Resección-reconstrucción
en tumores óseos malignos
en el niño
J. Sales de Gauzy, F. Accadbled, A. Aziz, G. Knorr, P. Darodes
Palabras Clave: Tumor óseo maligno; Tumor de Ewing; Osteosarcoma; Cirugía pediátrica
maligno [1]
Biopsia quirúrgica
Los tumores malignos óseos del niño se sitúan cerca
Principios
de la placa de crecimiento en un 75% de los casos. El
pronóstico funcional depende en parte de la conserva- Excepto en casos especiales, debe situarse sobre el
ción o no del cartílago de crecimiento. Su exéresis mismo trayecto de la futura vía de acceso prevista para
durante la resección del tumor plantea un problema la resección del tumor. El empleo de un manguito de
tanto más importante cuanto más joven es el niño. isquemia está permitido, pero no se debe drenar el
Recordemos que el potencial de crecimiento varía en miembro con una banda de Esmarch ya que existe
función de la localización del cartílago de crecimiento. riesgo de diseminación carcinológica. Si la extensión del
Los cartílagos más fértiles se localizan cerca de la rodilla tumor se opone a la vía de acceso carcinológica, no hay
que dudar en realizar una trepanación ósea. Se deben
y lejos del codo. Así, el crecimiento en longitud del
emplear incisiones longitudinales paralelas al eje de los
húmero se hace a expensas del cartílago de crecimiento
miembros. Como el trayecto se retira con la pieza
proximal en un 80% y en un 20% a expensas del
tumoral, se debe ser lo más directo posible y no usar
cartílago distal. De igual modo, el 80% del crecimiento
vías anatómicas que rodeen las masas musculares e
del radio se produce en distal, en el fémur el 70% en
impongan una disección amplia. Así mismo, no se debe
distal y el 55% de la tibia en proximal. Por otro lado, el acceder a los nervios o los vasos ni abrir las articulacio-
cartílago restante ve disminuir sistemáticamente su nes. El drenaje no es obligatorio. En caso de que se
potencial tras la conservación del miembro [2]. coloque un drenaje de redón, éste debe situarse en la
El pronóstico de desigualdad depende del potencial prolongación de la cicatriz y a poca distancia de ésta.
de crecimiento restante, pero la placa de crecimiento no
debe limitar los márgenes necesarios para la exéresis del Principales vías de acceso
tumor. En cambio, la desigualdad final debe estimarse
Las principales vías de acceso son:
desde el inicio con la estrategia quirúrgica.
• fémur distal: el acceso es anteromedial. Tras la apertura
En la etapa de la pubertad se debe plantear una de la aponeurosis, se pasa a través de las fibras más
epifisiodesis contralateral. Se puede realizar al mismo posteriores del vasto medial;
tiempo que la resección-reconstrucción, aunque esto • tibia proximal: el acceso es medial. Se debe tener
aumenta el tiempo quirúrgico y el riesgo séptico cuidado de respetar el gastrocnemio interno, que
durante la quimioterapia, o bien se puede plantear puede ser útil en caso de que se necesite reconstruir
después de la quimioterapia. La epifisiodesis puede el aparato extensor;
realizarse percutánea o con material. En caso de recons- • húmero proximal: el acceso se realiza dentro del surco
trucción con prótesis es difícil que se pueda alargar más deltopectoral. A continuación se pasa a través de las
de 1,5 cm. Más allá, existe el riesgo de rigidez articular fibras más mediales del deltoides.
o estiramiento neurovascular. Sobre la vertiente no
tumoral, algunos proponen una pieza protésica con
vástago cilíndrico liso para no lesionar el cartílago de ■ Resección tumoral [5]
realiza con ayuda de un osteotomo bajo control radios- El músculo gastrocnemio interno se traslada hacia
cópico. El conjunto de cartílago de crecimiento debe delante sobre la vertiente lateral, la aponeurosis del
resecarse con el tumor. músculo tibial anterior se invierte y se sutura en el
Si se plantea una resección intraarticular, la cápsula, plano capsuloligamentoso. Las suturas se refuerzan por
los cóndilos, el ligamento colateral medial y los cruza- reinserción anterior de los músculos de la pata de ganso.
