Neuropsicologa
La percepcin que comprende tanto los aspectos visuales, como los auditivos y los
tctiles (hpticos).
El lenguaje abarca las capacidades receptivas y expresivas del habla, al igual que los
aspectos psicoeducativos o las capacidades acadmicas en lectoescritura y aritmtica.
La memoria, tanto la verbal como la no verbal y en su dimensin a corto o a largo plazo.
Rodrguez (2012, p. 23), cita a Quintanar y Solovieva (2005) quienes explican la relacin
entre mecanismos neuropsicolgicos y zonas cerebrales.
Cada uno de estos factores lleva a cabo una funcin y se relaciona con el trabajo de
ciertas zonas corticales como se observar en la siguiente tabla.
La escritura y la ortografa dependen de las respuestas motoras que entran en juego para
producir las letras y las palabras. Si el nio no discrimina visualmente los modelos que
debe copiar, esto repercutir directamente en la reproduccin de esos modelos y, por lo
tanto, en la escritura y la ortografa (Bolaos, 2006, pp. 195,196).
Destrezas visuales:
a) Coordinacin: seguimiento visual, seguir los objetos y smbolos con movimientos
coordinados de la vista.
b) Discriminacin visual de la forma: discriminar similitudes y diferencias entre formas
y smbolos.
c) Diferenciacin de la figura y el fondo: percibir las formas y las figuras incluidas en
el primer plano.
d) Velocidad viso-motora: refinar las destrezas psicomotoras, adquiridas
anteriormente, respondiendo rpidamente a signos visuales.
e) Coordinacin viso-motora de los msculos finos: coordinar los msculos finos con
la vista.
f) Memoria viso-motora: visualizar y recordar con precisin signos (Bolaos, 2006,
pp. 195,196).
Para comenzar a escribir, el nio debe encontrar, en la lnea, el lugar donde colocar el
bolgrafo y tiene que orientarse en los elementos de las letras (y de estas en el espacio)
sin cometer errores en espejo. Esto requiere de la participacin de operaciones del
procesamiento de la informacin visuo-espacial. De esta forma, no slo el primer bloque
funcional, sino tambin diferentes sectores del segundo bloque (cortical posterior)
participan ampliamente en la escritura (Akhutina, 2002, pp. 239,240).