Titulo I
DELITOS CONTRA LA VIDA
Y LA SALUD DE LAS PERSONAS
Capitulo I
HOMICIDIO
SUMARIO: Subcapitulo 1: Generalidades. 1. Cuestién preliminar. 2. Proteccién de la vida.
Subcapitulo 2: Homicidio simple. 1. Tipo penal. 2. Tipicidad objetiva. 2.1. Bien jurfdico pro-
tegido. 2.2. Sujeto activo. 23. Sujeto pasivo. 3. Tipicidad subjetiva. 3.1. La categorfa del error
en homicidio. 4. Antijuridicidad. 5. Culpabilidad. 6. Consumaci6n. 7. Tentativa. 8. Penalidad.
Subcapitulo 3:El delito de parricidio. 1. Tipo penal. 2.Tipiddad objetiva. 2.1. Parricidio simple.
2.1.1. Bien juridica protegido, 2.1.2. Sujeto activo. 2.1.3. Sujeto pasivo. 2.2. Parricidio agravado.
22.1, Parricidio por ferocidad. 2.2.2. Por lucro. 2.2.3. Por placer. 2.2.4, Para facilitar otro delito.
2.25.Para ocultar otro delito. 2.2.6. Con gran crueldad.2.2.7,Con alevosia.2.2.8, Por fuega.22.9.
Por explosién. 2.2.10. Por veneno. 2.2.11. Otros medias capaces de poner en peligro la vidao la
salud de otras personas. 3. Tipicidad subjetiva. 3.1. Solucion en caso de error. 4. Antijuridicidad.
5,Culpabilidad. 6. Consumacién. 7. Problema de la participacion en el parricidio. 8. Tentativa. 9,
Penalidad. Subcapitulo 4: Asesinato. 1.Cuestién previa. 2. Tipo penal. 3. Tipicidad objetiva.3.1.
Por ferocidad. 3.2. Por codicia, 3.3. Por lucro. 3.4. Por placer, 3.5. Para facilitar otro delito. 3.6, Para
ocultar otro delito. 3.7. Con gran crueldad. 3.8. Con alevosia. 3.9. Por fuego. 3.10. Por explosion.
3.11. Otros medios capaces de poner en peligro la vida o la salud de otras personas. 3.12. Otro
medio también puede ser el veneno. 3.13. Bien juridico tutelado. 3.14. Sujeto activo. 3.15. Sujeto
pasivo, 4, Tipicidad subjetiva, 5. Antijuridicidad, 6, Culpabilidad, 7, Consumacién. 8. Tentativa.
9, Penalidad. Subcapftulo 5: Asesinato por la condicién publica de la victima. 1. Cuestion
previa2. Tipo penal.3. Hermenéutica juridica sila victima cumple funcién ptiblica. 4. Penalidad.
‘Subcapitulo 6: El delito de feminicidio. 1. Cuestion previa. 2. Tipo penal. 3. Tipicidad objetiva.
3.1. Feminicidio agravado. 3.2. Bien jurfdico protegido. 3.3. Sujeto activo. 3.4, Sujeto pasivo. 4.
Tipicidad subjetiva. 5. Antijuridicidad. 6, Culpabilidad. 7. Consumacion.8.Tentativa. 9.Penalidad.
Subcapftulo 7:E1 delito de asesinato por sueldo:sicariato. 1. Cuestidn previa. 2.Tipo penal del
delito de asesinato por sueldo. 3, Hermenéutlca Juridica. 3.1.Finalidad del Decreto LegIstativo N°
1181.32. Critica la finalidad invocada por los proyectos de ley. 3.3. El homicidio por lucro. 3.4.
Elhomicidio por sueldo: sicariato. 3.5, Hermenéutica del tipo penal 108-C. 3.6. Bien Juridico pro-
tegido.3.7. Siceriato agravado. 3.8. Penalidad. 3.9. Tipo penal de conspiracidn y ofrecimiento del
delito de sicariato. 3.10. Hermenetitica juridica, 3.11. Penalidad, Subcap/tulo 8: Homicidio por
emocién violenta. 1.Tipo penal.2.TipIcidad objetiva. 2.1. Agravante del homicidio poremocién
violenta: 2.2. Bien juridico protegido. 23. Sujeto activo, 2.4. Sujeto pasivo. 3. Tipicidad subjetiva.
4. Antijuridicidad. 5. Culpabilidad. 6. Consumacién. 7. Tentativa. 8, Penalidad. Subcapitulo 9:
Infanticidio, 1.Tipo penal. 2. Tipicidad objetiva. 2.1. Durante el parto, 2.2. Bajo la influencia del
estado puerperal. 2.3. Fundamento del privilegio punitivo. 2.4. Bien juridico tutelado. 2.5. Sujetoactivo. 2.6. Sujeto pasivo. 3, Tipicidad subjetiva. 4. Antijuridicidad, 5. Culpabilidad, 6, Consuma-
ion, 7, Tentativa. 8, Penalidad, Subcapitulo 10: Homicidio culposo. 1. Tipo penal. 2. Tipicidad
objetiva. 2.1. Homicidio culposo agravado, 2.2. Bien juridico protegido. 2.3, Sujeto activo. 2.4,
Sujeto pasivo. 3. Tipicidad subjetiva. 4. Consumacion. 5. Tentativa, 6.Penalidad. Subcapitulo 11:
Homicicio piadoso. 1. Consideraciones generales. 2. Ei homicidio piadoso escompatible con la
moral.3.El médico humanista y el homicidio piadoso. 4. Circunstancias a tener en cuenta para
declararla impunidad del matarpor pledad. 5. Circunstancia que fundamenta la impunidad del
homicidio piadoso. 6. El médicoy el derecho al consentimiento informado. Subcapftulo 12:La
eutanasia en el Codigo Penal. 1. Tipo penal. 2. Tipicidad objetiva, 2.1. Bien juridico tutelado,
22. Sujeto activo. 23, Sujeto pasivo. 3. Tipicidad subjetiva. 4. Antijuridicidad, 5, Culpabilidad.
6. Consumacién. 7. Tentativa. 8. Penalidad. Subcapitulo 13: Instigacién y ayuda al suicidio,
1. Cuestion previa. 2: Tipo penal. 3. Tipicidad objetiva. 3.1. Circunstancia agravante. 3.2. Bien
juridico protegido. 3.3, Sujeto activo. 3.4. Sujeto pasivo. 4.Tipicidad subjetiva.5.Consumacién,
6.Tentativa. 7. Penalidad,
Subcapitulo 1
Generalidades
1, CUESTION PRELIMINAR
Nuestro sistema juridico se inicia interesandose por los principales derecho os
Tos demas como la Libertad,
ae Splicacida tédica en el hecho concreto que estos derechos proporcionan
a todos y cada uno de los seres humanos, los presupuestos y medios adecuados
para intentar alcanzar la plenitud de su ser como verdaderos hombres, los mismos
que filosdficamente consisten en una sustancia individual de naturaleza racional,
dotado de la capacidad de entender y querer. En efecto, nuestra Carta Politica y
el Codigo Civil, siguiendo la ideologfa inmersa en la Declaracién Universal de los
Derechos Humanos (1948), el Pacto Internacional de Derechos Civiles y P liticos
i E 969), comienzan
toda persona natiiral tiéne derecho a la vida
y asu integridad psicofisica y corresponde a la sociedad juridicamente organizada
(Estado), protegerla. En ese sentido, el corpus juris penale no puede ser indiferente
aaquella ideologia adoptada en todo Estado democratico de derecho, apareciendo
como los principales y primeros bienes juridicos a proteger, la vida y después la
integridad fisica y psicoldgica de la persona individual.
