EPISTEMOLOGIA
Légica y mecanica cudntica
adala amplitud del tema
D fos proponemos abor-
darloa través del andlisis
de un ejemplo representativo de
las tareas que cumplen los inves-
tigadores en lgica matemitica en
relacién con el quehacer cienti
coenel campo dela ciencia fisica.
De esta manera nos apartamos de
tuna estrategia cuasi tradicional
que consiste en abordar fa tema-
tica propuesta examinando direc-
tamente propiedades generales
del lenguaje cientifico, o del mé-
todo de investigaci6n cientifica,o
de las teorias cientificas, entre
otras opciones posibles.
Naturalmente, considerando el
espacio del que disponemos y el
hecho de que no nos dirigimos
exclusivamente a un auditorio de
estudiosos de Ia !ogica, debemos
renunciar a lo que podriamos lla-
mar "tecnicismos formals" y re-
mitimos a la exposicién de resul-
tados sin entrar en detalles de-
mostrativos, los mismos que en
‘este caso seran reemplazados por
sugerencias intuitivas. Asimismo
consideramos que aunque nues-
tra argumentaci6n estard limitada
aunejemplo, éste sera losuficien-
Temente representativo y signifi-
cativo como para que nuestras a-
firmaciones posean un nivel acep-
table de generalidad y de esta
suerte no den cuenta de un acci-
dente en Ia actividad del 16gico
sino de una manera mas o menos
permanente y tipica de contribuir
al desarrollo de la ciencia en su
conjunto.
‘Nuestro interés se ha centrado
en los problemas tanto cientificos
como filos6ficos surgidos a pro-
* Profesor principal del Departamento Acadé
‘ico de Plosofs, UNMSN.
16
Wemer Heisenberg (1901-1975)
pOsito de ia formutacion dela me-
cénica cuntica debida a Werner
Heisenberg, quien entre 1922 y
1976 publics aproximadamente
200 articulos sobre el tema y alre-
dedor de una docena de libros.
Precisar cual de estos trabajos es
el mas adecuado para un analisis
de la mecénica cuantica desde el
punto de vista logico es tarea de
especialistas. Nosotros asumire-
‘mos como autorizadas la eleccién
hecha por Kazuo Yamazaqui, cola-
borador de Heisenberg, en Su ar-
ticulo "Uber Heisenberg Bemihn-
gen um eine Theorie der Elemen-
tarteilchen" (contenido en Denken
und Umdenken, 8. Piper und Co.
Velarg, 1977) y la eleccion hecha
por Stegmiiller para exponer un
resultado debido a P. Suppes en
su libro Theorie und Erfabrung.
Esta expasicién toma como refe-
rencia el trabajo de Heisenberg
titulado Physikalische Prinzipien
der Quantentheorie (Mannheim,
1958).
s un hecho conocido que la
formulacién de la mecanica cuén-
tica ha sido objeto de interpreta-
Ciones divergentes y diversificadas
como lo ha sefialado Bunge en su
recuento titulado "The interpre
Luis Piscoya Hermoza*
tation of Heisenberg’s Inequalities"
(contenido en Denken und
Umdenkeri)
El punto de partida de esta
discusién radica en la conocida
desigualdad de Heisenberg ex-
presada usualmente a través de la
formula Ap,. Aq, 2 h/2n ala
misma que'su autor Hamé rela-
ci6n de indeterminacin (Unbes-
timmibeitrelation ). En términos
generales unas interpretaciones
encuentran en esta relacién una
limitacién gnoseol6gica para el
conocimiento objetivo del mun-
do fisico, mientras que otras con-
sideran que se trata de una pro-
Biedad objetiva que gobierna el
mundo de las microparticulas y
que de esta manera se establece
una diferencia cualitativa con el
mundo macrofisico que estaria
causalmente determinado.
Bl origen de esta divergencia
radicaria, segiin el propio Heisen-
berg, en el hecho de que muchos
investigadoresen fisica todavia se
‘encuentran apresados mentalmen-
te por el lenguaje de la fisica cla-
sica y contintian hablando de mi-
croparticulas y de division o frag-
mentaci6n de microparticulas en
un dmbito en el que no tiene sen-
tido establecer analogias con los
objetos macrofisicos.
En este sentido, Heisenberg
recomendaba como primer pre~
cepto metodolégico para la cons-
trucciGn de una teoria del campo
unificado que los operadores y las
ecuaciones no se refieran a parti-
cula especifica alguna como
prot6n, mesén, etc. sino a la ma-
teria en general. En todo caso las
microparticulas no deberian ser
conceptos primitivos sino deriva-
dos a modo de soluciones parti-
culares 0 especificas de las ecua-
ciones del campo. Bunge se incli-
MAGISTRI ex DOCTORES 5° 11 Enero-Febrero 1995naen la misma direcci6n y atribu-
ye la génesis del debate a un in-
tento forzado de utilizar un len-
‘guaje clasico para describir proce-
808 que deben ser vistos a una luz
totalmente nueva, esto es, con un
nuevo aparato conceptual.
