RELIGIOSIDAD HISPANA
- -
y
SOCIEDAD BORBONICA
1969
PUBUCACIONES DE LA FACULTAD TEOLOGICA DEL NORTE DE ESPA~A
SEDE DE BURGOS
Nihil obstat:
DR. NICOLÁS LóPEZ MARTÍ.K'EZ
lmprima.se:
1J$ SEGUNDO, Arzobispo de Burgos
Páginas
Página.s
Capitulo II: POSTURA INTERESADA FRENTE AL MUNDO ... ... ... .. . 201
Articulo l. - Afrancesados.
A> Precedentes cronológicos ... ... ... ... ... ... ... ... ... 215
a) Jove llanos ... ... ... ... ... ... ... . .. ... . .. .. . .. . . .. 215
b> Floridablanca ... ... ... ... .. . ... ... ... 217
B> Nue va temática .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. ... . .. 219
a) Etica de felicidad ... ... ... ... ... ... ... ... ... 220
b) Me todología ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 224
e) Revolución afrancesada ... ... ... ... ... ... ... 227
d> Dogma político ... ... ... ... ... ... ... 230
C> Sospechas de colaboracionismo ... ... ... ... ... 234
a) Segorbe . . . . .. . . . . .. . .. . . . .. . . . . .. . . .. . .. ... 235
b) Lugo ... .. . ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 236
e) Segovia ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 241
d) Avila ... ... .. . ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 244
L Artículo 2. - Liberales.
Pighuu
A) Clericales:
a) El Obispo .............. . 392
b) El Clérigo .............. . 399
e) El Capellán Castrense .. . 408
8) Seglares:
a> El Noble ..................... ... .. . 431
b) Clases medias, inferiores y rurales 435
A) Las dos Regencias: M.• Cristina y Espartero ... ... ... 505
8 > Isabel II . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . .. . 535
A) Carácter .. . .. . .. . .. . .. . 557
8) Moda ............... ..... . 562
C) Divers iones .. . . ............. . 568
Pá gin<lS
A) Etapa fernandina:
a) 1814-19 ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 617
b) 182(}-23 . . . . . . . . . .. . . .. . . . .. . . .. . .. .. . .. . . . . 619
e) 1823-33 ... ... .. . . .. ... .. . . . . ... ... ... ... ... . .. ... ... 622
B) Etapa isabelina:
a) Regencias . .. . .. ... ... . . . . . . . . . . . . . . . ... . . . . . . . . . 623"
b) Isabel II . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 626
Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . .. . . . . . . 639·
INTRODUCCION
actitud persona l ante Dios, una comunicación amorosa con El... El hombre-
mecl1o, en el que se descubreu fá.c.U mente las señales de la masificación, puede
entre sus iguales hablar de cosas religiosas y morales de una manera espan-
tosamente vulgar, y una conversación sobre religión con 1llL grupo mayor de
tales hombres resülta casi d el todo infructuosa" .
4. LE BRAS, Études de Sociologie Religieuse, I, 222-223: "Sin la f e la cos-
tumbre no habria podido impl?.ntarse, pero a su vez la costumbre conserva la
fe, y cuando ésta se debilita, los gestos de la fe la practican ... Discernir exacta-
mente la parte de la fe, de la costumbre, en los actos religiosos, está por en-
cima de las fuerzas del hombre. Pero cuántos datos nos ofrecen".
5. LE BRAS, Études de Sociologie Religieuse, ll, 471.
6. HARING, F uerza. y flaqueza. de la R eligión, 30-33. 35-36. 38-39. 64- 65. 72.
84. 103. 105. 122. 131-132. 140.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 5
PARTE I
IDEOLOGIAS
1
1
1
TEOCRACIA
Ante todo, insistimos con Paupert 1 que "el error teocrático su-
prime la perspectiva del Reino en devenir por el Reino definitivo
después de la Parusía". Ahora bien, la Iglesia española, durante la
vivencia borbónica de 1700 a 18Q8, recurrió al ideal que le ofrecía
el pueblo de Israel en el Antiguo Testamento. Y es que el español,
profundamente religioso, reincidió en el mismo error histórico que
el cristiano constantiniano -en el siglo rv-: la euforia de la paz
social y religiosa de 1492, y de los Reyes Fernando e Isabel, apelli-
dados "Católicos", les hizo creer que la monarquía española era la
imagen, e incluso la r ealización del Reino de Dios que ha llegado a
este mundo; el complemento de tal ideal provino de una dinastía
heredera del absolutismo del Rey Sol: la disolución de los fueros
de la antigua corona de Aragón lo facilitó políticamente, el Despo-
tismo ilustrado socio-culturalmente, y la encarnación de la teocra-
cia israelita religiosamente.
El español, predeterminado por su tradición gloriosa y por el
carácter de la nueva dinastía -la borbónica-, va a vivir su his-
toria de un modo especial; concibe la historia -según diría Juan
Bautista Vico- como un desenvolvimiento cíclico de los aconteci-
mientos humanos que se cumple de una manera uniforme; de ahí
los "corsi" - avances-- o "recorsi" -retrocesos- de la humani-
dad, y en uno de esos "recorsi" España reencarna la vivencia israe-
lita: primero, en un proceso de mimetismo o adaptación del mode-
lo; luego, la superación por considerar a España con mayores títu-
los que Israel para ser el Pueblo de Dios.
La tradición política secular de I srael se la puede definir rápi-
damente con el nombre de teocracia: así lo atestigua Paupert2.
Con algunos matices la política y lo religioso se confunden; es Yah-
vé quien, a través de los patriarcas, jueces, reyes y profetas, gobier-
na al pueblo elegido. La ley "civil" del pueblo tiene un sentido in-
l. PAUPERT, Pour une politique évangél i que, 157.
2. PA UPERT, Pour une politique évangélique, 31-32.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA lT
4. SALO WI"ITMAYER BAROM, A Social ancl Religiou.s Histo;-y of the Jews. Co-
lumbia University Press, 1952: HARINc, Fuerza y flaqueza de la religión, 174.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 19
a) Profetismo
a)) 1808
El religioso agustino Fray Vicente Facundo Labaig y Lassala, el
25 de septiembre de 1808, al agradecer al Patriarca San José su
-protección "por la áefensa de Valencia contra el Exército francés,
dia 28 de Junio 1808", imagina a la capital del Turia reviviendo las
gestas del Pueblo de Dios, Israel: "Valencia fue en esta ocasión el
pueblo de Dios, hecho el terror y espanto de los Moabitas y Amo-
nitas" s. Y amplia su ideología: "Valencia ni tiene ni confía en otro
auxilio sino el que le inspira la protecc1ón de San Joséf. Su santa
imagen es la que opon<! al enemigo; por sus manos despacha los
memoriales al cieio". Y en una nota al pie de página explicita su
intencionalidad : "A la imagen de San Joséf oolocada sobre la puer-
ta del Convento de Religiosas del mismo nombre, se le entregó un
memorial que contenía la más reverente súplica" 6• Resucita el an-
tropoformismo de lo sobrenatural. La honda piedad del pueblo
imagina fácilmente a su santo protector en su papel de mediador
ante Dios. Como un vecino influyente ante la autor idad. Como una
garantía frente a futuros ataques franceses. Un vecino de excepción:
todopoderoso; e interviniendo diariamente en su vida, alternando
en su vida. Al hombre sencillo agradaba este intervencionismo de
lo sobrenatural, que le hacía vivir una euforia sobrenatural; y
disfrutaba de introducir su materialidad en ese mundo ultraterreno,
con la misma fruición que un niño mete sus manos en el pastel fa-
miliar. Todo ello encajaba dentro de la vivencia imaginada por el
fraile 7 para su nación, la de Pueblo de Dios con el sistema político
de teocracia.
Revivía la utopía de Pueblo de Dios, del "reino suscitado por
Dios". También el clérigo secular, influido por la mentalidad del
fraile: el Capellán de honor de S. M., Dr. D. Vicente Navarro. Y es
que concibe su momento histórico como un desenvolvimiento cí-
clico de las guerras religiosas, realizadas de un modo uniforme, vol-
viendo constantemente a sus habituales "recorsi": al epicentro is-
raelitico, en la época de Daniel, interpretando el sueño de Nabuco-
donosor -Daniel 2, 34. 44-45-: una piedra desprendida, no
lanzada por mano, hirió a la estatua en los pies de hierro y de ba-
rro, destrozándola; el Dios de los ejércitos suscitará un reino que
no será destruido jamás.
La cautividad de Fernando favorecía la pretensión. En un reino
acéfalo y profundamente católico cada clérigo se constituía en mi-
nistro plenipotenciario de la divinidad; seria el intérprete de los de-
signios celestes; a través de él se entablaría un diálogo entre el
Señor y su pueblo, y exteriorizarla la gerencia de la planificación
divina en la historia espo.ñola, en especial para conservar la tradi-
cional forma de vida. Como Matatías - vuelve al mismo epicen-
tro-: "Aunque todas las naciones obedezcan al rey Antíoco, yor
mis hijos y mis hermanos nos sujetaremos a la ley de nuestros
padres; no escucharemos las palabras de Antíoco para seguir el
nuevo camino que nos muestra ... ¿Quién es el que nos promete
tantos bie!'les? el mismo que en el día 2 de mayo ... " 8•
Rechaza, en nombre de Dios, Rey y Señor ele su pueblo, toda no-
vedad.
Nos desp!azamos a tierras andaluzas para escuchar al antiguo
Definidor general de !a S. R. de Trinitarios Descalzos, Fray Manuel
de la Virgen del Rosario, quien -"en las solemnes honras de los
militares difuntos en la jornada de Baylén y anteriores, mandadas
admiraste a tu padre y pastor solicito, y que qüal otro Joseph piadoso distri-
buía los alimentos para que no pereciese tanta \'lctima a golpes de la miseria"
! RooRicuEZ, Oración gratulatoria por la elevación del EXCTTW. y Emmo. Sr. D.
Luis de Borbón a la Silla Arzobispal de Toledo. Madrid, Imp. Mateo Repullés,
1301, p. 15). Esta "epidemia que tanto afligió a Sevilla en el pasado año de
!800, la anunció con tanta claridad en sus últimos sermones, que no hay géne-
ro de duda la vio y la predixo" el Beato J osé de Cadi.z -<:uya fama legenda-
ria veremos al estudiar la Guerra contra la Francia revolucionaria-, según
Fray Mariano José de Sevilla en su "sermón predicado en las solemnes exe-
qu.i as que el día 9 de Septiembre de 1801 celebró la Comunidad de RR. PP. Ca-
puchinos de la ciudad de Málaga por el alma del M .V.P. Fr. Diego Joseph de
Cádiz (Valencia, Imp. Joseph Estevan, 1801, p. 1, 42). ¿Cual fue la vivencia en
aouella coyuntura? El Canónigo de la Metropolitana sevillana D. Manuel Ro-
dríguez de Carassa decia, desde el púlpito de su Catedral, el 10 de mayo de
1801, "en la solemne función de acción de gracias, celebrada con asisten-
cia del Ilustre Ayuntamiento por haber cesado la epidemia": " ¡Ay Sevi-
lla, y cómo es cierto que ha llegado el tiempo de tu visitación! ¿Y en tanta
desgracia, te lisongearias del remedio? ¿Si no hubiese estado tan apagada tu
/e, bien podías haberlo aguardado? ... Vuelve en ti: vives aun, aunque no Jo·
mereces. Pues nosotros, que vivimos, bendigamos a Dios, acordémonos de lo
pasado; reconozcamos lo presente, enmendémonos para lo futuro" (Sevilla,
Imp. Joseph Velez Bracbo, 1801, p. 1. 10).
Y no solamente por corazón agradecido, sino también con el temor de un
mal que se avecina; por ejemplo en Valencia, Fray José Arnau se expresaba
asi en el "sermón que en la devota rogativa que hizo la Parroquia de San
Pedro Mártir y San Nicolas Obispo, a Nuestra Señora de Contra la Peste, día
12 de octubre de 1800, en ocasión de la fiebre contagiosa que padecían Cádiz,
Sevilla, y algunos lugares de Andalucía: "Cádiz el emporio de la suntuosidad,
de las riquezas, del comercio, lo llora, muchos de sus habitantes lo abando-
nan, una fiebre contagiosa se insinúa. y se propa@'a, el terrible mal se encrue-
lece, y la grástica biliosa martiriza; los dolientes no hallan consuelo, ni
en los medicamentos del arte, ni en las súplicas al cielo. Sevilla, el teatro
del Culto, d e la Disciplina, de la Religión, lo siente. Toda Andalucia lo ve
venir. Valencia, ¿y tú eres acaso la que puedes pensar en coyuntura tan
terrible, ser inmune y privilegiada? Sin C:.1da eres tú la que más debes
temer. La cercanía y comunicación de los mares, el continuo tran.,--porte de
los géneros... Sin querer hablaba d e lo politico; pero no: hablemos de lo
7TWTal. La libertad de los vicios, la incrE:dulidad, la arrogancia, la vanagloria,
la juventud corrompida, las irrisiones profanas e insensatas de los Misterios,
la injusticia, la intemperancia, la Ia.s;:ivia, qué sé yo qué más, acarrearán
semejantes infortunios. ¿Valencia; pero Valencia, quieres quedar inmune de
la epidemia, salva del contagio, y libre de los peligros? ... Levanta los ojos,
mira a esa Madre del amor hermoso... Ella fue en los años 1557 el ir..strumen-
to que detuvo el brazo del ~vino Juez que estaba para descargar el golpe
de su zaña tan temible ... ¿Y qüánto no nos favoreció en la pestt: del año
1647 .. ." <Valencia, Imp. Josc! Estevan, 1800, p . 1. 5-6. 21).
Cádiz contó entre sus víctimas a su Obispo (Rtnz RoldÁN, Oracién júne':Jre
que en las solemnes exequias que hicieron los Srs. Deán y Cabildo de la S. I.
Catedral de Cádiz, con asistencia del Excmo. Ayuntamiento, a la buena me-
moria de su Ilmo. Prelado el Sr. D. Antonio Martínez de la Plaza. dixo en la
misma S. I ., el día 2 de diciembre de 1800. Cádiz, Imp. Manuel Ximénez Carre-
ño, 1800?, p. l. 3 : "Esto sólo faltaba a la calamidad, que sufriese esta Iglesia
sobre el doloroso llanto de sus hijos el amargo de su viudez, y su orfandad.
Esto sólo faltaba a la afiicción pública. Ta, ha sido la Epidemia de Cadiz en el
año de 800, de cuya fiebre putrido maligna murió S. I ., el dia 11 de octubre).
· También Cádiz supo vivir la misma ideología: "Cádiz, engreída antes con su
RELIGIOSIDAD HlSPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 25
51. LA!Wc, Sermón ele 25 de septiembre. Valencia, 1808, p . 18-20. 30. Cfr.
nota 5.
52. A. CASTRO, La. realidad histórica de España, México, 1954, p. 22.
53. A. CASTRO, La. realidad histórica ele España, 23.
54. J . M . JESús, Sermón 25 de julio. Reimpreso en Mallorca, p. 15-16. 18-19.
Cf. n. 45.
55. J. M. JESús, Sermón, 18-19 : " En las Navas se repiten las gloria.-; de
Josué, elevada en el ayre, no la vara de Afeysés, sino la Cruz de nuestro Sal-
vador ... , caen más enemigos del nombre de D ios, que los Filisteos a presencia
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 43
puertas del infierno prevalecer contra ella. Ve a Pío VII como otro Daniel ro-
deado de leones... Os pido, señor, que conserveis para nuestro consuelo los
dos preciosos Siete de nuestro siglo. Al magnánimo Eleázaro de la ley de gra-
cia, nuestro Pontífice Santo Pio Séptimo... También al pacientisimo Davúl, al
prudente Salomón, al piadoso Josia.s del Nuevo Testamento, al Joven predesti-
nado con mllagros, al número Séptimo de los buenos Fernandos... ". OsTOLAZA,
Sermón de 25 de julio de 1810 en Cádiz. Valencia, 1811, p. 7, 11: ("Fernando
VII) inocente perseguido David ... ilustrándole Dios como a Manasés en su
prisión ... ".
64. Pío VII, Proclama a los Espa1wles. Diario de Tarragona, Jueves 1.•
diciembre 1808, Separata, p. 1:&4: " Amados hijos: ... Levantáos y pelead como
David contra el imperioso Goliat de nuestros tiempos. Valerosos Españoles,
hijos de la Iglesia, Venid y romped las cadenas de vuestro Pastor. Ya mi cora-
zón me asegura de vuestra sensibilidad; no os detengais; levantad el estan-
darte de la Fe... ¡Ah! ¡con qüánto gozo sabrá el Católico Fernando la intre-
pidez y heroica lealtad de sus vasallos! La. estrecha situación a que, oomo
Yo, se ve destinado, impide los medios de manifestar los sentimientos de su
magnánimo corazón. No tengo aliento para ri"Cir. Si no sobeviviere a la calami-
dad, y derramáseis vuestra sangre por la Religión, por vuestra Patria, y vues-
tro Monarca. a quien pido que colme el Cielo de felicidad, el mundo será tes-
tigo de mi gratitud. (Extracto de la Gazeta de Gibraltar el 15 ele octubre)".
65. MANZANEDA, Oración de 30 de agosto de 1812. Palma de Mallorca, 1812,
p. 6: " Como Judas Macabeo a los enemigos de I srael así éste destruye y postra
a nuestros enemigos. Lord Wellington, el dígnisimo duque de Ciudad Rodrigo,
es el instrumento de que se vale la Providencia, para humillar al soberbio
Marmont .. :·.
66. D. Sn.os MoRENo, Oración de 2 de mayo de 1812. Burgos, 1813, p. 14:
"Rodeados por todas partes de bayonetas, circundados de enemigos desde que
empezaron a ocupar la Provinc!a, le.> ha sido preciso bu..c:car el asilo de los
montes, como lo hicieron Matatías y sus hijos (! Macabeos. 2, 28) para animar
desde alli :;. Loeo:; a la just:l. daf:msa ... ".
67. D. SILOs Mo!ü:No, Or.u:ión, p. 16-17 : " La congregación de los Asydeos
ce Castilla -alude a la de los Judíos, llamados así, y eran unos hombres zelo-
sisimos de su Religión, muy fue:-tes y los primeros que se unieron a Matatías
con la firme resolución de defenderse de los soldados de Antioco, aunque fuese
en sábado; como "de facto" lo hicieron, y se puede ver en el lib. I de los Ma-
cabeos 2, 42-49, los más fuertes de este leal y fidelísimo Reyno, que volunta-
riamente habían abrazado el partido de la justicia y de la ley, capitaneados
por su digno Gefe, el terror de los franceses, el Sacerdote del Altísimo, el insig-
ne Coronel D. Gerónimo Merino ...".
68. MAYORAL. Sermón de la reconquista de Zaragoza, 16 de julio de 1813.
Zaragoza, 1813. p. 5: "Un nuevo David <Espoz y Mina) ... pone en nombre del
Señor en precipitada fuga exércitos enteros de Filisteos (a la División de Clau-
sel y las de París) ... ".
46 ALFREDO MARTINEZ ALBIACE:
~
72. H URTADO, D iscur so. Sevilla, H idalgo, 1813, p. 7.
73. HURTADO, Dis curso, 5.
1
RELIGIOSID.~D HISPANA Y SOCIEDAD BORBO:nCA 49-
1
50 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
dar y no profeta; mas en este caso todo lo espero del mismo protector de quien
estoy hablando -San José-. NOTA: Los votos del predicador no fueron vanos,
porque en el mismo día y aun en la misma hora en que se predicaba este Ser-
món, que fue el 25 de septiembre, sobre las diez de la mañana, se verificó la
instalación de la Suprema Junta Central, tan importante a la Nación, y de
la mayor desesperación para el enemigo".
89. Hf:RNÁNDEZ MoREJóN, Oración, 6: "El Dos de Mayo, el heroico sacrifi-
cio de sus víctimas, amanecerá todos los años sobre nuestro horizonte como
el sol; los españoles lo saludarán con alegria, y reunídos en el templo, enage-
nados sus nietos en un profundo gozo a vista del interesente qüadro de las
virtudes de sus padres, exclamarán diciendo: Hubo un t iempo en que la im-
piedad alzó su frente altiva en el seno de la Francia, derribó en ella el trono
y el altar ... " .
.AMAT, Oración, 19-22; luego completaremos esta idea en la Guerra de la
Independencia.
90. ARANC'OREN, Moral y Sociedad. Madrid, Edicusa, 1966, p. 40.
91. AMAT, Oración, 23-24.
92. .AMAT, Oración, 24-25: "Bien pronto se hubiera dado fin glorioso a los
amargos desastres y a las ominosas desgracias; bien pronto hubiera amane-
cido el claro y despejado día de triunfal felicidad; si el espíritu del pueblo, que
sin razón se llama baxo, hubiera sido, sin excepción, general, no alterándose
jamás el ímpetu de las pasiones. Empero la ambición de unos, la codicia de
los otros, las intrigas de éstos, las parcialidades de aquéllos; y el egoísmo fatal,
que a trueque de no incomodarse y sufrir, se presenta, no pocas veces, lloroso
y triste, predicando, qüal autorizado Jeremías, con cadena pesada al cuello,
el inexorable decreto de inevitable esclavitud, al que es ignorante \mprud~>.n
cia oponerse y resistir". Tambifn iusistiremos después.
93. DolldNcm:z, Sermón, 7.
94. DoMfNcm:z, Sermón, 19-20: "Oíste, Francia, abrigaste las falsas doc-
trinas de tus Filf>sotos, y desapareció toda tu gloria. ¿Y qué encontraban en
ellas tus habitantes, sino las licencias de una moral corrompida que, aleján-
dolos, por una parte, del temor santo y saludable a su Dios, de las máximas
honestas del pudor y de la vergüenza; y, por otra, de las religiosas ideas sobre
la vida futura, los arrojaba sin miedo a los placeres sensuales, a los comercios
ilícitos y pecaminosos, y a todos los horrores de la impiedad y disolución? ¿Qué
frutos produxeron en ellos esos principios subversivos de todo orden, esa So-
beranía del Pueblo, esa igualdad, esa libertad, esos derechos del hombre...
Acuérdate de tu espantosa revolución ...". También ampliaremos este concepto
en Guerras de Religión.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBON1CA 55
"fuego baxado del Cielo" una chispa obscura del infierno? ¿Qué
dices sacrílego Bonaparte? ¿No sabes, que yo no reconozco otro
Omnipotente que a un solo Dios?" lll.
Sobre esas dos teologías se asientan sendas ideologías, dos pos-
turas frente al mundo, dos éticas de felicidad, dos "regeneraciones
de España", la que ofrece el predicador y la que promete Napo-
león. Precisemos el término "regeneración", que constituye el tema
del discurso-sermón.
Asi dialoga con Espaiia: "El herege más que todos, Napoleón,
Emperador de los Franceses, y "aborto del abismo", intenta, pri-
mero, denigrar por Emisarios y Proclamas el honor de nuestros Re-
yes, para excitar contra los Barbones nuestro odio; en seguida nos
ofrece en su Dinastía la conservación de nuestra Religión y de
nuestros dogmas, la inmutabilidad de nuestras costumbres, la per-
petuidad de nuestras leyes, la integridad de nuesto territorio, y la
más completa felicidad. Y por último, nos intima que la R. Familia
ha renunciado la Corona en favor de los Bonapartes. España ¡pobre
España! ¿Qué será de tu libertad e independencia? ¿Qué de tus
fueros y privilegios? ¿Qué de tu Sacerdocio y de tu Altar, si das
crédito a las palabras de este "Sofista Impostor"? ¡Conservador de
nuestra Religión, "el hombre de todas las Religiones" ! ¡Protector
de nuestros Dogmas, el que a nuestros Ritos llama "superstición"!
¡El que se gloria de respetar al falso Profeta, ''más que los mismos
Mamelucos"! ¡El que se atreve a escribir, que "el Musulmán que se
embarca en buque donde haya una sola cruz, es peor que un In-
fiel"! ¡El que dice a los principios del Alcorán, "los Súlamente ver-
daderos, y que pueden producir la felicidad de los hombres" (Car-
ta de Napoleón al Diván del Cayro)! ¡Apoyo de nuestras costum-
bres, el que sienta por base de su Imperio "la licencia de vivir, y la
LIBERTAD DE CONCIENCIA"!. .. ¿Y qué otra cosa es esa decantada "fe-
licidad" que te promete, que el desconsuelo, la muerte, la miseria
y la más dura esclavitud?" m.
Libertad de conciencia, h e ahí uno de los primordiales motivos
con que el clérigo mueve al español hacia la lucha con Bonaparte:
López Becerra, el 8 de junio de 1808, !o señala como uno de los tres
·'motivos poderosos para inclinarnos a toll'..ar luego nuestras armas
contr a nuestro enemigo" 113; Fray José Maria de J esús, el 25 de ju-
lio de 1808, profundiza y descubre a la par el verdadero enemigo,
la ideología de los Filósofos, a quienes apostrofa: "impíos ¿os pare-
ce justo y racional que abracemos vuestras corrompidas máximas
,•
1
ARII'ÍCULO 2
.1
1 CINOO GUERRAS DE RELIGION
* * *
B) El 19 de marzo de 1808, el clérigo español estrenó una Re-
volución, o mejor, trató de aprovechar el derrocamiento de Carlos
IV, para subvertir violentamente el orden social establecido, para
imponer la reforma de la sociedad española, implantando una jus-
ticia con marchamo de profetismo israelita. Se intentó utilizar aquel
cambio violento y brusco por parte de espíritus ávidos de lo ab-
• • •
a) Guerra de Sucesión
129. TAPIA, H istoria de la civilización, IV, 17-27; CoXE, L'Espagne, ll, 162-231.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 69
Ahora bien, todo este conflicto bélico fue elevado por el clérigo
español a la categoría de Guerra de Religión. Vimos a Portocarrero
y Salazar -Obispo de Córdoba- participar activamente para ex-
pulsar a la escuadra angloholandesa de tierras andaluzas. Valero, en
1706 -todavía Cura de Villanueva de la Jara, luego Arzobispo d e
Toledo- capitanea su feligresía en lucha contra el Archiduque uo_
Folch de Cardona, Arzobispo de Valencia, decepcionado por la cruel
venganza de Felipe V en el incendio y destrucción de la ciudad de
Játiva, toma el partido austriaco en 1710 m. El carmelita Centellas
se hace general, otro fraile italiano se asciende a coronel de migue-
letes, y en unión de comunidades religiosas armadas -"hasta los pa-
dres capuchinos con lazos pajizos en las barbas"- celebran que el
inglés, conde de Pretersburgo, comandante general de Valencia, les
diga ver en ellos la iglesia militante; la mayor parte de los clérigos
de la corona de Aragón, seculares y regulares, formados en tropas,
y fundiendo la plata de las iglesias en favor del Archiduque 132 • No
se trata de gestos patrióticos, sino de una auténtica guerra religiosa,
alentada por los clérigos españoles.
Los filoaustríacos imponen la obediencia "debaxo de pecado mor-
tal", y el Obispo de Cartagena-Murcia responde con la ''predica-
ción de la guerra santa", según el testimonio de su biógrafo Bague-
na 133, cuando la sedición de Cataluña,. Aragón y Valencia alcanzaba
las tierras murcianas. En diciembre de 1705 publica su Manifiesto 1l4
~n defensa de los derechos borbónicos: "Como el enemigo común
.. .en estos días ha llegado a nuestra noticia cómo su astucia ha sido
tanta, que ha procurado valerse de algunos Ministros de Dios, para
sembrar, no sólo en conversaciones privadas, sino es hasta en el
Confessonario mismo, assí en esta Ciudad, como en algunos otros
Lugares del Obispado, el sacrilego error, con que ha p rocurado tur-
bar las inocentes conciencias d e los más leales Vassallos de nues-
tro Gran Monarca Felipe V, nuestro Rey, y Señor natural, enseñán-
doles, e imponiéndolos en que no tenían obligación a conservarle
la debida obediencia; y que no sólo podían, sino debaxo de pecado
mortal debían r endirla al Archiduque Ca rlos, solicitar su entrada
en estos Reynos, y ayudar a su entronización, y que fuesse depues-
to nuestro Cathólico Felipe".
130. REn:s, Vida exemplar del Ilmo. y Rvdmo. Sr. D . Fra71Cisco Valero.
Pamplona, Benito Cosculluela, 1792, p. 52-57. 63-77. 136-157.
131. Ot.Mos, Prelados Valent1nos. Valencia. semana G:-áfica. S . A., 1949,
p. 226-228.
132. MACANAZ, Política eclesiástica. Palma, :-1iguel Domingo. 1813. p. 8.
133. BAGUENA, El Cardenal Belluga. Mure!:!.. Instituto de Estudios Históri-
COS de la Universidad áe Murcia. 1935, p. 39.
134. Bt::LLUGA, Carta que escrive a los Fieles d e su Obispado, p. 1-3. 11-15.
24-25. 32.
70 ALFREDO .MARTINEZ ALBIACH
a sus reyes -Belluga 134 les denomina Vice Dios en la tierra, su Vi-
cario, escogido de la mano de Dios, anunciado por vaticinios no
oscuros, protegido por Dios con visibles señales, sin vicio alguno,
frecuentador de Sacramentos dos o tres veces por semana. etc.-,
condenaban a sus contrincantes como herejes y se excomulgaban
mutuamente. Tal impacto pudo provocar una escisión de la perso-
nalidad hispana, una ruptura de los mecanismos pslquicos norma-
les, una ruptura de contacto con la realidad; incapaz de establecer
relaciones adecuadas con el mundo externo, tenderá a refugiarse
más y más en su mundo interior, aislándose del ambiente: un ver-
dadero autismo con Ja consiguiente desconfianza hacia su maestrO>
religioso-politico; o con síntomas más alarmantes, cayendo en un
anticlericalismo, nota peculiar del siglo XIX.
Iniciemos el cotejo. Por ejemplo, la presentación de los derechos
de ambos pretendientes a base del testamento de Carlos II: la cor-
poración municipal de Barcelona pide a la Orden de Predicadores
que interprete y explicite sus sentimientos monárquicos, y un hábito.
albinegro con una diferencia de diez años expone desde la cátedra
sagrada una contradicción escalofriante:
"David fue ungido en la casa de su "Heroyco desinterés, que a impul-
Padre en Ramatha... y nuestro Rey sos de su fineza, y generosidad, exe-
(Felipe V) fue con júbilo aclamado en cutó la Real prudencia del Augustfs-
casa de su Christianisimo Padre en simo Emperador, qliando cedió a su
la Metrópoli de Francia. David fue querido Hermano (Carlos), nuestro
preferido a su hermano mayor Eliado Duefio, el derecho natural que tenia
en el Govierno de Jerusalén; y nues- a toda la Monarquia de España. Pues
tro Augusto Monarca es preferido a despojándose de un Manto tan pre-
su hermano mayor el Srnmo. Duque cioso, para vestir a nuestro Carlos
de Borgoña en la Corona de Espa- Tercero, se labró el h ábito más luzi-
fia" 136. do de sus glorias y triunfos" m.
También en el resto de la corona de Aragón lls_
136. BENEDICTO, Oración Evangélica. Barcelona, 1701, p. 24.
137. ABAD, Oración fúnebre. Barcelona, 1711, p. 22.
138. PRATS, Sermón. Valencia, 1701, BARCELÓ, Panegyric4 Ora.ción. Ma-
p. 3 : "Nuestro gran Monarca el Sefior llorca, 1707, p. 7 : "Y también como
Carlos n que Dios tiene en su gloria, la Escritura, y cláusulas de otro pri-
en su R. Testamento ha iust.ituido he- m=. y a.ntigUo Testam~to se apoya
redero de la Co=oua de &-pafia, a su el derecho, que N . veTleradO Monarca
sobrino el Sefior D:.tque de Anjou, Carlos Tercero tiene a estos sus Rey-
aora Sefior Felipe". nos, y etc. q¡¡e }'8 me entiend en los
Escm:R, Sermón. Valencia, 1702, Discretos Notarios".
p . 3 ; COSTA, Ora.ción. Madrid, 1701,
p. 4 : "En su último testamento".
S&RVERA, Oración. Valencia, 1707,
p. 36: " Hic cali.x novum Test.amentum:
impuso silencio a los que prevarica-
ron sobre el primero, revalizando las
promesas que en él avia, de ser nues-
tro Felipe el que reinasse después de
la muerte de nuestro Carlos".
--
ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
1
En cambio, la sorpresa traspasa los limites de una regular y ra-
zonable lógica, cuando se intenta orear la pasión polltica con una
brisa de espiritualidad: la sucesión monárquica se ensalza con aura
de elección divina, con refrendo de profecías y milagros. y con alar-
des históricos y alambicadas disquisiciones onomásticas rn_
El máximo anhelo del clérigo reside en el proselitismo por me-
dio de la devoción. Sabe que su auditorio se impresiona fácilmente
con una estampa regia, ribeteada de santidad. Y desecha toda apren-
sión y escrúpulo en abusar de la religiosidad hispana. Sin embargo,
146. BELLUGA, Mandato a todas las iglesias. Murcia, Jayme Mesnier, 1706,
sin numeración de páginas. Todavía en 1742, el sobrino del Cardenal Belluga,
D. Joseph Alcáraz y Belluga, obispo de Tarazona, daba fe de tal hecho: AI.-
CARA.z, Declaración de la Religión Católica. Dedicatoria del traductor de la cita-
da obra cuyo autor era su tío el Cardenal. Zaragoza. FDancisco Moreno, 1742.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 77
b) Guerras carlostercistas
El 9 de julio de 1746 moría Felipe V y, sosegada Europa por el
tratado de Aquisgrán, en 1748, se dedicó Fernando VI a conservar
la paz durante su reinado, especialmente en la Guerra de los Siete
Años (1756-1763) entre Francia e Inglaterra, no obstante las hala-
gadoras ofertas que una y otra le hicieron : Francia ofrecía Menor-
ca, que había conquistado a los ingleses, y ayuda para la recon-
quista de Gibraltar; Inglaterra prometía la devolución del Peñón y
de algunas posesiones en el golfo de Méjico. Fernando VI, hijo del
primer matrimonio de Felipe V con María Luisa de Sabaya, había
heredado la melancolia paterna que amargó toda su existencia - a
Luis I le dominaron la abulia y su excéntrica esposa Isabel de Or-
leans-, y fue también melancólico y tan pusilánime, que sin fuer-
za para soportar la muerte de su mujer, Bárbara de Braganza, mu-
rió loco un año después, el 10 de agosto de 1759, en Villaviciosa de
Odón 147 •
Le sucede su hermanastro Carlos III, en quien el genotipo de
su madre - Isabel de Farnesío---, enérgico, dominante, ambicioso,
avasallador, creó una mezcla extraña de abulia y voluntad, de me-
lancolía y fortaleza con sus manías y tesones 148• Ascendido al tro-
no en el transcurso de la Guerra de los Siete Años, las victorias in-
glesas sobre Francia en América e India le hicieron temer una
supremacia británica, por lo que -al enviudar de Maria Antonia
de Sajonia (1760) - firmó el Tercer Pacto de Familia - por el Pri-
mero (1731) el ministro P~,tiño reconquistó el r eino de Nápoles para
el Infante Don Carlos, y en el Segundo (1743) España intervino en
la Guerra de Sucesión de Austria que terminó en Aquisgrán- con
Francia -atraído por Choiseul, ministro de Luis XV- por medio
de1 Marqués de Grimaldi, .1n 1761. A este: pacto se adhirieron el
Rey da las Dos Sici.Cas y el Duque de Pru:ma, pe¡-o no Portugal, y
cuando Francia y España la obligaron a cerrar sus puertos a los
ingieses ésta se negó, por lo que le declararon la guerra, si bien
se desaprovechó la ocasión de invadirla en los primeros tiempos
cuando los portugueses no estaban preparados; en la campaña pos-
terior, dirigida por Aranda, sólo se conquistó Almeida. A su ve.z,
l
diferentes nos ha manifestado el año de ochenta y tres, amados
oyentes míos! ¡Qué horroroso semblante nos presentó en sus prin-
cipios, y qué rostro tan risueño en sus fines! En sus principio!'¡ rnirá-
157. ANDRÉS MURIEL, Historia de Carlos IV. Madrid, B.A.E ., 1959, V. CXIV,
l
l
:t. I, p. 85. 90.
158. MINISTERIO DEL E1ÉRcrro, EMCE, Independencia, I, 102- 108.
159. SECO, Godoy, p . XI-XXII.
J
RELIGlOSmAD HISPANA. Y SOCIEDAD BORBONICA 83
a) Antecedentes.
Fundándose en declaraciones hechas en momentos de arrebato,
atribuyen a Napoleón el propósito deliberado de destronar a los
Borbones de España los historiadores Juan Pérez de Guzmán y
Gallo (El Dos de Mayo de 1808 en Madrid) y Cánovas del Castillo
(Breve reseña histórica de España bajo la Casa de Borbón, t. II),
que remontan tal designio al año 1801; Arteche (Guerra de la
Independencia), que cree descubrirlo en 1805; Muñoz Maldonado
(Historia política y militar de la Guerra de la I ndependencia, t. I),
Toreno (Historia del l evantamiento, guerra y revolución de España,
t. I), Ortega Rubio (Historia de España) y Omán (A History ot the
Peninsular War, t. I) , que lo retrasan hasta 1806; Vayo (Historia de
la vida y reinado de Fernando VII), Villa Urrutia (Las mujeres de
Fernando VII), Mayer (Die tranzosisch-spanisches Allianz in den
Jahren 1796-1807) y Desdevises du Dezert (Ideas de Napoleón acer-
ca de España, t. ll), que lo hacen datar de 1807, con anterioridad a
la firma del Tratado de Fontainebleau. Pero según Artola 190, "si Na-
poleón ha pensado expulsar a los Borbones desde épocas ta..."l remo-
tas, es cosa que no se puede afirmar ni negar; lo único cierto es que
en su política, que suponemos expresión de su verdadero pensa-
miento más que sus malhumoradas manifestaciones, no hay huella
que confirme sus propias palabras". No basta que una idea se ofrez-
ca a la imaginación, con mayor o menor insistencia, para decidirse
a ejecutarla. Y en el caso del Emperador francés, ni en su conduc-
ta ni en su correspondencia anteriores a la firma del Tratado de
Fontainebleau, se advierte el menor sintoma de que estuviera ya
resuelto a suplantar a los reyes españoles. Cierto es que Bonaparte
tenia motivos para desconfiar de unos aliados que hacía poco más
de un año habían estado a punto de pasarse al bando enemigo; y
por eso, tanto en P.l tratado como en la convención anexa, se inclu-
yen cláusulas que tendian a asegurarse, por el interés o por el te-
mor, de la fidelidad de la Corte hispana. "Aun reconociendo que la
maniobra ostensible que Napoleón desarrolla en oct:.lbre de 1807
contra Portugal, iba acompañada de una maniobra oculta destina-
da a precaverse contra una posible defección española, por aquel
entonces no había entrado en los planes definidos del Emperador
b) Legitimación de la Revolución.
quieta, sin haber entonces ya más inquietudes que las que él mismo
comenzaba a fomentar; con este pretexto alienta a nuestro joven
Monarca a caminar a Bayona para conferencias útiles a favor de
ambas Naciones" 202• Espléndida y curiosa interpretación de los ver-
daderos móviles de Fernando VII en su desacertado viaje; tal in-
advertencia -quizá tergiversación- de la realidad no le obnubila
la vista: descubre la auténtica situación de España en junio de
1808, las casi nulas esperanzas antes de Bailén: "Aun qüando Dios
permitiera que Napoleón quedase vencedor, podría quitar la vida
pero no dominar a los Españoles, que primero moriremos peleando
que someternos el cuello al yugo de este tirano". Termina su sermón
con el estremecedor pero emotivo grito: " Guerra, pues, hermanos,
guerra" 203•
Y es que la Revolución se legitimó gracias al Dos de Mayo. Honor
a sus héroes, aunque en Madrid se demorarán las primeras exequias
solemnes al 3 de noviembre de 1813, en la Parroquia de San Pedro
el Real; pronunció la oración fúnebre D. Antonio García Bermejo
quien el 2 de mayo de 1817 la repitió en presencia de Fernando VII,
en la R. Iglesia de San Isidro de Madrid 21ll_
Hemos hallado, sin embargo, las honras fúnebres a los héroes del
Dos de Mayo que suponemos las primeras en España, al menos con
la di...onidad suficiente de merecer la perpetuidad por la imprenta.
Su fecha, el 14 de junio de 1809. Lugar, la catedral de Cuenca. Orga-
nizador, la Junta Superior de la Ciudad y Provincia conquense.
Parece como si acabaran de llegar los primeros testigos. Su pre-
sencia presta al orador un coraje inusitado, y aspira prolongar su
eco a "las plazas públicas de París" para que "escuchen cómo caye-
ron los fuertes defensores de nuestra libertad, y qüán gloriosa les ha
sido su muerte, y ventajosa para nosotros" 205•
Rápidamente plantea el primer binomio con verbo tan cruel y
despiadado come apellidar a la España de Carlos rv "degnid.ada,
servil imitadora de la Francia, ramera más adornada que nunca al
gusto de su Rufián en aquellos dias" 21)6_ Profundiza, luego, en los
motines de El Escorial y Aranjuez con estas frías palabras: "Las
atroces y escandalosas disensiones de ia familia real parecían a algu-
nos, motivos suficientes para que el ánimo noble y justo de un Mo-
narca poderoso se hiciese el árbitro de la paz en favor de la ino-
cencia perseguida, libertando al sucesor legítimo del trono de los
l
112 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
222. LAFUENTE, Historia, XXIII, 322-337. 351-408. 447-550 ; XXIV, 17-64. 68-
74. 77-121. 133- 182. 189-261. 277-290. 310-316. 328-349. 359-407. 470-513 ; XXV,
5-96. 133-190. 218-277. 309-401. 447-468; ~. 36-66.
223. PI Y MARGALL, Historia, !, 331-361. 367-550. 580-586. 596-616. 675-678;
II, 65-95. 125-140. 151-154.
224. IZQUIERDO, Antecedentes y comienzos del reir..ado de Fernando VII, p. 488.
RELIGIOSIDAD KISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 113 -
225. V. F . LABAIG, Sermón. Valencia, Salvador Fau li, p . L Cfr. notas 5 y 51_
226. LABAIG, Sermón, 5-11.
227. L.~BAIG, Sermón, 14-15.
228. L\BAI G, Sermón, 15-16.
229. LA a~rc, Sermón, l. c.
114 ALFREDO MARTlNEZ ALBIACH
nientes -el único que a la sazón existía en España era Murat, como
delegado de Carlos IV, desde el 4 de mayo de 1808- como deposi-
tarios de su poder" :Nt_ Tal contradicción de ideas revela un espíri-
tu terriblemente agitado por el remordimiento de su Revolución
-naturalmente en el clérigo, no fraile, menos comprometido en
esa Revolución-, e inconsciente lanza acusaciones contra si mis-
mo. Observa aquel desorden universal de los primeros días de ju-
lio de 1808, y se le escapa tan escandalosa autodelación: "¿Qüál
será la causa de tan graves desgracias? La falta de obediencia a las
Potestades legítimas, la rebelión de los pueblos contra sus propios
Soberanos, y el poco zelo de sus vasallos en defender sus derechos;
sus derechos que son los mismos derechos de Dios". Cuando se per-
cata del alcance de su inculpación, echa mano de la teologia y pre-
senta la nación como "suspirando por la posesión de su propio Rey,
del Rey que Dios le ha dado, y cuya causa Dios visiblemente pro-
tege y protegerá". E incomprensiblemente vuelve a la simbiosis
ideológica: vasallo, ciudadano, trabajo, etc. m.
b)) Santiaguismo
gran Jacobo, o de aquel Santo Apóstol, dicho hijo del trueno por la
firmeza de su fe y por su gran confianza en el Señor" 2S6.
Raza indómita. Aguijonea el orgullo de raza. Ahonda en la histo-
ria gloriosa de "los Juanes de Austria, los Alvas, los Garci-Pérez, los
Corteses, los Pizarros, millares de capitanes han inmortalizado sus
nombres con no menor gloria que los Josueses, Jeptés, Gedeones y
Jonatases" m. Los héroes veterotestamentarios constituyen una ob-
sesión, y sirven de tipo para los nacionales, los de la nueva Israel,
originando un auténtico triunfalismo : "Arrianos, luteranos, maho-
metanos, calvinistas, paganos, ningún enemigo de la Cruz resistió
jamás la grandeza de nuestra fe. Ea, pues, venid ahora, filósofos im-
píos y des tructores, y probad si aún subsiste en nosotros la grandeza
de fe que la predicación de Santiago imprimió en nuestras almas.
Vívoras ponzoñosas acabais de derramar sobre nuestro suelo el ve-
neno que heredasteis y os transmitieron vuestros padres. Venid,
pues, que la fuerte Iberia aún engendra guerreros que venguen nues-
tras injurias. A renovarse van los días de Recaredo" m.
El clérigo --<:omo ya dijimos 105- concibe su momento histórico
como un desenvolvimiento cíclico de las guerr-..s re:igíosas que se
realizan de una maner.a uniforme, y vuelve a otro de sus habituales
"recorsi". No al epicentro israelitico. Sino a las guerras francoespa-
ñolas: Roncesvalles, Pescara, "Visperas sicilianas", Nájera, Toledo,
Pavía, San Quintín, Fuenterrabia, etc. Confortado en tal ejemplo,
mira el futuro : "Hombres pérfidos y sin palabra, España sabrá repa-
rar su decoro, volver por su honor, y si traidoramente h2béis ocu-
pado nuestro País, sabed que Pamplona será restablecida como en
1521, Barcelona volverá a sus dueños como en 1652; saldreis de
nuestra Corte como salieron otros, que sin más derecho que vos-
otros ahora, la ocuparon contra la voluntad castellana" m. Proféticas
palabras pronunciadas en el mismo momento en que José Bonapar-
te era coronado Rey en Madrid, cinco dias antes de su huida 2160•
Alentador presagio que "más pronto pero con más ignominia que los
moros evac'..lareis todo nuestro terreno", pues "la grandeza de fe que
una nación hasta el presente dulce, pacifica y generosa, reproduzca entre nos-
otros mayores males que los que acabamos de sufrir. Un traidor debe ser
oprimido con todo el formidable peso de la justicia, debe dar cuenta a la na-
ción de las secretas y pérfidas operaciones con que ha maqulnado su rulna,
debe perecer ignominiosamente en un cadahalso. ¿Pero acaso tenemos nosotros
derecho para trastornar a nuestro antojo el orden de la justicia, para seña-
lar los reos sin otro examen que la opinión, para condenarlos y executarlos
por nosotros mismos, sin insultar escandalosamente la nación. atentado con-
tra la respetable autoridad de nuestro Gobierno y contra la santidad de nues-
tras santas leyes?"
!U:LIC10SIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 12g.
d) Bailén.
278. V. R os ARIO, Oraci ón. Málaga, L uis Car r eras e h ijos, 1808, p . 10-11.
279. V. ROSARIO, Oración , 13.
280. V. ROSARIO, Or ación , 14.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 131
hombres ... , no han execu tado así en nuestra ciudad, como en Cór-
doba, en Jaén, en Andúxar, en Cuenca, en Cataluña y otros pueblos
y ciudades de nuestra desgraciada península; si no habemos expe-
rimentado iguales calamidades y desgracias; si habemos tenido la
complacencia de ver humillados, confundidos, encadenados estos
lobos de la Arabia, estos leones de la Libia, estos tigres de Hircania;
si habemos visto abatido el vuelo, quebradas las alas de estas de-
cantadas águilas, devoradoras de toda la Europa, desarmados y re- 1
ducidos a la clase de viles prisioneros estos tan fastidiosamente
repetidos y tan importunamente preconizados vencedores de Ma-
rengo, de Austerlitz, de J ena y de Eiland; gracias a la misericordia
1
del Señor que nos ha preservado de su furia, que nos ha dado cono-
cer en medio de nosotros las riquezas de su bondad y de su miseri- f
cordia - Thren. 3, 22-... ; que ha querido suscitar en medio de
nosotros jueces llenos de prudencia, unos generales dotados de 1
talento, y unos soldados, que penetrados de religión y de patriotismo,
han sabido conservarnos la libertad con s u valor, procurarnos la
tranquilidad con su denuedo, fixar el curso de sus triunfos y de
sus victorias con su heroísmo, y comprarnos la verdadera paz y
felicidad con su sangre y con su muerte" 284_
Jueces -miembros de las Juntas-, generales y soldados, for-
jadores de una hazaña que se transmitirá perpetuamente de gene-
ración en generación : "El decrépito anciano, apoyado sobre su bácu-
lo, al pasear el campo de batalla... , con voz trémola per o generosa,
dirá a sus hijos y a sus nietos: aquí, aquí, hijos mios, aquí es donde
el Cielo peleó contra nuestí·os enemigos -Jueces, 5, 20-, donde
quedó sepultado el orgullo de la Francia y asegurada para siempre
la libertad de la España, la quíetud de nuestra provincia y la san-
tidad de nuestra religión ... ¡Oh día diez y nueve de julio, digno de
ser escrito con letras de oro en nuestros anales! ¡Campos de Men-
xibar y Baylén, vosotros sereis más famosos en la his toria de nues-
tra libertad que los de Marathón y Platéas en la de los Griegos!".
Ahora bien, ¿quién fue el artífice de aquella victoria? Difícil in-
cógnita. Sin pretender resolverla, deseamos aportar datos para la
historia. El sermón que estudiamos -6 de septiembre de !808,
Antequera- , nos ofrece tres nombres; su orden supone preeminen-
cia: "Castaños, Reding, Cocpigni" comparados con los héroes grie-
gos Milciades, Leónidas y Temístocles 285• Tres nombres y tres re-
latos diversos de la misma batalla. Toda gloria castrense atrae siem-
pre la absorción, exclusiva o principal, del mérito. ¿A quíén se le
debió?
!o que fue la causa de que los franceses evacuasen las plazas todas basta el
Ebro ; del desembarco de los ingleses nuestros aliados ; de que el Austria declarase
la guerra, y la época de la restauración de la libertad nacional. 19 mil prisio-
neros, con 18 generales y más de 600 oficiales, 44 cañones y obuses, 200 carros
de artilleria, 4 mil caballos son los trofeos que publican el heroísmo de este.
triunfo... El Excmo. Sr. Marqués de Coupigny, mandando la vanguardia en Car-
mona a principio de la guerra por marchas muy sabias y conocimientos estra-
tégicos, obligó, quitando toda comunicación a Dupont, por la Sierra Morena
a la Mancha y Madrid, a retirarse a Andújar, con la esperanza de restable-
cer y facilitar su reunión con el General Vede!, a quien esperaba por instantes.
Habiendo organizado de nuevo el exército con motivo de la reunión de las
tropas de Granada, y la venida del General Reding, tomó el mando de la 2.•
división; tres dias antes de la batalla de Baylén, y la vispera del combare,
de Méngiba, tuvo uno d e los m ás brillantes y reñidos ataques con un cuer-
po del exército de Dupont, que intentó y logró pasar el Guadalquivir en Villa-
nueva de la Reyna, cortando de ese modo la comunicación que tenia con el
General Redi.ng, que se hallaba más arriba; de cuya resulta se trabó el com-
bate más reñido, que aunque al principio fue favorable a los franceses que·
rechazaron la ''anguardia y ocuparon las alturas de la izquierda y la bermita
de santa Ana; pero sin embargo, bien pronto se arrepintieron d e su osadía;
porque baviendo el General Marqués de Coupigny hecho adelantar la arti-
llería, sostenida por la infantería obligó al enemigo a abandonar sus posi-
ciones y repasar el rio precipitadamente; y poniéndose entonces a la cabeza
de la caballería, pasó este río casi a nado; atacó una Brigada italiana, que
formada tres veces en qüadro, hacia !rente con intrépido valor; con todo
eso la destrozó el Marqués; de modo que Jos que no fueron muertos, quedaron.
prisioneros; siendo esta ventaja presagio de la brillante victoria, que tres dias
después inmort.ali.z6 la España. Dupont con sacrílego estilo se burlava casi
en el mismo dia y sitio próximo al teatro de esta batalla, de la superstición
de los Españoles, que pocos días antes celebraron el triunfo de la cruz de
las Navas de Tolosa; ¡qué befa hacían de nuestras tradiciones! Pero en este
mismo tiempo el Dios poderoso de las batallas, y su Madre Santísima pro-
tectora de los Españoles les favorecieron. Se votó al Hijo y Madre Santisimos
en el furor del combate "una acción de gracias" ; y agradecido el exército
consagró al Dios dP. las batallas los trofeos de su valor. Los nuevos apostoli-
zantes, asalariados por el corzo, ridiculizaban en secreto como un fanatismo
español la persuasión de que esta victoria era obra de 1.:1 Providencia; pero
nadie dudó que fue un prodigio del cielo, que inspiró el valor y acierto a
nuestros Generales que se elevaron itasta el grado del heroismo. Las Juntas
decretaron un Te Deum. En esta brillante victoria se hallaron y distingUieron
por s!l valor, los célehres Venegas y Grimares&, segundos comandantes de las.
divisiones ele Reding y Marqués de Coupigny, el benemérito Mariscal de cam-
po D . Miguel de los Ríos, actual Gobernador de esta Plaza de Mallorca. el
Vizconde de Zolina tan conocido por su r eligión como por su valor; en que
igualmente se distinguieron el Barón de Morta.gne Jácome, Cruz, Copons, Aba-
día, Goicocea, Ximénez, Bazquez, Noyá, González, Cherif, Sevilla, carvajal,
el 2.• Brigadier Basecourt, ·Senseve Director del COlegio de Cavalleros de Gan-
dia, Lasala, Freire, Lapuente, Prats, Moreno, Mauri, 5a.ntiago, etc... Es imposi-
ble señalar nl por índice los nombres de todos los valientes guerreros, que·
acreditaron su valor como el de los famosos Walones, hijos del honor y de la
victoria que sobreexcedieron su antigua reputación".