Esta situacién se fundamenta en la posicién doctrinaria que claramente
plantea: si bien es cierto el ejercicio del destcho a la vida, a la integridad fisica 0
mental y los demas derechos, corresponde al hombre, individual o colectivamenteconsiderado; su garantia, detensa y puesta en practica pertenece al bstaao, puts
solo él dispone en forma efectiva de los resortes para su proteccién. Por lo dents,
protegiéndoles se protege a si mismo y garantiza su supervivencia.
En otro aspecto, es indudable que la vida y la integridad psicofisica del
hombre pertenecen alos pocos bienes juridicos sobre cuya existencia, contenido y
proteccién punitiva existe unidad de pareceres. Doctrinariamente no existe polé-
mica en lo fundamental, sino en ciertos puntos tangenciales 0 a veces coyunturales.
La persona individual es el pilar central del sistema juridico, constituyéndose al
_mismo tiempo en su principal valor; en consecuencia, ya nadie discute que merece
por ello su preferencial proteccién.
La importancia de este pensamiento no debe hacernos soslayar que su con-
cretizaci6n real y tedrica implica una serie de problemas. Yala exacta determinacién
de los criterios de bien juridico, presenta dificultades. Se plantean también interro-
gantes axiolégicas, dogmaticas y de politica criminal sobre su naturaleza y Ambito
de proteccién. Finalmente, el avance de Ja tecnificaci6n, la industrializacién y la
cibernética se encargan de modificar constantemente las condiciones deviday, con
ello, se crean nuevos riesgos para el bien juridico, cuya proteccion por medio del
derecho penal no esta absolutamente garantizada. Todo esto da pabulo suficiente
para plantearse problemas ya clasicos, pero en absoluto definitivamente resueltos,
relativos a la proteccién de la vida y de la integridad fisica”.
Aqui es importante poner de relieve que cuando se alude al derecho
ala vida} nos estamos refiriendo tanto a la vida independiente, asi como a
la dependiente, y cuando nos referimos a la integridad fisica y mental de Ja
persona, automaticamente estamos aludiendo a la salud. Actualmente, se ha
determinado objetiva y cientificamente que toda lesidn al bien juridico inte-
gridad psicofisica de la persona, afecta inmediatamente a la salud de aquella,
entendida esta como el estado de equilibrio orgdnico-funcional que le sirve
para desarrollar normalmente sus funciones.
2. PROTECCION DELAVIDA
‘Aun cuando en la actualidad la categoria del bien juridico en derecho penal
es bastante cuestionada, pensamos que su utilidad deviene por constituir un cri-
terio limitador del poder punitivo que tiene el Estado, y punto de referencia para
sistematizar las conductas prescritas como delictivas en el catdlogo penal.
OF _ScHONE en ROY FREYRE, 1989, p. 51.~. Entendemos como bien juridico a todo aquel interés social que se constituye
en presupuesto necesario para el normal desenvolvimiento de Ja persona humana
en sociedad: “Los bienes juridicos son tales no porque el legislador los considere
merecedores de proteccién juridica, sino porque son en si, presupuestos indispen-
sables para la vida en comin’,
Una vez que el legislador considera que determinados bienes deben ser prote-
gidos 0 tutelados por el derecho y as{los tipifica mediante una ley, autométicamente
se convierten en bie bienes juridicamente prot
Enlas madncaS tipificadas bajo el membrete de delitos contra la vida, no hay
mayores problemas para identificar ala vida humana como el bien juridico prote tegido.
Esta es la fuente de todos los dems bienes tutelados; s ) te ir
de derechos y atin més, ni de la vida misma. En otros términos, la vida constituye el
bien juridico de mayor importancia, no solo porque el atentado contra ella es irre-
parable, sino porque es también la condicién absolutamente necesaria para sentir su
grandeza y disfrutar de los restantes bienes. En summa, la vida constituye el valor de més
alto rango en Ja escala axiolégica y permite inferir, que cualquiera sea la concepcién
que de ella se tenga, es seguro que no debe existir hombre alguno sobre Ja tierra que
pueda negar o minimizar, ala hora del creptisculo, la magnitud de su grandeza®.
Esta circunstancia insoslayable por el legislador es la base de todo nuestro
sistema juridico. De esa forma, en el inciso 1, , articulo 2 dela Constitucién Politica
de 1993, se sefiala taxativamenté: “Tada persona tiene derecho ala vida’; ello como
simple reflejo de tratados y acuerdos internacionales de los cuales el Perit es parte.
La Declaracién Universal de los Derechos Humanos, firmada en 1948 después
de la infausta Segunda Guerra Mundial, en su articulo 3 prevé: “todo individuo
tiene derecho ala vida..?. Asimismo, en la Declaracién Americana de los Derechos
y Deberes del Hombre, aprobada en Bogotd en 1948 en el artfculo I se prescribe:
“todo ser humano tiene derecho a Ja vida...” En tanto que el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Politicos, firmado en New York en 1966, en su parte III, articulo
6.1 sefiala: “El derecho a Ja vida es inherente a Ja persona humana. Este derecho
estar protegido por la ley. Nadie podra ser privado de la vida arbitrariamente’. Fi-
nalmente, precisando mucho mas los alcances del derecho a la vida, la Convencién
Americana sobre Derechos Humanos -Pacto de San José de Costa Rica-, firmada en
1969, en elarticulo 4.1 establece que: “toda persona tiene derecho a que se respete
(2) HURTADO PO20, 1987, p. 39. Vid. HURTADO POZO, 2005, p. 25, num. 53,
@) BUOMPADRE, 2600, I, p. 68.su vida, Bste derecho estara protegido por laley, yen general, a partir del momento
dela concepcidn. Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente”
De ese modo, y tal como aparece en nuestro sistema jurfdico penal, ala vida
humana se protege de manera rigurosa; pero ello no. significa que se la proteja de ma-
absoluta’como alegan Luis Alberto Bramont-Arias Torres y Garcia Cantizano™,
pues ci ‘uamente caerfamos en serias contradicciones. Es evidente que la vida
viene a constituir el derecho principalisimo y supremo del ser humano, no obstan-
te, en determinadas circunstancias también se le sacrifica, ciertas veces sin causa y
otras con Ja visacién del derecho mismo (por ejemplo, la pena de muerte prevista en
muestra constitucién para el delito de traicién a la patria en caso de guerra exterior).
