Trabajando La Memoria Energética

Al practicar las terapias, has podido

observar que cualquiera de las cuatro formas
en las que empleamos los imanes (fricción,
rotación, sucusión, estática), son muy
efectivas. A continuación en este nivel,
aprenderemos a trabajar con la memoria
magnético-energética, a fin de facilitar la
efectividad y rapidez de nuestra terapia.

Para lograr esto, tenemos que

comprender que podemos grabar en la
memoria energética todas las formas de
emplear los imanes. Para ilustrarlo, veamos
el siguiente ejemplo. Un terapeuta encuentra
que el dolor de cabeza recurrente del
receptor de la terapia es ocasionado por tres
agresores energéticos, los cuales son:
primero, el gel que se coloca en el pelo.
Segundo, la carga positiva emitida por el sol.
Y tercero, la energía de un virus que se
encuentra alojado en las meninges. Estos
tres agresores están impulsando la
enfermedad.

A continuación, el reflejo magnético me

indica que es importante drenar esos
agresores. El primer agresor que es el gel, lo
drenará energéticamente, barriendo
(friccionando) el imán polaridad norte por la
mano derecha durante unos cinco a seis
minutos. El segundo agresor que es la
energía positiva que emite el sol, lo drenará
barriendo por la misma mano derecha por
otros seis minutos. En cuanto al tercer
agresor, el reflejo magnético pide que lo
drene por la mano izquierda por espacio de
cuatro minutos. Al hacer esto, el terapeuta
solo en este paso tendrá que invertir
aproximadamente dieciséis minutos, cosa
que puede ser agotador cuando tenemos
mucho trabajo.

Una de las cosas como podemos

simplificar nuestra terapia y tener buenos
resultados, es trabajando con la memoria
magnético energética. ¿Cómo lo podemos
hacer?

El procedimiento es el siguiente.

Primero tenemos que recordar que los

imanes son como esponja energéticas que
graban el historial energético en la energía
vital. Esta es la razón por la cual enfermamos
en muchas ocasiones, pues aunque no
estemos usando ya algunos agresores, estos
ya quedaron grabados en la energía vital,
afectando la salud del receptor de la terapia.
Esto de la memoria energética es una
propiedad intrínseca de la energía vital, y nos
pudiera dañar cuando usamos agresores, o
también la pudiéramos usar en nuestras
terapias a nuestro favor al realizar nuestras
terapias. Por tal razón, si el terapeuta
anteriormente mencionado tiene este
conocimiento y quiere realizar una terapia en
menos tiempo, es necesario que use esta
memoria de la siguiente forma:
 Primero, preguntar al reflejo magnético
si se puede trabajar con la memoria
energética. El noventa y cinco por ciento de
las veces, el reflejo nos reporta que sí. En
caso de ser afirmativa su respuesta, a
continuación el terapeuta friccionará la
mano derecha, para drenar la energía del
primer agresor que es el gel, y con solo hacer
esto de una a seis veces, se grabará en la
energía vital del receptor de la terapia este
procedimiento de drenado energético. Y el
terapeuta solo tendrá que dejar el imán fijo
en la punta de los dedos de la mano, para que
la memoria energética que quedo grabada en
la energía vital, continúe haciendo el trabajo
de drenar esta energía mórbida del agresor y
el terapeuta pueda empezar a drenar el
segundo agresor. Y continuar drenando
después de esto el tercer agresor, puesto que
el segundo agresor quedo también
drenándose por la memoria energética. Y así
sucesivamente puede continuar con la
vibración para inactivar un patógeno,
mientras los imanes están colocados fijos
para drenado energético de los agresores.

Este procedimiento de trabajar con la

memoria energética, simplifica mucho la
terapia pues nos ayuda a hacer una terapia
completa en aproximadamente veinticinco
minutos, exceptuando el ajuste emocional.