Exposición
Grupo No. 1 Características Bioquímicas de las Carnes
General:
Conocer las características bioquímicas de la carne.
Específicos:
Identificar las fibras musculares componentes de la carne.
Analizar los componentes químicos reconocer
Reconocer los colores de la carne referente a su calidad
Características Bioquímicas de la Carne.
Sabor y Olor: El sabor de las carnes posee cerca de 1.000 compuestos químicos
identificados en los constituyentes volátiles de la carne de vaca (res), ternera, pollo,
cerdo y cordero. Estos volátiles están descritos como compuestos químicos
orgánicos tales como hidratos de carbono, alcoholes, aldehídos, ésteres, furanos,
piridinas, pirazinas, pirroles, oxacinas y otros compuestos que se fundamentan
generalmente en el átomo de azufre y en los elementos halógenos.
Se cree en la comunidad científica que los sabores y aromas de la carne provienen
predominantemente de los compuestos a cíclicos azufrados y de los compuestos
heterocíclicos que contienen nitrógeno, oxígeno o azufre.
Color: El color es uno de los indicativos que emplean los consumidores a la hora
de elegir la carne. Las carnes de aves suelen tener, por regla general, un color más
claro que las de mamíferos, que suelen ser más oscuras y de color más rojizo. La
razón de esta diferencia es el tipo de fibra muscular que la componen, por lo tanto,
es diferente en las aves y en los grandes mamíferos, debido a la mayor intensidad
del trabajo que soporta la musculatura de estos últimos.
Fibras Musculares
A nivel del corazón se encuentra presente un tipo distinto de fibra muscular que da
origen al músculo cardíaco, en éste la contracción de las fibras musculares permite
que ocurran los latidos cardíacos necesarios para impulsar la sangre por el sistema
circulatorio.
Las vísceras contienen otro tipo de fibras musculares que originan el músculo liso,
la contracción de estas fibras es un proceso involuntario y permite que se produzcan
movimientos que aumentan o disminuyen el diámetro de las vísceras huecas y los
distintos conductos, favoreciendo o enlenteciendo el tránsito de sustancias a través
del mismo. Un ejemplo de esto ocurre durante la digestión, las fibras musculares se
acortan para dar origen a los movimientos peristálticos que favorecen el tránsito
intestinal con lo que alimento va pasando desde la boca al esófago, al estómago, al
intestino delgado y finalmente al colon, en este proceso muchos conductos
intervienen facilitando la llegada de sustancias necesarias en este proceso como la
bilis proveniente del hígado y las enzimas originadas en el páncreas.
(Andjus, 2006)
SARCOLEMA Y MIOFIBRILLAS
Sarcolema
El sarcolema (o miolema) es el nombre que se le da a la membrana citoplasmática
de las fibras (células) musculares. Es una membrana semipermeable y lipídica, tal
como las demás membranas de otras células eucarióticas. Sin embargo, la
continuidad de la membrana en la fibra muscular se extiende en forma de trabéculas
hasta el interior de la célula a través del sarcoplasma. A esas invaginaciones de
canales tubulares con sus ramificaciones se le conoce como túbulos-T. Este
desarrollado sistema de cisternas en asociación con el retículo endoplasmático liso,
conocido como retículo sarcoplasmático, contribuye con la propagación del
potencial eléctrico que produce la contracción de la fibra muscular, lo que permite
la excitabilidad del músculo. La composición de un túbulo-T más dos cisternas
terminales de retículo sarcoplasmático, se denomina tríada (ubicadas en la unión
de las bandas A-I de la fibra muscular esquelética), mientras que la composición de
un túbulo-T más una cisterna terminal de retículo sarcoplasmático es denominado
díada (ubicados en los discos Z de las fibras musculares cardíacas, en las cuales,
sólo hay uno por sarcómera). Su activación permite la entrada de iones Calcio, lo
cual es la señal de activación de contracción muscular.
Antes se usaba el término sarcolema para referirse a una gruesa capa "membrana"
que se creía que era el límite citoplasmático de la célula muscular. Hoy se sabe que
este sarcolema grueso consiste en la membrana plasmática de la célula, su lámina
externa y la lámina reticular circundante.
Es necesario destacar que algunas partes del celular muscular cambian sus
nombres, un claro ejemplo es la Mitocondria, la cual es llamada Sarcoma; o incluso
podemos destacar al Retículo endoplasmático el cual pasa a adquirir el nombre del
Retículo sarcoplasmático.