(Por otro lado, Ih vida humana de acuerdo con su naturaleza de desarrollo
se protege ex" dos aspectos: vida humana independiente que se lesiona con las
figuras delictivas de homicidio y vida humana dependiente que se lesiona con las
conductas dolosas rotuladas como aborto, El derecho penal protege a lavida como
un fenémeno biosocioldgico inseparablemente unido. La vida es un bien juridico
individual y social a la vez. .
En doctrina, por cuestién de sistematica se hace la diferencia entre vida hu-
mana dependiente y vida de Ja persona que se identifica con vida independiente.
Apareciendo légicamente que respecto ala vida independiente, toda persona natural
tiene derecho a gozarla, a disfrutarla libremente y como a bien tenga, siempre y
cuando no entre en conflicto con el desenvolvimiento del conglomerado social que
viene a ser su protectora y garantia de permanencia en el tiempo. Situacién que es
inimaginable respecto de Ja vida dependiente.
En la ciencia penal también aparece la polémica nada pacifica sobre la res-
puesta ala pregunta: ;desde cudndo se inici la vida para ser protegida penalmente?
némeno dela fecundacién del évulo (teoria
Para un sector, la vida comienza con él
dela fecundacién); en tanto que para otro sector mayoritario, el inicio de la vida
se produce desde la implantacién del évulo ya fecundado en el titero de la mujer
(teoria de la anidacién), En Ja doctrina penal peruana actual, existe unanimidaden
considerar que esta se inicia desde el momento dela anidacién del évulo fecundado
por el esperma en el titero de la mujer. No obstante, Jas posiciones distan sobre
las razones para considerar ala anidacién como inicio dela vida con trascendencia
(4) BRAMONT-ARIASTORRES/GARCIA CANTIZANO, 1997, p. 35.
(5) Roy FRevRE, 1989, p. 254; PENA CABRERA, 1994, p. 72; HURTADO POZO, 1995, p. 57; PRADO SALDARRIAGA,
+ 1985, p. 84; VILLAVICENCIO TERREROS, 1991, p. 14; BRAMONT-ARIAS/GARCIA CANTIZANO, 1997, p. 36; VILLA
STEIN, 1997, p. 25; SALINAS SICCHA, 1998, p. 32; y PORTOCARRERO HIDALGO, 2003, p. 163.punitiva. Algunos lo hacen por fines pragmaticos y otros para resolver problemas
que ha generado el derecho genético,
Teniendo en cuenta que la anidacién en la matriz endometrial se produce al
décimo cuarto dia de la concepcién a través de una serie de encimas y de peque-
fias terminaciones tentaculares denominadas VILLI, que se insertan en el titero,
nosotros adoptamos tal posicién por el hecho concreto que desde aquel momento
histérico del desarrollo de la vida, el nuevo ser alcanza y cuenta con todos los ele-
mentos biolégicos necesarios e indispensables para desarrollarse ycomenzar a crecer
naturalmente. Antes de llegar al titero, el dvulo fecundado por el espermatozoide no
tiene todas las posibilidades naturales de desarrollarse, fAcilmente puede ser expul-
sado por razones naturales 9 artificiales (uso de anticonceptivos, por ejemplo). Por
su parte, los académicos Bustos Ramirez, Muiioz Conde” y Buompadre™, adoptan
la “teoria de Ja anidacién’, debido a que es a partir del momento de la anidacién
“que se tiene mayor certeza en el desarrollo de la vida humana”, .
Adoptar esta posicion ayuda de manera eficaz a solucionar los problemas
que presenta el derecho genético, el cual involucra a diversos procedimientos
que en el drea de la salud actualmente se denominan biotecnologia, bioética
(disciplina que estudia las reglas y principios éticos aplicados a la biologia y
a las ciencias de la salud con miras a mejorar la calidad de vida), biomedici-
na, biologia molecular, ingenierfa genética (conjunto de técnicas destinadas
a posibilitar la transferencia de porciones del patrimonio hereditario de un
organismo viviente a otro), etc. s
En consecuencia, consideramos que el producto de una concepcidn lograda
fuera del seno materno en una probeta —fecundacién extracorpdrea (FEC)- que
se sostiene artificialmente por no haber sido anidada én el vientre de una mujer,
aun cuando puede catalogarse como vida humana, su aniquilamiento de ningin
modo constituye delito contra la vida, pues no aparece el momento biolégico de
la anidacién en la matriz endometrial, Aquel producto adquiere proteccién penal
desde que es implantado o anidado en el titero de una mujer.
(6) Quispe Diaz, 2000, p. 26.
(7) MuRioz Cone, 2001, p. 88. Incluso, este autor senala en forma certera que “solo a partir dela anidaci6n
se produce una vinculacién orgénica entre el embrién y la madre: el embridn se adhiere a la pared
del utero y recibe de él los impulsos necesarios para su desarrollo, Hasta ese momento, el embrién no
tiene contacto fijo con el organismo materno y existe un 50% de probabilidades de que, por causas
naturales, no llegue a anidar en el utero" (MUNOZ CONDE, 2001, p. 87).
(8) BUOMPADRE, 2009, |, p. 69.
ee eaCC RA ee Aes ee beetle ae cae Cote eee
me
lamuerte dela persona natural, entendida esta como la cesaci6n definitivae irreversi-
ble dela actividad cerebral, ello debido a que actualmente con el avance cientifico de
Jamedicinay sus instrumentos, resulta facil identificar aquel momento trascendente.
En nuestra patria, el articulo 3 dela Ley N° 28189, Ley general de donacion
y trasplante de organos y/o tejidos humanos, publicada el 18 de marzo de 2004,
prescribe que el diagnéstico y certificacién de la muerte de una persona se basa
en el cese definitivo e irreversible de las funciones encefalicas de acuerdo con los
protocolos que establezca el reglamento y bajo responsabilidad del médico que lo
certifica. En la misma linea, el articulo 108 de Ja Ley General de Salud, Ley N° 26842
del 20 de julio de 1997, establece que la muerte pone fin a Ja persona. Se considera
ausencia de vida al cese definitivo de la actividad cerebral, independientemente de
que algunos de sus érganos 0 tejidos mantengan actividad biolégica y puedan ser
usados con fines de trasplante, injerto o cultivo.
El diagndstico fundado de cese definitivo dela actividad cerebral verifica la
muerte. Cuando no es posible establecer tal diagnéstico, la constatacién de paro
cardiorrespiratorio irreversible confirma la muerte.
\ Aparecen como caracteristicas principales de la muerte las siguientes:
ausencia de respuesta cerebral a estimulos externos, ausencia de respiracién
espontanea, ausencia de reflejos encefalicos y electroencefalograma plano.
En consecuencia, cuando un médico determina tales circunstancias, y asi lo
certifica, estaremos ante la muerte con efectos juridico-penales.
