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Nuestro método para germinar semillas de

Tomate Gigante
El tomate se desarrolla en estado óptimo a una temperatura de 25ºc durante el día y 15-20 por la noche, por debajo de ese rango tiende
a frenar su crecimiento y por encima de 35ºC surgen problemas. Por debajo de 0 grados la planta muere. Los tomates se suelen cultivar
si son precoces de enero a abril, sin son tardíos de septiembre a diciembre, lo suele indicar el artículo en su descripción, sino se cultivan
normalmente de mayo a septiembre. El tomatero no es exigente en suelos, pero los prefiere orgánicos y sueltos, tolera cierto grado de
salinidad, pero no aguanta el encharcamiento, por ello debe de cultivarse en un terreno que drene bien como casi todas las hortalizas.

Se puede sembrar en el exterior si las temperaturas nocturnas superan los 10 grados, deben de enterrarse no más de un cm y plantar a
distancias de no menos de 40-50cm. Lo mejor es siempre sembrar en almácigos en el interior y luego repicar las plantas al exterior cuando
tienen varios pares de hojas. En semilleros a 25ºC tarda una semana en nacer, a 10 grados mes y medio, a 35ºc unos 10 días. Se puede
abonar el terreno antes de plantar con algún estiércol o compost, poco más necesitarán los tomates en cuidados.

1.- La semilla

Para plantar la semilla, deberás utilizar semilleros, o pequeñas macetas o botes, aunque también te puede valer, un envase de yogurt,
o algo similar.

Deberás hacer pequeños agujeros, de más o menos, dos centímetros de profundidad en tierra húmeda y blanda. Es necesario
mantener la tierra húmeda, para ello puedes apoyarte con un difusor, de manera que la semilla no tenga exceso de humedad.

La planta de tomatera, debe tener una exposición al sol, la mayor parte del día, además deberás tener cuidado con las bajas
temperaturas, ya que pueden dañarla, así que deberás protegerla. También puede realizarse en el alféizar de alguna ventana, que
cuente con suficiente luz solar.

2.- Germinación

En el transcurso del cultivo, la semilla tendrá que germinar, para cuando termine el invierno. La semilla debe sembrarse en macetas
pequeñas, ya sea dentro de un invernadero o en el interior de la vivienda. Es necesario realizar esta acción, aproximadamente antes
de seis u ocho semanas antes de la helada final de la temporada. Hay que recordar, que la tomatera o semilla de tomate, es muy
sensible a las temperaturas frías, incluso puede matarla.

Después de que hayan pasado dos o tres semanas de haberse sembrado, tendrás que trasplantar los brotes, al macetero o recipiente
en el que crecerán definitivamente.

3.- Trasplantar los brotes

Cuando los plantines alcancen un tamaño de aproximadamente 15 o 20 centímetros, se puede comenzar a realizar el trasplante a los
lugares definitivos donde estará la planta, esto debe hacerse durante los meses de abril o mayo pero hay que tener en cuenta el clima
de la zona porque las tomateras, como ya os he recordado, pueden ser muy delicadas a las heladas.

Para realizarlo, hay que hacer unos hoyos de aproximadamente seis pulgadas de diámetro y unas cuatro pulgadas de profundidad, se
sembrará la plántula, y luego se le agregará suficiente abono orgánico casero, de manera que la raíz quede totalmente cubierta de
tierra pero sin que llegue al tallo ni a las hojas.

Luego se clavará una estaca, palo, o varilla de un metro y medio de alto y a unas seis pulgadas de la planta. Esto se hace, con el fin de
ir atando la planta a este soporte, darle un apoyo, conforme vaya creciendo y, de esta manera, evitar que la tomatera se doble,
además previene que la planta se caiga por el peso de los frutos cuando ya esté en la etapa de fructificación. A esto se le llama,
entutorar.

Actualizado el 10/10/2017 - SeedsPlusPeru

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