NYT
1 de 3
Desminadores kurdos posan junto a artefactos desactivados en zonas de combate
NYT
2 de 3
Lanzadores sin retrocesos fabricados por el EI, mostrados con una variedad de
proyectiles reutilizados.
NYT
3 de 3
Un cinturón suicida producido en masa por el Estado Islámico. NYT
Por John Ismay, Thomas Gibbons Neff y C.J. Chivers, The New York
Times News Service
Los cohetes químicos improvisados son una de las armas que desarrolló
el Estado Islámico (EI) durante un proceso masivo de fabricación de
armamento que bien podría ser el mayor por parte de un grupo
yihadista.
Se creía que las casas eran seguras. No obstante, cuando una familia
regresó y conectó un generador, su hogar voló por los aires a causa de
una inmensa explosión, de acuerdo con Snoor Tofiq, jefe de operaciones
en Irak de Ayuda Popular Noruega, organización que está quitando
armas improvisadas de zonas que abandonó el EI.