Subcapitulo 2
Homicidio simple
1, TIPO PENAL
El tipo basico del homicidio que aparece como el primer delito especifico
regulado en el cddigo sustantivo, se encuentra tipificado en el articulo 106 de la
manera siguiente:
El_ que mata a otro sera reprimido con pena privativa de libertad no menor de seis ni
mayor de veinte aftos.
2. TIPICIDAD OBJETIVA . J
La conducta tipica del homicidio simple consiste fnqu En quitatia vi ‘jidadolosamente
(2 una persona, sin ite concurrencia de alguna circunstancia atenuante ¢ ° > agravante\
| RAMIRO SALINAS SICCHA
debidamente establecida en el Cédigo Perfal como elemento constitutivo de otra
figura delictiva. Si bien, en el tipo penabsio se hace referencia a Ja forma de aniqui-
lar Ja vida de otro, se entiende que puede ser por accién u omisién, en este ultimo
supuesto serd de aplicacién el articulo13 del Cédigo Penal que regula la omisién
impropia. Siendo asf, se concluye que detrés de una omisién delictiva debe existir
una norma de mandato (prestar auxil: ala aut tc.), caso contrario,
la conducta es atipica, Ocurté por gemplo, cuando un médico de guardia noc-
turna dolosamente no atiende a un paciente herido de bala con Ja finalidad que
miuera desangrado por ser este, el causante de su divorcio. “Lo determinante es
que el sujeto activo se encuentre en una posicién de garante frente a la muerte del
sujeto pasivo”), Es decir, se encuentre con el deber jurfdico de actuar para evitar
el resultado dafioso no querido por el orden juridico.
Para.calificar,el delito de homicidio simple resulta irrelevante determinar
‘la modalidad)empleada por el agente, asi como los medios utilizados (revélver,
cuchillo, golpe de putio, etc.) para consumar el-hécho punible, Se trata de aquella
clase de delitos que en doctrina se denominan “tipos resultativos 0 tipos prohibi-
tivos de causar’, en los cuales la ley se limita solo a prohibir la produccién de un
resultado sin determinar la clase del comportamiento tipico. Son tipos de injusto
que no especifican el modo, forma o circunstancias de ejecucién, se limitan a exigir
la produccidn de un resultado sin indicar cémo o de qué modo debe arribarse a
dicho resultado,
Lo tinico que se exige es la idoneidad del medio para originarel resultado
daiioso. No obstante, las formas, circunstancias y medios empleados devienen
en importantes al momento de imponer la pena al homicida por la autoridad
jurisdiccional competente. De ese modo, lo entiende la Suprema Corte al
exponer en la Ejecutoria Suprema del 16 de julio de 1999 que: “en el delito de
homicidio, la conducta $e_agrava en funcién al mévil, a la conexidn con otro
delito, por el modo de ejecucién o por « le
edio empleado, elementos que dotan
@ la figura bdsica de un plus de antijuridicidad, que justifican la imposicion de
una pena mayor teniendo en cuenta, ademds, la nocividad social del afaque al
bien juridico protegido”™,
Flarticulo 106 constituye el tipo bdsico del homicidio de donde se derivan
otras figuras delictivas que han adquirido autonomfa legislativa y sustantiva pro-
(9) VILLAVICENCIO TeRREROS, 2006, p. 279.
(10) BuomPanre, 2000, 1, p. 90,
(a) ‘xp. N° 1301-99-La Libertad, en Normas Legales, N° 290, julio, 2000, p. A-37..Derecho Penal. Parte Especial a
pia al haber sido reguladas en forma especifica y con determinadas caracteristicas
(asesinato u homicidio calificado, parricidio, infanticidio, etc.).
En otro aspecto, bien sefialan Bramont-Arias Torres y Garcia Cantizano”),
cuando afirman que segin Ja doctrina penal moderna, para que el comportamiento
cumpla el tipo, se requiere no solo el nexo. de causalidad, sino, ademas, que dicha
conducta sea imputable juridicamente a auna persona. “Ello conlleva a considerar que
elnexo de causalidad entre el resultado muerte y laacciénu omisiénno es suficiente
para considerar a una conducta como tipica. Se requiere, ademés, la relevancia del
nexo causal que permita comprobar que ese resultado puede ser ‘objetivamente
imputado al comportamiento del autor.
eon
Eneste extremo entra a tallarla moderna teoria'
resolver los problemas que eventualmente pueden presentarse para él juzgador en
un caso concreto. Esta teorfa sostiene que para atribuir o imputar responsabilidad
penal a un sujeto se requiere que su accién u omisidn‘ ‘haya, creado un ries
permitido juridicamente, o aumentado un riesgo juridicoy: normalmente permitido,
trayendo como consecuencia el resultado letal.
2.1, Bien juridico protegido He
Se pretende tutelar la vida humana \ independientef entendida desde la pers-
pectiva natural y bioldgica. Esto es, se e pretende proteger la vida de la persona, la
misma que comprende segtin nuestra sistematica desde el momento del parto hasta
la muerte de aquella. —
Para nuestro sistema juridico vigente, la condicién, cualidad 0 calidad del
titular del bien juridico “vida” no interesa para catalogar como homicidio simple
una conducta dolosa dirigida a aniquilarla. Aquel puede ser un genio, un idiota, la
miss Pert, un deforme, un enfermo, un recién nacido, un anciano, un orate, etc.
Igual, el hecho punible aparece y se sanciona drésticamente, debido a que la vida
; humana independientees el bien juridico quea la sociedad juridicamente organizada
' le interesa proteger en forma rigurosa de cualquier ataque extrafio.
A fin de evitar confusiones, es de precisar que cuestiones diferentes son el
bien juridico y el objeto material sobre el cual recae Ja accién delictiva del agente.
Enefecto, en el homicidio simple, el bien juridico es la vida humana independiente,
en tanto que el objeto material del ilicito es la persona humana naturalmente con
;” vida contra la que se dirige el ataque y se produce el resultado letal.
(12) BRAMONT-ARIAS ToRRES/GARCIA CANTIZANO, 1997, p. 42.
aa10 . RAWIRO SALINAS SICCHA
2.2, Sujeto activo
E] tipo legal de homicidio simple indica de manera indeterminada al sujeto
activo, agente o autor, al comenzar su redaccién sefialando “el que (...)”. De ese
modo, se desprende o interpreta que autor del homicidio basico puede ser cualquier,
persona natural, Constituye un delito comtiy, pues para ser sujeto activo no se ne-
cesita reunir alguna condicién o cualidad especial, ya sea que actie por si mismo
o valiéndose de terceros, dé medios tiécdnicos o animales,
En los casos de omisin impropia, el sujeto activo solo puede ser quien esta
en posicién, de garante’ respecto del bien juridico lesionado. Si en el caso concreto
no puede determinarse que el sujeto tenia la posicién de garante sobre él fallecido,
resultard imposible atribuirle cl resultado letal a titulo de omisién.
