TÍTULO:
AUTOR
BALAREZO VILLAO ADRIANA JEANETH
RODAS ORDOÑEZ GABRIELA ELIZABETH
TUTOR
Dr. JOSÉ ANTONIO SANTILLAN MUÑOZ
AÑO:
2017-2018
GUAYAQUIL – ECUADOR
DEFINICIÓN
DSM - V:
Trastorno de personalidad, centrada en los fallos de adaptación, que implican
alteraciones de la identidad o en las relaciones interpersonales afectivas
Pertenece al grupo de trastornos raros o excéntricos, en el trastorno esquizotípico se
presentan anormalidades de la percepción, del pensamiento, del lenguaje y de la
conducta, que no llegan a reunir los criterios para la esquizofrenia. Estas personas son
marcadamente extravagantes y raras, incluso para las personas de la calle. Parte de su
vida diaria son el pensamiento mágico, las ideas peculiares, las ideas de referencia, las
ilusiones y la desrealización.
La esquizotimia es un trastorno en el que las personas que lo padecen no son capaces de
saber cuáles son sus propios sentimientos y, sin embargo, son extraordinariamente
sensibles para detectar sentimientos ajenos, en especial los afectos negativos como la
ira. También pueden ser supersticiosos o afirmar que son clarividentes. Su mundo
interno se alimenta con relaciones imaginarias muy vívidas, y miedos y fantasías
infantiles. Creen que tienen poderes especiales en cuanto al pensamiento y la
introspección
El trastorno esquizotípico es un trastorno en el cual encontramos déficit sociales e
interpersonales asociados a malestar agudo y una capacidad reducida para las relaciones
personales, distorsiones cognoscitivas o perceptivas y excentricidade s del
comportamiento, que comienzan al principio de la edad adulta y se dan en diversos
contextos.
El trastorno esquizotípico es un trastorno en el que las personas que lo padecen son
incapaces de saber cuáles son sus propios sentimientos, pero son extraordinarios para
detectar sentimientos ajenos
Los pacientes con un trastorno esquizotípico de la personalidad se distinguen de los
pacientes esquizofrénicos por la ausencia de psicosis y si aparecen síntomas psicóticos,
son breves y fragmentados.
Pacientes con personalidad esquizotípica estable a lo largo de sus vidas, y se casan y
trabajan a pesar de sus excentricidades. Es decir, pueden mantener una vida normal.
En la actualidad hay tendencia a pensar que el trastorno esquizotípico es la personalidad
premórbida de la esquizofrenia, debido a que muchos pacientes que habían sido
diagnosticados con esquizofrenia su diagnóstico verdadero es trastorno esquizotípico.
EPIDEMIOLOGÍA
Aparece en un 3% de la población general, se encuentra un mayor número de casos
entre los familiares de pacientes esquizofrénicos, una mayor incidencia entre los
gemelos monocigóticos que entre los dicigóticos (33 por ciento contra 4 por ciento en
un estudio). La proporción de sexos es desconocida; sin embargo, se diagnostica
frecuentemente en mujeres con síndrome de X frágil. DSM-5 sugiere que el trastorno
puede ser ligeramente más común en los hombres. Solo un pequeño número de
pacientes con trastorno esquizotípico llegan a presentar esquizofrenia u otro trastorno
psicótico, también se ha observado que los esquizotípicos tienen más probabilidad de
tener hijos con esquizofrenia que las personas sanas.
CUADRO CLÍNICO
Desde una edad temprana los pacientes con trastorno de la personalidad esquizotípico
(TPET) tienen deficiencias perdurables en las relaciones interpersonales que reducen en
gran medida su capacidad para tener cercanía con otros. También muestran
pensamientos, percepciones y comportamientos distorsionados o excéntricos, lo que
pudiera hacerles parecer peculiares. Con frecuencia se sienten ansiosos al estar con
extraños, así que no cuentan con amigos cercanos.
Pueden ser suspicaces y supersticiosos. Entre las características llamativas de su
pensamiento se encuentran el pensamiento mágico y la creencia en la telepatía o en
otras modalidades inusuales de comunicación. Estos pacientes pueden hablar acerca de
sentir una “fuerza” o “presencia”, o tener un lenguaje que se caracteriza por vaguedad,
divagación, abstracción excesiva, pobreza de vocabulario o aplicación inusual de
palabras.
Los pacientes con TPET pueden, de manera eventual, desarrollar esquizofrenia. Muchos
de ellos se encuentran deprimidos al llegar por primera vez a recibir atención clínica.
Sus ideas excéntricas y su estilo de pensamiento también los colocan en riesgo de
involucrarse en cultos.
Sus relaciones con otros son malas, y al sentirse estresados pueden desarrollar estados
psicóticos breves. No obstante su comportamiento extraño, muchos se casan y trabajan.
Este trastorno tiene casi la misma frecuencia que el TP esquizoide.
Psicoterapia.
El manejo terapéutico del tratamiento esquizotípico de la personalidad es similar al
tratamiento para la personalidad esquizoide, sin embargo los médicos deben manejar
con cautela a estos pacientes. Teniendo en cuenta que ellos tienen patrones peculiares de
pensamiento, y muchos se involucran en variadas prácticas, como involucrarse en
cultos, prácticas religiosas extrañas, y lo oculto. Los médicos tratantes de estos
pacientes, no deben burlar tales actividades o criticar las actividades o creencias, que
tengan estos.
Esta terapia psicológica, también se denomina terapia conversacional, que puede ayudar
a mejorar la sintomatología del trastorno esquizotípico de estas personas, como el poder
iniciar a confiar en otras personas al establecer una mejor relación de confianza, al
inicio con su terapeuta.
Terapia familiar: El involucrar a personas más cercanas, con las que el paciente
tenga más confianza, puede ser muy útil, debido a que la presencia de familiares
puede favorecer la disminución de las peleas o el aislamiento emocional, y con
ello llevar a una mejora de la confianza en casa, mediante este tipo de
convivencia.
FARMACOTERAPIA.
No tenemos medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y
Medicamentos (Food and Drug Administration) que se administren específicamente
para el tratamiento del trastorno esquizotípico de la personalidad.
Los medicamentos antipsicóticos se usan para tratar las ideas de referencia, ilusiones y
otros síntomas del trastorno y es posible usarlos junto con la psicoterapia.
ANTIPSICÓTICOS DOSIS
Clorpromazina 25-50 mg al día
Levomepromazina 100-200 mg/día 2-3 tomas
Haloperidol 0.5-2 mg/8-12h
Tiaprida 50-100 mg / 8h
Pimozida 4 mg día – 16 mg /día
Clozapina 12.5 mg 1-2 veces al día
Risperidona 2 mg /día,
Pipotiazina 100 mg / 4 semanas
Perfenazina 4 mg/8h
Amisulprida 400 mg 12-24h
Fuente: TERAPIA EN APS Antipsicóticos típicos.
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