Examen de
Premio
De
Oftalmología
Tema: Quemaduras corneal
A. Epitelio
Es la capa más externa, se compone de 5 capas de células no queratinizadas.
La más superficial presenta microvellosidades. Las células epiteliales se
interdigitan y adhieren firmemente una a la otra mediante desmosomas; esta
firme adherencia celular epitelial restringe el pasaje de liquido a través de esta
capa. Tiene una gran capacidad regenerativa y en caso de lesiones se
presenta además desplazamiento celular.
B. Membrana de Bowman
Es una zona acelular subepitelial. El margen anterior limita con la membrana
basal del epitelio. El margen posterior está formado por fibras colágenas que se
mezclan con el estroma de manera imperceptible. A la microscopía electrónica
se observa que consiste en material fibrilar de colágeno delgado y corto. Ofrece
cierta capacidad de resistencia a los traumatismos, y es una barrera contra la
invasión de microorganismos y células tumorales.
C. Estroma
Constituye el 90% del espesor corneal. Está formado fundamentalmente por
fibras colágenas, células del estroma y sustancia fundamental. Las fibras
colágenas forman mallas dispuestas de manera paralela a la superficie corneal.
Estas láminas entretejidas se cruzan entre sí en ángulo recto de forma muy
regular. Cada lámina recorre todo el largo de la córnea y está formada por una
multitud de fibras colágenas. La sustancia fundamental es rica en polisacáridos.
La célula estromal es el queratocito, el cual es de forma aplanada y con un
gran número de prolongaciones. Las fibras colágenas representan el 80% del
peso seco de la córnea, la sustancia fundamental el 15% y los elementos
celulares el 5%.
D. Membrana de Descemet
Tiene un grosor de 10 micras y es una membrana cuticular que cubre la porción
posterior del estroma y anterior al endotelio. Contrariamente a la membrana de
Bowman puede ser fácilmente separada del estroma, regenerándose
rápidamente luego de un trauma. La línea de Schwalbe, una acumulación de
fibras colágenas circulares, marca la terminación de la membrana de Descemet
a nivel del ángulo iridocorneal.
E. Endotelio
Es una capa única de células cuboidales que tapiza la membrana de
Descemet. Tienen una gran actividad metabólica, y son las responsables de
mantener la transparencia evitando el edema corneal. Las células endoteliales
son de origen mesodermal y no tienen capacidad mitótica demostrada, por lo
que resulta en una disminución gradual de su número con la edad. A medida
que esto sucede, las células vecinas se extienden y crecen.
FUNCIONES DE LA CORNEA
Tiene 2 grandes funciones: protección del contenido intraocular y refracción de
la luz.
• Protección
El tejido corneal es una estructura fuerte capaz de resistir una considerable
fuerza antes de romperse en casos de traumatismos por accidente o
quirúrgicos. Esto se debe, como hemos visto, a que su composición estructural
es a base de tejido conectivo colágeno. Su rica inervación proveniente de la
primera rama del trigémino también es un factor de gran ayuda.
• Refracción
La interfase aire-lágrima forma la primera y mas potente superficie de
refracción de la luz que ingresa al ojo, representando casi el 80% del poder
total de refracción. Por ello la superficie anterior corneal debe mantenerse lisa y
los párpados extender la película lagrimal uniformemente sobre el epitelio, ya
que la más leve distorsión degrada geométricamente la imagen que viaja hacia
la retina. La córnea debe ser también transparente y avascular.
Quemaduras corneales
• Quemaduras químicas:
- Álcalis: lejía, cemento, hidróxido de amonio (amoníaco), hidróxido de sodio
(sosa cáustica), hidróxido de potasio (potasa cáustica), hidróxido de calcio (cal
viva, yeso), utilizados en los productos de limpieza, como reactivos y en la
construcción.
Las lesiones por productos químicos ácidos son menos graves que los
productos alcalinos ya que se produce la coagulación y precipitación de las
proteínas de las células epiteliales corneales, así como contracción del
colágeno del estroma y precipitación de los aminoglicanos, este proceso
sucede en la superficie corneal, impidiendo el paso del agente al interior del
ojo, por lo que su daño es limitado.
Los productos químicos alcalinos, al entrar en contacto con el agua o lágrimas
son cáusticos, el álcali por su ión oxidrilo, aumenta el pH de la lágrima,
modifican el pH de los tejidos hasta 11.5 o más produciendo las rupturas de las
células saponificando y disociando los ácidos grasos de las membranas
celulares, dando lugar a “hinchazón”, engrosamiento y acortamiento de las
fibras de colágeno, esto permite el paso del producto a la cámara anterior,
dañando las estructuras intraoculares como el trabéculo, el iris, el cuerpo ciliar
y el cristalino, teniendo como consecuencias glaucoma, trabeculitis, uveítis y
catarata.