289. V. RosAR.Io, Oración, 25: " La prudencia, la sabidurfa, la rectitud de
tantos Aristides, qüantos son los individuos que componen tu Suprema Juntar
136 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
harán que el "gran Emperador y Rey'', hasta aquí el terror de todas las na-
ciones, venga a ser en adelante el oprobio, la irrisión, el desprecio de la Europa.
Soldad.os to<Ws: vuestro valor ha libertado la patria, vuestra fidelidad endulza-
rá las cadenas de nuestro amado Soberano. "-uestra memoria quedará eterna-
mente grabada en nuestros corazones, y lo que vale más de todo, vuestra
piedad y vuestro zelo por la religión. os hace accreedores a que vuestros nom-
bres sean para siempre escritos en el libro de la vida".
290. v. RosARIO, Oración, 26-27: "Una concurrencia de circunstancias, cada
vez más crítica, y originadas las unas de las otras, habían reducido a la Es-
paña a una situación tan deplorable qüal era la de Grecia, qüatro siglos antes
de la venida de Jesucristo ... : la molicie y la indolencia esclavizaban el amor
de la libertad; una multitud de almas venales se abandonaba al ocio y a la
corrupción; la religión sólo conservaba la a!>ariencia; la magistratura y los
empleos eran la recompensa de ia cábala, de la adulación y de la baxeza;
una tropa mal pagada y descontenta se disminuía insensiblemente por sus
continuas alteraciones y mudanzas; unos pérfidos y viles aduladores y lisonge-
ros formaban una espesa nube alrededcr del trono y aun del santuario; y
para colmo de nuestras desgracias, un favorito tan lleno de orgullo como
de incapacidad denominaJa el corazón del más sencillo y bondadoso de nues-
tros monarcas. Entre tanto, un hombre r aro y singular, cuyos vicios y cuyas
virtudes civiles le hacen en igual digno de alabanza y de vituperio; grande
por sus talentos, elevado por su genio, favorecido de la for tuna, un intrépido
en sus empresas; un hombre astuto y combinador, que poseyendo el arte de
dividir para mandar, según el precepto del más abominable de todos los poü-
ticos, Maquiabelo, sabia sembrar disensiones entre sus vecinos, para aprove-
charse de sus discordias; que engañaba a los unos con falsas promesas y lison-
geras esperanzas mientras s ucesivamente acometía a los otros y los dE:Spojaba
de sus estados; que sólo observaba sus tratados qüando éstos no se oponían
a sus intereses ... ; dictaba nuevas leyes y constituciones. en que se prome-
t ía la fortuna, la felicidad, la gloria a las naciones mismas que acababa de
degradar con el mayor d'!Spotismo y '1-ilipendio: tal es... Napoleón Bonaparte".
291. LABAIG, Sermón, 22-23: "Se invoca a San Josef, y las victorias no se
cuentan sino por el número de los combates, y los campos de Baylén, las eras
de Zaragoza, los montes de Cataluña nos referirán la mayor parte de sus
triunfos con la fecha del 19, día consagrado por nuestra piedad al honor de
San Josef".
292. V. RosARio, Oración, 28: "Amado Fernando, ídolo de nuestros leales
corazones, ¡qüánto mejor te hubiera sido haber prestado oído al sordo grito
de la. nación y al innato sentimiento de tus españoles! Pero el deseo de su
felicidad aceleró tu desgracia. y el amor de tus vasallos te ha precipitado
j untamente con ellos sin culpa tuya, en la mayor miseria··.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 137
--
138 }.LFREDO MARTINEZ ALBIACH
e) Mitos sacro-bélicos
a)) En 1809
En nuestro escurso -rápido y no completo- poi el primer año
de la guerra de la Independencia nos intrigó el dictamen del ya
mencionado capuchino P. Alfara sobre la batalla de Bailén: no se
explotó el éxito: "Quizá hubiera decidido la suerte de la Nación,
expeliendo los franceses de la Península, si en los sucesos ulteriores
se buviera adoptado la prudencia y los planes estratégicos de los
dos sabios generales que lo realizaron (Reding y Coupingny), y se
hubieran evitado los funestos reveses del año 9, tan trágicos para
la España" 296• No olvidemos que estas palabras fueron pronunciadas
en presencia del mismo Coupigny.
1809 amaneció con dramática perspectiva. En el diciembre ante-
rior, Napoleón recuperaba Madrid con un ejército de 160.000 hom-
bres, y dudamos de la prudencia y estrategia citadas frente al colo-
so; el mismo predicador, en una nota, intuye el verdadero motivo
del triunfo bonapartista: "La paz inesperada de Austria -habiendo
neutralizado las glorias de Baylén y demás esfuerzos todos heroi-
cos, pero muy mal dirigidos, que se hicieron en los años 8 y 9-
facilitó al tirano opresor, desembarazado ya del Norte, cargar todas
sus fuerzas por esta parte (de España), mirando la presa como
suya" m. Mas los viejos resentimientos se imponen, y acusa dura-
mente el heroísmo mal dirigido, sin atreverse a descubrir al pre-
sunto reo. Como positivo exhibe en su balance de 1809 "los sucesos
de Cuesta y Wellingtor-" m, en Tal!lvera, de Tamames por el Duque
del Parque, de la de Alcáñiz por Blake, y los del Cinca y demás en
Cataluüa a favor de la inmortal Gerona por el Marqués de Cou-
pigny" :m, y particular:n~nte el de la batalla de Ocaña 300; pero sobre
todo las rentas de Bailén: "el triunfo de Baylén ha sorprendido a
321. T O RRES, Oración, 11-12. 5- 6 .17-19. 22. 25- 28. 30-34. 36-41. 49. 53-54. 56.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCfEDAD BORBONIC.-\ 145-
biblicos con que el Dr. Gutiérrez y Polop inviste a Pio VII: otro
Daniel rodeado de leones; mediante esa imagen aftictiva eleva el
fervor hispano hacia el Papam, quien ya se habia captado el entu-
siasmo de los españoles en esta guerra a través de su Proclama, muy
difundida en toda la nación. Les decía así: "Amados hijos: ... Le-
vantaos y pelead como David contra el imperioso Goliat de nues-
tros tiempos. Valerosos españoles, hijos de la Iglesia, venid y rom-
ped las cadenas de vuestro P astor. Ya mi corazón me asegura de
vuestra sensibilidad; nos os detengais; levantad el estandarte de
la fe ... Ah! ¡con qüánto gozo sabrá el Católico Fernando la intrepi-
dez y heroica lealtad de sus vasallos! La estrecha situación a que,
com o Yo, se ve destinado, impide los medios de manifestar los
.sentimientos de su magnánimo corazón. No tengo aliento para
decir. Si no sobreviviere a la calamidad, y derramaseis vuestra san-
gre por la Religión, por vuestra Patria y vuestro Monarca, a quien
pido que colme el Cielo de felicidad, el mundo será testigo de mi
gratitud" lll.
El mencionado Diario de Tarragona (pág. 124) completaba las
palabras ponti!icias sobre el carácter sagrado de la guerra con estas
dos preguntas y consiguientes r espuestas del Catecismo Patriótico:
"P. -Pero si al fin hemos de sacrificar con guerra nuestra vida y
nuestra hacienda; qué bienes nos vienen por ella?
R. -Con la guerra tan justa que tenemos, vamos a conservar
nuestra Santa Religión, nuestra libertad y nuestros bienes.
P.- ¿Perderíamos acaso la Religión Católica, si mandara Na-
poleón?
R. - Sí; porque habria en España Judíos, Moros, Hereges de to-
das clases, Ateístas, y tendriamos la misma fe que tienen ellos, y
nuestros sagrados Templos servirian para lo que han servido en los
pueblos en que han entrado los exércitos franceses".
Las palabras del Papa daban el espaldarazo de la guerra santa
de España contra Napoleón, y el predicador de la mis:na en un singu-
lar juego de palabras mezcla los ultrajes inferidos a las cabe7.as vi-
sible e invisible de la Iglesia, junto con su habitual amalgama de
.1\.ltar y Trono: N'..ataró, Molins de Rey, Córdoba, Jaén, Rioseco;
Salt, Bruch, San Lamberto y Santa Fe de Zaragoza, Valencia y Ma-
drid serán cargos contra el "sacrílego" Bonaparte 329•
También "blasfemo". Es francamente peculiar el comentario que
el clérigo hizo de las proclamas napoleónicas: las enmarca en una
b)) En 1810
l . - Llegamos a Ja campaña de 1810. Tu vi) su héroe. el de turno.
A Reding sustituyó el Marqués de la Romana. El clérigo aún lamen-
tará en 1815 que no se haya valorado la "sabia" ca:npaña del año
10, "ni en España ni en Europa", como se merece. No sólo descu-
brió nuevos valores; preside -con Bailén y Moscú- el podium de
la contienda napoleónica. Siempre, naturalmente, cabe la sombra
de la Providencia divina. Bailén fue el reactivo que Dios nos ofre-
330. G . POLOP, D iscurso, 21. 25-28.
331. G1u:s, Sermón. 6 agost~ de 1809. Sevilla. Viuda de Vúquez, 1809, p. 2.
332. GII.ES, Sennón, 7-8. 11-12.
1!>0 ALFREDO MARTlNEZ ALBIACH 1
ció despnés de Tilsit y la coronación de José I en Madrid; ~
obra del " ángel tutelar que vela sobre las naciones"; y en el inter-
medio, la esperanza providencial de Torresvedrás, "presagio pre-
cursor de la restauración de Europa" m_
No podía faltar la metempsicosis hispana. El espiritu de Vi- 1
riato se reencarna en el héroe mallorquín para las acciones milita-
res en los países del Norte 334, y en la liberación de Galicia m; y el
de Anibal para Torresvedrás, dejando a Masena "abandonado a la
desesperación" y compartiendo con Wellington "la gloria de sus
triunfos" 336.
Los personajes históricos, en cambio, no satisfacen al orador
sagrado: recurre a la Biblia para imponerle el más adecuado
dentro del ambiente religioso: " El Español Judas Macabeo". Tal
es el tema del discurso fúnebre que Novelda ofrenda a su señor;
aqui más en familia, se pul;>licará el verdadero diagnóstico de la
enfermedad del Marqués 337, que soslayarán sus paisanos después
en las solemnes honras funerarias cumplimentando el decreto de
las Cortes m.
2.- 1810 no detentó UD mito en exclusiva. La Marina presentó su
candidato con apoyo del eclesiástico: éste necesita UD personaje
para su ideología -La Romana "entre tiros de bombas y pesadas
balas de malicia, no pudiendo sobrevivir a s u honra pública e im-
punemente vulnerada, falleció de espasmo, sufocación al pecho y
executiva muerte" m_; aquélla, los elogios del púlpito. El elegido
es D. Pedro de Cárdenas, Teniente General de la R. Armada, Ca-
pitán General del Departame::lto de Cádiz. El elogio fúnebre adere-
za un nostálgico recuerdo de la historia hispana desde 1732 - fecha
del nacimiento de Cá rdenas-; época gloriosa para el integrismo ca-
tólico frente a la libertad religio~ : pri...mera parte de la historia pa-
tria según Gutíérrez Polop y sueño dorado del púlpito en la Guerra
de la Independencia. Aquel tiempo, el ideal al que hay que volver; y
Cárdenas, el modelo: en sus viajes a Holanda, en 1756 y 1760, "supo
conservar la pureza de su fe en la corrompida atmósfera de esos
paises desgraciados, donde la libertad de conciencia ha da.do entra-
da a toda clase de ahsurdos y no ha dexado ct!o !reno <\ los críme-
nes que el temor de lÓs hombres. Si el poder o la astucia pueden
a) Origen
Aunque aparezcan muchos puntos de contacto con las preceden-
tes guerras estudiadas, vamos a tratar de separa rlas para entender
mejor el problema planteado y evitar malas interpretaciones. Ade-
más, el clérigo de la Guerra de la Independencia subrayó intencio-
nadamente el nombre de Napoleón, para cubrir una ideología contra
la que en realidad luchaba. Para el pueblo español la guerra anti-
bonapartista era una necesidad vital -de independencia-; para el
clérigo, una bandera a fin de reclutar elementos y poder batallar con-
tra su auténtico enemigo. Mas no nos precipitemos. Veamos el ori-
gen y planteamiento de esta guerra anti-liberal.
El miércoles después del primer domingo cuaresmal de 1751, el
P . Nicolás Gallo delata en presencia del Supremo Consejo de la In-
quisión al "libertino", al "Espíritu del Libertinage y d.issolución,
que va corrompiendo la moral y las costumbres de toda la Nación"
con su "critica religiosa, impía, irracional, cruel" 3{7.
Fue méritc del P . Gallo reconocer la personalidad jurídica, per-
sonalizar unos fenómenos sociales - lujo, diversiones, ·•relaxación",
etcétera-. Ya no se les considera como entes abstractos, ni como
un ambiente. Sino un "espiritu" viviente, que piensa, habla, critica
y actúa. Capaz de ser un enemigo. Y como a tal se le acusa.
Pero este adversa!ic se au totitula de "espíritu fuerte", término
que desagrada al aclesiástico: el arzobispo tarraconense, Fray Fran-
cisco Armañá , embiste contra él: "Jáctanse soberbios de su soñada
fortaleza esos filósofos presumidos, esos hombres arrogantes, que
no sé si por vanidad o por ironía se apropiaron el pomposo renom-
bre de espíritus fuertes, al paso que se dejan sujetar miserablemen-
te de las más viles pasiones" 348•
El personaje es muy reciente en España: "aunque, por la mise-
ricordia de Dios, no sea nuestra nación la que más .tenga que llorar
estos desórdenes -de disolución y libertinage-, reconocemos, sin
embargo, que mucha parte de la juwmtud empieza a imbuirse en los
principios de una sabiduría que no viene de lo alto, sino que es
terrena, animal y diabólica" 349•
b) Tregua
a)) Godoy
más próxima que todas, no habia =a que no debiera temer de un vecino tan
peligroso. Los Franceses concibieron proyectos iniqüos, y una Junta de hombres
frenéticos y desalmados decretó la ruina de todos los Tronos del Universo.
Por todas parte derramaban libelos sediciosos, incitando a los pue;,los a sacudir
el yugo amable del gobierne Monárquico y de la Religión. Hasta en la España
pretendieron introducir este contagio pestilente; si, en la España, donde la
fid,elidad y el amor a los Reyes es tan antiguo como la Nación misma, y donde
es m~ fácil sacar a un Vasallo la última gota de su sangre. que !:lacerle co-
meter una traición contra el Monarca. No se trataba de entrar a pelear contra
\1!1 Exército <!isdplinado; er:1 preciso batirse con hombres furiosos, que no
daban qüartel ni lo pedian. Carlos Qüarto desprecia todo;; estos obstá~;u!os, y a
pesar de Jos sentimientos pacíficos de su corazón declara la guerra a Francia,
consultando a la seguridad de sus vasal!os, a la defensa de la Religión Cris-
tia114, y a! honor of.mdid<> de su sangre. Entonces sí que los Españoles manifes-
taron su amor al Rey y a la Patria en toda su extensión. Los Vasallos corrían
cor. pasos presurosos a ofrecer sus personas y haciendas a los Pies del Trono.
En un momento se vieron las fronteras de Francia guarnecidas por un Exér-
cito formidable, y ansioso de medir sus fuerzas con las del eneinigo. Las Tro-
pas Españolas penetraron hasta la Capital del Rosellón, y aturdidos los Fran-
ceses con el ardor de nuestros Soldados huían por todas partes como las nubes
acosadas del viento. La suerte de las batallas se mudó posteriormente y expe-
rimentamos algunos reveses, pero nuestras Armas conservaron su honor aun
en medio de las mismas retiradas".
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONJCA 163
b)) Tratalgar
1
Portugal, cubriendo de terror a los enemigos, y haciéndolos huir por todas
partes. Qué fácil hubiera sido para el Srmo. Almirante conquistar todo este
Reyno en pocos días; mandaba S. A. S. un Exército aguerrido, ¡pero ay! que
en su corazón y en el del Monarca dominaban los sentimientos más tiernos y
pacíficos, y se embotaron muy pronto los filos de la espada de un Héroe, que
coloca su mayor felicidad en conservar los Pueblos, y no en destruirlos. La
paz se hizo a poco tiempo en Badajoz, y S. A. S. no quiso abandonar por un
solo instante los principios de equidad y moderación, que lo caracterizan: así
lo reconoció la Corte de Lisboa, y no pudo menos de manifestar su gratitud
y el reconocimiento al Srmo. Almirante".
372. VALENZUELA, Oración, 31-33: "¡O! Si esa Nación orgullosa, que quiere
mantener con nosotros y con la Francia una eterna rivalidad, adoptase seme-
jantes principios, ¡qué pronto cambiarla ia faz d e la Europa! pero ella pareee
que se ha propuesto dominar el mundo d estruyendo la mitad del mundo: esta
guerra injusta, esta AGRESIÓN, que ha hecho contra nosotros la Gran Bretaña,
sólo ha servido para que adquiera el odio eterno de las Naciones, y para que los
Españoles den una prueba de su valor heroyco, y S. A. S. la dé de humanidad,
de beneficencia y de amor a l Rey y a los Vasallos; en esta guerra es en la
que S. A. S. continúa colmando d e beneficios a la España, y defendiéndola vi-
gorosame::lte de los Ingleses: ¿de qué han servido sus tentativas contra el Fe-
rro! y contra Cádiz? a todas partes acude la vigilancia del Srmo. Almirante, y
sin aventvrar un pronóstico político, bien se puede asegurar o_ue jamás los
Ingleses adelantarán cosa alguna contra nosotros. En esas comhates terribles,
que se han dado, han visto prácticamente nuestra pericia marítima, unida
con un valor, que admirara la posteridad".
373. PÉREz GALDÓS, Memorías de un desmemoriado, ~ño 1916: Obras com-
pletas. Madrid, Aguilar, 1941, t. V, p. 1160: "A mediados d el 72 ... me encuen-
tro que sin saber por qué sí ni por qué no prepará.:>a una serie de novelas
históricas, breves y amenas. Hablaba yo de esto con mi amigo Albareda y, como
le indicase que no sabía qué título poner a esta serie de obritas, José Luis
me dijo: Bautice usted esas obritas con el nombre de Episodios Nacionales.
Y cuando me preguntó en qué época pensaba iniciar la serie, brotó de mis
labios, como una obsesión del pensamiento, la palabra Trafalgar".
374. BRUUN, La Europa del siglo XIX. México, F. C. E., 1964, p. 16. 22-30.
375. ARANGUREN, Moral y Sociedad. Madrid, Edicusa, 1966, 2.• ed., p. 46.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 167
376. Cos, Oración. Cá.diz, Casa de la Misericordia, 1805, p. 5-6. 20-21. 29-31..
36-38. 41. 43. 45: " Vosotros venís, bien lo conzoco, penetrados del más vivo dolor
con la memoria del sangriento destrozo que ha sufrido la esqüailia. combinada...
una armada que parecía merecer el imperio de los mares... ¿Qué deberemos
pensar de los que murieron en el combate?... La intrepidez con que arrostra-
ron la muerte por defender su patria, nos hace mirarlos como acreedores a
una recompensa extraordinaria, y no dudeis que el Dios de las misericordias
haya prodigado sus gracias a unas almas tan heroicas... Si no temiera traspasar·
los limites de mi encargo, y salir de la estrecha esfera de un discurso fúnebre
y sagrado, yo... dirigiría mi voz a esa nación nuestra aliada, para colmarla de
elogios, y consolarla de la pérdida de sus compatriotas, trayéndola a la memo-
ria que si sus armas navales han sido en esta ocasión poco afortunadas, sus
exércitos siempre victoriosos llevan por todas partes enarbolado el estandarte·
del triunfo. Levantarla el grito hasta los oídos del gran Napoleón, del incom-
parable Napoleón, de ese glorioso restaurador del Imperio Francés, y pacifica-
dor de toda la Europa. Hablarla con la fiel confianza de un fiel vasallo al
amable Carlos, a mi augusto Monarca, a ese Rey justo y piadoso, que precisa-
do a vindicar los derechos de su scberania, se ve en la dura necesidad de ·
sostener una guerra contra el usurpador del libre imperio de los mares. A uno
y otro les dirfa que Jos Franceses y Españoles por quienes celebramos estas .
religiosas exequias, fueran muertos pero no rendidos; que si alguno de sus
baxeles se vieron en poder del enemigo, fue qüando ya no hablan que<iado
manos para las operaciones nabales, para el manejo de la artillería y para
mantener enarbolado su pabellón; que los navíos escapados del exterminio,.
entraron a nuestra vista en el Puerto desmantelados y cargados de heridos ...
Una nación marítima, no menos temible por sus fuerzas navales que Antíoco·
-I Macabeos, 2, 7ss- por sus numerosos exércitos, meditaba a sangre fria
rr:uerte, destrozos, incendios, en una pal'ibra, el exterminio absoluto de nues-
tro Puerto y Arsenal. Para executar sus intentos conf.ere facultades amplias al
:nás valiente, al más intrépido de los Generales de su Armaáa - Nelson- ...
Pero de este terrible enemigo nos libertó el valor de nuestros conciudadanos.
Nelson no eY.iste, pereció a manos de nuestros combatientes y vino a ser con
otros muchos rle su armada, despojo de aquellos mismos a quienes quiso arro-
llar. Sus proyectos se desvanecieron, y la formidable esqüadra con que inten-
taba executarlos quedó, si no destruida, a lo menos abatida y muy maltra-
tada ... ¿Qué no debeis esperar, Españoles, de un ánimo tan liberal (del Mo-
narca) , a vista de la generosidad que ha usado (en la Gazeta de Madrid de
12 de noviembre), no sólo con vosotros, distribuyéndoos insignias de honor y
grados militares; no sólo con Jos que murieron, señalando a sus viudas y huér-
fanos pensiones extraordinarias, sino también con los que dieron auxilio a los
heridos y náufragos? Todos han sido gratificados por aquel magnánimo Rey que-
más que Soberano es padre de sus vasallos".
168 ALFREDO MARTH•""EZ ALBIACB
377. Rmz RoMÁN, Oración. Barcelona. Brusi, 1806. p. 1-2. 4. 17: "Excmos.
Srs. (el Teniente General D. Juan Moreno. el Almirante Rosilly, el Contral-
mirante Guordon, y los Tte. Gris. D. Ignacio M.• de Alava, D. Antonio de Es-
caño y D . J osef d e Córdoba) : ¿Aún quedaba que sufrir esta herida a nues-
tro gravísimo dolor? ... Si os acordais de la escena trágica de nuestras armas
navales sobre Trafalgar... ¿Qué General, pues, será más acreedor a los gran-
des elogios, que el que en vida y en muerte todo fue de la patria y de la re-
ligión? ... Vivió para la religión y para la patria: murió entre los laureles de
la patria y las dulzuras de la religión. (Tras contar la vida privada y la fami-
liar de Gravina, para ena!tecerle, lo compara con Napoleón). Allí sobre la
escarpada de Faraón se divisa un jcroen sirviendo por si solo la artillería,
qüando sus compañeros son cadáveres o se revuelcan en su sangre: aqui se ve
un marino, que alentando sus tropas, e insensible a la suya que derrama, las
hace superar las asperezas del terreno. las ofensas del enemigo, y aun la
-muerte. ¿Quiénes son? Aquél es el intrépido Bonaparte, éste es nuestro Gra-
vina ... ". (Describe la •batalla de Trafalgar, en las páginas 22-23, y termina con
la muerte de Gravina en las páginas 23-25).
378. VALENZUELA, Oración, 33-35: "Dios mio, ¿habreis recibido en el seno
de vuestra gloria esos Marinos valerosos que se sacrificaron por su Rey y
por su Patria? Así lo esperamos de vuestra infinita clemencia. ¡Ay, Señores!
qué días aquellos de tanto terror y aflicción! Traed a vuestra memoria el
combate de Trajalgar tan funesto para las Armas Británicas. No, Dios mio,
no quiero yo profanar vuestro San';o Templo con la horrible pintura de tantas
-muertes y estragos: bien sabeis que los Ingleses nos han provocado y acome-
tido... S . A. S. inmediatamente corrió a los pies del Trono, y alcanzó del Rey
las gracias más relevantes de la Monarquía para los Generales que habían
mancado la acción, y consiguió promociones para toda la Oficialidad; dándose
despu-!5 las más eficaces disposiciones para reparar las averías de la Esqüadra
y ponerla en estad.J de contener al enemigo".
379. VAJ..ENZUELA, Orozción, 35-40: "Esta es una serie, aunque imperfecta, de
las acciones glorio.o;as, con que el Srmo. Sr. Almirante ba emobleciC:o su ilus-
tre carrera... Si el tiempo me lo permitiera, yo os hablarla de las benéficas
prov!dencias con que socorrió la Andalucía en los dos terribles contagios .... de
su amor a las artes y a las ciencias...• la educación ¡:oública... , de las reformas
hechas en el Exército y marina ... La conducta del Rey Faraón, que supo dis-
cernir el gran mérito de su Ministro José, se ve renovada en nuestros días ...
La voz de once millones de hombres dice a un mismo tiempo : viva el Al-
mirante... Vos sois, Señor, os diré con las mismas palabras de David,
el que habels ceñido de fuerza a nuestro Almlrante y el que babeis hecho que
su camino fuese sin mancilla ... : el que confiado en vos perseguirá a nuestros
enemigos y los alcanzará; y no se volverá ya hasta que desfallezcan ; el que
los quebrantará y no podrán tener en pie. y los hará caer debajo d e los pies
-de nuestro Soberano".
.----..
IIEL.IOIO!liDAD HISPAN,, , , - 12
170 ALFlÜ:Do MARTINEZ ALBIACH
e) 1808
a)) Preanuncios
No consiguen categoria de precedentes algunas notas discor-
dantes dentro del universal canto de la adulación palatina; ésta se
interrumpió bruscamente el 19 de marzo de 1808, que el púlpito
denominó con suficiente expresividad mediante el nombre de Revo-
lución. Sin embargo, debemos resaltar esos preanuncios, que se-
leccionamos según su personalidad.
En primer lugar, ofrecemos el del Prelado barcelonés, Monseñor
Dia.z de Valdés, el 8 de octubre de 1802, en su catedral, con triple
acontecimiento: "la dichosa llegada de los Reyes NN. SS. y de sus
Altezas, los felices desposorios de los Srmos. Srs. Príncipe de Astu-
rias y de Nápoles, y el venturoso alumbramiento de la Sra. Reyna
de Etruria" 380• Examinemos las siguientes conminaciones que al-
canzan su sentido con la exhortación final: "Con la voz de Dios, y
no con la de los homb:res, podré pronosticaras que con la paz y con
estos regocijos sereis dichosos, si conservais la virtud y las
costumbres ... ; series miserables, si el vicio llega a dominar entre
vosotros... La justicia, la virtud y las costumbres hacen prosperar
los pueblos; y que el vicio y el pecado los buelven miserables e infe-
lices, y aun acaban con ellos" 331 • Estas mesuradas palabras, preña-
das de velada pero indignada delación de la inmoralidad palaciega,
se complementan con la exhortación final, que -incluida la mani-
fiesta omisión del nombre de Godoy- es una plástica descripción
de la familia regia en artística competencia con el pincel de Goya 382;
b)) La Revolución
El 19 de marzo de 1808 estalla la Revolución personalmente con-
tra el primer miembro del binomio Carlos IV-Godoy, realmente
bien ec!ucados, se adquirió el glorioso titulo de la me;or de las Madres... Viva
el Príncipe c!e Asturia.s, esse Joven gallardo, de figura esbelta, de exterior ri-
sueño, que es la delicia de Jos Españoles, y ahora es el embeleso de los Ca-
talanes".
383. MIERA, Discurso. Sevilla, Viuda d e Vázquez, 1809, p. l. 9-10. 31-32: "Ni
el vALIDO infame y traidor que, agente únicamente de su causa y de sus intere-
ses personales, sólo para este fin mueve Jos resorte,; del infiuxo y de la gracia
que :tis!ruta ... ; ninguno de estos seres contrahechos hallareis en el qüadro
del patriotismo. Monstruos indignos de vivir sobre la tierra, opresores tiranos
de la humanidad triste, insectos pestilentes y envenenados, J:acidos para nues-
tro daiJo, enemigos funestos y destructores del orden social, Verdugos des-
honrados y sanguinarios de la Patria... Llbrala, Dios bené1ico, de los males
que aftigen, de la esterilidad que la oprime, de los vicios que la deshonran,
y de los enemigos que la asedian y quieren aniquilarla. Haz, buen Dios, que
renazca en nosotros todo aquel a;nor patri?t:co, qut! inspira la naturaleza. que
prescribe la Religión y que tá mismo santificaste con t'.1 exemplo y coz;. tus
máximas. Da a nuestro augusto Monarca dias dilatados de serenidad y de
salud. Perpetúa h:J.Sta las últimas generaciones en el trono herederos dignos
de su estirpe. Conserva su exército. Humilla con el poder de tu ciiestra las Na-
ciones de los hereges y Paganos. Rescata y hora de sus pesados grillos a Jos
cautivos".
384. FrrA, Sermtm, 25 febrero 1807. Valencia, Fauli, 1807, p. 16. 20: "Tiendo
la vista por el inmenso espacio de los siglos, y veo millares de generaciones
llorando aun en sus nietos y descendientes las desgracias que les transmitie-
ron unos abuelos, indignos de haber manejado las Tiendas c!el gobier7u>, y de
que la posteridad lea sus nombres en los fastos de la Jurisprudencia --<:uyas
faltas descubre en las 24 páginas-. La verdad vendrá algún dia al través de
tantas nubes como la han eclipsado, a manifestarse en todo su esplendor".
172 ALFREDO MARTlNE'Z ALBIACH
d) Ofensiva definitiva
\~
contra los divulgadores de su ideología; a éstos les prqyecta, desde
su privanza de oráculo divino, la sentencia de Dios -según el augu-
rio paulino en su carta a los Romanos 1, 32- que condena a muer- 1
.1
188 ALFREDO MARTlNEZ ALBL\C.H
'
l
filosojia, y entrambos para edificar y plantar la felicidad pública
en el árbol frondoso de la moral cristiana".
Los campos se deslindan, la silueta del enemigo se recorta, y al
abrir el segundo frente, apresta al auditorio a la lucha, más cruen-
ta aún que en la vieja trinchera: "Cristianos: todos los exércitos
dei usurpador (Napoleón) no son tan ominosos para la desconsola-
da patria como una media docena de regeneradores que han tomado
a su cargo el bárbaro proyecto de jubilar a Dios en el mundo, pro-
yecto bárbaro que no pudieron realizar con todas sus arterias el
Patriarca de Fernei con los demás corifeos aunque coronados del
ateísmo. Do quiera que encontreis alguno de esos espiones que vie-
nen a desbaratar la Religión antigua y el trono de Fernando, dela-
tadlos inmediatamente a Fernando m, y vereis cómo sin Inquisi-
ción el mismo Monarca lleva sobre sus espaldas la leña y enciende
con sus propias manos la pira donde deben consumirse los perjuros
de nuestra revolución y de nuestro bautismo".
La batalla de la teocracia: Dios, el Monarca supremo; Fernan-
do, el General; Cristo, la señal del combate; y la "santa crueldad"
tradicional: "¿Qué de satirillas arrojarán contra Fernando m nues-
tros delicados, qüando entiendan que este santo Príncipe no gasta-
ba esas formalidades ni ceremonias que usó después el santo Tribu-
nal, pareciéndole que qüalquier demora en castigar esta especie de
delinqüentes le podría hacer reo ante aquel Dios eterno, de cuya
mano había recibido el bastón, y en cuyo nombre empuñaba la es-
pada? Purgada así Castilla de esas raposas malignas que en todos
tiempos han infestado la viña del Señor, el exército castellano era
un exército de verdaderos leones que tenían por Monarca a Dios,
por General a Fernando, por señal del combate a Cristo, por com-
pañera la virtud, por regla la justicia, por inseparable la victoria,
por mote el honor, y por blasones las lunas y turbantes de toda la
morería.. . El procuraba imprimir en sus batallones el santo temor
14. TRAcClA, Oración fúnebre del Conde de Campomanes. Madrid, Imp. San-
cha. 1802, p. 3-4: "Si no fue el fundador de la Academia (de la Historia), le
dio actividad y perfección habiendo sido su Director por el largo espacio de
treinta años hasta dos meses antes de morir. NOTA : Admitido el dia 29 de
marro de 1748, fue Director por reelecciones anuales desde 11 de noviembre de
1764 hasta fin de diciembre de 1792, y desde 1.• de este mes de 1799 hasta últi-
mos de noviembre de 1801".
15. TRACCIA, Oración, 4-7.
16. TRACCIA, Oración, 15-29: " No, no condeno absolutamente el método
escolástico: sé que ha producido grandes hombres, y que ha merecido elogios
a muchos sabios respetables. Pero es muy reprehensible el abuso de la metafí-
sica, y la falta de observación atenta de la naturaleza, vicio demasiado común
en los estudios a p rincipios del siglo pasado, y en que no cayeron ciertamente
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 209
Campomanes tipifica, en los albores del siglo xrx. una nueva es-
piritualidad: la ideología intrahumana, que marca el comportamien-
Aristóteles, ni los célebres escolasticos del siglo xvi ... Sin embargo, nuestro
joven... no halló en aquel sistema donde fixar el pie. Sucedióle lo que a la
paloma del Arca ...
- otos no lo llamaba para brillar en su santuario como Aa.rón. Pero siendo
cierto que todo cristiano pertenece, según la expresión del Apóstol -1 Pe-
dro 2, 9-, al llnage escogido y real sacerdocio. preparaba en el joven Campo-
manes un héroe que a manera de Daniel, Nehemias, Zorobabel y otros nacidos
fuera de la tribu sacerdotal, promoviese el TTUlyor decoro del culto y ministros
del altar ... El rey -Carlos m- lo había nombrado -en 1762- Fiscal para que
defendiese la regalía., nombre sagrado, pero temible, y que !reqüentemente ha
sido el escollo en que dieron al través muchos hombres grandes. Se conserva-
ba aún fresca la memoria del naufragio de uno de los más doctos predecesores
de nuestro nuevo Fiscal en el mismo empleo -Macana.z.-. Pide ciertamente
mucho tino la delicada operación de tirar la linea divisoria entre la potestad
temporal y espiritual, después que la costumbre, la piedad de los prlncipes, la
d.eferencúl de los obispos al xefe visible de la Iglesia, las sanciones y decretos
canónicos e imperiales han mezclado y confundido, por decirlo así. los limites
de una y otra jurisdicción. Sin este cúmulo de ordenamientos, variaciones y
concordatos humanos el negocio era muy sencillo; mas al reflexionar el estado
actual de esta antigua y nunca terminada controversia, al paso que a.clmi.ro
la valentia de ciertas almas superiores a las preocupaciones comunts, que se
atreven a restablecer los términos naturales de las dos potestades, no extraño,
y me parece digna de excusa la opos~ción que personas bien intencionadas, y de
no vulgar instrucción, suelen hacer a la pretendida novedad. Oxalá la dife-
rencia de pareceres no produxera sino la alegación de argumentos por uno y
otro extremo de la disputa! Seria esto un bien, que dando tiempo y libertad
para reunir como en un punto de vista, y examinar con sosiego qüantas razo-
nes se pudiesen producir por las partes contranas, acercaria infaliblemente a los
hombres, o los conducirla al hallazgo de la verdad. Asf Jo prac.t icaron los
Apóstoles -Hechos 15, 7-... Teniendo tal estado -no ha sido jamás asunto
de una definición legitima- la intrincada qüestión sobre los limites que divi-
den las dos potestades entre las naciones y los doctos católicos, es menester
ser muy atrevido, o lo que viene a ser lo mismo. muy Ignorante para censurar
de irreli~oso al que en semejantes materias sigue diversa opinión, o con el
honesto fin de concordar los pareceres abre uuevos caminos para encontrar,
si es posible, la verda<l Con estos presupuestos ninguno podri. reprehender
justamente lo que hizo nuestro Fiscal en favor de la regalía., y lo mucho que
trabajó por reformar los abusos, que el tiempo habla introducido en su perjui-
cio. .. No se le ocultaba lo que debía temer de las envejecidas preocupaciones
del pa.ls, de la ma.Jignjdad, y aun del zelo demasiado ardiente de los que opi-
naban de otro modo. Nada le detuvo ni lntJmidó ... La facilidad con que los bie-
nes SltiOS ~bl.n a las 4;lesias. recargan® a ios pocos que '1Uedaban en manos
legas todo el peso de las contribuciones del estado; la multitud corbiúmte de
lugares, que gozando el derecho del asilo protegía la impunidad d.e los cri-
m.:mes; la facilidad de imponer las manos a los que no tenian título ni medios
para subsistir con decoro; los inconvenientes mil veces reclamados y nunca
bien corregidos de l4 curio., y otros puntos de Igual trascendencia excitaron
el zelo de nuestro Fiscal, y le debieron enmiendas y mejoras que no era fácil
prometerse. La corona y los depositarlos del supremo poder, que la ciñen en
sus sienes, volvieron a conocer que el EvANCELIO -Mateo 22, 21; 17, 26; Juan
18, 36; 4, 23 = ccncluyó después de muchas reflexiones que el poder de la
Iglesia era espiritual y ceñid() por su naturaleza a conservar intacto e inviola-
ble el depósito de la fe, de l4 moral y de lo.s sacramentos- no habla menosca-
bado su autoridad. ni eximido de su jurisdicción a los ministros del culto. ni
hecho incompatible".
!¡
"210 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
17. LoRENZANA, Cartas, Edictos y otras obras sueltas: Carta al nmo. Sr. D .
Tomás de Lorenzana, Obispo de la S . I . de Gerona. Toledo 25 de julio de 1783.
Madrid. Imp. Nicolás de Almanzano. 1786, pág. 1 ss.
18. SANTANDER, Sermones Panegíricos. Madrid, Villalpando, 1814, 3.• ed.,
t. I. pág. 1-II.
212 ALFREDO MARTlNEZ ALBIACH
AFRANCESADOS
A) PRECEDENTES CRONOLÓGICOS
a) Jovellanos
27. LAFUENTE, Historia, XXIV. 12-17. 71-75. 266-358. 410-456; XXV, 98 s.s.
28. ARTOLA, Estudio Preliminar a lc.s obras de JovellaTU>S, B . A. E., t . ill,
p . VII-VID.
29. SÁNCHEZ AGESTA, El pensamiento politico d e! despotismo ilustrado, p. 188.
219.
30. GoNZ.UEz VA:.I>ÉS GRANDA, Oración fúnebre al Ex. Sr. D . ~r Melclulr
de Jovellanos. Madrid, 1842, p . 20. 33-46.
RELIGIOSIDAD IDSPANA Y SOCIEDAD BOIUIONlCA 217
ji b) F loridablanca
1
El entusiasmo suscitado con ocasión de los funerales del Conde
t. de Floridablanca no tuvo par: circunstancia oportuna para reafir-
mar los ideales promulgados en las honras fúnebres de Campoma-
nes 31• El agustino Fray Luis Cerezo, Secretario de la Junta de Go-
bierno de Orihuela, restaura la temática neotestamentaria. Por no
dejar a su "héroe cristiano" desprovisto de indumentaria bíblica,
recurre al libro de Hechos de los Apóstoles -7, 35- como tema de
su oración fúnebre; a la vez elige como personaje modelo -al que
adaptará la vida de Floridablanca en " la espantosa noche de la
tiranía"- al "Hombre Dios abatido". Como tal será una "víctima"
consagrada a la libertad de la patria, la cual se hallaba en desga-
rradora crisis; o en terminología profética, "la Nación experimenta
el azote de Dios, en el tirano Bonaparte, -he aqui la gran novedad
que aporta para la interpretación histórica de su tiempo- de r esul-
tas de la calda del Excmo. Florida-Blanca" }1.
Necesita elevar a su héroe y como peana cita al Papa Clemente
Xlll y al rey Carlos m: aquél lE: honrará con el epíteto "el exemplar
de los políticos"; éste, designándole "Ministro de Estado y confidente
íntimo". Luego, escoge un contraste : el "Archicaco" -Godoy- en
su favoritismo; un claroscuro cabal para resaltar el desinterés del
Conde 33 y reemplazar la personalidad bíblica que veintidós meses
antes había creado el orador sagrado 3• para Godoy, la de José, mi-
nistro del Faraón -Génesis, 41, 40-44- 35; completa el pedestal
-plena:nente acorde con el apasionamiento dE:l tiempo- el triste-
mente célebre Manifieste del Príncipe de Asturias, "ahora nuestro
Rey y Señor". a su padre.
Tras la peana, examinemos la estatua. Sus labios promulgan un
singular santo y seña, en evidente antagonismo con el lábaro tri-
dente - Dios, Patria y Rey- dentro del rna:cu bélico de la Indepen-
dencia: "El modo de explicarse de la Nación es el del Srmo. Presi-
a) Etica de felicidad
b) Metodología
e) Revolución afrancesada
d) El dogma político
RELICIOSID.<O H ISPANA •. . - 16
C) SoSPECHAS DE COLABORACIONISMO
a) Segorbe
El Revdmo. Sr. D. Lorenzo Gómez de Haedo 60 ocupaba la igle-
sia segorbicense desde el 3 de marzo de 1784, y ante el famoso De-
creto de Urquijo de 5 de septiembre de 1799 supo dar una "res-
puesta corta pero llena de sabiduría", a juicio de su Canónigtl. pe-
nitenciario, D. Miguel Cortés y López 61. Sus exequias se demoraron
hasta el 7 de abril de 1814, debido a la ocupación francesa, que no
las permitió a s u muerte -1 de noviembre de 1809- por tratarse
de una víctima de la situación: "Qüando sucedió la tragedia de Ba-
yona, qüando se puso a meditar las desgracias que iban a agolparse
sobre la Iglesia y el Estado, qüando ya comenzó a experimentar los
horrores de la anarquía destructora del orden social .. ., su comple-
xión se fue debilitando" 62.
Fue un estilo. El más patriótico. El más limpio.
60. CORIES, Oración fúnebre del Ilmo. Sr. Ob.i spo de Segorbe. Valencia,
Monfort, 1815, p . 16. 3'1-38. 40: "Nació el 22 de octubre de 1738 en Biañes, en
el Valle de carranza. Señorlo de Vizcaya ... Doctoral de Burgos en el año 1760... ,
gobernó la Archidiócesis en la Sede Vacante -por fallecimiento de D. Onési-
mo de Salaman~ y en la Sede Plena del Sr. D. Francisco Diaz Santos Bu-
llón, y en la de su sucesor el Sr. D. Josef Xa.vier Rodriguez de Arellano, en los
qüatro afíos que este Prelado estuvo ocupado en la Corte en asuntos del Real
servicio".
61. CORTES, Oración, 79: "En el uso de mis facultades, dice (en la respuesta),
para las dispensas que Sé han considerado como propias de la Silla Apostólica,
procederé con aquellos miramientos y economía prudente que exijan las nece-
sidades y la conformidad con el espíritu de los Cánones antiguos, de suerte
que en esta delicada materia sea un dispensador que edifique y no destruya".
<Véase esta respuesta impresa en la Colección Diplomática publicada en Ma-
drid, año 1809).
62. CORTES, Oración fúnebre, 87.
236 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
b) Lugo
63. F'ERNÁNDEZ VARELA, Oración fúnebre por el Ilmo. Sr. Obispo de Lugo.
Coruña, A Rodríguez, 1811, p. 7-8. 14: " La diócesis de Lugo había logrado el con-
.suelo de gozar por un Prelado suyo a uno de aquellos hombres singulares
capaces de honrar un Siglo. Hablo del sefior Armañá, cuyas virtudes eminentes
igualaban a s u doctrina, y cuya amabilidad y talentos le harán memorable por
siempre. Pero el Sr. Armañá, lalborioso, infatigable, sabio y santo a un mismo
tiempo, aunque hizo mucho por su Iglesia, no había podido hacerlo todo. Tras-
ladóse a Tarragona de este país que no lo merecía; y con esto muchos pro-
yectos quedaron sin verificarse, y sin reformar muchos abusos; o por no haber
tenido tiempo. o por no haber tenido acaso el valor suficiente para extirparlos.
Sucedióle el señor Páramo en la elección del gobierno; pero el cielo quiso
arrebata:le antes de haberse consagrado. ¿Quién puede penetrar en sus jui-
cios? Era el tiempo precisamente en que las costumbres de Francia parecían
serlo igualmente de las demás naciones vecinas; sus errores y sus delirios se
propagaban con aceptación; una revolución sanguinaria amenazaba a toda la
Europa, y desenfrenados los vicios baxo la pr otección del libertinage, preten-
dían sublevarse hasta destruir con su fuerza el imperio de las virtudes. ¿Quién
sabe si en aquellos tiempos sería conveniente a la Iglesia la contemporizttción
y la dulzura que caracterizaban al señor Páramo? ¿Quién sabe si los males
públicos clamarían para su remedio por un carácter más fuerte y más deci-
dido? Lo cier t.o es que en una época en que las cfoligaciones principales dal
-cristianismo iban a ser abolidas, o por lo menos despreciadas ; en qut los d es-
órdenes de los legos se justificaban más cada día por los de los eclesiásticos;
en que la libertad y la osadía, la desatención y el desprecio de las fórmulas y
de las cosas santas, eran un motivo de jactr.ncia, no solamente a los necios,
.sino también a los ilustrados; se necesitaban Obispos dotados de un alma
fuerte, de un valor sacerdotal; igualmente indiferentes a los aplausos que a
las amenazas; al favor que a las desgracias del mundo; e incapaces de envi-
lecerse con aquella cobardía que sacrifica a los respetos las obligaciones y las
reglas; ni de prostituirse tampoco en aquella política infame que produce los
mismos efectos, aunque provenga de diversas causas. Tales eran las qüalida-
des del Ilmo. Sr. D. Felipe Peláez Caunedo ... Los dogmas del filosofismo no
sólo nos perjudicaban dando rienda suelta a los vicios; sino que poniendo en
ridiculo los cuidados de los Pastores, inutilizaban los r emedios ... ".
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 237
e) S egovia
Monseñor Sáenz de Santa Maria 69, caritativo prelado segoviano,
murió exilado -el 14 de enero de 1813- en Cádiz 10, cuyo Cabildo
catedralicio "después de haber el funeral más suntuoso" 71, "con
asistencia del Excmo. Sr. Obispo de Nicea, Nuncio de S. S. en
estos Reynos, y de los Timos. Srs. Obispos de Calahorra, Plasencia,
Sigtienza, San Marcos de León y Albarracin, el 16 de enero" 72, "co-·
locó en el mismo Panteón de sus propios Obispos el venerable ca-
dáver'' 71.
Sbrprende la atmósfera de excesiva normalidad en que se des-
envuelve la oración fúnebre gaditana: un elogio personal con acerba.
69. MOI'lGE DOKÍNCUEZ, 0TCU:ión fúnebre del Ilmo. Sr. Obispo de Seg{n,ia_
5egovia, Espinosa, 1813, p. 9. 11. 17. 23. 28-29. 36-37: ~ Nació en la Villa de
Muro de Cameros. Obis;>ado de Calahorra en 16 de enero de 1726. .. Estudió en.
Valladolid ... Canónigo Doctoral de Zamora... Canónigo de Toledo, y Vicario
Capitular, y General con el Cardenal Lorenzana.. . Obispo de Segovia: Santa
Iglesia de Segovia, hubieras quedado acaso privada para siempre de las be-
néficas in!luencias de su zelo, si una resistencia generosa a las pretensiones
de un Mlnlstro, que procuró inconsideradamente traspasar y atropellar los
sagrados derechos de la Iglesia y la disciplina, no hubiera conseguido lo que
pudieron lQ&rar las más enérgicas y vivas Instancias por el cuidado personal
de su grey. Si : un destierro disfrazado con el especioso pretexto de gracia
concedida a sus justos d eseos, descarga de sus hombros el peso del gobierno
de la Diócesis de Toledo, y restituye a tu seno el que va a hacer todo tu
esplendor, tu felicidad y tu gloria . .. Mil fanegas trigo entregadas de una vez
para alivio de las necesidades comunes; qüatro mi! ducados auualmente repar-
tidos en asignaciones a familias indigentes ; cinco mil pesos distribuidos cada
un año en aquellas secretas linlosnas... En el misero año de 804 distribuyó
diariamente a más de trescientos mendigos el pan de la palai>ra de Dios cou
el alimento corporal ... " ; PABLO DE U CONCEPCIÓN, Oración fúnebre por el Ilmo.
Sr. Obispo de SegOVia. Cádiz, Imp. Patriótica, 1813, p . 34. 50. 52-55: "El nuevo
Arzobispo, el Cardenal Lorenzana, le nombró su Provisor, Vicario General y
Arcediano de Madrid, gobernando en más de 18 años... " .
71.1. JosEF DEL SALVADOR, Oración 1J(ttriótica del Dos de Mayo en Cádiz, 1810.
Madrid, Viuda de B<>.rco López, ltll5, p. 13: •·si. poderoso y caritativo pueblo-
gaditano! Dentro de tus muros tienes mil testimonios que a creditan y te reco-
miendan esta apreciable verdad. Por tus calles y plazas andan en trage hu-
milde las primeras personas de la Nación, los m ás respetables prelados, los
ministros más zelosos, los sacerdct~ y religiosos m ás recomendables... ".
MANZANEDA, Oración del 30 de agosto de 1812 en la Catedral de Palma de
Mallen-ca. Palma, Brusi, 1812, p. 20: "Gloria y reconocimiento a los defensores
de la Patria, y a vosotros felices Mallorquines ... : Vosotros babeis sido obe-
dientes a las autoridades, babeis embiado vuestros hijos a derramar su sangre
en el campo de la justicia y los que permaneceis en vuestros hogares habe.is.
recibido y dado asilo a tantas familias fugitivas ... ".
71. MONGE, Oración fúnebre, p . 47.
72, PABLO DE LA CONCEPCIÓN, Or·ación fúnebre. Cá diz, 1813, p. l.
73. MONGE, Oración, p . 47.
442
la Regencia del Reyno, para que dé su áicto.men, copia del dictamen presen-
. tado por la Comisión de Hacienda con los expedientes del .M. R. Arzobispo de
Tarragona y R. Obispo de Guadix, que solicitan se les haga alguna asigna-
·ción, mediante a hallarse en suma necesidad, para proporcionar a los mencio-
nados prelados y demás eclesiásticos emigrados lo puramente preciso para su
subsistencia... Sesión del 7 de julio de 1812 : La Regencia del Reyno comunicó
por medio del Secretario de Gracia y Justicia. haber expedido circular a los
MM. RR. Arzobispo, RR. Obispos y prebendados de las diócesis de la pen-
insula que habian emigrado de ellas, exhortándolos a que se restituyan a los
puntos libres de las mismas, y en su defecto a los más inmediatos y seguros...
ll.SL!CIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD 80IUIONICA 243
d) Avila
77. DIEGO DE SAN JosÉ, Oración f únebr e en las honras del Ilmo. Sr. D. Ma-
nuel Gómez de Salazar, Obispo de la ciudad de Avila. Madrid. Imp. de la Com-
pañía, 1816, p. 4. 6. 10-13: "Supo mediar ente su amada grey y cator ce mil
hombres del exercito del Usurpador al mando d el mariscal Lefebre, que a
pretexto de vengar agravios, y en cumplimiento de los decretos tle un ho:nbre,
aún más soberbio que Antioco, tenían dispuesto el incendio, la desolación d e-
la ciudad y el exterminio de todos sus habitan~. Suponiase entre nosotros
ventajas conseguidas por n uestras tropas contra los enemigos sobre el puente
de Almaraz; transitaban por esta ciudad escuadrones de caballería francesa,.
