Un niño con diarrea debe examinarse para identificar los signos de deshidra- La información
tación, la diarrea sanguinolenta, la diarrea persistente, la desnutrición y las obtenida cuando se
infecciones extraintestinales graves, con objeto de establecer un plan de tra- evalúa al niño debe
tamiento apropiado y ponerlo en práctica sin dilación. La información obte- registrarse en un
nida cuando se evalúa al niño debe registrarse en un formulario adecuado. formulario adecuado.
3.1 Anamnesis
u Interrogar a la madre o a la persona que cuide al niño sobre los puntos
siguientes:
j presencia de sangre en las heces;
j duración de la diarrea;
j número de heces líquidas por día;
j número de vómitos;
j presencia de fiebre, tos u otros problemas importantes (por ejemplo,
convulsiones, sarampión reciente);
j prácticas de alimentación antes de la enfermedad;
j tipo y cantidad de líquidos (incluida la leche materna) y alimentos
tomados durante la enfermedad;
j medicamentos u otros remedios administrados;
j vacunas administradas.
3.2 Examen físico
Primero, comprobar los signos y síntomas de deshidratación.
u Observar dichos signos:
j Estado general: ¿está el niño alerta; intranquilo o irritable; letárgico
o inconsciente?
j ¿Los ojos están normales o hundidos?
j Cuando se le ofrece agua o solución de SRO para beber, ¿la toma
normalmente o la rechaza, la toma con avidez o es incapaz de beber
debido al estado de letargia o de coma?
a Expresado como porcentaje de los valores medianos proporcionados por el Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias de los
Estados Unidos (véase el anexo 3).
b Para niños de 1 a 5 años (véase el anexo 4).
Si están presentes dos o más signos de la columna C, el niño tiene “deshidratación grave”. Si no es el caso,
pero se encuentran dos o más signos de la columna B (y C), el niño tiene “algún grado de deshidratación”. Si
tampoco es el caso, se considera que el niño “no presenta signos de deshidratación”. Los signos que pueden
requerir una interpretación especial van acompañados de notas al pie del cuadro 1. En el anexo 5 se explica
cómo estas categorías se relacionan con los términos “no tiene deshidratación, leve, moderada, grave” usados
en algunos libros de texto.
Por ejemplo, un niño que pesa 5 kg y muestra signos de “algún grado de deshidratación” tendrá un déficit
hídrico de 250 a 500 ml.
5 Una vez tratada la deshidratación siguiendo el plan B o C, el paciente debe continuar el tratamiento en casa con el plan A.
< 10 > Tratamiento de la diarrea – Manual clínico para los servicios de salud
j Diagnóstico de una infección extraintestinal grave: se basa, por ejemplo, en los signos de neumonía o
septicemia; en las regiones con malaria por P. falciparum, la fiebre o antecedentes de fiebre reciente es
suficiente para sospechar y tratar la malaria. Cuando se sospeche una septicemia o meningitis, el niño
debe hospitalizarse.
OJOS b
Normales Hundidos Hundidos
SED
Bebe normalmente, no Sediento, bebe Bebe muy poco o no es
está sediento ávidamente capaz de beber
a. La letargia y la somnolencia no son lo mismo. Un niño letárgico no está simplemente adormecido sino que su estado mental está
embotado y no se despierta completamente; el niño parece derivar hacia la inconsciencia.
b. En algunos lactantes y niños los ojos están normalmente algo hundidos. Es útil preguntarle a la madre si los ojos del niño están
como siempre o más hundidos de lo normal.
c. El pliegue cutáneo tiene menos utilidad en los lactantes o niños con marasmo o kwashiorkor o en los niños obesos. En la sección
8.1 se describen otros signos que pueden alterarse en los niños con desnutrición grave.