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Conversacion, lenguaje y posibilidades Un enfoque posmoderno de la terapia Harlene Anderson Amorrortu editores Biblioteca de psicologiay psicoandlisis Directores! Jorge Calapinto y David Maldavaky Conversation, Language, and Poeibilities A Postmodern Approach to Therapy, Hiariene Anderson ©'Basic Books, por acuerde con HarperCollins Publishers, Ine. 1997 ‘Traduceién, Jorge Colapinto Unica edicin en castellano autorizada por Basic Books, Nue- vva York, y debidamente protogida en todos los pices, Qs 4s hocho ol depésito que previone la loy n® 11.723. © To. {oa Tom derechos de In edickin en castellano reservados por ‘Amorrortu editores S.A., Paraguay 1225, 7 pio, Buenos ‘ives {La reproducsiém total o parcial de este Iihro en forma idéati- io modificada por cualquier medio mecénico 0 electrénico, Incluyendofotecopia, grabacién o cualquier sistema de alma” cenamiento y recuperacién de informacién, no autorizada por loa editores, viola derechos reservadoe: Cualquier ut. Meacign debe ser previamente solicitada. Industria argentina. Made in Argentina ISBN 950.518.0799 ISBN 0-465-03806-0, Nueva York, edicion original ROWED. AS3/8 S. 938904 we TARAGOTA TImpreso en los alleres Graficos nda, provincia de Buenas Aires, en septiembre de 1999, or Efe, Pazo 192, Ave ‘Alla memoria de Harold A. Goolishian, amigo, colega, gute: ‘mi maestro, como lo fue de tantos otros. Ya los que conversaron conmigo en Noruega septentrio- nal, el Instituto Galveston de Houston y el consultorio de t- ‘epla, y aet colaboraron en hacer postble ete libro, N299990- Indice general 1 Reconocimientas 18 Prelogo, Lynn Hoffman 21 Prefacio| 25 Primera parte La creacin del espacio: el vaivén entre teorta y practica (Cambios en la cultura de la terapia; una posture filosien 91 “Simi historia puede ayuda.» 1. Cobotlas y piramides 2. Bspacios mas abiertos: de las tradiciones ‘modernas a las posbilidades posmodernas 88 Segunda parte, La coproduccién de sistemas de Tenguaje, de relaciones y de proceso: socies en un didtogo 5 Sabrina {1 S.La preparacién del escenario AAD), 4. Los sistemas terapéaticon como generadores de EO ee Bit penis pera Ppenns cia oeiseae GD 6. La terapia como conversacién dialégica Pra vorkel cette anes pat detox Zaperis pert te eavemeds atop s ve vas Sits adeetocne’ a madre mala 255 264 276 207 19, maa 347 10 ‘Tercera parte. La blsqueda de significaciones en las significaciones Simi historia puode ayudar...» (continuacién) 8, Conocimiento y Lenguaje 410. Narrativa propia, identidad propia, autonomia (Cuarta parte, La ampliacién del espacio sDisolver Ia marejada como si 11, Més allé do una terapia pomoderna Reflexiones do ida y vuelta, Referencias bbliograficas Reconocimientos Conoes a Harry Goolishian en 1970 y pronto iniciames ‘una colaboracién profesional y una amistad que durarian ‘unos veinteafior, hasta wa muerte en 1991, Nuestro trabajo ‘conjunto se centré en la fundacién y el desarrelle del Gal ‘veaton Family Institute (actuslmente el Houston Galveston Tstitute), vehfeulo para ofrecer servicios clinieos y de en- trenamiento en psicoterapis, explorar los fundamentos de Ia teoriay la practic, y cuostionar nuestras propias ideas ¥ Jae de otros desde nuestra experiencia y nuestra préctica ‘Basie Books nos invita eacribir juntos un Ubro sobre ‘nuestras contribuciones a la teoriay la préctica de la tora- pla familiar, pero Harry murié antes de que pudiéramos ‘Empezarlo. Bn los cinco anos que han transeurrido desde ‘entonees, el campo de la torapia familia, como también mi ‘prieticn y mi ponsamiento, han segulde cambiando. Harry, {que por sobre todas laa cosas era un intelectual radical © Inconformista, habria aprobado un cuestionamiento de eu ideas y las de otros, y habria partcipade activamente en 6 ‘como lo hizo toda su vida. Le debo mucho a ly a neat Solaborecice. “Mis colegas del Houston Galveston Institute y otros en varias partes del mundo constituyen mi sistema primordial ‘de concelmiento, Elles han aide los compateraa de conver ‘sacion cuyas voces influyeron el desarrollo, la presentacion, ‘lcuestionamiento y la expansién de mi teoriay mi préct fa. He mantenido convereaciones y relacianes prolongadas fon algunce, y broves charlas con otros, en eiertos casos hay 0 muche tiompo yen otros casos mas recientoment, Todas hhan sido sigmificativas, Agradezco a Tom Andersen, Paul Burey, Diana Carleton, Gianfranco Cecchin, Dan Creson, Anna Margrete Flam, Kenneth Gergen, Lyan Hoffinan, Kerstin Hopatadis, Atiene Kats, Susan Levin, Sylvia Lon- don, Susan MeDaniel, Einar Onitsland, Karen Parker, Peg n ‘gy Penn, George Pulliam, Jamie Raser, Bjorn Reigstad, Ha- ‘riet Roberts, Sallyann Roth, Susan Swim, Phil Tory Ka- thy Weingarten. Todos me han ayudado y obligado a expli- ccarme, me han apoyado ofrecdo la posibilidad de ello. Dar jantos en numerosna situsciones memorables Muchos otros colegas, estudiantes, y sobre todo clientes quira nunca Sepan cmos sobre ana pregunta, ua comentario, ‘on euestionamiento planteados en un seminar, en unt ‘evaluacion ecerita, en una seaion terapéution on ana sin ple conversacién. Me considero una persona que aeepta ‘tras; pido disculpas a aquellos que debt nombrar pere que ‘aron excluidor, Varias conferoncias, bautizadas por Lynn Hofinan con ‘lnombre de la universidad viajes, han sido cementerios| onde fueron enterrados algunos pensamientoe y pasiones, ¥yterrenos fetiles donde florecieron otros. Bntre ella sei ‘luyen las conferencias sobre -Epistemologia, picoterspia, { poleopatoleyias (1982) y sobre . legas inquisitivos que euestionaron paradigmas familiares 28 ly exploraron Ins fronteras de nuovos paradigmasilsituacio- ‘hee de ensehanca donde Ia maestra tambien era arendiziy ‘oportunidad de alverar con representantes Gndividuos, Familias, sistemas amplioe y organizaciones) de una vasta {gamma de entomnos socioeconémivos, cuturalesy étnicos que Dasaban por muy diversas difcultadea en su vida cotidiana, “Tanto mi enfoque colaborative posmoderno como este 1ibro se hasan en las siguientes premisas Slosoficasr) 1 Los sistemas humanoe son sistemas de generacién de * cnguatey sentido. 2, Son mie formas de accén socal que procesos menta- ies individualesindependientes cuando construyen ree: Ta 8. Una mente individual os un compuesto social, y por lo {anto el propo sor es wn compet seca, relaconal 4 Leresliied’y sentido que ‘now atibaenos ye sr Deimos a cteuy alas experienias y aconecinientas de fucstra vida ten fendmenos interacelonales creados ¥ ‘Yvenciadoe por individuos en una converaacin yaceiéa ‘on otro can nosotros 6, Erlang es gonerador a orden y sentido @ nuestra vida y'a nuestro munde,y opera como una forma de pacts onc 6 Enconscimionto ov roacionl eat insert ono longue ~Je,y metas prdconscotidanas donde también vege De estas prem toda empresa humana y para quienes participames en esas fempresas, expecialmente, pars la terapia y los terapeutas: (que pensaimoe de los sores humanos y'de nuestro papel en Su vida, cdmo penisamos 9 participamos en un sistema tera ‘eutjeo, en el proceso de In torapia, en la relacign torapeu. {ea Baas premises diferencian mi Blasofla y précticacolee tivas de otras versiones posmodernds, e implican un mov fniesto en Ins definiciones de sistema social, proceso tera peutic, y poscisn de la terapeuta Desde Htocia ‘Vin sistema basado on ol con- tetxy producto deacon Un sistema social definido, or una ecewtturs de rales 29 Desde ‘Un ssteme compuesto por en tdividuo, una pare 0 na fannie ‘Una organizcion y un proce no jerarquicosdirgidos or in terapeuta| ‘Una relacign duatints entre ‘mn expertoy un ooveperto ‘Una terapeta que saboy que dseubro y recage informa: ‘ny dntoe tlafocha que ache cémo otros Aeborian vivir ‘Una torapia contrada on cleo- ‘ocimiento impartido y en fina bunqueds dein causal ast Una terspeuta segurs de 1o ‘gue sabe (osnee ue sabo. ‘Una terepouta que opera dee- Y'pensamientor privaoe 7 privlegiados hist, eon eapacidad eatra- ‘tea y tence Persona u oto mismbro de 20 Hosia Un sistema compuesto porin- divides interrlacionados 8 freer de lengusje [Una postura flosifen tera- ‘eatien que invita ena elim y un proceso ealebo- Une sociedad colectiva en- Une torapeuta experts en ‘rear un capaci para ol di logo y on fecltar ol proceso aintogico Una torapia centrada en ge- hnerar posibilidades y en ‘Saree en las contribucionee yin erentvided de todo oe Ua terapeuta ineegura para ‘quien el conociiento esta ‘Reonctanta deaarvalo Una torapeuta que hace pac ‘ico, eompartey reflexions fausconocitlenten:supuco” tes, pensamientor, pregun: tas y opiniones ‘Una ingusicéa compartida ave depende de as capac ‘Andee te toon to parc Un cambio o una tranafirma ‘Sn natural de un dtloge ge orativa Deale ‘Una terapia con persone ‘bien dellmitedas, dotedas ecemnimnos nuclares ‘dnd que investiga otros {ste libro ve ocupa de por qué y ome plenso que estas pro- Tas cama la clra dn ean y cues von Ss iy plicancias.JPara mejor situar mi losofa y mi préctica otieas ecert ini percepelon de los cambios ocurridos en ‘campo de la peicoterspia, especialmente la terapia fami- liar, yuna ertiea de los paradigmas teéricos y los modelos Dréctcos actuales.Pero antes, haré una pausa para narrar In historia de una madre. Simi historia puede ayudar. ..» En una gélida y cristalina tarde dominical fui recibida ‘on ol seropterta por mis encantadores anftriones suecos, Gustat y Kerstin, Intercambiamos afectuozos saludos, ¥ pronto nos pasimos a hablar sobre el seminario para tera outas del que todos participariamos al dia siguiente. La Shice pausa en la canversacion ocurrié earnino del hotel, Inmediatamonte antes de que Gustaf me preguntara, con ‘guna vacilacion, si estaba dispuesta a conducir una sosién Ge consulta con una familia esn misma tarde. La idea era {grabarla entrevista en video ywtilizaria como punto de par fda para el seminario, Como no sey de la que dejan pasar la oportunidad de tener una buena conversacién, ncepte Una llamada telefénica ala familie sirvie para confirma el Togary la hora. ‘Paltaban dos horas para la sesiGn. Gustaf y Kerstin me proguntaron ai preferia descansar ocomer algo. Aunque ha- Bia viajado trace horas 9 mi cuerpo aneiaba una siesta, xo ze onitia aprestada para la acciin-, como dice Lynn Hott ‘man. Eloi conar con mis anfitriones. Comimos en in barco onvertido en restaurante gobre el ri que cruza la ciudad, Era el Dia dela Madre. La