paisajes, ya sean urbanos o naturales, donde haya mucha gente que no nos interese captar en la
foto.
Para conseguir resultados óptimos necesitas experimentar y tirar unas cuantas fotos de prueba
hasta dar con el ajuste perfecto. Si disparas a una velocidad de, pongamos, 1 segundo, y ves que
se sigue viendo cierta silueta de la gente, repite el experimento pero ralentizando la velocidad,
esta vez a 2 segundos por ejemplo, y pruebas. Y así hasta dar con una velocidad tan lenta que los
objetos y personas en movimiento se dejarán de ver prácticamente. Los elementos fijos de la
foto, que normalmente son lo que te interesa: edificios, monumentos, etc., al ser elementos
estables y fijos, se verán con total nitidez (gracias también al uso del trípode).
Obviamente para conseguir esto necesitas un filtro de densidad neutra, sobre todo si es de día.
¿Por qué? Porque de día tendrás demasiada luz y acabarás probablemente con una foto
sobreexpuesta. Los filtros de densidad neutra te permiten fotografiar a velocidades muy lentas, a
plena luz del día, y seguir obteniendo una foto correctamente expuesta.