matar artsticamente sus poemas en vs de un dilatado nmero de siglos. 1.
"Demonios haciendo de juglares'1
rabe o hebreo. Su lengua, mezclada Y el hecho de que diversas moaxajas (del Breviario de amor de Malfr siempre con formas rabes (lo que utilicen jarchas idnticas o con breves de Aumenjaud, s. XIII; Biblioteca prueba que los poetas hebreos se li- variantes, constituye la prueba deci- de El Escorial) mitaron a recoger textos mozrabes siva de su tradicionalidad (es decir, populares e imitaron a sus cofrades de su vivir en variantes a travs de las 2. Juglar que llega a la casa rabes), no es castellano. Se trata del generaciones), y del asombroso mila- de un caballero, segn el manuscrito dialecto romance hablado por los cris- gro de un pueblo que recrea motivos escurialense de las Cantigas tianos del sur de Espaa, que vivieron siempre reiterados. Las jarchas ade- bajo dominacin poltica y cultural ms vinieron a confirmar las exactas musulmana durante varios siglos, y se hiptesis menendezpidalianas, as co- denominan mozrabes. Habla muy ar- mo se han constituido en la prueba in- caica, ha permitido conocer palabras directa de la existencia de un lirismo documentadas por primera vez en la castellano antiguo. En su ltimo libro historia del romance hablado, en An- sobre el tema Garca Gmez, que pu- daluca. blica y traduce por vez primera las Los textos son verdaderos poemillas moaxajas y las jarchas correspondien- de dos, tres o ms versos breves, de tes, escribe: "Modesta pero firmemen- tema casi siempre ertico, puestos en te sostengo, al lado de muchos otros boca de muchachas enamoradas que estudiosos, que las jarchas constitu- cuentan a su hermana o su madre, pe- yen sin meternos ahora en precisio- nas de amor. Temticamente son muy nes una rama de la literatura ro- parecidas a muchas cantigas de amor mance; que son la comprobacin pal- gallegas y a ciertos villancicos caste- maria de la existencia, genialmente llanos recogidos en los siglos XV y postulada por Ribera, de una litera- XVI. Su mtrica presenta, adems, tura romanceada en Al-Andalus, cada asombrosas similitudes con la de los vez ms afirmada adems por otras textos castellanos. fuentes, y que entran, en su gnesis, Las jarchas han sido el elemento pro- en su estructura y en su desenvolvi- batorio decisivo que haca falta para miento, dentro de lo que Menndez Pi- demostrar la persistencia de la tradi- dal ha definido como poesa tradicio- cin potica espaola extendida a tra- nal ...".