lentitud del servicio eres una at ésfera relajada, Mientras comiamos pescado fresco ¥ pi pas hervidas, charlamoe sobre Suecia, ls ristemas de Salud ‘mental, el trabajo de ells y el mio. Lex progunte por sus x pectativas para el sominario, por las que tendran sas cole {gas por la idea quo so formarian loe miembros dela fan Tia sobre su sesién conmigo Durante la conversacicn, se me ccurrié que quiz4 fuera, buena idea invitar 4 Gustafy Kerstin a participar de la ret nin con Ta familia. No conocin el nivel del ingles dela fami Tia, y consciente de mi total jgnorancia del sueco, mo pre- ‘gunts en vos alta si Gustaf y Kerstin estarian diopuestos a ‘ayudar con diffeultades de traduccion y, lo que era mas im pPortanto, @sorvir come wn puente entre la union com la fa Iniliay el seminario del dia siguiente, Stiuiaanfitriones es taban en Ia habitaciin, pensé, compartirian sus propias ex: periencias con los partiipantes en el seminario produc Flan una smezela. de ideas mucho més riea que thi expe encia sola, Mi invitacion paresis sorprenderios:»gQus v8 pensar Ia familia? Qué papel jugariamos nosotros? Aun {que conocian a Ia familia, Gustaf estaba preocupado: “No Somos sus terapeutas-, Pero estaban intrivados, accept ron mi idea. Les progunté por el papel que preferian jugat ‘Tras discutiro entro ells, cancluveron: "Now gustaria estar cn la habitacion contigo y la faenlia, si ellos les parece bien. Nos gustaria solamente escuchar Les pregunté site. ‘la permiso para hacerles preguntas. Asinticren sin vaclar ‘Durante el trayecto a In etinien seguinios convereando lanimadamente, Supe que la sfamilia inluta a una madre, tan padre y dos hijas, de dieciséi ydiecinueve anos, Ambas Ibjas sufrian desde hacia dos afios de anorexia; la mayor eo taba actualmonts internada en una tnidad hospitalaria pa ra adultos. Pero todavia no estaba claro por que habian sle- fido a cota familia y cases eran Ins expectativas para olen Cuentro, mas alld de prover de sna =demostracion- alos participates del seminar "En el rea de recepcién nos encontramos con Jos mies bros dela familia, todos muy correctos serios. Gustaf me resents, y yo pregunté silos terapeutas unfitriones podian participa en In sesidn; adwje mis razones pars ello y aclare 2 . que esto era algo por discutir, no un requisite. Los cuatro ddieron su conformidad. Passimoe a la sala de entrevista, onde se habian dispuesto sete sillas en cireulo, los invité ‘ssentarse donde les resultara més comodo, Ala izquierda del padre se sentola hija menor, ala derecha, la madre, ya In derecha de la madre, la hija mayor. Los padres parecian algo timides, y los euatro, quizds algo eautalosos: En voz ‘muy baja, contaron dénde vivian y eéme habia sido el viaje de una hora hasta la clinica. Las vooos de las hijas eran es pecialmente débiles, casi inaudibles, Las dos eran pease: ‘has, delicadae y rubias, La menor parecia simplemente del fg8da, pero a la mayor se Ia vesa consumida y letargica: a ‘adie le hubiera sorprendido saber que padecia de un desbr- Gen alimentario 0 algan otro problema fisico serio. La at- imdefora en Ia habitacign se sentia sombria tensa. Pero comenzamos a conocernos meuclando el inglés sue ‘co decllor con mi acento texane. Hscuché con sume cuidade ¥ trate de enunciar claramente, Les dio le que sabia sobre “limotive de nuestro encuentro exe din y que me gustaria of To que pensaban sobre el encuentro. Con curlesidad, agre- moe: - {Qué les parece que deberiames cabor acerca do usto- des; qué les gustaria que supiéramos sobre ustedes?.. La ‘Biadre reepondio rapidamente: «Aqut To tengo-. Saco des pa fginas impresas desu bolso,y melas alcanzd. Let el itu, en. maydactlas: «POR QUE LA TERAPIA FAMILIAR NO_ NOS HAAYUDADO-. Admito que mi corazén dio un peque- Aosalta, Lo primero que pensé fue:ajEste aa serel tema de nuestra discusion manana’, Mi segundo pensamiento, Inds fuerte, fae: ~2Que habré escrito’. Habia que seguir indelante. Tras una larga pauca, progunte: «Puede lerioen, or alta? “Por supuestor, dijo la madre, y los otros asintieren. Ccomencé por el titulo, ¥ seg La anorexia tiene aspectos psicoldjicos y fiscos y es ne ceaario tratar a ambos al mismo tiempo. Los iétodos ‘llizados para hacer que nuesteas hijas comleran mejor Ihan sido por lo general equivocados, en ocasiones hasta casi crusles, y muchas voces han empoorado las cosas. ian causado tanta frustracién, desesperacién, angustia {yreskznacion que buena parte de la terapla se dedicd a {cos sentimmientos on desmedro de lo otros aspects, 33 Con frecuencia nuestras hijas han sentido que sus ‘opiniones no eran importantes, que nadie estaba intere- ‘shdo en eccucharlas y en trabajar con ellas en lugar de Ihacerlo a través de nosotros (los padres). Tanto ellas co- ‘mo nosotros habriamos sufide mucho menoa si seh bbiera posto més exfuerzo en tratar de influir sobre las ‘motivaciones de ellas, on tratar de explicar los peligros ‘Creo que tna actitd més flexible habria sido til on. <1 teabajo con nuestra familia. A veces hubiera sido Stil Ihablar con todos nosotros, a veces eon un solo miembro. Estoy convencida de que este metodo se hubiera adapta do mucho mejor a nosotros. Elheche de que ambas se enformaren al mismo tiem- pohizolas casas mas que dablomentedifcles para noso- ‘ros. Cree que esto deberia haber indueide al personal reédieo [y los terapeutas) pens con nosotros un solo método a pesar de que una y otra ver result inadecuado, En sins, tratn de estuchor a nuestras hija. Noes ‘tapoibl haar cow elanTenemos pena conencin de aque hay momentos on que es bastante iil aleanzar ite, pero nen que intantario. Al calo de un Hempo ‘afuerao rinde futon, y hasta ox posible que do esa i Sera ustedes se ganch la confiansn do elas, cn lo que ce tvansaria mucho... Ellas tienen quo poder hablar con fmnte abl, os dec, gente quel trate como seres hut {nanos con tn sentiio de ongllo, ustici, integridad dignidad. mae * "Traton de escucharnos a nosotros lle padres. Por sw pueto.” el personal malice nunca ae rea a esea- charnos y hablar con nosotros... hasta el dia‘en que Stwtra ja cumplio lor iecioco ation y doe entoncen TBue fee elence” (A menudoyhemor ado que los me ‘feos ato ofan lo due querian oir descartaban l recta Sin comentarios Alo sumo le que docamos] ve descarta- Be porque ora pos interesante, imposible 0." velo con strate invita sospedhono porase vn de per ‘ha incompetent completamente contoladas por mun ‘jas yom consecuenca, por la enfermedad: Pero new {ive conocemos a muestas hija mer que nadie, Cone ‘SEmoe mus reaccionesy sun wentimientos.-~ saber, ‘tuo que cualquier entrmora o medion, cudndo se pc. ‘Toconaren lan {We intontado, He visto intentar a otros. Con dema- sada freeuetsa he feacasado. He visto Wacasar a oto {amin Por lo menoe he trad de aprender do is ffacazce poro hasta sora no he visto muchas indieaci- theo de covocntreloe miembros del personal medic (te Fapsutin) Bso era todo: completo, concise. Con un nudo en la gar. gant, pensé: Bato es todo lo que quiero comuniear maiia- fav: Las simples y elocentes palabras de esta madre reda Iman un andlisis de nuestras tradiciones terapenticas [de mo noe relacionamos con Ia gent de como pensamos &, Tablamos con, actuaunos hacia, respondomes a la gente. (Creo que eatas palabras podrian haber venido de eal quier elente en cualquier pais. No las of como una condena Silas olresco como tal. Lae of como una invitacion ala pau la eflexign, Las experiencias do esta familia no gon tan, Jiferentes de ins de muchos denosotros: bien intencionadoe, ‘pera con horarios aclerados y expoctativas exigentes, a ve“ eb no nos defenemos a escuchar lo que un cliente trata de ‘ecient a compartir nuestros propios pensemientos, “Tras otra langa pauisa que se extend en la solomne at- indafore de la habitacién, devel ln earta a la madre y lee prese mi agradecimiento por su disposicion a compartnia Eon nosotros, Lentamente comenee a formula las preg tas que me ayudarian a comprender mejor loque ella habia feerito, Grabamios Ia sosign en video. En ol seminario del Sin siguiente exploramos las implicancias —el desafo y la esperanza de la carta. Finalizado el seminario, supe que esta conversacién, como tantas otras conversaciones importantes, no peda mi ‘debia terminar alll Las palabras de la madre sgeieron vi ‘viendo en mi, encendiendo didlogos internos, mucho des. pues de haber regresado casa. Eseribi a In madre y le pod permio para compartir la carta y las grabaciones con otros terapeutas, Me respondié con una puesta al dia de lo que hhabla oeurride desde nuestro encuentro, y conclayé con es tas palabras: ffs mucho consuelo que mi historia sirva an terapeuta y hista me hace esperar no haber luchado y st: fido en vanc-. ‘Una esperanza emocionante y que nos lama a actuar, por cierto, si pensamos que hoy una de las formas peinelpa Fes que la gonte utiliza para resolver sus problemas y pro- ‘mover el crecimiento es la terapia. La experiencia de esta ‘madre nos desafia a repensar nuestro pansamiento sobre ‘este proceso ritual, a ubleario, quiza, dentro del marco de la ‘experiencia cotidiana ordinaria, en lagar de dejarioafuera, ‘come si se tratara de un laboratorio para el andlisis mierow ‘spice y laeparacién desa experiencia. Las palabras de la ‘madre nos encomiendan un nuevo exacien de esa relacion ‘quees Ia terapia. Mas que rospuestas, lo que hos piden son Preguntas: ,Qué traemos ala relacion? ¢Qaé relacion val amos? ;Quienes somos como terapeutas? /Somos expertox? {Macstr0s? ¢Amistooos consejaros? (Guardianes morales? Y fn todo aso, emo Negamos a ser fo que gomos? ‘Tambien eo importante, cuando -escuchames: las pala bras desta madre, pensar on los factores que influyen en la forma de eccucharlas. ,Cémo entondr, por ejemplo, que un ‘terapeuta piense que -obviamente la madre controla la voz e Ia familiae, otro exclame »,Dos hijas con problemas de flimentacién? {Obviamente incesto!s, un tercero observe ‘iNotaron el silencio del padre? La madre lo protages, yun uarto ce progunte »{Por qué la carta era tan ica” “En cuanto Felacion, Ia terapia tone tanto qe ver con quignes somes los terapeutaa —~y quisnes somos on eaa Te- Tncidn —eomo con los miembros de la familia ode cualquier sistema elients, ¥ quignea son en relacion con el terapeuta, ‘iene tanto que ver con nusstras autonarrativas, la forma fen que nos definimos como personas, y nuestras identida- {es como Lerapeutas, como con las autadefiniciones.eidenti- ddades