Miofibrillas
Una miofibrilla es una estructura contráctil que atraviesa las células del tejido
muscular y les da la propiedad de contracción y de elasticidad, la cual, permite
realizar los movimientos característicos del músculo.
Cada fibra muscular contiene varios cientos o millares de miofibrillas. Cada
miofibrilla contiene miofilamentos con unos 1.500 filamentos de miosina y 3.000
filamentos de actina. Estas son moléculas de proteínas polimerizadas a las cuales
les corresponde el papel de la contracción. Las miofibrillas están suspendidas
dentro de la fibra muscular en una matriz denominada sarcoplasma.
Las miofibrillas son un constituyente citoplasmático de las células musculares
(miocitos). Son filamentos delgados que se encuentran en el citoplasma de las fibras
musculares e inclusive se pueden encontrar alrededor de 2.000 miofibrillas (del
prefijo mio que significa "músculo"). Son pequeñas unidades estructurales y
funcionales de la fibra muscular. Estas últimas no presentan envolturas y los
espacios entre ellas están ocupados por el citoplasma de la fibra muscular, llamado
sarcoplasma, que contiene núcleos y mitocondrias, y a través del cual transcurre
una red túbulo-membranosa que desempeña un rol importante en el proceso de
excitación-contracción, denominado sistema sarcotubular. Este sistema está
formado por un sistema T y un retículo sarcoplasmático. El sistema T de túbulos
transversos, que es continuo con el sarcolema de la fibra muscular, forma una rejilla
perforada sobre la superficie de las fibras musculares individuales. La función del
sistema T es la transmisión rápida del potencial de acción desde la membrana
celular a todas las miofibrillas contenidas en la fibra muscular. La contracción de
una fibra muscular requiere de la contracción simultánea de todas sus miofibrillas.
Tejidos Asociados:
Tejido Conectivo: Como su nombre lo indica, el tejido conectivo conecta y
sostiene varias partes del cuerpo. Representa más del 30 % de la proteína del
músculo. El tejido conectivo está distribuido en el cuerpo como un componente del
esqueleto, los órganos, la sangre y los vasos linfáticos, así como en las envolturas
de los tendones, músculos, troncos nerviosos, fibras musculares y fibras nerviosas.
La piel está unida al cuerpo por tejido conectivo.
El tejido conectivo se caracteriza por tener relativamente pocas células y una
considerable cantidad de sustancia extracelular. Esta sustancia extracelular tiene
fibras embebidas en ella, que son los elementos estructurales del tejido conectivo.
Es decir, que el tejido conectivo consiste en una masa sin estructura, llamada
sustancia fundamental amorfa, donde están embebidas las células y fibras
extracelulares.
GRASA: Cuando un animal come más alimento del que necesita para mantenerse
y proporcionar la energía para vivir y moverse, el excedente se convierte en grasa
que comienza a acumularse en los tejidos corporales. La grasa se deposita en el
tejido conectivo dentro del músculo, donde se conoce “marmoleo”. Se deposita
alrededor de este, entre uno y otro, debajo de la piel y en otro tejido conectivo que
contenga células especiales que almacenen la grasa. La edad, alimentación y
cantidad de ejercicio de un animal influye sobre el contenido de grasa de la carne.
La carne de animales bien alimentados con ejercicio limitado y que hayan pasado
el periodo de crecimiento más rápido, tiende a contener más grasa. Los cerdos
acumulan grasa más fácilmente que cualquier otro animal productor de carne.
Proteínas miofibrilares
Las proteínas estructurales de las miofibrillas del músculo esquelético están
clasificadas en tres categorías: contráctiles, reguladoras y del citoesqueleto. Las
propiedades de estas proteínas son de significativa importancia en los atributos de
la calidad de la carne post mortem, están muy relacionadas con el rigor mortis, la
ternura y la capacidad de retención de agua de las piezas de carne.
Proteínas reguladoras
Tropomiosina: Representa del 10 al 12 % de las proteínas contráctiles. Ejerce
conjuntamente con la troponina una función reguladora e imparte estabilidad
mecánica a los filamentos, debido a su alto contenido de alfa-hélice. Forma un
complejo con la F-actina, con la cual tiene gran afinidad. Posee una estructura
asimétrica de sus moléculas.
