15/03/09
ADORACIN QUE SANA
Mientras lea al escritor cristiano Charles Swindoll en uno de los captulos de su libro
El misterio de la voluntad de Dios, encontr algunos prrafos que me llamaron
fuertemente la atencin referidos al tema de la adoracin a Dios:
Recuerda como fue probado Abraham? Aconteci despus de estas cosas, que prob Dios a
Abraham, y le dijo: Abraham. Y l respondi: Heme aqu. Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu nico,
Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrcelo all en holocausto sobre uno de los
montes que yo te dir. (Gnesis 22:1-2).
A primera vista parece que Dios estuviera siendo muy cruel. Abraham haba esperado ms de 25 aos
para recibir a Isaac, y ahora l siendo ya un adolescente, le ser quitado? Era este el plan de Dios
desde un principio: dar para quitar? La decisin de obedecer de Abraham, seguramente que no fue
tomada sin angustia; sin embargo, prevaleci la confianza que Abraham tena en el Dios que aprendi a
conocer desde que fue llamado a salir de Ur de los caldeos. El vio la fidelidad de Dios. Experiment la
seguridad que proviene de relacionarse con Dios (Gnesis captulo 12 hasta 22).
Para no dejar sin respuesta a las preguntas de arriba, diremos que el propsito de Dios, en ese
momento, para Abraham, era un misterio. Pero note la respuesta que da a sus siervos: y yo y el
muchacho iremos hasta all y adoraremos, y volveremos a vosotros. La confianza de Abraham era
de adoracin, y estuvo expectante hasta el ltimo momento para ver qu hara Dios! Este modelo de
fe qued como herencia para todos nosotros, los creyentes. Pablo escribi de ello: Porque qu dice
la Escritura? Crey Abraham a Dios, y le fue contado por justicia Por tanto, es por fe, para que
sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia El crey en
esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le
haba dicho: As ser tu descendencia. Y no se debilit en la fe Tampoco dud, por
incredulidad sino que se fortaleci en fe, dando gloria a Dios, plenamente convencido de que
era tambin poderoso para hacer todo lo que haba prometido Y no solamente con respecto a l
se escribi que le fue contada, sino tambin con respecto a nosotros a quienes ha de ser
contada, esto es, a los que creemos en el que levant de los muertos a Jess, Seor nuestro, el
cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificacin.
(Romanos 4:3, 13, 16, 18-25).