>
2.3. Sujato pasivo
Al prescribir el tipo penal la expresion “(...) a otro” se entiende que sujeto
pasivo puede ser también cualquier persoia natural ly.con vida desde el momento
del parto hasta su muerte debidameiite determinada - ~alegamos. desde el momento
del parto por las consideraciones que expondremos més adelante, cuando desarro-
Memos la figura delictiva del infanticidio-. Claro esté, se exceptiia a los ascendientes,
descendientes, cényuges 0 concubinos del agente, quienes solo son sujetos pasivos
del delito de parricidio.
El sujeto pasivo tiene que ser una persona con vida. El que procura la muerte
de un cadaver creyéndole vivo, de ningtin modo puede ser imputado el hecho ilicito
de homicidio simple.
_ 3. TIPICIDAD SUBJETIVA
\ Para configurarse el homicidio simple es requisito sine qua non la concurren-
i el actuar del agente. El dolo exige el conocimiento to y voluntad de
ircunstancias del tipo objetivo, es decir, el sujeto activo debe actuar con
iento dé dar miuerté a su victima y querer hacerlo. La Ejecutoria Suprema
del 19 de noviembre de 1998" conchiyente en este aspecto al sefialar: “Para la
configuracién del delito es preciso constatar en el agente una especial intencionalidad
dirigida hacia la realizacién del resultado tipico; dicha intencionalidad o animus
necandi, importa en el sujeto activo un conocimiento actual de los elementos objeti-
vos del tipo, conocimiento que estd indisolublemente ligado al aspecto volitivo de la
conducta, de modo que conciencia y voluntad, al ser los dos aspectos indesligables del
dolo, deben concurrir necesariamente para la configuracién del delito de homicidioDerecho Penal. Parte Especial 1
simple”®®, En la Ejecutoria Suprema del 17 de octubre de 2007, la Segunda Sala Penal
Transitoria de la Suprema Corte ha precisado que: “para la configuracién del delito
incriminado es necesario corroborar en el agente una especial intencionalidad dirigida
a la realizacién del resultado tipico, esto es, producir la niuerte del sujeto pasivo; que
dicho animus necandi importa un conocimiento de los elementos objetivos del tipo,
que estd ligado al aspecto volitivo de la conducta, puesto que el agente tiene la potestad
de autodeterminarse, es decir, dirigir su accién hacia el fin que se ha representado;
consecuentemente, conciencia y voluntad, al ser dos aspectos indesligables del dolo,
deben concurrir decpunniaet para la configuracion del delito..?09,
Es admisible el dolo directo, el dolo indirecto yel dolo eventual. El dolo di-
recto presupone el gobierno de la voluntad. En él, las consecuencias que el agente
se ha representado mentalmente fueron voluntariamente buscadas y queridas. El
autor quiere matar, emplea el medio elegido y mata.
En el dolo indirecto se producen consecuencias que son necesarias al resul-
tado querido directamente. Adems del resultado deseado, el autor se representa
la generacién de otro, porque est4 inseparablemente unido al primero. Aqui es
conocido el ejemplo de la bomba colocada para matar al Jefe de Estado (resultado
querido directamente), cuya explosién mata, al mismo tiempo, alos acompaiiantes
(consecuencia necesaria que no forma parte del propdsito original). El autor quiere
matar al Jefe de Estado, pero, al mismo tiempo, se representa que con su accion
matard necesariamente a sus acompaiiantes y, frente a esa representacidn, actua.
En el dolo eventual se requiere, ademis de la previsibilidad del resultado
como posible, que el autor lo haya aceptado o lo haya ratificado. El agente, a pesar
de representarse la muerte como posible, no se detiene en su actuar, continda su
accién hacia ese resultado, en definitiva, lo acepta"®. Asume una actitud temeraria.
Se represente el resultado dafioso en. la conducta que viene desarrollando, pero en
lugar de evitarlo o hacer algo para evitarlo, lo acepta y asume.
En otros términos, el agente se representa que con su accionar puede oca-
sionar un resultado dajioso y, sin embargo, lo acepta en forma temeraria y en lugar
de abstenerse o tomar las precauciones necesarias, contintia con su accionar hasta
que se produce el resultado dafioso por él representado y aceptado, Por ejemplo,
comete homicidio con dolo eventual quien disparé una sola vez en la direccién en
——
(13) Exp. N°-4230-98-Puno, en ROJAS VARGAS, 1999, p. 273.
(14) RIN. Ne 2435-2007-Junin, en REATEGUI SANCHEZ, 2010, p.102.
(15) BUoMPADRE, 2000, |, p. 104.12. RAMIRO SALINAS SICCHA
la que iba caminando la victima, y si bien no es posible soslayar que lo hizo desde
un veh{culo en movimiento y a una distancia considerable, también hay que con-
siderar que acepté el resultado, porque cualquier persona.que dispara contra otra
se representa la posibilidad de herirla o matarla.
La realidad no es ajenaa tal forma de cometer el homicidio simple. En efecto,
la Fjecutoria Suprema del 14 de diciembre de 1994 refiere que: “el delito es imputable
al procesado a titulo de dolo eventual, al haber este propiciado una descarga eléctrica
en el cuerpo del agraviado, al conectar energia eléctrica en Ia rejilla del establecimiento
cuando el menor se encontraba sujetado a ella, con la intencidn de asustarlo, sin medir
Tas consecuencias fatales que podia ocasionar; advirtiéndose por las circunstancias del
caso, que el resultado era previsible; por lo que no se trata como erréneamente lo ha
indicado el colegiado, de un delito de homicidio por omisién impropia, sino de uno
de homicidio simple imputable a titulo de dolo eventual’.
Otro caso de dolo eventual y merece ser citado es el caso MAMANI OSCO.
