EDITH STEIN
San Bernardo
Nos dice Edith Stein que slo se percibe el morir del hombre
sensible sin que se rastree la irrupcin de una nueva vida que
en ella se esconde. No es ninguna exageracin si llamamos
crucifixin a los sufrimientos del alma en este estado. Se
encuentran como clavadas en su incapacidad de usar sus
fuerzas (11).
Pero los santos, que son los nicos que conocen la verdadera
psicologa de las almas perfectas, nos ensean otro camino:
es el camino de la fe, que no pertenece al plano de nuestra
razn natural, sino que se mueve en un plano superior.
Cuando un cristiano quiere realmente serlo y, por lo tanto,
con la ayuda de la gracia que lo previene, emprende el
camino de la purificacin que luego Dios culminar, notar en
s la inversin psicolgica ya mencionada y ver como la
inteligencia no actuar ya segn lo que se le ofrece desde el
exterior, sino que la fuente de todo conocimiento provendr
del fondo de su alma.
Pero, por qu esta rebelin? Edith Stein nos dice que cabe
pensar que la causa de esta ceguera y de la incapacidad de
llegar a lo profundo del alma no reside simplemente en una
obsesin en relacin a algunos prejuicios metafsicos, sino en
un inconsciente miedo a encontrarse con Dios(23) .