<;ue creíatr.os dis¡:;erso:;; y en la tarde del cuaL-o de enero de mil ochocientos
nueve se dexa ver en esta misma ciudad dentro de su plaza una avanzada de
sesenta a ochenta caballos del exército del mariscal Lefebre. La ciudad nada
sabe de la marcha d e este exército; y atendido el corto número de enemigos,
se conmueve, manda tocar a rebato sus campanas, concurren sus habitantes.
en masa para impedirles el tránsito; se les a:-roja fuera de la ciudad; se les
persigue, y se les hace fuego desde algunas eminencias, cuando a pocas horas
después se recibe un parte en que se dice : Que catorce mil hoiif.lres enemigos se
hallan en estas inmeciiacionP.s. ¡Ay Señores ! ¡CUánto fue nuestro susto ..., cuando
en la ma'éana del dia siguiente, víspera de los Santos Reyes, vimos a nuestro·
frente catorce mil hombres, cercada la ciudad con su f()rmidable caballería y
su artillería en disposición de batirnos en venganza del agTavio de la tard e
antecedente y en cumplimiento de los decretos de su Emperacor... Ofreciéndose
gustoso a exponer su vida por la libertad del pueblo, salió nuestro Dustrisi-
mo, acompañado del Sr. Arcediano de esta S. Iglesia D. Antonio de la CUesta
Y Torre ...• para presentarse a un exército, aún más sanguinario que el de Ho-
lofernes... No se pudi eron evitar una infinidad de desórdenes de una tropa
incircuncisa; pero se consiguió por entonces la suspensión de los sanguinarios
decretos, y pocos dias después el perdón general de la ciudad (del Usurpador
desde Valladolid, y de su hermano desde Madrid) ".
R.ELICIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 245
LIB ERALES
b) Elogio a la Constitución
86. XIMtm:z, Panegírico, 18. 20-21. 23. 25. 30. 33. 41. 57. 6'7~.
f
252 ALFREDO MAR'l'INBZ ALBIACH
e) Superación de un complejo
en la divina religión: "Sois libres, pero con una libertad digna del
ciudadano español, sancionada por el augusto congreso nacional,
y asegurada para siempre en las caracteres indelebles de la sabia
CONSTITUCIÓN de la monarquía. Tenéis en vuestras manos la llave
del Estado salvado por vosotros a costa de lágrimas y sangre, y
esta augusta prerrogativa os hace SUPERIORES A LOS REYES. La divi-
na. religión de vuestros padres sirve de fundamento y apoyo al
nuevo orden social, y en sus leyes y preceptos hallais el gran secre-
to de una vida venturosa y feliz" <n.
Sin embargo, no media el alcance de sus elogios, pues todavía
conservaba su añeja mentalidad. Demasiado viejo para despojarse
de ella, pese a su buena voluntad. Intenta una renovación material
con diagnóstico equivocado; demasiado crédulo en milagros, sólo
confía en el antropoformismo divino, desestimando medios materia-
les: "Qüando vean nuestro comercio restablecido y floreciente, nues-
tro exército subordinado y aguerrido, desterrado para siempre de
nuestros oidos el grito estudiado de la ociosa mendicidad, y reinan-
do en todas partes la abundancia y la alegria, frutos preciosos de la
paz, nos tendrán por felices. Pero se engañarán : porque no hay
pueblo verdaderamente dichOso sino el que teme a Dios, obedece a
sus superiores, evita las divisiones siempre ruinosas para el estado,
y tiene por bases de su dicha, la rectitud y la justicia: Beatus popu-
lus cuius est D ominus Deus eius". Ciertamente, el progreso material
no basta: no de sólo pan vive el hombre; pero el clérigo de princi-
pios del siglo XlX minusvaloraba la in.f raestructura económica de la
regeneración española. Ahí estuvo su fracaso, y su desencanto con
los liberales que no reconocían que todo se babia recibido del cielo;
tal vez exageraban éstos la estimación del esfuerzo humano y, por·
ello, no entendían las palabras del orador sa.,arado: "Ved aqui los
grandes motivos que tenemos para rendirle a Dios el tributo de
nuestra gratitud; ningunos más urgentes para un cristiano, y un
español. Tenemos la dicha de haber conservado nuestra adorable
religión, hemos adquirido un sistema de legislación el más sabio y
acomodado a las circunstancias, y siendo estos beneficios los más
apreciables en toda linea, resulta sP-r un deber de todo hombre sen-
sato, que conoce que todo lo ha recibido del cielo, manifestar su
gratitud por el canal de la religión, al Ser Supremo, que se ha digna-
do bendecin1os" 9s.
Carencia de realismo por parte del clérigo, que no -quiso- pudo
vislumbrar que se babia desvanecido la edad teológica, y que su
lenguaje no era captsdo por la parte más ilustrada de su auditorio.
97. HERNÁNDEZ MO!u:.róN. Oración. Zaragoza, Imp. Junta S . de Aragón,.
1813, p. ll.
98. MUÑOZ, Sermón, 13. 15.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 257
l
11
d) Teología. mariana
1 Corren todavía aires de exaltación irreflexiva, y todo se traduce
i
'
en alabanzas al símbolo de Cádiz -"Sólo resta a España un puña-
do de hombres exánimes, inermes, desnudos, que a duras penas en-
cuentra suficiente terreno donde detenerse y reponerse. Cádiz sola
guerrea, y Cádiz está asediada, bombardeada y sin comunicación
con las provincias" 99- , y a sus legisladores congregados por María
Santísima, si es capaz de mirar más alto, de tener visión sobrena-
tural: "Mirad más alto, y ved a Maria congregando nuestros legis-
ladores, inspirando leyes a los padres de la Patria, ilustrando a
nuestros generales, inflamando a nuestros soldados, conmoviendo al
universo contra el tirano multiplicando los héroes, aterrando a los
enemigos y llevando a su campo el disgusto, el temor y la muerte".
Idéntica visión para comprender los triunfos de Wellington y
la tradición afrancesada: "Mirad más alto, y ved cómo conduce a
los valerosos hijos de Albión en nuestro socorro, comandados por
el genio tutelar de la guerra, por el héroe britano, por el inmortal
y glorioso Wellington. No estará fuera del orden natural que nues-
tros enemigos hayan caído en tantos errores pollticos y militares,
ya descubriendo sus ideas ambiciosas antes de tiempo, ya exaspe-
rando los ánimos con su petulancia, ya debilitando los exércitos
con su división, ya dando h1gar a las provincias para reunirse con
su lentitud, ya despertando el patriotismo con sus robos, y ya final-
mente provocando nuestro zelo con su brutal lascivia y sus inaudi
tos sacrilegios. No estará fuera del orden el útil y oportuno descu-
brimiento de tantos malvados, traidores a su RELIGIÓN, a su REY y
a su PATRIA," ni la muerte o la infamia eterna a que han sido conde-
nados por una nación incorruptible". Queriendo dársela de ilustrado,
concluye: Nada de esto será tal vez :>obrenatural ni prodigioso. Pero
él lo cree firmemente, y el auditorio lo ·sabe. Fácilmente se trasluce
en su ~cmentario a las Cortes y Sll Constitución -entra pasiones
encontradas e intereses personales-, a la generosidad inglesa y al
patriotismo americano: "No lo será tampoco el voto universal de
la nación toda por la reunión de unas Cortes, y que éstas se celebran
felizmente a pesar de las pasiones encontradas, de los intereses per-
sonales y de las dificultades que presenta la tiranía, la esclavitud, la.
rivalidad, la discordia, el egoísmo y la ignorancia. No lo será que,
e) Sentimiento de gratitud
f) Un diputado modelo.
a) Libertad
a)) Libertad de impren.t a
enhorabuena. La materia es árdua y grave... Los grandes puntos que hay que
examinar son la autoridad y la jurisdicción que en el dia no existen en mi
entender, como lo demostraré. Ventilados éstos, es preciso ver si las circuns-
tancias en que ya se halla la nación son las mismas que al tiempo de su erec-
ción; y si es compatible con las declaraciones y decretos de las Cortes su r es-
tablecimiento en el modo y forma que hasta aquí...".
159. DIARIO, VI, 7-9.
160. DIARIO, VI, 17-18.
161. M. PELAYO, H eterodoxos, III, 446.
RELIGIOSIDAD HISPANA 7 SOCIEDAD BORBON1CA 279
que todas las leyes que hablan de esta manera de prueba tan bár-
bara y cruel como falible y contraria al objeto de su promulgación,
queden derogadas por decreto que al efecto expida V. M ... Segunda
proposición: Que sin detenerse V. M . en las reclamaciones de los
que puedan estar interesados en que se continúe en América la in-
troducción de esclavos de Africa, decrete el Congreso abolido para
siempre tan infame tráfico; y que desde el ella en que se publique
el decreto no puedan comprarse ni introducirse en ninguna de las
posesiones que componen la monarquía en ambos hemisferios baxo
~ ningún pretexto esclavos de Africa, aun qüando le adquieran di-
1 rectamente de alguna potencia de Europa o América. Que el Consejo
de Regencia comunique sin pérdida de momento al Gobierno de
S. M . B. el decreto, a fin de que procediendo de acuerdo en medida
tan filantrópica, pueda conseguirse en toda la extensión el grande
objeto que se ba propuesto la nación inglesa en el célebre "bill (de
Wilberforce") de la abolición del comercio de esclavos" -5 febre-
ro de 1807-.
La primera propuesta fue unánimemente aprobada, previo deba-
te a cargo de los Srs. Golfin, Villanueva, Terrero, Martinez, Gallego,
Giraldo, Villafañe, Pelegrin, Arnáez y Argüelles; se encomendó a la.
Comisión de Justicia el proyecto de ley 161, presentado diecinueve
días más tarde entre animadísima discusión -intervinieron los
S:t:S..-Luján (dos veces), Pelegrin, Argüelles (tres veces}, Garcia
Herreros, Aner, Mejia, Creus, Dou, Borrull, Hermida, Mendiola, Ga-
llego, Morales Gallego, Presidente M. Torrero, Villagómez y Barón.
de Antella- , aconsejando el Sr. Presidente fuese devuelto a la Co-
misión 163; la cual, en la siguiente sesión, ofreció nueva formulación
de la ley "relativa a la abolición del tormento, y apremios con que
se aftig1a a los reos en los juicios, y después de una viva contesta-
ción sobre los términos en que se estaba expresada, se acordó expe-
dir. el decreto siguiente: Las Cortes generales y extraordinarias con.
absoluta unanimidad y conformidad de todos los votos, declaran
por abolido para siempre el tormento en todos los dominios de la
monarquía española; y la práctica introducida de aftigir y molestar
a los reos, por los que ilegal y abusivamente llamaban apremios,
prohiben los que se conocían con el nombre de esposas, perrillos,
calabozos extraordi.n.a_rios y otros, qüalquiera que fuese su denomi-
nación y uso, sin que ningún juez, tribunal ni juzgado, por privile-
gi2.do que sea, pueda mandar ni imponer la tortura, ni usar de los
insinuados apremios, baxo responsabilidad y la pena por el mismo
hecho de mandarlo, de ser destituidos los jueces de su empleo y dig-·
marit, Papiol, Aparicio Santiz, Alcayna, Lera, López del Pan, SOm-
biela, de la T orre, Obispo Prior de León, Serres, Bárcena, Nieto,
Vera, Garcés, Riesco (D. Francisco), Ostolaza, Dou, Salas (D. José).
Caballero, Key, Andrés, Ruiz, Borrull, Ramirez, Garcia Coronel,
Ric, Valcárcel Dato, Llamas, Ocaña, Larrazábal, y Gordoa. Se mandó
agregar a las actas", iniciándose la controversia en torno al articu-
lo 1.0 del proyecto que fue adoptado cuatro días después como 3.0
del decreto: "Se restablece en su primitivo vigor la ley II, título
XXVI, Partida VII, en qüanto dexa expeditas las facultades de los
Obispos y sus Vicarios para conocer en las causas de Fe, con arre-
glo a los sa,arados Cánones y Derecho común, y las de los jueces
seculares para declarar e imponer a los hereges las penas que se-
ñalan las leyes, o que en adelante señalaren. Los jueces eclesiásti-
cos y seculares procederán en s us respectivos casos conforme a la
Constitución y a las leyes" 190.
El 27 de enero del mismo 1813, "leyóse, a propuesta del Sr. Con-
de de Toreno, la exposición de los Oficiales del Estado Mayor gene-
ral de los exércitos nacionales, tributando las más reverentes gra-
cias por haber abolido el tribunal de la Inquisición, y con "prolixa
discusión" fue aceptado el artículo 2.0 como 4.0 del decreto: "Todo
español tiene acción para acusar del delito de heregía ante el tribu-
nal eclesiástico; en defecto de acusador, y aun qüando lo haya, el
fiscal eclesiástico hará de acusador" 191•
Las Cortes, dos dias más tarde, "oyer on con particular agrado,
y mandaron insertar en este diario dos representaciones del Regi-
miento de Voluntarios distinguidos de linea de Cádiz, y de los pro-
fesores de nobles artes de Cádiz, que agradecen la abolición del tri-
bunal de la Inquisición" 192 • Luego, reprobaron por unanimidad los
e )) Triunfalismo liberal
trámites que las de los demás ciudadanos. 2. • Si alguna vez ocurriere que las.
pastorales, instrucciones o edictos que los MM. RR. Arzobispos, .RR. Obispos y
demás Prelados y Juece:: eclesiásticos impriman y dirijan a sus ciudadanos
en el e.xercicio de su sagrado ministerio, contengan cosas contrarias a la
Constitución o a las leyes, el Rey, y en su caso la Regencia, oyendo al Con-
sejo de Estado en el modo y forma que previene la Constitución, respecto de
los decretos conciliares y Bulas pontificias, suspenderá su curso, y mandará
recoger los impresos. Si además hallare méritos para formación de causa con-
tra el autor o autores, pasará a este fin el impreso al Tribunal Supremo de-
Justicia siempre que éste sea de Arzobispo u Obispo; y a la Audiencia terri-
torial, si fuere de alguno de los demás Prelados y Jueces eclesiásticos. 3. En
0
b) Secularización
El proceso de secularización se había puesto en marcha, estre-
nándose con los religiosos -privándoles de voz activa y pasiva en
el Congreso 219_. Era otro signo de aquella época.
El 27 de octubre de 1810 fueron admitidas por las Cortes las
r eiteradas renuncias del Consejo de Regencia, y al dia siguiente son
nombrados el General D. Joaquín Blake, el Jefe de la Escuadra don
Gabriel Ciscar y el Capitán de fragata, D. Pedro Agar, Director de la
Academia de Guardias marinas. Ausentes los dos primeros, se acordó
sustituirlos por interinos, y se designó al Marqués del Palacio y_ a
D. José M.a Puig del Consejo Real. Habiendo "perdido el Marqués
del Palacio la confianza de la nación" por sus escrúpulos en el jura-
mento, fue reemplazado por el Marqués de Castelar, por más que
el 19 de marzo de 1811 prestaba el Marqués del Palacio "el jura-
mento en la forma que se le exigía" 220• Tal vez el problema de la
libertad precipitó la renovación de la Regencia.
Ahora bien, disipada la tensión entre los poderes ejecutivo y
legislativo, éste arrostró otro problema de tanta gravedad con aquél,
el de las prebendas eclesiásticas.
sia o del Pontífice"- de esta forma: "es una medida que pertenece
al Estado".
Terció el Sr. Garcia Herreros : •·para quitar toda duda o escrú-
pulo, traer las bulas que se habían impetrado para suspender en.
España la colación de prebendas para la consolidación y otros ob-
jetos". Se conformaron los Srs. Creus y Dou. Entonces D. Antonio
Oliveros, con un desinterés y euforia sin precedentes, ~ó: " los.
clérigos no debían disputar sino decir: aqui está cuanto tenemos;
no tratar qüestiones de derecho sino de hecho; San Agustín vendió
hasta los vasos sagrados, aunque entonces no había una urgencia
tan terrible como la del día". Luego, el Sr. Freire leyó una memo-
ria, en que después de establecer claramente que las Cortes represen-
taban al rey, quiso probar que no era conveniente echar mano de
las rentas de la Iglesia para socorrer las urgencias del día. Tras el
apoyo prestado por muchos diputados al Sr. Oliveros, D. Diego Mu-
ñoz Torrero rectificó al Sr. Freíre con respecto a la representación
regia por parte de las Cortes: era un error. . 1
Atajó al Sr. Presidente, proponiendo se nombrase "una comí-·
sión para examinar este negocio y los papeles que ha citado el.
Sr. García Herreros, y proponer a las Cortes la regla que deba se-
guirse; pasándose hoy mismo orden a la Regencia para que sus-
penda la provisión de prebendas y beneficios, de qüalquiera clase
que sea, a excepción de las prebendas de oficio y de cura de alma$,
poniéndose en tesorería las rentas que produzcan, y entendiéndose
que la suspensión debe ser con r esponsabilidad y nulidad de los
nombramientos que se bagan, de qüalquiera clase que sean los be-
neficios o prebendas que se provean; comunicándose para ello la
orden correspondiente a los M. RR. Arzobispos, RR. Obispos, Ca-
bildos, Comunidades particulares, de patronato laycal, y de qüal-
quiera condición y clase que sean; previniéndose que los RR. Obis- ·
pos suspendan igualmente las provisiones en los meses ordinarios,
y que todo esto se entienda por ahora, y con extensión a España e
Indias". Quedó aprobada en todas sus partes tal proposición 124, sos-
tenida también por los clérigos Muñoz Torrero y Villanueva, hacien-
do val~r las bulas concedidas por Su Santidad en el anterior reina-
do para objeto y atenciones similares m_ Se convirtió en al decreto
XVI 226.
Pero la cosa no debió resultar muy clara: el 15 de diciembre, "se
suscitó alguna discusión sobre la duda que proponía el Consejo de
Regencia acerca de s i el deanato de Teruel, vacante, se hallaba
224. DIARIO, I, 115- 116.
225. LAFul:NTE, H istoria, XXIV, 457 ; VILLANUEVA, Mi viaje a las Cortes, II~
72-73.
226. DECRETOS de las Cortes, I , 32-33.
R.EL1Gl0SIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 299
francesa ... ; el Obispado de Almeria. 5.000 ducados; el de Tuy, 4.000 ... ". Com-
pletaremos esta referencia en la nota 16 del capítulo segundo. de la parte se-
gunda.
238. DIARlO, IV, 325-327.
239. DECRETOS de las Cortes, l. 110- 111.
RELJCIOSIDA.D HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 303
largos y custosos litigios que deben sostener los curas para conse-
guir la asignación competente con los diversos partícipes de los
diezmos".
Frente a tales dificultades, el canónigo Oliveros recomendaba:
4
'La cantidad necesaria para la conveniente dotación y la convenien-
te para el culto divino deben ser las primeras porciones que se de-
duzcan de la masa decimal de la parroquia, y después entren en-
horabuena a participar de ella la casa escusada, el noveno real, el
cabildo y demás personas que tengan y aleguen títulos justos". Y
solventa las dificultades: "En las numerosas poblaciones que no
viven de la industria agrícola no hay, es verdad, esta masa decimal
de la que puedan ser dotados sus curas; pero también es cierto que
en todas existe gran número de propietarios que contribuyen en
-otra parte con los diezmos, y será muy rara la ciudad o villa que
no cuente entre sus vecinos el suficiente de hacendados que con
los productos del diezmo de sus fincas no forme la suma bastante
para la dotación de los curas del lugar de su residencia".
Propuestas concretas: ante todo, reglamentación de la cóngrua
suficiente para mantener al clero y al culto. El trámite, el siguiente:
<>bispos y demás Prelados eclesiásticos, dictamen del Consejo de
Estado y Regencia por medio de la Secretaria de Gracia y Justi-
cia para su aprobación; sin excluir las jurisdicciones exentas, pasan-
do después "los expedientes respectivos al territorio de su jurisdic-
ción y remitirlos a la Regencia para que igualmente los resuelva,
oyendo antes al Consejo de Estado, y pasando después los avisos
correspondientes al tribunal especial de las Ordenes y a la asam-
blea de San Juan en su caso para que lo tengan entendido".
Las asignaciones se deducirán "de la masa total de los diezmos
de la respectiva parroquia, ya erigida o que de nuevo se erija, com-
_prehendiéndose en ella el noveno real y la casa escusada, siempre
que no sea suficiente el resto de los diezmos para llenar las asigna-
ciones expresadas"; y r.uando no exist3 "el cúmulo de diezmos ne-
-cesario", se sufragará de "!a tercera parte de las rentas de la respec-
tiva mitra en que el Rey, autorizado por la Silla Apostólic::t, pueda
pensionarla o de la supresión de alguna de las dignidades o bene-
ficios ecclesiásticos que no juzgen necesarios los Obispos u demás
_prelados ordinarios"; del mismo fondo se cubrirá la dotación de
los Seminarios conciliares. También proponía el Sr. Oliveros que
los Prelados expusiesen a la Regencia "si convendrá suprimir en
un todo los derechos de estola, o arreglar los aranceles con tal uni-
iormidad y equidad que no den lugar a los inconvenientes que se
308 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
la juerUL moral de este cuerpo respetable no esté en manos del Gobierno, por-
que de lo contrario en vano trataríamos por medio de la Constitución de po-
ner trabas al mismo Gobierno, si tiene a su disposición todo el poder moral
del clero, como sucede ahora en Francia., en donde por estar asalariado por
aquel Gobierno, y depender enteramente de él, dispone Napoleón del clero
a su arbitrio".
253. DECRETOS d e las Cortes, I, 50. _
-.... ::·_,...~
·3 10 ALFREDO MARTfNEZ ALBIACH
a) Constitución de 1812
que a esto dio ocasión la peste del arrianismo, que había cundido
por nuestras provincias; y de ningún modo prueba que no fuese
antes general en ellas la religión católica. De esto dan testimonio
clarísimo los Concilios de Braga, de Lugo, el I y II de Toledo, y
otros celebrados desde el Iliberitano; y aun antes de éste los in-
numerables mártires que consagran nuestro suelo con su sangre
desde los tiempos apostólicos".
"Se resolvió que pasasen a la Comisión de Constitución estas
observaciones de los Srs. Muñoz Torrero y Villanueva, para que
conforme a ellas traxese mañana arreglado y perfeccionado este ar-
tículo; y se levantó la sesión" 317•
El 3 de septiembre, "la Comisión persentó el artículo 13.0 exten-
dido en estos términos: La religión de la nación española es y será
perpetuamente la católica, apostólica, romana, única verdadera. La
nación la protege por ·leyes sabias y justas, y prohibe el exercicio de
qüalquier otra. Quedó aprobado" 318•
La sencilla transcripción del Diario de Sesiones nos ofrece el
cálido realismo de la religiosidad de un Congreso como aquél. So-
bran las malas interpretaciones de historiadores de uno u otro par-
tido. Luego, volveremos sobre la adición de D. Diego Muñoz Torre-
ro, afrontando el problema de la intolerancia religiosa como se plan-
teó dos años más tarde, en 1813, ya sin preocupaciones de crear le-
yes fundamentales.
del 46.0 al 77.0 ; el 26, del 78.0 al 91.0 ; el 27, otra vez el 91.0 ; el 28, del
92.0 al100.0 ; el29, del101.0 al109.0 ; y el 30, dell10.0 a1117.0 • El prime-
ro de octubre, del 118.0 al 128.0 , y el 2 retorna al 128.0 pero se pro-
gresa hasta el 130.0 . El día 3, los artículos 104.0 , 110.0 , 125.0 , 130.0 ,
y 131.0 ; el 4, del 131.0 al 147.0 ; el 6, el 148.0 y el 149.0 ; el 7, del 150.0
al 157.0 ; y el 8, del 158.0 al 167.0 321•
2, 2. -Así, pues, del 12 de septiembre al 8 de octubre de 1811 se ha
desarrollado el tema de las Cortes. Vamos a profundizar en él para
alcanzar una visión sobre la realidad vital del clérigo. El 23 de sep-
tiembre aprueba el Congreso el articulo 35.0 de la Constitución:
"Las Juntas electorales se compondrán de todos los ciudadanos ave-
cindados y residentes en el territorio de la parroquia respectiva,
entre los que se comprehenden los eclesiásticos seculares". Sin em-
bargo, son rechazadas sistemáticamente las adiciones propuestas
por los Srs. Creus -"los prelados regulares y todos los que esta-
ban en posesión de asistir a las Cortes"-, Güereña -"los regula-
res sean admitidos a la voz activa"-, Uría -"supuesto que el no
haber sido admitida la adición de los regulares era por no haber
distinción de voz activa y pasiva, que se les diese una y otra"-
Y Larrazábal -"habiendo en América muchos regulares que exer-
cen la cura de almas y por dispensa del Sumo Pontífice viven se-
parados del claustro, podían tal vez disfrutar en esta parte de las
atribuciones de los eclesiásticos seculares" m_, Tres días después,
con respecto al artículo 91.0 -"Para ser diputado a Cortes se re-
quiere ser ciudadano ... bien sea del estado seglar o del eclesiástico
secular"-, pretende D. Joaquín Lorenzo Villanueva añadir "o pre-
lado eclesiástico regular". A ello se oponen resueltamente tanto
D. Diego M~;ñoz Torrero como el Sr. Obispo de :Mallorca, Presiden-
te a la sazón. Se empecina el Sr. Creus, y le contrarresta el Conde
de Toreno 323; perc tras la respuesta d~l Sr. Capmany al Sr. Villa-
nueva, el Sr. Moragues lanza un ataque despiadado contra el clero:
"Los eclesiásticos son individuos de una corporación que se pre-
tende independiente y separada, de cuyo espíritu no es posible se
desentiendan absolutamente, y pudiera esto dar lugar a pretensio-
nes y acuerdos que no fuesen los más convenientes al bien ele la na-
ción y del estado". Es interrumpido por "varios" diputados, y pro-
sigue: "Aparece la inmensidad de pretensiones que hay opuestas
entre la potestad eclesiástica y la se':ular en perjuicio de ésta y con
grave daño del bien y tranquilidad de la nación. Así resulta en los
321. I>I~IO, \fiii, 255-280. 282-299. 300-315. 328-337. 382-397. 407-419. 425-
439. 442-460; ]J{, 7- 18. 21- 37. 39-52. 54-60. 61-67. 76-92. 94-99. 101-113. 118-132.
133-151. 153- 165.
322. I>IARIO, VIII, 410. 414.
323. M. PELAYO, Heterodoxos, III, 454-455.
R&~!C!OSIO.\D IIISPA:'(A ..• - 22
330 ALFREDO MARTINEZ ALBiACH
324. DIARIO, Vill, 419: "El Sr. Jáuregui está célibe, y yo también para siem.-
fJTe, porque aunque no tengo impotencia física, la tengo moral por escasez de
facultades. Hemos hecho con gusto esta renuncia en obsequio de lo que ha.
creido justo la. Comisión: promover los matrimonios que aumenten la poble-
ción, la qüal por todos los medios directos y justos deberlan fomentarse".
325. DIARio, vnr, 419: "Los casados y viudos están más apegados al país
que los célzoes".
326. DIARIO, vm, 419 : "Es grande el número de ce1i1>es que viven en este
estado por su comodidad e intereses particuia.res, y la nación debe declararse
contra éstos, que son los zánganos de la república. No se les priva de ser dipu-
tado, ni elector del partido, sino de parroquia; en lo qüa1 cree la Comisión que:
se logrará aumentar la población, que es el fin polltico que se propuso".
327. DIARio, vm, 425-432. 453 : Sesión del 25 de septiembre de 1811 : "'Ar-
ticulo 46.0 : La Juntas de parroquia serán presididas por el corregidor, alcalde
o juez de la ciudad... El Sr. Terrero: Aqui falta y debe ponerse: será presi-
dida por el cura párroco, corregidor, etc. La Junta Central ordenó que presi-
diese juntamente con el juez. Los reglamentos para las reuniones de vecinos.
con el objeto de verificar los sorteos de quintas, formados y mandados cum-
plir por Jos Reyes Católicos y piisimos, as1 lo prescriben: de manera que el
párroco concurre por ley u obligación... , y con cuya asistencia entienden los.
populares haberse practicado aquellos actos justa y legalmente. Yo me ade-
lantarla a. decir que no solamente en el predicho acto, sino en todas las con-
vocaciones del pueblo para las subastas de arbitrios, de propios, de pósitos, y
qüa.ntos de algún interés ocurran, deberla. asistir: de este modo se evitarian.
horrores escandalosos, extraord.inaris!.mas dilapidaciones y robos, que produ-
cen sinsabores, quejas y lamentos.
"'Sr. Villanu.eva: Yo no soy del dictamen de que presida el cura párroco es-
tas juntas, porque entiendo que las juntas civiles deben ser presididas por los
jueces civiles de los pueblos. Esto lo pide el orden público y la diferencia de
Jos derechos. Jamás la Ig;esia h&. pretendido tener autoridad en la.<; asambleru.
civiles. Por tanto, no m~ ccnformo con la &.dicién que propone el Sr. Terrero;
pero estoy muy de acuerdo con la substancia y espíritu de ella.; a saber: que
no se celebren estas juntas sin la asistencia del cura párroco. Esto puede aca-
rrear muchos bienes, y evitar mu.:hos ~les.
"Sr. Argüelles: Precisamente en los tiempos en que en España ha. brillado
más la religión, y en que los ciudadanos no se veían atacados por la nota de
irreügiosos, hereges, y ateístas, con la que se ven insultados freqüentemente y
con el mayor descaro los de nuestros dias por personas que llevando siempre
en la boca la religión, acaso acaso están muy agenas de su espíritu; en aque-
llos tiempos, digo, vemos que nuestros reyes, que ya. tuvieron el renombre de ca-
tólicos, separaron a los eclesiásticos de los actos civiles, siempre que no consi-
deraron necesaria su asistencia. Se trata aqui de unas asambleas puramente.
RELIGfOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 331
civiles, a las qüales son admitidos también los eclesiásticos como ciudadanos.
La mayor piedad y devoción que puedan tener los curas párrocos, ¿será razón
para que se les dé esta presidencia, privando de este derecho, que justamente les
compete, a los jueces, alcaldes y demás autoridades civiles? Si nos dexamos
a:rrebatar de estos principios, será preciso que la presidencia que se dé a los
curas párrocos en estas asambleas, se baga extensiva a todos los demás actos
civíles; y entonces, ¿qilal será el resultado? Excuso el decirlo. Asi que, no vale
sentar una proposición con la esperanza de que siendo piadosa se aprobará
sin examen. Yo scry püldoso, y por tal me tengo; pero no puedo admitir que
un articulo que está conforme a los principios de la sana razón y política que
han dirigido a la Comisión, se quiera trastornar de este modo, porque nada
tiene que ver lo uno con lo otro. ¿Qué necesidad, pues, hay de que intervenga
en él la persona eclesiástica, qüando acaso en aquella hora tendrá precisión
de cumplir con las obllgaciones de su cargo? Esto indirectamente es decir que
sólo los actos en que intervengan los eclesiásticos pueden ser justos, gratos a
Dios y convenientes al bien de la patria. El que así piense, ¿no hace una inju-
ria manifiesta a todas las demás clases del estado? A más de que ¿quién priva
al cura párroco de asistir a estas asambleas? ¿No es ciudadano? Y como tal
¿no tiene derecho a asistir? ¿No puede hacer presente a la junta lo que le
parezca oportuno, y le dicten su zelo e ilustración, a fin de que no se cometa
fraude alguno, y no se introduzca el desorden? ¿A qué más? ¿Se pretende
acaso que la asistencia del párroco sea una condición "sine qua non"? Esto
es ur:. absurdo, y pcdr1R. acarrear los más funestos resultados... Es menester
también qu e no nos desentendamos d el poderoso extraordinario influ:ro que
tienen los eclesitúticos con los pueblos; prueba de ello este mis-ntO Congreso.
"Sr. Obispo de Calahorra: En los pueblos pequeños donde no hay otra per-
sona que tenga 1n.fl.uencia más que el escribano, por ser él solo quien sabe leer
y escribir, él es quier. hace toCo el negocio, y por esta razón se habla mandado
que asistiesen los curas párrocos como testigos de autoridad a los sorteos para
quintos y contribuciones. encargándoles que estuviesen siempre a la mira con
el fin de evitar los fraudes que sollan intervenir'". (Los Srs. Larra.zábal y Urla
hablaron en favor de la propuesta del Sr. Villanueva; el Sr. Dueña por la del
Sr. Argüelles. Qued5 aprobado el articulo).
" Sr. Muñoz Torrero (acerca df> la adición propuesta por el Sr. Terrero) : ¿Baxo
qué concepto ha <!e &.sistlr el cura párrooo? Asi confundimos las materias
civiles con las eclesiásticas.
"Sr. Gallego: Los párrocos, como ciudadanos, tienen obligación de asistir a
estas juntas; y aun qiiando no la tuviesen, es de creer que e! zelo por promo-
ver el bien de su pueblo les moverla a asistir. Pero si se pone como una condi-
ción precisa la asistencia del cura párroco, resulta una cosa. y es. que no
queriendo él asistir, no habrá elección".
(Arriba en el texto, veremos el duelo dialéctico entre los Srs. Terrero y
Argtlelles. y otros en tomo a ell.o s. Se aprobó la adición: "con asistencia del
cura párroco para mayor solemnidad del acto").
328. DLUUO, Vlll, 452-453.
329. DIAR.Io, l , 39. 58. 85.
"332 ALFREDO MARTINEZ ALBlACH
367. DIARIO, XXII, 115: "Concluyo, pues, pidiendo que se añadan tres
solas palabras, colocadas de modo que diga el artículo -2.0 - así: El que cons-
pirare directa o indirectamente, de hecho, por palal:lra o por escrito a estable-
cer otra religión en las Españas, o a que Ja nación española dexe de profesar
la religión católica apostólica romana, será perseguido como traydor. Y me
opongo a que la primera línea del articulo se apruebe como se halla estam-
pada en el proyecto, porque resultaría ilusoria esta ley, y de poder sólo servir
de un salvoconducto a los enemigos de nuestra santa religión".
368. DIARIO, x:xn, 328-331: "La Comisión seguramente no esperaba que
después de hacérsele la justicia de conocer su religiosidad y buena fe, se le
hiciese por el señor preopinante unos cargos tan terribles como el de suponer
que por este medio intenta dexar impunes todos aquellos delitos contra la
religión que no sean una conspiración directa y de hecho para que no se pro-
fese en la monarquía o para que se profese otra. SObre esta equivocación, o
más bien sobre un verdadero sofisma ha versado todo el discurso d el señor
preopinante. Infringe este articulo -12.0 de la Constitución: 13.• en el pro-
yecto, pues el articulo 4.• pasó a ocupar este Jugar-, no el de qüalquiera modo
delinca contra la religión, sino únicamente aquel que conspire a que la reli-
gión católica no sea la religión de los españoles, o a que se introduzca otra
en el reyno. Le impone una pena más grave que la de los hereges, porque por
más que diga el señor preopinante, bien sabido es que éstos no son declarados
traydores por la ley de Partida, aunque sí se les imponga la pena de muerte.
¿Qué más se quiere pues? ¿O se trata por ventura que todos los delitos contra
la religión, grandes o chicos, de esta u de la otra clase se castiguen como
infracciones del articulo 12 de la Constitución? La Comisión dexa intactas to-
das las leyes buenas o malas que hoy rigen, respecto de los delitos contra la
religión: el herege y los demás serán castigados con arreglo a las leyes según
el grado de su crimen... No confundamos unas cosas con otras, ni lo que es
heregia con lo que es infracción del articulo 12 de la Constitución. Uno, por
exemplo, escribe una obra sembrada toda de proposiciones heréticas, el Ordi-
nario las declara tales y contumaz al reo si no reconoce su error: el reo será
castigado como herege, pero no como infractor de la Constitución, mientras
que limitándose a negar algún dogma o a proferir otro error contra la fe, no
diga que la religión católica no debe ser la que se profese en Esp~.ña o que
ademá.> debe profesarse el luteranismo, el mahometismo, etc.; al coatrario, si
uno trata de introducir qüalquiera de estas sectas o de desterrar del reyno la
religión católica, la autoridad citñl por sí sola sin necesidad de declaración
alguna del Ordinario, procederl. desde Juego contra el reo como un perturba-
dor del orden público, como un infractor de las leyes fundamentales, y le
castigará aunque no sea herege, porque podrá no serlo y tratar de que se in-
troduzca otra religión en Espafu.... La Oomisión no propone pena sino contra
los que conspiren directamente y de hecho.... porque ios i11directos no hay
naojje en est.e mundo que pueda de~rminarlos. ¿Y qué reglas ~e han de dar
para que l3 arbitrariedad o la ignorancia no graduen de atentados indirectos ffi.s
acciones más indiferentes? ¿Dónde vamos a parar? .. . Tampoco debe añadirse
" o de palabra", porque si uno conspira directamente procurando persuadir a
otros t!n :;us conversaciones o ccn sus discursos o a.¡:engas que dd".oe c¡esterrar-
se de España la religión católica o admitirse otra, éste es un hecho, y " de
hecho" es la conspiración aunque el conspirador no haya llegado todavía a
emplear más que la palal:lra. Si hace lo mismo por escrito, también es un
hecho ; y de uno o de otro modo "de hecho" anuncia y pone por obra sus
malas intenciones; y " de hecho" procura suscitar un partido para conseguir-
las. Se dice conspirar "de hecho" para que se sepa que no queremos castigar
lo que uo pase de intención. Concluyo, por último, recordando a V. M. qne el
.demasiado zelo puede extraviamos en la presente qüestión•·.
RELIGIOSIDAD HlSPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 345
369. DIARIO, XXII, 116 : " Como de la Comisión digo que no tengo incon-
veniente en que se e:rprese queden vigentes todas las leyes que tratan de los
delitos contra la religlón".
370. DIARIO, xxn, 116: "Yo por exemplo puedo manifestar una opinión
contraria a alguna o algunas disposiciones constitucionales, porque puedo estar
persuadido de que hubiera convenido más haber resuelto otra; pero siempre
que yo respete la ley, la obedezca y execute, cumplo con mi deber, y no incu-
rro en la pena que señala el expresado articulo. No sucede así en las mate-
rias de religión : porque si yo manifiesto una opinión contraria a alguno de
!os dogmas detbidos por la Iglesia, ya soy crimi nal ar.te la. ley civiL, e incurro
en la pena impuesta por ella ; sin embargo de que resulta de este principio que
están prevenidos por las leyes todos los delitos contra la religión, la Comisión
no se contenta con eso, sino que quiert prevenir el caso que uno intentase intro-
ducir en España la TOLERANCIA CIVIL de los impíos., judíos y demás sectarios
separados de la lglesia Romana, y a éste le declarn traydcr, y le impone la
pena que le corresponde como a tal".
371. DIARIO, XXII, 117-118: "5r. Ceoo.llos: Se debtn i.nponEr penas no só!o
al que conspire, sino al que cometa qüalquiera otro delito, no sólo infundir
principios contra la religión, aunque sea una sola persona, sino al que por sí
no cumpl:!, porque éste falta a la Constitución, y en qüanto está de su parte
procura destruirla'".
"Sr Gonzá1u López: ¿Estan comprehend.idos en esta proposición aquellos
QUE' enseñan un solo error, por exemplo. que no debe ayunarse qüando lo
manda la Santa Madre Iglesia?"
"Sr. CaLatrava -eontestandole-: Si el señor pregunta si está comprehen-
dido este delito en los cometidos contra la religión, le diré que sí; pero si
quiere decir, si está sujeto a la pena de muerte que aquí se impone, le diré
que no".
372. M . PELAYO, Heterodoxos, ill, 445. 469-470.
r.CLICoOl<I0\0 111 51',\~A .•• - 2J
346 ALFREDO M.ARTINEZ ALBIACH
377. DIARio, XXII, 127-128: "Por este medio veo renovada en el Congreso
la controversia sobre la Inquisicf(m. No babrla osado aquel tribunal en sus
.Ceroces tiempos imponer la pena de tra.ydcr, y la muerte al que indiTecta'TMn-
te elogiase las leyes que habían permitido y protegido a los judíos en España ;
pues la adición del señor preopinante precisamente iba a dar al proyecto que
se discute este grado de atroci.d4d... Si yo diese la pre.{erencia a la sabidurla
de las leyes godas sobre las leyes de Felipe ll (1558) y m (1609), conspiraria
indirectam.e nte.. . Seria un conspirador indirecto si dixese que el Papa. como
soberano de Roma. tiene leyes más políticas y benéficas que los Reyes de Es-
paña... Si yo discurriese o compusiese un libro en que examinando las leyes
de Alfonso X dixese que la protección que habían dispensado a los moros y
judíos establecidos en España fue la causa del adelantamiento de la agricul-
tura, de la industria, de la medicina, alitronomia, matemática y otros ramos
del saber en aquella época; y que por el contrario la política de los Reyes de
la Casa de Austria dio el golpe más funesto a la población, a la riqueza y
prosperidad del reyno con haberlas abolido; el Sr. Alaja o los que siguen su
doctrina...• discurrirían asi: elogiar unas leyes que toleraban en España unas
religiones diversas de la dominante, y darles la pre.{erencia sobre las que rigen
en el dia, que son contrarias a aquéllas, es deprimir el mérito de éstas, es indu-
cir por este medio a los españoles a que deseen el restablecimiento de las an-
tigU4S, pues que son mejores; y es por lo mismo conspirar indirectamente
a que establezca en el reyno otra religión ... Yo vendría al fin a ser decapitado
y traydor como conspirador indirecto por sostener que en Roma había ideas
más exactas acerca de la religión y de la política que en España.; y o el Papa
estaría en contradicción como príncipe temporal con los principios de la Igle-
sia católica, de que es cabeza, centro de la comunión católica, o las Cortes
aprobando la adición del señor preopinante introducirían una doctrina políti-
co-religiosa desconocida, fundada eu un .absurdo".
378. DIARio, XXII, 131-137 : "Verdad es que tenemos leyes penales contra
los judíos, hereges, mahometanos, y contra los que pretenden establecer Qiial-
qUiera otra r eligión; pero no sé que las tengamos con aquella expresión quP.
necesita toda le y penal, para que la e¡:iqueya no la restrinja., contra los KAn:-
RIALISI'AS, ATEISTAS, Y OI:ROS que IlE'I.ESL\NDO toDA RELIGIÓN, lejOS de pretender
establecer algunas, se empeñan en atentar contra todas; y ya se ve que siendo
asi no encontrarú:.n estos -mem!gos de la relig!ón. le-s m& ccmtra:iru y L"mi-
bles en el día, impedimento alguno para. acometer!as a su placer, ni seria
extraño en dicho caso que la irreligión comenzase desde hoy - si tal vez ya
no progresa del modo más lamentable- a propagarse en las Españas a ma-
nera de un contagio, aunque no se advirtiesen conspiraciones ni ruidos... Reú-
nense qüatro o seis en algún punto de nuestra monarquía; se circuncidan,
abren sinagogas., celebran el sábado, la pasqüa de los judíos, las neomenias, etc.
Este es un v. g., de los que conspiran "directamente y de hecho" contra el
articulo 12.0 de la Constitución. Los que sin circuncidarse conviniesen en asis-
tir a esta ceremonia, fabricar la sinagoga, escuchar a los rabinos, tapar y
cubrlT a estos sectarios, etc., conspirarian ''indirectamente y de hecho". Se
convocan ·s eis u ocho en un CAFÉ y ocupan el tiempo en blasfemar sin miramien-
to ni disimulo de nuestra santa religión, contradecir sus dogmas, ridiculizar
'348 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
SU$ misterios, etc.; éstos conspiran " directamente por palabras'' contra el ar-
ticulo constitucional citado. No lo hacen así tan franca y abiertamente, sino
con disimuw, por rodeos, cubriendo el anzuelo con cebo proporcionado para
pescar a los incautos, persuadiendo, amenazando, prometiendo; éstos son los
que conspiran "indirectamente por palabras". se convienen tres o qüatro. cir-
culan cartas. escriben libros dirigidos a ateizarlos, etc.; éstos conspiran ''direc-
tamente por escrito". Los que imprimen, venden o conducen estos libros, o
reparten estas cartas conspiran "indirectamente por escrito"... Mi adición no
sujeta responsabilidad alguna al que no ayune, no oyga misa, ni guarde cas-
tidad, ni respete hacienda, honra o vida agena, ni al que DE soroNES ADENTRO,
o sin conspirar, sea herege, judío, mahometano, francmasón, o lo que quie-
ra... No estaria jamás por la pena de muerte, mientras pudiese subtituirsele
otra no menos temible, pero más próbida en favor de la sociedad; y del mismo
delinqüente".
379. DIARIO, XXII, 141-146: "La Comisión en su informe de 20 de enero
último ofreció al Congreso uno comprehensivo de las reglas que estimase con-
ducentes para hacer efectiva la responsabilidad de los infractores de la Cons-
titución política de la monarquía. Consiguiente a su oferta, no debió en esta
tercera parte de su plan hacer otra cosa que cumplir con el encargo que S. M.
se sirvió hace-rle en 27 de noviembre ant.erior, para que propusiese el conve-
niente remedio de los casos no de contravención a los <trtículos de la !e, a sus
divinos dogmas y prácticas piadosas, sino a los artículos de la Constitución
política, porque ésta era la que necesitaba de esas leyes, que asegurasen y pro-
tegiesen su observancia, como que ni en ella misma, sino en muy pocos casos;
ni en nuestros códigos estaban determinadas: necesidad que no tenía entre
nosotros nuestra sagrada religión, cuyos dogmas, sacramentos. moral y culto
en todas sus partes han sido objeto muy principal de todos nuestros códi-
gos... Leído en la Comisión este articulo, se observó por uno de sus indivi-
duos, que podría extrañarse faltaba en él lo que ahora pretende el Sr. Alaja
se le añada. Contestó el autor del proyecto que como no podia derogarse, ni se
derogaban por el articu!.o las leyes religiosisimas de que abundan nuestros
códigos contra los que INDIRECTAMENTE atentan a la religión católica apostólica
romana, era ésta una ley nueva, contra los que directamente conspiren de he-
cho a establecer otra en las Españas, o a que la nación española dexe de pro-
fesarla; pues háganlo por ignorancia, y sin protervia, o maliciosamente, y con
obstinación. deben sufrir por el solo hecho calificado de la conspiración direc-
ta, la pena capital que expresa el articulo. Esta respuesta sath;fizo justamente,
Y debió satisfacer a la Comisión, y convencerá al Sr. Alaja, de que ella lejos
de ver con indiferencia este punto, ha estado muy atenta a todo lo que pue-
de conducir para que el precioso depósito de m religión que nos transmitieron
nuestros padres se conserve siempre puro, íntegro, ileso; teniendo muy presen-
te que esta ley se establece en una 1U1Ción que tiene y se !IWria más del tim-
bre de católica que de española.. . !<o tenemos leyes generales contra los ma-
terialistas, ateístas y otros; es decir, que no las tenemos contra tooa especie
de enemigos de la religión católica, y que por esto en qüanto a ·ia protección
que le debe la nación, está defectuoso el proyecto. pues omitió el inmenso
catálogo de hombres y sectas que no la profesan o la niegan. que la combaten
o abandonan. etc... Tal empresa lejos de ser loable, pasarla por una extrava-
gancia ridícula, y sus autores por unos pedantes despreciables antes que le-
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 349'
ni otras aunque fuesen más radie2.les que éstas, las que más agriaban los áni-
mos de los apegados al antiguo régimen. que constituían aun la inmensa ma-
yoría de los españoles, sino otras que se rozaban con cosas, costumbres Y per-
sonas eclesiásticas".
398. DIARio, I , 133.
399. DIARIO, Ill, 78.
400. DIARIO, II, 109.
401. DECRErOS ele las Cortes, I, 81.
402. DIARIO, III, 395.
403. DIARIO, IV, 3. 5.
404. DIARIO, III, 436-438.
356 ALFREDO MARTlNEZ ALBIACH
/
-~
G58 ALFREDO KARTINEZ ALBIACH
421. DIARIO, IX, 333-334: Sesión del 19 de octubre de 1811: "Con motivo
en la próxima esta.::ión S':! hace indispensable un recr~o en e¡ue JJaSCi.r Zas iargas
cia, o por mejor decir, necesidad que tiene de alguna diversión esta población,
compuesta en el día, a más de la ordinaria, de tantos forasteros como aquí
se han r eunido, ccn tropas extrangeras, gen tes tedas acostumbradas a esta
. honesta diversión de todos los pueblos civi lizados, y la consideración de que
en la próxima estación se hace indispensable un recreo en que pasar las largas
noches, siendo tan perjudiciales los juegos que con tanto empeño persigue el
· Gobernador de Cádiz, D . Juan d e Villavicencio, y nada convenientes otras dis-
:t racciones, a que por falta de las inocentes se dedica la juventud".
422. DIARIO, IX, 356.
423 . PI Y MARGALL, Historia, I , 297.
424. DIARIO, XXI, 344.
425. DIARIO, XXII, 593.
RELICIOSIDAD HISPAN.~ Y SOCfEDAD BORBONICA 361
461. DLUUo, VII, 463-466 : "La Comisión Eclesiástica presentó los siguien-
tes informes: "Señor, la Comisión Eclesiástica nombrada por V. M. para pre-
parar las materias de disciplina externa en que d~ intervenir la autoridad
soberana, y completar la obra emprendida por la Junta que con el mismo ob-
jeto formó en Sevilla la Central el año 1809 ... ba formado la memoria: El
único punto que desde luego juzga digno de la soberana sanción de! Congreso
es la celebración de un Concilio Nacional, que renueve en España los tiempos
dichosos en que nuestros principes con todo el lleno de su sobecana autoridad
excitaban el celo de los prelados para que por los medios que desde su origen
tiene consagrados la Santa Iglesia, promoviesen en estos reynos la conserva-
ción Y defensa de la !e católica, el fervor de la disciplina, y la pureza de las
costumbr es... Ape.n as hay Concilio de los diez y nueve nacionales celebrados
desde el Diberitano hasta el Complutense del siglo XIV, en que directa o indirec-
tamente por parte de nuestros príncipes y prelados no se exhorte a la conti-
nua celebración de sinodos, no se reprehendan, o conminen, o condenen los
morosos en asistir a ellos... En esta interrupción pueden haber influido las
causas siguientes... : Qüarta: El rezelo de que la Corte romana intentase por
m edio de los Obispos congregados en Concilio introducir en estos reynos cier-
tas pretensiones politicas, agenas del pri77UUk> de orden y de judisdicció:J. que
reconoce Espafía como católica en el Romano Pontifice, y por lo mismo perpe-
tuamente contradichas por nuestra Corte y por algunos de nuestros sabios
prelados. En prueba de lo qüal pudiera alegar la Comisión, además de varias
reclamaciones de nuestro Gobierno, que son públicas, sobre puntos controver -
tidos entre ai!lbas Cortes en los reynados de Carlos V, Felipe II, m. IV y V,
y Carlos m ; las enérgicas representaciones del Cardenal Belluga, Obispo de
Cartagena, a Felipe V sobre la despedida del Nuncio de España, y el parecer
dado al mismo rey en 1710 por el Obispo de Córdoba D. Fr. Francisco de SO!is
sobre el agrav:!o que le babia hecho el Papa Clemente XI ... Séptima: El ha-
berse diferido por parte del Gobierno la publicación de algunos sinodos y con-
cilios provinciales, de lo qüal r esultaba perjuicio a la causa de la religión, por
la qüal se hablan celebrado; y ofensa al parecer de la libertad. eclesiástica, a
la qüal en ningún caso puede oponerse el Gobierno católico que l4 protege,
mientra.s no con.t radigan Zas pretensiones del sacerdocio a los derechos impre:-
crlptioles del imperic. En esta excesiva deltcadeza con que de algún tie:npo
a esta parte se babia propuesto nuestra corte examinar las actas de los Con-
cilios y Sinodos, retardando a veces su promulgación por algunos años, han
hallado algunos prelados un titulo cierto o apareLte para darse por libres en
esta parte de la observancia del Tridentino, alegando que no se hace de ellos
la confianza con que les fue encargado el gobierno de sus diócesis. Octava:
La repugnancia manifestada por nuestra Corte hace muchos años a toda re-
unión del estado clerical, acaso por sospechar que este cuerpo reclamase de-
rechos y libertades que a su juicio no le competen. o que pudienm oponerse
en algún modo a las regalúl.s; de lo qüal tenemos un claro exempto en las
contestaciones de la Corte con el estado eclesiástico de Toledo en el siglo an-
terior, con motivo de las enérgicas r epresentaciones que éste en sus juntas
hizo al rey sobre puntos en que se creía agraviado... ".
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 367
PARTE II
REALIDAD ES EXISTENCIALES
_._ __ ....____, _____ ~
¡
CAPITULO l
INFRAESTRUCTURA
ARTICULO 1
PERSPECTIVA SOCIAL
A) POBLACIÓN.
16. Como dos puntos axiales, en tomo a los cuales giran la caridad y fi.
lantropla dieciochesca, los hallamos en el Cardenal Belluga y .m el Principe de
la Paz <BAGUENA, El Cardenal BeUugo., capitulo XIV; GoooY, Memorias, B.A.E.,
v . 88, t.; r. pág. 212·214).
17. Novísima Recopilaci6n, horo VII, titulo xxxvn, ley IV'; L VI.I. t _
XXXVIII, L IV-VIL
18. LA1:N ENTRALGO (Historia de la Medicírul, pág. 117-201. 3J.2.331) estt:dia la
historia de la Medicina del Buroco (160CH740' y la de la Dustración (1740-1800);
y MA..'UÑÓN (Las ideas biofd9íi:as del P. Feijóo, pág. 91-aEi) la de la época del
P . Feijóo.