del cliente 36 El aspecto mas importante de las relaciones humana: _pavta dl run sr Esto vale tanto para nosotros ferapou Tamora nuestro clones Loauadiotngu a todas os _snfoqums temputio=pstuaomnasesunazeva detain Sperm ‘Antes de abordat las pe TESS una terapia entra, con ve concepts del pro- pio tory la navativns se hace de yin consocventine Pricticas de nas premians, eotudiaremos fos origemes del Ehbio cia una ferapiapoamoderna st 1. Cebollas y pirémides “primor momento una teorfa.o un paradigma son aceptados, 4 derpués puestos a pricba, Un paradigma nueva no jus” jade por sus logre, sino por su promesa de un mejor desea pio, y por Ia fe que Ia comunidad pone en xa proueea, ‘Blconstruccionista social Kenneth Gergen (1994) ofrece luna erica del andlisia de Kuhn, con Ia cual estoy totalmen- tedeacuerdo. El punto de vista kuhnianode que las snoma- ins factions son impredecibleseindependientes de los sate ‘mas prevalentes de inteligibilidad no explica su proceden- Gn Sandel punto devils dlconsrseoninngs Soi os somspteysianer nas (ol gre ust Ung oped so “on taneas ni jan observadoy las descubre de repen- 5 Borel contrat donazsollan © partir y dents de or ‘mia de-weptide que se constjtuyen Stun clastivo soc (Big. 14). Exdecir queda nueva comprension precede afdee— subrimient:y a cracién. La tension emir las Viias om ones ylataeva gino sence Sib prope eat explain dele com bigs paradigmaticos: ln transformacionestericns con pre ‘eos comunitariog con fases distinguibles aunque super == rdctioa Sncorefe i tun eofetivo social) (pug 18: Eats set egocinds an fracticaddisétrsivas que conetitayen wn -nceo de Ineeligiidads (pig 6) el cual'a sven soetione al dca. to. Gergen se apeys en la natutalesa binara de los signif ‘antes ingietcos (por ejemplo omire- mujer fo-clien- {2} para arguir que la formulacion de un nls dacuretvo tetablocestmultancarente Ie ponbiidad de se diglucion. (ag. 9). En otras palabrangGott lo que ago cs afta por Jimplicacién lo que no ex Lo quo no es —vale decir, Ia aie {oncla~tinbrge de lclaborscion de lo que ex y de las ten ‘lonos produckias por laa diferencias dentro del decurvo? Suglere que eae proce puede er expontanooy fortlvore bion deiberado y obtinado, o bien una combination deat. bos tipoe, Elrenitado es toque Gergen lama votre taal bilidads (pa 9) Bate proceso de conopromice con el discur- 42 0,y la dindmica de ampliSeacign del discurso, preparan el ‘ecenario para el estadio que Gergen llama la Stibargo la critica nocesariamente ha de utilizar ragmen- ‘tbe de leaguiaje de otro nucleo —la serie de proposiciones ‘que brindan intligiilidad ala erftican (pags. 11-2. Dar forma de longue dee otro noo es unn condi cism agit para gus se ogreloaue Gongen 904, pag 12) fac banafrmacigna en lagu ae labor a Trane stucurtvan dela feria yo rem ax 0 aaeec permite x cmerpuncia lo un ve pared, on aa eee auras explcg en tracarmactoes sempiita on la retatgriny {ptrodueidas por la ertica ai iis ‘Con lar perspectivas de Kuhn y Gergen en mente, enea raré ahora los desarrallos que rugieren la necosidad do una fransformacién tedrica y metodologiea en el campo terapin familiar Consideraré la pregunta de Kuhn —Je0_ Tagan ha encorrae el vigjo patadigma, que a= oo Poy ln expliencon Ge Gorgon sobre la | ‘BBnacin do praca acaravan La transformacién de la terapia individual en terapia i familiar i En términos de Kuhn, el perfodo preparadigmtico dela ‘terapia familiar corresponde —en Norteameérica— alos co- imienzos de la déeada de 1960, Loe fandadores de la tarapia familiar Facron como los proverbilesciegos que deseribian I tun elefante, cada cual basado en su propia experiencia si lun paradigina de conccimiento compartido. Los fundadores | ‘abrieron sus propios caminos siguiendo los estandartes de | Su personalidad individual, sus reapectivas diseiplinas, sus hipotesis incidentalesy sus experienciasclinicasidiosiner- 43 El desplazamiento desde los paradigmas psicoanalstico psicodinémieos hacia la idea de familia no ocurré porque los torapoutas deeidieran que Ia fazalia debia ser el objeto de tratamiento, Ocurris porque las teoriany précticas tradi cionales ne parccian servir para entender adaleseentes inmanejables y a algunos indivichoe que tenian perturbe. clones sovoras, come los peiestica, y trabajar con ellos. In. cialmente, se invita la familia para que los terapeutas pu dieran entender y tratar mejor a estos pacientes, Rapid. ‘mente, el feo se desplazo hacia In pereepeidn que del trata. miento tenian los familiares dal paciente, inclayendo su ereepeién del éxito ofracaso del tratamiento. Como eseribt fn otro lugar, scircunstancias y experiencias elinicas, junto con la fatii- dad de los intentos do aplicar las teorins ytéenieas prove Tentes a ‘ar nuevas explicaciones (...) El anhelo de entender y te Salver un problema fue el man y el atalizador que convocd los que se llamarian después terapoutas familiares, y ote. ‘i6 un dmbito para su colaberaeiéne (Anderson, 1904, pags 147-8). Voiviendo a Gergen, evoeo su perspectiva sobre Ia impor tancia de intreducir un lenguaje deste otros nacleos exter ‘nos (Anderson, 1904). En este sentido,os pioneros de la te- ‘apia familiar fueron interdiseiplinarios. dentro del discur- 0 psicotorapeuties, por ejemplo, sus raices estaban en la psiquiatria, la psicalogia y In asitencia social; fuora de ese Giscurso, las diversas rafcas incluian entre otras la antroper logia, ls quimica y las eomunieaciones| Casi todos eran ted rieo-clinicos que procuraban deaeribiryexplicareus propias experiencias, no las de otros ‘CLa terapia familiar comenzé sin un sistema de ereencias cofapartido, oparadigma de conceliniento, que permtiera a stos clinicos eonstrair sobre lo aportade por otrosyEl re- sultado fue el desarrollo de multiples eseuelas deterspia fa. rallies, eon diversas deseripeiones, interpretaciones y com: prensionee de los fenémenes, aunque pudiora decirse que todo eaba bajo el mismo techo paradigmatica, fn busqueda, {ds comprensién, algunos splicaron las explicaciones paico- ‘snalitias y psicodinamicas de la conducta individial a una ‘onfiguracign social diferente, la familia. Otros bascarcn Conceptos explicatives fuera del campo de la salud mental ‘en otras cioncins sociales, en la biologi, Ia sea, ln ingenio- Fa, a flosofia. Rete ultimo grupo, influide por la naturaleza interactive y mutuamente fertlizante de sas trabajos e in dagaciones, avanzé hacia loque Gergen lama la fase trans: formacional. Al cabo de cinco décadas, la terapia familiar, que comenzé como un diacurso solitaio, radical, de avan’ ada, ahora cuenta con sus propias asociaiones profesions Ise y onganiemos aereditantes, ¥ se encuentra en medio deo ‘que Kahn lama el estadio dela cioncia normal Dos influencias importantes en el desarrollo de un paradigma unificador ‘Dos influencias fundamentales y entrelazadas organiza: ron el pensamientode los tarapeuts familiares: la torta de Ins sistemas elbernticos, homeostasioos, de realimentaciin novativa,y la teoria de los sistemas sociales nermativos,o=- {ructurados jerarquicamenta) Pstos dos principios, ontreto jidos,hilaron la tela de In terapia familiar y ee constituye yon en el tema general del campo. Amnbos prineipios deseri- Dieron y explicaron el sistema humano como una combina ‘ign de partes euyo proceso viene determinado por st {ructura (Amos proveyeron a la terapia familiar de To que tas la dstingwe de otras teorfas pelesterapestiens un Qa Tadigma siatemicg contextual. La gente vive y sienfe lou $U- (Sisor de Siva dentro de sistemas inleraccionates) Desde ‘ete punto de vieer, 107 problemas son fendmenos sociales ‘Suyo desarrollo, persistencia y eliminacign oeurren en Un Seip intrnednal Lamergencia deets rai p- Somefor aise considera el diseursocultaral mas generico de Ins dévadas de 1950 y 1960 —el desplazamiento desde las hociones romdnticas del individuo hacia la tecnologia de las interrelacionesy los sistemas complejoe—, ¥ especialmente el contexto estadounidense el period de posguerrs, los stile de vida estables, profamilinres, el crecimiento y de- Ssarrollo econémicos, las explosionos tecnoligicas en el Area elas metodelogias cientifias y, en se momento as Compt faders, La metéfora de los sistemas eibernéticos Elma importsnte de estos dos desarrollo, y el mejor r= conocido, fe la dominancia dla metifora de los sistemas cihernsticos, Esta metifora unifcadars permit que tri os yclinicos se Hboraran de la estrechez'y inealidad de las ‘teorfas del individuo, y pasaran a explorae concoptos y te nieas en Ia resolucion de problemas mis amplioe, no nea Jes, que les resultaban mis tiles para trabajar con siste- mag humanos multipersonales como Ia fasnilia ‘El principal salto desde los eonceptos explicatvos indivi- ualistas hasta el estudio de los sistemas bumanos fue el trabajo seminal de Gregory Bateson, Donald Jackson, Jay Haley y John Weakland (1956, 1963) en el Mental Research Institute de Palo Alto, California.” Estos autores estudiaron Ia comunicacién eaquizofrénion por medio dela observacion de Ins conductas interpersonales de los individuos eaguizo™ {rénicos en el contexto relacional desu familia en lugar contrarse en el andlisis de conductan pasadas, suceaoe hi tGricos, caractoristicas individwales y procesce paiquicoe ‘Eato les permitis trascender las descripeiones tradicionalee cqusalidad eireular Restos dos conceptos, vinewlades entre i catapultaron Ia torapin familiar @ usa nueva posicion epistomologica * Los investigadores de Pala Alto concluye 2 Grea ato, Dal Schon ay Haley oh Wein junta 46 Se propia ieormd n concluyerorr que toda CS ej maa eects RES Git tetris tl sprendioj, Jackson 969) So eat fart siren ‘de contenido Gnforme) ¥ une-de relaciGn (instrac- Seo ced ae ntl : ate Soipuiteantass (pig, 8). La investigacion tambien condyjo “STacearrllo de los concepts de adable vinculos ¥ shomeos- fasis familiar (Jackson, 1957). ‘Como parte de sus continvos eafuerz08 por encontrar un Ienguaje que deseribiera Ia interaccién en niveles multiples, ‘ligrupe de Palo Altos inelin6 primero por Ia toria general ‘Scice sistemas, pero rSpidamente co voles a la eibernética, ‘Para describiry entender Ia conducta de los individuos en el Contexto de la familis, adopts un modelo de homeostasis y realimentacion negativa, contrado en las propiedades del Sistema familiar como sistema auténomo. Las propiedades “Steméfens da farina mecanismes do relimen nein, orlentados a corregir