dos se desinsertan; después se fuerza el bostezo de la
articulación y se seccionan el ligamento colateral lateral,
el músculo gastrocnemio lateral y el músculo poplíteo. ■ Reconstrucción
La sección de las estructuras intraarticulares debe
realizarse en contacto con la tibia. Pueden plantearse varias técnicas de reconstrucción,
En caso de invasión tumoral de la articulación de la ya sean biológicas con injertos óseos o bien no biológi-
rodilla, es necesaria una resección de toda la articula- cas mediante prótesis o bien mixtas, asociando injerto y
ción. En ese caso, conviene seccionar la rótula en el prótesis.
plano frontal en continuidad con el aparato extensor. Detallamos a continuación el conjunto de técnicas de
En distal, la sección se realiza a nivel de la epífisis tibial. reconstrucción, teniendo en cuenta que la elección del
procedimiento de reconstrucción depende de la locali-
Tumor metafisario proximal de tibia zación de la resección ósea.
Para las resecciones diafisarias o metafisarias, la
La vía de acceso es medial e incluye la cicatriz de la elección se hace entre peroné vascularizado, asociado o
biopsia. Los tendones de la pata de ganso se seccionan no a un aloinjerto de un lado, y técnica de membrana
a 2 cm de su inserción. Se pasa hacia delante el músculo inducida de otro lado (técnica de Masquelet). La técnica
gastrocnemio interno. El paquete vascular poplíteo se de Masquelet, de indicación más reciente, se usa cada
aísla. El arco del sóleo se abre. El paquete tibial posterior vez más.
se diseca. El músculo flexor largo del primer dedo se Para las resecciones articulares transarticulares o
desinserta a 1 cm de la tibia. El compartimento antero- exéresis articulares completas, la elección se ha de hacer
lateral se abre. El músculo tibial anterior se secciona a entre prótesis de reconstrucción, aloinjerto, prótesis
1 cm de su origen. Así, se llega a la membrana interósea asociada a un aloinjerto, transferencia epifisaria (esta
en lateral. Se secciona a lo largo del peroné o se escinde última únicamente en caso de resección transarticular).
en bloque, desperiostizando las caras anterointerna y El reemplazo protésico es, con mucho, el método más
posterointerna del peroné. El paquete tibial anterior se empleado.
diseca. La tibia se secciona en distal subperiósticamente
tras identificar los límites con radioscopia, igual que se
hizo en el fémur. El ligamento rotuliano se secciona. La Injerto vascularizado
sección proximal se realiza intraarticular o bien intrae-
pifisaria. Se expone la membrana interósea, movilizando
Peroné vascularizado [8]
el segmento tumoral. Si está invadida, se liga el paquete La técnica de peroné vascularizado se detalla en otro
tibial anterior; en caso contrario, el arco permite liberar artículo [9]. Insistiremos en algunos puntos particulares.
los tres ejes vasculares de la pierna. A continuación se
secciona en bisel la cabeza del peroné para respetar la Elección de lado
inserción del bíceps femoral. La reconstrucción del Si la reconstrucción es tibial, se elige preferentemente
aparato extensor ha sido descrita por Dubousset et al [7]. el peroné contralateral. Así se reserva la posibilidad de
Figura 4.
A. Tumor de Ewing diafisario de
fémur.
B. Resección completa y reconstruc-
ción con peroné vascularizado.
C. Resultado postoperatorio al año
con buena integración del injerto.
Figura 5.
A. Neuroepitelioma del extremo inferior del húmero tratado por resección y peroné vascularizado.
B. Postoperatorio tras 3 años. Integración perfecta del injerto.
C. Continuidad del canal medular entre húmero restante, injerto y cúbito.
Figura 7.
A. Tumor de Ewing de la metáfisis superior del húmero.
B. Resección del extremo superior del húmero.
C. Reconstrucción por transferencia epifisaria de peroné vascularizado. Aspecto intraoperatorio.
D. Radiografía postoperatoria a los 3 meses.
Figura 8.
A. Tumor de Ewing metafisario superior en un fémur de un niño de 6 años.
B. Imagen por resonancia magnética (RM) que muestra una extensión del tumor a nivel del cuello.
C. Se realiza una resección completa del extremo superior del fémur.
Figura 8. (continuación)
D. Reconstrucción por transferencia epifisaria de peroné vascularizado. Se ha asociado un aloinjerto en zona metafisodiafisaria. Aspecto
intraoperatorio.
