaria atemporal; hemos visto la evolucién de ese fenémeno desde ---- los clanes de las invasiones primitivas hasta el cosmopolitismo alejandrino. Aqui, en cambio, analizaremos una tradicién totalmente dis. inta, Su cuna y desarrollo, los elementos constitutivos, la posi- idn del hombre ante si mismo, ante lo divino, ante el mundo y la tistoria, diferirdn como el dia y la noche de la cosmovisién de ws griegos. Y esta diferencia es tanto mas importante para ex- plicar después la influencia que el pensamiento semita tendré entro del cosmopolitismo alejandrino y el Imperio Romano, para llegar a constituir tanto el Imperio Bizantino como el Sacro Im- rio Romano, ambos de inspiracién cristiana. Se trata de una oblemdtica que, a primera vista y sin medir las consecuen- FE: esta obra se expone una de las etapas de la constitu ci 164 El humanismo semita cias, pareciera del todo alejada de las preocupaciones del bre contempordneo latinoamericano; pero, si indagamos un poe mas profundamente los contenidos mismos de nuestra concier cia actual, si pretendemos fundar los valores de nuestra propi cultura, entonces comprenderemos que no se trata de una ir tigacién gratuita e intitil, sino de gran necesidad para abare cientificamente los supuestos de nuestro «mundo» latinoa ricano.' Prof. Dr. Enrique Dussel Institut ftir Europtische Geschichte Maguncia (Alemania), 1964, 1. Ennuestro curso de Historia de la cultura (Facultad de Humanidades, Univ dad Nacional del Nordeste, Argentina. Ahora publicamos como tomo II de estas O Selectas) hemos expuesto detalladamente el sentido de la historia universal como p pproto- historia latinoamericana. Lo que explicamos ali de un modo hist6rico- ci tancial, lo exponemios aqui en el nivel del ndcleo ético-mitico o aquel eomplejo de "Yactitudes existenciales que fundan todo comportamiento personal y colectivo. ‘muy lejos de adoptar una posicién kantiama, lo que demostraremos én otro trabajo fi sobre Historia y realidad.

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