Conozca a la marmota alpina Un agudo silbido corta el aire. Suena como la llamada de un muchacho a otro, pero mucho més fuerte. Sus ecos rebotan en las montahas impidiendo saber de dénde viene. Entonces veo a un pequefio roedor peludo que se lanza como. una flecha hacia una madriguera cercana. Una rapida hojeada a mi manual me confirma que acabo de ver y ofr a una marmota alpiASE los dias siguientes conociendo a es- tos roedores peludos: qué rocas prefieren para tomar el sol, dénde se ubican sus madri- gueras principales y cémo sobreviven al duro entorno situado por encima del limite fores- tal Cooperacié6n familiar y vigilancia Las marmotas no tienen una vida facil en los pastos alpinos. Los inviernos son frios y su habitat suele estar cubierto de nieve duran- te meses. Ademiés, tanto en el suelo como en elaire hay depredadores que las acechan. Asi que para sobrevivir dependen de la coopera- cién, la planificacién y la Vigilancia Su vida gira en torno a la familia, que por lo general est formada por la pareja repro- ductora y las crias. Cada familia cuenta con varias madrigueras: una le sirve de hogar, y las otras, de refugio en momentos de peli- gro. A veces las excavan en grietas situadas bajo grandes rocas. Estas fortalezas de pie- dra les ofrecen torres de observacién estra- tégicas, asi como terrazas para tomar el sol y relajarse. La presencia de la marmota anade encanto a las praderas alpinas, y su cooperacién familiar atestigua la sabiduria del Creador. (saimo 50:10) Las marmotas se toman en serio la higie- ne. Utilizan una madriguera aparte para su asco, y asi mantienen limpia la que sirve de hogar. En un extremo de la madriguera prin- cipal preparan una mas grande, que acolchan con hierba. Esta proporciona un ambiente se- guro cuando la hembra da a luz y ademas sir- ve de cdlido refugio donde toda la familia se apifa durante el prolongado letargo invernal. Es posible que la responsabilidad familiar mas importante sea la vigilancia. Mientras otros miembros de la familia recogen alimen- to en las cercanias, una marmota adulta ac- tia de centinela, Para comprobar si hay peli- gro, a veces se levanta sobre sus patas traseras a fin de inspeccionar mejor los alrededores. Sus principales enemigos son las dguilas, los zortos y los seres humanos. Su presencia, 0 simplemente la vision de cualquier ave rapaz grande, hard saltar la alarma. Resulta intere- sante que empleen una sefal especifica para el Aguila, su principal depredador alado. Ante una llamada de alarma, las marmotas corren. a esconderse. Parece como si se las hubiera tragado la tierra. iDespertad! Octubre de 2010 11La obediencia puede significar la diferen- cia entre la vida y la muerte, sobre todo en el caso de las marmotas jovenes, que son un pla- to favorito de las aguilas doradas. Si la ame- naza parece inmediata, la centinela se escon- de en una madriguera cercana con las demas. Luego, transcurridos unos minutos, asoma la cabeza con mucho cuidado para ver si ha pa- sado el peligro. Saben mantenerse frescas y dormir bien En las altas praderas donde habitan, las marmotas alpinas encuentran mucha hierba para alimentarse y un clima suave en verano. Si refresca, toman el sol sobre alguna roca ¢é- moda. En cambio, les resulta mas dificil com- batir las temperaturas elevadas, pues no pue- den quitarse su abrigo de piel, Por esa razén, suelen estar mas activas a primeras horas de Ia manana y a ultimas horas de la tarde. Desde luego, no puede decirse que tengan problemas de insomnio, ya que su letargo dura unos seis meses. El de la marmota silba- dora, una de sus parientes, se prolonga hasta nueve meses. Durante el letargo, su corazon Jate tan solo una o dos veces por minuto, y su temperatura desciende a unos 5 °C (41 °F). Es comprensible que un ayuno tan largo re- quiera preparacién. Durante el verano y prin- cipios del otoho comen vorazmente para ad- quirir reservas de grasa que les durarén todo el invierno. Las marmotas jévenes son juguetonas y les gusta correr en circulo persiguiéndose unas a otras. Tuve la oportunidad de ver cémo un grupo de tres crfas rodaba por una pendiente de hierba mientras simulaban una pelea. Sin importar su edad, todas se saludan frotando- se las narices; ademas, los miembros de una misma familia se asean unos a otros y, si hace frio, se acurrucan para mantenerse calientes. Las marmotas se preparan para el futuro y se mantienen alerta ante un posible peligro (Job 12:7). Las familias humanas tal vez pue- dan aprender de estos roedores. 12 jDespertad! Octubre de 2010 Mientras otros miembros de la familia recogen alimento en las cercanias, una marmota adulta actiia de centinela