Anda di halaman 1dari 2

Según estudio, hay relación entre tener hijas y aumentar el éxito en los negocios

por ESTEFANÍA POZZO

Un estudio de la Escuela de Negocios de Harvard difundido por el World Economic Forum (WEF)
reveló que los inversores que tienen hijas mujeres tienen una tasa de rentabilidad hasta un 10%
mayor que el promedio general.

A simple vista la relación parece difusa, pero el argumento es el siguiente: los inversores que
tienen hijas son más propensos a incorporar mujeres en los equipos de trabajo, lo que aumenta la
diversidad en las compañías y eso es lo que tiene un impacto directo en el Ratio Interno de
Retorno (IRR, por sus siglas en inglés) en los negocios. De acuerdo a lo que plantea el estudio, si
hay más mujeres en las casas puede haber más rentabilidad en las empresas.

De una muestra de 1270 fondos de inversión, los investigadores identificaron que los socios que
tienen hijas fueron un 24% más propensos a contratar una mujer. El efecto relativo de tener un
mayor promedio de hijas que de hijos también aumenta el éxito de los acuerdos alrededor de
2,88%; un 10% por encima del promedio de éxito del 28,7%. Esto a su vez se traslada en un
incremento del 3,2% en el Radio Interno de Retorno, un 20% más del promedio de retorno del
14,1% de los fondos.

Paul A. Gompers y Sophie Q. Wang, los autores de la investigación, aseguran que el fuerte de su
trabajo son "dos contribuciones importantes a la literatura sobre la diversidad" debido a su
"novedoso diseño experimental".

"En primer lugar, mostramos que tener hijas pueden reducir los sesgos de contratación contra las
mujeres. Segundo, mostramos que los impactos exógenos a la diversidad de género conducen a
aumentos económicos y estadísticamente significativos en el desempeño", aseguran.

Lo primero que hicieron fue analizar la tasa de contratación de mujeres seniors en las compañías.
Allí encontraron que el 72,1% de los 'venture capitals', -es decir, los que ponen el dinero en las
start up para que puedan desarrollarse-, nunca tuvo una mujer en los cargos directivos.

A raíz de eso probaron que, cuando hay socios que tienen hijas mujeres, la probabilidad de
contratar mujeres para cargos importantes aumenta significativamente. Y eso genera retornos
positivos.

El argumento de los investigadores es que tener mayor contacto con mujeres permite romper un
fenómeno que ellos denominan "homofilia", que es la tendencia de las personas de relacionarse
con personas parecidas a sí mismas. Los entornos de negocios son en su mayoría varones, por lo
cual son ellos los que tienen a reforzar sus contrataciones según sus grupos de pertenencia y por
eso suelen no incluir a las mujeres en sus opciones de incorporaciones de personal.
"Las mujeres tienen una tasa de ingreso mucho más chicas en las empresas de inversiones que en
otros campos profesionales como la medicina o el derecho. Además, el porcentaje relativo de
mujeres que forman parte de compañías de inversiones no se ha incrementado 'mesurablemente'
en los últimos 25 años", escriben Gompers y Wang.

Para llevar adelante el estudio, los investigadores recolectaron información de tres fuentes.
Primero, incluyeron un dataset de los aspectos demográficos y familiares de los inversores.
Segundo, tuvieron en cuenta un panel de datos sobre contrataciones de personal. Y en tercer
lugar, consideraron los acuerdos y las performances de los negocios.

Según el WEF, los investigadores buscan evidencia para hacerle frente a las críticas habituales a los
estudios que hablan sobre el impacto positivo de las mujeres en los negocios. La principal crítica
que enfrentaron es demostrar que la correlación no es causalidad, y eso fue lo que los llevó a
buscar una variable independiente, en este caso analizar el impacto de las hijas en la
predisposición a contratar personal femenino.

La distintas organizaciones de mujeres, especialmente en estos últimos años (en los que surgieron
fenómenos como el #NiUnaMenos o el #MeToo), reclaman el derecho de ellas estar en los
espacios en donde se toman las decisiones importantes. A pesar de que aún persisten techos y
paredes de cristal (barreras imperceptibles a simple vista pero que efectivamente impiden el
desarrollo), cada vez hay más evidencia de que resulta fundamental aumentar la participación de
las mujeres en esos espacios de decisiones. Aunque hay organizaciones que señalan que, más allá
de los beneficios, es simplemente un derecho de las mujeres de acceder a los mismos espacios
que los hombres.

En la Argentina, por ejemplo, un documento elaborado por el Ministerio de Trabajo de la Nación


muestra que el 77% del personal directivo en el sector son hombres y solo un 23% son mujeres, a
pesar de que ellas son mayoría (57%) entre los profesionales científicos e intelectuales.

Anda mungkin juga menyukai