En efecto, segiin la acusacisn fiscal, “se atribuye al recurrente el hecho suscitado el dia
doce de diciembre del afio dos mil siete a las 09:30 horas aproximadamente, consistente
en el derrumbe de uno de los bloques de concreto de la obra en construccién ubicada
en la intersgccién del jirén Prolongacién Italia y Antonio Bazo en el distrito de La
Victoria, en citcunstancias que los operarios se encontraban en etapa de excavaciones
y calzaduras (rellenos de concreto efectuados por debajo de las edificaciones vecinas)
para la futura construccién de un edificio que contarfa con sétanos, estableciéndose
que como consecuencia de dicho desmoronamiento resultaron muertos ocho obreros;
detectdndose asimismo que otro operario sufrié politraumatismo, amputacion del
miembro superior derecho. Hecho fatidico que se le atribuye al procesado Mamani
Oscco, en su calidad de propietario del terreno, sustenténdose dicha incriminacion
en el hecho de haber estado llevando a cabo dicha obra sin contar con las medidas de
seguridad, documentacién legal requerida ni con el personal especializado (Ingenieros
y Maestro de Obra) y pese a tener conocimiento de los davios materiales que venian
causando ert los inmuebles aledafios, ya que segtin obra a fojas 417, uno de los vecinos
colindantes, Genaro Gonzdles Gonzales, dias antes al hecho sub examen, comunicéd
que producto de dicha construccién se habta producido una profunda grieta en el
suelo de su domicilio. Determinéndose asi durante la investigacién preliminar que
como consecuencia de las excavaciones realizadas en la citada obra se inutilizaron
los inmuebles colindantes”. Presentados asi los hechos y debidamente acreditados,
la primera Sala con Reos en Cércel de la Corte Superior de Lima, por resolucién de
(16) Exp. N°3241-94-Callao, en ROJASI PELLA, 1997, p. 152.Derecho Penal. Parte Especial 13
fecha 26 de'setiembre de 2012" considerd que los hechos eran de cardcter doloso en
su modalidad de eventual. En efecto, “en Ia edificacién de una obra riesgosa de gran
magnitud como la que pretend{a construir el procesado, el peligro de ocasionarse un
resultado dafioso era evidente y latente. Peligro que incluso fue advertido por el testigo
Gerardo Gonzélez,no obstante el procesado Mamani Oscco asumié y aceptd, pues pese
ala advertencia no tomé las medidas de precaucin necesarias. Es mds, tal como se
refiere en la recurrida, del estudio y andlisis de los actuados en el presente proceso,
se concluye que desde el inicio de la obra de gran magnitud, el procesado Mamani
Oscco no conté con un plan de seguridad y salud, no se conté con el personal especia-
lizado e idéneo, no se adopté las medidas preventivas aplicables a las condiciones de
trabajo especial y peligroso que se realizaba, y ello ocasioné el derrumbe de la obra
que finalmente origind la muerte de los agraviados, asi como se produjo las lesiones
graves en otro, dafios materiales y estragos especiales. El conocimiento del peligro Ia-
tente de causarse un resultado dafioso se pone en evidencia, cuando los trabajadores
sobrevivientes del hecho fatidico han coincidido en sefialar que el procesado Mamani
Oseco todos los dfas iba a la obra. Algunos han referido que iba a dar drdenes sobre
las excavaciones y otros que iba a supervisar la obra. En consecuencia, el procesado
estaba al frente de la obra”.
No se exige que el sujeto activo tenga un conocimiento especial o especializado de
los elementos objetivos del tipo, es suficiente en aquel una valoracién paralela a laesfera
dé un profano™®, Es decir, una valoracién que nace del sentido comin que manejamos
la generalidad de las personas normales.
En doctrina, se hace referencia comin a que el dolo en el homicidio significa
que el agente ha procedido con animus necandi o animus accedendi, esto es, el ho-
micida debe dirigir su accién o comisién omisiva (final) con previsién del resultado
letal, siendo consciente de quebranfar el deber de respetar la vida del prdjimo™.
El autor quiere y persigue el resultado muerte de su victima.
Cuando se trata de un acto omisivo, el agente debe conocer particularmente
el riesgo de muerte que corre la victima, las posibilidades que tiene para evitarla
y la obligacién de conjurar el peligro®, Si no aparecen tales circunstancias en un
hecho concreto, el autor sera responsable de ser el caso, de homicidio por culpa.
4
‘
(17) Exp, N° 50274- 2007-0, Ponente el Juez Superior SALINAS SICCHA,
(18) VILLAVICENCIO TERREROS, 1991, p.20,
(19) Rov FrevRe, 1989, p. 85.
(20) BaciGALuPo, 1984, p. 230; HURTADO POz0, 1995, p. 32.14 RAMIRO SALINAS SICCHA
No deben confundirse los motivos y moviles que determinaron al agente
a dar muerte a su victima con el elemento subjetivo del tipo denominado “dolo”.
Mientras los primeros son las causas que hacen nacer en el homicida la intencién
de quitar la vida a su victima, el dolo es el conocer y querer quitar la vida a la
victima. El dolo es la consecuencia inmediata de los méyiles. Sin embargo, ne se
requiere necesariamente la concurrencia de algin motivo o mévil para aparecer
el dolo que es totalmente independiente.
3.1. La categoria del error en homicidio
Es lugar comin en la doctrina sostener que con el error de tipo desaparece
el dolo. As{ aparece regulado en el articulo 14 de nuestro corpus juris penale. En
consecuencia, cualquier error del agente sobre los elementos constitutivos del tipo
objetivo al momento de desarrollar su conducta de resultado letal, determinara
que no se configure el delito de homicidio simple. Sin embargo, si el error de tipo
es vencible o evitable, es decir, el agente pudo salir del error en que se encontraba
y as{ evitar el resultado, observando el cuidado debido, la muerte de la victima se
encuadrard en el tipo penal de homicidio culposo.
Enel delito de homicidio simple muy bien puede invocarse el error de tipo,
pero este debe ser invocado en forma adecuada como argumento de defensa cuando
Jas circunstancias en que ocurrieron los hechos indiquen que el imputado actué en
error de tipo, caso contrario, Ja figura no funciona.
LaSala Penal Permanente del Supremo Tribunal por ejemplo, en la Ejecutoria
Suprema del 11 de junio de 2004, resolvié un caso descartando el error de tipo en
homicidio simple. En efecto, “si bien es cierto los procesados coincidieron en el pro-
ceso que el imputado Nicanor Manosalva en forma no premeditada disparé contra
el occiso, toda vez que cuando se encontraban con el agraviado aparecié un sajino y
que al intentar dispararle el proyectil impacté en aquel debido a que se interpuso al
intentar golpear al animal con su machete, sin embargo del andlisis del protocolo de
necropsia se concluye que el disparo fue a una distancia de dos metros aproximada-
mente, no siendo razonable que a una distancia tan cercana se pueda errar en el tiro
teniendo en consideracion que la detonacion se efectud con una pistola”,
Los elementos del tipo también generan otras clases de error. En efecto, te-
nemos el error sobre la persona (error in personam) y el error en el golpe (aberratio
ictus), El primero aparece cuando el agente se confunde de persona sobre la cual
(21) R.N.Ne292-2004-Amazonas, en CASTILLO ALvA, 2006, 1, p. 72.va dirigida la accién de matar, por ejemplo: Francisco quiere matar a su ex amante
Gertrudis, pero por causa de Ja oscuridad mata a Susana que circunstancialmente
yino a dormir en el cuarto de aquella. El segundo aparece cuando el agente por
inhabilidad yerra en la direccién de la accién y mata a otra persona distinta ala que
queria realmente aniquilar (por ejemplo: Oscar apunta con su revélver a Gerardo
y, finalmente, por deficiente punteria, la bala llega a Fernando, que circunstancial-
mente acompafiaba a aquel).