E. Aspecto radiográfico postoperatorio. No se realiza osteotomía del peroné para asimilarlo al cuello del fémur.
F. Aspecto a los 6 meses postoperatorios. Se observa una fractura espontánea del injerto en zona metafisaria con desplazamiento en varo.
Se inmoviliza con yeso sin intentar su reducción. La fractura consolidó tras 2 meses de inmovilización.
G. Aspecto radiográfico tras 18 meses que muestra una buena integración del injerto. Desde el punto de vista clínico se observa una buena
movilidad en la cadera en todos los arcos de movimiento. La marcha se efectúa con apoyo completo sin dolor con una ligera cojera de tipo
Trendelenburg.
H. Aspecto en la RM tras 18 meses de postoperatorio. Se observa una buena congruencia entre la epífisis peronea y el cotilo, con una buena
vitalidad de la epífisis del peroné. Por otro lado, el cartílago de crecimiento del peroné es visible y parece activo.
Figura 9.
A. Osteosarcoma metafisario inferior del fémur.
B. Resección transepifisaria, aspecto de la pieza quirúrgica.
C. Reconstrucción temporal con un espaciador de cemento quirúrgico.
D. Aspecto radiográfico postoperatorio.
E. Al final de la fase de quimioterapia, revisión quirúrgica para la retirada del cemento e interposición de injerto corticoesponjoso autólogo
de cresta ilíaca asociada a injertos de cabeza femoral de banco. La osteosíntesis se ha modificado en la misma fase quirúrgica; se ha realizado
una epifisiodesis contralateral con tornillos.
F. El injerto consolidó en 1 año. En esa fase, se realizó una intervención tipo Judet para movilización. Actualmente, el niño camina
normalmente y presenta una extensión completa y una flexión de 100° de la rodilla.
sólo aparecen problemas funcionales de prensión con pasada a través del cartílago de crecimiento envuelta en
las dos manos cuando la desigualdad es muy importan- una camisa de polietileno que permite preservar el
te [20]. En caso de pronóstico inferior a 5 cm, se puede crecimiento dejando que el vástago de la prótesis se
proponer una prótesis ligeramente sobredimensionada. deslice a través del cartílago. Con esta técnica, si la
En el miembro inferior, por debajo de los 3 cm de destrucción del cartílago de crecimiento es inferior al
desigualdad se puede igualmente sobredimensionar la 13%, el crecimiento puede continuarse en un 80% para
prótesis hasta 1,5 cm y emplear una prótesis definitiva la tibia proximal y en un 60% para el fémur distal [2, 21].
estándar.
Prótesis de crecimiento
Prótesis de reconstrucción estándar
Indicación y técnica (Fig. 12)
Las prótesis de reconstrucción estándar se emplean en
los niños mayores o adolescentes siguiendo la misma Las prótesis de crecimiento se indican cuando es
técnica que en el adulto. En la cadera, si no es necesario necesario sacrificar una o varias placas de crecimiento
reconstruir el cotilo, se propone una prótesis intermedia. en el niño. Esta situación es bastante frecuente en la
En el caso contrario, se indicará una prótesis total. No medida en que los tumores asientan en zonas metafisa-
obstante, en ambos casos la consecuencia es el cierre del rias y frecuentemente alrededor de la rodilla. El pro-
cartílago en Y. La reconstrucción de los abductores de la blema aparece esencialmente para las resecciones en la
cadera se hace de manera digástrica, suturando el glúteo rodilla antes de los 11 años de edad ósea en la niña y
medio a la fascia lata y movilizando la cadera en 13 años en el varón.
abducción moderada durante 45 días con un yeso. El uso de una prótesis de crecimiento para reconstruir
En la rodilla, sobre la vertiente epifisaria conservada, el fémur proximal se contraindica debido al riesgo de
se puede utilizar un vástago de prótesis no cementada, subluxación progresiva.
Figura 10.
A. Osteosarcoma paraosteal, inicialmente
tratado con resección y reconstrucción con
peroné vascularizado.
B. Debido a una seudoartrosis séptica, el
peroné se retira y se cambia por un espa-
ciador de cemento.
C. Cinco semanas más tarde, el espaciador
se cambia por un injerto corticoesponjoso
de cresta ilíaca.
D. A los 2 años, la radiografía muestra una
perfecta integración de los injertos.
