LA CASA DE ELÍAS JUAN

QUINTA CARTA PARA LA DIVINIDAD

El Mensajero Divino:
¿Y el mundo de voluptuosidad 666, será divino?
¡Mirad a los falsos mensajeros de la Bestia!
¿Y por qué Juan Elías, es el Mensajero Divino?

Porque Juan es el único que reconoció la Divinidad de

Jesús cuando estuvo entre nosotros, y porque desde el
vientre fue preparado para ir delante del Señor, y el
Señor es Jesús, el Anciano de los Días, el que el Profeta
Daniel vio e identificó así: “Y se Sentó un Anciano de Días cuyo vestido es blanco como la
nieve y el pelo de su cabeza como lana blanca”; el que antes Enoch en su Capítulo XLVII
también vio: “En este tiempo, yo vi a “la Cabeza de los Días”,
y los libros de los vivos fueron abiertos ante él, y todo su Hueste, que
habita en lo alto de los cielos, y su corte permanecían de pie ante Su Presencia. Y el corazón
de los santos se llenó de alegría porque al término fijado,
la oración de los justos acogida, y la sangre del justo ha sido vengada ante el Señor de los
Espíritus”.

Y esa Divinidad se logra al reconocer al Anciano de los Días, que está sentado en el
Templo de Landak:

Porque la Divinidad viene del Padre Sin Fin, quien jamás ha hablado para una sola casta
de hombres invasores e impostores. Menos, ha dado bendiciones a un sólo pueblo que
dice ser elegido. No ha desenfundado flechas de sus aljabas para lanzarlas a supuestos
enemigos de la Tierra, y no hunde en la desesperación a ningún pueblo. Así pues, oíd el
Manifiesto de Su Inteligencia que llega a oído del que sabe escucharle; y no entendáis
mal sus Claras Palabras ni les deis otra interpretación; os lo digo: porque ÉL no exige a
los hombres honores para su Nombre. No castiga a quien no saben nada de ÉL. No
realiza alianzas ni contratos con hombres de ningún pueblo. Y no pide ni da nada a
cambio de supuestas alianzas que hacen los dioses de la rebelión con los hombres de la
Tierra: Conoced su Ley y entonces le conocerán los hombres. Así ÉL ha Hablado por boca
nuestra, quienes sabemos de ÉL. Porque su Conocimiento es Limpio: no lo ensuciéis. Su
Sabiduría es Eterna: no la menospreciéis.

Y esta es la Divinidad no conocida ni vivida en la Tierra, porque la humanidad por sus

pasiones y la voluptuosidad, se rebaja a los instintos animales que dominan su
inteligencia. Porque la sensualidad, obra perniciosamente sobre las facultades
intelectuales y la claridad del espíritu, y destruye el pensamiento con adhesiones de
espíritus infernales, que la hacen despreciable y perversa; así rechaza al PADRE SIN FIN
y por esto no ha visto al DIOS PERFECTO que Jesús nos mostró: “Sed, pues, vosotros
perfectos, ”.

Esa perfección es la Divinidad que Juan nos muestra y por la cual, ya su hacha está
puesta a la raíz de los árboles que no dieron fruto: “¡Orad, humanidad en caos! El
Mensajero Divino se acerca al mundo. El Rey de Israel llegará a libertar al Oriente que fue
de Él, y que fue suyo será de Él. regresa a imponer paz, a imponer
verdades, a curar el llanto, a perdonar al arrepentido, a guiar al niño, a curar al enfermo, a
apoyar al anciano y a castigar al malvado, al soberbio, al asesino, al concupiscente sin freno,
al ladrón, al que no supo amar, al que no entregó caridad, al ególatra, y al que le negó y niega.
¡Ay de ellos por millares y castigados serán por los siglos! ¡Orad humanidad es cerca la hora
11 y cerca es OM!”.

Porque esta es la Divinidad de Juan Elías, quien llega a nosotros y nos advierte: “Sed
prudentes en esta época. La codicia desemboca en muerte. SON LOS AÑOS DE LA
CONFUSIÓN Y DE LA DUDA, DE LA ELECCIÓN Y SELECCIÓN.
Quien se viste de humildad en la búsqueda, ENCUENTRA SABIDURÍA.
Quien se llena de bondad, OBTIENE LA DICHA.
Quien se nutre de belleza, RECIBE PERFECCIÓN.
Quien escucha la buena enseñanza y aprende del sabio y del anciano, OBTIENE EL
CONOCIMIENTO.
Quien se nutre sólo de La Verdad, RECIBE EL DON DEL ESPÍRITU.
Quien da amor y observa conducta; SU PREMIO ES LA LUZ DE LA COMPRENSIÓN Y
NUNCA ESTARÁ SOLO.
Así pues, SED MAGNÁNIMOS al obtener poder, JUSTOS al impartir Justicia.
SED EQUITATIVOS y no codiciosos al realizar tus negocios.
Sabed perdonar y olvidar la venganza y se os dará la paz. Sed pues honestos y pacificadores,
hombres dignos y sencillos. Renovad vuestro Espíritu y recibiréis Gracia del Shielho. Se ha
iniciado el tiempo para que brille la Justicia. , sólo trataron de
ocultarla. Ahora, el Brillo de la Espada cegará a lo inicuos y desgajará a los hipócritas de sus
pedestales. EN TANTO, LA TIERRA SE AGRIETA EN SU SENO, SE HINCHAN SUS VENAS,
se vierten sus cauces, se rompen sus bases; ¡SÓLO ESPERA A JUAN!

Y esta es la Séptima Voz del Apocalipsis, que conduce al Nuevo Bautizo con Juan.

Casa de Juan, S.O.S a la humanidad, 1 de diciembre del 2017

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