19. La ofensiva empezó con la obra de B . Bails - "Pruebas de ser contrario
!l 1z prnctica de todas las naciones y a la di.Sc.lpllin eclesiástica y perjudicial
a la salud de los vivos enterrar a los difuntos en las iglesias•, Madrid, 1~.
Al año siguiente se dictaba una ley -NOf1f.stma Recopil4ci6n, I, m, l'-, reite-
rada en 1804: aunque fundada en motivos de higiene, pudo también estar en·
lazada con el anticlericalismo de ciertos ministros, y los pueblos -por esta
causa, por inercla o por excusar gastos- demoraron su cumplimiento, si bien
se construyeron muchos cementerios en grandes y pequeñas poblaciones (LA·
I'UENn:, HistOria general de EspaiUz, t. XXII, pág. 234; Px Y MARc.w., Historia
de Espaiül, I, 298; DoMi:NCUEZ 0Rnz, La sociedad espaiiola en el sfglc xvm, 69)_
20. BAcut:NA, EL Cardenal BeUuga, cap. XV.
376 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
artículo 11.0 prometía una división más conveniente cuando las cir-
cunstancias políticas lo permitiesen. De acuerdo con esto las Cortes
extraordinarias de 1821 discutieron y aprobaron la nueva división,
promulgando con carácter provisional el decreto de 27 de enero de
1822: se establecían 52 provincias, coincidiendo con las actuales, sal-
vo que denominaban Chinchilla a la actual de Albacete, Pamplona a
la de Navarra, San Sebastián a Guipúzcoa, Vigo a Pontevedra, Vito-
ría a Alava, y tenia además las provincias de Calatayud, Játiva y Vi-
llafranca, creadas con los territorios pertenecientes a las actuales
provincias de Teruel, Valencia y León (El Bierzo).
Esta división no llegó a regir: fue anulada en 1823, pero se copió
en el Decreto-ley de 30 de noviembre de 1833 con escasas modifica-
ciones -supresión de las provincias de Calatayud, Játiva y Villa-
franca del Bierzo, y el cambio de Albacete por Chinchilla y Ponte-
vedra por Vigo-. Por decreto de 1927, la provincia de Canarias se
desdoblaría en Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife.
La población española representaba en 1800 el 5,8% de la de
Europa -182 millones-, el 4,87( en 1900, y el 5% en 1950.
drid composée de quarente mille volumes a peu pres n'a ríen de remarquable,
si ce n'est le tres graneL."
46. H URTADO, Historí4 de la L i teratura española, 746-747.
~7. MARA.~ÓN, Las ideas biológicas del P. Feij óo, 29-78. 308.
REUGIOSIDAD BISPANA Y SOClEDf<D ilOROO:-oiC.\ 38S
ESTAMENTOS SOCIALES
.A) CLERICALES.
a) El obispo.
En una época, cuya principal -no única- característica es la
secularización e incluso el anticlericalismo, sorprende el testimo-
nio casi unánime de críticos y turistas en resaltar las virtudes del
episcopado español, sobre todo en el siglo xvm: 60• El apasionamien-
to entre "liberales" y "servilistas", herencia de las Cortes de Cádiz,
nos impide estudiar con serenidad la figura de los Arzobispos de
Toledo, Tarragona y Valencia, Mons. Ingüanzo, Creus y Pérez -D.
Simón-, antiguos diputados gaditanos.
Es justo enaltecer aquellos Obispos de la sociedad borbónica,
hombres extraordinarios en ciencia y piedad, que mantuvieron la
admiración de los no-simpat-izantes 61 , y consiguieron las más tras-
cendentales reformas en lo social y en el seno de la misma Iglesia.
Si toda sitmción social es cambiante, se halla en devenir cons-
tante, la de !a sociedad borbónica resulta u..'la auténtica época de
transición: paso del anquilosamiento medievo-renacentista de la di-
nastía austríaca a la mentalidad contemporánea. Por ello vamos a
presentar diversos tipos que aglutinen a los personajes de cada pe-
ríodo, no sin antes manifestar nuestro asombro por la acertada
elección de Obispos por medio del Patronato regio -que databa
de 1523 62-- en un mar de presiones políticas y de ambiciones ras-
treras ante las pingües rentas episcopales 6J.
60. S ARRAILH, L' Espagne éclairée, 1:17-130; AULNOY, La Cour et l!l. ville de
Madrid, 451-458. 469-483; etc.
61. 1\iACANAZ, Polftica eclesiástica, 10: "dignos de veneración por su carác·
"ter".
62. AZCONA, Isabel la. Católica. Madrid, B.A.C., 1964, p ág. 448.
63. BACUENA, El Cardenal Belluga, 11·20. 64; REYES, Vida del Arz:>bispo Valero,
64·73. 136-155; OLMos, Prelados valentinos, 248; Aut.."'OY, La Cour et la ville de
Madrid , 543-556; CASIEJóN, Sermones, II. 245: ~El que pretende un Obispado.
¿Cüánto vale? Tanto. Es renta corta : lo renuncio. Pero no se renuncia porque
es Obispado, sino porque es Obispado corto; y si se admite, es con la mira a
Jograr después otro mayor."
-- -
REUCIOSIDAD HlS!'ANA Y SOCIEDAD BOR30NICA 393
a)) Para PRINCIPIOS DEL SIGLO XVIn exhibimOS COmO tipo al Ar·
wbispo de Valencia, Fray Antonio Folch de Cardona -prescindien-
do de otros más belicosos y discutidos como el Cardenal Portoca-
rrero, el Obispo cordobés Mons. Salazar, el de Cartagena Cardenal
Belluga, o el Arzobispo de Toledo Mons. Valero-. El escogido pue-
de considerarse conio standard en el episcopado español: hijo se-
gundo de un noble -el Almirante de Aragón, Marqués de Guada-
les~. se inicia en la carrera militar hasta alcanzar el grado de
Capitán en las fronteras portuguesas; luego, viste el sayal francis-
cano en Palencia. Colegial Mayor de San Pedro y San Pablo en la
Universidad de Alcalá de Henares, y lógicamente una rápida ca-
rrera eclesiástica: Ministro de su provincia religiosa, Vice-Comisario
y, desde el 2 de febrero de 1697, Comisario General de las Indias.
y el 3 de febrero de 1699, Inocencio xn confirmaba la propuesta
regia para Arzobispo de Valencia: allí defiende la jurisdicción de su
dignidad episcopal contra las pretensiones del Lugarteniente Gene-
ral de la Orden Militar de Montesa 64; y cuando las tropas del pre-
tendiente austriaco, mandadas por el General Bassés, ocupan la ca-
pital levantina y asaltan el palacio arzobispal el 16 y 28, respecti-
vamente, de diciembre de 1705, sale para Madrid, donde trató in-
útilmente de impedir el incendio y destrucción de la ciudad de Já-
tiva, decretada por Felipe V; y al entrar el Archiduque en Madrid,
tomó su partido, acompañándole hasta Viena, en que murió el 21
de julio de 1724 65_
El modelo se repitió en el fragor de una lucha fratricida de la
Guerra de Sucesión. También en cuantos prelados osaron levantar
s u voz contra el poder real -recordemos al Obispo de Cuenca y
otros 6L-, en quien -como el Cardenal Belluga- apoyándose en
un pasado brillante, trató de h acer frente a los atr opellos de Feli-
pe V contra la dignidad papal en 1709 67 • De todas aquellas crisis
siempre salia victorioso el rey, mediante pactos politicos con la
S:mta Sede. Pero debemos destacar 'la energía con que muchos pre-
lados dP.fendieron las prerrogativas ec!esiásticas contra la autoridad
regia, O• denes Militares y pretensiones de cabildos catedralicios.
64. FoLcH, Carta que escriui6 a algunos Srs. Regentes del S..S. y R.C. de
Aragón, 42: uDeseo teroissimamente se aclare la lt:Sticia, o por medio de la
conferencia, o por el medio Iuridico, según, y como lo ha practicado el Sr.
Cardenal de Toledo, y los Srs. Obispos de España.~
65. Owos, Preliu:Ws valentinos, 224-227.
66. TAPIA, Huwria de la cit1ilizaci6n española, IV, 94: Or.Mos, Prelados t~alen
ttnos, 251-253.
67. BACUENA, El Cardenal BeUuga, 100-116.
JIELIOIOSID\0 IIISPA!oiA ••• - 26
394
- ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
68. R-'"YES, Vida de Valero, 00.195; B.~CUENA, El Carc!enal BeUuga, 19·100. 118
ss.; SANTAND~. Retiro espiritual para los sacerdo!es, p. I·XII.
69. SARIWLH, L'Espaqne éclairée, 65.
70. OLMOs, Prelados valentinos, 235-236. 248·249.
71. BOuRCOINC, Tableau de l'Espagne moderne, m, 4-5.
72. DÍAZ DE RÁBAGO, Oración, 3 SS.
73. GomÁLEZ, Oración, 3-21.
74.. NAVAS, Sermón, 3 SS.
75. LORD-'ZANA, Cartas pastorales y Edictos; Cartas, Edictos •t otras obras
sueltas.
R.ELICIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBON1CA 395
76. ARMAÑÁ, Sermones, tomos I ·IV; CE:sAT, Oracf6n fúnebre del flmc. Sr. D.
Fr . Franci..~Cf) Annaiiá, 14 ss.; ! ZQOIERDO CAPDEVILA, Elogio a la buena memoria
del Ilmo. Sr. D. Fr. Francisco Annaií4, 3 ss.
77. BocAmcRA, Sermones, tomos I·II; Cartas pastorales: Juicio del mundo,
Declamacf6n contra el libertmage, Saludable medicina.
78. CLIMENT, Püiticas dominicales.
79. SANTANDER, Doctrinas y Sermcmes para M isión, t . l ·II; Sermcmes Dog-
mdt icos; Sermcmes Panegíricos, t. HI.
80. D. ORnz, La sociedad. española en el siglo :xvm, 133-139.
81. OLMos, Prelados valentinos, 274-316.
396 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
(r. 820) -D. Simón Guardiola- , Solsona (r. 819) - ... -, Ibiza (30
Abril 1782) -D. Basilio Antonio Hernando y Carrasco-. Arzobis-
pado de Zaragoza (r. 1117) - D. Manuel Gómez de las Rivas-; con
las sufragáneas de Huesca (r. 1096) - ...- , Barbastro (r. 1102) - D.
Jaime Fort y Puiz.-, Jaca (r. 709) -D. Miguel García Cuesta-,
·Tarazona (r. 1110) -D. Vicente Ortiz-, Albarracín (r. 1170) - ...- ,
Teruel (r. 1557) -D. Antonio Lao-. y el Arzobispado de Valencia
(r. 28 Septiembre 1238) -D. Pedro García Ave~; con las sufragá-
neas de Segorbe (r. 1245) -D. Domingo Canubio-, Olihuela (1564)
- D. Félix Herrero y Valverde-, Mallorca (conquistada en 1229)
-D. Rafael Manso-, y Menorca (conquistada en 1230) - .. .- 32•
e)) El Concordato de 1851, en su articulo quínto, conservaba
las sillas metropolitanas de Toledo, Burgos, Granada, Santiago, Se-
villa, Tarragona, Valencia y Zaragoza, y elevaba a esta clase la su-
fragánea de Valladolid. Se mantuvieron las diócesis sufragáneas de
Almería, Astorga, Avila, Badajoz, Barcelona, Cádiz, Calahorra, Ca-
narias, Cartagena, Córdoba, Córía, Cuenca. Gerona, Guadix, Hues-
ca, Jaén, Ja.ca, León, Lérida, Lugo, Málaga, Mallorca, Menorca, Mon-
doñedo, Orense, Orihuela, Osma, Oviedo, Palencia, Pamplona, Pla-
sencia, Salamanca, Santander, Segorbe, Segovia, Sigüenza, Tarazona,
Teruel, Tortosa, Tuy, Urge!, Vich y Zamora. La diócesis de Alba-
rracín quedó unida a la de Teruel; la de Barbastro, a la de Huesca;
la de Ceuta, a la de Cádiz; la de Ciudad Rodrigo, a la de Salaman-
ca; la de Ibiza, a la de Mallorca; la de Solsona, a la de Vich; la de
Tenerife, a la de Canarias; y la de Tudela, a la de Pamplona. Se
erigieron nuevas diócesis en Ciudad Real, Madrid y Vitoria. La
silla episcopal de Calahorra y La Calzada se trasladó a Logroño; la
áe Orihuela, a Alicant~; y la de Segorbe, a Castellón de la Plana
"cuando en estas ciudades se halle todo dispuesto al efecto y se es-
time oportuno". Expresamente se establecían Obispos auxiliares en
Ceuta y Tenerife.
Hubo nueva distribución de sufragáneas en torno a las sedes me-
tropolitanas: Burgos : Calahorra o Logroiio, León, Osma, Palencia,
Santander y Vítor'~; Granada: Almería, Cartagena o Murcia, Gua-
dix, Jaén y Málaga; Santiago: Lugo, Mondoñedo, Orense, Oviedo y
Tuy; Sevilla: Badajoz, Cádiz, Córdoba e Islas Canarias; Tarragona:
Barcelona, Gerona, Lérida, Tortosa, Urge! y Vich; Toledo : Ciudad
Real, Coria, Cuenca, Madrid, Plasencia y Sigüenza; Valencia: Ma-
llorca, Menorca, Orihuela o Alicante, y Segorbe o Castellón de la
Plana; Valladolid: AStorga, Avila, Salamanca, Segovia y Zamora;
y Zaragoza: Huesca, Jaca, Pamplona, Tarazana y Teruel.
82. GuiA del Est.turo Eclesiástico para el año de 1848, pág. 14-16.
398 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
b) El clérigo.
cas, que hacían deseable colocar los bienes al abrigo de los excesos
del fisco. Prosiguió la afición a las fundaciones, sobre todo en for-
ma de memoria por el alma de los donantes, hasta que una ley de
1763 las cortó en seco. La preocupación de unir las ventajas mate-
rial~ con los bienes espirituales hizo que en muchos casos los fun-
dadores reservaran a miembros de su familia el disfrute de las ca-
pellanías, lo que traía como secuela que muchos individuos fueran
incitados a ordenarse para disfrutar la prebenda familiar, que sus
estudios fueran de lo más somero y sus costumbres dudosamente
ejemplares 9S.
por satis!acer a su apetito... Donde bay Vida Común están más sanas las Reli·
giosas, se experimentan menos enfermedades o epidemias, que suelen introdu·
cirse con la multitud, y no se estragan con golosinas en la comid9., u otras:
COSP.s nocivas... ~
102. D. 0Rnz, La socidad española, 15>156.
103. GuíA del Estado eclesiástico, pág. 41.
·408 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
e) El capellán castrense.
106. MACANAZ, Obras escogidas : Carta primera, pág. 64-65: "Añado a ella lo
que se ha ofrecido !:last& hoy 26 de mayo de 1703... Del Regimiento de la Reina
se han formado dos; del primero, que queda con su primer título, ~e ha dado
la coronelía al duque de Veraguas; del segundo, a quien se intitula regimiento
de Asturias, se ha hecho coronel a don Francisco Ronquillo sin innovar en el
corregimiento."
D. ORTIZ, La sociedad española, 371-374. 377-381 : "Felipe V tuvo que recurrir
a improvisaciones por las exigencias de la Guerra de Sucesión. En 1702 se crea-
ron doce tercios de a mil hombres, que desde 1704 se llamaron regimientos, y
coroneles sus antiguos "maeses de campo". En su armamento - fusil bayone-
ta-, organización e instrucción se siguió el patrón francés, imitación explica-
ble habida cuenta de su incontestada supremacía en aquella sazón. Para ordenar
la gente precisa se ordenaba sacar un hombre por cada cien vecinos, conforme
a los reglamentos del reinado anterior. Pero la extensión que tomaba el con-
flicto bélico exigía la adopción de medidas mucho más enérgicas. Disponía la
JI ¡ LJC IOS JD.<D JI ISPA :'<A••• - 27
410 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
dats ... La marine espagnole consiste en sept vaisseaux de ligne du premier rang,
en 41 du second, 11 de troisieme... , 4 gallotes a bombes, 2 goelettes, 7 demi·gá-
leres, 8 hourques, 3 brigantins, une corvette, 7 paquebots."
MINISTERIO DEL EJÉRCITO, Servicio Histórico Militar, en Guerra de la Inde-
pendencia t. I , pág. 198. 235. 260. 265, nos detalla la composición del Ejército
y de la Marina en los albores del siglo xrx.
107. D . 0Rnz, La sociedad española, 36-371 . 300.
108. N. REcoPll.ACIÓN, pág. 254-259. 156.
109. DttREI'OS DE LAS CoR'IES. III, 155.
412 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
DEc. R.I:Y, Apéndice, 455: MR. O. comunicada por el Min. de Guerra al Secr.
de E. y del D. de Ha.cíenda: se declara por resolución al expediente de Fr. Ju.s-
tino de Barcelona, Capellán del regimiento Suizo de Wimpfien, que a los Ca·
pellanes de los regimientos debe hacerse el abono del aumento de su haber des-
de la fecha de su concesión -R. O. 1." Agosto 181~ basta la de la reforma en
que se mandó suspender -1 Abril 1817-. En los repartimientos hechos por los
cuerpos con los caudales sacados de las Tesorerlas han completado a los Cape-
llanes los 700 reales que les pertenec:ian, no siendo culpa de ellos que por las
escaseces del erario y trastorno de las pasadas ocurrencias de la nación no se
hayan completada tos haberes ni formalizado ajustes. Madrid, 25 Diciembre
1817."
DEc. REY, VIII, 352-353: MCapellán de Infanteria y Caballeria de la Guardia
Real, sueldo 750 reales. Aranjuez, 1 Mayo 1824."
DEC. REY, XV, 62-63: MR . O. de 16 de febrero de 1830 para que la Administra-
ción de Hacienda militar suministre pienso para tos caballos d e los capellanes."
115. DEc. REY, III, 430-432: " Circular del M in. de la Guerra: En vista de lo
.que ha expuesto a S. M. s u Consejo supremo de Guerra, después de haber oido
al Patriarca de las Ind!as y Vicario ~neral del egército en punto a que las
tropas de los diferentes cuerpos de tndas las amtas del egército deben oiT misa
de un modo propio de la profesión del cristianis mo, ha tenido a bien resolver
el Rey N. S que se observen las reglas siguientes: 1.• Hallándose los cuerpos
en los eg~rcitos de campaña acordarán los ~erales con el Teniente Vicario
general de ellos lo conveniente acerca de este punto, atemperándose en cuanto
sea posible a las reglas generalmente adoptadas. 2.• A los que estuvieren de
guarnición, de descanso o de tránsito, ya sea en el cuartel, ya en alojamientos,
se les Mrá saber en la orden ó.e la vi:;-pcra ec qué iglesia, y a qué hora se dirá
la misa para la tropa el dia siguiente, procurando ~ terr.p't1lll0, y llamando
al toque de caja en !t)S cuarteles un cuarto de hora antes, y media cuando la
tropa estuviere aleja:ia. 3.• Se formarán dichos cuerpo¡; para ir a la iglesia
sin armas ni mochilas, a excepción de los casos en que la tropa tuviere que
salir del pueblo inmediatamente después de la misa, pues en éstos podrán lle-
var las armas basta el parage más proporcionado y más inmediato a la misma
iglesia, en donde las dejarán todos. no arrimadas a las paredes de la iglesia,
porque está expresam.e nte prohibido por la consagración o bendición que reci-
bieron, sino en el suelo o en pabellones, o arrimadas a otra parte. 4.• En lle-
gando la tropa a la iglesia, entrará en ella con el mayor orden y compostura,
debiendo hallarse despejado el centro de la misma, donde habrá de colocarse
desde la inmediación del presbiterio abajo. s.• Siendo la práctica general de
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 415
tos cristianos siempre que entren en el santo templo de Dios tomar agua ben·
dita y santiguarse con ella; y no debiendo carecer la tropa de los beneficios
y saludables efectos que causa, se dispondrá que de los Sargentos que según
el articulo 9, tratado 3, titulo 10 de la Ordenanza general deben estar a la parte
interior de la puerta para que Jos Soldados se coloquen de mejor modo posi·
ble, se destine uno que con una calderilla de agua bendita, o en otro receptácu·
lo, la presente al primero de la lúlera, y éste con s u mano la dé a los dos com·
pañeros, cuya operación entrando por lúleras, es muy fácil, nada entretenida,
y muy edificante y útil. 6.• En los dias de Domingo, y en los más clásicos del
año, el capellán del cuerpo que ba de celebrar la misa, explicará antes un pun-
to de doctrina CI'istiana, o el misterio del dla, egecutándolo con brevedad, de
modo que no exceda de un cuarto de hora, con lo cual irá adquiriendo la tropa
una mstruccíón que le es tan necesaria. 7.• A fin de que reine en los circuns-
tantes todo recogimiento, silencio y devoción no se permitirá que en adelante
al tiempo de oir la tropa el santo sacrificio de la misa baya música alguna mi·
litar, que es motivo muy poderoso de distraoción, ooocurrlendo únicamente las
cajas de guerra en los cuerpos de infanteria. 8.• Al prlnclpiarse la misa, se
arrocWla.rá la tropa a la señal de la campanilla, que se ba.rá por el que ayuda
la misa; permaneciendo as1 basta el evangelio, que se pondrá en pie, cootinua.n·
do de este modo basta el Sanctus, -fuera de cuando baya Credo en la misa,
que se arrodillarán todos con el Sacerdote al •~ncarnatus est"-, y proseguirán
en esta postura basta después de haber sumido el Sacerdote el cáliz, que se
pondrá en pie hasta el "Ite missa est•, a cuyo tiempo se arrodillarán todos para
recibir la bendición , y se volverán a poner en pie durante el evangelio de San
Juan, e hincando la rodilla derecha a su termL"lación cuando el Sacerdote dice
"'et Verbum caro ractum est", se quedarán en pie hasta q ue aquél se baya en·
trado en la sacristía, que podrá salir la tropa con el mismo orden que entró .. .
Madrid, 30 Nov., 1816."
116. DECRETOS DEL REY, Il, 543.
117. Dr.c. REY, III, 34.4-351 : "Circular del Min. de la Guerra: Con esta lecha
comunico al Sr. Secretario interino del Despacho de Gracia y Justicia lo que
sigue: En consecuencia de lo que dije a V. E . con fecha de 16 de Marzo último,
.ha hecho presente al Rey N . S. la Cámara de Guerra, presidida por su augusto
Hennano el Srmo. Sr. Inlante D . Carl<lS Maria, Genera.llsimo de los RR. egérci·
tos, en consulta ~ 12 <12 Agosto próximo pasado, <!espués de la más seria me-
ditación, cuanto ba estimado convenimte acerca del asunto sometido a su ez:a.
men !)ara asegurar de l:D modo estable las debl.:ias re:o~ a los indivi-
duos del benemérito clero castrense. manilestando todo lo ocurrido desde que
se promcvió y libró al efecto el reglamento de 30 de Enero de 1804., basta que
por RR. órdenes dictadas por ese Ministerio con fechas d'! 4 de E!lero y 26 de
Setiembre de 1815 se dejó sin efecto la de 19 de Diciembre de 1814 expedida por
éste, por la cual tuvo a bien conceder, por una vez, qwnce prebendas entre ca-
nongias y raciones para premio de los eclesiásticos castrenses que más se bu·
biesen distinguido en la pasada gloriosa revolución, y aun por la citada de 26
de Setiembre se anuló además el expresado reglamento de 30 de Enero de 1804,
que es la ley 10, titulo :20, libro 1.• de la Novísima Recopilación, confirmada por
S. M. por su R. decreto d e 10 de Octubre de 1814, y también cuando sucedió con
motivo de haberse opuesto ese Minis terio en 21 de dicho mes y año a la provi-
416 ALFREDO MARTINEZ ALBL... CH
hecho hasta aquí, los RR. decretos en que se digne nombrar a los agraciados,
dirigidos al Presidente de dicha Cámara de castilla, para que sin demora, ni
más consulta ni resolución se les libren Jos RR. titulos correspondientes... Ma-
drid, 14 Setiembre de 1816.•
M AlltCIÓN AL REClAM:Dml. R. Cédula: El Rey. Atendiendo a que Jos premios que
se dignó señalar mi augusto Padre en el reglamento de 30 de Enero de 1804.,
que es la ley JO, tít. 20, lib. 1.• de la Nov. Recop., a los capellanes párrocos de
mis egércitos y armada por Jos importantes servicios que contraen, no son en
el dia suficientes por su mayor número en la nueva creación de los cuerpos de
todas armas, tuve a bien resolver por mi decreto de JO de Octubre de 1814 se
ampliaran dichos premios para proporcionar a Jos citados beneméritos ecle-
siásticos del clero castrense, que tanto mérito han contraido en la última de-
sastrosa guerra en el egercicio de su ministerio, y a los Tenientes Vicarios cas-
trenses la condigna remuneración a que son tan acreedores; y a su consecuen-
cia, conformándome con lo que me han propuesto el M. R. Patriarca Vicario
General de mis egércitos y armada, y la Cámara de Guerra presidida por mi
muy amado Hermano el In!ante D. Carlos Maria, Generalísimo de mis egér-
citos, de cuyo zelo por el mejor servicio e instrucción tengo tan repetidas prue-
bas, he venido en declarar como adición al referido reglamento los articulos
siguientes: 1.• Los Tenientes Vicarios generales de egércitos de operaciones, de
escuadras o expediciones marítimas que Yo tuviese a bien nombrar a propues-
ta de dicho M. R. Patriarca Vicario General, serán premiados al fin de la
campaña o expedición con dignidades o canongias proporcionadas a su mérito
y servicios; y los que ya las Wvieren, con alguna dignidad o condecoración co-
rrespondiente; proponiéndome el mismo Prelado, por mi Cámara de Guerra en
ambos casos, el premio o condecoración a que los considere acreedores; así
como premiare también por igual propuesta la antiguedad, buenos servicios y
méritos de. los Tenientes Vicarios territoriale:o; con mejora de sus prebendas o
condecoraciones cuando lo merecieren. 2.• Los capellanes párrocos de mi egér-
cito y armada que hayan cumplido bien en el egerclcio de su ministerio veinte-
Y cinco años, veinte o quince, tendrán derecho a ser premiados con treinta pre-
bendas, entre canongias y raciones de las catedrales de España, en lugar de las
veinte y una que señ4la el mencionado reglamento de 30 de Enero de 18V4, en
los términos siguientes: Para lo~ de veinte y cinco años cumplidos de servicio
se señalan once canongías en las catedrales de Vlllencia, Cuenca, Toledo, Sevi-
lla, Cartagena, Jaén, Santiago, Córdoba, Zaragoza, Granada y Málaga; para Jos
de veinte años diez canongías en las iglesias de Salamanca, Plasencia, Zamora,
Segovia, León, Palencia, Tarragona, Tortosa, Huesca y Ciudad Rodrigo. Y !os
que hayan :;ervfdo quince años obtendrán nueve raciones en las catedrales de
Salamanca, Plasancia, Zamora, Segovia, Córdoba, Cartagena, Málaga, Sto. Do-
mingo de la Calzada y Orihuela; quedando fijas en el reglamento las canongías
de Santiago y Palencia, como tuvo a bien declarar mi augusto Padre en 6 de
Noviembre de 1804, y excluidas de él llis raciones de León, Palencia y Ciudad
Rodrigo. :S.• En Ja.o; vacantes que ocurran de :iichas treinta prebenáas consigna-
das como premio del clero castrense, avisarán a mi Secretmo de Estado y del
Despacho de Guerra no sólo el Secretario de la Cámara de Castilla y de Aragón,
sino también los M. RR. Arzobispos y RR. Obispos en las respectiva.-; dióoesis
en que se Cl>USe la vacante; y dado el aviso correspondiente por el Ministerio
de la Guerra al M. R. Patriarca Vicario General, hará este Prelado la propues-
ta en tres sugetos para cada una, dlrigi.é ndola a mi Cámara de Guerra por
medio de su Secretario, cuando toque el tumo a los capellanes de egército,
para los fines que tengo prevenidos en el articulo 12 de mi R. Cédula de 12
de Febrero de este año. 4.• Se arreglará el Patriarca Vicario General en estas
propuestas a las RR. resoluciones expedidas por mi augusto Padre en el mi.s-
mo año 1804, con motivo de las dudas que entonces se suscitaron, y deben te-
nerse como parte del reglamento dicho de 30 de Enero. y son las siguientes:
-418 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
cial" 127, "los presidios del reino" w, "el Colegio general para todas
las armas" 129, Guardia Civil 130, Alabarderos 131 , Colegio naval l.32, etc.
Con la edición de los Breves Pontificios para conocimiento de
la jurisdicción eclesiástica castrense y sus privilegios m. Dentro del
B) SEGLARES
a) El noble.
142. D . ORTIZ, La sociedad española, pág. 4546. 49-50. 54. 77-78. 81-ro. 87. 93.
108. 110. 118. 121.
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBOUICA 435
159. D . ÜRTIZ, Le. SOCiedad española, p. 166-170. 18().183 . 193. 217. 22().221. 255-
"256. 395
CAPÍTULO II
REGALISMO Y DESAMORTIZACION
·'
.
ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
EL SIGLO XVlll
A) FELIPE V
principios del glorioso reynado de Felipe V !ueron tan rebueltos, que pasaron
muchos años primero que se lograse el establecimiento de una perfecta tran-
quilidad. Subió aquel gran Monarca al trono Augusto heredado de sus Mayo-
res, abriéndose el camino con la espada cont.ra ribales y émulos, que preten-
dieron obscurecer e inutilizar sus Jegitimos derechos. Aunque el año de 1714,
mediante el tratado de Utrecht, se dio fin a la guerra de succesión, no cesaron
por esto del todo los rumores, ni Jos disgustos suscitados por los mismos ému-
los. Entre los demás Príncipes que se declararon partidarios de Jos enemigos
de la Monarquia Española, fue uno Clemente XI que a la sazón reynaba so-
bre la Cáthedra de San Pedro, quien en un Consistorio se declaró abiertamente
por Carlos VI, Emperador de Alemania, reconociéndole por legitimo sucesor a
la Monarquia Española por muerte de Carlos II, paso verdaderamente abaoza-
do y q ue fue origen de muchas controversias y de rompimientos entre la Corte
de España y la de Roma, y de Jos resentimientos que en tales ocurrencias son
regulares... A finales del año de 1718, recibió e l VenE:rable Arzobispo (Valero)
una carta del Cardenal Secretario de Estado de S. S . en que :se le reconvenia
de haber permitido a publicación de la Bula de la Cru?.ada en su Arzobispado,
hallándose ésta suspendida por Decreto expreso de S. S ., emanado el qüatro
de J unio de el mismo año... No se podia ignorar en Roma, y "DUcho menos por
el Papa, ni por su Secretario de Estado, que lo era el Cardenal Paulucl, que el
acto de la publicación de la Bula no está cometido a los Prelados de la Iglesia
de España, sino privabl>o del Comisario go . .neral de Cruzada; pero se dirigió
esta carta al Vene::-abie Arzobispo con el fin de... la composición entre ambas
Potestades... Pul>licó un E:lictv... para obviar escrúpulos en las conciencias... :
por su facultad ordinaria cont:edia a todos sus súbdiU>s usar de lacticinios y
a todos los Confesores el poder de absolver de casos reservados, etc... Entre
tanto se repetú>n las cartas de Roma, instando al Venerable Arz.obispo para
que no permitiera la publicación de la Bula en su Arzobispado para el año pró-
ximo de 1720... Formó el Venerable Arz.obispo sobre Jos escritos y pareceres
de Prelados, Canonistas y Teólogos un memorial razonado en que añadiendo
su parecer imparcial, lo puso todo en las manos del Rey, quien después de
haberlo considerado, dixo una expresión digna de la piedad y religión de su
grande alma, qüal fue : Que no sólo no quería con el menor escrúpulo de con-
ciencia los intereses que le resultaban del dinero de la Bula, pero que ni tam-
poco el Cetro ni la corona. En vista de estos pareceres se resolvió S . M. a pe-
dir al Papa alzase la suspensión... El Papa concedió de nuevo a instancia tan
446 ALFREDO MA.RTIN<:Z ALBIACH
14. GARciA VIUOSI.ADA, Historia de la Iglesia Católica, IV, 287; M . PD.\YO, He-
terodoxos, III, 112.
15. SARRAILH, L ' Espagne éclairée, 68-71; VlCENS, Aprox. Hist. Espaiio., 140;
L'NCU:. Voyage en Espagne, I , !17.
16. Completamos la referencia iniciada en la primen parte de este trabajo,
nota 237 del capítulo segundo. AULNOY, La Cour et la Vüle de Madrid, pág. !>49.
556 : wEl Arzobispado de Toledo tiene 150.000 escudos de renta y su cl<!ro 400.000;
el de Sevilla 350.000 ducados de rtnta -y un ducado vale 30 francos en moneda
!rancesa- ; el de Santiago, 60.000; Granada, 40.000; Burgos, 40.000; Zaragoza,
50.000; y Valencia, 40.000; el Obispado de Avila, 20.000; Astorga, 12.000; Cuenca,
50.000; Córdoba, 40.000, Sigüenza, 40.000; Segovia, 25.000; Calahorra, 20.000; Sa-
lamanca, 20.000; Plasencia, 50.000; Palencia, 25.000; Jaca, 30.000; Málaga, 40.000;
Osma, 22.000; Zamora, 20.000; Coria, 20.000; Ciudad Rodrigo, 10.000; Islas Cana·
rias, 22.000; Lugo, 8.000; Mondoñedo, 10.000; Oviedo, 20.000; León, 22.000; Pam·
plona, 28.000; Cádiz, 12.000; Orense, 10.000; Almería, 5.000; Badajoz, 18.000; Tuy,
-4.000; Valladolid, 15.000; Huesca, 12.000; Tarazona, 14.000; Barbastro, 7.000; Al-
bsrracin, 6.000; Teruel, 12.000; Jaca, 6.000; etc."
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 455'
censo de 1797 17, y en 1809 18, revelando una desigualdad social ecle-
siástica, públicamente denunciada por el oanónigo D. Antonio Oli-
veros en las Cortes de Cá d.iz, según ya vimos en la primera parte.
Prescindimos de la historia politica, a necdótica e incluso ideo-
lógica de un matiz" -también el problema de los jesuitas .lD_ y de-
otro 21 , para enfrentarnos con la doctrina legal entonces vigente,
dentro de la sociedad borbónica, especialmente en la época absolu-
tista. Nos referimos a la Novísima Recopilación que debió formar
la mentalidad del español.
La Recopilación de leyes españolas publicada por Felipe II en·
1567 se reimprime y amplia en 1581,1592, 1598,_1640, 1723, 1745, 1772,.
1775, 1777 y, por último, en 1805. Se realiza esta última con la cola-
boración de eminentes jurisconsultos y pese a su nueva metodolo-
gía, resultó defectuoso el intento de sistematización.
De sus doce libros vamos a limitarnos a los dos primeros por
su relación sociorreligiosa: t.• sobre la Santa Iglesia; sus derechos,
bienes y r entas; Prelados y súbditos, y Patronato real. 2.0 Jurisdic-
17. D . 0Rnz, La sociedad española, 299: "El censo de 1797 propor ciona laS'
siguientes cifras : de 148 ciudades, 126 son de realengo, 7 de señorfo eclesiástico
y 15 de señorio secular; de 4.716 villas, 1.703 son de realengo, 135 abadengo, 260
señorio eclesiástico, 2.286 señ. secular, y 332 de Ordenes Militares; de 14.525 lu-
gares, 7.870 realengo, 948 abadengo, 1.254 señ. eclesiástico, 4.26'7 señ. secular,
y 186 Ord. Militares; de 1.821 aideas, 879 r ealengo, 42 abadengo, 123 señ. ecco.,
671 señ. sec. y 106 Ord. Mil.; de 2.251 granjas, 934 realengo, 46 abadengo, 644 señ.
ecco., 612 señ. sec., y 15 Ord. Mil.; de 837 cotos redondos, 118 realengo, 129·
abadengo, 154 señ. ecco., 400 señ. sec. y 36 Ord. Mil.; de 932 despoblados, 291
realengo, 25 abadengo, 149 señ. ecco., 430 señ. sec. y :n Ord. Mil.•
18. PI Y MARGALL, H ist oria de España, I, 270-271: "La comisión de contribU·
ciones r.tanifest6 er: 1809 que el valor total del capital territorial de España
ascendia a 50.000.000.000 de reales, y según Cabarrús que examinó los catastros,
el clero poseia un cuarto de este capital, o sea 12.500.000.000 de reales... Adem.ás'
de los bienes raices, poseía el clero diferentes ramos de renta cuya evaluación
según varios economistas ascendia a la suma de 951.400.000 reales. Que no eran
estos cálculos exag~rados queda bien demostrado cuando, años después, en el
primer cuarto d el siglo, los datos sobre el personal y las rentas del clero en
España resultaron ser... 1.5-:n.882.144 reales vellón. La distribución de tales ri-
quezas tenia poco de equitativa, pues mientras babia arzobispado, como el de
Toledo cuya renta pasaba de 11.000.000 de reales al año, pá.."TTCC había que no
disfrutaua ni dP. 1..2n reales anualPs."
19 GARciA VILLOSLADA, H istoria de la iglesia Católica, IV, 319-325; M. PEI..AYO,
Heterodoxos, III, 130·l:r7. 152-157. 163·297.
20. EcuiA, Los ·ie~uitas y el Motín de Esquilache, i31-132. 164. 177-180. 34..3;
G. Vn.LOSLADA, H. Iglesia, IV, 333-361; M. PnAYO, Heterodoxos, lll, l:n-152. 157-163.
2!. TAPIA, Historia de la civilización española, IV, 90-96: " ...para contener
las usurpaciones de la curia r omana... se había expedido en 1762 un real de-
c r eto previniendo, 1.• que no se ejecutase n i cumpliese bula alguna o rescripto·
del papa, cualqiliera que fuese su objeto, sin haber sido antes presentada a
S . M. por el conducto correspondiente; 2.• que toda bula o breve relativo a ne-
gocios entre partes o personas particulares, hubiese de presentarse al consejo
luego que se recibiese en E spaña, sin poder ejecutarse hasta haber obtenido er
pase... Este decreto tan racional ... "
-456 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
A) Obligación de :
a) todo cristiano y modo de creer en los artículos de la
fe: ley 1.~ (Ordenamiento Real, I, I, I) .
b) cristiano en:
a)) no pisarla: 5." (Ju~n I , 1387) .
(Juan, I, en Birbiesca, en 1387);
b)) confesar y comulgar al tiempo d e s u muerte: 3 .~
(Alonso I y Enrique ill, 1400).
(Comunión del condenado a muerte: 4.3 (Felipe II.
1569).
E) Respeto:
a) a la Cruz:
a)) no pisarla: 5.• (Juan I, 1387).
b)) con ella se recibe al Rey, Príncipe e Infantes: 6."
(Juan I, 1387) .
b) al día festivo:
a)) trabajos y tiendas en domingo : 7.• (Juan I, 1387) .
b)) trabajo público en festivo no dispensado: 8."
(Carlos III, 1777).
e) al entierro: llanto y duelo : !1.• (Juan I, 1379).
d) a los Divinos Oficios: 10.~ (Fernando e Isabel, 1502).
e) a lo sagrado :
a)) disciplinantes, bailes, etc.: 11.• (Carlos I11, 1777) .
b)) danzas, gigantones, etc.: 12.• (Carlos III, 1780).
2. -Las seis leyes del TÍTULO SEGUNDO protegen los derechos de las
Iglesias y Cofradías: 1.• fuerza en iglesia o cementerio (Fuero Real) ;
2.• privilegios "franquezas" y ocupación de bienes (Enrique II, 1371):
3.• posadas y bestias en iglesias (Enrique II, 1371); -l." obras con
real licencia en Granada (Carlos m, 1773); 5." modo de realizar
obras en iglesias (Carlos m, 1777) ; y 6.2 aprobación real para Co-
fradías y su reforma (Carlos m. 1783) .
3. - Otras seis leyes regulan el TÍTULO mosobre cementerios, entie-
rros y funerales: 1." imponiendo el Ritual Romano en el uso y cons-
trucción de cementerios (Carlos m , 1786) ; 2! formalidades en en-
tierros y exequias (Felipe II, 1565); 3.• ataúdes y ceremonial de
entierros (Felipe V, 1723); y casos particulares en Guipúzcoa (4.":
Carlos m , 1771), en Lugo (5.•: Carlos m, 1787) y en la jurisdicción
castrense (6.•: Carlos III, 1781) .
4. - Las once leyes del TÍTULO CUARTO tratan "óe la reducción de asi-
lo y extracción de refugiados a las iglesias": contra los delincuen-
tes (1.•: Fuero IU>..al), deudores (2.a: Fernando e Isabel, 1498) y de-
sertores (3.": Felipe V, 1708); cumplimiento del Concordato de 1737
(4.•: Felipe V, 1737) y de un Breve pontificio (5.2 Carlos m, 1773);
modo de extracción (6.•: Carlos IV, 1800); y sobre reos militares
(7.": Carlos m, 1?65; 8.•, 9! y n.a: Carlos IV, 1796. 1798-1799;
10.•: Fernando VI, 1'?51).
FERNANDO VII
A) 1814-1819.
a) Con respecto a la selección del personal para puestos de
mayor o menor influencia eclesiástica, recién llegado a Madrid, el
24 de mayo de 1814, Fernando VII dirige un importante decreto a
D. Pedro de Macanaz, ordenando que "en las presentaciones para
curatos y beneficios eclesiásticos, a esto se atienda principalmen-
te, a que las ternas y provisiones recaigan en personas que no es-
tén imbuidas en tales opiniones (erróneas y peligrosas, asi en Io-
politico como en lo moral), y hayan dado pruebas de adhesión a
los sanos principios por donde han ido los hombres sabios que en
España florecieron en virtud y doctrina, y con ella dieron gloria a
la Iglesia y al Estado. Pero si por desgracia los Prelados hallaren
que alguno o algunos pusieren estorbo al logro de tan saludable
providencia, o algún otro hecho abusivo, al cual no puedan en uso
de sus facultades ordinarias proveer de remedio, me informarán
de ello, pasando a mis manos las noticias puntuales y exactas que
tuvieren, para que Yo provea lo que convenga. Y espero de su zelo y
de sus obligaciones como tales Prelados, y que son del mi Consejo,
que no excusarán diligencia en cosa tan importante para el bien de ·
la Iglesia y del Estado; de cuya armoniosa unión y mútua 2yuda
pende la felicidad del reino" 29•
Dicho decreto despertó las apetencias de muchos clérigos que
superpoblaron la Corte, provocando drásticas medidas en una Cir-
cular del Ministerio de Gracia y Justicia, con fecha de 26 de sep-
tiembre de 181-1 30•
29. DEcRETOS DEL REY, I, 28.
30. Dlx:. REY, I, 283-288: ~ .. .Los que obtienen Dignidades, Prebendas y Be-
neficios eclesiásticos.... desentendiéndose del cumplimiento de sus sagradas obli·
gaciones, se ocupan exclusivamente en promover (en la Cortel importunas soli·
citudes de las Prebendas más pingües de la Iglesia de España, sin los requisi·
tos indisp.msab~es par.. aspinr a~; nunca ila <Aebicto ser mayor el escktdalo
de este abuso que en la época pres<>...nte, en que reducido en gran manera el nú·
mero de los Ministros del altar por una consecuencia necesaria de haberse
prohibido por las llamadas Cortes generales y extraordinaTias la p::o~.sión de
las vacantes eclesiásticas, son muchas las Iglesias cuyos individuos actuales no
bastan para el desempeño de sus obligaclones con respecto al culto divino, y
todas generalmente claman por su aumento mediante la provisión de las va·
cantes... Imitando el religioso egemplo de sus antiguos predecesores, según se
advierte en las leyes IV, V, VI y VII del título XV, libro 1.• de la Novisima Re-
copilación, y en el XIII de título XVIII del mismo libro...• (S. M.) se ha ser-
vido mandar que se guarde, cumpla y observe con la mayor religiosidad lo
contenido en Jos artículos siguientes. 1.• Todos los eclesiásticos, de cualquier
clase que fueren, que actualmente existan en la Corte sin empleo ni domicilio ·
·466 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
prestación de auxillos que los apuros del reino exijan ... , es su R . voluntad que ...
se expidan al ·intento las órdenes correspondientes para la entrega de los Lrutos
concordados que existieren, y los documentos que n ecesitaren para el benefi-
cio de ellos y las sucesivas recolectaciones , s in perjuicio de que el importe de
los granos y demás especies procedentes de ambos ramos que los Cabildos, ha-
yan aprontado o aprontaren en adelante para la s ubsistencia de las tropas, va-
luados a precios corrientes, se admita en Tesoreria como dinero en cuenta de
plazos... ; siendo también del cargo de los Cabildcs la fom::ación y rendición en
cada año de las cuentas respectivas a los !rutos de ambos ramos del anterior ,
las cuales habrán de remitir a la Contaduria general de la Dirección general
d e Rentas, de cuya at.ribución es la inspección y conocimiento inmediato de
los referidos ramos, para que las ~xamine y se verüique la correspondiente
a!)ro~cióc Callán<tolas confonnes... Mad.- id, 18 Febrero de 1815.~
" R. Orden expedida por el M. de Haczend4: se previene a los C3bildos de Lls
S . I . Catedrales que tengan en adminlstración el Excusado y Noveno -<:Ul/OS
ramos corren por R. O. de 24 de SeptieTI'Iére de 1814 (Dtr.. REY, I , 282),. confinna-
da por la de 18 de Fe'tn"uo último (Dn:. REY, n . lOS-109}-, se entiendan direc-
tamente bajo el sistema que regia en 1808 con la Dirección general de Rentas...
Madrid, 30 de Junio de 1815."
35. Dtx:. REY, II, 397: "Ci rcular del 111. de Hacieneúl : previene se circula la
d e 7 de Noviembre último para que los Colectores de anualidades y vacantes
egecuten con actividad la recaudación de sus productos. y evitar las dudas que
puedan ocurrir a algunos venerables Cabildos eclesíástlcos... Madrid, 7 de Ju-
nio de 1815 . ~
36. DEC. REY, II, 85-86.
470 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
otros semejantes); y últimamente para que Yo con segura conciencia pueda apli-
car libremente, según más convenga en el arreglo del sistema, al tesoro Real
o al Crédito público los caudales y fondos procedentes de gracias pontificias
concedidas... A cuyo fin se observarán y cumplirán inviolablemente los artícu-
los siguientes: 1.• Los gastos necesarios se ajustarán precisamente en lo suce·
--sivo a un presupuesta fijo de cada Ministerio y de mi Casa Real, al valor líqui-
do de las rentas y contribuciones, a la posibilidad de los contribuyentes, Y a
las verdaderas necesidades del Estado. 2.• Estos presupuestos se fijan para el
presente año de 1817 del modo siguiente: Casa Real, 56.973.600 reales; M. Estado,
15.000.000; M. G. y Justicia, 12.000.000; Guerra, 350.000.000; Marina, 100.000.000;
Hacienda, 110.000.000. Y se reservan para gastos útiles en beneficio y fomento
de la agricultura, artes y comercio, 10.000.000; además 30.000.000 para gastos im·
previstos eventuales de todos los Ministerios; y otros 30.000.000 para pago de
· deudas atrasadas preferentes de Tesorería ... "
44. Da::. REY, IV, 292: "Cir. M . Hacienda: se derogan los prit•ilegics que es-
taban concedidos a Cuerpos militares y particulares, comunidades eclesiásticas
y otras personas para la introducción de géneros extrangeros con libertad de
derechos, aun los destinados para objetos de la Real Hacienda; en las aduanas
·.se cobren todos los derechos a los frutos, efectos y géneros extrangeros que se
introduzcan. Madrid, 7 Junio de 1817."
45. Da::. REY, IV, 403: "R. Orden comunicada por el M. Hacienda al Tesorero
general: se manda -en aclaración a las dudas propuestas por el Tesorero gen.
sobre el R. decreto de 30 de Mayo último- que para la entrega del producto
liquidado de Espolios y Vacantes se entienda el Colector con dicho Tesorero.
Madrid, 21 Agosto de 1817."
46. DEC. REY, IV, 443: "R. O . com. p . M. Hac. a la Dirección de Rentas: ex-
presa que los bienes de la Orden de San Juan de Jerusalén están sujetos como
los demás de los regulares, en el sitio o lugar en que se hallen, al pago de la
contnoución general del reino y subsidio extraordinario de los treinta millones
del Clero secular y regular : a todo lo cual el Stmo. Padre se dignó acceder sin
ninguna restricción y en los términos más amplios. Madrid, 8 Septiembre de
. 1817."
Da::. REY, IV, 528-529: " R . C. com. p . M . Hac. a la Dir. de Rentas: El Rey
N . S. ha tenido a b ien declara¡- que las anualidades de prebendas eclesiásticas
concedidas para extinción de la deuda del Estado, están sujetas al pago del
subsidio extroordinario de los tre:nta millon.e s del clero secular y regular, y de
la ccntribución general del reino, según la naturaleza de los bienes que formen
la dotación de las prebendas; y que dichas anualidades deben entregarse por
los Cabildos a los c.:>misionados del Crédito público con las deducciones co-
rrespondi.e ntes a la contribución, al subsidio, o a ambos puntos, como si hu·
biesen de hacerse a los Prebendados cuyas vacantes se hallan aplicadas a aquel
establecimiento. Madrid, 10 Octubre de 1817."
47. Da::. REY, IV, 528: "R . O. com. p . M . Hac. a la Dir. de Rentas: se declara
que los ramos de Tercias Reales, Excusados, Noveno, Diezmos novales y exen·
tos, Y demás, como rentas del Estado, no se hallan sujetos a la contribución
general, Y tampoco al Subsidio extraordinario temporal del Clero, en atención
a no hallars e poseídos por eclesiásticos, que es la circunstancia señalada por
-el Sumo Pontifice para su concesión. Madrid, 10 Octubre de 1817.
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCUJ>.-\D BORBONICA 473
48. Da:. R.F:Y, IV, 529-530 : " R. O. com. p. M . Hac. a l4 Dir. de Rentas: Con
esta fecha digo al Intendente de Gataluña lo siguiente : Enterado el Rey N. S.
del papel de V. S . de 19 de Setiembre último , y de la representación de la Jtm·
ta principal de la contribución general de esa provincia de la misma fecha, en
q ue manifiesta la resolución que ha tomado interinamente bajo la R. aproba-
ción de q ue pagasen la cuota de contribución general que les correspondiese
todos los perceptores de diezmos, atm eclesiásticos que no son Curas Párro-
cos, mintras no justifiquen que los que poseen no son rigurosamente espiritua--
lizados; se ha servido S. M. declarar que su soberana intención a l tiempo de
impetra r del Sumo Pontífice la bula de 15 de Abril de este año ha sido de de-
jar inmtmes y exentos de contribución los derechos de estola o pie de altar,
Y todos los diezmos que posee el Estado secular y regular, y se llaman vulgar-
mente no secularizados; a diferencia de los diezmos que poseen los legos, como
sin violenta interpretación se entendió en todas las provincias. Por consiguien-
te ha tenido a bien S. M. mandar al mismo tiempo que no se imponga en ésa
contribución a todos los diezmos que posee el Clero secular y regular, y q ue
tome V. S . las más enérgicas providencias para que la cuota de contribución
de los dos tercios vencidos de este año se subsane y se devuelva inmediatamen-
te a los perceptores eclesiásticos de diezmos lo que por esta razón se les haya
exigido indebidamente. Madrid, 10 Octubre de 1817."
DtX:. R.F:Y, IV, 534: "R. O. com. p. M. Hac. a l4 Dir. de Rentas: expresa que
los diezmos que posee la Universidad de Alcalá de HenareS están exentos del
pago de contribución general., pero no de la del Subsidio eclesiástico a que per-
tenecen: estos di.e zmos consisten en varios beneficios curados, servideros y sim-
ples que el cardenal Cisneros agregó con autoridad apostólica al Colegio ma-
yor de San Ildefonso para su d otación y otras ftmdaciones, cuyas cargas des-
e m peña la Universidad por medio de Curas o Tenientes. Madrid, 12 Octubre d e
1817."
DtX:. R.F:Y, IV, 640: " R. O. circular de la Dir . de Rentas: Habiendo acudido al
Rey N. S. las abadesas y Comunidades de monjas de la ciudad de Oviedo soli-
citando que los diezmos de todos los convent.os de monjas se miren con la
misma consideración que los de todas las demás comtmidades y personas ecle-
siásticas, y en consecuencia exentos como los otros de la contribución civil, de-
volviéndoseles las cantidades que se les hubiere :!xigido... Disponga no se in-
cluyWl los diezmos ~r.ecientes a monjas en ia C'Jntribución ~eneral . y se las
devuelvan cualesquiera cantidades percibidas; pues es bien sabido que las co-
munidades de religiosas corresponden al Clero regular, y están sujetas por sus
ó.iezmos al Subsidio eclesiástico. Madrid, 1 Diciembre de 1817.~
DtX:. REY, IV, 689 : uR . O. com. p . M . Hac. a la Dir. de Renl4s: expresa que
no están exentas de la contribución general del reino l'lS propiedades territo-
riales de la Orden de San Francisoo. Madrid, 23 Dicietr.bre de 1817."