Los ácidos dañan al ojo en el momento del contacto; los álcalis continúan
dañando mientras no sean retirados del ojo. Las lesiones con agentes alcalinos
tienden a producir una lesión a largo plazo mucho más grave y deben tratarse
en forma específica. Esto es debido a que las sustancias básicas saponifican
los lípidos de las membranas celulares, lo que conduce a la disrupción y
muerte celular y penetración rápida al ojo. Las quemaduras por álcali pueden
ocasionar la formación de una membrana retrocorneal. Los ácidos, por el
contrario permanecen limitados en la superficie ocular, y producen mayor daño
superficial que las sustancias alcalinas. Los ácidos tienden a coagular y
precipitar las proteínas en el epitelio corneal y el estroma superficial, lo que
limita y localiza la lesión. El daño también se limita por la acción neutralizadora
de las proteínas tisulares de la córnea sobre la acción del ácido.
Estadios Clínicos:
Según Mac Culley, clínicamente se reconocen 4 fases:
1. Fase Inmediata.
Los casos más graves producen opacidad en la córnea, que puede ser mínima
(la pupila y el iris pueden apreciarse bien) o llegar a ocultar los detalles del
segmento anterior del ojo (la pupila y el iris no pueden observarse). Las
quemaduras corneales por álcali pueden destruir todo el epitelio corneal y
zonas extensas de la conjuntiva, hasta los fondos de saco.
Síntomas:
- Sensación de cuerpo extraño.
- Dolor intenso según gravedad.
- Disminución de la agudeza visual.
- Intensa fotofobia.
Examen físico
En el examen físico se suele encontrar inyección ciliar, edema moderado
epitelial corneal y lesiones puntiformes diseminadas en toda la superficie
corneal.
Diagnostico
1- Tratamiento tópico:
- Midriático ciclopléjico: atropina 1 %, administrar 1gota.
- Ungüento oftálmico antibiótico: cloranfenicol o tetraciclina.
- Esteroides tópicos: acetato de prednisolona 1%, dexametasona 1 gota
cada 23 h. En caso de infección sobreañadida se pueden utilizar
antiinflamatorios no esteroideos como el diclofenaco sódico 0,1 %
1 gota cada 4-6 h.
- Hipotensores oculares: timolol 0,5 %, administrar 1 gota cada 12 h.
- Oclusión en ventana o compresivo en dependencia de la afectación
conjuntival.
2- Tratamiento sistémico:
- Analgésicos y/o antiinflamatorios no esteroideos: dipirona 300 mg,
ibuprofeno 400 mg, cada 8 h.
- Acetazolamida 250 mg, administrar 1 tableta cada 812 h en
dependencia del control de la presión intraocular. Debe de suministrarse con
cloruro de potasio (jarabe o tabletas) cada 8 ó 12 h.
Tratamiento Tópico:
- Midriáticos ciclopléjicos (ej. atropina 1 %, homatropina 2 %) 1 gota
cada 6-8 h.
- Ungüento antibiótico (ej. cloranfenicol, tetraciclina) con aplicadores 4-6
veces al día.
- Lisis de las adherencias conjuntivales, utilizando aplicadores con
ungüento antibiótico 2 veces al día. Esto se realiza, sobre todo, en fondos de
saco para desbridar todo tejido necrótico y evitar el simbléfaron. Si a pesar de
ello se inicia la formación de simbléfaron, considerar la utilización de un
conformador para mantener los fondos de saco.
- Esteroides tópicos (ej. acetato de prednisolona 1 %, dexametasona) 1
gota cada 2-3 h. En caso de infección sobreañadida, se pueden utilizar
antiinflamatorios no esteroideos (ej. diclofenaco sódico 0,1 %) 1 gota
cada 4-6 h.
- Hipotensores oculares (ej. timolol 0,5 %) 1 gota cada 12 h.
- Oclusión en ventana para realizar movimientos oculares y evitar
simbléfaron.
Sistémico:
- Analgésicos (ej. dipirona 300 mg) si dolor ocular, 2 tabletas cada 6-8 h.
- Hipotensores oculares (ej. acetazolamida 250 mg) 1 tableta cada 8 h. Se
debe asociar con cloruro de potasio (tableta, jarabe) cada 8 h.
- Vitaminas del complejo B (B1, B6, B12) 2 veces al día.
- Vitamina C (500 mg) 2 g diarios.
Tratamiento Quirúrgico:
Cirugía tardía:
- Liberación de simbléfaron.
- Injertos de membrana conjuntival.
- Corrección de deformidades palpebrales.
- Queratoplastia penetrante (después de 6 meses o 1 año de la
quemadura).
- Queratoprótesis en casos muy graves.
Seguimiento