Las prótesis de crecimiento se emplean desde hace En la tibia, la reconstrucción del aparato extensor se
unos treinta años. Al principio, el alargamiento requería realiza con un colgajo de músculo gastrocnemio medial
intervenciones repetidas más o menos largas, en función que se moviliza alrededor de la prótesis y se sutura en
del tipo de prótesis. Esto tenía una serie de riesgos proximal en la cápsula articular [7] . En la vertiente
evidentes, sobre todo sépticos. Actualmente, las nuevas lateral, la inversión de la aponeurosis del músculo tibial
prótesis emplean unos procedimientos de distracción no anterior permite la reconstrucción de la cápsula [7]. Esta
invasivos, principalmente mediante un mando técnica también participa en la cobertura de la prótesis.
electromagnético.
El alargamiento se hace fácilmente sin necesidad de Frecuencia y amplitud de los alargamientos
anestesia. No se expone nuevamente la prótesis, lo que Los procedimientos actuales sólo permiten los alarga-
disminuye el riego de infección. Este procedimiento mientos espaciados, pero es probable que en un futuro
tiene, no obstante, algunos inconvenientes. El sistema próximo se desarrollen los procedimientos motorizados
es frágil y presenta riesgos de rotura y desmontaje. El que permitan un alargamiento más progresivo.
sistema de alargamiento magnético contraindica la En cada de sesión, el alargamiento debe ser mode-
realización de una RM. Por último, el inconveniente rado: no más de 5-6 mm de media. En ocasiones se
esencial es que la resección ha de ser importante, ya que pueden alargar hasta 10 mm. La frecuencia de los
el potencial de crecimiento reposa en la prótesis, que es alargamientos debe ser superior o igual a 6 semanas. Se
voluminosa. debe prescribir una fisioterapia durante las fases de
Independientemente del tipo de prótesis de creci- alargamiento con el fin de conservar la movilidad.
miento empleada, el crecimiento se obtiene sólo con la
prótesis. Existe una pérdida relativa del almacenamiento Resultados
óseo en relación a la longitud del segmento del miem- Varios autores han informado sobre sus buenos
bro. Es fundamental tener en cuenta este elemento, ya resultados, pero existe a pesar de todo, numerosas
que al final del crecimiento será necesario cambiar la complicaciones que tienen tendencia a aumentar con el
prótesis por un modelo no telescópico. tiempo [3, 21, 22].
En el plano técnico, la implantación de estas prótesis Las prótesis de crecimiento permiten una calidad de
de crecimiento difiere un poco de la de una prótesis de vida y una función inicial comprables a las que se
reconstrucción estándar. Las prótesis deben cementarse, obtienen con prótesis de reconstrucción estándar [3,
ya que la impactación puede producir daños en el 20-22]. Sobre todo, estas prótesis se aceptan bien en el
Figura 11.
A. Osteosarcoma del extremo inferior de la tibia.
B. Tras resección que incluye el extremo inferior de la tibia, sustitución por peroné vascularizado y artrodesis de tobillo.
C. Aspecto a los 2 años postoperatorios que muestra una buena integración del injerto.
Figura 12.
A. Osteosarcoma del extremo inferior del fémur en un niño de 6 años.
B. Aspecto por resonancia magnética (RM) preoperatoria.
No obstante, el pronóstico a medio plazo queda Los problemas de rigidez aparecen sobre todo en las
limitado por las tasas de complicaciones, encontradas en prótesis de rodilla. La frecuencia es del 13% en las
un 48% de los casos, incluidas infección, recidiva local, prótesis de alargamiento femoral y del 31% en las
despegamiento aséptico, rigidez articular, fractura prótesis de alargamiento tibial [20].
periprotésica, luxación de cadera, dificultad o imposibi- La rigidez puede estar relacionada con las interven-
lidad de alargamiento de la prótesis. ciones repetidas, ya sean intervenciones de alargamiento
El riesgo infeccioso era sobre todo importante en las o de recambio protésico. Se asocia a la presencia de un
prótesis que requerían reintervenciones. Este riesgo ha tejido cicatrizal, pero también puede deberse a un
disminuido con la aparición de los sistemas de alarga- alargamiento excesivo. En caso de rigidez importante y
miento con mando externo, pero no ha desaparecido. resistencia a la rehabilitación, se recomienda la movili-
De este modo, Gitelis et al [23]publicaron una tasa de zación bajo anestesia general. La artrólisis quirúrgica se
infección del 6% en 24 meses. Por otro lado, el riesgo reserva para los casos de rigidez resistente [24].