DtX:. RI:Y, IV, 689: uP... O. com. p. M. Hac a la Dir. de Rentas: se declaran
exentos de la cor¡tribución general del reino los de rechos de Pilas (qu e consis-
ten en diezmos no secularizados, o como poseidos por eclesiásticos que per-
tenecen a la fábrica de la S . l. Catedral con aplicación al culto divi.:lo, y al
ornato y subsistencia del templo). pero no los llamados de Tercias o Be-
neficios tercer os (que consisten en cierta parte de diezmos que del acervo co-
mún perciben los Curas o Beneficiados por e l cuidado y trabajo de colectar
los !rutos decimales, atendiendo a que este premio, atmque sea en diezmos y
no en dinero, es de la misma naturaleza que e l salario dado por motivo pura-
mente temporal a los Administradores, en cuyo caso dejan de considerarse ecle-
siásticos, y se reputan seculares los mismos diezmos que lo son en su primera
y directa pertenencia). Madrid, 29 Diciembre de 1817."
R! LICIOS IDAO H l S PA!(A.•• - Jl
474
DEC. REY, Apéndice, pág. 407: "R. O. com. p. M . Hac. a la Dir. de Provisiones :
se declaran sujetos al pago de la contribución ~eneral y Subsidio eclesiástico
los bienes territoriales propios de Maestrazgos de las Ordenes, como los diez.
mos y bienes del estado regular, según R. O. de 8 de Septiembre de 1817 (DEC.
REY, IV, 443). Madrid, 16 Octubre de 1817.·
DfX:. REY, Apéndice, 438: "R. O. com. p . M . Hac. a 14 Dir. del Créditc público:
se manda que por las vacantes de capellaoias y patronatos se perciba sólo una
media anualidad con que únicamente están gravadas por R. cédula de 10 de Fe·
brero de 1805, y que el exceso que se ha exigido se devuelva a sus poseedores por
derecho de sucesión. Madrid, 12 Diciembre de 1817."
. DfX:. REY, V, 7: "R . O. com. p . M. Hac. a la Dir. de Rentas: se declaran exen-
tos por R. decreto de 30 de Mayo de 1817 (DfX;. REY, IV, 210) de la contribución
general los bienes que están gravados con misas, responsos, aniversarios, ofren-
das y otras fundaciones piadosas, que causan derechos de estola o pie de altar
como tales; pero no los bienes gravados con fundaciones que causan tales de-
rechos, sin ninguna otra deducción más que la del caudal anticipado que hace
productiva la propiedad, pues después de deducidos todos los participes de sus
productos han de satisfacer la cuota proporcional de contribución que a cada
uno corresponda en conformidad de la R. O. de 12 Septiembre de 1817 (l)Ec.
REY, IV, 466). Madrid, 3 Enero 1818."
DfX:. REY, V, 15: "R. O. com. p. M . Hac. a la Dir. de lientas: Habiendo dado
cuenta al Rey N . S. de la adjunta exposición de Fray Alonso de Santa Maria de
Guadalupe del Orden de San Gerónimo, quien se queja de la equivocación con
que proceden los Intendentes a incluir en la contribución general las Tercias
Reales que poseen, se ha servido S. M . nuevamente declarar no deben incluirse
en la contribución como diezmos que son. Madrid, 15 Enero de 1818."
DfX:. REY, V, 155: "Circular de 14 Dir. de Rentas: expresa que en la contri-
bución general no deben incluirse las fundaciones piadosas tanto como sea la
parte de !lquélla repartida y satisfecha, pero sí los productos de los bienes y
fincas de Ia.c; fundaciones (ante el Doctor D. Patricio .Magano, Capellán mayor
de Trinitarias de esta Corte, e indivíduo eclesiástico de la Junta principal de
contribución de la provincia, que no alcanza a penetrar cómo pueda verificarse
queden salvos, inmunes e <ilesos los derechos de estola o pie de altar, como
exige la bula de 15 de Abril de 1817). Madrid, 4 Abril de 1818."
DfX:. REY, V, 131: "R. O. com. p. M. Hac. a la Dir. de Rentas: se reitera cuan-
to está prevenido para que sobre los diezmos poseídos por personas eclesiásti-
cas no se exija contribución con motiv:> de la reclamación de la Comunidad
de Religiosas Franciscanas de la Purísima Concepción de la villa de Almonacid
de Zurita (Madrid), devolviéndosele las cantidades exigidas por la Justicia de
la villa de Escaricbe sobre los diezmos de la tercia. Madrid, 16 Marzo de 1818."
DfX:. REY, V, 'll:17 : " R . O. com. p. M. Hac. a 14 Dir. de Rentas: se declaran
como eclesiásticos los diezmos del Priorato de Sar {cuyas ro..ntas disfruta la
R. Academia de San Fernando en la diócesis de Santiago), sujetos al pago del
subsidio eclesiástico, y no a la contiibución; pero que la.c; demás propiedades
y bienes están sujetos a la contribución y su!lsidio, como se verifica con las
de todos los eclesiásticos del clero secular y regular. Madrid, 26 Abril de 1818."
DEC. REY, V, 238: "R. O. com. p . M. H!lC. a la Dir. de Rentas: se declaran
sujetas al subsidio eclesiástico de los treinta millones las Encomiendas que ad-
ministra el Crédito público, y no a la contnoución general. Madrid, 25 Mayo
de 1818."
DEx:. REY, v, 452-454: "Circular del Consejo Real: se previene por la R.. O.
inserta cuanto ha de observarse para la más breve colectación del subsidio ex-
traordinario de los treinta millones: Jos Párrocos de la capital y de.m ás del Obis-
pado de León cobren el contingente del subsidio en sus parroquias, y lo en-
treguen en tiempo oportuno a sus respectivos Arciprestes, con una razón cir-
cunstanciada de los individuos que no le hayan satisfecho, para que a su con-
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 475
giosidad" para exigir los pagos, por ejemplo los diezmos 49 , mante-
niendo incluso la Manda P ia Forzosa establecida por las Cortes de
Cádiz de 3 de mayo de 1811 so. Tal rigorismo procuraría enormes
antipatías y resentimientos clericales para D. Martín de Garay, lla-
mado el Nécquer de España s• : el audaz Ministro de Hacienda, que
desde el 23 de diciembre de 1816 interinamente y desde el 29 de
enero de 1817 en propiedad, había luchado denodadamente, en sus
últimos días conseguía un decreto complementario de su obra 52,
secuencia procedan conforme a derecho en virtud de comisión, y con subordina-
ción a los Subdelegados d e la Comisión apostólica; que los Arciprestes estén
obligados a hacer efectivo al fin del plazo en la tesoreria del r a mo todo el con-
tingente de su arciprestazgo, y no egecutándolo o acreditando las diligencias
j udiciales o extrajudiciales practicadas para el cobro, se proceda contra ellos
por los citados Jueces subdelegados a solicitud del Cabildo, como encargado de
la colecta general de la diócesis o de sus comisionados al efecto; y finalmente
que lo mismo se practique con las comunidades religiosas. colegios y otras
corporaciones que por tener diezmos y fincas en muchos pueblos pagan reuni-
do lo que les corresponde en todo, entend!éndose con el Cabildo a este fin. y
por cuya razón se llaman de plana mayor... Madrid. 25 de Agosto de 1818 .~
4.9. DEc. REY, IV, 587: "Circular del consejo Real: se reencarga a las Justi-
cias de todos los pueblos del reino cuiden que los pagos de diezmos que se
egecutan para la Iglesia y el Estado se efectúen con la exactitud y religiosidad
que previene la circular de 9 de Septiembre de 1807 (según las leyes 2.• y 3.•,
tit. VI, lib. 1.• de la Novfsima Recopilación) para contener Jos fraudes y usur-
paciones de diezmos. Madrid, 8 de noviembre de 1817."
50. DEc. REY, IV, 628: •Circular del M . Hacienda: sobre que la 17U1nd4 pía
forzosa establecida por las Cortes en 3 de Mayo de 1811 se continúe exigiendo
en la forma y orden que se encarga : de doce reales en España y de tres pesos
en América y Asia, en todos los testamentos y herencias ab intestato de aque-
llos y estos dominios; como asignaciones a viudas, hijos, madres viudas y pa-
dres pobres de los que fallecieron o quedaron inutilizados de resultas de la
gloriosa lucha pasada; su dirección y cobro corra desde ahora al cargo de la
Colecturia general de Espolios y Vacantes (no de las Juntas pías religiosas crea-
das por dicho decreto). Madrid, 26 Noviembre de 1817."
51. CARNE, Ecsamen critico, 252-256.
52. DEc. REY, V, 383-395: kR. decreto: ... Las medidas prudentes y económi-
cas adoptadas en aquel decreto (de 30 de Mayo de 1817) no han podido produ-
cir aun todo el efecto deseado atendiendo la gravedad del mal que nos aqueja-
ba. .. Por estos motivos y consideraciones Me be limitado por ahora a distribuir
entre Jos acreedores, según la diferente naturaleza de los créditos, los fondos
que permiten las circunstancias de la nación : ... Artículo 16. Para el pago dé
réditos de amortización de la deuda aplico los arbitrios siguientes: ... Los pro-
ductos liquidas de las E:lcomiendas vacantes y que vacaren de las Ct.at.ro Or-
denes Militares y de la de San Juan de J erusalén. Una anualidad además de
la vacante de las m.io;mas Encomiendas, a excepción de las piezas curadas de
las cuatro Ordenes Militares y de la de San Juan de Jerusalén, inclusas sus
Dignidades mayores y menores que por motivos muy singulares tenga Yo a
bien proveer, debiéndose satisfacer aquélla por el provisto, y contarse desde el
dla que correspondan a éste los productos de e1la según los estatutos de las
Ordenes. El producto de dos años inmediatos a la vacante de todas las Digni-
dades, Canonicatos, Prebendas y Beneficios ecle..c:iásticos de cualquier especie de
presentación Real o eclesiástica que se conou:an con cualquier titulo o deno-
minación, así de seculares como de regulares , a excepión de las Dignidades con
presidencia en el Cabildo, las prebendas de oficio y las piezas curadas, confo-r-
me a la bula expedida por S. S. el Papa Plo VII en Roma el día 26 de Junio
476 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
cada año, dando lugar preferente a los párrocos que más hubiesen sobresalido
en el cumplimiento de sus obligaciones, y a los catedráticos de universidades y
seminarios que mejor hubiesen llenado sus destinos. Palacio, 13 de Noviembre
de 1819.w
El 30 de :-eptiembre de 1815, una circular de la Cámara del Consejo aun de-
cidia "acerca del valor legal de los concursos a curatos prebendas de oficio y
dignidades con cura de almas, celebrados bajo la dominación enemiga~ (DEc.
REY, Apéndice, pág. 61-65).
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 479
Los Obispos auxiliares pagarán seiscientos y sesenta reales. 21. Por las repre-
sentaciones para curatos o beneficios que tengan aneja la cura de almas se·
observará la misma regla del uno por ciento de su valor. 22. Por las respecti-
vas a toda clase de prebendas y beneficios el tres por ciento. 23. Por las cédu-
las auxiliatorias de planes beneficiales, nombramiento de Provisores, redotacio-
nes de Curatos, separación o desmembración de ellos, permutas eclesiásticas,
y otras de esta clase, doscientos reales. 24. Por las certificaciones que se dan
a los pases de bulas o rescriptos de Roma o del Nuncio, cuarenta reales. 25. Por
las de dispensas matrimoniales, ctiez reales. Por los duplicados y triplicados
que se ctieren de cualquiera clase de despachos, la cuarta parte del principal . ..
Madrid, 15 Mayo de 1822. Miguel de Alava, Presidente."
"Orden de 25 de Junio de 1822: Las Cortes han examinado la consulta que
V. E . (Secr. E . D. de G. y Just.) les dirigió en 4 del corriente acerca de añadir
al presupuesto de gastos de la Secretaria de su cargo los sueldos de los Jueces
de primera instancia, de los empleados en el tribunal de la Nunciatura y gas-
tos de la Agencia de Preces en Madrid y Roma, y en su consecuencia se han
servido declarar: . .. 2.• Que en cuanto al tribunal de la Nunciatura está ya acor-
dado se satis!agan sus sueldos por el imprevisto general, y por lo mismo no
hay necesidad de tomar nueva resolución; y 3.• Que no siendo justo satisfagan
los pueblos a costa de sus contnouciones los sueldos de los empleados en la
Agencia de preces a Roma, cosa jamás usada, se prevenga al Gobierno que forme
una tarifa de los derechos que deban exigirse a los que solicitasen bulas y gra-
cias de Roma, con cuyo producto se mantengan aquellos empleados, presentán-
dola a las Cortes para su aprobación, o llevándola a efecto interinamente, siem-
pre que ~tas concluyeren sus sesiones antes de la aprobación... "
64 . DEC. CoRTES, VI, 116. ~302: "Orden de 14 de Septiembre de 1820: Las
Cortes autorizan el Gobierno dP. S. M. para hacer uso de los fondos de Espo-
lios, Pio e Indulto cuadragesimal, con el fin de atender a la desinfección de
los pueblos cte la isla de Mallorca que han sido invactidos del contagio... Sr. Se-
cret. E . D. de la Gobernación de la Peninsula."
"Las Cortes, usando de la facultad que se les concede por la Constitución,
han decretado : 1.• Que el derecho post mortem y los demás que por concesiones
pontificias o estatutos se observan en las iglesias, se perciban desde la muerte
del obtentor, y se cueoten los do!c años de vacante5, despaés de cumplidas aque-
llas obligaciones si son por tiempo determinado; y en caso de serlo por tiempo
indefinido, después de cuatro meses, aplicando Jos !rotos de éstos a los obje-
tos que tengan derecbo a percibirlos. 2.• Que el Consejo de Estado, como está
mandado, exijan de los Cabildos, y la Junta nacional del Crédito público de los
Colectores, noticia del ctia en que haya vacado cada prebenda, de las obligacio-
nes que tenga de las que habla el articulo anterior, y de las demás que consi-
de:-e oporwno. 3.• Que no Sf; hagan l3s consultas hasta pasado el ténr.ino de
las mencionadas obligaciones, y un año y medio nuis, es decir, medio año RO-
tes de concluir los dos aiios de vacante. 4.• Que en los titulos se exprese el
ctia en que fenecen, imponiendo al provisto la obligación de tomar en el mismo
la posesión, y continuando en el ctis!rute de las r entas de la prebeda que deja
hasta aquel mismo ctia, en que fenecen los referidos dos años: s.• Que en la
anualidad que debe percibirse en cuatro años empiece a contarse desde la to-
ma de posesión; y si no se toma al vencimiento de los dos años, queden los
!rotos desde este ctia al de la toma de posesión, a quien correspondan por de-
recho común o peculiar de la Iglesia. 6.• Las reglas anteriores son aplicables a
las ctigniclades, canongfas, prebendas y ben.e ficios de patronato particular, lai-
cal o eclesiástico, cuyas rentas sean de la misma naturaleza que las de los
beneficios de R. Patronato. Y 7.• Lo son asimismo a Jos beneficios patrimonia-
482 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
les que no tienen gravamen de cura de almas, a las capellanías dotadas con
rentas decimales o bienes y gracias de la Corona, y a las de libre presentación,
aunque no tengan rentas de igual naturaleza; pero no a los que además de no
tener otras propiedades ni rentas que las del patrimonio del fundador o de su
familia, pertenecen a parientes o personas determinadas por llamamientos que
hacen forzosa la presentación. Madrid, 7 Noviembre de 1820. Josef M.• catatro-
va, Presidente."
65. DEC. Conn:s, VII, 8-9. 10.11; IX, 37. 541-542: "Orden de 20 de Marw de
1821: Las Cortes se han enterado de Jos dos expedientes remitidos por el an-
tecesor de V. E. (Secr. E . D. de Hacienda) con oficio de 28 de Febrero último,
uno formado a consulta del Comisario general de Cruzada sobre si ha de se-
guirse la costumbre de repartir bulas a los que asisten a los actos de su pu-
blicación, a los Secretarios del Despacho y demás Empleados y Cuerpo racio-
nes de beneficencia; y otro de la Casa de Expósitos de esta Corte y colegio de
la Paz, cuyos individuos han sido socorridos con los sumarios precisos por vía
de limosna, y no regalía, según R. orden de 26 de Enero último; y en su vista
se han servido resolver que se distnouya bula a los que asisten a su publica-
ción, como una honorífica recompensa de su asistencia.; que en caso contrario,
como manifiesta dicho Comisario general d.e Cruzada, seria menester satisfacer
en dinero mucho más que el valor de los ciento y cincuenta o ciento y sesenta
sumarios que se distribuyen; que así se mandó por orden de la Regencia de
24 de Enero de 1812, mayormente cuando ninguno de los que concurren a la
publicación sea empleado co.n sueldo, que son a los que se les ha privado per-
cibir más que el que disfrutan a pretexto de regalías, gratificaciones o actea-
las, por lo cual ninguno del Tribunal de Cruzada ni los demás empleados de
la dependencia tomarán las bulas de gracia que hasta aqui; que siga la aboli-
ción que decretaron las Cortes generales y extraordinarias en 19 de Abril de
1811, en cuanto a las bulas que se repartían a las Secretarias del Despacho, M.a-
yordomia mayor, Consejos, Ayuntamiento de Madrid y otras corporaciones; pues
si las urgencias de la Nación hicieron adoptar estos ahorros y economías, no SOl:!
menos perenlorias y graves las del día, en que se tocan los apuros del Erario, y
por lo mismo la necesidad de economizar la distribución y reparto de 16.062 bu-
las de vivos, 488 de ilustres y 2 de lacticinios, y apoyado en estos fundamentos
mandó el Gobierno en 27 de Noviembre de 1820 que se llevara a efecto la su-
presión de esta regalía, a excepción de las bulas para SS. MM_ y AA., y que con-
tinue la limosna que hasta aqu.i 'han estado disfrutando las casas de Expósitos
y Niñas de la Paz, cuya costumbre debe respetarse por la naturaleza del esta-
blecimiento, a cuyo favor está concedida esta limosna."
"Las Cortes, habiendo ex.a:ffiinado la propuesta de S. M.. sobre la tasa hecha
por el Comisario general de Cruzada de la limosna con que han de contn1luir
los fieles de todas las provincias de la Monarquía Española por las bulas del
año próximo de 1822, han aprobado: Por cada sumario común de vivos se p;;.-
garán i;rcs reales de vellón. De difuntos, id. de i.:l. De ilustres, diez y ocho rea-
les de vellón. De composición, cuatro reales die2. y ocho maravedis vellón. De
lacticinios de primera clase, 54 rs. v. De segunda, 18 rs. v. De tercera, 13 rs. y
8 mrs. v . De cuarta, 9 rs. v. De quinta, 4 rs. y 18 rnrs. v. De indulto de primera
clase, 36 r s. v. De id. <!e segunda, 12 rs. v. De id. de terce:::a, 2 rs. v. Como es
posible que en algunas de las provincias de Aragón, Cataluña, Mallorca, Nava-
rra, Valencia, Orihuela y canarias, en cuyos s umarios se estampaba la limos-
na en moneda peculiar a ellas, no tengan conocimiento exacto de la de vellón;
se añadirá a los sumarios destinados para las mismas la cláusula, después de
la limosna, o su equivalente en moneda del país. Madrid, 21 Marzo de 1821. An-
tonio cano Manuel, Presidente ...
"Orden de 27 de Marzo de 1822: Las Cortes, al mismo tiempo que se han ser-
vido relevar al Comisario general de Cruzada de la responsabilidad que se le
tiene impuesta de poner a disposición del Gobierno 20.000 reales para la apli-
R.EUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 483
cación de limosnas que se distribuyen por San Juan y Navidad, han declarado
que debe cesar esta práctica, por ser primero pagar las atenciones y cargas de
justicia que se bailen en descubierto que las de gracia... Sr. Secr. E . D. de
Hacienda."
"Las Cortes, usando de la facultad que se les concede por la Constitución,
han decretado lo siguiente: Art. 1.• El Comisario general de Cruzada hará in-
dependientemente de toda otra Autoridad la distribución de las bulas a sus Sub-
delegados en las diócesis, en cantidad suficiente intervenida por la Contaduría
general del ramo. 2.• Los Subdelegados las distribuirán a los Párrocos de la
capital y pueblos subalternos con intervención del Administrador gene.r al. 3.• Los
Párrocos las distribuirán a los vecinos en la forma y método basta aquí ob-
servado. 4.• A los Párrocos se les abonarán dos maravedises por bula de las
que expidieren. Madrid, 29 Junio de 1822. Alvaro Gómez, Presidente. n
66. DEc. CoRTES, VI, 196. 222-223; IX, 68-69: «Orden de 11 de Octubre de 1820:
Las Cortes se han enterado de la exposición del Intendente de Valladolid y
ejemplar de la circular expedida por los Gobernadores de aquel obispado, con
motivo de la resistencia al pago de diezmos, que V. E. (Secr. E. D. de Ha-
cienda) dirigió de R. orden con fecha 5 de Setiembre último, para la resolución
de las mismas; y en vista de exposición de la Junta de diezmos de Avila y con-
testaciones de aquella Diputación provincial sobre el propi.o asunto, dirigidas
por V. E. en 22 del mismo Setiembre, y de otras reclamaciones de igual na-
turaleza, se han servido resolver que no habiendo hecho las Cortes hasta aho-
ra novedad alguna en el pago de diezmos, use el Gobierno de sus facultades."
«Orden de 17 de Octubre de 1820: Las Cortes, en vista de la exposición que
acompañamos a V. E. (Secr. E. D. de la Gobernación de la Península) de la
Junta de Se!ioras encargadas de la Inclusa y Colegio de la Paz, manifestando
el extremo de indigencia a que ha llegado dicha casa por el atraso en el pago
de las asignaciones que le están hechas, han acordado que el Gobierno, exci-
tando todo su zelo, emplee el lleno de su autoridad en hacer que el M. R. Arzo-
bispo de Granada sin la menor dilación h2.ga efectivo el pago de los 200.000 rea-
les que adeuda por la pensión de 40.000 que le fue impuesta el año de 1815 a
favor de esta =- Que en iguales términos cumpla e! R. Obispo de Oribuela
con la entrega de 95.000 reales que también parece adeudar su tesorería por
los 38.500 reales que anualmente debe suministrar a la misma casa, aunque sea
necesario que a uno y a otro Prelado, si lo resistilOren ~mo basta aqui, Si! les
o::upasen las temporalídades; disponiendo el Gobierno que se hagan efectivas
las demás pensiones eclesiásticas concedidas por S . M. a esta casa."
•r.as Cortes, habiendo ex:aminado la propuesta de S. M. sobre que ei Colec-
tor general de Espolios y Vacantes verifique la cobranza de los atrasos de me-
dias anatas y mesadas eclesiásticas, han aprobado lo siguiente: Que la Colec-
:uria general, mientras subsista, tenga el encargo de determinar cuanto antes
sea posible los negocios pendient.es en ella, usandC' de las facultades que por
las Bulas y R. decretos competían al Colecto:; entendiéndose que la SUf,lresión
del Tribunal o Autoridae. que conocía en la exacción de mesadas y medias anatas
eclesiásticas hecha en el decreto de 29 de Junio de 1821 era sólo para lo veni-
dero, y no para lo pasado y todavía pendiente. Madrid. 13 de Abril de 1822. Ca-
yetano Valdés, Presidente."
67. DEc. CoRTES, VI, 145-149 : "Decreto XXXVIII : Supresión de toda especie
de vinculaciones: ... Art. 15.• Las iglesias, monasterios, conventos y cualesquie-
ra comunidades eclesiásticas, así seculares como regulares, los hospitales, hos-
picios, casas de misericordia y de enseñanza, las cofradías, hermandades, en-
comiendas y cualesquiera otros establecimientos permanentes, sean eclesiásti-
cos o laicales, conocidos con el nombre de manos muertas, no pueden desde
484 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
que les están unidos, cuyas rentas continuarán percibiendo por ahora hasta el
arreglo definitivo del clero. 3.• Por esta aplicación el Estado r enuncia el nove-
no, excusado, tercias Reales en Castilla, y tercio décimo en la corona de Ara·
gón, diezmos novales y de exentos, y de nuevo r iego, y cualesquiera otros que
la Nación perciba; y los seculares poseedores de diezmos cesan en la percepción
de las rentas y partes decimales que perciban, exceptuando por lo r espectivo
al Estado las vacantes de las mitras y de las dignidades, canongías y preben·
das de las iglesias catedrales, colegiatas y magistrales, no siendo de las que
se comprendan en la supresión propuesta en el proyecto de ley para la refor·
ma y reducción del clero. 4.• Para indemnizar a los seculares partícipes de diez-
mos se aplicarán todos los bienes raíces rústicos y urbanos, censos, foros, ren-
tas y derechos que poseen el clero y las fábricas de las iglesias. Gozarán de la
indemnización las personas y corporaciones que posean rentas en grano o di·
nero, a cuya satisfacción estén obligados los diezmos; y en cuanto a las fincas
pertenecientes a prebendas, capellanías o beneficios de patronato pasivo de san-
gre, muertos los actuales poseedores, deben volver a las respectivas fanu1ias.
5.• Se exceptúan de lo determinado en el artículo anterior los bienes prediales
y casas rectorales poseídos por los Curas párrocos o Curas beneficiados que tie-
nen la cura de almas, como asimismo las que los RR. Arzobispos y Rr. Obispos
habiten en las capitales, inclusas las huertas o jardines. .. 10.• Se establecerá
una Junta diocesana en la capital de cada obispado para hacer la distribución
de las dotaciones al clero y a las iglesias, con arreglo a las bases que adopta-
ren las Cortes en el plan eclesiástico. .. Queden suprimidos todos los subsi dios
que pagaba el clero, las medias anatas y las anualidades; pero las pensiones que
se hallan impuestas sobre las mitras y sobre las dignidades y otros benefcios
eclesiásticos de cada diócesis, se pagarán del total de las rentas de ella... 17.•
El clero pagará por via de subsidio 30 millones de reales sobre el valor de los
diezmos, repartiéndolos por esta vez la Dirección de contribuciones directas en-
tre las diócesis, por el presupuesto que ofrezca el producto del noveno en el
año común del último quinquenio; debiendo concurrir a este pago los Comen-
dadores de las órdenes militares que existen, conforme han concurrido al pa-
go del subsidio anteriormente. 18.• La Junta diocesana pagará por tercios en
la Tesorería d e la provincia respectiva al contingente que le quepa, y si no lo
hiciese, el Intendente y empleado de la Hacienda harán efectiva la cuota, em-
bargando sin prorrateo las cillas de los diezmos más bien parados. Madrid, 29
Junio 1821. J . M.• Moscoso de Altarnira, Presidente."
"Las Cortes. . . han decretado: Art .... 5.• La r.llsma Junta queda encargada de
que ningún Párroco carezca de la debida y decente cóngrua; y para ello sobre
los predios reservados a los Curas en dicho decreto (primero de las Cortes so-
bre el sistema general de hacienda), y los derechos de estola que sean compa-
tibles,. les asignarán del acerbo común de diezmos y primicias la porción de
frutos que sea necesaria, incluyendo en este repartimiento a los Párrocos de
aquellas iglesias en que los Cabildos ecles iásticos ejercían o pretendian ejercer
c¡¡ra de almas... 7.• Si en alguna dió~esis el medio diezmo y primicia no alcan-
zase a cubrir la dotación del clero y del culto, lo hará presente al Crédito pú-
blico la Jur1.ta diocesana para la reservación de los bienes necesarios a dichos
cbjetos, y éste toman'. en consideración de acu~rdo con la visita nombrada por
las Cortes ... Madrid, 29 Junio 1821. J. M. Moscoso de Altarnira, Presidente."
"Las Cortes. .. han decretado: Art. 1.• Las Juntas dioces<mas que no hayan
distribuido todo el producto del medio diezmo y primicia recolectado hasta el
dia, perteneciente al año próximo pasado, harán inmediatamente bajo su res-
ponsabilidad la participación de existencia, quedando r esponsables los percep-
tores a la parte que les toque pagar del subsidio, hecha que sea la r ebaja in-
dicada en el art. 5.•. 2.• El "mínimum" de la cóngrua de los Párrocos, de que
habla el art. 5. del segundo decreto de las Cortes de 29 de Junio de 1821, será
únicamente por el año anterior la cantidad de 300 ducados, regulando los fru-
lt:!: l..ICtOSID.\0 HISP/SA ... - 32
'·
·._
490 ALFREDO 14ARTINEZ ALBIACH
tos de cada diócesis al precio del año de 20, último del quinquenio, y enten-
diéndose en los mismos términos que en dicho art. 5.• se expresan. 3.• Verifica·
da que sea esta cóngrua de los Párrocos, éstos con Jos demás participes de la
diócesis entrarán a percibir del sobrante que resultare, Jo que respectivamente
les corresponda en la forma que prescn"be el art. 4.• del citado decreto de 29
de Junio. 4.• Para que pueda. realizarse la cóngrua de que habla el art. 2.•, las
Cortes autorizan la rebaja del subsidio que sea necesaria en cada Obispado. 5.•
Al efecto las Juntas diocesanas, en unión con los Gefes politicos, Intendentes y
un individuo de las Diputaciones provinciales, o las personas que éstos desig·
naren cuando aquellas Juntas no residan en la capital, barán la regulación de
la rebaja de que habla el artículo anterior con respecto al producto del medio
diezmo y primicia de cada diócesis, y a las obligaciones que graviten sobre el
mismo producto. 6.• El Gefe político de cada provincia cuidará de que tenga
el debido cumplimiento lo dispuesto en los artículos anteriores. Madrid, 23
Abril 1822. cayetano Valdés, Presidente."
MOrden de 16 de Mayo de 1822: D. Vicente Antonio García del Valle, comisio-
nado especial por el Crédito público en la diócesis de Avila, ha hecho presente
que convendría se acordase por un artículo adicional al decreto de 23 de Abril
último la asistencia de la Junta de participes seculares, establecida por el de
29 de Enero anterior al repartimiento del medio diezmo y primicia para hacer
efectiva la cóngrua de los Párrocos. Y habiendo declarado las Cortes que por
el decreto de 23 de Abril no se ha derogado el de 23 de Enero, ni deja de te-
ner expeditas sus facultades la Junta de participes seculares de diezmos para
todo lo relativo a la averiguación del verdadero valor del medio diezmo y ma-
nifestaciones convenientes, lo comunicamos a V. E . {Secr. E . D. de G. y Just.)
de orden de las mismas Cortes para los fines que puedan convenir, acompañán-
dole adjunta la exposición que da motivo."
MLas Cortes... han decretado... : Art. 1.• Continuarán por el presente año las
Juntas diocesanas en la capital de cada obispado de que habla el art. 10.• del
decreto de 29 de Junio del aiio próximo anterior, para entender en la recauda·
ción y administración del medio diezmo y primicia, cuya cobranza se hará con
arreglo a las leyes y a la práctica, y en conformidad a los art. 1.•, 2.• y 3.• del
mismo decreto. 2.• Se sujetan al pago de medio diezmo y primicia los frutos
cie los novales o nuevas roturaciones que a la fecha de este decreto hayan cum-
plido y cumplieren en adelante el tiempo de su respectiva exención. 3.• Las
Junt&.s diocesaL.as se compondrán de las personas que se expresan en el art. 11.•
del citado decreto, y además del Gefe poHtico, Intenden~. un individuo de la
Diputación provincial nombrado por ella, y del comisionado especial del Crédi·
to público, o las perscnas que éstos designen cuando las Juntas no residan en
la capital. 4.• En todas las Juntas diocesanas se nombrarán suplentes de la
clase de párrocos y beneficiados que reemplacen a éstos en sus precisas ausen-
cias y enfermedades ... 11.• Las Juntas diocesanas remitirán al Gobierno en todo
el mes de Febrero del próximo año de 1823 estados puntuales y exactos del to-
tal producto del medio diezmo y prin:úcia que hay¡:n r ecolectado. 12.• El Go·
biemo formará un estado generai y circunstanciado d~ lc.s productos de que
habla el artículo anterior, y lo presentará a las Cortes con la posible brevedad,
a iin de que ástas lo tomen en consideración, y puedan en su vista acordar
definitivamente lo necesario a la decorosa subsistencia y dot4ci6n del culto y
clero. Madrid, 17 Juni? 1a22. Alvaro Gómez, Presidente.•
"Orden de 18 Junia de 1822: La Junta diocesana de Mallorca ha acudido a
las Cortes exponiendo las dificultades que ha encontrado de parte de algunos·
individuos, y especialmente en el Ayuntamiento del pueblo de Santa Margari-
ta, para colectar el medio diezmo, por considerarlo aquellos isleños como pres-
tación señorial, que pagaban antes del decreto de 29 de Junio del año último ar
Conde de Santa Maria de Fonniguera, y que por haber cesado las prestacio-
nes creen que no deben continuar el pago. En su vista, y de lo demás que ex-
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 491
pone la Junta, con presencia también de las bulas de los Papas Gregorio vn y
Urbano n , según las cuales no puede quedar duda fundada de la calidad de
die=os eclesiásticos y legos en los varios partcipes de la isla de Mallorca; y
sin embargo de no ofrecerla lo determinado en el citado decreto, considerando
las Cortes que mezclándose intereses suele obscurecrse lo más claro, bao ve-
nido en declarar: Que las Juntas diocesanas deben colectar y distribuir la mi-
tad de cuanto los partícipes decimales eclesiásticos y legos colectaban y per-
cibían antes del decreto de 29 de Junio de 1821; y que los contribuyentes a este
pago no puedan eximirse de él mientras no hagan constar no ser décima lo
que hasta dicha época se ha pagado con este nombre ... Sr. Secr. E. D. de G. y
Justicia."
"Orden de 20 de Junio de 1822: La Junta diocesana de Jaén ha representado a
las Cortes varias dudas que le ocurren sobre la inteligencia del d ecreto de 23
de Abril último; y considerando su importancia y la dificultad de resolverlas
en la presente legislatura por el p oco tiempo que queda de sesiones, y el cú-
mulo de negocios que imperiosamente exigen decisión; se bao servido las Cor-
tes acordar que se autorice a la misma Junta, para que en el repartimiento pre-
venido en el citado decreto de los fondos del medio die=o y primicia del año
anterior proceda del modo que mejor le parezca, consultando a un mismo tiem-
po a que las fábricas de las iglesias parroqujales queden compleúzmente dota-
das, el cuUo 120 sufra mengua alguna, y los tenientes o sea coadjutores y de-
más pequeños partícipes 120 carezcan de la subsistencia necesaria... Sr. Secr.
E . D. de G. y Justicia."
"Orden de 24 de Junio de 1822: En vista de lo expuesto por los Beneficiados
de los pueblos de la ribera de Pamplona sobre que su dotación se estime como
la de los Párrocos de que habla el decreto de 23 de Abril de este año, respecto
a que habiendo admitido sus benefícios con sujeción a las cargas de aquellas
iglesias, asisten al confesonario, y a los enfermos y moribundos, explican la
doctrina, y suplen en las ausencias y erúermedades del Párroco; se bao servi-
do las Cortes resolver que siendo estos Beneficios unos verdaderos Coadjuto-
res de los Párrocos, se les considere como a tales Coadjutores en su asigna-
ción y preferenaia entre los que no tengan la cura de almas, cuidando aquella
Junta diocesana de que no les falte su cóngrua correspondiente ... Sr. Secr. E.
D . de G. y Justicia."
"Orden de 24 de Junio de 1822: Los Curas Párrocos individuos de la Junta
diocesana de Ca.rtagena bao acudido a las Cortes, quejándose de que la ma-
yoría de la misma Junta haya acordado privar a los Curas cuya dotación se
completase con el mínimum de trescientos ducados, de la percepción del resí-
duo c¡ue hubiese en el acervo común después de verificado aquel complemento.
En su vista se han servido las Cortes declarar que es voluntaria la inteligencia
dada por la mayoria de la expresada Junta al decreto de 23 de Abril último, en
el cual se establece con bastante claridad que el Párroco cuya c6ngrua no hu-
biese alcanzado anteriormente a trescientos ducados, se le dé ésta por el míni-
mum de! único acervo comúa de cada obispado, y se previene con la miSTJlZ-
claridad que verificada que sea esta cóngrua de los Párrocos, se dé del pro-
pio acervo a éstos y a los demás participes, si resulta sobranú, tanto CUII1lto
hayan percibilfo en el último quinquenio en praporción a los frutos repartibles ...
Sr. Secr. E. D. de G. y Just.•
"Las Cortes... bao decretado: Art. 1.• Se distribuirá el medio die=o y pri-
micia en la forma siguiente : M. R. Cardenal Arzobispo de Toledo, mínimum
500.000 rs. v., máximum 800.000; M. RR. Arzobispos, 100.000, 200.000; RR. Obispos,
80.000, 100.000; 2.• No se comprenden en la dotación anterior los gastos de Pro-
visorato y Secretaria. Para ellos y los Vicarios se señala al M. R. Arzobispo car-
denal la cantidad de 100.000. A los M. RR. Arzobispos, 40.000 A los RR. Obispos,
30.000. 3.• Los Gobernadores de mitras vacantes percibirán la mitad de la de>-
tación señalada a los r espectivos propietarios. Se consideran vacantes para
492 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
este efecto las Sillas cuyos propietarios se hallen extrañados de estos reinos.
El Tesoro público, o el fondo de Espolios, no percibirán en el caso de vacante
sino la mitad de los productos de la mitra. Los Gobernadores de sede plena,
cuyos propietarios no se hallen en el ejercicio de su jurisdicción por cualquie-
ra causa, percibirán una tercera parte de la dotación de la mitra, y el propie-
tario las otras dos. 4.• La primera Silla de los Cabildos de las iglesias metropo-
litanas tendrá, 16.000, 24.000; Las Dignidades y Canónigos, 12.000, 18.000; los Ra-
cioneros, 8.000, 12.000; medios id., 6.000, 9.000. 5.• La primera Silla de las igle-
sias sufragáneas disfrutará, 14.000, 20.000; Dignidades y Canónigos, 10.000, 15.000;
Racioneros, 6.000, 9.000; medios id ., 5.000, 8.000. 6.• La primera Silla de los Ca-
bildos de las iglesias COlegiatas gozará, 8.000, 12.000; Dignidades y Canónigos,
6.000, 9.000; Racioneros, 5.000, 7.000; medios id., 3.000, 5.000. Donde no hayan
llegado antes las Dignidades y Canongías de dichas iglesias a estas dotaciones
per cibirán con respecto a las antiguas, no siendo nunca el mínimum y el máxi-
mum inferiores a 3.000 y 5.000. 7.• Las Raciones y medias Raciones de las igle-
sias Catedrales, y las Canongías de COlegiatas que por sus rentas anteriores han
sido estimadas como premio y descanso de los Curas de término, y que en el
último quinquenio han percibido un duplo del mínimum que en los anter iores
artículos se les señala, tendrán igual dotación mínima que los expresados Pá-
rrocos. 8.• Los curatos de tercera clase o término obtendrán, 8.000, 15.000; los
de segunda, 6.000, 10.000; · los de primera, 4.000, 6.000. En esta dotación se com-
prenderá el valor a renta de los censos y predios; pero no el de las casas rec-
torales destinadas para su habitación, ni los derechos de estola, que reserva-
dos exclusivamente a los Párrocos, no se hará m érito de ellos en las asignacio-
nes respectivas. En las diócesis en que los curatos no estuviesen clasüicados,
se hará esta clasilicación por las Juntas diocesanas, poniendo en primera clase
los curatos que se r eputan de entrada; en segunda los que se consideran de as-
censo; y en tercera los de término; y t;erjendo por tipo para est2. clasilicación
el haber que antes te;úan, y las circunstancias particulares de los puP.blos en
que vivan. En los pueblos servidos por dos o más eclesiásticos, no Párrocos
propios de una misma iglesia, se regulará la dotación a juicio de las mismas
Juntas. 9.• Los Vicarios, Ecónomos u otros que r egentan in cápite la cura de
almas, se consideran Párrocos para reclamar las r espectivas dotaciones. Los Te-
nientes, Vicarios u otros colaboradores con título de tales, que prestan s u ser-
vicio bajo la dirección del propietario, percibirán por dotación la ter cera parte
de la señaladl:.. al curato respectivo . En las parroql:.ias donde éstos ya existan,
o se crearen de nuevo con la competente aprobación, por reputarse necesanos
para ayudar a los Párrocos a comunicar el pasto espiritual en sus feligresías,
percibirán la dotación que se les asigna en este articulo del acervo común de
diezmos, aunque hasta ahora hayan sido pagados por los Párrocos. 10.• Los be-
neficios, préstamos u otros cualesquiera oficios eclesiásticos cuya dotauión coc-
sista en diezmos, percibirán una quinta parte menos que la señalada al cura·
te> donde estén instituidos, si aqu.ma cubie-;e ~ido h3sta ac:;.ui mayor que :a de
éste; una cuarta parte menos si era igual; y siE:ndo inferior percibirán la pro-
porcional a la que antes d~frutaban con respecto a la que ahora queda seña·
lada al Cura, el que siempre en su parroquia ha de tener renta superior a los
bene/i':iados y prestamistas. Si la dotacióa de los referidos beneficios , présta-
mos u oficios consistía en predios rústicos o urbanos, continuarán percibien-
dola por entero. Pero si consistía parte en predios y parte en décimos comple-
tarán sobre éstos la cuota que les corresponda, según lo dispuesto en este ar-
ticulo. 11.• Los predios rústicos o urbanos, correspondientes a los beneficios,
préstamos u oficios vacantes o que vacaren, y que no deben proveerse según los
decretos y órdenes vigentes, entrarán desde luego en la masa de bie nes destina-
dos a la indemnización d e los partícipes legos de diezmos. Se exceptúan sola-
mente las fincas o bienes que constituyen la dotación de las capella nías o be·
neficios de patronato pasivo de familias, conforme a lo ya dispuesto por otros
decretos sobre este punto. 12.• Las dotaciones de que hablan los articulas an·
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 493
El Rey seguiría estos pasos que le harían grato a los ojos del cle-
ro regular 80, en especial por la res tauración de los jesuitas 8' .
También los cimientos de su política económica fueron puestos
por la Regencia: el indulto pontificio de los 30 millones había ca-
ducado y se solicitaba otro para que "el clero secular y regular con-
tribuya desde este año y durante la escasez del R. Erario con la
cantidad anual de diez millones de reales". Idéntico sistema, pero
más llevadero para el clero, al que devolvían el diezmo completo 82
recurrido a la Regencia del Reino solicitando la revalidación de tales ventas y
subsanación de los perjuicios que suponen habérseles irrogado por el despojo.
Asimismo han representado varios Prelados de Comunidades religiosas, pidien-
do se declare perl.enecerles los frutos pendientes en las mencionadas fincas. En·
terada S. A. S., ha venido en resolver que estando acordado el reintegro de los
monasterios e iglesias de la quieta posesión de sus bienes y rentas injustamente
usurpados por consecuencia de la nulidad ya declarada de todos los actos pú-
blicos y administrativos y todas las providencias del Gobierno erigido por la
rebelión, se hallan resueltas las solicitudes de los compradores que aspiran a
retener los bienes comprados; mas en cuanto a los frutos pendientes ha tenido
a bien declarar S. A. que deben pertenecer íntegramente a los mismos compra-
dores o a los arrendatarios, con la obligación de pagarse por éstos a las igle-
sias o monasterios las cantidades estipuladas en sus escrituras de arrendamien·
tos, y aquéllos el arrendamiento que convinieren entre si o por señalamiento
de peritos nombrados por ambas partes; entendiéndose sólo por el presente
año, y con la condición de dejar en libertad a las iglesias o monasterios de dis·
poner de las fincas y cada una de ellas a su arbitrio, alzados que sean los fru-
tos pendientes, sin perjuicio de que tengan efecto las transacciones hechas has·
ta la fecha... Madrid. 12 Agosto de 1823."
80. DEC. REY, VIll, 47-48; IX, 32().321; XI, 5: El 13 de enero de 1824, a ins-
tancias del Procurador general de la Orden de San Benito, basándose en la
declaración de la Regencia del 11 de junio anterior, anulaba los testamentos de
monjes exclaustrados fallecidos en favor de sus parientes, umandando que los
agraciados devolvjesen a los monasterios todo el dinero, alhajas y demás efec-
tos", pues los ureferidos Monges, no habiéndose secularizado... , no podian tes·
tar."
Una R. orden comunicada por el Ministro D. Luis López Ballesteros, el 19
de octubre de 1824, a la Dirección gener-..1 de Rentas, volvía sobre el menciona-
do decreto de la Regencia, de 15 de agosto de 1823 (DECR. R:EX:ENCIA Y REY, VIl,
87), insistiendo: udeberán percibir íntegramente los frutos pendientes al tiem-
po de la !)ublicación de la R . cédula de 2 de Febrero del anterior los que hu-
biesen llevado en arrendamiento los mencionados bienes, entendiéndose esto só-
lo por el p;:esente año... "
La R. cédula de 16 de enero de 1826, a solicitud de los Procuradores gene-
rales de la Compa.ilia de Jesús y de las Orden~s de San Benito y otr:ls, decla-
raba unulas todas las redenciones de censos pertenecientes a los Regulares he-
chas en la época de la Constitución .. ., y los censualistas deben pagar a las
r~spectivas Comunidades Religiosas las pensiones que hayan vencido desde las
redenciones."
81. DEC. REY, VTI , 243; VIII, 208; IX, 429-430: el 16 dt> diciembre de 1823,
ordenaba la entrega a los jesuitas, de sus temporalidades; pero el 19 de febre-
ro de 1824, D. Luis López Ballesteros comunicaba la R . orden -a petición del
Superior general de los Jesuitas- de entregar "todos los atrasos, beneficios y
obligaciones, sin que vuelva a tener más el gobierno que intervenir en esta ma-
tria".
82. DEC. RExiENCIA, vn. 18-20: uLa indiscreta pasión de la novedad y el cri-
minal empeño de engañar a los pueblos con falaces y seductoras teorías hizo
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIED.'\D BORJIONICA 497
hallan destinados los diezmos, de las escaseces del Estado, y de las grandes aten-
ciones que hay que cubrir para consumar la grandiosa obra de la libertad del
Rey N. S. y del restablecimiento del orden, se prestarán a estos desembolsos
con el mismo zelo que lo han hecho anteriormente... Madrid, 6 de Junio de
1823."
83. DEC. REGENciA, VII, 61: Madrid, 3 Julio de 1823.
84. DEC. REY, VII, 22().230
85. DEC. REY, VIII, 106-109: " ...Art. 3.• Para desempeñar estas obligaciones
señalo a la Caja de Amortización una consignación anual de ochenta millones,
pagadera particularmente sobre el producto de los arb!trios siguientes: ... 16. El
de dos años de vacante de todas las Prebendas y Beneficios eclesiástcios con-
forme a la bula de S. S. de 26 de Junio de 1818; 17. El de una anualidad de las
mismas Prebendas cuando después de dos años de vacante se confieran, la cual
deberá satisfacerse por el agraciado en los cuatro años inmediatos a la toma
de posesión, con arreglo:> a la citada bula; 18. El de todos los Beneficios sim-
ples de presentación Real y de libre colación eclesiástica o patronato, con arre·
-glo a la misma bula; ... 20. El de los Maestrazgos de las Ordenes Militares; ... 24.
E l de la q:.linta parte del producto de la bula de la Cruzada, y de la mitad de
la de ilustres, Lacticinios y Composición... Palacio, 4 Febrero de 1824. A D. Luis
López B2.llesteros."
Por R. O. de 24 de septiembre de 1824 se incluían "en toda clase de exac·
·ciones" las prebendas de patronato particulares -ron motivo de la consulta del
Colector de anualidades y vacantes de la Colegiata de Ampudia, de patronato
particular del Duque del Infantado- (DEC. REY, IX, 205).
86. DEC. REY, V!II, 365: "Habiendo h echo presente al Rey N. S. el Colector
·general de Espolios y Vacantes lo recargados que se hallan los fondos de la
Colecturia, manifestado que haciéndose nuevas consignaciones no podrán pagar-
se éstas ni las anteriore~ que ~an sobre ellos; se ha dignado S . M. mandar
que desde hoy en adelante no se dé curso a ninguna instancia en solicitud de
pensiones o socorros por aquel ramo... Madrid, 20 de Mayo de 1824. Luis Ló-
pez Ballesteros."
87. DEC. REY, VII, 201-202; VIII, 139. 307. 385. 401-402. El 1 de septiembre de
1824 se dejó de eobrar lo "correspondiente al tiempo de la revolución" (DEC.
REY, IX, 174).
88. El 20 de abril de 1824 creaba el Rey una Junta, presidida por el Obispo
de Ciudad Rodrigo, "para que entienda en la mejora de Hospicios, Casas de
Expósitos y otros establecimientos piadosos"; advertía el monarca, por medio
RELIGIOSIDAD HISPA.NA Y SOCIED.'U> BORBONIC.\ 499
del Ministro de Hacienda D. Luis López Ballesteros, que "si las circunstancias
apuradas de algunos de dichos establecimientos. como las Casas de Eli.'Pósitos
de Oviedo, Mondoñedo, Madrid y otros exigiesen pronto y eficaz remedio, la mis-
ma Junta lo hará presente con anticipación, para que se les atienda con prefe·
rencia al tiempo de ;imponer las pensiones sobre la tercera parte de las Mitras
vacantes, actualmente muchas" (DEC. REY, VIII, 317·319).
El 20 de marzo de 1827, todavía se publicaba la siguiente circular del Con-
sejo Real: "Con fecha 30 de Abril de 1816, se comunicó a todos los Prelados del
Reino, la circular (encargándoles manifiesten el número de casas de expósitos
que hay en sus respectivas diócesis, su estado y las que convendrá erigir: DEc.
REY, III, 153) ... Reunidos todos los informes evacuados por los M. RR. Arzobis-
pos Y RR. Obispos, a virtud de la preinserta determinación, se pasaron con el
expediente general que los motivó, a los Srs. Fiscales, quienes no llegaron a
dar dictamen en el asunto por las desagradables ocurrencias de Madrid de
1820. En tal estado, y con R. orden comunicada al Consejo por el Excmo. Sr_
primer Secretario del Despacho en 19 y 2:1 de Abril del año próximo pasado, se
le remitieron a consulta los expedientes formados en aquella Secretaria sobre
el estado de los Hospicios y Casas de Expósitos de las ciudades de Tarazona
Y Galatayud y de la de Toledo; con cuya inteligencia y la de los citados antece-
dentes del asunto, teniendo dicho Supremo Tribunal en consideración que de
los indicados informes resultó que las más de las casas de Expósitos se halla-
ban en suma decadencia, unas por falta de fondos proporcionados, y otras por
no percibir los réditos de sus fincas enagenadas, ni las asignaciones correspon-
dientes, y que debían haberse agravado aquéllas los diez años transcurridos, por
dichas causas y las ocurrencias del trastorno político, ejecutó en 16 de Diciem-
bre último la consulta que por las indicadas RR. OO. le estaba encargada, y
por resolución a ella, conforme a su parecer, se ha ~rvido el Rey N. S. man-
dar, entre otras cosas, que se circule de nuevo la de 30 de Abril de 1816, que
queda inserta, con el recurso además de que los Arninistradores de dichos pia-
dosos establecimientos presenten inmediatamente sus créditos a liquidar en la
Dirección de la R. Caja de Amortización, pues que con arreglo a los RR. decre-
tos de 4 de Febrero (DEC. REY, VIII, 106·109) y 8 de Marzo de 1824 no puede ve-
-rificarse pago alguno sin que preceda liquidación, r econocimiento, expedición
de nuevos títulos en subrogración d~ los antiguos, y su inscripción en el Gran
Libro, y el de que reclamen con urgencia cuanto se les adeude por cualquiera
otro concepto" (DEC. REY; XII, 73-75).