Sin embargo, nosotros pensa-
‘mos que el hecho de que la for-
mulacién de la mecénica cuantica
se abra a interpretaciones contra-
pvestas podria tener, ademas, cau-
sa8 que residen en la estructura
Jogica de la teorfa misma, Esto es
Jo que habria demostrado P. Su-
pes en su articulo titulado "The
Probabilistic Argument for a Non-
Classical Logicof Quantum Mecha-
nics" (en Philosophy of Science,
33, 1966). En este trabajo se de-
muestra cémo ¢s posible cons-
truir una contradicci6n dentro del
lenguaje probabilistico usado por
la mecénica cudntica interpretado
‘enuntuniverso desucesos oeven-
tos cudinticos. Bi nticleo del argu-
mento de Suppes radica en pro-
bar que la utilizacin de la teoria
standard de la probabilidad, que
tiene una estructura booleana, re-
sulta inadecuada para expresar
sucesos, cudnticos debido a que
dentro de ella para cualquier par
de distribuciones de probabilidad
se puede encontrar siempre su
conjuncién 0 producto que es a
su vez una distribuci6n de proba-
bilidad.
Sin embargo, en el ambito de
Jos sucesos cudnticos es posible
asociar una distribuci6n de proba-
bilidad a cada uno de ellos pero
‘no siempre ocurre que exista una
distribucién de probabilidad co-
mn para cualquier par de ellos.
De esta manera se produce una
inadecuaci6n entre las propieda-
desdel lenguaje probabilista stan-
dard y las propiedades de los su-
cesos que se pretende describir,
Jo cual produce contradicciones.
El anilisis de Suppes también
permite probar que si se realizan
algunos reajustes en la teoria nor-
mal de ta probabilidad, esta difi-
‘cultad podria ser superada. Esto
nos conducirfa ala creacién de un
tipo de l6gica no-clésica denomi-
nada logica cudntica que seria dis-
tinta basicamente en susreglas de
formacién pero no en las de de-
dluccién. Asimismo Stegmiller ha
anotado que Sneed ha propuesto
superar esta dificultad dentro de
marcos estrictamente Clasicos @
través de la generalizacin del
concepto de probabilidad condi-
ional.
El trabajo de Suppes es un ¢-
jemplo de Io que pueden hacer
los légicos en provecho de la ri
gorizacién del trabajo cientifico
sefialando fuentes de controver-
sia que parecfan haber pasado de-
sapercibidas para los fisicos aun-
que no totalmente para Heisen-
berg, segiin lo ha referido Bunge
en el articulo antes citado.
En efecto, en una conversa-
cin casi incidental, Heisenberg
le habrfa expresado @ Bunge la
necesidad de una légica cudntica
pero al propio tiempo su desco-
nocimiento del tema. La misma
preocupacién la habria tenido an-
tes Birkhoff y von Neumann pero
sin resultados significativos.
Stegmiller al expresar el resul-
tado de Suppes también nos en-
trega un resultado légicosorpren-
dente por su sencillez. Prueba
que enire la desigualdad de Hei-
senberg antes citada y la interpre-
tacion que normalmente se le da
enlostextos de fisica y de filosofia
no existe relacién de consecuen-
‘cia logica. Vale decir, la interpre-
taciGn tradicional puede apoyar-
se en razones de hecho pero logi-
camente es tan justificable como
su negacién. O
éHubo una revolucién
copernicana?
ue precisamente con este
| peers
mundo Casas Navarro,de
Ia UNMSM, presenté una ponen-
cia en el congreso nacional de
filosofia realizado en la ciudad de
Arequipa, y que posteriormente
seria publicada en la primera edi-
cién de este boletin
Expuesta, sucintamente, 1a po-
nencia del profesor Casas sostie-
ne lo siguiente: una revolucion
Gientifica se define como una rup-
tara radical con latradici6n vigen-
te. Latradici6n antigua de la astro-
nomia, vigente en la época de
Copémico, reposé sobre el prin-
cipio de la perfeccién, que fue su
niicleo basico. Pero el sistema del
autor de De revolutionibus no
* Profesor Asociado del Depanamento Acad
mica de Plosota, UNMSM
‘MAGISTHI er DOCTORES 1° 11 Enero-Febrero 1995
Carlos Alvarado de Piérola*
alacé en ningtn momento e! prin-
cipio de perfeccién; sélo sustituyé
una teoria auxiliar, el geocentris-
‘mo, por otra igualmente auniliar, el
heliocentrismo. Por este motivo no
puede decirse que el sistema inau-
gurado pot Copémico produjo una
ruptura radical con la tradici6n an-
‘igua. En consevencia, contraria-
mente alo que exageramente se ha
venidososteniendo, nuestro perso-
naje no produjo revolucion cient
fica alguna; mas bien representé
tuna defensa de la tradiciOn, antes
que una revoluci6n contra ésta.
Reconocemos que esta tesis
posee los méritos de ser original,
consistente y estar bastante bien
fundamentada. Sin embargo no
‘compartimos la condlusiGn.
Por este motivo, aqui imenta-
remos demostrar que:
1. Si hubo revolucién coperni-
cana,