deaviaciones, y acivados por frrores o cambio en el sistema. La familia era vista como {i gervomecanismn om wh elemento gaternador que pote. ‘amnorma © impedia ol carnbio. De acuerdo con la veorfa, {Em dtemna dotade de estas propiedades podia resist a ‘cambio, Desde este pantode vista, el sntonia slo tenia sen {do dentro del contexto familiar total, y era una expresion| Aseece contexto. Ya no representaba una perturbacion indi- Vidual, sine una sedal da que la familia exporimentaba dic Tultades en sus istentos de admitirfactores de presion ex {erna, cambios, o puntos naturales de transiciOn; es deci tte no pain evolcionar aia una mayor comple. EL Mpnificado del sintoma estaba vinculado a la estructural Sistema fasniliar y cumplia con la funcion de mantener la homeostasis del sistema: su estado, su estructura, su orga izacin, su estabilidad, su continuidad,ladefincion de sus elaciones © La metafora et doa homeostasis, gue ‘lula tne nidlonee otalee So ‘sulbrio realsentacon eget. Tester el eatin oo SHG cacine, icions lidad del atntoma y defecto estructural, se convistisen lata ‘apa entaper la Srpssiogten feria ya Ris clea: patel “Aungel ictismente cada escuela de trapia familia: hi 20 6u propia contribucién,eate paradigma de conocimiento bisico ~el principio cibernétieo, olo que despues oe Hama: ra cibernética de arden primero proveyS un comin deno- Iminador Y ai bien cada escuela describ ol paradigia en términos distintos, las diferencias no eran més que peae= ‘has variaciones del tema de fondo Ia realimentacidn correc tera dedesviaciones, activada por Sree fe trangulcan Sean cae pon mmm une da qu ne pu. ‘en mans lan none de ou propin roo. a cope satamis ceiver gc terrain ot iy a mes ‘jemplo, a entra en In rlason entre In etructra falar dfn ‘sintome (patlopi) es meceanria Pars qu le fami bajo in preaion del Sea ne uot hacndsoe mas mnepos de espenderd edo ds 48 El nuevo paradigma ejerei6 una influencia decisiva s0- bre la natursleza dela pslcoterapia y el papel del terapeu- ta, La nuova meta de terapia —interrumpir la homeosta- ‘sis promover el eambio— requerfa nuevas téenieas, El te- Tapouta pasé a intervenir activamente para ayudar a la familia a aceptar las exigencias de las presiones exteriores, Jos puntos de transicin, as tapas de desarrollo y el cambio La metdfora de los sistemas sociales a pa tztocl ph eb print fee SCREGSE Soices aout mane Saab anes ee eerie Sie acer ace geet escenario Sei aa Gein fee $e. pt dee ere te irentoaue o ‘objetivo empiFico, los sistemas socioculturales icine ets nb rtcear eer ena cme n pnechr sss crvoreniec pr ean nga sk Ee tanec rae indy ie oor islet ceases elects Seat cawabeeg ingen ev gleorrumier aac Pence depute leer interes sey es oeganer tain sce see ane sepia te ent te al esta rodeada cibernéticamente por otra capa. Al nticleo_ sates enna oer serena enrages era ications one ere eae rniscmneyeaeecire ee Sireiloenceon ia crsocrnrina ie inion aerate sete ‘iba ene rr 49 fn ellos o de cualquier observador. Hatas restriceiones de Fancion y estructura, impuestas desde afvera, actuan como tun arnés social y producen el orden social quellamamos cul- turay civilizacion. ‘La contribuciéa maa importante de la teorfa social de ti- pocobolla ycibernetica ala torapia familiar (7 de la terapia {familiar a Ta peicotorapia en general) ea que contextualiza Salquarrasomn pon ean por tl -individuor y el -individvo en relacidn’ (por efeoplo, en elacion con la familia) “Todo esto supone para la terapia que el terapeuta opera como un observaidor externo indepenclintay, por To tanto, ‘on de sistemas claramente delimitadas corre el riesgo de Tomentar fociones y ndjudicaciones de culpa, sgtin 20 do finan los sistemas y cogtn que la =condicicn patoldgien- je on un nivel pen ol siguientesPor ejemplo, hay fiecién fntre terapeutas individuales y terapoutas fainiliares, en- {re terapettas familiares e instituciones de servicio cia, y fqntre sistemas subordinados y sistemas supraordinades Tia diferencia entre la torapia individual y la terapia fami. Tiar es que localizan la patologia en sistemas distintos, la similitud es que ambas la situan dentre de un sistema, ‘Mientras la mayoria de los terapeutas familiares con- tinuaron enfocandose en Ia capa familiar, algunos comen. zaron a explorar las capas exteriores, a las que se dio en Tamar sistema ecoldgico, sistema ampiio, sistema de signi. ficados o sistoma relevante (Auerswald, 1968, 1971; Goo- Jishian y Anderson, 1981; Hoffman, 1876; Imbor-Copper- smith, 1982, 1983, 1985; Keeney, 1982; Selvini-Palazzli, 50 Boscolo, Cecchin y Prata, 1980a). Todos los proponentes de las eapas exteriores destacaron el contexto humano y profe- ‘ional de la terapia, erpecialmento la persona derivadora y ‘eros profesionales’ A riesgo de sobrosimplifcar la esencia ‘de ert importante énfasis en el conterto de la condueta his- Imma y la terapia, lo considero tndavia dentro del marco de ae metaforas cbernética y eociologics. ‘Creo importante destacnr que las taorfag cibernética y jonsiana enden a promover la, ysl patiiarea re deslqualdade® que, lamentablenente, son normatvas ‘Srnueatia culture ea on relasonos intima de padres Jong de cops, son Sr relacioTies sociales mds Sistanias,— Rpinstitaciones de Svesestar Boel y clientes, @apacstros y ‘noe As torn lean ulivan yeaa ‘Tgngualdadosr Sonsurassaubordiniiones jExplotaciones “eu en ol dominio de ja paliticn, i economia el ginero la yaln=y la considoran inovitables en ov eistemas burma os Aman desestimad In copexion entre of mirodominio ‘ela terapia y ol macrodominio de la vida sociopolitica. Agitaciones (Cuestionamiento de ta esbernetica de orden primero ¢ {ntreduccién del orden segundo ‘Si bien Ja mayoria de los torapeutas familiares mantu: vvieron su adhesion al parndigma eibernético mecénico, Uinoe pocos comenzaron a euestionarlo. Las abjecionos no se Gingieron tanto a la nocion de jerarqusa 0a la de sistemas Independientes del obgervador" como al principio de ho- Imoobtass, que acentuaba Ia nusencia de cambio ¥ no expli- {Shige uc ioteorta nal del ME eerpinas el eonepto de papeles Fri tare pre de ela amare, porque primer coun ence st pene Se enon ner ori a tan ccaba 6] cambio. Contrariamente al ‘sico, se eeonocid que las familias, ‘a vives, no podigmgino creer y eam I paradigna ch omtico no aleaszaba para incloifeata caracteritica do Jog seres vivos porque sostenta quel problema era el mov ticnto lente, oaseamianto, eewentementacbservado et Jas familias, porto tanto que el propésit de la trapia era dleeatarcar al sstoma, poneriode nuevo en movisento por ‘medio de la tSenicas anocindas con cada escuela El reto ste punto de vista aparecié on tina eantidad de articulos friginales publieadas eon pocos fon de diferencia Ei traba- Joeldsico dt sccislogo Magoroh Maraywma, sa ibernatca Sqqunda: prosicsceuslen uta do amplifeasén¥ ‘itso, public par primera vezen 1005, seals que ba Fiadostposposbles de reainsentacn cbermetica: cone Cia realimentacion negativa (morfoctass), que explcaba ln estabiidad y Ia roallmentasion poitive ctorogenesi), que explicaba el cambio. Tempranamente des terapeutas familiares Lyon Hoffman (97) en Proceaas de ample ‘Gencion du defviaclon en grapes faturetoss Y AIEEE Speer (1970) :Sistemas fstlinrenMordoraisy mort iissige—® adoptaion ltpostin de que para describe Goheigieanghina anv Elgrope de Pal Alto, on sus originales trabson sobre ol concepto de-sambie vIn erepi ‘focadla-en probie tsa (Watslawiek, Weaklatd'y Fisch, 1974; Wealeland, Fisch, Watslawiek y Bodin, 1974), afsecio un importante eusstionamionto ala idea de que una pre dl itera pa ‘Tnectructura delubsa, deja dorsor condicion steesatia ‘dgsarollo de conducfas problematiens, Tos sito Bias yano stven «un propdsito! Las consccuenciae Paral Marfan Dean en gs ere ney Brain vet creel nats eu pale 52 ‘comprensién de los problemas humans y para la funcién del terapeuta eran enormes. Sin embargo, ate revolucio. nari giro de pentamionto se mantuve dentro de loa confi ‘nes del paradigm cibernstice “En forma paralela al reconocimiento de que los sistemas cibernétioos se Fealimentaban tanto positiva come nogatl, vamente, emengié otra dstineién que rellejaba cambios si- Imilares en laciencia —Bohim, Binstein, Prigogine—y en fi. loofia Derrida, Gadamer, Heidegger, Husser!, Merioau Ponty Rorty, Wittgenatein, Se cuestions el empiriemo logica Dbakado en dates reals, existentes, objetivo, ¥ se euestiong cl dvalismo sujeto-objeto. La relativided einstetniana y la ‘teoria cudntica, por ejemplo, afirmaban que la obervacit siempre da forma a lo que os observado. Los abservadores {nfluyen e interpretan lo que estudian. Las distinciones no ‘cetdn walt afteras sino en ol observador; el observador no ‘et fuera del sistema abervado. Los que hasta entonces se Iabian considerado alatemas independientes del obecrva dor, spareeian ahora dependientes del observader o de lo ‘gue el elbernetista Heine von Foerster (1982) lame state ‘has observantes. La idea dela observacion como proceso re- exivo cuestions Ia idea de una realidad objetiva, Se defnuG fla cbservacin come tna actividad cargada de teoria, ya Ta cienein, como una actividad social donde las diseilinge fstablecen sus propias reglas para la practica y la demos. ‘rncion "Estos desarrollosn ol campo de la torapin familiar se ceonocieron con el nombre de eibernétion de orden segundos ‘ibernitica de la eibernéticn "Al igual que los plantoos ‘lentifices yfilosdficos, la cibernétien de orden segundo en. {oes sa atencign sobre el papel del bservador en In circu ‘dad de la relacion abservador-observado y en Ia ereacion {de lo que es observado, Una ver mas fae el grupo de Palo A {o-l primero en sbordar Ia euestion de la insignifeancn de In realidad cbjetiva (Watzlawick, Beaver y Jackson, 1967) ‘El mismo Bateson cuestion® parte de las primers torias ddl grupo y sus eonseeuencias, refiréndese expecinimente a anecion de poder ya logue oe aeguia dela teria, Emel pre Fg ian 80 danse son teen sa facia « The double bind (Sluzki y Ransom, 1976), una pro- finda rflexisn de Bataoon adviertea los terapeutas que de- ben hacerse mia conscientes de su activa participacign en Joe fenémenos estudiados, y de la influencia de la teoria - ‘bre aus obeervaciones. Por bien intencionada que sea la urgoncia de curar, la idea ‘mlema de “curar” necosdrlamente propane la idea de poder Como los protagonistas de una tragedia griega, nos confina- ‘mos