89. DEC. REY, VIII, 261·262; IX, 113·114 : "Deseoso de premiar a los Eclesiás-
"ticos que se han distinguido más en la época fatal de la revolución, me dediqué,
en cuanto permitía la atención que me merecen las demás clases del Estado y
la gravedad de los negocios que me ocupan, a examinar por Mí mismo sus
servicios y su adhesión a mi R. persona, haciendo en consecuencia diversos nom-
bramientos de beneficios y prebendas eclesiásticas para recompensar sus pa-
·decim.ientos y s u acmo:aca baltad; pero no siéndome posible continuar en este
examen con la detención y exactitud que exigen la justicia y el bien de la Igle-
sia, quiero que se pasen a la Cámara todas las solicitudes y expedientes que
existan en mi Secretaria de Gracia y Justicia para que me consulte desde lue-
go las dignidades y prebendas que hubiere vacantes en sugetos de virtud y
mérito, sin dejar de tener en consideración a los que me han hecho servicios
en estos tres últimos años, y se han señalado más por su fidelidad; en cuya
-regulación espero que se conducirá aquel Supremo Tribunal con el zelo y dete-
nimiento que conviene para dar a la Iglesia Ministros dignos, teniendo presente
las leyes 4.• y 5.• de la Novísima Recopilación en el libro 1.• , tít. 15, y las de-
más RR. OO. comunicadas repetidamente par aque los Eclesiásticos residan en
sus iglesias y diócesis ... Firmado de la R. mano. Palacio, 13 Marzo de 1824. A
D. Francisco Tadeo Calomarde."
500 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
REINADO ISABELINO
España que me está encargado; la especial protección del Sto. Concílio de Tren-
to con que se honra mi gobierno; y la intima convicción de que la re ligión ca-
tólia apostólica romana lejos de menoscabar la potestad civil es su más robus-
to apoyo... he venido en mandar : 1.• Que se forme desde luego una junta com-
puesta de eclesiásticos del clero secu.lar y regular recomendables pOr su virtud,
ciencia, dignidad y adhesión sincera a legitimidad, y de seglares, que a la pie-
dad, madurez y experiencia reunan los sólidos conocimientos de las r egalías de
la corona, que son necesarios para que no se vulneren. 2.• Que esta junta se
ocupe desde luego de examinar el es'..ado actua.l de todo el territorio español en
lo formal y material concerniente al cu.lto divino y sus ministros. .. 3.• Que con
presencia de antecedentes propcngan a mi aprobación el plan de mejoras que
crey~r~ m:ts útil, con 1& t:linuta de pr-er.es par.1 aq_uél.ias en que Si! necesitase
interpelar la antondad de la Santa Sede sirviéndola de base para sus opera-
ciones la instrucción que me habeis presentado (pág. 211-214)... Aranjuez, 22
Abril de 1834. A D. Nicolá:; M.• Garelly.n
u La Junta eclesiástica creada... antes de proceder a la enagenación de bie-
nes inmuebles, alhajas o muebles preciosos... , acudan a S . M. en solicitud de
licencia ...Madrid, 17 Junio de 1834. Nicolás M.• Garelly."
118. D.tX:. REY. XI. 221-222.
119. DEc. REINA, XIX, 32&-327: 5 Julio 1834.
120. DEc. REINA, XIX, 35~351: 9 Agosto 1834.
121. DEc. REINA, XIX, 331·332. 401 : 15 Julio y 8 de Agosto de 1834; XX, 276
277: 1 Julio de 1835, basándose en el decreto de 9 de marzo de 1820.
122. DEC. REINA, XX, 280-281: 4 Julio 1835.
510 ALFREDO KARTINEZ A.L BIACR
les las dos terceras partes a lo menos sean de coro, quedan desde
luego suprimidos; y lo mismo se verificará en lo sucesivo, respecto
de aquéllos cuyo número venga a reducirse con el tiempo a menos
de lo establecido; los monasterios y conventos de que se hallan ac-
tualmente cerrados por efecto de las presentes circunstancias, se
entenderán suprimidos también por este decreto si no tuviesen el
número de religiosos asignado". Sin embargo, valoramos como de
importancia suma el preámbulo, en que se expresan los motivos
para tales disposiciones: "El aumento inconsiderado y progresivo
de mcnasterios y conventos, el excesivo número de individuos de
los unos y la cortedad del de otros, la relajación que era consiguien-
te de la disciplina regular, y los males de que aquí se seguían a la
religión y al estado, excitaron más de una vez para su corrección
el celo de los reyes de España, el del reino junto en Cortes, y aun
el de la Santa Sede. Así es que por una de las condiciones de mi-
llones se previno que no se concediesen licencias para nuevas fun·
daciones de monasterios, aunque fuese con titulo de hospederías,
misiones, residencias u otro cualquiera... De aquí procede que exis-
tan hoy en España más de 900 conventos, que por el corto número
de sus individuos no pueden mantener la disciplina religiosa ni ser
útiles a la Iglesia. Teniendo, pues, pr~nte que conforme a varias
constituciones apostólicas de diferentes Sumos Pontífices, se re-
quiere en todo convento a lo menos el número de 12 religiosos pro-
fesos, cuyas dos terceras partes sean de coro ... " ¿Respondia esa
tensión antimonástica a alguna razón interna? 1u.
123. DEC. REINA, XX, 335-337: " ... A. 3.• Si circunstancias particulsres de uti-
lidad pública reclamasen la conservación de alguno o a lgunos monasterios o
conventos que no tengan dicho n~ero. se completará éste con idividuos de
otros del mi.!mo instituto. 4.• Qued2n exceptuados de estas reglas las casas de
los clérigos regulares de las Escuelas Pías, y los colegio de Misioneros para las
provincias de Asia. 5.• Los religiosos de los monasterios y conventos suprimí·
dos en virtud de este R. decreto, se trasladarán a otras casas de su orden que
designarán los respectivos superiores, a las que podrán llevar consigo los mue-
bles de su uso particular. 6.• Las parroquias que dependan de monasterios o
conventos suprimidos pasarán a ser seculares con todos los derechos y con·
decoraciones que coroc :-. tales les han correspondido basta aquí. 7." ~ bienes,
rentas y erectos de cualquier clase qo..te posean los monasterios y conventos qu~
deban quedar suprimidos, se aplican desde luego a la extinción de la deuda pú·
bllca o pago dP. sus réditos; pero con sujeciór: a las cargas de justicia que ten-
gan así civiles como eclesiásticas. Se exceptúan con todo de esta aplicación los
archivos, bibliotecas, pinturas y demás enseres qne puedan ser útiles a los ins-
titutos de ciencias y artes, así como también los monasterios y conventos, sus
iglesias, ornamentos y vasos sa.,"l'lldos, de los que me resevo disponer, oidos los
ordinarios eclesiásticos y prelados generales de las órdenes en lo que sea ne-
cesario o conveniente. 8.• Si resultare que las rentas de algún monasterio o con·
vento a donde se trasladasen individuos de otro suprimido no alcanzaren para
la necesaria manutención de la comunidad, se le adjudicará la parte de bienes
de las casas suprimidas que sea suficiente al efecto".
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 511
ga su efecto, el expresado rey desea sobremanera que Jos mismos religiosos sean
destinados al gobierno de las parroquias... Os damos facultad que ba de valer
perpétuamente ... con tal que el indulto apostólico hubiese sido puesto en ejecu-
ción por el ordinario.. . Roma, 6 Agosto 1833. .. R. Agencia general de Preces a
Roma en Madrid 27 Agosto 1835... Madrid, 21 Setiembre 1835. Manuel García
Herreros" (Min. de G. y Just. en el Gobierno del COnde de Toreno).
127. DEc. REINA, XX, 443-449: "Se ha servido resolver S . M.: 1.• Que en las
ternas que remitan al gobierno Jos prelados diocesanos para la presentación de
curatos y beneficios curados, propongan con toda preferencia a estos eclesiás-
ticos (secularizados, habilitados por el Breve de S. S. en circular de 21 de se-
tiembre), siempre que por su conducta moral y politica, y censura que den de
sus ejercicios 2xaminadore!:. diocesanos, sean considerados merecedores y aptos
para su desempeño, sin perjuicio empero del derecho qu puedan tener a los as-
censos los actuales párrocos, esperando S. M. con entera confianza que, pene-
trados los mismos prelados y los patronos, así eclesiásticos como laica!es., de
las miras de humanidad que guían su R. ánimo en esta parte, y de las venta-
jas que de ello han de n:sultar al Estado y a la Iglesia misma, harán Jos nom-
bramientos de las piezas eclesiásticas de la clase de que se trata y que les co-
r.-esponda por derecho C:e entre los mismos secularizados, con la indicada !i-
mitación. 2.• Que los diocesanos confieran a éstos Jos economatos de dichas pie-
zas vacantes en la actualidad, y que vacaren en lo sucesivo, y les encarguen el
desempeño de las cargas eclesiásticas de aquéllas cuya provisión está suspen-
dida por las RR. disposiciones vigentes, sin desatender, no obstante, el particu-
lar mérito y ~ervícios que puedan haber contrabido individuos del clero secular;
Y últimamente, que a fin de que pueda cerciorarse S. M. si se cumple lo man-
dado y si se llenan como debe s us benéficas intenciones, remitan Jos diocesa-
nos a la secretaría de mi cargo cada tres meses notas de los curatos y benefi-
cios curados que vacaren ... y una razón nominal de Jos secularizados que resi-
dan en su respectiva diócesis, expresando su destino actual ...Madrid, 6 Octu-
bre 1835. Alvaro Gómez" (Min. de G. y Just. en el Gobierno de Mendizábal).
128. F'ERNÁNDEZ GoNZÁU:Z, La Hacienda de neustros abuelos, pág. 17. 30. 40_
REUCIOSJDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 513
129. DEC. REINA, XX, 453: "Deseando remediar los gravisimos perjuicios que
se siguen al Estado y a la Iglesia de ser tan e:rcesivo y desproporciorzcuW el nú-
mero de eclesiásticos en la mayor parte del r eino, con tanto daño de éstos mis-
m os como de los demás espaiiDles, que su/Ten exclusivamente las cargas públi-
cas de que están exentos aquellos, he venido en decretar... que por ahora y
basta que con todo el examen necesario de los trabajos hechos por la Junta
eclesiástica se determine, de acuerdo con las Cortes lo que más convenga sobre
refonna del clero, los M. RR. Arzobispos, RR. Obispos y demás prelados a
quienes competa, se abstengan absolutamente de e:rpedir dimisorias y conferir
órdenes mayores bajo ningún título, ni por ningún motivo ni pretexto, aunque
bien podrán promover al presbÍterado o al ruacona.do a los que respectivamen-
te estuvieren ya o ordenados de diáconos o de subdiáconos, y ordenar in sacris
a Jos que el rua de la publicación de este decreto en la Gaceta de Madrid, ten-
gan obtenida la presentación y colación canónica de algún curato o de algún
beneficio con cura de almas, o hecha ya y aprobada alguna oposición en virtud
de la cual se les haya dado o se les diere dicha colación, antes o después del
expresado dia ... El Pardo, 8 Octubre 1835. A D . Alvaro Gómez."
130. DEC. REINA, XX, 457-460 : •Aunque por mÍ R . decreto de 25 de julio de
este año apliqué el remedio que me pareció exigían entonces más de pronto los
graves males que causaban a la religión y al Estado la subsistencia de tantos
monasterios y conventos faltos del número canónico de fnditñdtws que se nece-
sita para la observancia de la disciplina religiosa, todavía las representaciones
que se me han dirigido de varias partes de la monarquia, me bacen estimar in·
dispensable y muy urgente 1tna reforma más e:rtensa, considerando cuán des·
proporcicmado es a los m edios actuales de la nación el número de cosas m onás-
ticas que qued!l, cuán inútües o innecesarias son la mayor parte de ellas para
la asistencta espiritual de lOS fieles, Cuán GRANDE EL PERJUICIO QUE AL REINO SE lE
SIGUE DE L\ AMORTIZACIÓN DE LAS FINCAS QUE POSED:, Y COÁNTA lA CONVENIENCIA PÚ-
BLICA DE PONEr. ÉSTA EN CIRCULACIÓN PARA AUMl!NTAR :.OS REC"Oa!:OS 11!1 ESTADO Y A3R1R
NUEVAS FUENTES DE RIQUEZA : Por tanto, y teniendo presente Jo que ya el rey mi
augusto esposo !q. e . p . d .) determÍDÓ de acuerdo con las Cortes t:n 23 de Oc-
tubre de 1820; be venido en decretar... : 1.• Quedan suprimidos desde luego, co-
mo se dispuso por la expr esada determinación, todos los )IONASIERros de órdenes
17101WCales, los de canónigos regulares de San Benito dP. la congregación claus-
tral tarraconense y cesaraugust:aoa; los de San Agustin y los premostratenses,
cw.lqu!era que sea el número de m:>nges o religiosos de que en la actualidad
se compongan. 2.• Exceptúa>e por z.bora de la supr~sión, si actualmente se ha·
liaren abiertos, Jos monasterios de la orden de San Benit.o el de Monserrate en
Cataluña; San J •ran de la Peña y San Benito de Valladolid; de la de San Geci-
nimo, el del Escolia! y Guadalupe; de la de San Bernardo el de Poulet; de la
de carrujos el del Paular; de la de San Basilio la casa que tiene en Sevilla, pero
con absoluta prohibición de dar hábitos y admitir a profesión los novicios que
ahora hubiere, y con calidad de que los b ienes raíces y rentas de estos monas-
terios queden también aplicados al crédito p úblico como los de las casas su·
primÍdas. 3.• Los monges de los monasterios suprimÍdos de las mismas órdenes
que los que se conservan, podrán respectivamente, si quieren y tuvieren cabida
en estos últimos, trasladarse a ellos, llevando consigo los muebles de su uso·
particular. 4.• De los demás conventos de religiosos que subsistan con arreglo
'514 ALFREDO KARTINEZ A.L BIACH
misioneros escolapios y hospitalarios del modo que juzgue más oportuno, para
llenar tos di!erentes objetos de su instit>.1to... A. 4.• Quedan suprimidos desde lue-
go todos los beaterios cuyo instüuto no sea la hOspiúüidad o la enseñanza pri·
maria. A. 5.• Las juntas que se crean por este decreto en las cabezas de todas
las diócesis, reducirán el número de conventos de monjas al que sea absoluta-
mente indispensable, para contener con comodidad a las que quieran continuar
en ellos, distribuyendo las de tos suprimidos entre los demás de la misma or-
den que subsistan, arreglándose para la supresión a las bases siguientes: 1.• no
se conservará abierto ningún convento que tenga menos de veinte religiosas pro-
fesas; 2.• no se permitirán en una misma población dos o más conventos de la
misma orden. A. 6.• Se prohibe la admisión de novicios de uno y otro sexo en
tos conventos y beaterios que quedan subsistentes por este decreto. A.. 7.• El
gobernador civil de la provincia dispondrá desde luego se restituyan a sus casas
tos individuos de ambos sexos que habiendo tomado el hábito religioso en al·
gún convento o beaterio de cualquier orden, instituto o denominación que sea.
no hayan profesado a la publicación de este R. decreto en las respectivas pro-
vincias ... A. 11.• Se prohibe el uso público del hábito religioso a las personas de
ambos sexos. A.. 12.• Los regulares exclaustrados ordenados in sacris quedan
como tos eclesiásticos seculares bajo la jurisdicción de tos respectivos ordina-
rios. Los que no hubiesen recibido órdenes mayores vivirán en clase de segla·
res sujetos a las mismas autoridades que tos demás españoles... A.. 14.• La ju·
risdicción eclesiástica que egercfan tos prelados de las comunidades suprimi-
das se devuelve a los ordinarios en cuya diócesis estén enclavados los territo-
rios exentos hasta aquí. Si estos territorios están en los confines de dos dióce-
sis, corresponderá la jurisdicción a aquélla cuya capital esté más próxima. A. 15.•
En los monasterios y conventos suprimidos que tenían aneja la cura de almas,
se erigirán parroquias con el suficiente número de ministros a cuya subsisten-
cia se proveerá por los medios &COStumbrados. A.. 16.• Los beneficios seculares,
unidos a los monasterios y oonventos suprimidos, quedan r estituidos a su pri-
mitiva libertad y provisión real y or dinaria; pero sus actuales poseedores con-
tinuarán en el ejercicio y disfrute de ellos, y en el pago de pensiones con que
se hallen gravados. A. 17.• En cada diócesis y en la vicaria de Madrid, se esta-
blecerá una casa, que se denominará de Venerables, para los exclaustrados que
voluntarlamente solicite:l ser admitidos en ella, con tal que a la publicación del
presente decreto hayan cumplido sesenta años, o acrediten padecer alg¡.:na en-
fermedad habitual que les impida absolutamente dedicarse al ejercicio de su
ministerio... A. 19.• La Junta distribuirá por los pueblos de las áiócesis, y el
ordinario asignará a las parroquias, los exclaustrados ordenados in sacris que
hayan de disfrutar de la pensión que se les señala en este R. decreto. Se excep-
tuan los que no hayan terminado su carrera literaria , que quedan en libertad
para continuarla en las universidades, seminarios y demás colegios aprobados.
A.. 2C.• Tod03 los bi~ raíces, muebles y samovieute:;, :-eneas, derecbcs r ac-
ciones de todas las casas de comunidad de ambos sexos. asi suprimidas como
subsistentes se aplican a la R . caja de amortización para la extinción de la deu-
da pública, quedando sujetos como hasta aquí a las cargas de justícia civiles y
eclesiásticas a que estén afectos. A. 21.• Se exceptúan de la disposición conte-
nida en el articulo anterior los bieneo;, rentas, derechos y acciones pertenecien-
tes a la Comisaria general de Jerusalén, y los que se hallen especialmente afec-
tos a Objetos de beneficencia o instrucción pública; como asimismo la parte
de los bienes del monasterio del Escorial que resulten corresponder al R. Pa-
trimonio, verificada la clasificación que se está practicando por mi Secrectario
de Estado y del Despacho de Hacienda. A. 22.• Los ordinarios podrán, con la
aprobación del gobierno, dedicar a parroquias las iglesias de los conventos su·
primldos que sean necesarias. A. 23.• Del mismo modo podrán disponer en fa-
516 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
vor de las parr oquias pobres de sus diócesis de Jos vasos sagrados, orna-
mentos y demás objetos pertenecientes al culto, excepto aquéllos que por su
rareza o mérito artístico. convenga conservar cuidadosamente, y Jos que por su
inconsiderable valor no corresponderían a la pobreza de las iglesias. A. 24.• Po-
drán destinarse para establecimientos de utilidad pública los conventos supri-
midos que se crean a propósito. A. 25.• Asimismo se aplicarán Jos archivos, cua-
dros, libros y demás objetos pertenecientes a los institutos de ciencias y artes,
a las bibliotecas provinciales, museos, academias, y demás establecimientos de
instrucción pública... A. TI.• Los religiosos pertenecientes a los institutos no
suprimidos por este decreto, percibirán una pensión diaria, que será de cinco
reales para Jos sacerdotes y ordenados in S4Cris -{Por el decreto de 29 de julio
de 1837, 4 reales a Jos de menos de 40 años, 5 rs. a los menos de 60, y 6 rs. a
los más de 60)-, y de tres para los demás profesos asi coristas como legos
-{Por el decreto citado de 1837, 3 rs. a Jos impedidos de trabajar y con menos
de 60 años; y con más de 60, 4 rs.; a Jos DO impedidos y con menos de 40 años,
3 rs. durante dos años)-. Los hospitalarios a quienes prohibe su instituto des-
cender a las órdenes sagradas percibirán también oinco r eales diarios -{Por
el decreto de 1837, si han sido prelados, como sacerdotes; sino, como legos)-.
A. 28.• Los regulares actualmente exclaustrados o que en adelante se exclaus-
traren, y Jos secularizados en las épocas anteriores que DO lo hubiesen sido a
titulo de patrimonio o cóngrua suficiente, y DO hayan obtenido después cape-
llanía u otra renta eclesiástica, disfrutarán la pensión señalada por el articulo
anterior a los individuos de las casas no suprimidas. A. 29.• Las religiosas se-
cularizadas en las épocas anteriores, y las actualmente exclustradas o que se
exclaustraren en lo sucesivo, gozarán de la asignación de cinco reales diarios,
percibiendo solamente cuatro las que prefieran continuar en la vida monástica.
A. 30.• La beatas que continuaren dedicadas a la enseñanza y hospitalidad disfru-
tarán la pensión de cinco rs. diarios. A. 31.• De los fondos aplicados a la sub-
sistencia de los regulares se satisfarán mensualmente por las Juntas el importe
rte las pensiones señaladas en los articulas precedentes A. 32.• Estas cesarán
desde el momento en que los interesados obtengan renta eclesiástica o del Es-
tado, mayor o igual a la de la asignación ; pero si fuere menor, continuarán
percibiendo la diferencia ... A. 35.• Perderán todo derecho a la pensión respec-
tiva los religiosos de ambos sexos -G'or el decreto de 1837, si han servido en
faccicnes y condenadcs por delitos pollticos después de la amnistla de 1832)--
que se rallen en algunos de Jos casos siguientes: 1.• haberse ausentado del rei-
no sin Ucencia del gobierno, ni pasaporte de la autoridad competente ... ; 2.• salir
de la provincia de la respectiva residencia para cu9lquiera otra del reino sin
beneplácito óe la junta de la diócesis y sin pasapone de la autoridad; 3.• ha·
1ll:.rre ausente con licencia del gobierno, residiendo añora en el extrangero, y
r.o presenta.TSe a! embajador, ministro o enviado, y en su defecto al cónsul es-
pañol c!entro del término que respectivamentt> señalaren p:u-a b:lc'!rlo, man;.
!esta!" el pasaporte que obtuvieron de r.utoridad competente española, declarar
su intención de regresar al reino, recibir su pasaporte al efecto y llegar a Es-
paña en el plazo q ue ¡r.efije este documento; 4.• negarse sin causa justa y le-
gitima, a juicio de la junta, a servir el destino o empleo que se le confiera, se-
gún las respectivas circunstancias. .. A. 46.• Los exclaustrados y secularizados
que desempeñen temporalmente capeUanias o economatos que después confie-
ran a otros en propiedad, volverán a d..is!rutar de la pensión, presentando cer-
tificación del ordinario de haber cesado de su encargo. A. 47.• En la cabeza
de cada diócesis se formará una junta, compuesta del ordinario, del goberna-
dor civil, del intendente, de un vocal de la diputación provincial, y de un dig-
nidad, canónigo o racionero nombrado por la misma diputación... El Pardo,
8 Marzo 1836. A Alvaro Gómez Becerra" (Mio. de G. y Just.) .
REUGIOSIDAD HtSPANA Y SOCIEDAD llORScN:C.; 517
"R. Orden (Min. G. y Jusl.), disponiendo que por ahora no se haga novedad
en la jurisdicción que egercen los RR. Obispos priores (de órdenes militares)
de Uclés y de León, no obstante lo dispuesto en el art. 14.• del decreto de 8
de marzo último... Madrid 25 Abril 1836. Alvaro Gómez."
132. Doc. REINA, XXI, 185.
133. Dn:. REINA, XX, 510-511: "He dado cuenta a S. M. la Reina Gobernado-
ra del espediente promovido por la priora y comunidad religiosa de Sto. Do-
mingo del Valle de Flores, extramuros de la villa de Vivero, p rovincia de Lugo,
solicitando se les mantenga en posesión de la gracia que les está concedida de
.ser enterradas en sus conventos, y de lo que espone el gobernador civil de di-
cba provincia, proponiendo se derogue la R. cédula de 10 de mayo de 1818, por
la que se concedió aquel privilegio a todos los cadáveres de las religiosas pro-
fesas... Se ha servido mandar que ccmtinúe llevándose a efecto lo prevenido en
la citada R. cédula bajo las reglas siguientes: 1.• Que hayan de sepultarse los
cadáveres de las religiosas precisamente en los atrios o huertos de los monas-
terios o conventos, señalándose en ellos para este destino un parage, con pro-
hibición de que pueda hacerse en los coros bajos y en las iglesias. 2.• Que
los gobernadores civiles reconozcan los huertos y atrios asegurándose de su ven-
tilación y demás requisitos necesarios antes de prestar su aprobación para la
inhumación en ellos. 3.• Que los cadáveres de las rel\giosas que fallecieren en
monasterios o co.n ventos en que no hay huerto o atrio ventilado donde sepul·
tarlos, se conduzcan a los cementerios públicos, en los cuales se demarcará el
lugar que pareciese más a propósito. 4.• Que los gobernadores civiles, asocia-
dos de un regidor y del sindico procurador general, reconozcan todos los mo-
nasterios y conventos de religiosas de las capitales para asegurarse de la exis-
tencia en ellos de huertos o lugares proporciona1os pa.""a el enterramiento, pro-
hibiendo desde luego que éste se verl!ique en otra parte. Y 5.• Que en los pue-
blos subalternos de la capital den comisión Jos gobernadores civlles 111 sugeto
que tuvieren por oportuno, para que en unión con un regidor y el sindico pro-
curador general ejecute la visita con el objeto indicado. .. Madrid, 30 Octubre
1835. Martín de Jos Heros" (Min. Interior).
134. Doc. REINA, XX, 485-487: ·s. M. la Reina Gobernadora con fecha 17 del
actual se ha servido dirigirme el R. decreto siguiente: Las contestaciones qu<!
se l'>abian suscitado en diferentes ~iones entre la jU..'"isdicción real y la ec<e-
.siástica acerca de la competencia, conocimlen~o y procedimiento de las causas
contra eclesiásticos por delitos atroces o graves, movieron el R. ánimo de mi
augt¡sto abuelo el Sr. Rey D. Cari('S IV a IDllndar en R. O. de 19 de Noviembre
de 1799... conociese de estas causas, desde su principi\), el tribunal real con el
eclesiásti~. hasta ponerlas en estado de sentencia, y que entonces la remitiese
al gobierno por via reservada, para lo que hubiere lugar. 1\'luy luego principa-
ron a sentirse los funestos efectos de esta disposición, por el entorpecimie.n to
Y dilaciones a que da lugar en la sustentación, en el pronunciamiento de los
rauos y en la egecución de éstos; pero tamaños males se han hecho aún más
patentes e intolerables en estos últimos tiempos, que por desgracia muchos
eclesiásticos olvidados de los deberes que les impone su sagrado ministerio y
.su cualidad de ciudadanos. han lomado una parte más o menos activa en la
518 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
142. APÉNDrCE A COL. LEYEs, I, Octubre, pág. 13: "R. decr. para recoger las
alhajas de oro y plata labrada y objetos preciosos de las iglesias y santuarios,
y de frutos en especie y papel. a fin de evitar la ocupación que hacen los fac·
ciosos ... Palacio, 6 Octubre 1836. A D. Joaquín M.' López.w
143. APÉNDICE A COL. LEYEs, I, Setiembre, pág. 21. 152; Octubre, p. 17; APÉNDI·
CE A COL. LEYEs, II, p. 20. 43-44. 51. 69. 146-247; COL. l.EYES, lll, 53: "Ocupación
de sus temporalidades a los Arzobispos, Obispos y eclesiásticos que se ballen
separados de sus iglesias por desafección al trono o Constitución... Madrid. 9
Agosto 1836. ~
"R. decr., disponiendo la ocupación de temporalidades a los eclesiásticos
ausentes del reino sin permiso del gobierno... Palacio, 24 Setiembre 1836.w
"R . decr., imponiendo penas (estraiiado de estos reinos, y se les ocuparán
sus temporaUdades) a los prelados diocesanos que confieran órdenes mayores,
o den para ello d.l.r::l.isorias contra lo mandado en 8 de Octubre de 1835.~
"R. 0 ., mandando suspender por ahora la provisión de piezas eclesiástic:lS,
baciélldo cesar las dud:l.s q~e se han suscitado con motivo del decreto de 9 de
Marzo de 1834 ... Madrid, 10 Enero 1837."
"Circular reencargar:do de R. O. se recojan y custodien con todo esmero los
libros de los conventos suprimidos (sustraídos ya para el uso de los particula-
res, ya para inutilizarse con su venta, perruéndose así lastimosamente un tesoro
literario de gran precio que S . M. desea ofrecer un dia, en medio de las dul-
zuras de la paz, a la ilustración de los españoles)... Madrid, 25 Enero 1837.~
"Se restabl~ el decreto de 26 de Junio d:! 1822 sobre religiosos... Palacio, 27
Enero 1837."
"Se restablece el decreto de 20 de Marzo de 1821 sobre tribunales eclesiás-
ticos... Madrid, 31 Enero 1837.w
~ Decr. de Cortes, acordando que los RR. Obispos consagrados que residan
en Madrid, pasen a sus propias diócesis; y que los electos que no lo verifiquen
igw,.lr.l~nte se ~nt!enda han renunciadCI el derecho que les da ia presentación,
e inserc ión de la ley de 12 de Mayo de 1823... Madrid. 21 Febrero 1837.~
"El R. Obispo de esa diócesis (Tortosa) D. Vicwr Damian Sáez, lejos de
haberse presentado y manifestado E:l punto de su residencia, a pesar del largo
tiempo que ha transcurrido desde que violando las órdenes del gobierno des·
apareció de la ciudad de Sigüenza, y se le ocuparon por ello sus tempOralida·
des -12 Noviembre 1834-, continúa en tma permanente desobediencia, desco-
nociendo la autoridad del gobierno de S. M., ya se balle oculto en el país leal
o en el extra.ngero, o unido a los rebeldes... S. M. se ha servido declararle es-
trañado de es tos reinos, y privado de todos sus honores, condecoraciones y con-
sideraciones ... Madrid, 24 Mayo 1837.w
"Otra R. O., haciendo igual declaración respecto del M. R. Arzobispo de Ta-
rragona D. Fernando Ecbanove... Madrid, 24 !'.1ayo 1837."
RELIGIOS IDAD HIS PA NA. •• - 34
522 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
proporción a sus respectivos derecllos, y la otra mitad a las atenciones del te-
soro público. En la mitad aplicada a la nación se entienden y quedan compren-
didas todas las prestaciones que se haciaD a la misma con el nombre de rentas
decimales y subsidio del clero... Palacio de las Cortes, 15 Julio 1837. Yo la
Reina Gobernadora, 16 Julio 1837. A D. J. A. Mendizábal."
• Decreto de las Cortes de 24 circulado en 29 de Julio, suprimiendo la con-
tribución de diezmos y primicias, adjudicando además a la nación todus las
propied4des del clero secular. Se esceptúan los bienes pertenecientes a preben-
das, capellanias, beneficios y demás fundaciones de patronato pasivo de sangre.
Los edilicios de las iglesias, catedrales, parroquias, anejos o ayudas de parro-
quia, el palacio de cada prelado, las rectorias, casas o habitaciones de párro-
cos y sus tenientes, y los seminarios conciliares con sus huertos y jardines ad-
juntos, continuarán aplicados a sus actuales destinos. El producto total de es-
tos bienes servirá en parte de pago del presupuesto de la dotación del clero, y
entrará en cuenta de su haber. El déficit basta el completo de la dotación del
clero y los gastos del culto, se supliiá por un repartimiento que se hará en la
nación con el nombre de contribución del culto, al cual estarán sujetos en pro-
porción a sus haberes todos los contnouyentes a las demás cargas del Esta-
do... Palacio, 29 Julio 1837. A D. J . A. y MendizábaJ.•
145. Dic. R.I::INA, XXII, 315: MR_ decreto, suprimiendo la agencia general de
preces a Roma; todas las funciones quedaráo a cargo de la pagaduría del mi-
nisterio de Estado ... Palacio, 7 Junio 1837. A D . José M.• Calatrava."
El 3 de enero de 1835 (DEc_ R.f:1m, XX, 1-2), D. Nicolás M.• Garelly, Ministro
de G . y Justicia en el gabinete de Martinez de la Rosa, defendia con celo esta
agencia frente a los despachos que daban Mla cancilleria de la Santa Sede y la
Nunciatura Romana", que p<>r "'v:>luntad de S. M." consideraba "sin efecto al-
guno y contra el tratado vigente con la corte de Roma".
146. CoL. LEYEs, III, 122. 150. 161: sobre Ordenes sagradas a un corista ex-
claustrado ("según está dispuesto en el art. 15 de la ley de 29 de julio último":
15 septiembre 1837), alhaj as de aglesias ("al tenor de lo prevenido en el R. de-
creto de 6 de Octubre de 1836, para atender a los gastos de :a guerra en virtud
de la aprobación de las Cortes de 15 de Setiembre de 1837": 28 septiembre 1837),
y sobre distribución del diezmo (según "la ley de 16 de Julio próximo pasado":
4 Octubre 1837), respectivamente.
147. CoL. LEYES, IV, 70; VIII, 65; Dic. RaNA, XXIV, 277 : "P.. 0 ., declarando
no hay inconveniente en facilitar pasaportes a Jos exclaustrados que lo solici-
ten para el extrangero con el objeto de proporcionarse mejor y más segura sub-
sis tencia que la que aquf tienen__ _ Madrid, 23 Febrero 1838."
"R. O. dirigida a aliviar la situación en que se encuentran las comunidades
de r e ligiosas ;>er el atraso c;m.~erabte er. el percibe> d~ sus consignaciones
(una m ensualidad de sus pensiones en trigo del que existe en varias provincias
perteneciente a los arbitrios de amortizació n; d o nde no, en metálico}... Madrid,
5 Febrero 1840. •
•r.. decr.: A. 1.• La cobranza del diezmo y primicia mandada continuar por
el art. 1.• de la ley de 16 de Julio de 1837, seguirá por el presente año decimal,
que concluye en fin de Febrero de 1839, en la forma que se ha verificado basta
ahora. A. 2.• El gobierno pere1oirá sobre todos los frutos y productos decima-
les, antes de ninguna otra deducción, tres novenos, o sea una tercera parte ín-
tegra sobre toda la masa decimaL A. 3.• El gobierno aplicará los seis novenos,
o sea las dos terceras partes restantes por este orden: 1.• a la dotación del
culto y fábrica de las iglesias; 2.• a pagar las cóngruas individuales del clero,
según el arreglo definitivo o provisional que se adopte; 3.• a satisfacer la mi-
524 ALFREDO MARTINEZ ALBIACR
todos los párrocos sin distinción percibirán desde luego la cantidad de 3.300 rs_
En seguida se repartirá a todos los individuos de las iglesias catedrales, cole-
g¡atas y capíllas la tercera parte de sus respectivas asignaciones; y hecho esto
perc1birán integro et mínimo de las suyas los párrocos de ascenso y término;
quedando el resto para completar sueldo a libra las demás asignaciones. Ter-
cera: no se aplicará ni estraerá de una diócesis a otra el importe del diezmo
adeudado en ella mientras no esté cubierto el mínimo de las dotaciones y ha-
yan percibido los demás interesados en el diezmo la parte señalada en el art. 3.•
de la ley para su continuación; ni de un pueblo a otro mientras no estén CU·
b!ertas las atenciones del culto del mismo. Cuarta : el gobierno de acuerdo con
los ordinarios formará a la brevedad posible los aranceles de derechos parro-
qwales ... Pa lacio, 21 Julio 1838. A D. Francisco de Pauta Castro y Orozco" (Mi-
nistro de G. y Justícia del gabinete del Conde de Ofalia).
·R. 0 ., incluyendo la ley de dotación del culto y clero aprobado por el Con-
greso de Srs. Diputados ---e1 25 de Junio de 1&1.1~--: A. 1.• Las iglesias de Es-
paña y el clero secular de las mismas continuarán en posesión y goce de sus
b1enes y fincas sin poder enajenarlas, empeñarlas ni hipotecarlas, a no ser con
autorización del gob ierno. A. 2.• También continuarán percibiendo los dere-
chos de estola... MadiUd, 29 Junio 184D.w
• Instrucción aprobada para la ley de 16 de Junio último sobre dotación del
cwto y clero... 25 Julio 1~ (Min. Hacienda).
149. GotA DEL EsT. Ea.. PARA 1848, pág. 22.
526 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
150. CoL LEYEs, VITI, 375: "los exclaustrados que cumplan 60 años de edad
perciban seis reales diarios. Circular de la Dirección gen. del Tesoro Público.
Madrid, 31 Octubre de 1840."
151. CoL LEYEs, VITI, 536; IX, 183. 199. 470. 624: El 13 de diciembre de 1840,
D . Manuel Cortina, Ministro de la Gobernación de la Península , dirige al Co-
rregidor político de Guipúzcoa lo sjguiente: "Por R . decreto de 4 de Julio de
1835 fue suprimida en todo el territorio de la monarquia la Compañia de Jesús,
prohibiéndose que bajo ningún pretesto pudiesen volver a reunirse sus indivi-
duos; y los bienes, rentas y efectos que entonces poseían se aplicaran a la es-
tinción de la deuda o al pago de sus intereses. Por el de 8 de Marzo de 1836
fueron también suprimidos todos los monasterios, conventos, colegios, congre-
gaciones y demás casas de comunidad o de instituto religioso de varones, inclu-
sas las de clérigos regulares y las de las cuatro ordenes militares que a la sa-
zón existían en la península, islas adyacentes y posesiones de Africa, esceptuán-
dose únicamente los colegios de misioneros para las provincias de Asia e5ta·
blecidos en Valladolid, Ocaña y Monteagudo, las casas de c!érigos de las Es·
cuelas Pías, y los cohventos de hospitalarios de San Juan de Dios que se ha·
liaban abiertos en aquells fecha. Probibióse además a los '"eligiosos hacer vi-
da común en lo sucesivo, así como usar públicamente el hábito de su orden
respectiva; y sus bienes raíces y semovientes, rentas, derechos y acciones fue-
ron aplicadas a la caja de amortización para la estinción de las cargas públi-
cas. La ley de las cortes de 22 de Julio de 1837, sancionada en 29 del mismo
mes, reprodujo estas mismas disposiciones, las cuales tuvieron cumplido efecto
en todas las provincias de la monarquia; mas no obstante lo que previenen
existen en la del mando de V. E . institutos ;-e!igiosos, cuyos individuos llac:en
vida común, visten el hábito que a ellos corresponde; y aun Jos que residen en
el santuario conocido por de San Ignacio de Loyola están dedicados a la ense-
ñanza pública sin haberse sujetado a las reglas que la ley establece. La orden
de la Regencia de 6 del corriente tuvo por objeto remediar el mal que de esto
últ!mo resultaba; pero siendo de absoluta nt!Ce3idad cortar e n su raíz <m abu-
so tan reparable y que no puede sostenerse ni a un bajo el pretesto de los
fueros, cuya modificación está pendiente; y que en lo que no se oponga a la
unidad constitucional deben respetarse únicamente, la RegPncia provisional del
reino ha acordado prevenga a V. E .... llevando a efecto en todas sus partes la
ley de 29 de Julio de 1837."
"R. O., mandando que se recojan los títulos, cartillas de órdenes y las licen-
cias de celebrar, confesar y predicar a todos los que hayan sido ordenados de
mayores después de publicado el R. decreto de 8 de Octubre de 1835 por pre-
lados estrangeros o por los que seguian la causa del Pretendiente... Palacio, 11
Abril 1841. (Min. de G. y Justicia)."
"Se previene no se den pasaportes para el extrangero a individuos de la ca-
rrera eclesiástica que se sospeche se dirijan a Roma con objeto de ser allí ha-
REUGIOSIDAD WSPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 527
ro 154. Ya indicamos -al empezar este estudio sobre las dos Regen-
del clero secular en cualesquiera clase de predios, derechos y acciones que con-
sist3Jl, de cualquier or igen y nombre que sean, y con cualquiera aplicación o
destino con que hayan sido donadas, compradas o adquiridas, son bienes na-
cümales. A. 2.• Son igualmente nacionales los bienes, derechos y acciones de
cualquier modo correspondientes a las fábricas de las iglesias y a las cofradías.
A. 3.• Se declaran en venta todas las fincas, derechos y acciones del clero ca·
tedral, colegial, parroquial, fábricas de las iglesias y cofradías de que tratan
los artículos anteriores. A. 4.• El gobierno se encargará desde 1.• de Octubre
próximo de la administración y recaudación de todas las rentas y productos de
las propiedades de toda especi.e pertenecientes basta aqui al clero catedral, co-
legial y parroquial, a las fábricas de las iglesias y a las cofradías, lleV2Ddo
cuenta separada de sus rendimientos, los que se aplicarán a la dotación del
culto y clero, conforme a la ley presentada por el gobierno a las cortes en 23
de J unio último. A. 5.• Pertenecerán a los actuales poseedores las rentas y pro-
ductos que rindan los bienes del clero, fábricas y cofradías hasta 30 de Setiem-
bre de este año. A. 6. • Se esceptúan de lo dispuesto en los artículos anterio-
res: 1.• los bienes pertenecientes a prebendas, capellanías, beneficios y demás
fundaciones de patronato de sangre activo o pasivo; 2.• los bienes de cofradías
y obras pías procedentes de adquisiciones particulares para cementerios y
otros usos privativos a sus índivíduos; 3.• Jos bienes, rentas. derechos y accio-
nes que se hallen especialmente dedicados a objetos de hospitalidad, benefi·
cencia e instrucción pública; 4.• los edilicios de las iglesias catedrales, parro·
quíales, anejos o ayuda de parroquia; 5.• el palacio morada de cada prelado y
la casa en que habiten los curas párrocos y tenientes, con sus huertos o jardi·
nes adyacentes... Madrid, 2 Setiembre 1841. Instrucción para la ejecución de la
ley sobre la ena.gennción de los bienes del clero secular... Madrid, 2 Setiembre
1841. Pedro Surrá y Rull" (Min. de Hacienda).
"Reglamento para llevar a efecto la venta de los bienes del clero secular ...
Madrid, 15 Setiembre 1841. Surrá."
154. DEC. REI.NA, XXVII, 584; CoL. LEYEs, IX, 493. 506; X, 519: "Ley de dota-
ción de culto y clero: A. 1.• Para los gastos de conservación y reparación de
las iglesias parroquiales y sus anejos y los del culto en las mismas, se destina
la parte de los derechos de estola o píe de altar, que hasta ahora se ha exigi-
do con este objeto y los demás recursos que han tenido igual destino, excepto
el producto de las propiedades, derechos y acciones que las leyes han aplica-
do o aplicaren en lo sucesivo a ctras atenciones. Lo que faltare para cubrir es-
tos gastos, según las prácticas relig:iosas observadas en cada pu~blo, se com-
pletará por un reparto entre los vecinos que tengan r esidencia e n el mismo pue-
blo en proporción a sus haberes. A. 2. Los gastos del culto en las catedraies,
Jos de las colegiatas y abadías, mientras subsistan, los de reparación y con-
servación de sus respectivos templos y de Jos palacios episcopales, los de ad-
ministración de la diócesis, lo:; de Jos seminarios conciliares existentes, y las
asignaciones personales de Jos M. RR. Arzobispos y Obispos, gobernadores ecle-
s~ücos e individuos que componen el clero catedral, cc.legia l, abacial y pll!"ro-
quial se satisfarán con los derechos de estola y pie de altar y con Jos productos
de la contribución general del cc.lto y clero que por la presente ley se establece,
E:n la cual deberán ser compr~didos en proporción de sus haberes todos Jos
contribuyentes a las demás cargas del estado, y Jos que perciban sueldo del
tesoro público A. 3.• Todos los gastos enumerados en el artículo anterior, ex-
cepto las asignaciones personales, se agregarán a las cuotas determinadas en
la ley de 21 de Julio de 1838. A. 4.• Las asignaciones personales enumeradas
en el mismo articulo, re compondrán de los derechos de estola y píe de altar
que a cada oficio eclesiástico corresponden según las tarifas y prácticas vígen-
tes, y los que tenían alguna renta procedente de propiedades territoriales, de
diezmos o primicias, o de cualquier otro origen cuya exacción termina, tendrá
también una asignación fija igual a dicha renta, determinada por el año co-
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 529•
mún del quinquenio de 29 a 33, ambos inclusive; pero sin que pueda exceder
del máximo establecido respectivamente para cada clase en la citada ley de
21 de J ulio de 1838. A. 5.• Se aumentará la dotación parroquial con las memo-
rias, obras pías, aniversarios y misas que debían cumplirse por las comuoida·
des religiosas supr imidas, y que se hao de cumplir en la iglesia parroquial, en
cuya feligresía se hallen las fincas afectas a las expresadas cargas; y si éstas
no estuvieren impuestas sobre fincas determinadas sino sobre varias colectiva-
mente, se satisfarán en la parroquia donde se hallaba situado el convento en
que debiao cumplirse. A. 6.• Los ecónomos percibirán todos los derechos even-
tuales que en los anteriores artículos se asignan a los respectivos curas párro-
cos, y la cuota fija además que a éstos correspondiera en su caso, siempre que
no exceda de 3.000 rs. anuales máximum de dicha cuota que se determina para
esta clase. A. 7.• El presupuesto de la contribución general del culto y clero
será la cantidad de 105.406.412 rs., a que queda reducida la suma total de la
estadistica personal y material presentada por el gobierno, bec.ha la deducción
correspondiente de 33.525.605 rs. importe del culto parroquial que queda por el
art. 1.• a cargo de los respectivos pueblos. A. 8.• Se deducirán de la suma to-
tal del presupuesto y rebajarán de la que haya de repartirse a los pueblos 30
millones de los productos o rentas de los bienes del clero, o la suma a que
quedaren éstas reducidas si se verificare su enagenación ... A. 15.• Queda dero-
gada la ley de 16 de Junio de 1840... Palacio, 14 Agosto 1841.•
~lnsti"UCCWn para llevar a efecto la ley de 14 de Agosto de 184J.•
"!.a Dirección general del Tesoro encarga el puntual cumpllmiento de la ley
relativa a la dotación del culto y clero ... Madrid, 19 Setiembre 1841. "
•El Ministerio de G. y Justicia manda formar un nuevo arancel rle derechos-
de estola y pie de altar, según el art. 16 de la ley de 14 de Agosto último.. . Ma-
drid, 29 Setiembre 1841."
"No paguen los eclesiásticos contribución del culto y clero, sin embargo de·
lo dispuesto en el art. 2.• de la ley de 14 de Agosto de 1841... Madrid , 27 Octu-
bre 1842. Calatrava."
155. Cot.. LEYEs, vm, 579: "Decreto de la Regencia mandando cerrar la Nun-
ciatura y el tribunal de la Rota, y estrañando do estos reinos al vicegerente-
D. José R.amirez de Arellano, recogiéndose los breves de 11 y 14 de Marzo de
1839 que le conferían ciertas facultades {DEC. REmA, XXV, 573: "Rescripto pon-
tificio de Gregario XVI, dando facultades al Vicegerente D . José Ramí rez de Are-
llano en lo espiritual de la Nunciatura apostólica de España. para conceder dis-
pensas a los eclesiásticos... Rom4. 9 Enero 1839... Madrid, 20 Setiembre 1839"),
ocupando y reteniendo sus rentas eclesiásticas, los sueldos y obvenciones que
r ecii>a del Estado, y c-.lalquiera otras temporalidade:; que le correspondan co-
mo eclesiástico... El Tribunal :;upremo de justicia, previa la instrJcción del opor-
tuno espediente, consultará lo que se le ofrezca y parezca para que ninguno de
Jos negocios pertenecientes al tribunal de la Rota sufra retraso ni falten a los
españoles las gracias que concedian los M. RR. Nuncios, y por los citaó.os bre-
ves R.amirez de Arellano, sin necesidad de acudir a Roma, lo cual evacuará el
Tribunal supremo como Jo requiere la urgencia e importancia del asunto... Pa-
lacio, 29 Diciembre 1940. A D. J oaquin M.• Ferrer" (Min. de Estado). (Se co-
munica la "Tealización" del decreto en 31 de diciembre de 1840).
Cot.. LEYEs, IX, 185. 189. 225. 297: "Se mandan recoger todos los egemplares:
publicados y que se publiquen a consecuencia de la alocución del Papa de 1.0 "
de Marzo en consistorio secreto, por no haber obtenido el regio execuatur....
Madrid. 17 Abrll 1841. Manuel Cortina."
--
!530 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
cias- 156 : expone unos datos que el lector imparcial debe conocer
antes de emitir un juicio sobre aquella época m:
" M anijiesto del gobierno español contestando a la alocución de
S . S . de 1." de Marzo último: una violenta invectiva en que el Go-
bierno y la nación española se ven acerbamente acusados de perse-
troidores de la Iglesia, de sospechosos en la fe, y como amenazados
de ser excluidos del gremio de la cristiandad si no vuelven en sí. ..
Por fortuna no estamos ya en los tiempos de odiosa memoria en
que a un amago del Vaticano temblaban los tronos y se agitaban
las naciones... Los españoles sabrán en esta ocasión, como ya lo
"han hecho en otras muchas, distinguir perfectamente bien entre lo
·que deben a su fe, no maculada jamás, y lo que deben a su seguri-
dad e independencia; entre los intereses verdaderamente respeta-
bles de la Iglesia de Jesucristo, y las pretensiones injustas y nunca
abandonadas de la curia romana... La cuestión politica o de reco-
nocimiento (a Isabel TI) quedó finida por entonces con la contes-
tación categórica dada a nuestro embajador en Roma y con las ins-
trucciones enviadas al Cardenal Tiberi, Nuncio de S. S. en esta cor-
-te, y al Arzobispo de Nicea, nombrado para suceder pero que no
sucedió a aquél, reasumiéndose todo en negarse S. S. a reconocer
a la reina Isabel mientras no lo fuese también por sus aliados ... ,
librándose en seguida los pasaportes de estilo al Nuncio de S. S.
para restituirse a su país... Negóse al princípio a reconocer al Co-
misario de Cruzada nombrado por S. M ., y no pudiendo menos de
ceder en este punto la concesión del indulto cuadragesimal a un
año, cuando la costumbre era de concederle por diez. Esto aun no
era bastante, y para inutilizar en lo posible esta gracia, se introdu-
jo clandestinamente un breve de S. S. dirigido al Cardenal Arzcbis-
-po de Toledo, autorizando a los confesores a dispensar por sí mis-
mos el indulto a sus penitentes mediante una corta retribución
para pobres. Suprímase por razones gravisimas de Estado el insti-
ucircular (del Min. de G. y Just.) mandando recoger las bulas, breves, res-
criptos o cualquiera otro despach'J de Roma que no haya obtenido el pase del
-gobierno, en cumplimiento de la ley 14, tít. 3.•, lib. 2.• de la Novísima Recopila-
ción... Madrid, 19 ,O_bril 1841. A!varo Gómez."
MSe manda recoger una pastoral del Arzobispo de Zaragoza, D . Bernardo
Francés caballero, impresa en Burdeos, en sentido depresivo de la autoridad
"temporal, como ravon>ble a ~ doctrinas de la curia romana... Madrid, 15 Ma-
yo 1841."
uSe publique un manifiesto del gobierno vindicando su conducta respecto a
la corte d e Roma, y esponiendo los agravios que la España y su iglesia ha re-
-cibido de aquélla desde el reinado de Isabel II; y se recojan los ejemplares de
la alocución del Papa d e 1.• de Marzo último ... Madrid, 28 Junio 1841."
156. DEC. REINA, XXVIII, 116: uSe recojan unas letras apostólicas dadas en
22 de Febrero último que mandan hacer rogativas por el estado de la religión
-de España... Madrid, 13 Marzo 1842. Alonso" (Min. de G. y .!ust.>
157. COL. LE:n:s, IX. 339-347.
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORB(.INICA 531
(
-.
(
b) El Concordato.
Como ya dijimos, el 10 de enero de 1851, Isabel II aceptaba la
dimisión del General Narváez como Presidente del Consejo de Mi-
nistros, y cuatro días después nombraba como sustituto a D. Juan
Bravo Murillo y como Ministro de Estado a D. Manuel Bertrán de
Lis y Rives •aa.
En el presupuesto nacional para 1851 -eon 1.029.577.291 rs.-
se atendía al clero secular, conforme a la ley de 20 de abril de 1849
de la siguiente forma: personal, 80.542.197 y para las Vascongadas,
4.611.434; en concepto de material de culto, 47.864.928, y para las
Vascongadas, 1.319.614; y para las religiosas de clausura, 12.085.523
para el personal, 1.290.845 para sus capellanes y sacristanes, y
2.717.717 para material de culto y enfermería. Un total de 150.432.258
de reales 189•
Por fin, el lunes 12 de mayo de 1851, la Gaceta de Madrid en su
número 6.146, tomo 1.0 , páginas 1-4, publicaba íntegro el Corcor-
dato entre S. S. Pío IX por medio del Nuncio Brunelli, y D. Manuel
Bertrán de Lis en nombre de la Reina. En el artículo 1.0 se decla-
raba que "la religión católica, apostólica, romana, que con exclusión
de cualquier otro culto continúa siendo la única de la nación es-
pañola, se conservará siempre en los dominios de S. M. C., con to-
dos los derechos y prerrogativas de que debe gozar según la ley de
Dios y lo dispuesto por los sagrados cánones".
En los tres siguientes artículos se garantizaba "plena libertad,
respeto y consideración, poderoso patrocinio y apoyo" por parte de
las autoridades en favor de los "sagrados ministros en el ejercicio
de sus funciones". como enseñanza, educación y ministerio.