Proteínas reguladoras menores
Estas proteínas están asociadas a los filamentos de actina y miosina. Entre ellas
están las proteínas M, C, F e I. La proteína M tiene un peso molecular de 165
kilodaltons y se encuentra en la línea M de los filamentos gruesos. Está compuesta
de una cadena con el 13 % de alfa-hélice y el 35 % de estructura beta, el resto de
la molécula es de estructura irregular y no ha sido completamente caracterizada.
Proteínas del citoesqueleto
Estas proteínas desempeñan un papel estructural en la arquitectura de la miofibrilla
y de la célula muscular. Se cree que dan continuidad mecánica a lo largo de la
miofibrilla, y que en última instancia son las que proporcionan la elasticidad a la
fibra. Las más importantes son la conectina o titina (del filamento elástico), la
desmina o esqueletina (del filamento intermedio) y la alfa-actinina (de la línea Z), la
nebulina (en los filamentos delgados) en la unión miofibrilla-miofibrilla y la vinculina,
en la unión miofibrilla-membrana celular.
Proteínas Sarcoplásmicas
Este grupo de proteínas incluye muchas enzimas solubles involucradas en el
metabolismo anaeróbico, las enzimas mitocondriales del cual de histidina. El sexto
enlace se utiliza para unir sustancias gaseosas como el oxígeno, el óxido de
nitrógeno o el monóxido de carbono entre otros, que aportan un par de electrones
Esta unión es reversible. La mioglobina desprovista del grupo hemo se conoce como
apomioglobina. En la oxidación del átomo de hierro bivalente el hemo se transforma
en hierro trivalente y se llama hemina.
Color de la Carne.
El color es el factor más importante en productos cárnicos que influye en la decisión
de compra del consumidor y afecta la percepción de frescura del producto.
El color de la carne puede variar del rojo–púrpura intenso de la carne de res recién
cortada a un ligero color gris de la carne descolorida de cerdo.
El color de la carne fresca y curada depende de la mioglobina. La mioglobina es una
proteína soluble en agua que almacena el oxígeno para el metabolismo aeróbico en
el músculo. Consiste en una porción de proteína y un anillo de porfirina no proteico
con un átomo de hierro central. El átomo de hierro es un agente importante en el
color de la carne. Los factores que determinan el color de la carne son el estado de
oxidación (química) del hierro y qué compuestos (oxígeno, agua u óxido nítrico)
están adheridos a la porción de hierro de la molécula.
Debido a que los músculos difieren en gran medida por su actividad, su demanda
de oxígeno varía. Por consiguiente, se encuentran distintas concentraciones de
mioglobina en varios músculos del animal. También, conforme el animal envejece
hay más mioglobina. Una mayor concentración de mioglobina produce un color más
intenso. La concentración de pigmento del músculo también difiere entre especies
de animales. Por ejemplo, la carne de res tiene considerablemente más mioglobina
que el cerdo o el cordero, dando así un color más intenso.
Reacción del Color de la Carne
De todos los mamíferos las ballenas son quienes detectan el más alto contenido de
MIOGLOBINA.
MIOGLOBINA
está compuesta por una proteína globular, la GLOBINA y un grupo prostético el
“hem” un anillo porfirinico con un ion ferroso en el centro. Posee un solo grupo hem
por molécula, mientras que la HEMOGLOBINA tiene 4
HEMOGLOBINA
posee una fuerte afinidad por el oxígeno bajo condiciones aerobias, la mioglobina
fija oxígeno en forma reversible sin que su átomo de hierro sufra oxidación.
En este proceso, la molécula de agua es probablemente remplazada por el oxígeno.
El ejemplo OXIGENO-MIOGLOBINA, denominado OXIMIOGLOBINA tiene el color
rojo brillante de la carne recién cortada.
OXIMIOGLOBINA
sirve como reserva de O2 en los
músculos, en los cuales los periodos de
trabajo intensivo pueden provocar
situaciones momentáneas de déficit de
oxígeno.
Carne con déficit de oxigeno:
Cuando la mioglobina sufre oxidación en el ion férrico se obtiene un pigmento
pardoso denominado METAMIOGLOBINA. En el tejido vivo la metamioglobina es
rápidamente transformada nuevamente en mioglobina, mediante la acción de
agentes reductores como la glucosa.
La mioglobina se oxida a metamioglobina con mayor facilidad, cuando la globina se
desnaturaliza.
(Ramirez, 2012)
Conclusiones