Hoy se celebra hasta el empacho el centenario de la Revolucin Rusa,
hecho histrico de trascendencia mundial para los obreros que combatimos al capitalismo. Sin embargo, no es tarea principal de la clase obrera remitirse al pasado, sino mirar el presente y, especialmente, el futuro. No nos debe importar tanto lo que ocurri hace 100 aos, sino lo que vendr. Por supuesto que hay que preguntarse sobre los aciertos y errores (esto ltimo no suele hacerse seguido en los partidos trotskistas) de aquella impresionante ola revolucionaria, pero la pregunta epocal es otra. Lo que la clase obrera debiera preguntarse ya mismo es cunto tiempo dispone para tomar el poder y dar vuelta definitivamente el rgimen capitalista. No hacerse esta pregunta, siendo un obrero consciente, es convertirse en un religioso. Si el tiempo y las oportunidades se dilapidan como hasta ahora, los obreros del mundo debern buscar estrategias en Mad Max ms que en la Revolucin Rusa. Menos historicismo y ms praxis revolucionaria, que segn los expertos el 2050 est a la vuelta de los homenajes.