eatipidamente a las formas de los procesos que otros, fn eapecial nuestros colegas, creyeron ver. ¥ nuestros su ‘esores estardn confinados «Ins formas de nuestro pens lentos (pag. x0. Constructiviemo Bl desarrollo da la ciberntica do ondan segundo vino compat porn rerurgimient del conntroctrismo {Grant y Varela, 1980, 1987; Med, 1908 Sop, 1986: Von ocrater, 1982, 1964; Von Glaserseld, 198% Watslawice 2976, 1980) Et gnsirativisms eo una teri lonsic del Senecio ane patents a ining el earado dl SERS Giambatcta Vcs-kave aparece postertormen ‘Gon lo eartos defNeloo Gootsoan, Davsd Hume, Imma ‘ul Kane, Geonge Kelly Joan Piaget, entre tro. La per juctva cnawtrucivista ciartonn of miundo carosano, re ‘Sia la talon segun i cual el conacimiento es repre Sentativoyeefij el tudo realy verdadero, fren 400 ‘imposible conocer snared externa otjetia Mat ‘ana, 197; Paget, 1971; Von Foerster 1964; Von Glaser: fais 1984), : Dede la perepoctiys conetmuctivet,t.ralided resco senty une cdipiacin ftacional del eet, low sores Hosea Sorte tat SUpIOD WGe etpertnentah el mando, constr gone intmpretan la realided La mente constrge‘ cla 8 Ti. (Mlaturana, 1970. El cbeervador construye, hace, spar yer una sbuervacién La perepestiva conatrucivstainiote su nt nds nan nga el oa en qu sonar una aida adapting con fento p.un compendio de los concoptos y las acsiones que ho considera exjtoveg, desde al punto de vista de-loe props Sto. tmentcs (Von Glaserafeld, 1964, pe Ya). Para ol cquetructiviemo radical! la realidad y por lo ‘tanto e conceimignto sm ointarpretad tee rat Won Ginsorsfela, un plonero de In WiSaie footrastviata, eG Somunleacn y toda com Peension son materia de construceign interpiatativa por ‘arte del ujeto de experigici> (pag. 15), y aniston sex Ehshamente en crordonamiente 9 organiiacion do-ua ‘undo cSustruide por nuestas expérioniasy (pag. 20). Se- ratclawiek (O85, ol coastructiema radial ng eran o engl ning ena "a fora; put ‘queno hay adentro ni afugra, que go hay un mundo objetivo ‘Rifsentande al wabjtivo, que la dition eujeto ojeto (oa frente deincontablesrealdades”) ngexite, ucla aparen- fe division del mundo en pares de opuestos o3 conatruida el sujet, y quéla paredgjs abe af camino cia lauto ‘narata> (pa: 880). ee Se ee ee os a oe ee eee ae eee aes nose eres 7 acc snnlonens Pa aie apie ee preernr s ge cana Sistemas evolutivos Entretejdo con las metéforas de Ia cbernética de orden segundo el constructiviemo, aparece tambign lo que Holl Nisa tctns ao rowel 55 ‘man (2082) lam ol sparadigma evelativos en terapia fi ‘lar (Del, 1982; Dell y Govllshian, 1970, Elkaim, 3081; Salvin Palazzo, Boscolo, Ceechin Pratay 1979)" Esta orientacgn Hamada eveliva now ali dl concn deh. ‘noostasie de cauancion Vinealy erealan’. Beode ua erapetiuevclutivs, lr skternae con reden qu une mo ingles, organisa soon aon ato ‘iriggey Peat, 1060 Prigogine y Stongors, 1804) ELoambowigicaapareceeaonces azaono, ‘ratecihe,diseantinuo, vconduce siempre a niveles mas lose amplidad: La ajfeacicmte ents cmeoptan aos Hetciumesse aluites tus niin eaplandic rapa {a poian, por aisles, amplifcar una fuctuacin mae que tra odeterminar Ia oriontaign del earmbio (Dell 1982, Daily Goolisian, 1979) Law terapeuta no contolaban el Siptema, ni podian controls sino fueron a pare ‘Etienne lft Con atmaon Del Goolohiah C981), a perapoaiea-de lo sever evclith ‘omelet ancora retouch ‘atibio, sobre la estabilidad Como ocateton Ik pautn del Claaje en It Sonflaeicin de oe roa ol proceso ce datermins- do por ambos foe (pay, 178). Elnasoce determina “SNES grupo en Galveston combiné nuestra fascing cide por log tatemas evehtivos son nuestro inords por fengtaje ate voclca hacia ol lenguaie-en perticwlr al Vane Foundation fom there: A snciptua famer fo oy Sts ctren, don cambio onnantementa Sepin Pgntoe, ara 56 lepasuaje desde el puato de vista de 1a hermendutiea y las {satis soelo-construcelnistas, nos peuuitie abapdonat Por Eempletogrmecanieismo de gemetatanss de agiberneticn Fe los sistemas sociales eatructaradaa como waa eabollo {nit pirsiside (Andsraon y Coalishian, 1989, 19900) 4 pat Hide und-conceptualizacin de loealstmas humasion eam — sistemas Tingus iptemaa do. copaiciemin iden ‘pesonataals evolusin, que ensten él long ‘Serrollamos los concopios de -gistemas doterminados al Ande ce ae ‘Broblemam (Anderson 9 chin, 1988; Goolishian y Anderson, 18870). bese Sd cccolo, , Per rege ede ae Apertura de un espacio‘por otro: nuevas ||’? ‘agitaciones paradigmaticas La torapin familiar se desarrollé como una ideologia fundadora, centrada en las intoracciones dentro del siste- fa, No interesa Ia cantidad de personas que particpan en terapin. 1" Bzta revolueion conceptual, nacida hace medio si flo, represents un salto audaz al territorio fronterio y des onocido de un carbo paradigmstico en la comprensidnde In conducta humana. Hoy es innogable la influencia de la terapia familiar sobre la paicoterapia en general sobre sa toorfa, su prctica, su investigacion y In edueacién de sus profesionales La terapia familiar abr el erpacio para un Fambvo paradiginitico que mudé Ta psicoterapia desde su fanclaje en Ia progunta del por qué (una perspectiva unidi- foccional, de causa-efecto, oriontada hacia el pasade) hasta ‘sn nucvé anclaje en la pregunta del qué (entrada en las ‘onductas, la comunicacion, ellenguaje, las creencias) ‘qusuo paradignoa llevé sobre todo a neconocer la contextu ‘Shinde, Wynne: MeDlanil y Gewinah (1900, Andra 1004) 9 Hardy sr Uisacion de a conducts humana, y a comprendr al indivi aden relgen cop otron a ugar de ver im condacia dee ‘uhm peropectivaintrapequica ela ve enol contest de los Sntoman, yl interéa se deoplaza al marende referencia in teracconal © interpersonal dentro del cual ocurre Ia con- ‘ducta, normal 9 problemstin. se cambio persis deseo Saab nee ee io, para Saavertinsien un seta de exfaio, ee Rereatio; quing so ost la contrsBUcin is ‘mportante de la tefapia familiar «la incesante eadena de ‘ransformaciones tedrican y elinicas, © ‘Al mismo tiempo quella terapia familiar en eu momen- tw considerada radical ~ ganaba en madures, aceptacién ¥ redibilidad, comensnron a surgi crtions y secepticisinoa La autoeritics, acompafiada de conflictos teritoriales en Is domarcacion de fronterasy titulas de propiedad sobre la to rapia familiar, provino de diversas fuentes, Alganos ereye- ron que la torapia familiar habia aleanzado la adultery, 0 ‘viendo diferencias, buscaron la Integeacion, la nifencicn, tl eclecticisme y Ia elasificacion (AUlinson y Heath, 1990; ‘Bron y Lund, 1993; Fish, 1993; Held y Pols, 1985). Otros, on cambio, cuestionaron el paradigma dominante y sefialaron, ‘sus limites, paradojas ¢ incoherencias (Anderson ¥ Goolt ‘hian, 1988, Anderson, Goolishian y Winderman, 2986, ‘Atkingon y Heath, 1990; Chubb, 1990 Dell, 19802, 19806, 11982; Goolishian ¥ Anderson, 19874: Hoffman, 1985, 1990, 1991; Keeney, 1983; Tjersland, 1990), Otros pdieron repen sar la investigacién (Dell, 19805; Fowers, 1089, Ryden, 10987). Algunos eriticaron Is falta de responsabilidad social de las terapias que seguian ignorando los temas de genero GuleRiche, 1986; Bogead, 1984; Goldner, 1085, 1988; Ha. re-Mustin, 1987; Hare-Mustin y Marecek, 1984; Laird, 1988; Luepnite, 1988; MacKinnon y Miller, 1987; Taggart, 1985), y otras subestructuras culturales © instituclonales (Doherty y Boss, 1901; Keamey, Byrne y MeCarthy, 1980, McCarthy y Byrne, 1988, Saba, 1985; Weingarten, 1995, White y Epston, 1990), Alganos eriticaron su oscuridad, 2 Vease Foundations of fant era concur fore tema change, de Laon Hafan 980 femaerh sa confusion y reduecioniamo (Carpenter, 1992; Dell, 1985; Dell y Gootishian, 1979, 1981; Flaskas, 1990; Goldner, 2668, Shields, 1986), Otros cuestionaron la utilidad de dis ‘ingulr la familia de otros sistemas, la ferapia familiar do tras forma da peicotorapia (Anderson, 1904; Anderson ¥ Goolishinn, 19886, 1990 Anderson, Geolishian ¥ Winder. ‘man, 19662, 19868; Erickson, 1988; Goolishian y Anderson, 1O87a, 1988, 1990). Se eriticaron incoherencias tedrieas y picticas y te cuestioné a los cucstionantes (Colapinto, 11085; De Shazer, 1991a, 19915; Golann, 1988; Speed, 1984), ‘Yalgunos se preguntaron si In terapia familiar oo una dis- ciplina separada o tuna tubespedialidad de otra (Ander on, 1904; Hardy, 1994; Kaslove, 1980; Shields, Wynno, McDaniel y Gawinski, 1994). stas somillas contionon ‘desafios y posibilidades para una futura revolucion para- ‘digmstioa (Andersen, 1987; Anderson, 1984, 1995; Ander- son ¥ Goolishian, 10888; Fowers y Richardson, 1886; Eviedman, 1993, 1995; Hoffman, 1993; MeNamee y Gergen, 1992; Penn y Frankfurt, 1994; White y Bpston, 1990. 'No solamente Ia terapia familiar esta en medio de una revolucién, aino que ea una revolucion dentro de otra que ceurre en al terreno mas amplio de Ia paicoterapia en ge ‘eral. Lo prusban los autores que, en nmero ereciente,er- tan la teoria, pritien, investigacion y ensenanza do corte ‘modernirta en el campo de la peleologia (Agatti, 1999; Ba- Ker, Mos, Rappard y Stam, 1988; Danziger, 1994; Plax, 1900; Feceman, 1993; Gorgon, 1982, 1985, 19912, 1904; Hoshmand y Polkinghorne, 1992; Jonce, 1986; Kale, 1992, 1996; Messer, Sass y Woolfolk, 1988; Nicholson, 1990; Po ‘kinghorne, 1968; Sears, 1985; Schon, 1983; Shotter, 1985, 1900, 19892, 19834; Shotter y Gergen, 1989; Smith, Harré y Van Langenhove, 1995). Esta autocritica en el interior de la psicologia, aunque relacioneda con las luchas entre grupos ‘einterés profesionales y con temas de jerarquta y presomi- tio, esha desarrollado sobre edo como un evestionamiento Avice fundamentos tecricos de la disciplina, ‘Goincidiendo con estas eritions y exogpticismos,y con ol ‘ntdies por Mreonceptos constructivistas Pde la cibernétien de-orden segundo, HM germinado otras semillas. Algunos terapeutaa familiares y paicologos, impalsades por una ‘combinaeién de experieneias ckinicas y desarrollo tedricos fen las cieneias soctles y Ins huimanidades, comenzaron & 59 “angdir en favor de un cambio dramstico; Ia teoriay preti- ‘a actuales de la psicoterapia se han quedado rezagatdas en jun mundo que cambia cada ver més aceleradamente. Esta ‘nueva agitacién es diferente, porque ocurre en todo el globe. Las distancias se acortan en el mundo profesional «inte leetual, tanto como en el politico ecanémico. La terapia fa ‘miliar ya'no 06 un fondmeno exelusivamente norteunserica- tno, y nuestro continente tampoco domina