En ambos casos, al sujeto activo se le imputard la comisién del delito de
homicidio a titulo de dolo, con la diferencia de que en el segundo caso, ademas, se
le atribuird el delito de tentativa acabada de homicidio respecto de Gerardo. Esto
es consecuencia de considerar que todas las vidas de Jas personas tienen el mismo
valor. Lo verdaderamente significativo es que aparece en el agente el animus de
matar a una persona), Es ms, el profesor Luis Roy Freyre™), baséndose en el
pensamiento de Giuseppe Bettiol, asevera que la irrelevancia penal del error respecto
de la persona ofendida es perfectamente explicable: las normas penales tutelan los
bienes juridicos pertenecientes a una generalidad de individuos sin prestar especial
atencién a Ja persona desu titular, siendo una de sus perspectivas mds importantes
la proteccién de la vida de la persona en cuanto tal.
Posicién contraria sostiene Felipe Villavicencio Terreros®, quien afirma que
aplicando el concurso ideal (articulo 48 del CP) se resuelve el problema. Sostiene que
en el error in personam aparecera tentativa inidénea de homicidio doloso y homicidio
culposo; en el aberractio ictus, concurre tentativa de homicidio doloso y homicidio
culposo. Para nada toma en cuenta aquel tratadista, el dolo (animus necandi) con que
actiia el agente. El autor tiene pleno conocimiento y voluntad de aniquilar la vida de
una persona. Incluso se prepara suficientemente para lograr su objetivo, cual es lesio-
nar cl bien juridico vida. El objetivo final del autor es quitar la vida de una persona.
Es irrelevante para calificar el hecho punible, determinar qué persona fue afectada
con la conducta criminal del agente, circunstancia que solo se tendra en cuenta al
momento de individualizar la pena.
Los hechos o conductas valen mas por lo que significan en si mismos que por
los resultados que producen. En aquellos supuestos, el agente ha desarrollado toda
la actividad que ha estado en sus manos realizar para alcanzar su objetivo querido,
(22) BRAMONT-ARIAS TORRES/GARCIA CANTIZANO, 1997, p. 43; VILLA STEIN, 1997, p. 43.
(23) Roy Frevae, 1989, p..94.
(24) VILLAVICENCIOTERREROS, 1991, p. 21; 1997, p! 290; 2006, p. 366,16 RAMIRO SALINAS SICCHA
cual era quitar la vida a una persona. Ha cumplido con el iter criminis, Ha realizado
todos los actos que estaban a su alcance realizar para lograr su objetivo final. Hubo
desde el principio intenciéa criminal, siendo que silos hechos producen resultados
en persona diferente a Ja que se queria eliminar, carece de relevancia penal. Es més,
para evidenciarse un homicidio culposo, el agente debe actuar sin el dolo de matar.
No se quiere la muerte de alguna persona. Situacién que no se presentaen el error in
personam nien el aberractio ictus donde el dolo predomina en el actuar del agente.
No es de recibo la posicién de Villavicencio, pues aparte de ser benevolente
con Ja conducta de un sujeto criminal peligroso para el conglomerado social, la
mayoria de las veces puede servir para que personas inescrupulosas saquen prove-
cho, Hevando aguaa su molino, y decididamente aleguen quela conducta homicida
del agente, solo es a ttulo de tentative de homicidio que concurre con homicidio
culposo. La’pena Iégicamente es mucho menor con el comentario negativo del
ciudadano de a pie sobre nuestra administracién de justicia penal.
4. ANTUURIDICIDAD
Al haberse determinado que en la conducta analizada concurren todos los
elementos objetivos y subjetivos que conforman la tipicidad del homicidio simple
previsto en el articulo 106 del Cédigo Penal, el operador juridico pasard inmedia-
tamente a analizar el segundo elemento 0 nivel denominado antijuridicidad. Es
decir, entraré a determinar si la conducta es contraria al ordenamiento juridico 0,
en su caso, concurre alguna causa de justificacién de las previstas y sancionadas
en el artfculo 20 del Cédigo Penal. De ese modo, el operador juridico analizar4
sien el homicidio concreto concurre la legitima defensa o el estado de necesidad
justificante o el agente actud poy uria fuerza fisica irresistible 0 impulsado por un*
miedo insuperable o en cumplimiento de un deber.
En la praxis judicial es frecuente encontrarnos con la legitima defensa como
causa de exclusién de antijuridicidad. Como ejemplos representativos caben citarse
Bjecutorias Supremas en las cuales nuestra Suprema Corte atinadamente ha aplica-
do la referida causal en casos reales, La Fjecutoria Suprema del 24 de setiembre de
1997 expone que: “si bien es cferto que el acusado Ferndndez Carrero acepta haber
disparado contra el acusado Saldatia Mejfa, también lo es que sit conducta cae bajo
los presupuestos de la causal de justificacién prevista en el inciso tercero del artfculo
veinte del Cédigo Penal vigente, bajo la denominacién jurtdica de legitima defensa,
pues es evidente que el acusado Fernindez Carrero ha obrado, no solo para defender
la libertad sexual de su hija, sino también para defender su propia vida, destacdndose
que en el caso que se analiza, nos encontramos ante una perfecta legitima defensa,
\Derecho Penal. Parte Especial ii
pues ha existido una agresion ilegitima de parte de Saldafia Mejfa, quien inicialmente
Jos amenaz6 de muerte, sometis sexualmente a su hija y -finalmente atenté contra su
vida, existiendo racionalidad en la defensa, pues el acusado al momento de disparar se
encontraba herido y presencié la violacién ‘perpetrada contra su hija y no ha existido
provocacién de parte del acusado que ha efectuado la defensa, razén por To que su
conducta se encuentra justificada y debe absolyérsele’?®.
