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Historias de la Eucarista: El milagro de los peces

ADAPTACIN DE CEF NARRACIONES

En una noche de julio de 1348, una tormenta amenazaba el pueblito de Alboraya. En una sencilla casa, un hombre
moribundo esperaba el sacramento de la Eucarista; el prroco del lugar saba cun necesario era para el enfermo
recibir el socorro del Cuerpo de Cristo y hacia all se dirigi apresuradamente...
Cuando el prroco administr el sagrado sacramento y se dispona a regresar a la parroquia, empez a llover...
Apretando fuertemente contra su pecho el cliz con tres hostias consagradas, corri de regreso a la parroquia. El
camino estaba completamente embarrado y tena que atravesar un pequeo ro que solo tena como puente un
exiguo tabln de madera. La crecida del ro llegaba hasta el tabln; no obstante el prroco decidi cruzarlo... pero a
mitad de camino resbal y cay, perdiendo el cliz con las hostias consagradas que la corriente se llev ro abajo.
Desesperado, el prroco se arroj en pos del cliz tratando de rescatar las tres hostias... pero fueron vanos sus
esfuerzos y el cliz desapareci en el agua.
Muchas personas del pueblo ayudaron al prroco esa noche para encontrar el cliz. Ya al alba, lograron hallar el cliz,
pero... estaba vaco!
Cunta pena ante la prdida de las hostias consagradas!
Las buenas gentes del pueblito organizaron actos de reparacin y honra a la sagrada Eucarista. El Seor vio su fe y
se apiad de ellos respondiendo con un gran milagro...
A la luz de la aurora, en la desembocadura del ro en el mar, todas las gentes del pueblo observaron extasiados tres
pececillos erguidos contra la corriente... Cada uno sostena una hostia consagrada en su boca entreabierta. Todos
cayeron de rodillas y con el corazn inundado de felicidad y amor por la Eucarista, dando gracias y alabando al
Seor mientras los peces se mantenan inmviles en medio de la corriente.
Mientras la muchedumbre cantaba al Seor, los peces se acercaron a la orilla depositando las tres hostias en las
manos del sacerdote. Entonces, todas las personas se dirigieron en procesin hasta laleer laTambin podis de El
potico milagro de los peces de Alboraya

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