en psicologia (An- Geren, 1967, 1991; Elkaim, 1981; Fried Schnitman, 1994; Kale, 1982, 1996; Leppingston, 1991; Mendes, Coddou ¥ ‘Maturana, 1988; Reichelt y Christensen, 1990; Reichelt 9 Svenans, i904; Selkkula, 1009; Selvin Palnzzal et af, land, 1990) festanueva agita” cony el susimiento dun frepia famine os que oe ai ‘See inp opeetionahas be ctaksas nog saSotrgm en ‘medio de un discuren fronteriza, yen teri {SlovadgeTAnderson,"T9D4; Anderson y Go iin torapi familar y dea peicoterapa al como gona do. ‘Snide hasta ahore. bn qué consite este discurse omergen- {ey que fucrzas lo impolsant Paradgjienmenta, el concepto ‘idoar de rlaciones familiares ha ablorto un Sopacio para {Que algunos terapeutas familiares teciendan fa terapia ‘mia y las disinciones entre teropinindfvigual, arial 4 fumilist Andersen, 198% Anderson y Goolishian, 1988, {o0ia; Anderson er at 10860, 1966b; Goolshian ¥ Ander. _20, 19870, 1900, 1004; Heffnan, 1908) oaena parte dela ‘erspinfanullar a gnorad ingenvasiente al individus {Tifa sbagonads {ntencidhslmente, perdlendo"ast la espe \ issca elidel soparado ale dai, prdionde a monstn rio eae algunos de nosso, a jempdernmo mucye al individu la Felncion un primer plano aie lw {Sglalisacforma stay dforento a la da ooestan pestiodernde destace’ ShasectusiizaciSn social Ofelaci CGeplo, seoa, tan, calagiias dognéetions¥ narra eae conde, aes citings neutions nar qmuniesives | Snfene Pusso on lo social y lo flacodtt ilies a repensar radiate Te nocon dal individ o el propio aor (ee trate del nicloo dal ser tndividual ode sores 60 propio maliples electives), Ia constraccin de sl identi- Aad, el propio ser en velacon,y Ia conectividad deo 2 Birnie nna liad rain rs tiles sere), cot tres, YEON el pFOpie wanda conc, eltralplltieo Yamin roc Sis Sele Ganon nductacoleeiva,bieligion nial Expand lad GBevelaciones- mds alla de deTelaciones familiares, y ret Sprivilagiar un nivel del olstema eobre otros nivale. Hate ‘nbevo éufaeis bara a la tePGia deuna definiién ‘aatrcdeaRE su fee inte, pew tabi arbenaza Ia ‘ocion misina de e2Fapia failiary el predomi cea to Piapsictemieas como modelo de explication. ‘Yo ereo que ol individuo y [a familia Ho son construccio- neg neseaariamente competitivas; mas biem, Ia verapia fa. imiliar necesita abandonar esa definicion reairetiva y rede- {intr su doninioy foce de atenelon. No proponge abaitdanar In nocign de familia. Pero me parece que el concepto de -re- lacidns utilizado por la torapia familiar In sido demasiado ‘estrecho. Eleambio paradigmatice en desarrollo el feo Interpersonal y los cambios en Ia conceptualizacion del individuo y las reaciones ~ tiene consecencias importan- {es para nuestro pensamionto sobrelos sistemas humaiiosy seeipablemas, para nuestro trabajo y nacerarlacin on ellos. Bl posmodernismo presenta up. reto a lacultara fa lar delapaumterapa on daa qua yafeomo de aint ‘ga8i5n, un Suestignamiantydele quese examina y describe, $e toe mio wzadoe Para ol examen y In. deverpsin Tiidiea quel foco no es el interior del individuo piel deTa ‘so mas Bign Tae) pereona(s)-en-relacion. Sugio rege ningn supuesto expheativo, incluyenso Ins toorias ‘iis eapatadae, dob nceptarge sit disguson, sine qe DoF cTeontrario debe ser continue come lo Fetuimendaba Batesoa. Pero {que ts el fosinoderniema? {Cémo difiere det mo- ornismo? Haste dénde Hega su desafio? ;Que posibilida- ‘des offece, que el modernismo no ofrees? .Y cash de los pal ‘Ses posmodernes prefiero, por ser el que mejor represen- tante mi filoeofia y pretion terapeuticas en este momento ‘particular? Ein el capitulo siguiente me ocupo de lomedorno et yylo posmoderno. No s mi intencisa polarizar.Simplemente {aicro explicar por qué abandoné ua conjunto de supucstos ‘fue me resultaban restrictives en favor de otro que encact fro menos restrietivo. a 2. Espacios mas abiertos: de las tradiciones modernas a las posibilidades posmodernas Las vieias costumbres y tradiciones familiares subsisten ‘Porque son viejas costumbres ytradiciones familiares Softora Woods Baker, Pictures of Swedish Life (1894) Conoeimiento de un i representacién luo y lenguaje dela Antes de importante dlnturao moderno, puesto que la mayorta de nosotros nos terapettiaayvivinoenustra vida o- iseurso, Sogim yo lo interpreta, el Signs una tragic Flgwotes const, Beate Siang cant fuses tiga de la humanidad como centre ¥ duena del un ‘Goes, y tanabign los concoptos carteamnoe de Sbjetividad, Seca cere,vordnd dunlmo sro) a tw glo XX...) ly] aspira al deal flasotice da, ‘un copocimento bases, fundamental) delequees(.-) ie ae vuelea hacia adentro, hacia el sajeto agmoncente “donde intenta deseabrir los fundamentoe dena car siumbre.en nuestro-congcimients” del "mend exterior" Gtadison, 1988, pig. oe 6 Rp TSU inaios enon trad ‘ion moderna del constintanta representatives eotoet SiSotoceome una yuntapoetcion de ropresentacines exe. iter (pag. 169) ol ontatdanonio ex somo un cops ae filo a nataralece Elindividuo can ser capers clva Trento opera como on sistema roprewantacenal iar ‘Sa computadore, Hi entendimientaactia comp une posing ‘ental Tnterntdp Ia realidad. La resided fs = es un hecho fio, @ priori, Smpirico, Inds onte del cbeeEVatior Desde extn perapectiva como lo Bropone el profesdr de Hlosolia GB. Madison (1988), 2 B. Madison (196 ses compa ona inna y simplemente ont sapere de aijeto Sopngncehta forme wala “represonae Se mentioa *) Silel observador] puede coneciars ‘Gene bo insets corset, eccede send wna epee ‘ealnsionVerdadcrao algo pateidg a i Ftdad “bt Sete Desde esta perspectiva, ol sujeto cognascente es tinome y separa de nelle scribe plea se teate de lig fie isos ano.coma ua fndivido que conc ts la fentey validacion de Yodo conocimionto El individu eo Privilegiade En esta vernign modernista, ellenguaje ese medio para elgipacniontn ede clemasnionio ae gmanin aa ‘és del lenguaje. Us funcion dl lenguaje (palabras y simbo- loszvefbales y no verbales), gual que I del eonocimiento, es offecer un quadro corfecto que fepresente el mundus: {Was experiencas en el mundo eer aloque es real Los 64 seres humanos utilizan ol lenguaje como un medio para franamitir peneamientos ¥ sentimientos, 0 como una expre- sign (ieidegger, citado on Palmer, 1985, pig: 20) La psicoterapia desde una perspectiva moderna El modamismo y sus verdades proveen los cimientos de Jas humanidades y las ciencias sociales, Nuestra cultura de 1a pelcotarapia —-nuestras teorias, practicas e investiga. ‘ign, tanto en psicologin como en priquiatria, asistencia to. ‘aly terapia familiar tienen en ese discurso dominate ‘su base histdrieay son eu refleo; él ha clevado al terapeuta ‘ala posicién do un obsorvador independiente con acceso pri- ‘ilegiado al conocimiento dela naturaleza humana, las per- onalidades individualee, la vida de relacién, las eonductas normales ¥ anormales, os pensamientos, centimiontos y ‘emociones. Hate canociionto permite a los terapeutas ob- servan, describir y explicar objetivamente los comport Imiontos, Con esta nutoridad de conocimiento y verdad, loa terapeutas mantienen una posicion dualista yJorarquica, ¥ ‘ceasi como au saber predomina sobre el saber marginal, co tidiano, no profesional de los clientes. ‘Desde una perepectiva moderna, el conocimiento spor to tanto, 1a verdad, ee piramidal constraye una Jerarqua, {in terapouta, en tanto reprenentante de un discurso socal y cultural dominante, sabe cual es la historia humana y ‘ual daberia ser Kato saber del terapeuta, basado en teorias, prejuicios y experieneias profesionalos y personales, acta ‘como una estructura a priori que predetermina el conoci- Imienta que un terapeuta trae 2 la seston, y se impone al co- ‘nocimiento del cliente. Bl terapeuta ee convierte en un ex ‘perto en observar, revelar y deconstrui la historia tal como realmente eay tal como deberta sex. El conacimiento del ‘Fapeuta da forma a fas observaciones y las valida: acta ‘Como uni sretro-referenciae y sproyecta el pasado en el Ri: tsiron (Giongs, 1990, pag. 78) ‘El diseurso modernista porpotsa a nocién delas metafo ras universale, descubribles, para la deseripeién human, fiieas fins monovocales y determinadas unilateralmente, sobre la naturaleza humana wniversal y la canducta indivi 6 dual, Estas verdades pasan por alto el mundo interperso- ‘hal, social, econémieo y politico en que vivimos —un mundo fen Constante y rapido cambio, las variaciones que exis- ten dentro de este mundo, Como los extareotipos deseriptos por la fldsofa ferinista Lorraine Code (1988), estas verda- {des se convierten simplemente en dogmas, «productos de tradicion cultural, adquiridos como parte del proceso de ‘aculturacions (pdg’ 192). Aglomeran gente, problemas y s0- IMciones en grupos homogeneos que enmascaran y descono- cen sutlocas y diferencias. ‘La torapia modemnista eo un proyecto liderado por el te. ‘stratogiass do tratamiento que se determinan a priort ye ‘aplican indiscriminadamente, A su ver, los pensamientos y Is acciones del terapouta pueden validar y reificar su pre- ‘onocimiento, yhacer que se pierda odesoche lo singular, 1 ‘0 y complejo en un individuo o un grupo de individuee, A ‘medida que el pre-conocimiento y la vor monovocal se for. ‘mun, los resullanties pensamientas y accones del terapesita Uenden a dominar y-silenciar Ia vor del cliente. Al mismo tiempo, creo, laa metaforas y narrativas familiares e hacen utolimitantes, reduciendo Ia capacidad crentiva e imag. ‘hativa del terapeutay por tanto, la posibiidad devwna no ‘ewlad desconocida —que puede emerger cuando se hacen Dresentes las voces del cliente, of torapeuta, y otras perso- hhas—. Creo firmemente que privilegiar mucstras vooes do terapeutas contribuye a perpetuar la desigualdad insti- tucional, tanto en el nivel local de la relacion terapeista. lento como en el nivel universal de la relacign individo- familia-sociedad —por ejemplo, al ignorar o apoyar genera. Neaciones sexistas,raciatas o relacionadas con la edad TEl discureo moderista promucve la nocign dualista y to. En este discurso, os participantes son entidades extati che geparadas —cliente y terapeuta—, y no partieipantes ‘que interactien en tuna empresa conjunia. Hl aspecto rela ‘ional de la nocién del individu-en-relacién pasa a segundo plano. Elliente, en tanto sujato de indagacion que no sabe, ‘ce lberado del problema malvado por un terapeuta que sa. 66 bey 06 un experto en la naturalezay la conducta humanas: Tiere ibereador "Un