de infección también está presente en el momento del Las fracturas periprotésicas y las fracturas de los
recambio de la prótesis. implantes aparecen en un 8% de los casos. Las fracturas
periprotésicas aparecen con más frecuencia sobre el puede ser responsable de un despegamiento de la próte-
implante no cementado posicionado sobre la epífisis sis. Por otro lado, las presiones mecánicas son general-
fértil restante. Un tratamiento requiere una prótesis mente más importantes en el niño por su mayor
cementada de vástago largo que estabilice la fractura. solicitación que en un anciano. El riesgo de despega-
Las fracturas del implante se deben a fatiga del material. miento es mayor en caso de resección de más de un 60%
La ausencia de alargamiento de la prótesis puede de la reserva ósea [25]. El uso de implantes con hidroxia-
deberse a un fracaso del sistema de alargamiento y patita puede disminuir el riesgo de despegamiento [3].
requiere el cambio de la prótesis. También puede apare-
cer en prótesis colocadas en niños pequeños en los que Aloinjerto
se ha agotado el potencial de crecimiento de la prótesis.
En este sentido, la cantidad de alargamiento disponible El uso de aloinjertos es antiguo; las primeras publica-
depende del tamaño del implante, es decir, del tamaño ciones se realizaron en 1908. No obstante, su uso
del hueso del niño. Antes de los 7 años, no se puede siempre ha sido controvertido debido a la alta tasa de
esperar un alargamiento con una única prótesis. Se debe complicaciones y a la reabsorción progresiva que hace
prever al menos un recambio protésico para mantener el que la técnica fracase a largo plazo. Una técnica precisa
crecimiento. es primordial para la supervivencia del injerto a largo
A menudo se encuentra un granuloma de cuerpo plazo [26, 27].
extraño importante alrededor de las prótesis de La elección del injerto es muy importante; sobre
crecimiento. todo, sus dimensiones (longitud y diámetro) deben
El despegamiento aséptico es más frecuente en el corresponderse lo mejor posible con el fragmento óseo
miembro inferior. Se encuentra más a menudo en el niño resecado. La planificación preoperatoria es, como en
pequeño. Se debe al crecimiento en longitud del hueso y todas las técnicas de reconstrucción, una fase esencial.
sus problemas mecánicos. El crecimiento del hueso en Para un injerto de sustitución se puede extraer otro
anchura conlleva un aumento del diámetro del canal que hueso con la condición de que el tamaño sea similar
Figura 13.
A. Osteosarcoma de fémur.
B. La imagen por resonancia magnética (RM) muestra una extensión en la zona metafisaria
superior que obliga a una resección del extremo superior del fémur.
C. Pieza de resección.
D. Reconstrucción con aloinjerto asociado a prótesis de cadera.
E. Aspecto intraoperatorio tras resección y después colocación de aloprótesis.
(por ejemplo, húmero de adulto para fémur de niño). el riesgo infeccioso, sobre todo en caso de quimiotera-
En cambio, a nivel epifisario y articular, la correspon- pia. En la tibia, el injerto debe cubrirse con un colgajo
dencia ósea debe ser perfecta. Para los injertos osteocar- de gastrocnemio medial y la articulación tibioperonea
tilaginosos, cuando no hay correspondencia, el riesgo de debe estabilizarse. Las complicaciones son frecuentes
reabsorción y de degeneración articular está aumentado. (57-77% de los casos) [28]. Excepto las complicaciones
La reconstrucción ligamentosa y capsular debe ser quirúrgicas inmediatas como los problemas neurológi-
meticulosa; es muy importante para la estabilidad del cos, comunes a todas las cirugías de reconstrucción,
injerto y para evitar la degradación de la articulación. existen tres tipos de complicaciones tras la colocación
Los factores determinantes para la consolidación hués- de un injerto masivo: seudoartrosis, fractura e infección.
ped injerto son la estabilidad del montaje y el contacto Estas tres complicaciones son responsables del fracaso
entre ambos elementos [26, 27]. El contacto de la unión del aloinjerto en un 85% de los casos.