_ También la Fjecutoria Suprema del 27 de abril de 1998 declara exento de
responsabilidad penal al acusado de homicidio por concurrir legitima defensa, En
efecto, pedagdgicamente alli se expresa que: “conforme se advierte de autos, siendo
las tres y cuarenta dela madrugada aproximadamente, del veintisiete de noviembre de
mil novecientos noventa y cuatro, las personas de Ameérico Cristian Espinoza Morales
y Alex Alfredo Estrada. Villanueva, procedieron a sustraer los autopartes de uno de
los vehiculos del encausado Percy Rafael Gibson Frech que se encontraba aparcado
en el frontis de su vivienda, produciéndose ruidos que motivaron que el mencionado
encausado abandonara la habitacién en que se encontraba descansando y de inmediato
tomara su arma de fuego efectuando dos disparos al aire, circunstancias que en lugar
de atemorizar alos agentes patrimoniales, 0 en todo caso les hiciera desistir de su reso-
lucién delictiva, estos procedieron a responder también con disparos de armas de fuego,
generéndose asi una balacera que trajo como resultado que Espinoza Morales fuera
alcanzado por dos proyectiles de bala disparados por Gibson Frech, logrando impactar
una balaen la cabeza y otra en el brazo derecho que determinaron su muerte, tal como
se describe en el protocolo de autopsia obrante a fojas trescientos cincuenta y siete; que,
al haber ocurrido los hechos de la manera descrita, se aprecia que el comportamiento
del encausado Gibson Erech se encuentra amparado en la causa de justificacién de
Ia legttima defensa, prevista en el inciso tercero del articulo veinte del Cédigo Penal,
toda vec que concurren sus elementos configurativos: a) agresién ilegitima, que resulta
de la hora, escenario y circunstancia de los hechos, observandose que los disparos que
efectus el citado encausado estuvieron precedidos por Ia agresién de que era victima
tanto en su patrimonio como en su integridad corporal, mdxime aun cuando el propio
encausado Estrada Villanueva declara a fojas diecisiete y doscientos cincuenta y dos
que fue el occiso quien dio la iniciativa para la perpetracién del ilicito patrimonial y
que con el hecho sub materia sumaban tres ya los robos perpetrados conjuntamente;
b) necesidad racional del medio empleado para impedirla o repelerla: se tiene que los
agentes emplearon arma de fuego en el momento de los hechos, obrando incluso con
la intencién de dar muerte al propietario del vehfculo con tal de lograr su propdsito
ace
Exp. Ne 2493-97-Amazonas, en PRADO SALDARRIAGA, 1999, p. 128.CCR ieee eS Berney ay
como una fuerte emocién producida por la perspectiva de un mal que deja al sujeto
un margen de opcién entre soportar un mal que le amenaza o eludirlo realizando
un acto punible, El miedo es un estado de perturbacién animica mds 0 menos pro-
funda provocado por la prevision de ser victima de un dafio y admite graduaciones:
temor, terror, espanto, pavor y pdnico; en el caso concreto materia de estudio hubo
fundado temor y pdnico ya que la turba de gente enardecida se aproximaba hacia
el procesado Chdvez Bonifaz obviamente con la finalidad de atentar contra su vida
ya que seria ingenuo en otra posibilidad menos grave dado el niimero de personas
que confirmaba la turba dentro de la cual incluso se encontraba gente al margen
de Ia ley y en estado etilico”™”,
Si se concluye que en el homicidio concurre alguna causa de justificacién,
Ja conducta homicida serd tipica, pero no antijuridica y, por tanto, sera irrelevante
pasar a analizar el tercer elemento del delito conocido como culpabilidad.
5. CULPABILIDAD
Si después de analizar la conducta tipica de homicidio se llega ala conclusion
que no concurre alguna causa 0 circunstancia que lo justifique frente al ordenamien-
to juridico, el operador juridico inmediatamente entraré a determinar si aquella
conducta homicida puede ser atribuida o imputable a su autor. En consecuencia,
analizaré sila persona a quien se le atribuye la conducta tipica y antijuridica es im-
putable penalmente, es decir, goza de capacidad penal, para responder por su acto
homicida. En este aspecto, por ejemplo, tendré que determinarse la edad biolégica
del autor del homicidio: “La minoria de edad constituye una causa de inimputabi-
lidad criminal, cuya importancia normativa supone una presuncién legal iure et de
jure que incide en una dimensién biolégica de la persona, por lo que bastard la sola
constatacién de que el sujeto no haya alcanzado la mayoria de edad para fundar la
exclusion de su responsabilidad penal’),
Luego, determinara si tenfa conocimiento que su actuar homicida era antijuridico,
es decir, contrario a todo el ordenamiento juridico. Pero, de modo alguna, se requiere
un conocimiento puntual y especifico, sino simplemente un conocimiento paralelo a
Ja esfera de un profano, 0, mejor dicho, un conocimiento que se desprende del sentido
comin que gozamos todas las personas normales.
tly
27) Exp. Ne 99.0025, en Serie de Jurisprudencia, N° 3, 2000, p. 264.
22} Ejecutoria Suprema del 23 de diciembre de 1998, Exp. N° 4604-98-Lima, en PRADO SALDARRIAGA, 1999,
p. 138,20 RAMIRO SALINAS SICCHA
Al protegerse Ia vida de modo riguroso, no es posible invocar el error de
prohibicién en un caso de homicidio.
En cuanto al error culturalmente condicionado previsto en el articulo 15 del
Cédigo Penal, debido a que Ja vida humana es apreciada en todas las sociedades
y culturas ya sean civilizadas o natiyas, solo puede servir para atenuar Ia pena al
inculpado en razén que la comprensién del cardcter delictuoso de su acto se halle
disminuida. En este sentido, se ha pronunciado nuestra jurisprudencia. De ese
modo, reduciendo incluso la pena por debajo del minimo legal, en Ja sentencia
del 15 de abril de 1999 emitida por un Juzgado Penal de Iquitos se ha establecido
que: “si bien en el proceso y al rendir su instructiva, Tangoa Guerra...; se declara en
efecto CONVICTO Y CONFESO del delito investigado, sertalando que ultimé de
un balazo con su retrocarga, al agraviado SIQUIHUA MASAHACURI; ya que este
venia haciéndole dafio, con la brujeria, impidiéndole formalizar, ademds, su relacién
convivencial con una fémina de nombre HUMANTI: se ha planteado también en la
instruccién y en su defensa, como justificacién a su acto el hecho de que se trata deun
nativo integrante de la Comunidad Quichua del Napo; que ha incurrido en el acto de
eliminacién fisica del agraviado...; en razin de que este segtin sus costumbres ances-
trales, era objeto de dano por parte del agraviado, quien era un BRUJO reconocido
en la zona; situacién ante la que no cabia sino su eliminacién fisica para emenguar
el mal que le causaba...; no obstante tales argumentos... resultan insuficientes para
exonerarlo de responsabilidad penal, por el HOMICIDIO investigado... desde que, el
DERECHO A LA VIDA constituye un bien de superlativa significacién, incluso en
las etnias mds alejadas y de menos desarrollo social: que, siendo ello asi, es claro que
Tangoa Guerra, al quitar la vida a ESP{RITU SIQUIHUA MASHACURI, no solo ha
violentado las normas bdsicas de su entorno, sino las que regulan la vida en sociedad
de entidades ajenas a ella; situacién por la que no corresponde sino sancionar su
conducta en el modo y forma establecida por la Ley”),
En cambio, cuando se,concluya que el sujeto es capaz para responder penal-
mente por su acto homicida y se determine que conocia que su acto era contrario
al ordenamiento jur{dico, el operador juridico pasar a determinar si el agente tenfa
o le era posible comportarse conforme a derecho y evitar causar la muerte de su
victima. Si se concluye que el agente no tuvo otra alternativa que causar la muerte
de la victima, no serd culpable de la conducta Upica y antijurfdica, Aquf nos esta-
mos refiriendo al caso del estado de necesidad exculpante, cuya construccién tiene
(29) Exp. N° 302-98, en Seriede Jursprudencia, Ne3, 2000, p. 201. Igual criterio se esgrime en la Sentencla 17
de febrero de 1999, Exp. N° 173-98, en PRADO. SALDARRIAGA, 1999, p. 193.
ai ahi iaiia atta celeste