Del attículo cinco al once se hacía "una nueva división y cir-
cunscripción de d:ócesis en la península e islas adyacentes", a que
ya nos referimos en el primer capítulo de esta segunda parte, cul-
minando el estudio del episcopado. En el doce se suprimían la Co-
lecturía general de expolias, vacantes y anualidad, y el Tribunal
apostólico y R. de la Gracia del E:Acusado. La estructuración de las
prebendas catedralicias y su residencia comprendía los artículos 13
ASPECTO SOCIAL
las de ángel atadas al puño con una cinta. 3.• Que llevando los pies cubiertos.
no usen las mujeres en sus poUeras o basquiñas colas de más de tres o cuatro
dedos, ni tampoco petillos, que son muy provocativos. 4.• En cuanto al exceso
en la p ro[anidad y adorno, lo dejaba , por ser materia muy extensa, a juicio de
los confesores, los cuales dirían cuándo era pecado venial y cuándo mortal,
s iempre que el exceso fuese notable, ya por Jo provocativo, ya por lo inmo-
d erado. Reitera todo lo contenido en el Edicto y Carta pastoral de referencia, Y
afirma que su proceder en esta materia está ajustada a la Sagrada Escritura,
santos Padres, Concilios, etc. y a la real mente de Felipe V, que ha apr eciada
tanto esta importancia y nuestr os mandatos en nuestra diócesis, que se ha dig-
nado mandar se nos den las gracias, y ordena a su Real Consejo se l e informe
sobr e el remedio de los excessos e:rpressados, para e%pedir su Real pragmática,
para la reforma de toda el Reyno, assí en la pro/anidad de los vestidas y ador-
nos en hombres, y mugeres como en la desnudez de éstas.n
25. BAGUENA, El C. BeUuga, 147 : "Resumía nuevamente en doce párrafos lo·
do Jo prohibido en sus edictos anteriores: 1.• Prohibe Jos escotados: manda
que las mujeres cubran sus pechos y pecheras basta el cuello. 2.• Que lleven
Jos brazos cubiertos basta el puño. 3.• Que las basquiñas les cubran los pies.
4.• Que no entren las mujeres a Jos templos con las cabezas descubiertas, ni
con tocas, puntas o mantos transparentes. S.• Que no lleven las colas de más
de 3 o 4 dedos. 6.• Que no lleven adornos en los hábitos. 7.• Que ni hombres
ni mujeres lleven trajes excesivos a su calidad, y a juicio de Jos confesores, a
los que no se enmienden se les niegue confesión y comunión. s.• Que los sas-
tres no puedan labrar las cosas prohibidas. 9.• Prohibición de los bailes públi·
cos. 10.• Prohibición <!e bailes y juegos en que los hombres y mujeres se abra·
cen, secreteen, etc. etc. u.• Juegos de naipes de hcmbres y mujel"!S en familia.
12.• Que las mujeres no sean afeitadas por barberos ni calzadas por zapateros."
26. BELLoCA, Contra los trages, y adarnos profanos, pág. 827 : Prohibe "Jo 1.
la desnudez de Jos pechos, y pecheras de las mugeres , y que los cubriesen b &.Sta
el cuello, y n o usassen los petillos, que usaban, para que comprimido el cuerpo
se entumeciessen los pechos, y se descubriessen más bien; prohibiendo éstos,
assi pcr esta razón, como por la profa.cissima, y vanissima preciosidad, que
algunas usavan en ellos de bordados d e orfl, plata, sedas, piedras preciosas, per-
las, etc. Lo 2. el llevar la ropa por delante tan corta. que d escubriessen el cal-
c;ado, y sus adornos, y que ésta la alargassen de !orma, que les cubriessen todo
el ple. Lo 3. que el entrar en los Templos descubiertas las ~. o cubiertos
con velos trasparentes. Lo 4. el llevar descubiertos los b~. que no llevassen
las mangas de ángel al ayre, sino mangas que pudiesse :levar abrochadas por
el puño. Lo 5. el uso de las colas, que nunca pudiessen exceder de tres, o qüa-
tro dedos. Lo 6. el que (.;()D los Abik>s <!e devoción no se ::rueden llevar sobre-
puestos de oro, plata, sedas, 1~. o cin~ de colores, con qut! se profanicen.
Y últirn2.lllente en este punto de trages, comprebendiendo a hombres, y muge-
res, declarava la suma profanidad, y excesso, que avia en ellos assf por las pre·
ciosas y costosas telas, como Tisúes, y otros semejantes, como también por los
sobrepues tos en los vestidos de galon es de oro, o plata, fluecos de lo mismo,
bordados: excesibos oros en las mugeres, J~s. costosissimos excaxes, afeytes,
etc. y otros adornos, y sobrepuestos semejantes: y finalmente en las mismas mu-
geres, por lo pomposo de sus vestidos, y superfluisíssima magnib.ld, gastando
doblada porción de tela de la que es necesaria para vestirse con decencia una
Señora. Prohibiendo a juicio prudente de los Padres Con!essores doctos, y píos
todo aquello, que les pareciesse notable excesso, respectivamente a la calidad,
y condición d e las personas."
566
33. BocANEGRA, Oración fúne bre de D . Maria A1Z(l de Austria, pág. 36 -5 no-
viembr e 1754--: "¡Ha mugeres del siglo, las que no pensais sino en las vanas.
ctiversiones, en los paseos, en los bayles, en los saraos, y si alguna vez pensais
en el Templo, es sólo para buscar en él vuestro ídolo... "; Sermones, I , 32-33 -ser-
món para el miércoles del Ceniza-: "Si considerásemos bien nuestro ser y el polvo
en que últimamente hemos de venir a parar, ¿cómo babia de haber tanto luxo
en los vestidos... , tanta indecencia en los trages, tanta desenvoltura en los bay-
les .. . "; I, 132-133.144 -dominica III de cuaresma-: ~Aun los templos sagrados no
están esentos de su loca pasión. Delante de los Altares... Aquí se buscan, aquí se ci-
tan, aquí se ven, aqui se hablan, aquí se enamoran... Las modas que cada dia se
inventan, los bayles, los saraos... , los demasiados adornos... "; I, 304-305 -dominica
V de cuaresma-: ~¿De qué deberes no se juzga una mujer dispensada, qüando pue-
de decir : ésa es la moda, ése es el gusto del tiempo, eso es lo que ahora se-
usa? Esta sola autoridad basta para eludir todas las leyes de la I glesia. Predi-
que el Obispo, cánsese el Obispo, mátese el Obispo por desterrarla, nada lo-
grará: porque la moda es primero que todo : la moda lo vence todo: la moda.
se aprecia más que todo: y así aunque el mismo Oráculo de la I glesia se em-
peñe en ello y fulmine a este mismo fin los decretos más terribles -como en
estos dias ha sucedido-, nada conseguirá su soberana potestad."
13ocAmx;RA, Sermones, II, 165-166 173-174 -Sermón de la Purisima Concepción.
de Ntra. Sra., como Patrona de España, hacia 1770 porque en las pág. 100-161
se habla de "los años que llevamos de Patronato son muchos~ (y el Patronato
se estrenó al principio del reinado de Carlos ill) y la edición está fechada en
1773- : "Esas Modas perniciosas y provocativas que ahora se usan? ¿Esas in-
decentes desnudeces de los pechos? ¿Esos trages tan acomodados a la obsce-
nidad y a la disolución? ¿Ese corte de vestido con los altos tan bajos y con
los bajos tan altos? ¿Esas mantillas de clarin o de perspectiva, con que por·
lucir más nuestra pompa y nuestra gala baceis más reparables vuestra torpe-
za e inmodestia? ¿Finalmente será efecto de tan santa raíz esa profanidad y
luxo meretricio con que os presentais muy frecuentemente en los paseos e
Iglesias, con esos meneos y ademanes provocativos, más propios de rameras que ·
de señoras?... ¡Qüinto os darán entonces -en la última hora- en rostro esos
peynados feos, en que gastais tan inútilmente el tiempo! ¡Qüánto desaprobareis
esos calzados de brillo, e:;os qüadrazos de relumbrón, y otros semejantes arreos
del mundo mugeril, para cuya memoria es menester un vocabulario más que
regular!"
34. LA&RRE, Sermones en francés traducidos, II, 3-4: Sermón sobre la inuti-
M
guez de Are llano- 49, junto con otros insignes predicadores 50• Y
por su influencia indirecta, hasta el "contrabando" de libros 51•
Es necesario reseñar la Pragmática carlostercista de 9 de no-
viembre de 1783, en que tras varias disposiciones sobre costumbres,
"se prohiben las fiestas de toros de muerte en todo el reyno, a ex-
cepción de los en que huviere concesión perpétua, o temporal, con
destino público de sus productos, útil o piadoso: esta Pragmática
tuvo origen en una representación del Excmo. Sr. Conde de Aranda,
Presidente del Consejo, en 1770, en la que manüestando los daños
y perjuicios que experimentaba el estado en general, y el común de
labradores en particular, por el uso excesivo de mulas en los co-
ches y carruages, y por las corridas de toros de muerte, que se
executaban con freqüencia, propuso la necesidad de tomarse pro-
videncia para contener semejantes perjuicios" 52 • Entre los intelec-
tuales dieciochescos de fama antitaurina, enumeramos a Sarmiento,
Feijóo, Cadalso y Jovellanos, para cuyo ideario nos remitimos a
lo expresado en la primera parte de este trabajo y a las monogra-
fías anf:eriormente citadas en relación al carácter español (c. m,
art. 1, A) . Pero la "fiesta nacional" seguiría arraigando en el alma
popular gracias a la protección de Carlos IV -en las fiestas de su
coronación, del 22 al 28 de septiembre de 1789 53- , de Fernando Vil
-con su asistencia frecuente y estableciendo una cátedra de Tau-
romaquia en Sevilla- e Isabel II -en "las bodas reales"- 50•
Similarmente, las costumbres, capitaneadas siempre por la vo-
luble e inconstante moda, evolucionarla con la vigorosidad y apa-
sionamiento de la juventud. A la par de las diversiones propias de
cada época, manifestaciones del vitalismo de una sociedad. Fernán-
dez de Córdova pinta la madrileña del siglo XIX -1824, 1835, 1836,
1838, 1846... - ss, con su CortP. 56, cafés 57, ópera ss, teatros 59, bailes
de máscaras 60• Otro contemporáneo que retrata su sociedad, Me-
sonero Romanos -a quien Fernández de Córdova nunca "trató"
pero elogia por sus reformas municipales 61- describe "El Parna-
sillo", los poetas, los literatos, los espectáculos, la prensa, "El Ate-
neo" y "El Liceo", el "Madrid filarmónico y social" y las ''mejoras
realizadas por el Ayuntamiento" 62.
Emerge sobre todos 63 la acerada pluma de Larra~: cafés, toros~
Corte, defectos sociales -"empeños", "casarse pronto y mal", pe-
reza en "vuelva usted mañana", "los calaveras", "el duelo", etc.-,
periodistas, "El Ateneo", literatos y espectáculos 65•
55. F . CóRDOVA, Mis 171e11Wrias, I, 4~ . 186-190. 228-234; II. 168-195. 242. 253-257.
56. F . CóRDOVA, Mis memorias, I , 67-72; ill, 130. 415-419.
57. F . CóRDOVA, Mis 171e11Wrias, I, 89; Il, 186-187.
58. F . CóRDOVA, Mis memorias, I, ~92; II, 181-186; III. 415-419.
59. F. CóRDOVA, Mis memorias, I, 89; Il, 179-180. lll, 128.
60. F. CóRDOVA, Mis memorias, I , 119.
61. F. CóRDOVA, Mis memOrias, I, 188; Il, 1~191.
62. M. RoMANos, Memorias de un setentón, VIII, 2.•, 61-76. 89-90. 96-97. 133-
145. 147-176. 179-186. 197-214.
63. MODEsTO F'ERNÁNDEZ, La Hacienda de nuestros abuelos, 282-291.
64. F . CóRDOVA, Mis memOrias, I , 180; M. RoMANOs, Memorias de un Setentón,
vm, 2.•. 00.92; Al.M.'IGRO SAN MAlrriN, Prólogo. Artículos Completos de !..ARRA.
pág. XV-CXV; ARANGUREN, Moral y Sociedad, 81-84. ~91.
65. I.ARRA, Artículos completes, 5-18. 21. 29-41. 49-66. 176-177. 206-218. 257-264.
281·285. 337-668. 671-837. 1167-1169.
ARTÍCULO 2
POLITICA RELIGIOSA
apuros financieros que causaba la guerra con Francia. Con suprema injusticia la
hizo recaer :;obre los bienes de capellanías y fundaciones benéficas, dejando sin
fondos a multitud de establecimientos de enseñanza, en la miseria a los enfer·
mos y asilados y a la más completa indigencia a muchos sacerdotes. "¿Cuántos
vemos ya pedir limosna en las puertas ele los templos cuyos altares servían;
vagar en solicitud de ella por las calles y casas, y aun presentarse en los cam-
ms a recoger la espig:~ ~ntre miserables clUldrilla.! de ambos sP.Xos?" (RmUERA
VALDELOMAR, Peticiones sobre reparo de agravios causados en el fatal reinado de
Carlos IV, dirigidas a la nación españo!a reunida en Cortes, Madrid, 1810, Intro-
ducci6n). Godoy quiso disculparse de aquel despojo, alegando que la venta de
los bienes de hospitales y otras fundaciones benéficas se hizo durante los tres
años que P.Stuvo apartado del Poder <Cuenta dada de su vida política ... , t. n.
cap. 50). La cifra de 1.633 millones para el producto de la desamortización de
Carlos IV se halla en Fernández González (La Hacienda de nuestros abuelos).
Este inicuo despojo produjo algo más de 1.600 millones de reales, que se eva·
poraron sin dejar huellas, asi como otros muchos pedidos y donativos."
69. DECREI'OS DEL REY, Vll, 211.
70. D. oartz, La sociedad española, 161-162.
71. MACANAZ, Testamento de España, 11.
574 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
a) Ambiente general.
2. - Alicante:
Bajando por la península, escuchamos al párroco de Aspe, del
Obispado de Orihuela (Alicante), Dr. D. Ignacio Gutiérrez Polop,
quien alli mismo, ·•en la solemnidad del Corpus de 1809", había
pronunciado su discurso "España regenerada" como Teólogo Con-
sultor y Capellán de Honor del srnmo. Conde de Altamira, Presiden-
te de la Suprema Junta Gubernativa de España y de las Indias, ''pa-
ra reanimar a los españoles en defensa de la justa causa" 85 • En 1814,
otro discurso, "La Redención de España = el Sr. D. Fenando VII";
con ocasión de "las solemnes fiestas, a expensas del Ayuntamiento
y Clero de la Villa de Aspe con el plausible motivo del feliz adveni-
miento de nuestro suspirado Monarca". Y naturalmente, al publi-
carlo, lo dedica " al Rey N. S.", ya que, después de la confesión de
su "sinceridad -la de un español que no es bastardo ni está corrom-
pido por las máximas y sofisterías de los novato res-", pide a la Vir-
gen Santísima "prospere la vida del Sr. D. Fernando Séptimo en
largos años de gobierno para nuestra felicidad: haced que jamás
Olvide que es REY POR LA GRACIA DE DIOS" 16•
3. - Murcia y Cartagena:
Casi al mismo tiempo -19 y 22 de mayo de 1814, respectivamen-
te- se oyen idénticas palabras: el Párroco de San Miguel de Mur-
cia, D. Jerónimo Alarcón, en su iglesia, da gracias a Dios ''por la
feliz colocación del Rey N. S. en el trono de sus mayores", recordan-
do - según el relato de D. Bias Ostolaza, el 25 de julio de 1810, en
Cádiz 87- la religiosidad de Fernando y su familia en Valen~y:
"apenas se ausenta Tayllerand, tratan de hacer un muy decente ta-
bernáculo, una hermosa custodia y sagradas vestiduras" ss; y en la
Catec:Ir-a.l cartagenera, "con asistencia del Sr. Obic;po, ambos Cabil-
dos, Gefes Militares y demás autoridades, e inmenso Auditorio de
toda clase de personas", el Canónigo Lectora!, D. J osé Escrich, alu-
de a una anécdota del regreso de Fernando para esperar una cola-
boración de Altar y Trono, sac.!"alizando el absolutismo femancfulo:
"la Igle5ia se l!onrat-a con que los Reyes oc•.1p"sen el lugar de honor
y distinción, y Fernando como es bien sabido, no quiso admitir es-
ta preferencia en el coro de Zaragoza, mucho menos pensará en ser
árbitro de las leyes eclesiásticas; él invitará los Prelados de España
para que juntos con arreglo a los sagrados cánones, ordenen y re-
formen según ellos lo que sea digno de reforma; Fernando sosten-
7.-Sevilla:
24 de Septiembre de 1814. Fr. José M.' Fariñas, en la catedral
sevillana, da "gracias al Altísimo" en nombre del "Santo Tribunal
de la Fe por su restablecimiento, al regresar a sus respectivos tro·
nos los dos invictos Soberanos ambos Séptimos Pío y Fernando".
Una apología de la Inquisición. Tal vez la más apasionada. La que
rezuma un resentimiento impar. Hasta la elección de la fecha -ani-
versario de la instalación de las Cortes en la Isla de León- es apro-
104. FARlÑAS, Sermón 24 sept.iembre 1814, p. ~ = "El Rey sabio disipa los
impios, e Inclina sobre ellos el castigo (Prov. :.!, 26). Triunfó, en !in, la Reli-
gión, de ese horrendo monstruo de la impiedOO que pretendió ocultarse baxo
la brillante máscara de la filosofía, disimulando sus pezversos planes de des-
trucción con los especiosos pretextos de lilustra.ción y reronna general: bolló, por
último, la amada patria con magestuosa pisada la cerviz altanera del feroz dragón
de la división escandalosa, que solicitaran fomentar sus desnaturalizados hijos, au-
xlliando en las pretensiones más injustas la bárbara conducta de sus encarni-
zados enemigos: se desquiciaron ya las puertas del infierno, que hicieron los
más obstinados esfuerzos para prevalecer contra la Iglesia, cubriéndola de ig-
nomJnia, y estrelló su rabioso corage contra la roca innoble de la fe: ya cayó
por tierra la soberbia estatua de ese poder tan decantado colosal, por sus deli-
rantes adoradores, quedando reducida a menudos fragmentos por la fuerza irre-
sistible de una pequeña piedrecita, que se desprendió del alto monte de la cons-
tancia Española, y el enorme gigante, que insultó con arrogancia insolente a
la pundonorosa España quedó cubierto de la confusión más vergonzosa, porque
pretendió temerario medir sus ponderadas fuerzas con las irresistibles de una
Nación proclamada en todos los siglos fecunda madre de Héroes. cat6licos Es-
pañoles, triunfó la Religión, venció la patria, y vuestros gloriosos triunfos, hi·
jos siempre de nuestra fe, afianzaron la tierra, y aseguraron la corona de los
dos inclitos Soberanos Pio y Fernando, ambos Séptimos de este nombre res-
petable.
MSeñor Ilmo., ya no puede duda.rse : Pio Vicario de Jesu-Cristo, y sucesor de
San Pedro, reside en Roma, y desde ella dirige, y hace la satisfacción de la
Universal Iglesia: Fernando desde Madrid gobierna con equidad y justicia su
Reyno, que le han conservado la fidelidad y la sangre de los Españoles, con-
tra las ambiciosas miradas de unos déspotas obscuros, sin religión, sin talen-
to, sin educación y sin politica: se cumplió a la letra en Roma y en Madrid el
oráculo divino: el Rey que se sienta en el Solio del juicio, con su vista disipa
todo mal (Prov. 20, 8). El Rey que sentándose en el alto trono de su elevada
dignidad dice un Escriturario, ilustra, gobierna, dirige y juzga a sus pueblos,
sólo con su vista destierra todas las maldades, y los malvados; porque temien-
do éstos el juicio, la ir.:., el castigo y 13 venganza del Rey, huyen y se esconden,
hasta los que maquinan, o después habían de maquinar alguna maldad, d esis-
ten de sus proyectos, viendo la firmeza del Rey en la administración de justi-
cia; porque ven que lejos de descuidarse, entregándose al ocio, ocupa el solio
velando, haciendo uso de su autoridad y exerciendo a quel poder que recibió
de Dios, para acreditarse~ con :os buenos, y terrible juez con los malos:
concediendo a aquéllos grandes premios, y a éstos duros castigos. Asi habla el
Maestro de la expositlva Comelio Alápide (in ezp. ver. 8, cap. 20 lib. Prov.).
"Sólo el i."'lSOlente descaro que engendra el resentimiento, y la obscura r.en-
sura que puede formar una escasez miserable de principios politicos, podrá
echar menos en los dos invictos Pio ~- Fernando, aq~lla firmeza y tesón, que
recomiendan la autoridad soberana; mas los que conocen las ingentisimas difi.
cultades de la delicada arte de gcbe= los Pueblos, y en unos tiempos en que
la más escandalosa arbitra..-iedad babia trastornado todo el orden, sepultando
a los reynos en la anarquía más espantosa, saben que si aun no l:1a obrado con
entera libertad la justicia, no tarda este suspirado mo::nento, t'n q'lle deba des-
plegar su magestuosa energía; y están ciertos que llegado, no deben esperar su
comp~eto desahogo las pasiones resentidas de unos Soberanos, que sí saben
apreclar el verdadero mérito y detestar ios delitos; desean también respetar las
leyes, y complacer la humana flaqueza. ..
"He aqui los triunfos más gloriosos de la Religión y de la patria. Pero ¿qué.
católico creyó completos estos triunfos, permaneciendo obscurecido, y sin re-
presentación el Tribunal Santo de la Fe? ¡Ha! Los Pastores del rebaño de
..Jesu-Cristo repitieron aquellos fervorosos clamores, que las insensatas opinio-
REUGIOSWAD HISPA.."<A Y SOCIEDAD BORBONIC" 585
los oficios del Tribunal se les obliga a respetar la fe que profesaron? Infelices~
me valdré d e las mismas expresiones del gran Agustfn (Epist. 185 ad Boni!~
cap. 3, n . 13): una grande misericordia se les dispensa. qüando pOr la fuerza
de las leyes son separados de la secta en que se extraviaron: es verdad que·
primero se les hace fuerza; pero esto es para que después sanen de la enfer-
medad, acostumbrándose en la religión católica a los preceptos, para formar
buenas costumbres. Enmudézcan ya los implos contra el Tribunal, o dlgannos ¿en
que se obscurecen los recomendables privilegios de la naturaleza racional, y
padece la heertad del hombre, qüando los oficios del Tribunal dirigidos a sos-
tener la Religión y hacerla conocer, y cumplir el mayor de sus deberes, lejos
de obscurecer los unos, los ennoblecen; y en vez de debilitar la otra, la per-
fecciona, separándola del crimen?... Cba=latanes, por no decirles blasfemos ...
"Ya vela la Inquisición, y :os esuuros se miran apoya4os firmemente en el
orden que los sostienen: los =cas reposan tranquilos a su sombra: EL ALIAR
Y EL TRONO se afianzan sobre unas bases solidlsimas: la a!ligida humanidad res-
pira, y la sociedad prospera: viviendo la Inquisición, vive la Religión, vive la
patria, y el católico español respira una libertad santa, capaz de hacerlo feliz-
en esta vtda y en la eterna bienaventuranza. Amén ."
105. Docru:ros DZL REY, I, 132-134. 185-186; ll, 4-11. 159. 178. 207-212; ID, 111·
112; Apéndice, 1S6; VI, 144.
106. CASCAL.LA, Sermón, 14 a<:tubre 1814, p. 28-29. 32-33. 41 : " ¡Libertad reli-
giosa! QUalidad sobrenatural del hombre, concedida a su naturaleza desde el
momento mismo en que el supremo Hacedor le forma a su imagen y seme-
janza... La verdadera libertad del hombre consiste en estar Ubre del pecado, y
sujeto a la justicia. .. No, no hay libertad verdaderamente religiosa, donde no
habita el espíritu de Dios... Fernando restablece el santo tribunal de la fe, para
que jamás triunfen, ni aun existan en España los enemigos de aquélla. .. Mez-
quitas, Sinagogas, y Pagodas : no el'teis jamá3 en los dominios de Fernando. La
libertad de imprenta tan decantada y tan úb! a los !ilósofos, ~ ya abolida;
y las prensas sólo sudarán para damos escritos que en nada manchen la pure-
za de nuestra creencia... ¡Bendito seas Príncipe amable y dichoso!.. . '!ü has
sido el protector de nu~tra hbertad religiosa, defendiendo el dogma, conser-
vando la disciplina, y respetando los ministros del culto, qüando todo era ata-
cado por los filósofos impios de nuestro siglo.~
107. ANÓNDIO, Oración de la R. A. E. , p. 14: •Será el restaurador de la feli-
cidad y opulencia de la monarquía; y en cuyas primeras providencias y elec-
ciones encontró este cuerpo motivos de exercitar su gratitud, viéndose reinte-
grado en sus antiguas prerogativas, y colocados en altas dignidades y distin··
guidos empleos algunos de sus individuos. No es de dudar que por estos me-
dios volverán aquellos siglos de ilustración y de grandeza para España.•
REUCIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 587
9. -Aragón:
Los aragoneses, más o menos conscientemente, habían prepara-
do la gran transformación politico-social de España -Lafuente 109
108. Ro&RJCUEZ CARRIU..O, Triunfos, p. 3-15: ~Este Nazareno hermoso ha con-
!und.ido la arrogante y vergonzosa sabidurla del siglo d.iez y nueve... En Ma.d rid
donde se sabe tanto, y donde a la presencia del Rey Fernando no tiene lugar el
ateismo, nl el natural:ísmo ... ¡Ob necios, necios! renunciad estos proyectos cri-
minales de ilustración ... Fernando viene, Fernando llega, Fernando avanza al
Fluviá, ya entra en Gerona, ya se postra rendido a los pies de la soberana Ma-
dre de P.ste Hijo Divino que desde la eternidad tenia trazado este plan (para
vosotros desconocido) de hermosísima poUtlca.. Alli valancean las novedades;
alll se resienten las instituCiones; de alli sale la ch1spa eléctrica que in!1ama
los pueblos para recibir con el mayor entusiasmo al enviado del Señor qllf' tie-
ne impreso en el alma. Ya se desploman las lápidas; ya se abrasan los códigos;
ya se sofocan los escanda!os; ya se encadenan las Curias : Fernando triunfante
entra en su corte, sube a su trono, se sienta en su pabellón, el telón se corre;
desaparece el drama; y Cnisto, autor de tamañas obras, vive; Cristo, reyna;
Cristo impera; Cristo '1'IUlTida... Fernando, el rellgiosisimo Fernando da testimonio
de s u Divinidad, manillesta su reconocimiento, y empuñando de nuevo m su
nombrz el cetro y la corona, declara altamente Cpan. la última coa~ de
los ateos) que el Señor ha conservado SJ.D mancha su Ce, qüando de aquí iba,
y qüando allá miraba, y qüando de allá volvla. Del trono de Fernando salen
decretos sabios para defender 14 religión sar.ta de Wl Dios que ha obrado tan-
tos prodigios por defender el trono de Fernando. Por Fernando triunfa hoy el
Evangelio; se alegra su Iglesia; se consuelar: sus ministros; se levantan los des-
tierros; se terminan las causas; se acaban las dilapidaCiones; se ordena la ad-
ministración; vuelve a su trono la just:feia; se sofocan las opiniones. y la paz
de Dios, firmada por el Rey Fernando, empieza a reparar los males infinitos
de la regeneración francesa; tanta verdad es que Dios solo por el ministerio de
Fernando ha salvado nuestra religión, ha salvado nuestra política, y ha obra-
do la salud universal de la España en rned.io de su corte."
109. Lm1ENn:, Historia de España, XXVI 93-94.
588 ALFREDO MA.RTINEZ ALBIACH
10. - Cataluña:
La última tierra hispana que abandonó Napoleón. Fernando ya
se hallaba "restituido al trono de sus mayores". Por eso los prime-
ros entusiasmos de la liberación van dirigidos a sus héroes: el 6 de
junio de 1814, Manresa celebra "la solemne acción de gracias a la
Virgen por el triunfo del Bruch", y se apresura su predicador -el
capuchino Fr. Silvestre de Barcelona- en "dedicarlo al Rey N. S.
por el M. I. Ayuntamiento de la ciudad" 112 ; el servita Fr. Martín
Estaper canta en la catedral barcelonesa "la fidelidad de Eulalia a
los deberes del christianismo y la de Barcelona a los del patriotis-
mo", en la festividad de la santa -año de 1815-, historiando "sie-
te años de dominación francesa" con sus héroes y sus "solos seten-
ta renegados" 10; y el agustino calzado Fr. Alberto Pujo! -que ya
110. F . Discur so, 28 octubre 1413, p. 1-8.
NAVARRETE,
111. F . Oración, 15 de junú> 1815, p . XVIII-XX. XXV-XXIX: "Re-
NAVARREIE,
cordemos la causa del Escorial, para hacer saber a la Europa culta que... to-
davia conserva España la integridad y las virtudes de los Lain Calvos y Nuños
Rasuras. .. Burlado tari extraño y temerario proyecto pof l'l superior perspica-
cia del Pueblo Español que previó la grosería de esta trama, dirigida sin duda
a menoscabar las altas ideas que casi por instinto habla formado de un Prín-
cipe amable y d~graciado; tiembla la mano oculta, y desconfiando del exter-
minio de aquél a quien defienden su inocencia y el amor de los pueblos, qüal
Leona furiosa, que ve arrancada la infeliz presa que lleva entre sus gli.IT3S, se
vuelve sobre sus fieles · servidores y leales amigos del perseguido Príncipe, para
saciar en ellos su desesperada rabia... En el cautiverio de Valenc;ay: ... lazos
que se les arman,... tramas urdidas con tan siniestros fines,... mezquindad y
groseria con que se iba estrechando la suerte de los Príncipes... "
112. S u . = ill: BAR~m.. Elogio, 6 :le junio 1314, ¡>. 18. 23 : ~7c..dos 1~ es-
fuen:os del general Swarts r.o pudieron penetrar, y qut:daron cortados en les
sitios del Brucb: al pue.bw santo se prometió que cinco de ellos perseguirían
a ciento de los extraños CLev 28, 8); pues esto vio Manresa, desde las alturas
del Bruch fueron perseguidos los .tranceses hasta acorralarse en Barcelona .. .
Sin perder un solo h ombre (no hubo más que un solo herido) ¡qué prodigio! .. .
Entre los Lloveras, Monterdits, Bagets, Ramblas, Clérigos de la Palma todos
intrépidos, nos ha dado un Manso, la gloria del catalán, el azote del enemigo,
nacido para ruina de los franceses: D. José Manso."
113. ESTAPER, Panegírico, p. 3. 11-13. 17-21: "Después de siete años de duro
cautiverio los unos, y de dolorosa expatriación los otros celebrais por prime-
ra vez en el seno de la más dulce libertad, y presididos por vuestras legitimas
autoridades (celebró el Pontifical el Ilmo. Sr. Obispo, y asistió a la función el
REUCIOSlDAD HISPANA Y SOClEDAO BORBONICA 589
el 16 de abril de 1815 halagó los oidos del General en Jefe del Prin-
cipado en torno a su "admirable" caridad y la de Fernando vn nL-,
118. Acuun::RA, Serm6n, 28 ::le abril 1815, p . L 22: uC&stas donselles, zelosas de
vostre honor, veniu al Sant Christo de Piera, igualment que en lo Calvari veu-
reu a vostra Princesa la Verge Santissima, que vos animará a conservar vostra
virginitat contra lo descaro y Uiberti7Ultge del dia.n
119. GoÑALONS, Sermón, 3 Julio 1814, p _ 14 : use verificará; sí, podemos es-
perarlo; se verificará el vaticinio de los leales madrileños, qüando al ir a im-
poner el nombre de seis Reyes de mérito inmortal, exclamaron transportados
de gozo: és!.e, si, que nos ha Ge hacer felices."
120. ALFARO, Oración, 19 Julio 1815, p. 1-64; Cfr. 1.• parte, cap. L• , art. 2.•,
B, d.
121. ALFARO, Oración, 16 Agosto 1815, p. 40.
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 593:
b) Presión directa.
122. MARTÍNEZ, Oración, 8 Noviembre 1814, P . 69: MUn Prelado (el Excmo.
Sr. D. Pedro Gravina, Nuncio de S. S .) tan ilustre por su nacimiento; pero
más ilustre por sus virtudes, y por la firmeza y apostólico zelo con que en
tiempos borrascosos se opuso al torrente de la tmpied4d, haciendo y padecien-
do con muy es!or73do ánimo."
123. SALVADOR, Oración, 2 11UlyO 1810, p. 6-14; Cfr. 1." parte, cap. 1.•, art_
2.• B, b .
124. CASTEJÓN, Sermones varios, t. I -III; Luis el Grande. Oración fúnebre,.
p . 3-18; Oración fúnebre de Luis el Delfín, p . 3-70.
594
x:andros en sus respectivas cortes; pero aun es poco: yo hice que los Jlilitares
agraviados se olvidasen del abat:il!úento en que yaclan y electrizasen la nació n
a tu favor (Sabido es que el Militar fue tratado de mercenaria en el Gobierno
antiguo y que fue el primero en ponerse de parte de Fernando VII en Gerona,
Zaragoza, Valencia, Sevilla, Xerez y otras provincias, a quien siguió generosa la
parte sana de la nación); que Zaragoza, Valencia y su carrera donde disfrutaste
las más dulces protestas de su amor y de tu soberania; que los Reynos de An·
dalucia y Provincias más distantes que carecieron de tu deseada vista, en fin,
hice que todo español recto reuniese sus votos, levantase las manos al cielo, y
te proclamase en medio de mil peligros, basta aterrar a los enemigos, basta
abrirte las puertas de la Corte y conducirte al Trono, quedando aquéllos a tus
pies confusos y sin manos como Dagón al frente del Arca del T estamento: ...
¿pude hacer más por tí? Ahora bien, Fe.mando mio, ¿con qué r esponder a tan-
tos beneficios? ¿Qué has hecho o haces por mi, por mi causa y por mi pueblo?
ROlO& RATIOta:M VIU.ICATIONIS ro.u: (Dame cuenta de tu administración). Señor,
esta insinuación basta para un corazón fiel y agradecido como el de V. M .: bas-
ta para que V. M . entienda la obligación que tiene a unirse cada dla más y más
con un Dios, que tan particularmente lo distingue en su cariño; basta para de-
cirle allá en el retiro del corazón con toda la ternura de que es capaz V . M.
Qum REI'RIJIUAM DoJm.'"O PRO OJINIBUS QUAE REI'RIJIUIT JaHT? ¿Qué podré baoer,
Dios de mi vida, para llenar la grande obligación en que me habeis puesto con
tantos Y tan grandes beneficios? QuiD RITRIBUAM? j Ah Jesús de mi corazón! Ya
sé lo que haré: poco es el sacrificio de mil vidas que tuviera en aras de vues-
tra ley, echaré mano al Cáliz de vuestra Pasión para que os pagueis de vuestra
propia sangre lo infinito que yo os debo : CALleo& SALt."TAJUS ACCIPIAM. Señor, si
asf lo hacels, habrels respondido a Dios C077W persona po.rticular... Resta ver
cómo habels de responder a los cargos que os haga C077W Rey.
MQue la primera dignidad de un Reyno es imposible desempeñarse a gusto
de todos, es tan cierto que sólo puede ocultarse a quien no tiene uso de razón ...
Qüando entra a reyoar en una Nación dividida en facciones. que se devoran mú-
tuamente, que s u principal empeño es r eprobar unos lo que hacen otros, poner
al Reyno en confusión, y vivir cada uno a su Hbertad. Pero no desmaye V. M.,
porque este mismo desorden hace resaltar más la conducta pacüica de V. M .,
y descubre el carr.ino que ~ debe tomar en medio de tan penosos extremos.
V . M . ya se ha manifestado repetidas veces lzuho todo a todos como Pablo (El
más discolo que observe la vida, movunlent.os y providencias que da Fernan-
do VII por la felicicüul de sus tl(l.S(tllos, se convencerá que nada le resta para
hacer como Rey y como Padre; pero la felicidad de los vasallos y paz de la
Nación no se verá hasta que depongamos el espiritu de partido que sostiene
la división que Ms devora. La experiencia va enseñando ser el negocio princi-
pal de España acabar con esta discordia. El Rey tiene muy en el corazón la
sentencia del SalVAdor, que anuncia la desolació11 de un ReynQ divid:d.ci .m sf,
DESOLAIIITUR, y es menester que los Sabios, Consejeros y Politi.::os ayuden a S . M.
a buscar W3 medios, para tocar en este tan digno objeto. No hily fdlcidad sin
umón; pues a trabajar por :a unión de todos; y cada UD(I en su respectivo es-
tado), para traer a todos sus vasallos al punto de la equidad, al seno de su
paternal corazón. Estos oficios de bondad han de llevar a su roano derecha la
justicia que S . M. debe sostener, como que hace la causa de un Dios que lo ha
puesto en su lugar; contando con que a pesar de tan recomendables diligen-
cias, los malos reprobarán y los buenos aprobarán; pero no sacó más partido
Jesucristo. SI V. M. no lo hace asl, PEJIDERÁ la tranquilidad del corazón; y el
mismo Dios, que para V. M . ha sido tan bueno, se convertirá en Juez riguroso ...
MBaxo este pri'ncfpio vamos a prevenir los cargos que Dios puede hacer a
V. M . en esta parte; vamos a examinar : no delitos que V. M. haya cometido,
596 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
con el fin de que se ayude al pobre soldado y demás necesidades del Reyno.
¡Bendito sea!). .. Te presentaste en ese Hospital General, y enternecido al ver
tanta calamidad exclamaste en tu corazón con el Apóstol: ... Sabed probrecitos
pacientes, que siento en mi corazón vuestras dolencias. .. Te metiste por esas
cárceles y calabozos, animando a los pacientes, dando libertad a qüantos per-
mitía la justicia, y aliviando a todos en sus prisiones, y sustento... ¡Gran Dios!...
Haced que obren en nuestro corazón los exemplos de su virtud, para que reu-
nidos en caridad, observemos vuestra ley en esta vida; y con el amable Fernan-
do a la cabeza, os alabemos por una eternidad de siglos en la gloria. Amén. N
126. SALVADOR, Sermón, 24 Febrero 1815, p . 3-16: "MALos MALE PERDET, ET VI-
NEAM SUAM LOCABIT ALIIS ACRICOLIS (Mt cap. 21; Le cap. 20) (Hará perecer de mala
muerte a los malvados, y arrendará la viña a otros viñadores). El Señor lo dice,
y lo cumplirá. El colono que no trabaja bien la hacienda, el Rey que no admi-
nistra con equidad el Reyno, se expone a ser despojado de él ¡Terrible anate-
ma!. .. Pues si quereis, Señor, hacer vuestra felicidad y la nuestra; si quereis
evitar el golpe de esta sentencia, debeis velar, y aplicarla a los colonos a quie-
nes encomendais el cultivo, qüando no cumplen con su obligación... La grande
Teresa de J esús como Embaxadora del Rey eterno comunicó a vuestro inmortal
abuelo el justo, el prudente Felipe II, en solas dos líneas de una carta: Acor-
daos, Señor, que Saúl fue Rey escogido y U71.gido. Al leer este papel aquel gran
Principe, dice la historia, que se sobrecogió un poco; que luego conoció la pa-
labra de Dios por medio de aquella celestial heroína; que volvió sobre si de
ciertos d escuidos, que le ponían en peligro; que veló, y oonsiguió en gran par-
te la felicidad de su Reyno; y que se perfeccionó en términos de que a poco
tiempo la V. Estefania de los Apóstoles, hija de la Santa, le vio salir triunfan-
te del tribunal de Dios, favorecido de la Virgen Stma., a quien había hecho
particularmente servicios...
"Os repito con mi Santa Madre: "Acordáos, inmorlill Fernando, que Saúlfue
Rey, que fue escogido por Dios, que fue ungido por su Profeta, y que al fin
fue desechado de Dios, que perdió la vida, el alma y el Reyno, por no cumplir
con su obligación... Ahora bien, ¿no podré yo contar con vuestro inocente co-
razón para iguales o mayores frutos que los que prodw:eron estas palabras
en el vuestro heroyco abuelo Felipe II? ¡Ah! Sí. No me queda la menor duda.
Ya os •~ vigila:lte CiTTOjan~.o de 7Uestrc lado a los q-._¡e no os aman, rJ o~ di-
cen la verdad. Ya os veo entresacando de las Oficinas y Secretarias ((-recorde-
mos los continuos cambios de Ministros de Fernando VII en esta etapa-)) la
basura (si me es permitido decirlo así) que inicuamente se ha introducido en
ellas en los últimos tiempos de confusión ...
"Por exemplo, hay en la viña de España operarios de Hacienda: éstos de-
ben tener manos muy limpias, intenciones muy puras, y obras muy calificadas
para no interesarse injustamente por sí, por sus amigos, por sus parientes, por
sus aliados, por los que no tienen mérito alguno, en el uso de los caudales del
Reyno, en el repartimiento de los empleos. ¿Pero qué sucede? ¡Ah, señor! Yo
salgo de considerar esta grande obligación, y encuentro al Pueblo que ve, que
suspira, que llora todo lo contrario. Encuentro que apenas entra alguno de es-
tos operarios en un elevado empleo, qüando se levanta ·con él toda su casa,
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 599
128. G. BERMEJO, Oración, 2 Mayo 1817, p . 6-7. 12-14 : Cfr. 1.' parte, cap. t.•,
art. 2.•, B, b .
129. OSTOI.AZA, Discurso, Domingo 3.0 Adviento, 1814, p, 4-30: ~Gracias sean
dadas al Dios de nuestros padres porque con el regreso de V. M. nos ba liber·
tado de los males que nos amenazaban, y ha pagado con exceso nuestras fati·
gas presentándonos un rey el más a propósito para unos tiempos en que el
espfritu de irreligión amenazaba apoderarse de las clases más interesadas en
apagarlo; un rey que junta a una piedad sólida una laboriosidad que casi toca
la raya de la imprudencia; un rey en (in que por su vida pública y privada
realiza un antiguo anuncio, de que será modelo de reyes (~ nota alude al
apéndice de su sermón en Cádiz: Cfr. 1.' parte, cap. 1.•, art. 2.•, B, e, b ))-)
¡Qué fe! ¡qué religión tan sincera! ¡qué defensor tan ardiente de la iglesia y
de los altares! Si señor, lo palpamos; la causa del cielo es la de V. M. Como
DO conoceis en las p:rosperi.d ades sino los beneficios de Dios, adorais en toda
suerte de acontecimientos las órdenes secretas de su providencia, y como DO
obrais sino por Dios y para Dios, en todo encontrais ocasión para rendirle bo-
menage. Por esto ha querido el Señor bendecir vuestras santas intenciones, y
confundir el orgullo de vuestros enemigos implos, para dar a los pueblos una
lección práctica de que la piedad, como dbro el Apóstol, es útil para todo, y
que proporciona no sólo la fel.icid4.d futura, sino también la presente... (S. M.)
nos da un grande testimonio mezclándose con nosotros en la iglesia para oir
las amonestaciones de los ministros del altar con más placer que las liso~as
de los cortesanos humillándose como el Bautista ante ~1 acatamiento divino,
no reconociéudose digno de tocar aun los zapatos del Señor... ¡Qué contraste
tan grande entre la astucia de los fariseos y la santa sencillez del Bautista;
entre el orgullo secreto de los primeros y el santo desprendimiento de éste!
DIPUTADOS de un CONGRESO corrompido, afectando deseo de reconocer la autori·
dad del Meslas, no buscan sino pretextos para disputarle sus derechos. Ellos
temen perder aquella influencia que hablan logrado violentando las leyes e in·
terpretándolas a su antojo. ¿Tú quién eres. le dicen, con qué autoridad exerces
un ministerio tan alto? ¿Y v~tros quiénes sois, pod:ía replicar el Bautista,
para exigir de mi los titulos con que exerzo mi comisión? Vosotros, intrusos
legisladores, que- habeis trastornado vuestras antiguas leyes, y babeis reducido
a la nulidad el precepto de Dios por vuestras tradiciones arbitrarias... ¿Qüántos
bay de estos fal.sos devotos que ayer eran del número de los JACOBINOS? ¿Qüántos
afectan hoy un zelo ardiente por la gloria de-l mismo que ayer hubieran visto
sacrWcar a sangre fria? ¿Qüántos aparentan amar lo que antes aborrecían de
muerte. y ~ manc>s santas que poco hace habrían dese&do ver quemadas?.. .
Españoles desnaturalizados, que haciendo traición a la causa más santa. expa-
tricuros vosotros mismos, todavia aumentais los males de la patria, sembrando
la discordia en medio de los españoles verdaderos, espa.! ·ciendo rumores falsos
y folletos incendiarios entre los hermanos que babeis dexado para vuestras ma·
:úobras... Mug~es inmodeslas, que sin el pudor y la devoción, únioos adornos
que dan valor a vuestro sexo, concurrls al templo con la misma desenvoltura
que al teatro para servir de distracción a los fieles devotos, y acáso con la in-
tención de robarle al Señor las almas que le pertenecen; y quiera Dios que no
baya algunas templadas al estilo del tiempo, que se avergüencen de que las
vean leyendo un libro devoto, o con el rosario encomendándose a la Virgen.
¡Insensatas! ¿por qué no os quedais en vuestra casa haciendo labor antes de
venir a insultar a Dios en su misma casa ... ? ...
RELIGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA
que Madrid el 2 de Mayo bebió hasta las heces del cáliz d e la tribulación ... ~
Y sigue una hermosa descripción, similar a las que vimos en la 1.• parte, cap.
1.•, art. 2.•, B, b . COncluye: "El disparo, aquel dia en Madrid, del cañón fran-
cés enardeció al león de España que bramó desde la cumbre del Guadarrama
do preside con magesta.d, y a su bramido que se oyera en todas partes, se dis-
-ponen como de concierto l4s provfncias, y juran ame el Dios que registra los
-<:Orazones, morir y morir muerte gloriosa antes que mancillar su nombre con
bastardía, ni r ec()'fi()Cer otro Rey que Fernando vn ... "
134. MANRIQUE, Sermón, 28 Octubre 1815, p . 12-31: • ..•Paréceme, Señor, que
-está bien clara la düiculta.d del arte de reinar y de regir la multitud, y no me-
nos lo está la necesid4d que tienen los Reyes de veni r al templo, según lo man-
da el Señor , para consultarle y pedirle la luz en el desempeño de su alto y di-
:ficil ministerio... A esta simplicidad de corazón con que debemos buscar a
Dios, debemos añadir, entre otros medios, tres muy principales: ... (1 .•) cuando
negándoos por algún tiempo a los negocios del Estado, cerrais vuestros oídos
a los cuidados de a1uera y los abrís en vuestro retraimiento y en el secreto de
-vuestro corazón por medio de la oración; ... (2.• ) acercarse a los hombres a pe-
dir consejo;... (3.•) la lección de los libros que están escritos con sinceridad y
buena fe, señ11ladamente los libres santos... Leed, pues, y meditad esta ley del
Señor dia y noche, y en ella bailareis consejo y salida a las dificultades que
ofrecen los dias de vuestro reinado, t.octama turbado, todauia revoltoso ..• (para)
-arrancar en su ra1z esas intrigas, esas ramificaciones de insurrección e i:nde-
pendenc'.a, y al~jar, ojalá para siempre, de vuestrc Reino esos chispazos de
.alarmas escandalosas ... Permitidme, Señor, os diga: que vuestro corazón sen-
sible propende mucho hacia la clemencia, porque vuestro corazón generosam.en-
te compasivo os hace mir:lr con sobrecejo a aquella parte de la justicia lla-
mada vindicativa, y que hace esgrimir la espada contra el malvado incorreg:i
ble. No, no es asi la conducta que debeis guardar generalmentE.. La demasia-
da compasión deja a las veces impunes los delitos, así como la crueldad en la
justicia hace odioso al Rey más justo... Os traeré a la memoria un ejemplo
solamente; y sea para V. M . el modelo que debeis imitar en esta parte de la
justicia, que toma venganza de los delitos. Aquel Rey mitisin:!o y que hace alar-
de de mucha m&n.Sedumbre (David : Ps 100, 8) ... dej;;. encomendlido al pacüi-
co Salomón : ... Yo muero... No ignoras la mala paS4d4 que a mí 17U! hizo Jo-
ab, hijo de Saroia..., y 110 pe;-mitirá$ que sus canas iiesciendan en paz al se-
pulcro. Cerca está de tu persona Semey de Ballturin, quien me llen6 de maldi-
ciones bárbaras y atroces cuando yo huía de Absalón: 110 debes dejar impune
su delito (3 Reyes 2, 2-9J. Ved aquí, Señor, cuál debe ser vuestra conducta. ..
Y esto ¿en qué tiempo, en q ué momento de tiempo? cuando debe perdonarse
toda injuria, cuando va a presentar a aquel Soberano y Juez Supremo... Y en
estos dias de V. M. ¡ qüántos! Pero basta, Señor, que V. M. los conoce y los
llora con toda la amargura de corazón. Hombres malvados, enemigos de Dios,
del Rey y de la Palria,... prestáos dóoiles al yugo suave de la ley; minorad los
cuidados de l más amable de los Reyes, Fernando el Deseado... COmo Rey ha.ced
valer las leyes, si quereis r einar e n vuestros pueblos, y conservar vuestros Es-
tados."
R.EUCIOSJDAll HISPANA Y SOCIEJ)AJ) BORBQNlCA 607
150. B. SANTa MARiA, Sermón, z Julio 1814, p . 1·29: "Nuestro idolatrado Fer-
nando, nuestro por tantos títulos amado Fernando es el que con su mano bien-
hechora ha firmado el decreto vivillcante, el decreto reparador, el decreto be-
néfico que nos restituye la vida politica y religiosa que se nos habla quitado.
Fernando es el que con una sola firma repara tantas ruinas, levanta tantos tem-
plos, restituye tantos derechos, enjuga tantas lá¡rlmas, mitiga tantas penas,
remedia tantos infelices, recibe en su regazo tantos desvalidos, ensalza tantns
humildes, humilla tantos soberbios, cierra la boca a tantos impíos, consuela a
tantos buenos ... Un decreto nos perdió: otro decreto nos salva ... La España,
aun arrojados los enemigos de su suelo, aparecerá en trage Francés, basta que
aparezca por su Orizonte el amado Fernando, que la gobierne a la Española...
¿Y quién podrfa contener los progresos de la !ilosoria? ¿Acaso el Santo Tribu·
nal de la Inquisición? Ah! El solo bastaba par.; esta empresa; pero previnieron
su vigilancia, extinguiéndolo de antemano. Para tomar el fuerte de la Religión
de Espafia, destruyeron primero su más robusto baluarte. ¿Acáso las Ordénes
Religiosas? Mucho hubieran hecho, si se hubieran conservado con honor; pero
con.servatlos por algún tiempo por una politica astuta, infamados después por
todas partes con ljbelos escandalosos, al fin se dio con una ocasión frivofa (El
hacer el heroico pueblo de Madrid demostraciones de júbilo y afecto a los Re-
ligiosos por la proximidad de las tropas Espcl)olas) el golpe fatal, que nos re-
duxo a la nulidad. Qué espectáculo! Dios mio! QUarenta mil Españoles benemé-
ritos basta entonces de b Patria y de la Iglesul fueron arrojados ignominiosa-
mente de sus casas, y abandonados a todas las desgracias... Era lo más sensible
el VE:r los Conventos y Monast.E:rios prof:mados oor. borro:"CSOS ~egios, con-
vertidos en establos de bestias, &caSO destinados a lugares de prostitución, qui-
zá marcados para Logias Mazórucas, en donde celebrasen sus misterios infer-
nales, o en fin arruin.a.clcs en odio del patriotisr.lo; como sucedió con el que
para su ruina se babia entregado a mi cuidado (El Colegio de Carmelitas des-
calzos de Logroño)... ¿Pudo darse decreto más bárbaro y cruel, que el que con·
dena a una multitud de hombres... a perecer de hambre y necesidad, despoján-
dolos de todo qtianto tienen? ¿Puede darse espectáculo más digno de lástima,
que el ver Prelados superiores, sugetos condecorados con los más altos grados
por sus singulares méritos, reducidos a vivir en una choza o guardilla, y a man-
tenerse con el pan de sus lágrimas, que apenas podian adquirir? ¿Quién los
~lO
vio sin compasión con unos vestidos indecentes, más propios para cubrir un
mendigo, que para presentarse con la decencia debida a su clase?... Se arreba·
taba y atropellaba a un Religioso desde su retiro a la prisión, y desde la pri·
sión a Francia, o al cadalso... (Son varios los Religiosos, que por poner cuida·
d o en no hablar, en no salir, en no j untarse con otros, y en no procurar notí·
cías, se hicieron sospechosos, y fueron conducidos a Francia como rnalechores) ...
A mi mismo hacían una especie de violen cia los Religiosos, a quienes servia,
queriéndome arrancar una licencia, que entonces juzgaba prematura, para ir
a vengar los agravios hechos a la Religión, al Rey, a la Patria, y a la humanidad.