lenguaje de peicoterapin basado en un discurso mening basa on una dfciencia oe rosupone que representa adecuadamente la reali Emndosialy ental Par utlisar iuevamente la métaora Se orty G70) do la mente eupejo al aujeto de indagacion (Gi ients) elo considers defctanco, fll ydistancional. {ins dlaundstces opera como sdigos cultural y profesto ‘ales para recolectar analiza y ordenar datoo a espera {cor descubiortn, A medida que se descubren sides ‘Ypautas la gente y sus problemas ae asignan a un sistema ecatagorias de defcencia, mantenido méravés del lengua. Jeyelvocabulasio de nuesttos dincrson, Bato crea uaion {ic un conocimiento pateologicn generalisable: El lengua: Jey los voeabularis dela picoterapin, entoncee, son im forsonslce y desconocen ef cardeter singular de cada in- {Teiduny cada situacion (Gegen, Hina Anderson, 1005) Las etiquotas profionsiesy culturies clasean 5 “gman a las poreonesy no how dicen nada sobre ella. Hl pelcdlogo noruege Jan Soscdalund (1978, 199, 1999) ha ew- Enito abundantemente sobre las diferencina entre la rea Sal objetivay pteosocaly propane to que elas -psicla~ {in do somtsdo comine: en pocse palabran, esas expilenci fre pucalgcas -considerndascorrectaa por todos los que Ranlan cl idioma en el que seas formula (1990, pa. 40). ‘Deode esta porepectiva moderna, ia paioternpin es un tecnologia tun ber hemano a una maquina 9 ol tarapests, tin tecnico que trahaja con maquina umanas defectwosas Gndcrson ¥ Goolishian, 19686, 1991a). Para retomar la Comparacion mentecapejo de Rorty (1979) la mente 02 ‘eprosentacional —comotin expejo-~ ysl aparecen man: ‘hao no puede reflgjar realidad con exactitud,entonces fn tazen del terapoutn ea vinepoccionarreparar pulls el ‘Src defecuoao (pag. 12) El papel de terapeuta es ding Sostlear la disfuncion ol defecto (en la conducta indivi ‘tua, em las putas de interaceion, en la ereencian, oon as ‘Mutocag) eel sistema borane en eueetion individuo, pareja, fala), y evolver a sistema un estado normativo Ein ndividuo dferenciado, una pares complementaria, tuna familia funciona. ata perspective, el lenguale eo UTmedio, a herramicnta que Noe permite waar nuestra posicidn privilegiada para deseubrir, explfear, predecir y cambiar Limitaciones, fronteras y desilusiones de la terapia modernista Siempre hemos vivido en un mundo donde eabe esperar que las cosas cambion, aunque a veces lo hagan en forma eaética. La filosotia ha procurado ofrecer estructuras para ‘comprender el cambio y controlar el enos. En la actualiad, cuando el mundo parece que cambia més rapide y se hace fenormemente complejo, el cambio es mengs predecible yin ‘dda, més eadtico. Con palabras de Peter Drucker (1990), el jinnovador consultor de empresss, Nunca, en toda Ia historia escrita, se produjeron tantas transformaciones, y tan radieslos, come en el siglo veinte (2) Bn la altima década de este siglo, los proceso, ls pro- Dlemas, las extractoras del mundo laboral, ela societad, de Ia politica, ve distinguen cualitativa'y euantitativamente ‘no sélo do la realidad de principios de siglo sino también de Ja do cualquier otra época historca ...) Pero som las trans formaciones sociales las que, cual corvientes subterraneas moviendose muy por debajo de Ia superficie agstada del ‘eéano, han ejereido un efecto duradero, inchuso permancn- te.) La edad de la transformacion social to Uegara st ‘érmino en el afio 2000; ni siquiers haba sleancado su cul. rminaciéne (pag. 54). Estas transformaciones sociales, y In incertidumbre que las compara, influyen en nuestra vida cotidiana. Bl futuro, {que incluye cambios y retes poitios, econsmicos y cultura les, requiere una nueva actitud mental y nos exige cambios ‘en nuestra comprensidi del mundo y del luger que oeupm mos en él (Gergen, 1982, 18912, 10010), Desde Ia perspettt vade las ciencias socinles, el madernismono esta ala altura de estas complejidades 9 estos reton, El poamodernismo ha aparecide como una nueva forma eo indagacion propuesta por estudioaos de diversas dis ciplinas que han cuestionado las metanarrativas, la cert 68 dumbre, y los métodes y précticas del modernismo en las ‘Goncias tradicionales, la Iteratura la historia, el arte y las ciencias humanas Berger y Luckmann, 1966; Gergen, 41982, 1985, 1904; Harre, 1988; Lyotard, 1984; Shotter, 1989, 19916, 19990, 19980; Sylvester, 1985; Vigotsky, 1086). En arte, por ejemplo, el etico David Sylvester (1985) ‘compara la esencia del modernisme yel posmodernismoy la bistoria de las arte “. Por el contrario, el posmodernismo alienta la ‘critica social; desde una perspectiva posmoderna todo esta ‘sujeto a cuestionamiento, incluyendo el posmoderniamo. ‘Abiora que entramos en el periode posmodermo y la realidad ‘bjetiva desaparece, no se atribaye mas verdad a las tao- ‘aa cientifiens organizadoran aceptadas, en particular las de las ciencias sociales, quo a otras deseripciones ofesiones Subp, 1970) ‘Sibien me interesa todo el paisaje posmoderno, los puin- tas contralea de mi eonceptualizacion se apoyan en dos pets poctivas intorpretativas: Ia hermengution filossfiea con. fempordnea y el canstruccioniamo social. Desde mi punto de vista, ambos levan a una transformacién dela cultarn dela terapia. Hacia una transformacién La hermencutica fleséSiea contemporinea y el construe: cionismo social van alos sistemas humanos como entidades ‘complejas intogradas por individucs que piensan, interpre fan y comprenden. Una y otra euestianan la aplicacion de Jas explicaciones tradicionales de as clencias fisicas y nat aloe al andlisis de los sistemas humanos,y considera que In -precomprenins inherente a tales explicaciones no per. mite apreciar la complejidad de lo humano. Nila una ni el tro ofrecen un «marco taro sistematice, con su corres. pondionte metadologia» (Semin, 1990, pag. 151); en cambio, Jos dos presentan wn marco para la ertiea de los conceptos ‘modernistas, yuna alternative istintos, el constraccionismo socal y la herme- néution Henen similitudes. Ambos examinan los supestoe ‘que mueven a las creencias préctions cotidianas: cme Droducimos y comprendemos a los individuos y Ine insti tuclones sociales; como participamos en lo que creamor, vivenciamos y deseribimos (Giddens, 1984) Ambos com: pparten una perspectiva comprensiva que acentia el sent do sentido consteuido, ao impueste-—. Por ejemplo, los n significados de las palabras, lo signifendos que atribuimos ‘2 los acantecimientos ¥ experiencins de nuestra vida, inclu- ‘endo nuestras identidades, son ereados por individuos que “onversan e interactian con otros y consigo mismos, 9 20n Siempre susooptibles de una variodad de interpretacionen, ‘Adena, tanto para la hermencutica como paral construc. ‘lonismo social «El sentido ha de Verse (.",) como tna co- preduecién do quien habla y quien escucha, donde ambos ‘Comparten el mismo poder active de competencia lings teas (Mueller Vollmer, 1989, pag. 14). Para ambos, el len- [Euaje desempesia un papel central; ereencias y practicas se ‘inculan eon, se creas en, oourren en el lenguaje, Tanto los Cconstracsionistas slates come los hermeneutas euestio- ‘ban que el entendimiento pueda reflgjar, revelaro ser reve- lado (Gergen, 1990). Hermentutica La hermenéatica es uno de los primeros cuestionamien- tom ala teoria eartesiana del conocimiento, que separaba al bbeervaddor de a observado, Historicamente, a hermengstl- tse remonta al siglo XVII, y surgi inicialmente como un ‘enfoaue para el andlisis ylainterpretacion correcta del tex. to biblice y do otros textos Iterarics ~el lector deseubre © interpreta la palabra escrita-—. nla tradiion de luminia= ta, el interprete era como Hermes, l menaajero de loe dio- Sex, quien debin comprender e interpreter lo significado por ‘los para entonces poder ‘Bunge sogurarme de que ofa to que ella queria que yo vera: =[Se refee l trabajo duro, las desilsiones? ‘Comentarios No quiero caer en un malentendido Un productos. ‘Una ves mds pregunts para ver si habia entendide bien: aySentinve tratada como un producto, mas que como una persona Nor, contost. Comentario: Ages mi curiosidad sobro ol trabajo duro y las desilusiones nos llevé momentaneamente a lo que pudo parecer una orientacion dstinta, pero yo simplemente volv! ‘algo que Sabrina haba mencionado antes. Wolvi a tratar de entender qué habia sido duro. Sabrina hablo sobre el proceso de encarar éxitos y fracasos, y sus ‘entimentos aceren desu carrera, =Yo soy un buen producto € $ la gente deberia comprarme-. Siguio diciendo que entre Tos diceiocho y Tos veintiin aioe las eosas se pusieron real- ‘mente embarulladas. Dijo que ese habia sido el primer ‘cambio grande en su vida, porque hasta entonces #1 con: Sducta habia respondide alo que todos supontan, que e que- ‘daria a vivir en ol pucblito de New England donde se habia criado, ‘Progunté: {Entonces, e¢ un poco una lucha entre lo que la gente queria que fuera y lo que usted queria ser? (Bs una ‘manera de deserbirlo?. “Boto nes lieve de vuelta al examen de sus relaciones, su falta de autoestima, su tendencia « privilegiar las nece- {dates de los otro, o lo que ella imagina gon sus necosida ‘dea, Sabrina dijo que aunque no ce fo pidan, ella siempre ‘Quiere agradar. ¥ esto naturalmente nos lieve de vuelta ast padre. ‘Comentario: Tado puede ser'0 no ser tema de conversa cidn. No quiero privilegiar una cosa sobre las demas. Si uno ‘Sige al eiente, el elemte Io leva hacia donde es necesario i Durante este encuentro, omo en cuenta las cireunstan- ‘ins de nuestra conversacion: una entrevista publica, en vi- ‘Vo, requiere mucho reepeto del cliente y del tarapeuta. ‘Hable un poco de emo su papa encajacn todo esto, {Co smo lo situaria weted on ma bregar con el tema de las relacio- ‘nes?s, progunts ‘Ssbrina hablé de su familia, el divoreio de sus padres y ou papel on la familia estas arain algunas de Ins cosas sem barulladas- que habia mencionado antes), Hablo de poder ‘yde abuso, Sorprendida,exclams: «Oh! Estoy usandola pa- labra abuso: on Sager ine quod mis sinus adn qua post nceia Ries Sre bahar nian foe “Sabrina no sabja si lo deseaba o no, Katuvo de acuerdo ‘on que era una progunta abierts, impredecible ‘Comentario: Hablar ono hablar sobre este terns es su de- «isin. Podria haberle preguntado por los factores que pes ban en su decisién o por lo que debia cambiar para que ella udiera hablar. Beas preguntas habrian indieade que yo Valoraba hablar sobre ol tema, Di otro iro de 180 gradoe hhacia