injerto huésped puede ser de diferentes tipos: o bien es
perfecto o el diámetro del injerto es inferior al del Aloprótesis
huésped para favorecer el callo periférico a partir del
periostio receptor o bien el injerto queda encastrado en La asociación de prótesis y aloinjerto es interesante.
el canal medular del huésped. La osteosíntesis debe ser La prótesis evita la degradación articular de los aloinjer-
estable, ya sea por un clavo intramedular o bien por tos osteocartilaginosos. El uso de cemento disminuye el
una placa atornillada que coja el conjunto del injerto riesgo de fractura de aloinjerto y limita la pérdida de
(éste también debe atornillarse). Los injertos deben capital óseo y permite una reinserción tendinosa
cubrirse con músculo de buena calidad para disminuir (Fig. 13).
El uso de una prótesis incluida en un aloinjerto es [2] Cool WP, Carter SR, Grimer RJ, Tillman RM, Walker PS.
particularmente interesante para el fémur proximal, ya Growth after extendible endoprosthetic replacement in the
que a menudo se consigue un buen resultado funcional distal femur. J Bone Joint Surg Br 1997;79:938-42.
debido a la adhesión del tejido muscular al aloinjerto. [3] Abudu A, Grimer R, Tillman R, Carter S. The use of
Donati et al [29] comunicaron un 91% de buenos prostheses in skeletally immature patients. Orthop Clin N Am
resultados o excelentes en 27 casos de reconstrucción de 2006;37:75-84.
fémur proximal. Informaron no obstante de 17 fracturas [4] Bérard J. Biopsie. In: Les tumeurs malignes de l’enfant.
tardías del trocánter mayor. Monographies de la Société Française d’Orthopédie
Pédiatrique. Montpellier: Sauramps Médical; 2004. p. 55-60.
[5] Bollini G, Jouve JL, Legré R. Résection carcinologique.
■ Conclusión Règles et principes. In: Les tumeurs malignes de l’enfant.
Monographies de la Société Française d’Orthopédie
Los nuevos procedimientos de imagen, sobre todo la Pédiatrique. Montpellier: Sauramps Médical; 2004. p. 77-88.
RM, permiten apreciar perfectamente los límites del [6] Panuel M, Brisse H, Petit P, Jouve JL, Bollini G. Imagerie des
tumor y mejoran la planificación preoperatoria. tumeurs osseuses malignes primitives de l’enfant et
En algunos casos, se debe pasar más cerca del tumor l’adolescent. In: Les tumeurs malignes de l’enfant.
para preservar la articulación. En otras situaciones, la Monographies de la Société Française d’Orthopédie
resección es más amplia; es el caso, por ejemplo, de la Pédiatrique. Montpellier: Sauramps Médical; 2004. p. 29-42.
resección de un tumor diafisario. [7] Dubousset J, Missanard G, Kalifa C. Management of
La estrategia de reconstrucción debe tener en cuenta osteogenic sarcoma in children and adolescents. Clin Orthop
el pronóstico de desigualdad y funcional a largo plazo. Relat Res 1991;270:52-9.
Los procedimientos biológicos como las transferencias [8] Dautel G, Vialaneix J, Lascombes P. Utilisation du transfert
vascularizadas o la técnica de membrana inducida son vascularisé de péroné. Application à la reconstruction des
las más satisfactorias a largo plazo. Las prótesis de membres après exérèse tumorale. In: Les tumeurs malignes de
crecimiento tienen un interés esencialmente para las l’enfant. Monographies de la Société Française d’Orthopédie
resecciones de rodilla en el niño; ofrecen un buen Pédiatrique. Montpellier: Sauramps Médical; 2004. p. 89-96.
resultado funcional inmediato pero son responsables de [9] Le Nen D, Dubrana F, Hu W, Prud’homme M, Lefèvre C.
complicaciones a largo plazo. Fibula vascularisée. Techniques, indications en orthopédie et
Insistimos en la valoración de estos niños por parte traumatologie. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris),
de un equipo multidisciplinario. Techniques chirurgicales – Orthopédie-Traumatologie,
.
44-040, 2002.
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Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Sales de Gauzy J., Accadbled F., Aziz A., Knorr G., Darodes
P. Résection-reconstruction dans les tumeurs osseuses malignes chez l’enfant. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Techniques chirurgicales -
Orthopédie-Traumatologie, 44-100, 2009.
Disponible en www.em-consulte.com/es
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