(Al fin se les concedió esta licencia con anuencia de la superioridad, y se les
arúmó con una proclama la que puestos de rodillas delante del Santisimo le-
yeron con atención, y ardiendo en el sagrado fuego del Patriotismo, partieron
-desde allí en número de doce presididos por su Maestro de Estudiantes a pre-
sentarse a la junta insurrecciona! de Sato de Cameros, ésta hizo imprimir la
Proclama, que después se reimprimió en las Provincias entonces libres del
mediodía. A los Religiosos puso baxo la conducta de D. Máximo Náxera indiví·
duo suyo, que por r esultas de su zelo fue sacrüicado por los Franceses. Algu·
nos de estos Religiosos han hecho importantes servicios, y concluida la gue-
rra han vuelto a vivir entre nosotros, siguiendo la misma estrecha observancia,
que todos, sin pretender otro premio, que la dulce satisfacción y gloria de
haber contnouido por su parte a la defensa de la Religión, y restitución de su
amado Rey. Los Franceses, y lo que es más cierto, los indignos Españoles
afrancesados hicieron arruinar desde los cimientos este Conve:1to Patriótico, el
principal que teniamos en esta Provincia, y como el corazón de toda ella) ...
Nuestra Nación ha arrojado de su suelo a los bárbaros extrangeros, que lo pro-
fanaban ... Hemos adelantado muy poco. Aun no tenernos Patria. Todavía la ve-
mos dividida en facciones. Y si es Patria la facción dom.i:nan1e, ella nos repele
como a indignos de ser Ciudadanos. La Religión debemos llorar en peligro. Se
~rmiten llDelos, que públicamente la deshonran. Nuestro instituto, y los ciere-
chos que le están anexos, perseveran casi abolidos. Con decretos ilusorios se
pretende contentarnos, y alucinar al Pueblo, que nos quiere, y con manejos
secretos se consigue el que no lleguemos al fin de nuestro restablecimiento.
Rulna y despojo teniamos, ruina y despojo prosigue, y en algunas partes se
aumenta. Aun se pretende privarnos d e la consideración, que nos tributa la
-veneración de los Pueblos. ¿Quién podrá decir en pocas palabras las negras
pinturas, con que nos han icsultado? Las calumnias, los dicterios, los sarcas-
mos, las sales picantes, la irrisión, que hemos sufrido? La pública burla, que
se ha hecho no sólo de nuestras personas, sino también de nuestros institutos?
Que se atreva alguno a hablar en nuestro !avor aun en público congreso, donde
se deben reprimir las licenciosas libertades; la carcajada y la rechifla será su
fruto ... Mas ay! que muchos de les que dirige!!. esa facción conspiradora, están
sobre nuestras cabezas. Quien nos librará de ellos? O! Dulce Femand::~! Espe-
ranza úni.::a de todos los buenos, ven a romper nuestras cadenas. Ven a lll>rar-
nos de este despotismo. .. Nuestro amado Fernando DOS repone en todos los
bienes y derecilos, de que habíamos sido privados. Todo lo debemos a l"ernan·
do ... ¿Qué podremos hacer por un Rey a quien tanto debemos?... Que los exer-
cicios espirituales de nuestro instituto, que DOS ha restituido, le comprendan
como a nuestro insigne bienhechor, y en cierto sentido, como a nuestro Fun-
dador, o reparador. Y en fin que la justa libertad, de que gozamos, quede sa·
crificada a su voluntad, salvos solos los fue ros de la Revelación Divina.. . Qui·
ternos al filosofismo la aldava de la relaxación, de que se ase para insultarnos.
No demos ocasión a que tanto se vocifere por bocas incompetentes : Rela:roci6n,
Relaxación; y a que con prete.xto de relaxaclón nos saquee y nos destruya, como
si éste fuese medio para hacemos más observantes... ¿Hay dia, en que en to-
REUCIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONTCA 611
regios 164•
Y desde la alejada y "liberal" Cádiz nos llega el eco de la "ora-
ción que Fr. José Maria Lazo de la Vega, Lector de Sgda. Teología
en el Convento de San Francisco de Cádiz, Teólogo consultor de la
Nunciatura de España, dixo en la S. I . Catedral de esta ciudad, en
3 de Setiembre de 1815, repetición de la pronunciada el 30 de Julio
en la Iglesia de las Madres de la Compañia de la Enseñanza de Ma-
ria en la ciudad de San Fernand o - fu e la primera comunidad en
dar gracias al Todopoderoso por el restablecimiento- (se publica.
a expensas del Exmo. Ayuntamiento}" 165.
166. LllóN Som.o, Sermón que en la función de acción de gracias que hizo
el llmc. Sr. Deán y cabi1d.c, de la S. M . P. Iglesia de Setñlla por la reposiciórr
del S. O. de la Compañia de Jesús, en el día JO de M ayo del año de 1817, p . 22:
"El intento de los enemigos era acabar con los Jesuitas y después con la Igle-
sia.•. • Y otros muchos.
167. PRATS, S. J ., Oración, JO Octubre 1817, p. 36 : "Huyendo de una creen-
cia helada, toda dudas, y de una tuosofia falsa, toda delirios ..."
ARTÍCULO 3
a) 1814-1819.
En el precedente artículo observamos que la problemática plan·
teada en 1814 predetermina la política fernandina 169• Llamémosla
- mal que nos pese-- por su propio nombre : alianza de Altar y
Trono, con el repudio de la ilustración carlostercís ta -ése es el
símbolo político de la restauración de los jesuitas-. Un "ricorsi"
hacia un pasado fantástico, cuya fecha histórica nadie intenta pr e-
cisar: cada cual imagina una ubicación : Felipe n , Isabel la Católi·
ca, la Reconquista o la monarquía hebrea. La iglesia española, de-
seosa de conservar la propiedad de sus bienes ~1 clero regular
los acaba de recuperar- y su influjo en la sociedad, quizá median·
te la Inquisición no, se compromete socialmente en la política, y
por lo general dentro de la "derecha" - la amenaza con que Fr. J o-
ser del Salvador presionara directamente al monarca, el 27 de no-
viembre de 1814, se convierte en realidad a finales de su reinado-.
Destacamos, como añadidura de cuanto llevamos expresado, la
polít ica "educacional" 171 de la primera etapa fernandina, fundamen-
tada en la economía 172 e influencia clerical m, incluyendo los
Colegios Mayores 114 y el Plan de estudio 1n -derogación del de 1807
y restauración del de 1771- . También su posición favorable hacia
la Nunciatura 176, como colofón del "fervor papal" tan t radicional en
el pueblo español -siempre ha existido el más vivo interés, devo-
ción y amor por todo lo que procedla del Santo Padre, y concre-
tándonos a aquella época: los escritos de Pío VI y Pio Vil m.
cia. .. ¿Quién sino el Dios de los Exércitos excitó el ánimo generoso de los Es-
pañoles... "; Cfr. G . PALOMO, Sermón, 5 Junio 1814; FARIÑAS, Sermón, 24 Septiem-
bre 1814; etc.
178. ARANCUREN, M o ral y Sociedad, p . 61.
179. DEC. Rxr, VI, 406; M. Rmwros, Memorias de un Setentón, VIII, 2.•, 48-
49. 51-52.
180. Dn:. J . P ., R. R. y por S. M., VII, 37-38.
RELIGIOSIDAD BISPANA Y SOCIEDAD BORBONlCA 619
b) 1820-1823.
Se inicia la etapa liberal 181 • Las Cortes ordinarias para 182()-1821
-después de unas jornadas preparatorias 1~ se "constituyen" el
6 de julio de 1820, bajo la presidencia de D. José de Espiga y Gadea,
Arzobispo electo de Sevilla y Diputado por la provincia de Catalu-
ña 11D. Tres días más tarde, según la orden del dia "a las once me-
nos cuarto de la mañana de este dia ha prestado S. M. ante las Cor-
tes, en el salón de sus sesiones, el juramento solemne prevenido por
la Constitución; habiendo concurrido a tan augusto acto la Reina y
los Infantes con todos los Gefes de Palacio y Real servidumbre, los
Secretarios del Despacho, Tribunal SUpremo de Justicia, Generales
de mar y tierra, y un inmenso pueblo, que arrebatado de gozo pro-
rrumpió en los más tiernos sentimientos de amor y respeto al Rey
en el seno de la Representación nacional" 114• En efecto, Cortes y
monarca estrenan un régimen nuevo 1as, con envoltura profundjt·
mente religiosa 1ar.
No obstante, en agosto, y con la renovación de Presidente 117, las
Cortes "suprimen" la Compañía de Jesús y "restablecen" el Cabil-
do madrileño de San Isidro 1ss, revigorizándose las disposiciones ga-
ditanas 1119•
Subrayamos el decreto XVTII, fechado el 2 de septiembre de
1820, en que se designa al Gobierno "Protector de los cánones de
la Iglesia" 190; pero bajo la presidencia del Conde de Toreno -des-
de el 9 del septiembre mencionado 191- modifican el "fuero ecle-
siástico" 192 y reanudan la lucha contra el clero regular •93 con la
181. LAFUEN'IE, Historia de Españtz, XXVll, 155. 173-175; CóRDOVA, Mis memo-
rias íntima.s, ! , 23-28; Aa!AGRO, Prólogo a Larra, p . XJX-XXV!ll; C.ú."O'IAS, El
Solüario, I, p. ~25; PI y ~ HistOria de España, II, 184-202.
182. DIARIO DE SESio:-'ES, ! , p . 1·21.
183. Dn::. CoRTES, VI, l.
184. Dn::. CoRTES, VI, 2.
185. DIARIO SESIONES, !, 22-78.
186. Dn::. Coan:s, VI, ~-
187. Dn::. CoRTES, VI, 33.
188. Dn::. CoRTES, VI, 43-44. 45. 310.
189. Dn::. CoR'IES, VI, 84. 256.
190. DEX:. CoRTES, VI, 85-86.
191. DEC. CoRTES, VI, 97.
192. DEC. CoRTES, VI, 141-142; VII, 9-10. 57·58; IX, 219-318; X, 86, 159-160.
193. Dn::. CoRTES, VI, 155-159. 256. 278. 303-304. 396; VII, 6. 108-109. 164; IX,
30. 52-53. 55. 78-79. 165-166. 168-169. 175. 417. 440; X, 31.
620 ALFREDO MARTINEZ ALBIACR
194. Dr.c. CoR'IES, VII, 19-22. 25. 137-138. 160; IX, 33-34. 78. 1Z7·128. 132. 132.
151. 161·162. 169. 2tYl·203. 456-457.
195. Dt:e. CORTES, VI, 196-197.
196. Dr.c. CoRU:S, VI, 258-259.
197. DEC. CoRU:S, VIII,• 115-137; IX, 173.
198. Dt:e. CoRTES, VI, 234; VII, 75.
199. DEC. CoRTES, VI, 397.
200. DEC. CoRTES, VII, 29-30.
201. DEC. CoRTES, VII, 362 SS.
202. DEC. CoRTES, IX, 121·122. 140-141.
203. Dt:e. CoRTES, VII, 35. 37-44: "Estando justamente mandado en la ley
de las Cortes de 22 de Febrero de 1813, cap. 2.•, art. 1.•, que el Rey tome todas
las medidas convenientes para que no se introduzcan en el reino libros ni es-
critos prohibidos o contrarios a la Religión; y acreditando una triste experien·
cía que públicamente se ver.den muchos libros e impresos de esta clase, y otros
que corrompen las buenas costumbres y ofenden la decencia pública, y aun
estampas que abren los ojos a la inocencia, y frustran y destruyen por sus ci·
mientos la sana y religiosa educación que en todas las clases del Estado de-
sean promover las Cortes, y está recomendada en la Constitución polltica :le
la Monarquía, han acordado las mismas se excite el zelo del Gobierno, para
que en uso de sus facultades , y por los medios prescritos en la citada ley, pro-
ceda. a la formación de la lista de libros que no deban correr; y entre tanto
dicte las más enérgicas y prontas providencias que atajen desde luego este
daño, y curen y p;ecavan el estrago que del libre curso y venta de estos escri·
tos y estampas obscenas se siguP. a la causa pública, y especialmente a la Re-
ligión que 1& !Jación ~tá obligada a proteger con leyes sabias y justas."
~La:; Cortes, después de haber observado todas las formalidades prescritas
por la Constitución, han decretado lo siguiente: Art.... 2.•: El que conspirase
directamente y de hecho a establecer otra Religión en las Españas, o a que la
Nación espafiola deje de profesar la Religión católica, apostólica romana, sera
perseguido también como traidor, y sufrirá la pena ele muerte. Los demás <!eli-
tos que se cometan contra la Religión serán castigados con las penas prescritas,
o que se prescribieren por las leyes... 4.• Si incurriese en el mismo delito (de
palabra o por escrito no impreso -la ley de imprenta legislaba sobre los im·
presos- tratare de persuadir que no debe guardarse en las Españas o en algu·
na de sus provincias la Constitución política de la Monarquía en todo o en par·
te) un empleado público, o un eclesiástico secular o regular, cuando ejerce su
ministerio, en discurso o sermón al pueblo, carta pastoral u otro escrito ofi·
- · -,
cial, será declarado indigno del nombre español, perderá todos sus empleos,
sueldos, honores y temporalidades, sufrirá ocho años de reclusión, y después
será expulsado para siempre del territorio de la Mooarquia. El cura o prelado
de la Iglesia, que presida, en que se pronuncie el discurso o sermón al pueblo,
el Secretario que autorice la carta pastoral, edicto o escrito oficial ... , su!rlrá
una multa de treinta a seiscientos pesos fuertes ... 6.• Además de lo dispuesto en
los a:rtfculos anteriores, el Rey, oyendo al Consejo de Estado eo el modo y for-
ma que previene la Constitución respecto de los decretos conciliares y bulas
pootllicias, podrá suspendeT el curso, y recoger las pastorales, instrucciones
o edictos que los M. RR. Arzobispos, RR. Obispos y demás Prelados o Jueces
eclesiásticos dirijan a sus diocesanos en el ejercicio de su sagrado ministerio,
si se creyese contener máximas contrarias a la Constitución; y se mandará
formar causa siempre que se bailaren méritos para euo.. . 35. El Tribunal com-
petente de los M. RR. Arzobispos y RR. Obispos en las causas de esta ley será
el supremo de Justicia; y para los demás Prelados y Jueces eclesiásticos la
Audiencia territorial ... Madrid, 17 Abril de 1821. Josef M .• Gutiérrez de Terán,
Presidente."
~ - DEc.. CoJm:S, vn, 233; PI Y MARGALL, H istoria de España, n, 224-254. 257·
266. 270-288. 309-310. 323-326. 345-346. 347. 350-356.
205. DEc.. ConlD, vn, 127-128. 173.
3)6. DEc.. CoRTES, VTI, 6().83. 114. 163; IX, 95-97. 120. 440-441. 556-559; X, 16-17.
17·18. 31; SuAREZ, Realistas, p . 19-225; CóRIJOVA, Mis memorias íntimas, I, 31-46;
PRADT, De la Revolución actual de España; PI Y MARGALL, Historia de Espafw, II,
203-361 .
'lffl. DEX:. CoRTES, VIII, 274; IX, l. 646-647; X, 162. 167.
622 ALFREDO KARTINEZ ALBIACR
e) 1823-1833.
El desembarco de Fernando VII en el Puerto de Santa María
(Cádiz) supuso la vuelta a 1819 n, con el restablecimiento de las re-
laciones con la Santa Sede 21l9, si bien en 2 de diciembre de 1823 es-
boza una liberalización de su politica 210 dentro del "proceso occi-
dental de creciente secularización" 211 •
Rectifica rápidamente -un mes después- con Calomarde 212 me-
diante una peculiar secularización del Santo Oficio: "la Superinten-
dencia general de la Policía del Reino" de gran influencia socio-re-
ligiosa: la Inquisición civilm, estableciéndose el "primer Estado
policíaco" 214 •
Se sigue el camino marcado por la Regencia 21S hasta que la Rei-
na María Cristina accede al poder 216.
El sectarísmo de Calomarde se impuso a su pretensión liberali·
zadora en un singular indulto 217, a la vez que se mantuvo dentro de
la habitual religiosidad 21' y protección clerical 219; sin embargo, es
digna de consideración la politica sobre Instrucción pública 220 y el
retorno a los presupuestos gracias a Don Luis López Ballesteros 221 •
208. OEC. REY, VII 147-149. 151. 152. 154. 155. 173. 192. 210. 211. 211. 251. 254;
CóR.DOVA, Mis memor.as intimas, I , 4&47. 51-54; PI T MARCALL, Historia de Espaiía,
II, 361-370.
2C9. Dr.c. REY, VII, 57. !08. 167; XIII, 61; XIV, 1S.21
210. PI y MARGALL, Historia de E spaña, 11, 372-373.
211. ARANCUREN, Moral y Sociedad, 60.
212. ALMAGRO, Prólogo o Larra, p. XXXIV-XLIV; PIRAIA, H istoria- de la Gue·
rra Civil, 1, p . 1~56 ( 1, p. 20-86); M. RoMANOS, Memorias de un Setentón, VIII,
2.•, 43-47; BOBCOS, E.rposición dirigida a S. M ., p . 3 ss.; PI Y M.t.BCAU.. Historia de
España, II, 373. 380. 389. J90.3S6.
213. DEC. REY, VIII, ~-
214. ARA!'IGUBEN, Moral y Sociedad, 61-62.
215. OEC. REGENCIA, VII, 124; Dr.c. R.l."Y, IX, 120-123. 221-224 . 224-227; X , 262·
263; XII, 36. 119; XIV, 11!!·114. 141. 197·198; XV, 69. Z7S.284. 287-288; PI Y MAR·
GAU., Historia de España, n . 373. 381. 383-387.
216. Dr.c. REY, XVII, 57; XVIII. 2:!1; Puw. A, H&Storia de Ul Guerra Civil, I
56-69 (1, 86-111); M. ROMANos, ~femorias de un Setent6n. VIII, 2.•, 52-60; CóR.DOVt.,
Mis 1M7710!'ias intimas, l . 11~116; PI y MARCALL, Historia de España, II, 399-401.
217. DEC. REY, VIII, 325--333. 368; CóROOVA, Mis memorias íntimas, I, 126-128;
PI Y MABGALL, Historia de España, II, 37~377.
218. DEC. REY, IX, 207; XIII, 290.
219. Dr.c. REY, IX, 221; X, 28; XII, 88-89; XIII, 204. 214; XV, 75; XVII, 19.
59; XVIII, 90; PI y MABGAU., Historia de España, ll, 385.
220. DEC. REY, VII, 128; VIII, 282; IX, 23G-288. 331·332; X, 51-88. 95; XI,
6-31. 110·111. 182-190; XV, 24~244; XVI, 5~94. 306; XVII, 192; ARANCUREN, Moral
y Sociedad, 63; PI y MABCAU.. H istoria de España, 11, 380-381. 383. 390. 396.
221. DEC. REY, XIII, 93·94; XIV, 173. 340. 345; XVI, 165. 166; A RANCUBEN, MO·
Tal y Sociedad , 63·64. 107-108; PI Y MARCALL, H istoria de España, II. 373. 389.
B) ETAPA ISABELINA
a) Regencias.
222. CoL. LEYEs, 1, preliminar, 3-7. 25. 25. 52. 60; PlRALA. Historia de la Gue·
rra Crvfl, I, 69-113 (1, 111·156); M . RoMANOS, Memorias de un SeUntón, vm, 2.•,
118-119; PI Y MARGAU., Historia de Espoiía, II, ~ -
223. PIRAL\, Historia de la Guerra Civil, I, 103-156. 161-270; II, 5-116. 167·213.
294-312; 111, S-83. 83-165. 179-269. 323-IV, 170. 181-232. 241-259. 271-343; V, 7-115 (I,
156-206. 211-379. 410.583. 657-801. 846-873. 874-896; II, 3-145. 166-301. :m-794. 794-887.
899-934. 953-1065; m, 3-161. 207-575); CóRDOVA, Mis memorio.s intimas, I , 60. 96.
126-131. 133-l-l4. 146-184. 190-227. ~291. 3~: II, 83-155. 198-206. 279; Pl T MARCAU.,
HIStoria. de España, II, 702-744; ARANctlllEN, Moral y Sociedad, 63-64. 85-87.
224. Cot... I.rns, I , preliminar, 4. 74. 245. 400; Do::. Rl:INA, XIX. 269.
225. DtX:. REINA, XIX, Apéndice, p . 190; Cot... LEns, 1, preliminar, 5. SOi.
509; 11, prel., 271. 336; III, prel., 2. 15. 102; I, octubre, 55. 60.
226. CoL. LEYEs, I , prel., 10. 19. 23. 120. 207. 412. 422; m, prel., 100. 171; DI!C.
I'.EWA, XX, 555.
227. D t:e. REINA, XIX, 200; Cot.. LEYEs, I , prel., 321. 390. 493; I , diciemb1e, 15.
228. Col... LEYEs, I , prel., 395; Dfx:. RElNA, XJX, 310.
229. DtX:. REINA. XIX, 401; Co!.. LEns, II, prel ., 164.
230. Cot... LEYES, Il, prel., 167.
231. Cot... LEYES, I, prel., 454; II, prel., 201. 218. 226.
232. CoL. LEYES, 1, prel., 430. 500.
233. Cot... LEYEs, I, prel., 522.
234.. CoL. LEYES, III, prel,, 194.
235. Cot... LEYES, 1, prel., 205. 535. Il, prel., 38.
236. CoL. LEYES, I, prel., 14. 51. 68. 153. 224. 517; Il, prel., 231.
624 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
237 CoL. LEYEs, I. prel., 216; PIRALA, Historia. de la Guerra Civil, I, 156-159
<I, ~211); PI y MARGALL, Historia de España, III, !>-8.
238. CoL. LEYEs, I, prel., 217. 327; DEC. REINA, XIX, 270--271; Puw.A. Historia
de la Guerra Civil, I, 270--277. 281·303; II, 116-138 (1, 379-390. 394-410. 583-615); CóR-
DOVA, Mis memorias intimas, I, 184-186. 201-229. 235; PI y MARGALL, Historia de Es·
paña, III, 10-23.
239. CoL. LEYEs, II, prel., 155; PIRALA, Historia. de la G.u erra Civil, II, 138--165
U, 615-655); CóRDOVA, Mis memorias íntimas, I , 235. 293-307; PI Y MARGALL, Historia
de España , m, 23. 28.
240. DEc. REINA, XX, 439; CoL. LEYEs, II, prel., 268. 312. 329; III, prel., 116;
PIRALA, Historia. de la Guerra Civil, II, 263-265. 269-294; III, 277-284 (I, 801-806.
809-845; Il, 311·321); CóRDOVA, Mis memorias intimas, I , 307·317; Il, 2-74; PI Y MAR-
GALL, Historia. de España, III, 28-36.
241. CoL. LEYEs, III, prel., !29; I , agosto, 10--17; Pr.RALA, Historia de la Guerra
Civil, III, 284-301 (Il, 321·345); CóRDOVA, Mis memorias intimas, II, 75-81. 112-
117; PI 7 MARGALL, H istoria. de España, III, 36-40.
242. DEC. REINA, XXII, 343; CoL. LEYES, I, ligOSto, 17. 23; septiembre, 24;
novieobre, 17; II, 11. 331; PIRALA, Historia. de la Guerra Civil, III, 301-309 (II,
346-357); CóRDOVA, Mis memorias intimas, II, 163-168. 208-218; PI Y MARGALL, HistO·
ría. de España, III, 40-42.
243. PIRALA, Historia. de la Guerra Civil, ill, 309-323; IV, 259·268 (II, 357-377.
934-947; CóRDOVA, Mis memorias íntimas, II, 163-168. 208-218; PI y MARGALL, Histo-
ria. de España, :::rr, 44 : a partir de ahora prescindiremos de este testimonio por
su proximidad con tales acontecimientos, ya que puede parecer al lector exce-
~ivamente apasior.ado.
244. CoL. LEYEs, IIJ, 87. 90; PIRALA, Historia de la Guerra Civil, IV, 268 (II,
947-948); CóRDOvA, Mis memorias intimas , II, 100. 218-219.
245. PIRALA, Historia de la Guerra Civil, IV, 268-269; V, 116-121 (II, 948-952;
III, 161·170); CóRDOVA, Mi.~ memorias intimas, TI, 233-242. 258·272.
246. PIRALA, Historia de la Guerra Civil, V, 121·140 (!TI, 171-206); CóRDOVA,
Mis memorias intimas, II, 272.
247. PIRALA, Historia de la Guerra Civil, 1.• y 2.• edición: V, 304-308; 2.• edi-
ción: VI, 90-108 (3.• edición: IU, 576-592); 2.• edición: VI, 123-174 (3.• edición:
III, 606-653); a partir de ahora prescindiremos de la primera edición, pues fue
en las siguientes ediciones donde Pirala historia las periodos que estudiamos.
CóRDOVA, Mis memorias intimas, II, 387. 424-437.
REUC:IOSIDAD JnSPANA Y · SOCIEDAD BORBONICA 625·
261. DoNOSO CoRús, Obras escogidas, v. II, p . 7-47: "Pio IX"; p . 112-114: Dis-
curso en el Congreso, 4 enero 1849: "El puñal sangriento, ése es hoy el idolo
de Roma. Ese es el ídolo que ha derribado a Pio IX... Es necesario que el Rey
de Roma vuelva a Roma... "
262. La:Az, La idea del Estado en Donoso Cortés y Vázquez de Mella, 1945,
p. 13: "Para Donoso Cortés, el ideal está en la libertad dentro del orden. Liber-
tad no para todas las manüestaciones del pensamiento y de la acción; no la
libertad formalista del liberalismo, pero sí para que el hombre pueda realizar
sus fines esenciales frente a Jos cuales el Estado no puede imponer ninguna
actitud."
263. LEGAZ, Kelsen, p. 196 : "La teoría dE;l Estado se halla, aún, e.n el estado
mitológico porque, a la mar.e•a de la Teología, l)pen>, con un dualismo; Dios y
naturaleza son los correlatos teológicos de Estado y Derecho. .. Existe un real
paralelismo entre los procedimientos de la Teología y de la Teoría general del
Estado ... "
264. DiEz, El liberalísmo doctri1'.ario, 1945; tras estudiar el pensamiento po-
lftico desde la Guerra de la Independencia (p. 417-491), desemboca en Donoso
Cortés (p. 493-528) : p. 528: "La contienda entre las falanges socialistas y católi-
cas no ~ encu~ntr~ proyectad:. sobre un vago porvenir, sino que se especifica
en el momento político inmediato, y la decisión es arma que se pone en la mano
de personajes de carne y hueso. El aparatO teológico no sólo se mueve en ele-
vadas regiones, sino que funoiona también al servicio de muy singulares politi·
cos: un buen dia, Luis Napoleón resulta ser el instrumento de la Providencia:
"Dejad p'l.Sar -escribía señalándolo desde París- la justicia de Dios."
265. WESTEMFYER. Donoso Cortés, hOmbre de Estado y teólogo, 1957, p . 73.
.366: "El pensarntento y trahaJOS de su último periodo están b3jo la divisa de
la "tevlogía política". .. La doctrina teísta del Estado sostiene que el Estado va
unido a leyes fijas de moralidad; reduce todo el poder del Estado a Dios y re-
<:haza con obstinación firmemente todas las concepciones contrapuestas ... "
266. FAGOAGA, El pensamiento social de Donoso Cortés, 1958, p . 53-54: " Que-
remos resumir las notas más sobresalientes de la posición de Donoso. En pri-
mer lugar, figura su visión profética ...; en segundo lugar, su entrega incondi·
cional a la verdad, a los principios eternos... ; finalmente, s u intransigencia doc-
trinal.. ."
267. SuÁREZ VERDEX:UER, Donoso Cortés en el pensamiento europeo del síglo
XIX, 1954, p. 26: "Lo que Donoso supo ver como nadie es el carácter metafísico,
el tono de credo religioso con que se presentaba el socialismo, el erigirse esen·
<:ialmente en una religión que aspiraba a suceder al cristianismo. Ese fondo
628 ALFREDO MARTINEZ ALBI.ACH
274. NIDO, Estudio sobr e las Regalias, p. 1-230: uRestauren las Cortes con el
Rey la libertad religiosa que imperó en nuestra nación basta fines del siglo n ...
Estatuido el Patronato, a medida que nuestros Reyes adelantaban la conquista
sobre las tierras y pueblos conquistados, estuvieron en su tranquilo ejercicio,
sin controversia, con Roma basta el siglo XI los Reyes y las Cortes... Cánovas
observó que el Concordato de 1851, bajo la base de su articulo adicional, que
dice quedan a salvo las Regalías de Corona, o lo que es lo mismo, que todos
los puntos concordados se interpretarán, según mandan las Regaifas que jamás
fueron ni pueden ser concordadas... Con estos antecedentes (pp. 189-212) vino la
desamortización de Mendizábal mediante autorización de las Cortes del Reino.
¿Fue ésta justa? Sin duda lo !ue. Lo lamentable del caso es que no fuese me-
tódica, tranquila y ordenada, como pudo serlo en los dlas de Carlos III.. ."
275. BROUN, L4 Europa del siglo XIX, 82; Cfr. p. 79-122.
276. CóltDOVA, Mis memorias mtimas, m, 213-236. 237-327. 433-438; Cfr. Ci.N~
VAS, El Solitario, II, 149.
2TI. CASDEU, L4 Revolución de Ro7Tul y 14 ~dición espaiWl4 a Italia ~
1849.
278. G. o& u. VEGA, Viajes por Italia en la expedición espcñol4.
279. RtvAS hijo,Reseña biográfica, 104-117.
280. EsrtBANEz CALDERÓN, Cartas sobre 14 expedición español4 a Italia: C.\·
NOVAS, El Solitario, n, 281·316: "t.• : Barcelona, 22 (de mayo de 1849), a las doce
de la noche. Excmo. Sr. Duque de Valencia: Henos ya, m1 siempre querido Ge-
neral, con el pie en el estnl>o... Me admiró el contento y satis!a.cción que to-
dos llevaban pintados en el rostro, y 110 irian de otra manero nuestros a:n1epa·
S4d.Os cuando sallan de aquí seguros de triunfar en Oriente y en Itali!l. .. Todos
(los barceloneses) probaban cierto orgullo viendo que ya españoles iban a to-
rnar parte en cuestiones y paises en donde se agitaban las grandes naciones de
Europa ... Creo que ei espíritu de la tropa es inmejorable: !>ay en ella algo de
aquel espíritu ernprez:dedor y de aventuras de nuestros b:1enos tiempOS. No qui·
siera ver la!: cosas derilasiadamente color ñe rosa; pero me parece quE: ~..e país
ha de tomar algún respeto vieudo llevar a cabo estas empresas por parte del
gobierno, y que con habilidad no seria extrailo que tomase parte en ella con
toda voluntad y con orgullo. A los C'ltalanes siempre lla sido cosa de tocarles
sonajas cuando se les ha hablado de Oriente y d.e Italia. Dentro de una hora
nos iremos al "Vulcano~. y dentro de cuatro dlas estaremos ya viendo, si no
abrazando, las costas de la Italia...
II.•: Terracina, 5 de Ju.nia de 1849. Excmo. Sr. Duque de Valencia. Mi siem·
pre querido General : Ya estamos en Terracina, sin;iendo a un tiempo ta causa
del Santo Padre y a los intereses militares del Rey de Nápoles... La división
expedicionaria tiene por principal y casi exclusivo objeto el restablecimiento
de 14 autoridad pontificia ... La tibieza aquí es tanta, que casi raya en desafecto,
630 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
río Narváez ... El país está esperando hombres a quienes levantar estatuas: por
ahora no se presentan candidatos."
XXVI, 249-265: (en El Pensamiento ere la Nación, 14 agosto 1844) : Alianza ere
los part.idos: Tocante a la alianza entre todos los hombres monárquicos, sea
M •••
cual fuere su bandera que hayan seguido en la última guerra, no sólo la con-
sideramos posible, sino también necesaria; y si dudas nos ocurrieran sobre su
posibilidad, las disiparla en nuestro ánimo la evidencia de la necesidad."
XXVIII, 59-188 (en El Pensamiento ere la Nación, 29 enero, 5, 12, 19 y 26 fe-
brero, y 5, 12 y 19 marzo 1845): Examen ere la cuestión ere! matrimonio ere la
Reina Doña 1sabel II.
XXIX, 31-114 : (en El Pensamiento ere la Nación, ll, 18 y 25 junio, y 1 julio
1845) : Documentos ere Bourges.
XXIX, 117-134: (en El Pensamiento ere la Nación, 16 julio 1845): Sobre el co-
municado erel Sr. Marqués ere Miraflores.
XXIX, 137-152: (en El Pensamiento ere la Naci6n, 23 julio 1845): Reuni6n Pa-
checo.
XXIX, 175-189 : (en EL Pensamiento ere la Nación, 6 agosto 1845): Ccmdidatura
erel Infante Don Enrique.
XXX, 247-260: (en El Pensamiento de la Nación, 25 febrero 1846) : Más sobre
la última crisis: " ... La existencia de ese poder militar que con admirable ino-
cencia no querían ver los ministros y los ministeriales... Seria de desear que
nadie se embriagase con tl poder y los honores, hasta el punto de creerse dis-
pensado del deber de más consideración al público, porque el público es la
nación. La España no es patrimonio de nadie."
XXX, 263-273: (en El Pensamiento ere la Nación, 4 man:o 1846) : Nombra-
mienta del General en Jete: " ... Pocas mudanzas han ocurrido en España que
hayan producido una alegria más general y más viva que la dimisión del ge-
neral Narváez... Creemos que el señor marqués de Mira!lores, con su noble
resolución de manifestar paladinamente al general Narváez la conveniencia de
que éste no formase parte del nuevo ministerio, hizo un señalado servicio a l
pais... Pero el noble marqués cometió una !alta política d e mucha gravedad,
al pensar en el titulo de generalísimo o de general en jefe para consolar al ge-
neral Narváez. Aquel era el momento critico en que convenía aprovechar la
oportunidad de destruir no sólo la rea!idad, sino hasta la más rem<Jta aparien-
cia de la preponderancia militar del general Narváez... Todo lo que no sea
impedir el que un militar se eleve sobre los demás por su designación previa
para el mando en jefe de las armas; todo lo que no sea esto, es dejar enerva-
do el poder, es preparar la ruina, es amontonar tempestades sobre el país ... "
XXX, 293-303 : (en El Pensamiento ere la Naci6n, 18 marzo 1846): La prepcm-
erercncia militar: M... Mucho se hahla en estos últimos tiempos de la necesidad
rte destruir la preponderancia militar para fortalecer el poder civil; parécenos
que la ~uesti ón se ha planteado al revés, y que más bi~:n debiera p€:nsarse en
robusteC€:r el poder civil para destruir la preponderancia militar; no creemos
que el poder civil sea flaco porque el militar sea fuerte; sino que, por el con·
trario, ~1 poder militar es fuerte porque el civil es flaco. Desde la muerte de
Fernando VII la preponderancia ha estado en el poder militar... El disminuir.
el quitar del todo la preponderancia militar, no ha de ser un medio, sino un
resultado. cuando se hayan reunida en torno del poder civil los elementos de
fuerza moral que ahora le faltan, la preponderancia militar habrá desapareci-
do: no será necesario combatirla: se desvanecerá; porque no hay fuerza ma-
terial que r esista la acción de la moral, cuando es tan abundante como lo
puede ser en España."
XXX, 11-21: (en El Pensamiento ere la Nación, 26 n oviembre 1845) : El ma-
trimonio ere la Reina y la diplomacia.
REUGIOSIDAD HISPANA Y SOCIEDAD BORBONICA 633
-guió llegar a ver el Concordato del año 1851, pero trabajó intensa-
mente por el mismo. Y dentro del excesivo apasionamiento de la
XXX, ZHO: (en El Penscmziento de la Nación, 3 diciembre 11145): El gabine-
te francés 11 el Ccnuk de M ontemolín.
XXX, 43-55: (en El Penscmziento de la Nacfón, 10 diciembre 11145): La polüi-
ca inglesa 11 la cuestión del matrimonio de la Reina.
XXX, 153-168: (en El Penscmziento de la Nacl6n , 21 enero 1846): El manifiesto
del Infante Don Enrique.
XXX, 189-200: (en El Pensamlenú> de la Nacfón, t febrero 1846) : Las mani·
/estaciones contra el Ccnuk de Trápani.
XXX, ~216 : (en El PensamientO de la Nación, 11 febrero 1846) : Resultados
de la manijest.aci6n contra el Ccnuk de Trápani.
XXXI, 23-33 <en El Pensamiento de la Nación, 13 mayo 1846>: Ideas y situa-
ción del partido monáTquico: u . • • La conducta del principe de Bourges será
naturalmente la regla de la conducta de sus partidarios: la templanza de la
cabeza se hará sentir en los miembros; las exageraciones no son posible, cuan-
do las aborrece la persona en cuyo nombre se pudieran sostener."
XXXI, 147-159 (en El Pensamiento de la Nacfón, 1 julio 1846) : El matrimonio
de la Reina con el Ccnuü de Mcmtemolin: • . .. LO que desea el partido carlista
es que se constituya un estado de cosas en que no sea tenido por ilegitimo, y
en el cual pueda acomodarse sin sacrüicar sus convicciones, ni !altar a sus
compromiSOS. Esto se lograría con el casamiento; y no le parecería tan poco
al partido carlista, que no es exclusivo como se supone, y está muy lejos de
hacerse las ilusiones que sus adversarios se !iguran. Además, y esta considera-
ción es Importante, el partido carlista es eminentemente monáTquico y religio-
so, y por esta razón es más manejable, cuando se encargan de ello las personas
en quienes reconoce autoridad. Ignoramos hasta qué punto se prestaría el
conde de MootemoUn a transigir en las pretensiones dinásticas; pero estamos
profudamente convencidos de que, fuera cual !uese el curso y el resultado de
las negOCiaciones, bastaria una palabra del principe para que el partido carlis-
ta callase y obedeciese. Esta, r epetimos, es una conslderción importante. Las
exageraciones de los partidos monárquicos nunca son temibles como las de los
partidos revolucionarios; a quéllos tienen un resorte con el cual se los m u eve,
o se los comprime: el principio de la autoridad. Estos son una especie de pr o-
testantes poUtlcos; cada cual piensa lo que q uiere, y h ace lo que le viene en
talan te, si no se lo impide la fuerza. De esto se tuvo un ejemplo en los ú!timos
años del rey Fernando. E l p:utido monárquico dueño del gobierno, dueño del
ejército, dueño de la administración del pais , fuerte con una organización r eli-
giosa que disponia de rentas considerables, y contando con innumerables ro-
tallones de voluntarios rea.!.ístas, se dejó destituir y desarmar, y contempló
tranquilamente su ruina por no !altar al principio de la obediencia. Ningún par-
tido revolucionario es capaz de una abnegación tan heroica."
XXXI, 179-185: Documentos políticos dirig'.dos al marqués de Viluma (inédi-
to!= hasta 1910, son de la primavera de 1M6) : sobre el matrimonio de la Reina
-con el Ccmde ele Mcmtemolin.
XXXI, 189-203. 207-223. 227·24.1. 245-257. 261-274. 307-322 (f'.n El Pensamie.UO de
la Nación, 15, 22 y 29 julio, y 5, 12 y 26 agosto 1846): Sobre el matrimonio de la
~na; A El E~l. a El Heraldo y a El Tiempo; Ez.amen de los argumentos
contra el mal.rimonio de la Reina con el c07Uk de Montemolin; Las Cortes, la
prensa 11 el ruido público uaminados como criterio para conocer la fuerza del
paTUdo monárquico; A El Español; Los tres criterios 11 el partido monárquioo.
XXXI, 325-338: (articulo fechado en Vich el dia 27 de agosto de 1846, desti-
nado al número 135 de El Pensamiento de la Naci6n, de 2 de septiembre; el ar-
ticulo llegó a Madrid cuando ya se babia hecho pública la elección hecha por
la Reina, determinando tomar por esposo al Infante Don Francisco de Asís.
Por esto Garcia de los Santos, asesorado con el parecer del marqués de Vilu-
ma y el Sr. Isla Fernández, suspendió su publicación): Todo de una vez.
RCLtCtOSID.\0 11 IS PAS.\ ••• - 41
634 ALFREDO MARTINEZ ALBIACH
a) civiles,
1. Novísima Recopilación de la.s Leyes de España. Dividida en :xn
libros. En que se reforma la Recopilación publicada por el Señor
Don Felipe II en el año de 1567, reimpresa últimamente en el de
1775. Y se incorporan las pragmáticas, células, decretos, órdenes
y resoluciones Reales, y otras providencias no recopiladas, y ex-
pedidas basta el de 1804. Mandada !oonar por el Señor Don Car-
los IV. (Madrid. - Imp. Real. - 1805).
2. Colección de los Decretos y Ordenes que han expedido las Cortes
generales y extraordinarias desde su instalación en 24 de Septiem-
bre de 1810 h~Uta igual fecha de 1811. Mandada publicar d e orden
de las mismas. (Cádiz.- Imp. Real. - 1811). Tomo 1.0
3. Colección de los Derechos y Ordenes que han expedido la.s Cortes
generales y extraordinarias desde el 24 de Septiembre de 1811 has-
ta el 24 de Mayo de 1812. Mandada publicar de orden de las mis-
mas. (Cádiz. - Imp. Nacional. - 1813). T. 11.
4. Colección de los Decretos y Ordenes que han expedido las Cortes
generales y extraordinarias desde el 24 de Mayo de 1812 hasta el
24 de Febrero de 1813. Mandada publicar de orden de las mismas.
(Cádiz. - Imp. Nacional. - 1813). T . fii.
5. Colección de los Decretos y Ordenes que han expedido las Cortes
generales y extraordinarias desde ~ 24 de Febrero de 1813 hasta
t!l 14 de Septiembre del mismo afu>, en que terminaren sus sesio-
nes. Comprehende además el decreto expedido por las Cortes ex·
tra ordinari3s en 20 de dicho mes. Mandada publicór de orden de
las mismas. (Cádiz.- Imp. Nacional. - 1813). T. IV.
6. Coiección de los DeC'Tetos 1J Ordenes que han expedido las Cortes
Ordinarias desde el 25 de Septiembre de 1813, día de su instala-
ct.m. hasta el 11 de Mayo de 1814, en que fueron disueltas. Man-
dada publicar de orden de las actuales. fMadrid . - Imp. Nacional.
- 1820). T. V.
7. Colección de los Decretos y Ordenes generales de la primera legis-
latura de Zas Cortes Ordinarias de 1820 y 1821. Mandada publicar
·642 BIBLIOCRAFIA
b) clericales.
'SO. CARRERA (Fr. Manuel, O. P.), Oración que en las solemnes fiestas
celebradas por los RR. PP. Dominicos del Convento de San Este-
ban de Salamanca en acción de gracias al Todopoderoso, con mo-
tivo de su deseada reunión, y apertura de s u magnifico templo,
hecha por disposición de su amado Monarca el Sr. D. Fernando
VII, dlxo en el mismo, el día 17 de Julio de 1814. (Salamanca. -
Vicente Blanco.- 1814?) .
51. CARRERA y DEL SoL (Miguel) , Oración que en la festividad del B .
Pedro Arbués pronunció en la S . I. M . de la Seo de Zaragoza en
1801. (Zaragoza. -Mariano Miedes. - 1801?) .
.52. CASCAUJ. Y OR.DOÑEZ (Juan Nepomuceno), Sermón que en la mag-
nifica función que celebró el claustro de la Universidad de Osuna
por la restitución a su trono de nuestro Soberano el Sr. D. Fer-
nando vn (q. D. g.), predícó en el día del cumpleaños de S. M.,
14 de Octubre. (Sevilla. - Imp. del R . Acuerdo, a cargo de D. Ma-
nuel Valvidares.- 1814).
53. CASTE.JóN (Agustín de S. J .), Luis el Grande. Oración fúnebre del
muy alto, muy poderoso. y muy excelente Principe, Luis Catorze,
Rey Chrlstianissimo de Francia, llamado comúnmente el Grande.
Dixose en la Iglesia del R. Convento de la Encamación de Ma·
drid, a catorze de Mayo de 1716. (Madrid. - 1716?).
54. CASTE.JON Ud.). Oración Júnebre del muy alto, muy poderoso, y
muy execelente Príncipe Mon.seiim Luis Delfín, Padre del Rey N.
S . <Madrid. - 1711).
55. CASTE.JÓN Ud.). Sermones varios. (Madrid. -Juan de Zúñiga.-
1738). T . l·TII.
.56. CEREZO (Fr. Lais), Elogio fúnebre en las exequias que en hon01' del
Smmo. Sr. Presidente de la So~erana Junta Centrnl de España e
Indias y Conde de Florida-Blanca, D. José Moruno, celebró la M. I .
Junta particular de Gobierno de la ciudad de Orihuela, en la S . l .
Catedral de la misma día 24 de Enero de 1809. Murcia. - Juan Vi·
cente Teruet. - 1809?) .
57. CESAT (Jaime), Oraeí'ón íúnebre en las solemnes exequias que la
amante y agradecida familia del Ilmo. Sr. D. Fr. Francisco Armañá,
Arzobispo de Tarragona, celebró en alivio del alma de s u difunto
Amo, en el día 13 de Julio de 1803, en la Iglesia del R. Colegio de
PP. Agustinos. (Tarragona. - Maria Canals, Viuda. - 1803?).
58. CLARET Y CLARA <Antonio M.•, Arz:obispo de Santiago de Cuba),
Ap1mtes que para su use personal y para el régimen de la diócesis
escribia y tenía siempre a la vista. {Madrid. - Imp. de la Espe-
ranza, a cargo de D. Miguel Arca<;. - - 1857) .
59. CLn.tENT (Josef, Ob. de Barcelona) , Pláticas dominicales. (Madrid.
- Benito Cano. -1793) .
~. CoNCEPCION (Fr. Pablo de la), Sermón Dogmático-Moral para la
solemne fiesta que celebró la ilustre Archi-Cofradía de Maria Stna.
con el titulo de la Bendición de Dios, sita en la Iglesia de los RR.
PP. Carmelitas Descalzos de la Ciudad de Cádiz, en desagravio de
los ult.rages cometidos por los enemigos que han invadido nues-
tra España, contra N. Señor Sacramentado. Predicado a presencia
del mismo Adorable Sacramento la mañana del Domingo 16 de
Septiembre de 1810. Se imprime a experu;as de vanos afectos al
'r.$LIC IOSID\D IIISPISA .•• - 42
650 BIBLIOCRAFIA
147. NAVAS (Fr. Ramón de las), El Padre de los pobres. Sermón fúnebre-
que en las solemnes honras, celebradas de orden de la Junta de
gobierno de la R. Casa de Caridad, sita en los RR. Alcázares de la
ciudad de Toledo, en sufragio y memoria de su fundador el Emmo.
Excmo. Sr. D. Francisco Antonio de Lorenzana y Buytrón, Carde-
nal de la S. I. Romana, Arzobispo de Toledo, Inquisidor General,
etc., dixo, el día 1.0 de Agosto de este año de 1804 en la Parroquia
de Sta. María Magdalena de Toledo. (Toledo. - Tomás Anguiano.
-1804).
148. OBRADOR (Jayme), Sermém d el celestial cíngulo del Angélico Doc-
tor Sto. Tomás de Aquino, que en la annual fiesta de las qüarenta
horas, que celebran sus discípulos, en el R. Convento de Predica-
dores de la Ciudad de Palma, dixo, dfa 13 de Julio de 1800. (Palma.
- Buenaventura Villalonga. - 1815).
149. OMEt.I.A (Mariano), Oraciém compuesta para solemnizar los cUltos
tributados a María Stma. por la villa de Calaceyte, en el Reyno de
Aragón, el dia 13 de Febrero de 1814 en manifestación de su agra-
decimiento por haber sido trasladada a ella, y depositado en su I.
Parroquial el Sgdo. Cíngulo, extraído de la Catedral de Tortosa,
en ocasión de haber sido evacuada esta ciudad por su Clero y
feligresía. tZaragoza. -Francisco Magallón. - 1808). N. B.: Cree-
mos un error de imprenta la fecha de 1808: debe ser 1814.
150. ORTIGOSA (Fr. Francisco), Sermón que en la solemne fiesta celebra-
da en la Iglesia del R. Hospital de esta ciudad de Cádiz en acción
de gracias por haber cesado la epidemia y de habernos preservado
Dios N. S. de ella por intercesión del Sto. Angel Custodio, dixo, el
día 30 de Noviembre de este año de 1804. (Cádiz. - Antonio de
Murguía. - 1804).
151. OsTOLAZA (Bias), sermón patriótico-moral, que con motivo de una
Misa solemne, mandada celebrar el día 25 de Julio de 1810, en la
Iglesia de los RR. PP. Carmelitas de la Ciudad de Cádiz por los
españoles emigrados de los paises ocupados por el enemigo co-
mún, dixo. (Reimpreso en Valencia.- Benito Monfort. - 1811.)
1S2. OsTOLOZA (Id.), Discurso que en presencia de S. M. y AA. dixo en
la R. Capilla el Domingo 3.0 de Adviento. (Madrid.- D. Miguel de
Burgos. - 1814).
153. OsToLAzA (Id.), Sermón predicado el 21 de Diciembre de 1814, en
la I glesia de N. Sra. del Carmen Calzado, con asistencia del Srnmo.
Sr. Infante Don Carlos, con motivo de una Misa solemne, que los
Oficiales de su Secretaria costearon en acción de gracias por el re-
greso de S. M. y AA. Ov'ladrid. - Francisco Ma;:tir.cz Dávila.-
1815?).
154. PASQÜAL (F r. Bonaventura, O. F. M.), Oración Panegírica en las Fes-
th:as Aclamaciones que la siempre Leal Villa de Reus celebró en
acción de gracias por los triunfos, y victorias del Rey N. S. Don
Carlos 111 (q. D. g.), Rey de CastiUa, y Aragón, Conde de Barce- Ji
lona. El día VIII de Noviembre, en que España celebró el soberano
Patrocinio de Maria Stma. en esta feliz Monarquía, año 1705.
(Reus? -1705?) .
155. PEREA Y PoRRAS (Francisco de), Sagrada Cítara de la Cruz, en que
la M. N., y Fidelissima Ciudad de Salamanca cantó el Día tres de-
Mayo de este presente año de 1707, las m ás rend idas gracias al
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vidades y Santos. (Madrid. - Villalpando. - 1814, 3.3 edición) .
T. I·ll.
205. SANTANDER (Id.), Pláticas doctrinales para Misiones. (Barcelona. -
1851, nueva edición económica).
206. SANTANDER (Id.), Discurso que pronunció el día. 17 de Junio de 1810
en el metropolitano Templo del Pilar, en la festividad celebrada en
acción de gracias por la Conquista de Zas Plazas de Lérida y Me-
qu.inenza. (S. l. - s. f.).
207. SANTA TEREsA (P . Camilo de), Panegírico del Sto. niño y mártir
zaragozano Domingo de Val, que en la solemne festividad celebrada
el 26 de Agosto del año 1806, en el S . Templo Metropolitano del
Salvador de Zaragoza, predicó, y da a luz el nmo. Cabildo de la
S. I. Metropolitana. <Zaragoza. - Mariano Miedes. - 1806).
208. SERVERA (J ayme), Oración Evwngélica, en la Solemníssima Fiesta,
que la S. Metropolitana I glesia de Valencia celebró en Acción de
Gracias a Dios N. S., a Maria Stma. de los Desamparados, y a to-
dos los Stos. Patronos, que asistieron a nuestro católico Monarca
Felipe V, assi en la feliz Victoria del día 25 de Abril, como en la
justa recuperación de Valencia, día 8 de Mayo del presente año de
170'7. <Valencia. - 1707).
209. SEvn.I.A (Fr. Mariano J oseph de), Sermón fúnebre predicado en las
solemnes exequias que el día 9 de Septiembre de 1801 celebró la
Comunidad de RR. PP. Capuchinos de la ciudad de Málaga por el
alma del M. V. P . Fr. Diego Joseph de Cádiz. (Valencia. - Joseph
Estevan. - 1801?).
210. SICILIA. (Mariano JoseO, Seranim predicado en la solem.nísima
función de acción de gracias, que por el feliz regreso de nuestro
augusto soberano el Sr. D. Fernando Vil al seno de sus vasallos,
celebró en la Parroquial de N . Sra. de las Angustias de la ciudad
de Granada, el Cuerpo de Srs. Oficiales de la guarnición, día 5 de
Abril de 1814. <Madrid. - Fermin Villalpando, impresor de Cámara
de S . M. C. - 1816).
211. SoLCHAcA (Fr. Francisco de), Representación que en juicio y jus-
ticia dirige un Prelado Provincial Capuchino de las dos Castillas
a la sabia y católica nación española e<m su deseada y digna ca-
beza el Sr. Rey D . Fernando VII (q. D. pro!.-pere) a su trente, y
Congreso de Cortes NaciO?UJles. Escribíala para la luz e interés
público. (Impreso en Cádiz.- Reimpreso en Manresa. - Ignacio Aba-
da!. - 1813).
212. SOTo CFr. Francisco de, O. F . M.) , Oración fúnebre que en las so-
Iemnisimas exequias celebradas en la Iglesia del Convento de
N. P. San Francisco de la ciudad de Montilla, día 12 de Mayo de
1815, a expensas del Excmo. Sr. D. Luis Joaquín Femández de
Córdoba y Benavides, Duque de Medinaceli.. . etc., en la traslación
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