algo que recordaba: In fuerza de voluntad. Cuando ae presta culdadosa atencion y se Gene gentina interds en 1o Que otra persona dice, se desarrolia una buena memoria. A menudo suben a la superficie coma fdas antes, en la nie tha conversacisn on otras, Pero esto no quiere decir que las agames rosurgis ‘Todavia siento curiosided por esa fuerza de voluntad>, dijo. Esto nos lows de vuelta a la relacién entre sRuerea do Yoluntad y cambios, y me pregunté eihabrfa alguna rela. ‘lén entre ia forma en que Sabrina manejaba sus relaciones su carrera ‘Sabrina habla aludido a que Jane la haba ayudado, ast que le pregunts on qué forma lo habia hecho. Dijo que dane Inhabia ayudado con au carrera. Hablé de una situacign en Ja que ella estaba muy angustiads porque no sabia como [repararse para una entrevista de trabajo. Repiti lo que le habia dicho a Jane: acin Tos straspasos de limites Se refiriém la imporeancia ‘dela -congrueneiary In sconexiéns. Dio que ella shace me thas preguntas personales-, y que la terapeuta tiene que 1a para poder responder a ese en forma pra. ional: «Yo quiero saber, yes muy importante para mi como aciente, saber algo de quién es esta persona; de lo contra. =p Fo, no me puedo eonectary ‘Se refirié a la mportancia de tener alguna idea de quién ‘Jane era casada, y qué clase de relacion tenia. Le pregtn- ‘habia algo que me queria preguntar # men sobre usted, Yo creo que la mayo ia de los clientes quieren saber algo sobre sus terapeutas ‘como personas, y que debemos otorgaries ese derecho, “Usted no sabe mucho sobre mi, sta shi sentada, esc chando. Qué le pasa por Ia mente? {Céno trabaja? {acu ‘cha mis palabras? Que elige de lo que dige? Qué quiere? {Hlacia dénde intents llevar esta senion? 2@ué busca demos. frar? iQue clase de maestra es?" ‘Compart alunos de mis pensamientos con ella. Siento ccuriosidad por usted ¥ Jano, por sus propésitos para el en. ‘cuentro de hoy, por aquelloen que les podria ser Util Agre- {ud algo sobre Io que me parece valioeo, como terapeuta, ‘Sabrina coments: »E como corre? lado a lado com st cliente en lager de decir “venga, puede hacerlo" (haciendo igestos de “venga hacia mf" con Ins manos) 0 “vaya” (hacien. fo gestos de empujar con Ins manos) SaSabrina dijo que los torapeutar deberian -crear un ama te lo suficientemente cémedo para que se pueda ha blars,y que el contexto yas circanstancias del momenta in- fuyen sobre el qué ¥ el como de la conversacion 4 1% Nuestra conversacisn tripartite terminé aqui, pero cada ‘conversacign os un trampolin para otras; esta dervo en ii ‘Sonversacion posterior con Jane y les participantes de la ‘Sonferencia, en conversaciones futuras entre Jane ¥ S bina, ¥ asf sucosivamente. ‘Ragresamos al auditor y 10s observadores conversa- ban animadasnerte extitados, Los comentarios fueron muy ‘varindost «No paso muchos; -Si yo fuera su supervisor...» “Sabrina diriglo la aesine; “Usted manejé toda la situacién ‘con mucha habilidad y muy respatuosamentes; -Magistral {ins opiniones parcefan estar divididas en tarno de si yo de- boria haber hablado sobre el sabuso sexual- o no. Algunos ‘pensaron que Sabrina me manipulaba para que no lo hicio- ar otros, que me invitaba a que lo ielera. Algunos pensa- ‘Fon que Sabrina traspasabs limites con sus preguntas sobre ‘ml persona y mis puntos de vista sobre la terapia. Respond {gue yocrea que lo clientes tienen derecho a proguntarme lo {Que quieran, y que yo debo responder. Dije que si un cliente {Guiere enbor lo que eatoy pensando, solo digo. ‘En mi vuelo de regreso a casa relexioné sobre un tema {familiar In gente vive ol miamo suceso muy diversamente Recordé otras ocasiones en que los observadores de una con- Yerancign la pereibian en forma muy diferente ala de otros participates, Yo queria respetar lax agendas de Jane y de Bubrina: «No ereo que ninguna de nosotras tenga expecta: tivas definidas: Estamos abiertas a lo que sea; quizis us- ‘ted pucda ochar luz sobre algo nuevo, quizas ofrecer nuevas postbilidades-. Queria respetar las creunstancias publieas Ue nuestra conversacion: na entrevista de demostracion ‘srabada para su posterior distibucin y observada por u ‘cantidad de paiccterapeutas. Queria respetar y proteger {ntagridad de Janne y In de Sabrina. Sabrina condujo,y 0) Aajeconducir ‘Una semana después, Jane dejé un mensaje en mi con- teatador telefnico, etando a una colega que habia observa. ddola entrevista: sSabrina no ina con un problema; vine con tuna eolucin, Ia solueign era “Quiero lentes, quiero con a ticto,y quiere eentirme bien conmigo misma. Hl respetuoso Ssbordaje de Hariene le permitio demostrar eca solucion” ‘Dos meses después recht una carta de Janeen la que re- litaba Ia experiencia de observar la videograbacién de la entrevista, en s siguiente sesign eon Sabrina \Volvor 2 ver Ia entrevista fe tremendamente producti- vo, Segsin Sabrina ella se sintio muy competitiva, y pet [sé que usted se habia sitoado de manera que la camara ‘mostrara su propia cara, y sdlola espalda de Sabrina. En realidad, la grabacién muestra quo la cdmara la enfoca- baa ella, y entonces hablames de emo Sabrina supane {que todos son tan competitivos como su familia. Despucs de Ia Sesion, Sabrina se pregunté: «Sabrina, {por qué la ‘ritieas tanto a arlene? y so contests: is porque te ‘rticas tanto a ti misma, Una ver que ee dio cuenta de ‘sto, Sabrina reevalu la sesion. Yo tampoco me habia ado cuenta de que una actrs, aunque més habitisda a Jas Ices y la cdmnara, quind se preoeupe més por su =e ‘tuacidne que alguien que no los, ‘Otro tema de discusign fae la conducta de la terapes- ta que traspasa limites. Fue muy itil hablar de eco des ‘pues de ver la grabacién. Usted mencioné que Sabrina Std constantemente dandole vueltas @ Ine cosas en st ‘cabeza, y que quiere pensar mas en la terapia y menot fora do Ia torapia. Cuando indagué mas en esta proble- ma, Sabrina dije que habia dejado de hacer eso (dar vue! {ae alas cosas en su cabeza) un par dedias después dela —¥ entrevista con usted Seis meses después recibi otra carta de Jane. Reclentemente tuve la oportunidad de mostrar la igrabacion a un grupo de estudiantes de terapia familiar ("Come sabe, primero me disgustéla falta de coopera dn de Sabrina, pero después que ella y yo hablamos, 10 ‘i distinto C..) Sabrina me autoriz6.a que meneionara us sentimionios competitives hacia usted, ylo que ha- bia aprendido en esa experiencia (...) Los estudiantes ¥ Jos otros docentes que asistieron ala clase pensaron que ‘su trabajo fue muy respetuosoy sensible, canto hacia Sa brina como hacia mi. 8. La preparacién del escenario «Bl camino ve veta lindo y florida cuando legs ta tuz,y dea ‘poco empecamos a abrir los ajo (.--) Cuando digo ef eamt- hho espero que nonos imagines en una earretera potvorienta. [Me alegra poder decir que en general somos los descubrido- tes de nuestros propios senderos. Cadla hombre es su propio Colén.'A veces tomamos atajos, que resultan ser largos ro- {deoe por montes yeafiadas, por zarsas ¥ matorrales; pO” 0a lles'y arroyo; eete viaje tiene algo tan independiente y di- vertido que, a pesar de sus fatigase inconventencias, se nos Nace detietos: hasta mucho mejor que viajar en el mds con: fortable de los carruajes construidos en Londres. ‘La vida en México, Las eartas de Fanny Calderon de la Barea (1804) ‘Cambios en Ia experiencia clinica En eleurso de mi reflexionar sobre as experiencias clini ‘cas que inspiraron mi curioeidad y docidicron mi inmersiGn nel pasmoderniamo, he ido creando un relato acerea de la Influencia de eggs experiencias en mi filosofla de la terapia. En todas cllaa/el Jenguaje ocups un lugar eontral, yon su. Conjunto prepararon Ia escena para pensar sobre los sis ‘temas hutanos como sistemas lingOistioas en un enfoque tte coproduecion (Anderson, 1995) Lo que sigue puede eon- Sldersree una shistoria oral, una narrativa de las madar- ‘2a8 de mi pensamiento elinico durante dilogos colaborat ‘pera Eoay tna Sts2® Soc ptoens or le Sopa vyos con clientes, colegas y estudiantes: una narrativa del ‘cambio De los objetivos retéricos a la indagacién ‘colaborativa Spinterte ened lenguaje Tnicialmente, nos interesé hablar el lenguaje del cliente (metaforica y Iiteralmente) para aprender ss valores ¥ eee eee - Bae eee ain ieee, Eeeas rt of cola cena va Soe ce ‘timate am tay como una téeniea para estimalar ss coope- racién en la busqueda del cambio. Bl lenguaje del cliente bfrecta claves para dafinir problemas, objetivos de trata. ‘nionta'e inter jeualquiera que Auese su forma); por ejemplo podia ser util para corregir creencias o intentoe fe solucion defectuosos. Crefamos que de esa manera lograba una mejor adecuacign entre eliente y terapia, En consocuencia, a) el cliente responderia major ald 2 vencanos do a trapeuts: ‘menos re. Sistancia, ye) ls terapia tendria mae postbilidades de ite. Con sa finalidad, prestamox mucha atencién a nuestro propio lenguaje y nos adaptamos, como eamleones, al pun Todevistadel chente a Ins creeticias de la fanilias, tlempo, sin embargo, nuestros disciplinados intentos de aprender y usar el Tenguaje de esta manera produjeron ‘cambios en nuastra experiencia eliniea, 98 Genuinamente absortos Descubrimcs que si excuchsbames muy atentamente a Jos clientes, realmente noe intereadbamos en loque estaban ticiendo, Sus hirtorias pecaliares nos resultaban absorben- {ey despre na vrdader crisdad por su pnton de vista y su dilemmas. Nos enfocamos cada vex ms en stoner Ia coherencia dela experiencia del cliente y en de- BES eS usin Dogue oa como ss ‘enioa de conversacicn con un proplsitoestratégico se Gon- ‘yirtis a euriosidad natural 7 ae Lengquajes individuales oiamm aie olga de aprender lengua do na familias aprendiamos low lenguains partculare IDES Ten tama ho teniarun lengua; au tlembroe Tviduales Io tendon, y cada longuaje ra datinto. Cada Sembee. pa deri el rbot pa clesorpein dela fumilia.y dela Fructteras, dejamos da buscar Ia negosiacion ol consenso (Gor ejemplo, en Ins definciones de problemas Olas poibes ‘Siadones en cambio, praseraraca mantener I ‘etna diferencia. Tato no eigmiica negue que fo miembros de In faiia compartan ston valores, tetas nian, Por fpuoss quolonacen Batra son agen do elementos ave Thanticnen alas fli unidasyles dan contnusdad. Pero pi nna opens br {Pte lo hacen, Now dios cuenta de que noextabamos_ {rato sanun problem, con un asin 9 eis sive

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