Las arañas (Araneae) son el orden más numeroso de la clase Arachnida, lejanamente
emparentadas con otros grupos de artrópodos, como los insectos, con los que no deben
confundirse. El orden Araneae es el séptimo en diversidad total de especies respecto al
resto de diversidad de organismos. El grupo está abundantemente representado en
todos los continentes, excepto en la Antártida. Todas son depredadoras, generalmente
solitarias, de pequeños animales. Tienen glándulas venenosas en los quelíceros, con las
que paralizan a sus presas. Producen seda (véase Seda de araña), con la que tejen telas
de araña o telarañas, que usan para construir redes de caza, tapizar refugios e
incluso hacerse llevar por el viento. Hasta la fecha se han descrito más de
46 500 especies,1 de arañas, y 110 familias han sido recogidas por los taxónomos; sin
embargo, sigue habiendo confusión dentro de la comunidad científica, como
demuestran las aproximadamente 20 clasificaciones que se han propuesto desde 1900.2
Sólo algunos grupos son realmente peligrosos para los seres humanos. La especialidad
que se ocupa de las arañas y el resto de los arácnidos se llama aracnología. Hay personas
que sufren de aracnofobia, es decir miedo a las arañas.
Prosoma
Los quelíceros presentan una sola articulación, entre la base, muy abultada, y una uña
distal generalmente pequeña (en el extremo), y habitualmente
portan glándulas venenosas. Cuando no se usa, la uña suele quedar más o menos
protegida dentro de un surco del artejo basal.
Los pedipalpos son semejantes a las patas, pero no se apoyan en el suelo, sino que los
llevan levantados por delante del cuerpo. Los machos de muchas especies emplean los
pedipalpos para cortejar a las hembras, en cuyo caso pueden ser grandes o vistosos, y
también como aparato copulador, que introduce una bolsa de esperma, el
espermatóforo, en el cuerpo de la hembra.
Las patas locomotoras se insertan por debajo del prosoma y están constituidas por siete
piezas o artejos, que son, desde el extremo proximal (base) hacia el distal
(extremo): coxa, trocánter, fémur, patela o rodilla, tibia, metatarsoy tarso.
Opistosoma
Anatomía interna
Las arañas son animales depredadores que paralizan a sus presas con el veneno de sus
quelíceros. La mayoría de las arañas inyectan enzimas digestivas en la presa, realizando
una digestión externa, al menos parcial. Muchas mastican a la presa parcialmente con
dientes que forman parte del artejo basal de los quelíceros. Ahí se localizan también
comúnmente "pelos" que permiten en muchos casos filtrar eficazmente el alimento,
separando las partículas sólidas del líquido.
Al principio del tubo digestivo se sitúa una faringe o estómago de función suctora. Desde
la mitad del prosoma y hasta el final del opistosoma se extiende el intestino medio,
dotado generalmente de divertículos, que en algunos casos se extienden incluso a las
patas. La digestión química se realiza sólo parcialmente en la luz del intestino,
siendo fagocitadas partículas cuya digestión enzimática se completa de manera
intracelular.